CAPITULO 16: LA CHICA DE ESCORPION
TEMPLO DEL SOL, DELFOS, GRECIA
TEMPLO DE PISCIS
Arika, con los ojos llenos de lágrimas, levantó su brazo con la rosa blanca.
-¡Muere!- gritó. Pero no alcanzó a lanzarla, porque un rayo de luz roja chocó contra la rosa y la destruyó por completo. Silver y Umi llegaron.
-¡Arika!- exclamó Umi- ¿qué demonios...?-
-¡ROSAS PIRAÑAS!- Arika atacó a Umi. Silver saltó detrás de ella y la atrapó por la espalda.
-¿Qué te sucede, Arika?- preguntó Silver mientras Arika se retorcía para librarse de ella.
-¡Ah, déjame!- gritó Arika. Se libró de Silver dándole un codazo y empujándola hacia atrás- ¡ROSAS PIRAÑAS!-
Las dos chicas evadieron el ataque de nuevo.
-¿Qué sucede aquí?- dijo Silver.
-Ese intento de dios la está controlando también- dijo Umi- tenemos que hacer algo...-
-Sí, ¿pero qué?- dijo Silver- no sabemos como romper ese hechizo-
-Shaina traía un brazalete- dijo Umi- y Arika...-
-Esa tobillera de plata- señaló Silver.
-Eso es- dijo Umi, y susurró unas palabras a Silver.
-¿Qué intentan hacer?- les preguntó Aletia.
-Ya verás- dijo Silver, abriendo las alas de su sapuri. Emprendió el vuelo, y desde lo alto del templo lanzaba pequeñas bolas de fuego a Arika, quien las evadía y contraatacaba. Aprovechando su distracción, Umi se acercó a Arika y la hizo caer metiéndole un pie, al mismo tiempo que Silver aterrizó sobre su espalda, impidiendo que se levantara.
-¡Suéltenme!- gritó Arika.
-Lo siento, Arika- dijo Silver, tomándola de las muñecas para que no se levantara- pero es por tu bien...-
-Ya, enana, deja de moverte- dijo Umi. Con una mano, detuvo el tobillo de Arika, y con la otra se preparó a romper la tobillera.
-¡AGUJA ESCARLATA!-
Pero no se rompió, solo se agrietó un poco.
-No funciona- dijo Umi- tengo que darle con más fuerza-
-Pero vas a lastimarla...- dijo Silver.
-Es eso o nos hace picadillo y luego la destruyen a ella...-
-Tienes razón- dijo Silver- hazlo...-
Umi encendió su cosmo.
-¡AGUJA ESCARLATA!-
La tobillera plateada cedió y se rompió. Arika dejó escapar un grito de dolor y se desvaneció. Silver examinó la herida circular provocada por el ataque de Umi. Luego, sacó un pañuelo y lo ató al tobillo de Arika.
-¿Está bien?- preguntó Afrodita, tratando en vano de levantarse.
-Tardará un poco en despertar- dijo Aletia- debe estar agotada por el esfuerzo que le produjo tratar de resistirse al control de Apolo...-
Un par de minutos después, Arika parpadeó y abrió los ojos.
-¿Qué me pasó?- preguntó.
-Ese remedo de dios te estaba controlando- dijo Umi.
-¿Y me...? ¡Auch!- exclamó al tratar de apoyarse en su pie lastimado.
-Afrodita no quiso lastimarte- dijo Silver, señalando al caballero, quien aún no lograba levantarse a causa de sus heridas.
-¡Maestro!- dijo Arika, corriendo como pudo hacia Afrodita. Se arrodilló en el suelo- lo siento... lo siento mucho, yo no quise...-
-No llores, no pasó nada- dijo Afrodita, abrazándola. Luego, el caballero le quitó la diadema que llevaba aún fuertemente apretada en su mano, y sacó la joya roja que estaba depositada en su interior- es hora de terminar con esto-
-Claro- dijo Umi- vamos...-
-Ustedes tres no irán a ningún lado- dijo Afrodita- se quedan aquí...-
-Pero...- comenzó a quejarse Arika, pero Silver le dio un codazo.
