CAPITULO 15: VOCES DE ORO, GARRAS DE ACERO
TEMPLO DEL SOL, DELFOS, GRECIA
TEMPLO DE CÁNCER
-Eres fuerte, niña- dijo Máscara Mortal, después de esquivar los ataques de Lena- y muy hábil con la espada, pero no lo suficiente para vencer a un caballero dorado-
-En ese caso...- dijo Lena, encendiendo su cosmo. Un enorme cangrejo de plata apareció entre la chica ciega y Máscara Mortal.
-¿Qué demonios...?-
Lena sonrió, adivinando la cara que tenía Máscara Mortal al ver a la colosal criatura cerrando y abriendo sus pinzas amenazadoramente. Pero el caballero sonrió.
-Veremos si tu cangrejo es lo suficientemente fuerte- dijo Máscara Mortal, encendiendo su cosmo- ¡ONDAS INFERNALES!-
Lena sonrió confiada, pero aún así el cangrejo fue totalmente destruido por el ataque de Máscara Mortal. El caballero atacó de nuevo, y la chica fue lanzada hacia atrás. Cuando se levantó, pudo sentir que frente a ella estaba el caballero, apuntándole amenazadoramente.
-Ríndete o muere- dijo Máscara Mortal
-Olvídalo- dijo Lena- yo no me rendiré a un caballero-
-Tu funeral- dijo Máscara Mortal, encogiéndose de hombros y encendiendo su cosmo de nuevo. Lena palideció. Su mano tembló y dejó caer su espada al suelo. Sintió el despiadado cosmo de Máscara Mortal delante de ella.
-¡ONDAS INFERNALES! –
Lena saltó antes de que el ataque le diera. La pared detrás de ella se destruyó por completo. Máscara Mortal sonrió. Utilizaría la ceguera de Lena para su beneficio y apagó su cosmo.
-¿Dónde estás?- dijo Lena al no sentir el cosmo de Máscara Mortal.
Lena comenzó a sentir un zumbido en su cabeza. Una vocecilla. Máscara Mortal iba a atacar, cuando Lena levantó la mano.
-Espera- dijo ella, y se quitó la diadema- toma, me rindo-
-¿En serio?- dijo Máscara Mortal sorprendido y algo decepcionado.
-Si- dijo Lena- mi amo estaba tratando de controlarme...-
-Lo sé- dijo Máscara Mortal- lo he visto... a muchas de tus compañeras-
-Sí, sobre todo a Kateri- dijo Lena- ya comprendí que fue lo que sucedió...-
Máscara Mortal tomó el ámbar, dudoso. Se temía una trampa, pero Lena se lo entregó enseguida, sin oponer resistencia.
-¿Y porqué a ti no te afectó?- le preguntó Máscara Mortal.
-Yo soy ciega- dijo Lena- y como no puedo ver con mis ojos, estoy más atenta a los cosmos. Cuando apagaste tu cosmo, sentí el de mi amo tratando de entrar en mi cabeza...-
-Menos mal que lo detuviste- dijo Máscara Mortal, mirando la piedra amarilla que le acababan de entregar- usaré esta para salvar a Atena-
-Ve- dijo Lena- no les queda mucho tiempo-
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UNDECIMO PATIO
-Once- dijo Aioros.
-No está mal- dijo Milo- nos faltan dos templos-
-¿Qué será la...?- pero no pudo terminar de hacer la pregunta, porque un sonido lo interrumpió. Un canto demasiado dulce y bello como para ser humano.
-¿Qué es eso?- dijo Milo.
-Ni idea- dijo Aioros- pero debemos tener cuidado...-
El canto siguió y los caballeros se sintieron de pronto atraídos por éste, y comenzaron a buscar su fuente. Sus ojos estaban cegados por la melodía. De pronto, el canto cesó y los dos despertaron del hechizo que provocaba esa melodía; y vieron delante de ellos nueve monstruos con cuerpo de águila y cabeza de mujer, con filosas garras que los atacaron. Los caballeros apenas pudieron esquivarlas.
-¡Sirenas!- exclamó Milo.
Los dos caballeros se echaron atrás. Las sirenas reanudaron su canto, atrayendo a los caballeros de nuevo.
-Milo- dijo Aioros, cerrando los ojos- piensa en otra cosa... no...no prestes atención a esos cantos...-
Aioros se concentró. Pensó en su novia, Ariadna, quien de seguro estaba esperándolo más adelante. No podía morir ahí y decepcionarla. Milo, en cambio, no podía concentrarse.
