Disclaimer: No Rowling, no lucro, Windbags son de mi cabeza... ¿Tengo q ponerlo en todos hasta q se acabe el fic...?
Este capítulo va dedicado a mi profesora de Inglés, Ms. Meylin Uribe, if you´re reading, hope you enjoy it! y a Las personas que saben lo mucho que me gusta escribir... Natalia (Tonks Black), hermanita, te adoro, a Dianis, no te me vulevas a perder, a Vic, a Lizzy, a Snady, a Vanessa y Anita, a Roberto, que me ha visto escribiendo con pasión... claro, a las horas de break. Y a todos los que saben lo que esto significa para mí. Uy! casi lo olvido, a Conny también, Conny gracias por estar ahí... Y a todos los que me paran preguntando por el msn cuando publico... son los que me dan fuerza a seguir...
FanFiction: Harry Potter y la deuda Pendiente
Capítulo 15: Las lenguas de las serpientes son muyyyy largas
Por Lunita J. Lupin
Aviso: No leer este capítulo si no tiene tiempo, siéntese, relájese y le recomiendo q estire las piernas cada veinte minutos.
sssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
Como ustedes habrán sido informados por sus padres, quiero proponerles algo. -dijo Dumbledore.
Harry no apenas podía creer lo que Dumbledore estaba a punto de pedirle a sus amigos.. Dobby le había llevado en secreto a un lado.
Pero, Harry Potter, Señor... El profesor Dumbledore desea hablar primero con Harry Potter, señor -el elfo le indicó con el dedo q se acercara y al hacerlo le susurró- a solas -tenía los ojos abiertos cual luna llena.
Está bien -imitó Harry el susurro, se lo esperaba.
Harry, quiero comunicarte lo que les voy a decir a tus amigos antes, es muy...
Peligroso, lo sabemos..
Harry, quiero que se entrenen para pelear contra Voldemort y sus mortífagos -dijo finalmente el director para que Harry dejara de hacerse el sabihondo. Harry estuvo algo sorprendido... ¿Pelear CONTRA?- Dado que ellos tienen a sus hijas, no nos podemos quedar de brazos cruzados. Ha llegado la hora, no solo de plantarles la cara, si no también de atacar... La guerra nos ha sido declarada, no podemos quedarbos esperando más ataques. Sé que Voldemort intentará volverte a sacar del castillo de la misma forma que las veces anteriores...
Engañándome o llevándose a alguien que... -Harry se detuvo a pensar en lo que estaba diciendo y la primera persona que se le vino a la mente fue...- signifique mucho para mí.
Exacto, Harry, y eso también significa que no intentarás alejarte de tus amigos para protegerlos, porque LOS NECESITAS. -Dijo Dumbledore echando por la borda lo mismo en lo que había pensado, alejarse de los otros para que no salieran lastimados, ya que, a fin de cuentas, era él y nadie más quien tenía la responsabilidad de matar a Voldemort.
Justo en ese instante llamaron a la puerta y Dumbledore dejó pasar a Ron, Hermione, Ginny, Neville y Luna, impidiendo que el chico replicara.
Buenas noches, muchachos, bienvenidos nuevamente a Hogwarts. Iré sin más rodeos. Como ustedes habrán sido informados por sus padres, quiero proponerles algo. -dijo Dumbledore.
Los recién llegados miraron a Harry y luego a Dumbledore con los rostros llenos de expectación.
¡No puedo creer que nos ha pedido que hagamos lo que el año pasado nos decían que NO deberíamos hacer! -dijo Ginny luego del silencio entre ellos mientras se dirigían perplejos a la sala común- ¿Tan desesperados están?
Entremos aquí -dijo Hermione algo preocupada mirando a los costados y señalando un aula vacía. Luego de comprobar q nadie los siguiera y cerrado la puerta, dijo- Lo que sucede es que ahora, con los hijos de los mortífagos, un verdadero ejército de Dumbledore es de veras necesario...
Sí, el problema es que todo el colegio sabe del ED... -dijo Ron.
¡Ahora me doy cuenta! -dijo Hermione casi saltando y dándole un susto a los demás- ¿No te das cuenta, Ron? -Ron negó con la cabeza, perplejo- ESE ED es purita fachada... ¿Cuántos ahía han alcanzado el nivel de los TIMOs? ¡Casi nadie! Y mientras tanto... hay dos o tres grupos que están súper avanzados...
Sí, y ¿eso qué? -preguntó Ron
¡Ron! -chilló Hermione acercándose amenazadora hacia su novio- ¿Quiénes están en esos grupos?
Pues... los mejores del ED... -dijo Ron cayendo en cuenta...
¿Y aparte de ellos? -insitió Hermione, pero esta vez fue Ginny quien contestó.
¡Claro! ¡Los que tienen potencial! Si no mira a las Windbag, y Dennis Creevy...
Y hemos estado haciéndolo sin darnos cuenta...
Por eso no todos los miembros del ED enseñaban... -dijo Neville desde su rincón- Y por eso algunos seguimos recibiendo clases...
Y por eso las reuniones del ED original, menos las desertoras (Ahora se referían a Cho Chang y a Marieta Edgecombe de esa manera) eran aparte... -dijo Ron
Claro que sí...
Harry, que había permanecido en silencio hasta el momento, pensaba en lo que Remus le había dicho hace meses... "hablaré con Dumbledore para ver si les enseño Legeremancia" Harry no se paró a pensar en ese momento, pero ahora tomaba sentido, la página 345 del libro que le había regalado Remus, en el que estaba subrayada la frase: "El arte de sumergirse en los pensamientos, sentimientos y recuerdos de la mente humana."