-Claro que nos quedaremos aquí- dijo Silver.
-Está bien- dijo Afrodita, desapareciendo en dirección al siguiente templo.
-¿Qué?- dijo Arika.
-Tu no puedes ir sola- dijo Umi, señalando su tobillo lastimado.
-¿Y eso...?-
-Para eso está Zaf- dijo Silver.
-¿Podrá con las tres?- preguntó Umi, mientras Arika acariciaba al enorme tigre.
-Claro que sí- dijo Silver con una sonrisa- vamos-
Las tres chicas subieron al lomo de Zafiro.
-Andando, Zaf- dijo Silver. El enorme tigre saltó al techo del templo de Piscis, y de un salto siguió subiendo hacia el templo principal. Afrodita las vio alejarse, sonriendo, con una mano en el vientre.
-Lo sabía- dijo en voz baja.
x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x
UNDECIMO PATIO
-¿Quién demonios eres tú?- dijo Milo.
La chica era de estatura media, tenía el cabello de un color ligeramente rojizo. Sus ojos eran de un color grisáceo, y de tez un poco morena. Llevaba puesto un vestido árabe blanco y negro, y llevaba un sable en su mano derecha.
-Tienes razón respecto a Amira, caballero- dijo la chica- Amira es la guardiana del templo de Escorpión, y yo soy su hermana Safiya...-
-¿Su hermana?- dijo Aioros.
-Así es- dijo Safiya- y no dejaré que ustedes lleguen a ese lugar-
-No tenemos tiempo para esto- dijo Milo.
-Ustedes avancen, yo me haré cargo- dijo Shaka, llegando detrás de ellos.
-¡Shaka!- exclamó Aioros- ¿qué haces...?-
-Ya conseguí la turquesa de Virgo- dijo Shaka- ustedes apúrense...-
Los dos caballeros subieron, pasando cerca de Safiya. Una vez que Milo y Aioros desaparecieron, internándose en el templo de Escorpión, Shaka encendió su cosmo.
-No sé como lograste vencer a Kiara Malawi- dijo Safiya- pero a mí no me vencerás...-
-Tú no eres una guerrera de Apolo- dijo Shaka.
-Soy tan guardiana como mi hermana- dijo Safiya- después de esta pelea tomaré el lugar de Kali Eknath como guardiana del templo de Libra...-
-Tu hermana y las otras están siendo controladas por Apolo- le dijo Shaka. Safiya se enfureció.
-¡No te permitiré que inventes esas mentiras de mi amo!- gritó- ¡prepárate a morir!-
-Tranquila- dijo Shaka-no quiero pelear contigo...-
-No tienes opción- dijo Safiya- defiéndete o muere-
x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x
TEMPLO DE ESCORPION
Milo y Aioros entraron en el penúltimo templo. Miraron a su alrededor.
-¡Amira!- gritó Milo- sé que estás aquí. Sal y pelea-
La chica apareció frente a ellos. Aioros la recordó. Era la misma chica del turbante que junto a Kateri se había llevado a Lavinia la noche anterior. Ya no llevaba su túnica ni su turbante blanco, sino un vestido árabe color blanco, y llevaba sus rojos cabellos sueltos, que enmarcaban su rostro.
-Aquí me tienes- dijo- soy Amira Bismah de Arabia, guardiana del aguamarina de Escorpión-
-Suerte- murmuró Aioros y salió corriendo hacia el siguiente templo.
-Me debes una pelea- dijo Milo.
