Capítulo 4: "Recuerdos"

- Señorita Granger, el asunto es mas serio de lo que usted piensa - la profesora McGonagall acomoda sus gafas.

- La escucho, profesora...

- Bien... el cuarto que descubrí... me mostró cosas del futuro... cosas muy interesantes...

- ¿Como un giratiempo? - pregunta Hermione.

- Señorita Granger, si mal no recuerdo, usted sabe que los giratiempos solo van al pasado...

- Hay algunos que van al futuro, ¿O no, profesora?

La profesora McGonagall se quito sus gafas, limpiándolas cuidadosamente, y observo a Hermione, la cual sonreía.

- Lo leí en un libro - continua la chica - decía que es cuestión de un hechizo simple...

- Lo olvidaba - dice McGonagall poniéndose las gafas - no hablo con cualquier alumna, sino con la mas inteligente en todo Hogwarts...

Hermione se sonrojo levemente. Siempre le gustaba que los maestros la halagaran, pero que su profesora favorita lo hiciera, era aun mas gratificante.

- ¿Entonces...? - cuestiona Hermione.

- No creo que sea como un giratiempo, aquí yo no podía intervenir, y solo eran imágenes rápidas... no un hecho concreto en si...

- Ya veo...

- Hermione... Quizás esta pregunta le parezca un poco personal, pero realmente necesito saber la respuesta, para saber si lo que vi no esta tan equivocado... ¿A usted le... agrada... el señor Potter?

Hermione se desconcertó con la pregunta, y parpadeo repetidamente, a la vez que sus mejillas tomaban un leve tono rosa.

- C-claro que me agrada... es mi amigo... - contesta nerviosa la chica.

- Parece que no me exprese claramente... me refiero a si siente algo mas por él que amistad...

Hermione se sonrojo totalmente.

- Y-yo...

- Esta bien, no tiene que decírmelo - agrega con una sonrisa la profesora - su rostro me lo dice todo...

Hermione baja la mirada avergonzada.

- No hay razón por la cual debe apenarse, Hermione... es normal que tenga esos sentimientos... pero lamentablemente eso me comprueba que quizás lo que vi en esa habitación pueda suceder...

- ¿Acaso vio algo relacionado con Harry y conmigo...?

La profesora McGonagall asiente.

- El señor Potter la estima mucho, pero... usted sabe que el señor tenebroso volvió, y su relación se hace mas difícil en el futuro...

- ¿Nuestra relación? - Hermione luce confundida.

- Si... usted y el señor Potter....

Hermione de nuevo se sonroja, y la profesora McGonagall sonríe.

- No se preocupe, señorita Granger... Pero parece que las chicas que se enamoran de los Potter, deben sufrir...

Hermione mira a la profesora, confundida.

- ¿Por qué dice eso?

- Lo mismo paso con Lily... Diría que es el destino, pero sabe que aun dudo de esas cosas...

- Eso quiere decir que en el futuro... ¿Harry y yo.... perecemos?

La mirada de la profesora McGonagall se vuelve sombría, y asiente lentamente.

- Hay veces que las cosas no pueden cambiarse... siento que el haber visto todo eso me dio la oportunidad de hacer algo... Usted será la derrota del señor Potter... por el lazo especial que los unirá en el futuro...

- ¿Como paso con los papas de Harry?

- Si... así es...

- Ya veo... ¿Y cual es la solución?

- Hermione... usted corre peligro, mucho mas que el señor Potter...

- ¿Y cual es la solución? - vuelve a preguntar Hermione.

- Que deje Hogwarts.... que no regrese mas...

Hermione se queda helada, sin poder moverse o articular palabra por un momento.

- Entiendo que sea un golpe muy duro, Hermione... pero si quiere salvar al señor Potter... y no solo a él, sino a todo el mundo mágico, debe hacer ese enorme sacrificio.... por el futuro de sus amigos...

Hermione balbuceaba atónita, hasta que por fin encontró las palabras adecuadas.

- P-profesora... no entiendo como el que no vaya a Hogwarts puede evitar todo lo que menciona... no tiene sentido.

- Para mi fue difícil asimilarlo también, y créame, nadie sabe lo que pasara en el futuro, pero no quiero cometer el mismo error dos veces....

- ¿El mismo error?

- La única razón por la que creo en lo que vi, es porque ya me había pasado antes... cuando era asistente de la profesora de transformaciones...

- ¿Cuando los padres de Harry estudiaban en Hogwarts?

La profesora McGonagall asiente.

- Vi lo que podía pasar con Lily, y nunca se lo advertí... esta vez no quiero equivocarme...

- Pero si usted la hubiera advertido, entonces Harry quizás no hubiera nacido.... hubiera cambiado todo, y quizás Voldemort no hubiera sido derrotado - defendía Hermione.

- Si, también por eso me detuve, Albus... es decir, el profesor Dumbledore me hizo ver que quizás eso era para bien.... Pero a diferencia de ese entonces, ustedes morirán antes de que acabe el año escolar en Hogwarts... en el séptimo curso...

Hermione pone una mano en su boca, sorprendida.

