Soportando el dolor

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Gracias a Carmín, dark, akane himura por sus review's

Advertencia: Yaoi (parejas tradicionales), rape, violencia

Lo que esta en cursivas esta en el pasado, lo que esta en negritas son escenas externas.

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Parte 5: El Duelo

Quatre se levanto temprano, últimamente no podía dormir bien y siempre terminaba las noches en vela. Camino hasta la cocina y saludo cortésmente al personal despierto. Les sonrío pero todos sabían ya que sus sonrisas estaban vacías. Tomo asiento en el comedor, esperando su desayuno, no espero a los demás, prefería estar solo, pero aun con todo el debía seguir siendo el educado Quatre, pero esperaba que durante la noche ellos hubiera marchado, aunque en el fondo no quería estar solo.

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Los demás habitantes de la casa se levantaron casi al mismo tiempo, todo se encontraron en el comedor. Nadie dijo nada, y Duo se forzó a sonreír para animar un poco las cosas.

-donde esta Quatre?- pregunto Reelena a quien traía la comida

-el amo Quatre desayuno temprano-

Después de un rato, antes de que la sirvienta se fuera Trowa hablo -donde esta ahora?-

-se encuentra en la sala de música- se retiro con una reverencia, que pocos contestaron.

Terminaron de desayunar y todo caminaron hacia el lugar que les indicaron, Reelena se adelanto y antes de entrar suspiro, no quería que Quatre supiera que ellos sabían lo que había pasado. Aunque tanto ella como Zech y Dorothy tenían una idea, sobre la razón por la que Quatre había sido internado, sobre todo por lo que había sucedido cuando abandono por primera vez la institución.

-buenos días Quatre- saludaron alegres

-buenos días- contesto secamente, estaba en la ventana, viendo hacia el exterior, volteo con una mano en la espalda cuando saludo -qué hacen tan temprano?- pregunto al grupo de Reelena

-nos quedamos a dormir aquí- contesto Dorothy -es que dudábamos que ellos fueran buena compañía- dijo señalando a los expilotos

-oyes que te crees, somos nosotros los que creemos que ustedes no son buena compañía- contesto Wufei

-si, no me digas- rezongo Dorothy -pero ignoremos a estos, que te parece si salimos hoy también-

-no- contesto secamente

-por que no?-

-tengo cosa que hacer-

-por favor Quatre- pidió Reelena

-si vamos es buena idea, nosotros también los acompañamos- agrego Duo

-ya vez somos más-

-de todos modos tengo cosas que hacer-

-pero Quatre, sabes bien que no nos llevamos muy bien sobre todo cuando...-

-cállate Dorothy- la interrumpió Reelena sabiendo lo que iba a decir

-cuando Heero la rechazo por Duo- dijo con fastidio, pero al comprender lo que había dicho suspiro -perdóname Reelena, será mejor que me dejen, solo causo problemas- se escucho triste

-ah no, lo haces a propósito-

-bueno si yo fuera Quatre haría lo mismo- agrego Zerch divertido

-hermano- regaño Reelena

-Quatre amigo- llamo Duo -cómo sabes lo de Heero y yo?-

-lo se, eso basta-

-por lo menos hubieras ido a felicitarnos, o algo así- contesto Heero ignorando la forma en que hablo

-o contárnoslo- dijo Wufei

-ustedes no lo sabían?- pregunto inocentemente Duo

-no Maxwell- dijo Wufei

-aunque era de esperarse- comento Trowa

-pues yo no me lo esperaba, pero bueno ya que- agrego resignada la embajadora

-bueno, pues ya todos lo saben, qué te parece si vamos todos a comer Quatre?-

-ya les dije que tengo que hacer algunas cosas-

-como qué?-

-eso no te incumbe-

-a ya se es ella, esa chica de quien hablas y no nos dices nada-

Quatre bajo el rostro con tristeza. Alguien más en la sala también le dolió esas palabras. Dorothy entendió que dijo algo malo

-si, es con respecto a ella-

-nos puedes contar de ella?- pregunto Heero

-ella... ellla- unas lagrimas salieron de sus ojos sin intentar siquiera contenerlos, dejo de ocultar su mano, en ella estaba la misma daga, la cual dejo caer a un lado -ella... la odio- dijo con firmeza -la odio, la odio- se abrazo a si mismo mirando de nuevo hacia la ventana -por que?- se escucho apenas audible.

-Quatre- Duo trato de acercarse

-detente, no me toques- y diciendo esto salió de ahí, huyendo de lo que había en es casa.