-Lo sé- dijo Amira, desenvainando sus dos sables y encendiendo su cosmo- espero que estés preparado para morir...-
-Vamos, dame lo mejor que tengas-
-Aquí lo tienes- dijo Amira- ¡DANZA DE SABLES!-
x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x
DUODECIMO PATIO
Aioros siguió corriendo. Ya solo faltaba un patio para llegar al templo de Sagitario. Al llegar al patio, como en los anteriores, no encontró a la criatura. Se volvió a todos lados, pero no vio nada. De pronto, escuchó un rugido.
-Demonios- murmuró para sí mismo- eso no suena nada bien...-
Pero para mala suerte de Aioros, la criatura resultó ser la más rara que había visto en su vida. Tenía cuerpo de toro, garras y cabeza de león y alas de águila.
-Debí haberlo adivinado- dijo Aioros- una quimera-
La quimera rugió y se lanzó contra él. Aioros saltó y se suspendió unos segundos en el aire gracias a las alas de su armadura. La bestia, que también podía volar, hizo lo mismo.
-¡PLASMA ATÓMICO!-
El ataque lanzó a Aioros hacia el suelo. No logró destruir a la bestia, pero al menos evitó que lo partiera en dos de un zarpazo.
-Dioses, eso estuvo cerca- dijo Aioros, levantándose sin perder tiempo. La quimera volvió a lanzarse contra él. Aioros atacó con su Plasma Atómico, pero la criatura esquivó el ataque y el caballero tuvo que saltar hacia atrás para evitar que la quimera le arrancara la cabeza.
Cansado, el caballero sacó su arco y flecha y encendió su cosmo. Soltó la flecha, atravesando el corazón de la criatura, la cual cayó muerta.
-Al fin- dijo Aioros algo fastidiado. Miró hacia el último templo, el de Sagitario.
-Ya voy, Ariadna-
x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x
TEMPLO DE SAGITARIO
Una chica morena conversaba con un chico, sentados ambos en el primer escalón que daba hacia el duodécimo patio. La chica usaba la armadura de guardiana de Apolo. El chico jugueteaba con un largo mazo.
-Parece que el caballero venció a la quimera- dijo el chico- no es tan débil-
-Será una batalla difícil- dijo la chica- pero estoy segura que venceré...-
-Eso espero- dijo el chico.
-¿Y tú porqué aceptaste servir al señor Apolo, Carlos?- preguntó la chica.
-Porque me prometió la mano de Fania, la guardiana del Fuego- dijo Carlos.
-¿Ella?- dijo la chica, alzando una ceja- me han dicho que es una traidora...-
-¿A que te refieres?-
-¿Recuerdas a las amazonas que Kateri y las otras trajeron? Ellas sirven al señor Apolo, pero no por su propia voluntad, sino porque son controladas por los brazaletes mágicos- explicó la chica- pero esa guardiana del Fuego no tiene ninguno...-
-¿Así que traicionó a la orden del fuego?- preguntó Carlos, y la chica asintió- bueno, no está mal, si así sirve a tu señor-
-Tú sabes lo que haces- dijo la chica, y se levantó- ahora vete, Carlos, que el caballero se acerca, y yo soy quien pelearé contra él-
-Suerte- dijo Carlos, levantándose y lanzándole el mazo- no que la necesites-
-Gracias- dijo ella.
Una vez que el chico se fue, la chica se colocó la diadema de su armadura en la frente, y su expresión cambió por completo.
x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x
TEMPLO DE ARIES
Las cosas no mejoraban para Mu, porque Asenet se recuperó de su golpe. Ahora eran dos contra uno. La egipcia se libró de la Red de Cristal de Mu y recogió su espada curva del suelo.
-Hazte a un lado, niña- dijo Asenet a Daggianna- yo misma lo destruiré-
Daggianna no se movió. Mu la miró a los ojos. Se estaba debatiendo entre el control de Apolo y su intento de librarse de él.
-Hazte a un lado- repitió Asenet, empujándola y saltando contra Mu.
-¡PARED DE CRISTAL!-
La espada curva de Asenet se rompió contra el muro de Cristal, y la chica se enfureció.