Bueno, señor callado, ¿tú que opinas? -le preguntó Ginny mientras, dos horas después, bajaban a cenar.
Pues, que bueno que al fin nos tomen en cuenta -dijo con falso entusiasmo. Espero que podamos ser útiles...
Harry, ese cuento barato se lo cuentas a tu abuela A mí no me engañas
¿Eh? -dijo Harry, ligeramente sonrojado.
Harry, no te hagas... tú no quieres que vayamos -se puso delante de él para que la mirara a los ojos- ¿Cierto? -mientras Harry le volteaba la cara ella le ponía la mano en la barbilla y le obligaba a mirarla a los castaños ojos que buscaban confirmación.
No... sí... tienes razón, no quiero que vayan -la presión o sabía Merlín qué hizo que Harry se encontrara de repente abrazando a la pelirroja- No soportaría perderlos -la abrazó aún más fuerte y ella le daba palmaditas en la espalda- a nadie más...
Harry, no... -ella al parecer no tuvo mejor idea que darle un beso en la mejilla- no te dejaremos sólo, tú lo sabes...
Y entonces se fueron caminado en dirección al Gran Comedor. Harry no lo notó, pero Ginny vio a alguien a quien no le gustó esa escena para nada... Cho Chang.
Creo que es suficiente por hoy -dijo Harry jadeando en el suelo del despacho del profesor Lupin.
La verdad es que estaba pensando en aturdirte si te empeñabas en intentarlo una vez más. -dijo este sentado detrás de su escritorio.
Pues, no pude ver nada... eh... ¿Entonces, cuando es la siguiente lección?
¿Te parece el martes? -dijo el licántropo, como tanteando.
No, mejor este jueves... el martes hay luna llena...
Por eso no te preocupes, Harry, es antes del anochecer, además... los experimentos van tan bien que... el mes pasado logré controlar la mente del licántropo.
¿QUÉ QUÉ?
Había pasado un mes desde que habían regresado de vacaciones. Y febrero se abria paso tan lluvioso que las prácticas de Quidditch habían sido casi imposibles. Especialmente porque tenían que compartir con ambas sesiones del ED y el entrenamiento de Dumbledore casi todos los días, y para completarlo, Remus les estaba dando clases a cada uno por separado de legeremancia. Aquella era la segunda sesión y si antes había pensado que la Occlumancia era lo más difícil del mundo (Sin contar a matar a Voldemort y hablar con Ginny que empataban en el primer lugar) era porque no había visto la legeremancia. Aún así estaba contento por ya dominar la primera porque ayudaba en el proceso. Teniendo asesoría después de eso, cualquiera lo estaría. Pero ahora algo había distraído su mente.
Sí, Harry, un accidental descubrimiento, al principio sospechoso, pero luego mas bien productivo, me ha permitido tomar control sobre la mente y psiquis del licántropo
Remus, eso es -Harry, a pesar de estar muy preocupado por los efectos que aquello pudiera tener, se alegró mucho por el último de los amigos de su padre que le quedaba- Genial, es verdaderamente genial.
Sí, y ahora sólo me queda la transformación.
Remus, ándate con cuidado... -le recomendó Harry.
Harry -dijo Remus negando y dándole la espalda para ver la lluvia caer a través del vidrio de la ventana, la cual parecía no tener ganas de parar- es un riesgo calculado. Por más de treinta años he sido un licántropo y realmente me llegué a acostumbré... pero ahora... teniendo semejante oportunidad en mis manos, no la voy a desaprovechar. ¿Entiendes? -dijo volviendo a mirarlo y guiñándole un ojo.
Sí... entiendo -dijo Harry pensando en las cosas para las que quería una oportunidad así.
Jo les había estado enseñando ya a transformarse (Básico en ocultamiento y disfraz). La desilusión la tenían manejada y la capa invisible la sabían usar desde primero. Iban a entrar con las transformaciones, pero como la poción multijugos demoraba en prepararse (Para la cual no necesitaron robar nada ni esconderse en el baño de Myrtle la Llorona.) estaban avanzando con la transmutación humana, la cual era difícil para los chicos, la habían estado viendo de pasada con la Profesora McGonagall.
Así que se transformaban con la varita. Era mucho más difícil de lo que parecía cuando Tonks lo hacía.
Al menos tendremos E en Transformaciones -decía un Ron bastante morocho con rulitos, aunque el cabello seguía rojo por detrás y seguía pecoso.
Ese es el propósito de la asesoría -decía una pálida, guapa y muy rubia (además de bien transformada) Hermione.
Hablen por ustedes -dijo un Harry que parecía Tom Felton pelirrojo (sólo para molestar)- No me puedo deshacer de esta cicatriz...
Y yo sigo sin poder transformar mi nariz... -continuó Neville, algo contrariado.
Pero al menos no revela tu verdadera identidad... -se quejó el ahora pelirrojo.
Vamos, chicos, concéntrense... concéntrense en lo que transforman -les decía Jo paseándose entre ellos con la trenza despeinada-Sé que lo lograrán -le dijo a Harry, aunque sus ojos oscuros miraban no muy convencidos a su cicatriz.
Espero que sí... -contestó el muchacho, comprobando la hora en su reloj -es hora de cenar...
Luego de cenar, seguía el ED. Dispusieron entonces las mesas y se separaron en grupos como siempre. El grupo de Malfoy siempre vigilado por Lupin y Harry. Harry le daba a algunos miembros del antiguo ED, cómo Neville y a otros de primer año, entre los cuales estaban Matilda y Mark Evans. Mientras ellos practicaban, Harry miraba a otros grupos también.
