Cáp.2 UN NUEVO AMIGO

A la mañana siguiente, Harry se levantó cuando los primeros rayos del sol entraron por su ventana y lo primero que hizo, después de ponerse las gafas, fue mirar a la habitación de las chicas a las cuales veía tumbadas en la cama y durmiendo plácidamente. (N/A: No me extraña, si se quedaron hasta las 5 hablando jijiji) Bajó a desayunar y en la mesa estaban ya sus tíos y su primo.

- Buenos días-dijo nada más entrar.

- Buenos días-le contestaros de mala gana sus tíos, su primo no dijo nada, estaba muy ocupado mirando la tele y comiendo sus huevos fritos con panceta (N/A: Para no variar jejeje).

Se sentó en su silla y se dispuso a comer su desayuno, si es que se podía llamar desayuno al pequeño trozo de panceta que había en su plato.

Cuando terminó subió a su cuarto y, después de arreglarlo, se puso a mirar por la ventana para ver cuando se levantaban las chicas, a la media hora aproximadamente se levantó Marta, la que llamó a Isabel y, una vez estuvieron las dos arregladas las llamó y quedaron que Harry las pasara a buscar para que las dejaran salir.

- Tío, me voy a dar una vuelta con las vecinas, vendré para comer.

- Vale, no llegues tarde o te quedarás sin comer durante el resto de vacaciones.

Toc toc, Harry llamó a la puerta de la casa de las chicas y abrió el padre de Marta:

- Hola, ¿están Marta e Isabel?- preguntó educadamente Harry.

- Hola, tu debes de ser Harry, mucho gusto, yo soy Paco, su padre (N/A: Se entiende que el padre de las dos ¿No?), si, las chicas hablan mucho de ti, sobretodo Marta.

- Papá, cállate un rato ¿quieres?-dijo Marta llegando junto a su padre con las mejillas un poco encendidas; detrás de ella venia Isabel, intentando aguantar la risa, aunque sin mucho éxito.

- Lo siento hija- se disculpó riendo el padre de las chicas-.

- Chica, Marta no te enfades, pero todos sabemos quien te gusta ¿no es así?- dijo Isa mirando a Harry, el cual se sonrojó, aunque no tanto como Marta.

- Si, igual que todos sabemos quien te gusta a ti ¿no Isa?, ¿el nombre de Alberto Costilla te suena de algo?- preguntó Marta con voz de demonio, pero surgió efecto, pues Isa se calló al instante roja como un tomate; ahora eran Marta, Paco y Harry los que reían.

- Bueno, vale ya ¿no?, anda vamonos que se nos va a hacer tarde-dijo Isa intentando cambiar de tema (N/A: Aunque en la realidad también le gusta, no solo lo pongo para hacer líneas, jeje (aiba que me mata), NO ISA NO, NO ME MATES, LAS VERDADES OFENDEN jajajaja).

- Si sí, ahora cambia de tema, bueno vámonos, adiós papá- dijo Marta.

Y los chicos salieron de la casa con destino al parque del día anterior y estuvieron hablando de todo un poco, pero ese día les tocaba hablar a Isa y a Marta, las que contaron su vida en España, por ejemplo, que las dos jugaban al quidditch en el equipo de su colegio y de cazadoras, y que tenían una saeta de hielo 2 cada una; tras mencionar eso de las escobas, Harry se quedó sorprendido, pues no había oído hablar de esa escoba hasta ahora, lo que le pareció extraño, porque allí no la habían sacado todavía, y le dijeron que a la vuelta se la enseñarían, cosa que Harry aceptó gustoso.

Cundo miraron el reloj, ya eran las 2 así que fueron a comer y quedaron a las 4 para ir a ver el centro comercial, pero antes de irse a su casa, Marta le enseñó a Harry su saeta de hielo, el cual, al verla, se quedó anonadado.

Por la tarde fueron al centro comercial, donde Marta iba de un lado a otro mirando ropa que le gustaba, y Harry e Isa la seguían por todos lados, casi se vuelven locos, Isa más de lo que ya estaba (N/A: Si es que eso se puede jejejeje); después de 3 horas yendo de un lado a otro, fueron a una heladería, donde esta vez, fue Marta la que pagó.