-Aioros...- dijo Milo, aún avanzando hacia las sirenas- no está funcionando...-
-Piensa en alguien-
-Es fácil para ti- protestó Milo- tú tienes a Ariadna, en cambio yo...-
Pero tenía que intentarlo. Pensar en alguien. Quien sea. Milo cerró los ojos y se concentró. En su mente apareció un rostro. Cabellos color azul oscuro, casi negro, y ojos azules con una mirada fría que encerraba dentro de ella una calidez muy peculiar. La primera mujer que no se había dejado llevar por sus palabras.
-Camille- dijo Milo en voz baja, dejando que el recuerdo aleje el sonido del canto de las sirenas.
Los dos caballeros encendieron sus cosmos.
-¡AGUJA ESCARLATA!-
-¡PLASMA AT"MICO!-
Las nueve sirenas dieron un alarido que sonó casi como un chillido, que erizó la piel de los dos caballeros, al sentir el contraste de este sonido con la melodía anterior. Esto no los hizo disminuir la fuerza de sus ataques. Al contrario. Las horribles criaturas fueron destruidas.
-Diablos, estuvo cerca- dijo Aioros.
-Pero ya podemos avanzar- dijo Milo.
-Si, ya solo faltan dos...- pero se interrumpió, al ver que una lanza se clavó a sus pies- ¿qué demonios...?-
-Alto ahí, caballeros de Atena- dijo una voz femenina. Una chica apareció frente a ellos. Una chica de cabellos rojizos y ojos color grisáceos.
-¿Eres la guardiana de Escorpión?- preguntó Aioros- ¿porqué dejaste tu Templo?-
-No es ella, Aioros- dijo Milo- se parece, pero no es ella...-
-No importa quien sea yo- dijo la chica- no los dejaré llegar al templo de Escorpión-
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TEMPLO DE VIRGO
Shaka estaba teniendo problemas con Kiara. La chica africana era muy rápida y poderosa. Realmente era tan fuerte como un caballero dorado.
Después de un rato de pelear, ambos se quedaron de pie, uno frente al otro, mirándose y jadeando de cansancio.
-¿Te rindes, caballero?- dijo Kiara, empuñando una lanza.
-Ni pensarlo- dijo Shaka, abriendo sus ojos y encendiendo su cosmo.
-¡Kyaaaaaaaaa!- gritó Kiara, saltando sobre Shaka con su lanza.
-¡KOHM!- gritó Shaka.
La lanza de Kiara fue frenada por la barrera de Shaka. Sin embargo, la lanza alcanzó a atravesar la barrera e hirió el brazo izquierdo del caballero.
-Increíble- dijo Shaka- tu cosmo debe ser muy poderoso para que hayas podido romper mi barrera-
-Lo es- dijo Kiara- ni siquiera Kali puede detener mis ataques-
-¿Kali?- dijo Shaka, abriendo sus ojos desmesuradamente- ¿Kali Eknath?-
-Veo que la recuerdas, Shaka- dijo Kiara- me dijo que fue tu maestra-
-¿Ella está aquí?-
-Así es- dijo Kiara- ella es la guardiana del templo de Libra-
-Entonces- dijo Shaka- a Dokho le espera una batalla muy difícil-
-Y a ti también- dijo Kiara- yo conozco todos tus ataques...-
-Excepto uno- dijo Shaka.
-¿Qué dices?-
-Kali me enseñó muchos ataques, entre ellos la Capitulación del Demonio- dijo Shaka- pero no me enseñó el Tesoro del Cielo- Shaka sonrió- yo lo aprendí por mi cuenta...- encendió su cosmo- ¡TESORO DEL CIELO!-
-¿Qué es esto?- dijo ella, sorprendida.
-Es la técnica de ataque y defensa a la vez. No me puedes atacar ni puedes huir. Ahora, cortaré tus sentidos uno por uno, a menos de que te rindas...-
-¡Jamás!- dijo Kiara.
-Bien- dijo Shaka- ¡DESTRUCCI"N DEL PRIMER SENTIDO!-
El ataque golpeó a Kiara.
-¿Qué?- dijo ella de pronto- no puedo moverme...-
-Te corté el sentido del tacto- dijo Shaka- no quiero seguir lastimándote-
-No tendrás la turquesa de Virgo- dijo Kiara, quitándose la diadema con dificultad, tomando la piedra que contenía y cerrando su puño con fuerza.
-No tienes opción- dijo Shaka.
