11. Comparación
- ¿Tú eres bobo?
- ¿Por qué?
- ¿Cómo se te ocurre decírselo así?
- ¿Qué quieres que se lo diga cantando?
- No, pero no sé, desde luego de la manera en que lo se has dicho no. ¿Has avisado a Michael?
- Sí, hace veinte minutos.
Moví la cabeza, estábamos en mi habitación, Draco y Katrina estaban a los pies de mi cama.
-Chicos... no chilléis...
- Cariño... ya estás bien... ¿Cómo te lo has tomado? – dijo Katrina.
Esa era una muy buena pregunta... decididamente el último día del año era muy ajetreado. ¡Y eso que sólo eran las 17.30! Bien pues, a decir verdad todavía no había reaccionado que yo era una llave, yo era una persona, Lindsay Lohan, buena bailarina, la mejor en inglés y castellano y buena actriz. No era ningún tipo de llave ni candado. Pero aparte de haberme desmayado no me lo había tomado del todo mal, después de todo no podía ser una llave, tenía sentimientos, gustos, y un novio... bueno eso ya no tenía, aunque todo lo demás sí.
- Pero... ¿por qué yo?
- No lo sabemos, se lo hemos preguntado al ministerio de magia. Y lo están investigando, buscan algo de tus raíces.
Se abrió la puerta de golpe.
- ¡Cariño! ¿Estás bien? Cuando me llamó Draco me asusté bastante, tenía miedo de que estuvieras mal por algo en particular, o, algo de la comida te hubiera sentado mal...
- Perdona... creo recordar que tú y yo ya no salimos juntos así que paso uno, no me llames cariño, dos, no estoy bien, si no Draco no te habría llamado, y no me sentó mal ninguna comida, me sentó mal, saber que te gusta Katrina, que ella habría cogido la servilleta en otro momento en el que yo la cogí que te habría sonreído cuando me lanzaste un beso, que sus curvas son mejores que las mías, que soy más infantil y te molesta cómo visto y que en realidad estás conmigo sólo porque te parece que estoy buena y que soy "maja". ¡SAL DE ESTA HABITACIÓN!
Katrina, Draco y Michael me miraban, ella miraba a Michael con una mirada inquisidora, Draco se giró y dijo:
- Por eso no estabas nunca en tu casa, tu lechuza tardaba en contestarme, y estabas rara, justo al comenzar el verano. No me dejabas ir a tu casa... ¡estabas con él!
- Sí bueno, pero es que nuestra relación no iba bien y... lo de Michael fueron sólo tres días. Luego él y Lindsay empezaron a salir, una semana después o así.
- Bueno, en realidad me da igual lo que hicieras, aunque no te creía capaz de eso. – Malfoy salió de la habitación.
Yo me levanté y le seguí, dejando solos a Katrina y a Michael. Draco fue corriendo y bajó todas las escaleras de emergencia, yo cogí el ascensor y llegamos a la vez a la planta baja. Chocamos. Draco se fue sin pedirme perdón, ni siquiera estoy segura de que supiera que era yo. Salió afuera en dirección a la playa y no paró hasta que se sentó en la arena.
- Nunca quise afrontarlo, ¿sabes lo que te digo? ¿Has usado la poción de los pensamientos, verdad?
- Sí. Fue un error. Oí todos sus pensamientos, al principio no lo entendía, pero cuando estábamos a punto de hacerlo pensó en ella y me di cuenta. Comparaba todo mi cuerpo con el suyo. Fue espantoso. – Una lágrima resbaló por mi mejilla.
- No llores, no merece la pena, las lágrimas de una mujer nunca son merecidas por un hombre.- Dijo mientras me secaba la lágrima con el dedo. – Yo me lo suponía, aunque me hacía el ciego para no sufrir. Aunque... cuando ya me di cuenta, fue cómo si me clavaran sus palabras como dagas en el corazón. Al principio me hacían gracia, luego me empecé a preocupar, y finalmente como la seguía queriendo pasé por alto ese detalle. Aunque tú desde luego después del numerito que has montado arriba no creo que pases por alto ese detalle.
- Te parecerá una idiotez, y comprendo que no me dejes, pero, ¿puedo apoyar mi cabeza en tus rodillas?
Sonrió, le vi más pálido que nunca, con sus labios finos, pelo rubio revuelto, algunos mechones le llegaban hasta los ojos haciéndole cosquillas en las pestañas, movió la cabeza apartando su pelo.
- Ningún problema.
- Gracias.
Puse mi cabeza sobre sus rodillas, y él empezó a acariciar mi pelo. "Michael es idiota, ¿cómo deja escapar a una tía como esta? Es que es de gilipollas, es preciosa, simpática, bueno como dice él tiene un toque infantil pero eso la hace ser más encantadora y mucho más mona."
- Vaya Malfoy, ¿novia nueva?
Levanté mi cabeza para saber de quién era aquella voz. ¿Cómo podía haber sido tan tonta?
HASTA DENTRO DE 2 SEMANITASSSSSSSSSSS YA TENDRÉ 15 AÑOS... (Q NO SE OS OLVIDE FELICITARME...) JEJEJE
- ¿Tú eres bobo?