Aquel día parecía que la lluvia se había llevado las ganas de todos, ya que lo estaban haciendo catastróficamente mal, algo raro. A clara excepción de algunos, por supuesto.
Malfoy lo miraba atentamente haciendo que Harry se sintiera excesivamente observado. Malfoy le seguía los pasos muy de cerca, quizás no sería bueno utilizar la Legeremancia hasta que esté listo, pero la occlumancia era la mejor alternativa en ese momento. Sólo en caso de que...
¡AH! -gritó cuando cayó al suelo. Había estado tan concentrado que no había visto cuando Mark Evans había saltado para esquivar el encantamiento de piernas unidas. Encantamiento que le dio a él.
¡Ay no! Ay no, ay no, ay no, ay no... ¡Señor capitán! -chilló la niña de trencitas y zapatillas rosas- Discuuuuuuulpeme, señor capitán, no era para usted...
No te preocupes Matilda -dijo Harry desde el suelo- finite incántatem -se puso de pie mientras el resto del comedor se calmaba la risa.
¡No fue mi intención! -continuaba la niña- ¿Ves? -se dirigió a Mark- Te dije que no te saltaras el encantamiento -volvió dirigirse al "señor Capitán"- lo siento mucho...
Está bien, fue un accidente...
Pero Harry miraba de reojo a Malfoy, quien parecía estar tomando notas mentales a ritmo de secretaria ejecutiva computarizada bilingüe.
Está bien, vamos para allá -dijo el reflejo de Ron desde el espejo de doble sentido de Harry antes de desaparecer. Harry les recordaba que tenían asesoría y que llegaran temprano porque tenía algo que decirles.
Malfoy lo había estado siguiendo y actuando, si era posible, de manera mas extraña. Se lo encontraba en cada esquina o al doblar en un pasillo, lo más extraño fue que esta vez lo había saludado como si fueran compañeros de casa.
Hola, Potter, disculpa, pero tengo algo de prisa, hasta luego -y así sin más se fue. ¡qué rayos había sido eso! Se preguntó Harry. Era como si Hermione se pusiera a decirle a Luna que había encontrado pruebas de la existencia de los Snorkaks de cuerno arrugado y Luna le dijera que estaba loca, que no existían semejantes cosas. Por eso no dudo, al encontrarlo en su bolsillo, que había llegado la hora de estrenar los espejos de doble sentido. Llamó primero a Ron, que se encontraba patrullando (de verdad) los pasillos con Hermione. Luego dudó y terminó llamando también a...
Ginny Weasley -le dijo al espejo. Miró expectante unos momentos a su preocupado reflejo y luego desapareció para darle paso a unos ojos castaños, una nariz con muchas pecas y unas cejas color rojo fuego.
¿Harry? -respondió- ¿Qué sucede?
Ginny, ¿tienes algo que hacer a eso de las cinco? -le preguntó
Pues... hoy es lunes... tengo... ¡nada! -le decían los ojos de la chica mirándolo desde el espejito. -¿Por qué lo preguntas? -sus ojos adquirieron una expresión de duda.
Necesito decirles algo a ti y a Hermione.
Está bien, veré si puedo ir... no te preocupes, que no me saltaré clases -dijo la chica adivinando la expresión de los ojos verdes que la miraban.- es que tenía que studiar con Colin... tú sabes, los TIMOs... -dijo. Harry podía ver que la muchacha, mejor dicho, sus ojos, miraban distraídamente hacia otro lado mientras lo decía... A Harry no le gustó para nada...
Bueno, no me demoraré mucho, tampoco quiero que pierdas tus horas de estudio con... Colin... en fin, nos vemos. -dijo el señor capitán.
¿Estaba celoso? Ese sentiemiento lo recordaba de cuando miraba a Cho Chang de la manito con Cedric Diggory. "No, sólo van a estudiarpara los TIMOs, nada más" pensaba Harry... aunque de veras quería, tenía ganas asesinas de cerrar sus manos alrededor de algpun cuello.
Así que Malfoy... no lo puedo creer -decía Ron, con los ojos más huevos fritos que si hubieran gando la copa los Chuddley Cannons.
¿Y tan idiota es? -preguntó Hermione- ¿No se da cuenta de que así nos damos cuenta más fácil?
Eso es precisamente lo que me preocupa... -dijo Harry.
¿Te refieres a...? -dijo Ginny poniendo la misma cara que su hermano mayor.
¿A que derrepente...? -contoinuó Hermione.
¿Él sí quiere que sospechemos? -terminói Ron.
Elemental, mis queridos Weasley... y Granger... -acertó Harry- Ya no podemos descartar ninguna teoría por la borda, ¿o sí?
No podemos darnos ese lujo.
¡AJÁ! -exclamó una vocecita recién llegada- ¿Conspirando sin llamarme?
Matilda, ¿qué haces aquí? -preguntó Ginny.
¿Yo? -dijo la niña con cara de yo no fui- Nada, Jo me mandó a decirles que la esperaran cinco minutos, que tenía que poner en su lugar a un par de nabos cabezones. -la niña se encogió de hombros- eso es todo, vámonos Mark -le dijo al niño que bajaba corriendo con su mochila de las escaleras de los dormitorios de los chicos- "las papas me gustan en puré".
¿Eh? -dijo el niño, cambiando rápidamente la expresión de "no entendí ni jota" a "avísame antes"- ¡Ah, sí! Vámonos. -y salieron por el agujero del retrato.
Esos dos traman algo... -musitó Hermione ceñuda.
Esos dos SIEMPRE traman algo -dijo Ron acxercándose a su novia y poniéndole el dedo pulgar en la frente para que relajara el ceño.