A las 7:30 se fueron hacia casa y cuando llegaron eran las 8:00, así que las chicas invitaron a Harry a entrar a la casa y los padres de las chicas le dijeron que se quedara a cenar y a dormir, cosa que las chicas afirmaron de inmediato:

- Sisisisisisisisisi, quédate Harry – dijo Marta entusiasmada, Isa la ayudó diciendo lo mismo.

- Por mi si, pero les tengo que decir a mis tíos.

- Seguro que no les importa, por librarse de ti, son capaces de dejar que te vengas aquí a vivir.- dijo Isa riendo, Marta también rió, junto con Harry.

- Pues sí, tienes razón, pero voy a preguntar no sea que me maten como llegue mañana por la mañana, jejeje.

- Tranquilo cariño, ya hemos hablado nosotros con ellos y están de acuerdo- dijo Tere, la madre de las chicas.

- Entonces vale- dijo contento, las chicas se abrazaron gritando y riendo diciendo algo en castellano, cosa que Harry no entendió: (N/A: lo que esté entre comillas es castellano, ya que se supone que con Harry hablan en inglés)

- "Cuando se enteren las chicas de que hemos dormido con Harry Potter no se lo van a creer, se van a morir de envidia, jajajaja."

- "Chicas, nada de hablar castellano cuando Harry esté presente"-les reprendió su padre.

- "Si papá, pero es que no queríamos que Harry se enterara, aunque tu también lo has hecho."- dijo Marta otra vez en castellano.

- Bueno vale ya- intervino Tere ya en inglés- vamos a la mesa que la cena ya está.

Tras acabar de cenar, subieron al cuarto de las chicas, donde con ayuda de Harry, sacaron una cama de debajo de otra (N/A: Un canguro creo que se llama ¿No? Esa cama que debajo tiene otra), para que Harry pudiera dormir, si es que lo hicieron porque se pegaron toda la noche hablando, total que cuando amaneció, Harry ya se sabía la vida de las chicas. Se durmieron a las 7 de la mañana, así que a las 14:00, Harry fue el 1º en levantarse mientras Isa y Marta seguían durmiendo.

Bajó a la cocina después de arreglarse y se encontró a Tere haciendo la comida:

- Buenos días, ¿qué tal has dormido? – preguntó Tere cuando vio a Harry bajar las escaleras.

- Muy bien – respondió Harry - ¿y usted? – preguntó

- muy bien también, gracias.- respondió Tere- y no me trates de usted, llámame tía.

En eso bajaron las chicas ya arregladas.

- Buenos días- dijeron las chicas.

- Buenos días guapas ¿Nos vamos? – dice Harry dándoles un beso en la mejilla a cada una.

- OK – contestaron ellas- pero antes tendremos que comer, ¿no? – añade Isa. (N/A: Ui que raro, Isa diciendo de comer, esto pasará a la historia, jejeje. ¡Aiba que me vuelve a matar! Jejeje, que mala soy)

Entonces se dirigen al salón para comer. Al acabar de comer Harry se fue a casa de sus tíos, donde se echó en la cama y, por lo cansado que estaba ya que no había dormido mucho, se durmió al instante.

Pasó una semana y decidieron ir al Callejón Diagon a pasar la tarde. Fueron

mediante polvos Flu desde la casa de las chicas, la cual estaba conectada a la red.

Aparecieron en el Caldero Chorreante, y Harry tuvo que hacer un gran esfuerzo para no caer, pero si no llega a ser por Marta, la cual había ido 1º, que lo cogió, se hubiese caído como siempre.

Caminaron a lo largo del callejón y, cerca de Gringotts (N/A: ¿Se escribe así?, sorry es que no estoy segura de cómo se escribe), vieron una escena que los dejó mudos, (N/A: Recordad que Marta e Isa se saben la vida de Harry de memoria, y conocen a todos sus amigos y enemigos), Crabbe y Goyle le estaban dando una paliza a Draco Malfoy, no se lo creían, pero Marta e Isa fueron las que 1º reaccionaron, lanzando un inmovilus cada una, y dejando a Crabbe y a Goyle inmóviles, se acercaron y ayudaron a Draco a levantarse.

