Bueno, ya estoy aquí. ¿Cómo os ha ido? Bien espero. Rurouni Kenshin no me pertenece, esto está claro, perfecto, vayamos a los rewiews.
Kayla-chan.- Bueno lo de Sano y Meg lo tenía previsto des del principio, igual que el final de cada pareja, jeje, pero me lo trabajé muuuucho.
carmen.- Bueno estaban en la playa, pero hacia mal tiempo ¿te acuerdas? por lo tanto no habia mucha gente y, como consecuéncia, no habia mucha gente que los pudiera ver. ¿OK?
Muchas, muchas gracias a Holly Rainard (jeje, no vemos de nuevo amiga ), naoko LK, Serenity y a Kaoru Himura.
Ahora les dejo con el episodio, que disfruten n.n A por cierto, en este episodio hay lemon, si a alguién no le gustan o se siente incómodo lo he indicado así que solo se lo ha de saltar. Gracias
- ¡Ay! ¡Que monos! – dijo Misao emocionada
- Si, ya era hora, pero no les digas nada al respecto – Kaoru se encontraba mirando por la ventana junto a Misao observando a Sanosuke y Megumi como se unían en un cálido beso
- Chicas, no creo que este bien espiar – dijo Kenshin con una gota detrás de su cabeza
- Kenshin, no estamos espiando, solo observamos por la ventana
- Y casualmente, esos dos están haciendo caricias delante de nosotras
- Bueno, ahora los únicos que desentonáis aquí sois tu – Kaoru se giró – y Aoshi
- ¿Cómo? – Misao se sonrojó.
- ¿Desentonamos? ¿Y por qué? – preguntó Aoshi, sabia donde su hermana quería llegar y no la dejaría vencer
- Porque todos somos parejas oficiales menos vosotros dos
- Te equivocas hermanita – dijo negando con el dedo – Aquí los únicos que pueden ser pareja formalmente son Sagara y Takani, ellos solo con que nos lo digan a nosotros ya serán pareja, pero tu, - dijo señalándola – Primero se la has de decir a Saito para al menos, poder ser una pareja oficial y Saito no lo sabe, es más, dudo que cuando lo sepa os deje ser pareja – a Kenshin un escalofrío le recorrió la espalda al recordar su última conversación con Saito y Kaoru se imagino la mirada que le dirigiría a Kenshin si él no era el candidato apropiado
- Pero... pero... papa lo entenderá – dijo segura - ¿verdad? – ahora preguntó a Aoshi después de ver la cara de duda de Kenshin
- Vamos, sino regresamos, nos mojaremos – dijo Sanosuke
- ¿No estamos ya mojados? – bromeó Megumi
- Si, tienes razón pero se te marcan todas tus... - dijo mirándola lujuriosamente
- ¡Eres un idiota! ¡No sabes ni mantener el romanticismo! – y se marchó malhumorada
- ¿Pero... Kitsune... qué...? ¡Eres tú la idiota! – la siguió, continuando una discusión que no termino ni cuando llegaron a casa - ¡Supongo que está noche si podré dormir en MI habitación!
- ¡TU habitación! Perdona que te lo diga pero la compartimos
- Si, claro, ayer me echaste
- ¡Ayer le tiraste los tejos a Sayo!
- ¡No es verdad!
- ¡Si lo es!
- ¡No lo es! ¡Fue ella!
- ¡Pues haberlo evitado!
- ¡Y como querías que lo evitara si se me tiro encima! – y siguió hasta en su habitación a los cuatro que estaban en la sala les salió una gota enorme detrás de la cabeza
- Bueno, está tarde Aoshi y yo nos vamos a la feria ¿venís?
- Pues, me parece buena idea, Megumi y Sano querrán estar solos – dijo Kaoru – Pero no trajimos kimonos
- No importa, solo iremos a mirar, además, no nos avisaron que habría una feria
- Vale ¿te parece Kenshin?
- Claro
- Está precioso – observó Misao, habían llegado a la feria, un montón de parada para hacer todo tipo de actividades
- Kenshin – comenzó Kaoru como una niña pequeña – Vamos a pescar un globo de color, vamos, porfi...
- ¿No os importa? – preguntó Kenshin, Aoshi y Misao negaron con la cabeza, Kenshin se lo agradeció, ¿quién podía negarse a la carita de niña buena de Kaoru? Él seguro que no – Nos vamos
- ¿Qué te apetece hacer Misao? – preguntó Aoshi
- Pues... no sé... ¡Ah! – gritó Misao
- ¿Qué pasa Misao? – preguntó preocupada
- Vamos a esa parada, quiero conseguir aquel osito – Aoshi hizo cara de resignación por un momento pensó que había visto algo sospechoso, el osito en cuestión era un puma, un cachorro, de pelaje negro y ojos verdes que te hacían sentir culpable si al menos no luchabas una vez por el. Misao tiró el aro y acertó pero... - mou! Ese no era el que yo quería – murmur
- Entonces le haremos chantaje al del puesto – susurro Aoshi – Vamos, te regalo cinco tiros – Misao, como no era de extrañar los acertó los cinco pero...
- Bua... no hay manera de darle al que quiero
- Perdón – dijo Aoshi al señor del puesto – Había pensado que quizás nos podría hacer un trueque, nosotros le devolvemos los cinco ositos y usted nos da el puma
- Señor, no puedo hacer eso
- Esta bien, Misao, cuantos tiros más quieres, aun quedan diez muñecos, ¿estás segura que los podrás cargar todos? – Misao le miró con cara confusa
- Pero Aoshi-sama... - pero no tubo que decir nada, el señor del puesto se les acerco y les dio el muñequito que quería Misao a cambio de los que habían ganado y si prometían no volver a jugar (n/a: este Aoshi, va de mosquita muerta pero... xD)
- Toma Misao
- Gracias – Misao tenia un poco de color en las mejillas
- No hay de que
- Pero Aoshi-sama lo que ha hecho...