Lo que yo quiero saber -interrumpió Harry antes que sus amigos se pusieran melosos- es que trama Malfoy...
¡AJÁ, ¿así que el nabo cabezón vuelve al ataque? -dijo otra voz, muy parecida a la anterior, recién llegada.
Jo, hola, casi lo olvido, -dijo Harry recuperando la nota mental perdida por meses en su cabeza de alfalfa- hallaron nuevos mortífagos, la Orden cree que son los hijos de los mortífagos que están todavía en Azkaban... Y no están muy bnien entrenados.
¿Qué? -dijo la muchacha de la trenza larga y a medio desarmar- lo sabía, te lo dije, ¿recuerdas? y yo quitándole puntos... derechito a Azkaban los debería enviar.
Sólo por curiosidad... ¿A quién castigaste? -preguntó Hermione.
¬¬ A Malfoy. -contestó la muchacha poniendo cara de "ajjjj, acabo de ensuciar mi zapatilla nueva pisando un bicho asqueroso"- ¿Por?
No, por nada... -contestó Harry.
La aplastante victoria de 500 a 150 que le impuso Gryffindor a Hufflepuff en cinco emocionates horas de una mañana de sábado a fines de febrero, dejó a los leones a la cabeza de la copa de Quidditch y la copa de las casas. También significaba que Harry se enfrentaría a Cho Chang en el último partido de la temporada (sin mencionar que sería el último partido de Cho Chang vistiendo la túnica azul y cobre). La chica, en definitiva opinión profesional de Harry, estaba fuera de forma. El capitán de los rojos con dorado la había estado observando y cada vez jugaba peor.. Por otro lado, eran cada vez más los alumnos de Ravenclaw, Hufflepuff y Slytherin (en especial las chicas) que miraban mal a nuestor buscador. Esto se incrementaba cada vez qe andaba con Hermione, o hablando con Ginny mientras vigilaban a Matilda, o cuando vigilaba a la niña de trencitas graciosas él sólo, o haciéndole preguntas a Jo, o en general, cada vez que se le veía acompañado de alguien que usara faldas. No hará falta decirles que a Harry no le gustaba este asunto en lo absoluto.
Una tarde de inicios de Marzo, Harry se acercaba al Gran Comedor conversando con Hermione y Jo sobre la última clase de Defensa Contra las Artes oscuras (varios Ravenclaws y Hufflepufs que por allí pasaban le miraron con caras de "¿Entonces es verdad que se alucina árabe con arem?") Cuando se oyó un alboroto que venía del piso de arriba. Ellas, como prefecta y premio anual, respectivamnete, corrieron a ver,aunque el característico olor a bomba fétida de Dudley cuando acaba de atragantarse con tres kilos de frejoles le dio una idea muy aproximada de quién podría haber sido. Harry entonces, siguió su camino hacia el comedor, esta vez sólo, aunque...
Malfoy andaba cerca. lo miraba disimuladamente. A Harry no le gustaba que Malfoy le mirara así. Derrepente el chico-hurón empezó a acercarse a harry, el cual ya tenía la varita lista dentro de su túnica en menos de una milésima de segundo (un reflejo adquirido gracias al Quidditch y los entrenamientos de Dumbledore). Pero entonces Ginny se cruzó en el camino, venía del comedor con cara algo contrariada. Harry se preocupó aún más al verle la cara, aunque... el cabello se balanceaba detrás de ella de un lado al otro mientras andaba y los últimos rayos de sol de aquella tarde de Marzo le arrancaba reflejos, al igual que a sus ojos... y sus pecas que la hacían ver tan linda... si eso no era magia, entonces nada de lo que le enseñaban en Hogwarts valía la pena... ella le empezó a hablar, pero él estaba tan concentrado mirándole que la pelirroja tuvo que sacarlo de sus ensoñaciones con una palmada cerca de los ojos.
¿Harry? -le dijo la chiquilla- ¿Oíste lo que te dije? Ya averigüé lo que anda diciendo Cho Chang, creo que deberías ir a hablar con ella, esto no está bien.
Tenía razón, toditita la ra... un segundo. ¿Hablar con Cho? No era que ya no la soportara, pero... últimamente más parecía una niñita caprichosa, lanzando las más desagradables indirectas e inventando mentiras dignas de Rita Skeeter. La más ridícula de todas, y que sorprendentemente el resto del colegio creía, era que andaba saliendo con Hermione, Ginny, Jo, Matilda, Parvati, Lavender y la Profesora McGonagall a la vez, además qde una ex alumna de pelo rosado con la que se veía en vacaciones (Harry asumió que había visto a Tonks en alguna de sus idas y venida en el tren o por la Orden). Por supuesto, Dean sabía que Harry no andaba con Lavender, Seamus sabía que no andaba con Parvati, Ron sabía que no andaba ni con Hermione ni Ginny, y todos los Gryffyndors sabían que no andaba ni con las Windbag, ni mucho menos con McGonagall. "No, gracias, que mantenga su distancia... ¿Qué hace Malfoy mirando...?" se decía el chico mentalmente.
Ginny, no, no creo que sea una buena idea... -dijo el chico, suplicante...
Harry, es la única forma de solucionar las cosas de raíz... a menos que no quieras...
Malfoy miraba de Harry a Ginny, de Ginny a harry y de Harry a una persona que salía del comedor...
Pero va a llorar... -suplicó Harry por última vez.
Ahí viene -dijo la chica pelirroja sin hacerle caso- suerte -y le dió un rápido beso en la mejilla. Malfoy parecía secretaria ejecutiva especialmente eficiente luego de una costosa manicura, con las notas mentales. Sonreía. Cho venía con cara de "acabo de ver como se le sale el palsma a la cucaracha que acabo de pisar". Por otro lado, pensó bambi junior, Ginny tenía razón, había que aclarar el asuntito.