-Claro que la tengo- dijo ella, encendiendo su cosmo- te mostraré el verdadero poder de Virgo... ¡SEXTA CONSTELACI"N!-
-¡CAPITULACI"N DEL DEMONIO!-
Shaka apenas logró contraatacar. Ambos ataques chocaron en el aire y desaparecieron. Los dos contrincantes permanecieron de pie, uno frente al otro. Segundos después, Kiara cayó desmayada, totalmente agotada. Aflojó su mano y la turquesa rodó hasta los pies de Shaka, quien la recogió y se la guardó.
Shaka se acercó a la chica, le puso su blanca mano en la frente morena de Kiara y encendió su cosmo.
-Despierta, Kiara- dijo Shaka en voz baja.
-Siento tu mano- dijo Kiara, abriendo sus ojos- creí que me habías quitado el sentido del tacto...-
-Lo hice- dijo Shaka- pero te lo devolví-
-¿Porqué?-
-Ya te lo dije- dijo Shaka- no quería lastimarte...-
-Tú y el resto de los caballeros tienen buen corazón- dijo Kiara- no como mi amo-
-Eso ya lo noté- dijo Shaka.
-Entonces permite que te de un consejo- dijo Kiara- no pases por el templo de Libra, pues Kali no te dejará pasar-
-¿Entonces?- dijo Shaka.
-Hay un camino- dijo Kiara- que inicia por el oeste de mi Templo, y evita el templo de Libra. Si lo tomas, llegarás al patio anterior a la casa de Escorpión-
Shaka la miró a los ojos. No escondía mentira en ellos.
-Aunque tu piel es negra, tu corazón es de los más blancos que he visto- dijo Shaka- muchas gracias-
-No me lo agradezcas- dijo Kiara- y date prisa, tus amigos necesitan tu ayuda...-
-Lo haré- dijo Shaka, y salió del Templo por la puerta del oeste, siguiendo el camino que la chica africana le había indicado.
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TEMPLO DE PISCIS
-Arika...- murmuró Afrodita, aunque sabía de antemano que era inútil. Su pequeña alumna era ahora una muñeca sin voluntad en las manos de Apolo. Un enorme golpe de odio llenó su corazón. Cuando tuviera al malvado dios frente a él, lo haría pedazos. Pero éste no era el momento, ya que el cosmo de Arika iba aumentando.
-Arika, detente...-
La niña le disparó una docena de rosas rojas, las cuales Afrodita apenas alcanzó a esquivar.
-¡Arika, detente!- repitió Afrodita.
-Es inútil- le dijo Aletia- está totalmente hechizada...-
-Demonios...- murmuró Afrodita.
-¡ROSAS DIAB"LICAS!-
Esta vez, las rosas de Arika dieron en su blanco. Afrodita fue lanzado varios metros atrás. Levantó su mirada. Los ojos de Arika estaban llenos de lágrimas.
-Apolo, déjala en paz- dijo Afrodita.
-Ni en sueños- dijo Arika- esta niña me pertenece-
-Ya verás cuando te atrape...- dijo Afrodita con creciente odio-
-No lo harás- dijo Arika- tu pequeña alumna te va a destruir primero...-
Arika encendió su cosmo.
-¡ROSAS PIRAÑAS!-
Afrodita cayó al suelo, herido por el ataque. Se levantó y se acercó a Arika. Sin que ella se lo esperara, la abrazó.
-Vamos, Arika, despierta...- dijo Afrodita.
-¡Suéltame!-
-¡Despierta!-
-¡Qué me sueltes!- gritó ella- ¡ROSAS PIRAÑAS!-
De nuevo, Afrodita fue lanzado hacia atrás por el ataque. Esta vez chocó contra la pared y cayó boca abajo. No se podía mover por el dolor que le producían sus heridas. Escuchó los pequeños pasos que daba Arika. La niña se detuvo frente a él.
-Ahora el golpe final, la rosa sangrienta- dijo ella, encendiendo su cosmo de nuevo, y haciendo aparecer una rosa blanca en su mano. Sus ojos estaban llenos de tristeza- ¡muere!-
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CONTINUARÁ...
Megu-chan: puedes golpearlo si quieres... gracias por tu review!
Shadir: irónico, no? lástima que no tiene idea de con quien se enfrenta... gracias por tu review!
Sango: gracias por tu apoyo!!
Silverhell: no creo que Umi le tenga miedo... creo que lo más probable es que no le guste la experiencia de subirse en él... gracias por tu review!
Misao GC: aquí tienes otro capítulo... gracias por tu review!
