Capítulo 25: HECHOS AL DESCUBIERTO
-Ron, yo...
Pero Ron no decía nada, miraba a Hermione aún dormida e inmediatamente miraba a Harry, se la pasó así durante algunos segundos, unos segundos silenciosos, de pronto Ron agitó la mano izquierda señalando a Harry con el dedo índice y después se tapó la boca con esa misma mano abriendo notablemente los ojos (N/A: me imagino a Ron como Joey el de Friends cuando descubre algo). Con rapidez Harry sacó a Ron de la habitación y ajustó la puerta para que Hermione no escuchara lo que ellos podrían hablar en las escaleras, y comenzaron a hablar en susurro.
-¿Qué haces aquí? – le reprochó Harry.
-Es nuestra habitación ¿No?. Mas bien ¿qué hace ella aquí?
-Eso no es asunto tuyo, Ron.
-En parte si. Harry, esto puede causarles la expulsión, y Hermione se muere si eso llega a suceder.
-¿Por qué crees que cerré la puerta mágicamente? – le dijo Harry en tono sarcástico.
-Y tu crees que con cerrarla mágicamente evitarías que alguien entrara. ¡Por favor!
-Espero que no vallas a decir nada.
-¡Cómo se te ocurre!, Ustedes son mis amigos. Pero hubiera preferido no enterarme de esto y menos de esta manera – le dijo Ron moviendo la cabeza en señal de negación.
-Discúlpanos, se que no debimos hacer...
-No lo digas, no lo digas – le dijo Ron levantando levemente las manos.
-¿Me dejas terminar? – le reprochó Harry –. Como te decía, se que no debimos hacerlo aquí, pero entiéndenos, lo necesitábamos.
-Ay, Harry, con qué cara voy a mirar a Hermione después de esto... – y Ron se llevó la mano izquierda a la cabeza mientras con la otra guardaba la varita en su pantalón –. ¡No voy a poder disimularlo!
-Pues disimula como puedas. Hermione se moriría de la vergüenza si se da cuenta que tú te diste cuenta.
-Dios mío, no debí regresar tan pronto de Hogsmeade – se reprochó Ron a si mismo –. ¿Sabes? Mejor voy a dar una vuelta por el castillo y nos vemos más tarde en el gran comedor.
-Si, creo que es lo mejor – le dijo Harry con sensatez –, solo has todo lo posible para que Hermione no se de cuenta de una actitud sospechosa por parte tuya.
-Esta bien. Despiértala y que se valla rápido. En menos de una hora todos los estudiantes estarán de regreso en el castillo.
-Bueno – le dijo Harry y cuando Ron ya estaba bajando las escaleras añadió –. Gracias.
Cuando Ron desapareció de su vista, Harry ingresó de nuevo en la habitación y cogió su varita para luego cerrar la puerta mágicamente. Se acostó de nuevo en la cama observando a Hermione que aún dormía cubierta parcialmente por el edredón, no hubiera querido despertarla porque parecía un ángel así como estaba, pero Ron tenía razón, en menos de una hora sus compañeros de habitación llegarían al castillo y no podía dejar que los descubrieran nuevamente. Harry se acercó a ella y le retiró completamente el edredón, después comenzó a besarle la espalda mientras le decía "despiértate dormilona". Cuando Hermione se despertó inmediatamente se dio la vuelta para quedar boca arriba.
-¿Qué hora es? – le preguntó ella mientras se pasaba las manos por el espeso cabello.
-Las 5:20
-¡Te bañaste! – le dijo Hermione mientras se sentaba en la cama –. ¡Y lo hiciste sin mi!
-No quería despertare – le dijo Harry bastante sorprendido por lo que ella dijo.
-Pues... si no quieres estar conmigo, yo si quiero estar contigo – le dijo ella mientras le desamarraba la toalla que tenía Harry en la cintura cuando aún estaba él acostado en la cama.
Y en el momento en que Harry quedó libre de la toalla, Hermione se colocó encima de él logrando nuevamente la penetración. Olvidando las sugerencias de Ron ("despiértala y que se valla rápido"), Harry comenzó a acariciarle los senos a su novia mientras ella movía suavemente las caderas encima de él y apoyaba sus manos en el pecho de Harry. Luego de varios minutos, Harry se incorporó sin apartar a Hermione de su lado y sin dejar que ella se detuviera, quedaron cara a cara, ambos sentados en la cama, ella encima de él y aún completamente entregados el uno al otro, comenzaron a besarse y de un momento a otro, con un esfuerzo de Harry, se levantó levemente para tumbar a Hermione en la cama y así quedar él encima de ella.
Faltando 10 minutos para las 6 de la tarde, ambos chicos ya se dirigían al gran comedor, y como era de esperarse, Harry no le dijo a Hermione que Ron los descubrió sin querer queriendo. Al momento de entrar al comedor, Harry vio a Ron sentado en la mesa de gryffindor hablando con Lavander y Parvati, él y Hermione se dirigieron hacia donde estaban sus amigos y los saludaron.
- ¡Hola! ¿Cómo les fue en Hosmeade? – les preguntó Hermione mientras se sentaba al lado de Lavender quien estaba al frente de Ron.
-Muy bien – respondieron las chicas.
-Pero ¿Por qué no fuiste? – le preguntó Parvati que estaba al lado de Lavender y Ron tosió.
-Porque estaba leyendo un libro de encantamientos que había en la sala común – le respondió Hermione completamente desentendida de la actitud de Ron.
-¡Por Dios Hermione! – le dijo sorprendida Lavender –. Para los EXTASIS falta un montón.
-Pues nunca se aprende lo suficiente – se defendió Hermione –. ¿Y cómo te fue a ti, Ron?
-Bien – dijo rápidamente Ron colocándose completamente rojo y desvió la mirada hacia Harry que estaba sentado a su lado, seguramente en busca de auxilio.
-¿Ya comieron algo? – intervino Harry con rapidez captando las intenciones desesperadas de Ron.
-Aún nada – le respondió el pelirrojo.
Los cinco chicos se quedaron hablando animadamente en la mesa de gryffindor. De vez en cuando, Hermione hablaba directamente con Ron pero él le respondía sin mirarla y generalmente se colocaba rojito debido a la vergüenza. Después de la comida, todos los alumnos se dirigieron a sus respectivas salas comunes y cuando Harry, Ron y Hermione se dirigían a la suya, Hermione frenó en seco y se enfrentó a Ron.
-¿Me quieres decir qué es lo que te pasa conmigo?... ¿desde cuando me tienes miedo que no puedes mirarme a la cara?