Cho, ¿puedo hablar contigo?- le dijo el muchachito que tenía los cabellos de la coronilla en punta- ¿a solas? -malfoy seguía dando vueltas como la mosaca cuando se acerca a la...
Sí, claro... -soltó la muchacha tratando de poner expresión de "no me importa, pero ya que no tengo nada que hacer..." aunque Harry pudo adivinar que estaba de cierto modo complacida.(Efecto de los entrenamientos de Legeremancia, pensó el chico).
Entonces harry tomó un pasadizo de los que había visto en el mapa del merodeador, que lo llevaba directamente del vestíbulo a la lechucería.
Vaya, no conocía este pasadizo... -comentó la chica algo sorprendida.
Ajá -soltó Harry. Mientras más rápido acabaran, mejor.- Ven. -le indicó la salida y ella se le pegó bastante. Harry se sentía incómodo como no se había sentido en muicho. Aunque al menos se habían deshgecho de Malfoy.
Bueno, Harry -dijo la chica apartándose un mechón del lacio cabello negro del rostro y colocándoselo detrás de la oreja- dime que sucede.
Eso mismo me pregunto yo -dijo el hijo de Cornamenta sinceramente y mirándola a los ojos.- ¿Por qué le andas diciendo a todo el mundo estupideces como que ando con todas las chicas de Gryffindor a la vez? -dijo sin rodeos, cruzando los brazos.
Ah... eh... uh... oh... -tartamudeaba la susodicha.
¿Y? ¿Y bien? -inquirió Harryque quería salir de ahí corriendo.
Pues... bueno, yo... -se mordió el labio- pues yo... ta... todavía me gustas, Harry. -dijo como si tal cosa- y... pues no soporto verte todo el tiempo con tus amigas las prefectas por ahí. -sus ojos empezaban a parpadear como si le picaran... no, ¿no lloraría, oh sí?
Ese no es motivo para hacer semejante cosa. -reclamó indignado el ex de la manguera humana.
¡Lo sé! Me dejé llevar un poquito. -Harry levantó una ceja con la expresión facial de un entrenador militar- Está bien, me dejé llevar demasiado. -corrigió la manguera humana a regañadientes.- pero, es que pensé... que si llamaba tu... tu atención... quizás lo podríamos... tú sabes... volver a intentar...
Lo siento, Cho -lo mejor era ser sincero. Esto de tratar con las chicas era demasiado difícil.- pero... -suspiró- a mi... ami ya no me pasa nada contigo... lo lamento, pero es así.
Pe-pero... ¡Harry! -insistió la chica con las lágrimas a punto.
¡Por favor! No llores, te lo pido -Harry ya estaba vacunado contra el síndrome de manguerits crónica- lo siento, pero no puedo hacer nada contra ello.
Pero... Harry... ¿no me puedes dar otra oportunidad? -insistió ella pasándose los dedos por los lacrimales de sus oscuros ojos.
No, no lo creo, no funcionará, Cho, ya no siento nada por tí. -dijo el muchacho firmemente empujando con la llema del dedo índice derecho el puente de sus anteojos hacia arriba.
¡Claro! -chilló derrepente la chica del apellido oriental- Siempre fue por hermione Granger, ¿verdad? No me negarás que andas saliendo con ella ¿O sí?
¿QUIERES-PARAR-CON-ESO? -Su paciencia estaba al borde- ella es mi amiga, casi una hermana para mí, no siento nada más que eso por ella- su tono de voz comenzó a elevarse, es decir que casi estaba gritando- Y NI SIQUIERA SÉ PARA QUÉ TE EXPLICO ESTO SI AL FINAL VAS A ANDAR INVENTANDO QUE LAS ENGAÑO A TODAS CON EL CALAMAR GIGANTE -Cho retrocedía a cada palabra que el chico, exsasperado, soltaba.- Perdóname por gritar. Yo sólo quería aclarar las cosas de manera pacífica -dijo bajando la voz al ver en la cara de Cho "Transtornado y peligroso" el título que había dado origen el año anterior a los chismes de que estaba loco de remate. Entonces recordé que estaba en plan de llevar las cosas de forma más ligera para que sus cargas no lo atormentara... además estaba la occlumancia.- pero tú no me dejas... así que, haz lo que te plazca... -se dió la vuelta y se dirigió a la puerta. Tenía la mano en el pomo cuando la muchachita lo llamó.
Harry, espera... -harry volteó la cabeza- Harr, yo... lo siento. Lamento haber actuado como una niñita caprichosa e ingreída, no te molestes por favor... -lo miró y le extendió la mano- ¿Amigos? -preguntó Cho como quien quiere retener el agua entre los dedos.
Harry la vió y le pareció que se sentía bastante humillada... quizás era lo mejor...
Amigos -le estrechó la mano.
Harry salió por la puert y dejóo adentro a la muchacha, que había dicho que aprovecharía para enviarle una lechuza a su madre. Iba caminado y por uno de los pasillos transversos vió una cabellera rubia sobre un uniforme de Slytherin que corría en dirección a las mazmorras...
Travesura realizada -dijo Harry dirigiéndose a Ginny, la cal tenía cara de "al fin llegaste, estos dos melosos me tienen de violinista hace más de media hora, y me aburro a morir...". "¿Legeremancia?" se preguntó Harry.
¿A qué te refieres? -preguntó Ron como saliendo de un sueño.
Pues... -y Harry se los explicó- Y así que quedamos como "amigos".