-creen que debamos seguirlo?, tal vez haga una tontería- comento Wufei

-no lo creo, si realmente quisiera hacerlo, lo hubiera hecho hace mucho, creo que es por ella que no lo hace- dijo Reelena. Heero tomo la daga del piso y la guardo donde antes viera que Quatre la guardaba.

-creo que es hora de seguir escuchando, tal vez sepamos quien es ella?- comento Zerch

Los demás asintieron.

Tal y como lo hiciera la otra vez Heero logro entrar a los archivo de Quatre, mientras Dorothy encargaba a uno de los sirvientes que les avisara cuando este su amo llegara.

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Parte 6: Cuarta Grabación

06 de Julio.

Paciente: Quatre Rabera Winner.

Doctor encargado: Dr. Carl Kölh.

Hora de inicio: 14:00 horas

-Buenas tardes Quatre-

-mjm-

-no venimos muy alegres hoy-

-no entiendo porque insiste en hacerme recordar-

-no me negaras que te sentiste mejor al liberar todo-

-no- hubo silencio -aunque ahora comprendo lo basura que soy-

-Quatre eso no es cierto-

-qué no?, sino logre defenderme-

-no es verdad, además nunca te dejaste vencer, eso demuestra tu fortaleza-

-mjm-

-Quatre que te parece si me sigues contando lo que paso-

-lo que paso?-

Se despertó adolorido, sus ojos aun estaban húmedos y no le permitían enfocar, pero el golpe de la realidad llego a su cerebro derramando nuevas lágrimas de dolor, intento levantarse pero su cuerpo no respondía.

-no lo intente- escucho una suave vos, giro su cabeza para buscar de donde provenía -esta muy herido, deje lo curo antes-

-quien... quien eres tu?-

-mi nombre es Ya Lin, y el señor Urban me dijo que me encargara de atenderlo- era una chica de piel apiñonada de cabello castaño rojizo lacio largo, amarrado en una coleta alta

-por que?-

-eh?-

-por que me atiende?-

-es mi deber, además...-

-que?-

-no puedo creer que mi señor sea capaz de algo así, aunque hace poco que trabajo para él- no quiso sonar triste

-ay-

-perdone joven-

-no te preocupes- le sonrío

-es usted muy amable-

-mm-

-no se rinda joven-

-eh?-

-se lo que paso, pero le aseguro que siempre hay algo para seguir adelante, la esperanza no lo abandonara -

-gracias-

Ya Lin se levanto, había terminado de curar a Quatre -descanse, deje algo de ropa ahí junto con comida, el señor tardara en llegar- sonrío antes de salir.

Después de un rato de estar acostado y haber comido, Quatre se levanto tambaleándose, llego a la puerta, la cual para su mala suerte estaba cerrada, Ya Lin la había cerrado, pero la entendió, no quisiera ella enfrentar la furia de su señor.

Camino hacia una de las ventanas, pero en eso recordó la otra puerta, camino hasta ella, descubrió el baño, vio la ropa en la cama y las palabras de Ya Lin y decidió quitarse la suciedad en su cuerpo, se asqueo al recordar. El baño nunca había sido tan refrescante para él, pero el dolor en su cuerpo no desapareció tan rápido, pero el saberse destrozado por dentro nunca podría ser borrado, unas lagrimas se confundieron con el agua.

Cuando termino su baño se vistió y no perdio su tiempo. Camino hacia la ventana aguantando el dolor, estaba en un sobre nivel, como si estuviera en un segundo piso, tomo la silla del escritorio y rompió el vidrio, con las sabanas limpio la ventana de cristales sobrantes, dudo un poco antes de brincar, pero sabia que esta era su oportunidad, cayo pero la debilidad de su cuerpo lo llevo a lastimarse un tobillo.

Pero no tenia tiempo para lamentarse, encamino adentrándose en el bosque, esperando que cerca hubiera algún lugar poblado, caminando sin ruta cierta; no sabia cuanto tiempo llevaba recorriendo el lugar, pero sus fuerzas estaban mermando. Esperando no ser descubierto se sentó recargándose en el tronco de un árbol, el sueño rápido llego.

Una fuerte sacudida lo saco de su descanso -creías que no te encontraría- sintió pánico. Lo golpeo en el rostro y otro golpe en el estomago, cayo al suelo cuando iba a levantarse para poder defenderse, varios azotes se lo impidieron, cada golpe era un grito, -te dije que te comportaras- detuvo su agresión y llevando casi arrastras a Quatre lo llevo de regreso a su residencia.