- ¿Por qué?
- ¿Cómo se te ocurre decírselo así?
- ¿Qué quieres que se lo diga cantando?
- No, pero no sé, desde luego de la manera en que lo se has dicho no. ¿Has avisado a Michael?
- Sí, hace veinte minutos.
Moví la cabeza, estábamos en mi habitación, Draco y Katrina estaban a los pies de mi cama.
-Chicos... no chilléis...
- Cariño... ya estás bien... ¿Cómo te lo has tomado? – dijo Katrina.
Esa era una muy buena pregunta... decididamente el último día del año era muy ajetreado. ¡Y eso que sólo eran las 17.30! Bien pues, a decir verdad todavía no había reaccionado que yo era una llave, yo era una persona, Lindsay Lohan, buena bailarina, la mejor en inglés y castellano y buena actriz. No era ningún tipo de llave ni candado. Pero aparte de haberme desmayado no me lo había tomado del todo mal, después de todo no podía ser una llave, tenía sentimientos, gustos, y un novio... bueno eso ya no tenía, aunque todo lo demás sí.
- Pero... ¿por qué yo?
- No lo sabemos, se lo hemos preguntado al ministerio de magia. Y lo están investigando, buscan algo de tus raíces.
Se abrió la puerta de golpe.
- ¡Cariño! ¿Estás bien? Cuando me llamó Draco me asusté bastante, tenía miedo de que estuvieras mal por algo en particular, o, algo de la comida te hubiera sentado mal...
- Perdona... creo recordar que tú y yo ya no salimos juntos así que paso uno, no me llames cariño, dos, no estoy bien, si no Draco no te habría llamado, y no me sentó mal ninguna comida, me sentó mal, saber que te gusta Katrina, que ella habría cogido la servilleta en otro momento en el que yo la cogí que te habría sonreído cuando me lanzaste un beso, que sus curvas son mejores que las mías, que soy más infantil y te molesta cómo visto y que en realidad estás conmigo sólo porque te parece que estoy buena y que soy "maja". ¡SAL DE ESTA HABITACIÓN!
Katrina, Draco y Michael me miraban, ella miraba a Michael con una mirada inquisidora, Draco se giró y dijo:
- Por eso no estabas nunca en tu casa, tu lechuza tardaba en contestarme, y estabas rara, justo al comenzar el verano. No me dejabas ir a tu casa... ¡estabas con él!
- Sí bueno, pero es que nuestra relación no iba bien y... lo de Michael fueron sólo tres días. Luego él y Lindsay empezaron a salir, una semana después o así.
- Bueno, en realidad me da igual lo que hicieras, aunque no te creía capaz de eso. – Malfoy salió de la habitación.
Yo me levanté y le seguí, dejando solos a Katrina y a Michael. Draco fue corriendo y bajó todas las escaleras de emergencia, yo cogí el ascensor y llegamos a la vez a la planta baja. Chocamos. Draco se fue sin pedirme perdón, ni siquiera estoy segura de que supiera que era yo. Salió afuera en dirección a la playa y no paró hasta que se sentó en la arena.
- Nunca quise afrontarlo, ¿sabes lo que te digo? ¿Has usado la poción de los pensamientos, verdad?
- Sí. Fue un error. Oí todos sus pensamientos, al principio no lo entendía, pero cuando estábamos a punto de hacerlo pensó en ella y me di cuenta. Comparaba todo mi cuerpo con el suyo. Fue espantoso. – Una lágrima resbaló por mi mejilla.
- No llores, no merece la pena, las lágrimas de una mujer nunca son merecidas por un hombre.- Dijo mientras me secaba la lágrima con el dedo. – Yo me lo suponía, aunque me hacía el ciego para no sufrir. Aunque... cuando ya me di cuenta, fue cómo si me clavaran sus palabras como dagas en el corazón. Al principio me hacían gracia, luego me empecé a preocupar, y finalmente como la seguía queriendo pasé por alto ese detalle. Aunque tú desde luego después del numerito que has montado arriba no creo que pases por alto ese detalle.
- Te parecerá una idiotez, y comprendo que no me dejes, pero, ¿puedo apoyar mi cabeza en tus rodillas?
Sonrió, le vi más pálido que nunca, con sus labios finos, pelo rubio revuelto, algunos mechones le llegaban hasta los ojos haciéndole cosquillas en las pestañas, movió la cabeza apartando su pelo.
- Ningún problema.
- Gracias.
Puse mi cabeza sobre sus rodillas, y él empezó a acariciar mi pelo. "Michael es idiota, ¿cómo deja escapar a una tía como esta? Es que es de gilipollas, es preciosa, simpática, bueno como dice él tiene un toque infantil pero eso la hace ser más encantadora y mucho más mona."
- Vaya Malfoy, ¿novia nueva?
Levanté mi cabeza para saber de quién era aquella voz. ¿Cómo podía haber sido tan tonta?
HASTA DENTRO DE 2 SEMANITASSSSSSSSSSS YA TENDRÉ 15 AÑOS... (Q NO SE OS OLVIDE FELICITARME...) JEJEJE