Ginny había estado muy silenciosa durante el relato. Hasta se miraba las uñas constantemente. Ron y Hermione enfrentaban una batalla por el cabello de la última. Ron le cogía el cabello y la muchacha se lo apartaba y mientras escuchaban se decían a susurros "déjame el cabello, Ron." "A mi me gusta." "A mi no." "pero..." "shhhh, discúlpa, Harry, te estamos escuchando" porque Harry se los quedaba mirando mitad divertido por la escena y mitad disgustado por la poca atención que le ponían.
¿Eso es todo? -preguntó Ron- ¿no lloró? ¿No amenazó con tirarse al vacío?
Nop, todo fue por la paz...
¿Y de verdad decía que tú y... -tragó saliva y miró a Hermione y luego se empezó a matar de la risa- y ... Mc... McGonagall? Jajajajajajajajajajaja
Eso no se lo iba a preguntar... -intervino Hermionemientras Harry negaba con la cabezaPero... -dijo el pelirrojo algo más serio- de veras creía que tú y Hermione... -parecía no poder con la idea.
Por supuesto que no, Ron, -le dijo su novia abrazándolo y dejándose coger el pelo- es sólo una excusa para hacerse la víctima.
Al menos ya solucionaste ese problema... -dijo la chica que había estado muda.
Sí, al menos... -respondió Harry mirándola, ya que Ron y Hermione estaban dándose un "banquete de babas", como decía Ginny, la verdad es que era algo incómodo estar ahí y que empezaran a hacer ese tipo de cosas con uno mirando...
¡Váyanse a un hotel! -les dijo Ginny algo molesta.
Y entonces -dijo Ron saliendo delos brazos de la prefecta- ¿Harry Potter, el soltero más codiciado, vuelve al ataque?
JA-JA-JA -dijo Harry con el semblante serio- muy gracioso Ronald Weasley. -Harry notó que Ginny tambioén estaba seria. ¿Estaría celosa'
¿Quién será ahora, Eloise Midgeon? -preguntó Ron, al cual su novia le tapó la boca y le susurró al oído "no lo molestes, cariño"
Déjalo en paz, Ronald -dijo Ginny poniéndose de pié sujetando la varita debajo de la túnica y dirigiéndose hacia la mesa donde estudiaba con Colin, quien acababa de llegar.
A partir de ese día, Ginny, a opinión de Harry, estuvo muy rara... "Serán los exámenes" se decía para convencerse.
¡Bien hecho, Colin! -le decía la peliroja al muchacho saliendo de clase de pociones- Ya ves que si pudiste con Snape... tú sigue estudiando que ya verás que logras una S...
No lo sé... -decía el chico- mas bien creo que se equivocó al corregir...
Iban pasando y Ginny apenas si miró a Harry y le dió una rápida sonrisa antes de volver a seguir andando.
"Tengo que impresionarla" Se sorprendió pensando una tarde de fines de Marzo, luego de una sesión práctica de Quidditch especialmente difícil para el partido contra Ravenclaw... "Debo dedicarle la victoria de Gryffindor, tiene que ser una súper atrapada, no, pero eso ya lo he hecho antes, debe ser algo que impacte... algo sorprendente... debo hablar con Hermione, ella sabe de estas cosas..." pensaba mientras se rascaba la cabeza dirigiéndose a la biblioteca luego de haberse bañado, aquella tarde nublada y borrascosa, el clima no parecía querer cambiar.
¿En que piensas? -preguntó la voz que le quitaba el sueño.
¡COF!... en ¡COF!... yo... estaba ¡cof! pensaando en los exámenes... -dijo Harry tratando de sonar natural en medio de tanta tos.
Harry, tienes esa fea tos hace meses... ¿no crees que deberíasir a ver a la Señora Pomfrey? -le dijo la quinceañera.
No... ejem, ejem, no te preocupes... creo que ... me atoré con algo... eso debe haber sido... ya se me pasó... ¿vas a la biblioteca?
Pues... -Ginny se encogió de hombros- sí, qué remedio... los exámenes se me vienen encima...
Sí, pero los pasarás, no te preocupes, eres inteligente, y brillante... -¡Qué rayos! ¿Estaba coqueteando con ella?
Sí, ajá, pero no me debo confiar... -dijo la chica como tratando de hacerlo sonar indiferente con las mejillas ligeramente sonrosadas.- ¿Qué demonios...?
Crabbe y Goyle estaban haciendo desaparecer en un "¡PUFF!" al cuy de matilda, la cual estaba tan pálida y quieta como una estatua, cvon los ojos muy abiertos. Harry y Ginny empezaron a correr hacia la escena con las varitas listas pero los abusivos se echaron a correr, no sin que antes Ginny les gritara "¡VEITNE PUNTOS MENOS PARA SLYTHERIN POR MALTRATO A UNA ALUMNA!". Llegaron a dinde estaba la niña, a la cual le corrían las lágrimas por el pequeño rostro, pero no eran rabias de temor o pena, si no de rencor...
Matilda, ¿qué pasó? ¿No estaba Mark contigo? - preguntó Ginny, la profesora McGonagall todavía no le había levantado los turnos para cuidarla... como toda la casa le había tomado cariño, se encargaban de no dejarla solita en ningún momento, aunque la mayor parte del tiempo era Mark Evans el que se encargaba de la labor.
Le dije que se adelantara... snif... a la biblioteca... snif... -contestó Matilda entre sollozos- y esos... snfi... anbos cabezones grandotototes... snif... me atraparon...
¡¿Qué te hicieron! -preguntó Harry con la sangre que le hervía de cólera, le recordaba a la época en que la banda de Dudley abusaba de él por ser pequeño... ahora estaban en San Bruto.