- Hola, yo soy Marta y esta es mi amiga Isabel, somos de España.

- Hola, yo soy Draco, Draco Malfoy.- dijo este con un tono de superioridad.

- Sí sí, ya lo sabemos, no fardes tanto guapo.- dijo Marta un tanto irritada por el tono de voz del chico.

- Tú no eres nadie para darme órdenes, vete a tu país a dar órdenes, su majestad.- dijo Malfoy arrogante.

- Con gusto lo haría si así no te tengo que ver la cara, pero casi me quedo.

- Ah, vale, haz lo que te de la gana.

- Oye, ¿Y a ti por que coño te estaban pegando esos dos gorilas?- dijo esta vez Isa.

- Porque no me quise hacer mortífago.

- ¿Qué?, ¿Cómo que no te quisiste hacer mortífago?- preguntó Harry, hablando por 1ª vez desde que se encontraron con Draco

- Lo que oyes Harry.- Harry se sorprendió de que lo llamara por su nombre- No quise hacerme mortífago porque Voldemort mató a mi madre al no querer unirse a él, entonces me di cuenta de donde me había metido, de que Voldemort me mataría con tal de conseguir sus planes, por eso huí, y por eso me estaban pegando esos dos- agregó Draco señalando a los dos gorilas inmovilizados-. Por cierto chicas, gracias por salvarme, y perdonar por lo de antes, es que estaba furioso de que me pegaran por querer vivir tranquilo. Y Potter, siento todo lo de estos años, yo actuaba según las enseñanzas de mi padre, ¿Podrás perdonarme?

- Por supuesto, Draco- dijo Harry estrechando su mano.

- Yo, por mi parte, también- dijo Marta, Isa asintió con la cabeza.

- Bueno pues entonces, un placer conoceros chicas.

- Lo mismo digo- dijeron Isa y Marta a la vez.

- Bueno Draco, nosotros nos tenemos que ir, que ya son las 20:30 y tenemos que estar en casa a las 21:00- dijo Harry.

- Ok, pues nos vemos en Hogwarts, hasta entonces- se despidió Draco.

- Adiós- dijeron todos.

El mes pasó y llegó el día 30 de julio(N/A: no os contamos todo el mes de julio ya que si contamos todo día a día llegaremos al capítulo 62y aún no habrán entrado en Hogwarts, ¿no creéis?), víspera del cumpleaños de Harry. Marta e Isa salieron temprano de casa y fueron al centro comercial, pero antes les dijeron a sus padres que iban al parque y que si Harry las iba a buscar le dijeran que luego le pasaban a buscar ellas a él.

Caminaron por el centro comercial buscando un buen regalo para Harry. Marta no sabía que le pasaba, pero solo con ver a Harry por la mañana, aunque hubiera tenido una horrible pesadilla, con solo mirar sus ojos esmeralda y una sonrisa en su cara, estaba feliz el resto del día, se dio cuenta de que se había enamorado perdidamente de Harry, pero estaba completamente segura de que Harry seguía enamorado de Cho, pensar en eso le deprimió, Isa lo noto:

- "Marta, ¿Qué te pasa?, de repente te a cambiado la expresión de la cara, ¿Te encuentras bien?"-preguntó preocupada Isa.

- "Si, Isa, no es nada, tranquila"-mintió Marta, pero Isa la conocía bien y la miró incrédula- "Bueno, vale, estaba pensando en Harry: Sabes que en España me gustaba, pero estaban los chicos y me ayudaban a olvidarlo, pero es que aquí no están los chicos para ayudarme a olvidarlo y me he enamorado de él, pero el sigue enamorado de Cho, así que no tengo posibilidad"-diciendo esto a Marta le empezaron a caer lágrimas silenciosas (N/A: Ya me gustaría a mi conocer a Daniel. Buff!!! Jeje)- hecho de menos a Fernando y a Eduardo, ellos siempre me ayudaron cuando estaba mal y me daban ánimos, pero ahora no están, y los necesito más que nunca, Isa, quiero volver a España, quiero volver a Zaragoza, necesito volver a Zaragoza, necesito estar con Fernando y con Edu (N/A: Se entiende que es Eduardo, pero es que si lo escribo completo es muy largo)"- dijo Marta llorando, habían parado y se habían sentado en un banco.