-Ya verás- dijo- te mostraré el verdadero poder de Aries-
-Está bien- dijo Mu- dame tu mejor golpe-
-Así lo haré- dijo ella- ¡EL VELLOCINIO DE ORO!-
-¡REVOLUCION DE POLVO DE ESTRELLAS!-
Ambos ataques chocaron en el aire. Mu salvó un destello que dio en la frente de Asenet. La diadema de la guardiana salió volando y cayó a los pies de Mu, quien la recogió y tomó el ágata. Asenet cayó de rodillas y luego al suelo.
-Lo siento, chica- dijo Mu.
De pronto, el caballero sintió un ataque que lo lanzó hacia atrás. Levantó la vista. Al parecer, el control de Apolo sobre Daggianna fue más fuerte.
-Daggianna, detente- le dijo Mu. La chica siguió atacándolo, y Mu solo la esquivaba-¡detente!-
-Pierdes tu tiempo- dijo Asenet, recuperando la conciencia- el dominio de Apolo le impide dejar de atacarte... lo único que logras es aumentar su desesperación porque te está dañando contra su voluntad-
-¿Qué debo hacer?- preguntó Mu.
-Quitarle esa tobillera- dijo Asenet- porque por medio de ella la controla-
-De acuerdo- dijo Mu, encendiendo su cosmo- ¡RED DE CRISTAL!-
Daggianna quedó atrapada en la red, igual que Asenet hacía un rato.
-¡Suéltame, Mu!- gritó Daggianna. Su voz llegó hasta el corazón de Mu.
-¡Hazlo!- lo urgió Asenet.
-No quiero lastimarla- dijo Mu. Asenet bufó, recogió la espada que no estaba rota y golpeó con ella la tobillera de Daggianna. Tanto ésta como la espada se rompieron en ese momento. Daggianna se desvaneció y cayó en los brazos de Mu al deshacer éste su red de cristal.
-Estará bien- dijo Asenet- despertará en unos segundos-
-Gracias, Asenet-
Daggianna abrió los ojos, y éstos se llenaron de lágrimas al ver el hilo de sangre que escurría de la frente de Mu.
-Mu, lo siento, lo siento mucho...-
-No llores- dijo Mu, limpiando una lágrima que escurría por la mejilla de la amazona- sé que no lo hiciste por tu propia voluntad-
Daggianna asintió y sonrió. Mu hizo lo mismo, y la colocó en el suelo.
-Tenemos que darnos prisa- dijo Mu, apretando el ágata de Aries en su mano derecha- nos queda poco tiempo-
x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x-x
CONTINUARÁ...
Shandir: jaja claro que sí... gracias por tu review!
Swan-chan: la curiosidad mató al gato... pero en este caso no es tan peligroso... aquí tienes otro capi... gracias por tu review!
Misao CG: no te puede dar un infarto, eres demasiado joven... gracias por los ánimos que me das... y lo que estudio, soy aprendiz de brujo... perdón, de médico... jajaja bueno es casi lo mismo... gracias por tu review!
Ryu Mari: siiiii, soy cruel, no tengo corazón ni sentimientos, los cambié por un chocolate, y ya me lo comí!!!! Muajajajaja... (ejem...) no te puse en el signo de libra porque ya estaba la maestra de Shaka en ese lugar, y luego se enojaba jejeje... aún así la historia sigue. Como dije, actualizo los lunes y jueves, a menos de que tenga una buena razón para no hacerlo (llámese: castigo, guardia o examen) gracias por tu review!!
Megu-chan: jeje espero que esto te lo haya dejado claro... gracias por tu review!
Atalanta: noooo... Milo quiere venganza... jejeje, ya verás la escena que pondré con Milo y Camille... solo por eso agradezco vivir tan lejos, así Kasu no me matará... además, ya tengo el final jeje bueno, no digo más... gracias por tu review!
A los demás: gracias por seguir leyendo, y manden reviews!!!
Abby L. / Nona