Pu-pues... snif... se cogieron a mi pequeño cuy... snif... y... snif... lo hicieron dar muchas, muchas vueltas en el aire... snif... y luego... sniflo hicieron ¡PUFF! y esto es... snif... lo que quedó del cuy... -señaló unos pelitos en el suelo y unas hierbitas que parecían alfalfa.
Pero y tú... ¿Estás bien? -le preguntó la pelirroja con preocupación.
Sí, yo si estoy bien, señorita segunda capitana...
No estés triste por tu cuycito...
No estoy triste por mi cuy... -respondió la niña con algo de altivez, mirando a los dos mayores que se encontraban en frente de ella- NADIE SE METE CON MATILDA WINDBAG Y SALE ILESO... además, no importa el cuy. Nos habíamos peleado.
¿No te importa tu cuy? -preguntó harry algo sorprendido recordando que Jo les había dicho que no se metan ni con sus zapatillas rosadas, ni con sus trencitas, ni con su cuy.
No, se había vuelto medio loco ultimamente, por eso estuve fallando en la práctica de hoy, señor capitán -les mostró los dedos llenos de banditas, mordicos y arañazos- Porque últimamente me mordía mucho.
Debiste habérmelo dicho...
No, señor capitán, yo de veritas de veritas quería estar ahí, no como Sloper y Kirke, que se estaban quejando a cada rato...
Harry y Ginny se miraron preocupados, la niña era una verdadera gryffindor.
Ehhh... Tu cumpleaños es en estos días, el sábado, ¿cierto? -preguntó Harry, Ginny lo miró desconcertada.
Sí, señor capitán -dijo la niña con la cara iluminada por un recuerdo más alegre- ¡Cumpliré doce años
Vaya, toda una señorita, hagamos una cosa. Te regalaré una mascota nueva, ¿está bien?
¡UNA VACA! -gritó la niña emocionada.
Ginny y Hary soltaron una carcajada ante la cara perpleja de la "señorita". Al fin, Harry recuperó la compostura y le dijo:
No, Matilda, -le dijo Harry- no puedes meter a una vaca a Hogwarts, pero puede ser una lechuza, un gato o un sapo...
¿En serio? -pregutnó la niña como dudando un poco de tanta amabilidad.
Sipi -respondió harry como le había odio responder a Matilda cuando hablaba con Jo o Mark Evans.
¿De veritas, de veritas?
De veritas de veritas.
¡Entonces Quiero un gato!... no, una lechuza, no, un ga..lechu... ¡AY! no sé que quiero...
¿Qué tal una lechuza? -preguntó Ginny.
No, no lo creo... Jo y yo tenemos una roja muy bonita que se llama Rufino, y Jo me ha dicho que como se vá a los Aurores, me la va a dejar...
¿Y un gato? -preguntó Harry.
No lo sé... ahora que recuerdo, mamá es alérgica a los gatos, así que no creo que me deje tenerlo en casa... además está Fragiadakys...
Fragi... ¿quién?
Fragiadakys, el perrote de Jo, es muuuuy bnito, y es felpudito y es negrito y...
Tal vez Ginny se dio cuenta de que aquella descripción estaba transportando a Harry a un pasado no muy lejano cuando... porque interrumpió a la niña.
¿No queires un sapo, verdad?
U.U no, me dan medio asco... son feos...
Entonces... -aventuró Ginny- que te parece un gatito,pero me lo das para cuidártelo en las vacaciones. ¿Qué me dices a eso?
Es una excelente idea. -dijo Harry, volviendo al presente.
¡YUPIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII! -dijo la de las trencitas saltando de arriba a abajo hacipendolas volar- ¡Es una idea genial!
Está bien, entonces un gato será tuyo el día sábado.
¡Usted es el mejor capitán del mundo! -le dijo la niña- ¿Se lo habían dicho antes?
Sí -dijo mirando de reojo a Ginny recordando la insignia que tenía colgada en la solapa de su túnica de Quidditch.- me lo habían dicho.
Oh... -dijo la niña algo desepcionada por no ser la primera.
Pero es la primera vez que tú me lo dices... -le dijo para consolarla.
¡Sí! -dijo la "futura señorita"- bueno, me voy que mark se va a preocupar por mí... -y se fue dando saltitos de felicidad hacia la biblioteca.
¿Te has encariñado con la niña, no? -le preguntó Ginny mientras se acercaban a la biblioteca caminado lentamente.
Bueno, es muy simpática, ¿no crees? -le contestó Harry.
Sí, es muy simpática.
Además, eh... -Harry se puso nervioso, quizás ese era el momento...- me recuerda a... a... alguien...
¿En serio? -preguntó la muchacha tratando de fingir apatía, aunque harry pudo ver que le saltba el ojo lo cual formuló una pregunta en su cabeza: "¿Estaba Ginny Celosa?"- ¿A quién?
Harry se adelantó un paso con las manos en los bolsillos y dijo- ¡Nah! Olvídalo.
No, vamos, Harry, dímelo... -le insistió la muchacha pelirroja con un signo de interrogación en cada peca.
La curisidad mató al gato -se limitó a responder Harry.
Bien, guarda tus secretos -le dijo molesta.
Bien -respondió harry con media sonrisa.
Bien -dijo la chica aún más molesta.
Como mande mi señora -le dijo con esa voz que le salía de cuando en cuando y haciendo una inclinación ante la damicela, arrancándole una sonrisa.
Payaso. -se limitó a decir.
Es un cumplido para este servil vasallo, mi señora -volvió a hacer una elegante inclinación y le dejo paso para que entrara a la biblioteca.