- "Bueno, Marta, mira, ya que no lo puedes tener como novio, por lo menos confórmate con tenerlo como amigo"-dijo Isa intentando calmarla, cosa que funcionó porque Marta se secó las lágrimas y dijo:

- "Tienes razón Isa, muchas gracias"-se secó las lágrimas, le dio un abrazo y un beso en la mejilla (N/A: Se entiende ¿No?), se levantaron y se dispusieron a seguir buscando, en eso estaban cuando llegaron a una joyería, allí encontraron los regalos perfectos, entraron: Isabel le compró un reloj sumergible a 1000 metros (N/A: ¡ALALALALALALALALALA!, YA ME HE PASADO, EN FIN, POR SI SE TIENE QUE VOLVER A METER AL LAGO ¿NO? jejejeje) y Marta le compró un colgante en forma de corazón donde ponía: ' Para Harry con cariño: Marta', con una tarjeta en la que le decían: 'Muchas felicidades Harry, que cumplas muchos más, con muchíííííííííííííííííííííííííímo cariño, tus amigas: Marta e Isabel.'

Una vez salieron del centro comercial, se dirigieron a casa, donde sus padres les dijeron que Harry las había pasado a buscar, así que dejaron los regalos bien escondidos en los cajones de la ropa interior para que no los encontrara si subía a la habitación (N/A: A ver si los encuentra, cualquiera mira en esos cajones jeje) y fueron a buscarlo.

- Hola, Harry-dijeron cuando abrió la puerta- ¿Qué tal?

- Bien-contestó fríamente- he ido al parque y no estabais, ¿Se puede saber donde diantres os habéis metido?

- Hemos ido al centro comercial a comprar tu regalo de cumpleaños- dijo Marta-

- Pero vuestros padres me han dicho que estabais en el parque- replicó como un niño pequeño Harry, riéndose.

- Es que a ellos les hemos dicho que íbamos al parque para que no nos vinieras a buscar y no vieras tus regalos- explicó Isa.

- Ah, vale.- dijo Harry- Bueno, vamos a dar una vuelta.

Se fueron al parque y esta vez fue Harry quien tuvo que pagar los helados, ya que Isa y Marta le obligaron.

- Mira que estáis locas ¿eh?, el otro día os peleabais por pagar y ahora me obligáis a pagar a mí, de verdad que no os entiendo.

- No esperamos que nos entiendas, somos así, tamos locas, ¿Qué quieres que hagamos?-río Marta.

Se sentaron en un banco a comer el helado y, nada mas acabar el suyo Marta, sonó un teléfono, era su móvil, como nadie en Inglaterra tenía su nº tenia que ser de España de modo que habló en castellano.

- "¿Si?"

- "HOLA"-le habló una voz muy conocida para ella y para Isabel, su mejor amiga:

- "¡¡¡¡¡¡KAREN!!!!!! HOLA ¿QUE TAL?"- gritó entusiasmada, Isa, al escuchar Karen se volvió hacia Marta, la cual le sonrió antes de irse al otro lado del parque para hablar.

Después de media hora, llegó Marta y le pasó el móvil a Isa. Harry la llamó:

- Marta... ¿puedo hablar con tigo? Tengo que decirte algo importante- dijo nervioso.

- Si, claro, dime.- contestó esta extrañada por el nerviosismo del chico.

- Verás, es que...

Continuara...

Jeje que malas que somos, os dejamos ahí.

¿Qué le dirá Harry a Marta?, lo sabremos en el próximo capítulo.

Se despiden:

Xiks lokas.