Al entrar lo encerró en el armario, dejándolo ahí sin curar sus heridas, ahí Quatre se desmayo.

Nuevamente fue despertado de manera brusca -espero que hayas aprendido- regaño Pavel con furia, dejándolo caer bruscamente en la cama, junto con un grito de dolor por las heridas abiertas.

Pavel comenzó a besarlo, Quatre quería resistirse pero cada movimiento era .una agonía para su destrozado cuerpo quien le reclamaba descanso -maldito- dijo con enojo.

-vamos Quatre esto seria maravillosos si te dejaras-

-nunca-

-no creo que puedas hacer mucho para detenerme- se burlo

Muy acertado estaba, por mas que intentaba resistirse comprendía tristemente que era inútil, estaba demasiado débil y herido para poder hace algo, se sintió frustrado, un fracasado.

Pavel lo volvió a tomar por la fuerza, Quatre se desmayo en medio del dolor.

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Despertó con el cuerpo totalmente destrozado, -joven que bueno que despertó-

-Ya Lin- dijo casi en susurro

-que tal joven?, esta vez me espanto sus heridas eran mayores que la anterior, tardo mucho en despertarse- Quatre derramo algunas lagrimas al recordar el dolor y la tortura por la que paso. -perdoneme, soy una imprudente-

-no te preocupes-

-deje termino de cambiar esta venda- Quatre esquivo la mirada, le costaba trabajo mantenerse despierto, ni siquiera sabia porque había despertado.

-joven-

-si-

-coma algo para recuperar sus fuerzas-

-no tengo hambre-

-claro que tiene, solo esta algo deprimido-

-por que no he de estarlo?-

-joven, míreme, yo puedo decir que siento algo parecido a lo que usted siente-

-eh?-

-yo de niña también fui... bueno perdí algo muy sagrado- Quatre se conmovió a la confesión, -pero sabe seguí adelante- le sonrío para animarlo -se que lo que usted esta pasando es peor, pues... bueno no hay porque recordarlo- hizo varios gesto con las manos mientras hablaba -pero por favor no se rinda, mire prométame algo-

-que?-

-que seguirá adelante con su vida, no se dejara vencer-

-que?-

-prométame que pase lo que pase usted continuara viviendo-

-yo... yo no se si tenga la fuerza suficiente para hacerlo-

-claro que la tiene, aun veo un brillo en su mirada indicándome que usted no se ha rendido, o me equivoco- Quatre negó con la cabeza -ese brillo me indica que tiene la fuerza para seguir adelante-

-eso crees-

-claro que si, ahora prométalo-

-te lo prometo Ya Lin-

-eso es joven-

-Ya Lin-

-si joven?-

-dime Quatre-

-si Quatre, ahora a comer, déjeme ayudarlo- Ya Lin lo ayudo a sentarse.

-por cierto Ya Lin-

-si Quatre?-

-qué hora son? parece que es muy tarde, Pavel tardara en llegar-

-Quatre yo...-

-que pasa?-

-el señor Urban bloqueo las ventanas para que no vuelva a escaparse-

-ah vaya-

-pero no se preocupe- Ya Lin tomo los trastes sucios y salió de ahí cabizbaja.

Se recostó de nuevo, no podía hacer mucho en ese estado, durmió un rato.

Esta vez nadie lo despertó. Encamino a la puerta sospechaba que estaba cerrado, pero quería confirmarlo, sus sospechas fueron confirmadas, se recargo en ella sintiéndose incompetente, busco con la vista algo que le ayudara a salir, camino hacia las ventanas para revisarlas, pero estaban completamente bloqueadas.

Escucho la puerta abrirse y se volteo rápidamente -qué haces Quatre? no intentaras escaparte de nuevo, sabes que no es bueno para tu salud- Pavel caminaba hacia Quatre, quien retrocedía a cada paso evitando que se le acercara -no huyas, no me gustan los juegos-

-no te me acerques- ordeno

-no estas en condiciones de decidir- se burlo. Pavel logro sujetarlo, Quatre cerro los ojos por el dolor cuando este lo atrapo de los hombros, para después abrazarlo -Quatre eres lo mas hermoso que he tenido-

-yo no te pertenezco- dijo entre quejidos

-oh claro que si- lo separo de si para admirarlo -conozco cada parte de tu bellísimo cuerpo- Quatre se sintió asqueado, sucio de si mismo. Pavel lo beso, el gesto duro del árabe no desaparecía. -veo que aun no te recuperas, te dejare descansar esta noche, porque no quiero que te pase algo malo-, lo soltó y Quatre cayo al piso debilitado y el sentir a Pavel cerca lo hacia sentirse mal. -le diré a Ya Lin que cambie estas sabanas, no puedo creer lo poco higiénico que eres, esperaba mas de ti-

En cuanto salió Quatre tenso sus puños de coraje, furia y desesperación, como se atrevía a hablarle así, cuando todo era por su culpa, varias lagrimas recorrieron sus mejillas, lagrimas que pronto se convirtieron en llanto.