¡GRACIAS! -gritó una niña con trebzas el sábado por la mañana al recibir una cesta con un gran moño- ¡GRACIAS SEÑOR CAPITÁN Y SEÑORITA SEGUNDA CAPITANA!
Cálmate, Matilda -le dijeron, peo fue inútil, porque la niña estaba demasiado emocionada aquella mañana del 31 de Marzo.
¡GRACIAS! ESTÁ LIIIIIIIIIIINDO -dijo señalando a un gatito bebé negro con ojitos azules- ¡ESPERO QU SEAN FELICES Y QUE CUANDO SE CASEN Y TENGAN HIJITOS, TODOS SE PAREZCAN A MÍ! -y se fue saltando con elpobre gatito con dirección al jardín, dejando a los "futuros padres" con las mandíbulas en el suelo.
¡Plop! -dijo Ginny.
Sí... Dios nos libre de que todos nuestros hijos se parezcan a ella -se sorprendió diciendo el chico de los anteojos, poniéndose automáticamente rojo como un tomate.
Con uno así bastará, dos a lo más, pero no todos... -dijo Ginny siguiéndole el juego, aunque también estaba algo roja.
Los otros siete serán más tranquilitos... -bromeó Harry.
¿SIETE? -dijo la muchacha escandalizada.
Nueve en total... -corrigió el chico.
Más te vale -dijo Ginny poniendo un tono serio por un segundo, pero luego ambos empezaron a reir mientras caminaban hacia los terrenos.
ssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss
Discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme, discúlpenme. Sé que tres semanas ya es un abuso, pero es que el instituto me tiene loca... me encantaría poder decirles que no volverá a suceder, pero... volverá a suceder, pero ya se me acaba el ciclo, chicos, una vez que pasen los finales, pondré cada semana un capi si me es posible. Otra cosa que quiero que sepan es que... ESTE FIC SE ACABA, sí, como lo oyeron, se acaba... no porque ya no quiera escribir, ni porque me aburra, al contrario, he amado cada minuto de este fic, cada palabra, CADA REVIEW, pero ya va llegando la hora de que Harry pase a séptimo año... para eso faltan cinco capítulos. Sí, cinco capítulos. Pero... (siempre hay un pero) me tomaré medio año para acabar mi carrera, dar mi exámen de grado y entonces... pondré una secuela. Sí, Harry en su séptimo año... es algo que empezé a planear poco despues de empezar a planear este fic... y la verdad es que tiene dos finales... eso sí, durante ese medio año, no los dejaré abandonados, porque los quiero mucho, así que iré escribiendo song fics, one shots y otros... para que me sepan extrañar... Y ahora, con ustedes... los reviews...
lizZyd: Ya ves cuanto me he demorado en darme una escapadilla... pero bueno, acá va el capi.
Sandokan: gracias por lo de genial, aquí está el capi
fawques7: Vic, gracias por ponerme tu review, no importa que no me pongas, no ,e n realidad si importa... pero mientras sepas que el fic se sigue poniendo y me hagas saber que lo estás leyendo, no hay problem.
librado: Gracias por entender mi demora, profe, yo sé como uno se desespera cuando no le ponen su fic... pero ahora también sé lo que cuesta poner un fic a tiempo. Harry está pasando los veranos en casa de los Dursley, sólo que esta vez sólo pasó un par de semanas allá. Harry está pasando por una fase de autoajuste. El año anterior, su carácter le trajo muchos problemas. Cuando uno tiene un trauma tal como el que pasó Harry con la muerte de... pues entonces él decidió disfrutar la vida un poco más y tomar más en cuenta los consejos de los demás. Sigue teniendo el carácter, como lo ha visto en este capi. Pero también influye la práctica dela occlumancia. Ginny ha crecido y ya no es la niña calladita... No quiero reivindicar a Percy, quiero que quede mal, porque después voy a utilizarlo para oscuros propósitos generados en mi cabeza... mua jua jua. Cho, como puedes ver, tomo una decisión al final, y ahora te prometo que se va a portar bien en lo que queda del fic. Espero que le haya gustado este capitulín.
CoNnY-B Jajajaja, Si, CLARO QUE ESTOY CONTENTA CON MIS 107 REVIEWS, pero estoy segura que pueden dejárme más... sobretodo los que leen sin dejar rr. Ya ves que no siempre se puede poner los capis a tiempo y TÚ lo sabes...
lizlovegood12 Perú? en dónde? que bueno, una peruana más... vamos creciendo. que buieno que hayas encontrado mi fic, yo que pensaba que estaba perdido en el espacio cibernético... y que bueno que te haya gustado, sigue dejando rr!
vicu-malfoy ¿De un tirón? ni yo he hecho eso... bueno, fics de otros quizás pero no el mío, gracias por tomarte el tiempo... sigue dejando rr y a ver si te gusta el capi...
Maryhttha ¿Cómo es que se eleen todos los capis de una sola? Sí, Harry y Ginny van en el camino, Ron y Hermione, sentí que los estaba dejando ser demasiado herméticos, así que conforme vamos avanzando los voy dejando ser más libres, claro, sin llegar al punto del meloseo excesivo.
Diana Black: No, y con semejante... quien puede... Sí, es un tarado y que no me venga con esas sonseras que no se pone rojo, ya ves que en este capi se ha puesto rojo diez mil veces. y eso de las vías del tren... MUAJUAJUAJUA...
Mary-Tonks Yo tengo mi cuaderno donde escribo todo y luego lo paso a la pc, fue solo un moment de distraccion...
Anonymous : Ya ves que se van a poner en orden pronto
Sacralo : espero que te guste este.