- Le he hecho ganar más dinero al del puesto, con, una pequeña trampa
- Claro – dijo burlona, nunca había visto esta faceta de Aoshi
- Vaya, el cielo se está nublando otra vez – era verdad, las estrellas y la Luna habían desaparecido, ahora unas nubes de tormenta amenazaban en descargar toda la lluvia – Tendríamos que volver
- Pero... ¿y Kenshin y Kaoru?
- Sabes si Himura llevaba el móvil – la chica negó con la cabeza – Bueno pues... supongo que los buscaremos
- ¡Kitsune! – gritó Sanosuke - ¿Cuándo esperas salir? ¡Me estoy helando!
- ¡Que pesado! – Megumi abrió la puerta del baño – ¡No me has dejado ni duchar en paz!
- Lo siento, pero yo también me quiero... duchar – ahora estaba mirando las curvas de Megumi, llevaba puesta una toalla que no llegaba ni a las rodillas y dejando todos sus muslos al descubierto, su cabello sujeto en un moño, excepto por algunos mechones, demasiado cortos, que caían sobre su cara enmarcándola y dejando su cuello al descubierto, sus labios eran de un color rosáceo, Sanosuke se quedó parado admirando a la chica que se dirigía a la habitación
- ¿Qué te pasa Cabeza de Pollo? – preguntó Megumi al ver el silencio de Sanosuke. El chico tenia su vista fija en su cuello, nunca lo había visto así, siempre tenia alguna cosa que lo escondía, su pelo, un collar, ahora estaba desnudo, solo... para él – Sano... - no pudo acabar, Sanosuke no aguantó la tentación y se abalanzo sobre su cuello, besándolo, lamiéndolo y mordisqueándolo
- Vaya... empieza a llover – dijo Kenshin
- Si, hemos de encontrar a Misao y Aoshi
- ¿Oye Kaoru?
- Dime
- Si Saito no nos deja estar juntos... - Kaoru se paró y se puso delante de él
- ¿Qué? ¿Me dejarás?
- Claro que no... Kaoru eres todo lo que tengo en este momento y... si te pierdo... con solo de imaginarte con otro me hierve la sangre y... - Kaoru lo calló con un beso
- Entonces lo que diga mi padre no nos afectará – Kenshin volvió a besarla para después seguir con su búsqueda
- ¿Dónde pueden estar? No es tan difícil, solo hemos de buscar una cabeza de zanahoria y... llueve – dijo mirando al cielo
- Así es – dijo Aoshi, entonces vio a Misao temblar de frío - ¿Tienes frío?
- No, pero, es que no he traído ningún abrigo y... - Aoshi se dio cuenta que él tampoco, "Aoshi no baka, ¿dejarás que la pobre Misao pase frío?" Se regañó así mismo. Misao de pronto sintió calor y se dio cuenta que era el brazo de Aoshi, ¿¡Aoshi la estaba abrazando! No, no puede ser
- ¿Mejor así? – preguntó Aoshi
- Si...si – tartamudeo Misao que estaba roja
- Cabeza de Pollo... no creo que sea el mejor momento para... – intentó decir Megumi
- ¿Y por qué no? – alcanzó a decir Sanosuke separándose momentáneamente del cuello de Megumi. Megumi gimió al volver a sentir la boca de Sanosuke encima de su cuello
- A... a la habitación – Megumi, poco a poco, fue arrastrando a Sanosuke hacia su habitación, si los otros volvían, no quería que los encontraran en esa situación en mitad del pasillo – Sanosuke... no creo que ahora... aquí... en esta situación... tu y yo... - pero no pudo, no pudo, ante Sanosuke su fuerza se iba, el chico aun seguía recorriendo su cuello – Oh, a la mierda – se dijo más para si misma que para Sanosuke.
Entonces cogio la cara del chico entre las manos y le obligo a mirarla, entonces lo besó, apasionadamente, como si hiciera días que no se veían. Sanosuke cogio la chica de la cintura y ella enlazo sus manos detrás del cuello del chico.
Sanosuke la hecho encima de la cama, provocando que la toalla de la chica se desprendiera de su cuerpo, el chico alejó el contacto durante un par de segundos, el tiempo suficiente para admirar su cuerpo y memorizarlo.
Ella rió de manera pícara y lo atrajó para volver a besarlo.
- Creo que no tengo condón Kitsune – susurró Sanosuke al oído de Megumi. Ella lo apartó de repente y lo sospesó unos segundos
- Nos vamos a arrepentir – y volvió a besarlo con pasión, dispuesta a entregarse al mejor juego del mundo.
- ¡Ahí están! – exclamó Kaoru – Menos mal que os hemos encontrado – dijo acercándose a ellos, - Vamos a buscar el coche y volvamos antes que la lluvia caiga más fuerte
- Si – dijo Aoshi
- Aoshi... ¿ya has avanzado con Misao? – preguntó Kaoru al oído del chico
- Tenia frió – una respuesta corta que no convenció a Kaoru
Ya está ¿cómo me ha quedado?
Ya sabéis, dudas, suggerencias, felicitaciones, un rewiew porfi
Se despide
Aya-Mery