La puerta se volvió a abrir, se incorporo tambaleante pensando que seria Pavel, pero era Ya Lin quien al verlo ahí tan lastimero, corrió a abrazarlo, se olvido de las heridas del joven, hasta que escucho un quejido.

-perdóneme-, Quatre negó con la cabeza -esta usted bien?, qué le hizo ahora?-

-solo me hizo recordar lo poca cosa que soy-

-Quatre no diga eso, usted vale mucho, es él quien no vale, joven Quatre, no se deje engañar por él, usted es maravilloso, sabe, cuando lo vi la primera vez en la sala-

-en la sala?, creí que...-

-no yo lo vi cuando salió del cuarto, y cuando esas bestias lo golpearon, quise ayudarlo pero sabía que no serviría de nada-

-Ya Lin, tú me has ayudado mucho-

-sabe Quatre en cuanto lo vi creí que usted era un ángel-

-Ya Lin que cosas dices-

-es verdad, a pesar de que se veía confundido, su cara reflejaba una paz muy cálida y sus ojos mostraban la pureza de su corazón, y... a pesar de todo esto usted aun tiene ese halo tan hermoso que lo rodea-

-Ya Lin-

-por favor no se rinda- dejo caer algunas lagrimas -usted me lo ha prometido, seguirá viviendo, verdad?-

-lo hare- no pudo resistirse a sus palabras, cada vez que la veía, su corazón se llenaba de esperanza.

-será mejor que descanse, yo mañana no me quedare sin hacer nada, lo ayudare-

-no lo hagas, podrían lastimarte-

-no, lo haré- cambio su gesto a uno alegre -mientras se baña que le parece si le preparo la cama- Quatre no contesto, esa cama era para él mas un instrumento de tortura. Ya Lin lo entendió -la cama no es la culpable-

-esta bien- sonrío, y se dirigió al baño.

Cuando salió, ya no la vio a ella, camino lentamente y dudando se introdujo en la cama, pero esta vez el sueño no llegaba, como iba a dormir sabiendo que en cualquier momento volvería a pasar por el mismo sufrimiento.

-qué paso después de eso?- pregunto el Doctor al ver que Quatre callaba

-estoy cansado- dijo con voz lastimosa

-esta bien, solo dime algo-

-que?-

-esa chica es la que aviso a la policía-

Tardo en contestar -si- se escucho como en llanto

-esta bien, es todo por hoy, pero ya viste estamos avanzando-

-mh, si usted lo dice- Se escucho unos pasos arrastrarse y la puerta permitir salir a alguien

Hora de terminado: 17:46 horas

Aun estaban asimilando lo escuchado, sospechaban quien era ella, pero no comprendían porque la odiaba si parecía hablar de ella como alguien muy preciada.

Sus cavilaciones fueron interrumpidas -disculpen el amo Quatre vino hace un momento pero no entro-

-gracias por avisarnos- hablo Zerch

-a que habrá venido?- comento Reelena

-es extraño, pero es normal que se comporte así- expreso Duo

-bueno por lo menos sabemos quien es ella- expreso Wufei

-pero la pregunta es, por que la odia?- exclamo Heero

-Zerch, que paso con ese tipo?- pregunto Trowa

-tuvo juicio privado por su cargo en la política, pero supe que le dieron cadena perpetúa-

-y a ese Roman?-

-no lo se-

-cómo es posible que exista gente así?- dijo con enojo Duo -solo espero que se la este pasando mal-

-estoy de acuerdo- dijo Reelena La miraron con sorpresa, no esperaban eso de la mas grande pacifista -es que...- no dijo mas la tristeza no le dejo

-si seguimos escuchando, creo que sabremos mas, cuantas grabaciones quedan?- decidió cambiar el tema Dorothy

-3-

-tal vez averigüemos que paso con ellos en la siguiente grabación-

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Continuara

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