- Disculpe... profesora, le creo, pero aun es difícil para mi...

- Lo entiendo.... déjeme decirle que vi demasiadas muertes... entre ellas la mía...

- ¿Qué? ¡Profesora, usted no...!

- No soy inmortal, recuérdelo, señorita Granger, y siempre que los alumnos me necesiten, daré todo por ellos.

- Y.... ¿Si decidiera quedarme... no ir mas a Hogwarts.... que pasaría conmigo?

- Lo mas probable es que siga demostrando magia, aun es una bruja... pero cada verano vendría una persona de mi entera confianza para enseñarle como controlarla.... no prometo que será como haber asistido a Hogwarts, pero al menos no se quedara desamparada...

- No sé que pensar.... - Hermione estaba confundida, y sobretodo, no podía creer nada.

- Le daré tiempo para pensarlo, señorita Granger... Pero entienda mi posición, ¿Cree usted que yo le pediría algo así? Usted es la mejor estudiante de Hogwarts, jamás me atrevería a hacer algo de esta magnitud, apoyada por el profesor Dumbledore, a menos que supiera que realmente esta en peligro.... mas que preocuparme por el señor Potter, me preocupo por usted...

Hermione observo a la profesora McGonagall, la cual lucia preocupada. Es verdad, la profesora siempre estaba ayudándola, e incluso alentándola para ser mejor, si le pedía esto, era realmente grave.

La profesora McGonagall se pone de pie, dirigiéndose a la puerta.

- Mañana volveré, no puedo darle mucho tiempo para pensarlo.... pero espero que logre tomar la decisión que usted considere correcta.

Hermione asintió, y acompaño a la profesora, la cual, al salir, le dirigió una mirada comprensiva, y se alejo.

- ¿Ya se fue tu maestra, Hermi? - se acerca la mamá de la chica.

- Si...

- ¡Que lastima! La íbamos a invitar a comer.... ¿Y que se le ofrecía?

- Que... ¡Quiero estar sola!

- Pero Hermione...

- ¡Déjame sola!

Hermione sube las escaleras a prisa, y se encierra en su habitación, dando un portazo. La mamá de la chica se queda helada, y se dirige a la cocina, donde el señor Granger parece arreglar su material dental.

- ¿Se quedara la profesora a comer? - le pregunta a su esposa.

- No, ya se fue.... pero Hermione se encerró en su cuarto, dice que quiere que la dejemos sola... ¿Crees que haya pasado algo? Que mortificación.... por eso no me gusta que Hermi vaya a una escuela de magos, no sabemos que puede pasar...

- Tranquila, mujer, de seguro Hermione nos explicara después, no debes alarmarte...

- Eso espero.... no se veía bien...

Mientras tanto, en la habitación de Hermione, la chica se había tendido en la cama, llorando desconsoladamente.

¿Como era posible que ella fuera la perdición de Harry? Siempre lo ayudaba.... lo menos que quería era hacerle daño... Lo quería demasiado, para tener el peso de haberle causado algún mal.

Pero no podía creer lo que había escuchado.... era demasiado increíble.... Aunque... ¿Qué ganaba la profesora McGonagall con inventar todas esas historias? Y de hecho todo encajaba.... si los papas de Harry pasaron lo mismo, quizás Harry también estaba predestinado a hacerlo....

¿Y que pasaría si ya no regresaba a Hogwarts? ¡¡Era su vida!! Ser bruja era lo mas maravilloso que le había pasado, todos sus gratos recuerdos son de Hogwarts, donde tiene amigos verdaderos, y donde puede ser 'normal', sin que la juzguen... ¿Debe renunciar a todo eso, solo por Harry, Ron, e incluso la profesora McGonagall? ¿Vale la pena sacrificar su felicidad por ellos?

- Si... si lo valen - murmura Hermione, limpiándose los ojos con fuerza.

Alguien toco a la puerta de la recamara de la chica.

- Hermi, ya esta la comida, baja rápido antes de que se enfríe - se escucho la voz de su madre.

- Si - contesto Hermione, abriendo la puerta y sorprendiendo a su madre.

- ¡Ay, hija! ¡Ya te he dicho que no abras así la puerta!..... ¿¿Qué te pasa, mi cielo?? ¿¿Por qué lloras??

- Se los diré durante la comida, mamá...

- Pero hija...

- Mamá... por favor...

La señora Granger asiente, y ambas bajan lentamente, dirigiéndose al comedor.

- Vaya, ya era hora de que bajaran, me muero de hambre - dice el señor Granger, feliz - ¿Qué pasa, Hermione? ¿Ocurre algo malo?

- Debo hablar con ustedes....

- Bien, te escuchamos - alienta la señora Granger.

- Esta bien.... creo que esto les amargara la comida...

Hermione comienza con el relato, diciéndole todos los detalles que la profesora McGonagall le dijo. Había pensado en como ocultar el hecho de que le gustaba Harry, pero no podía evitarlo, era la base de todo.

La mamá de Hermione exclamo sorprendida varias veces, siendo apoyada por su esposo. Cuando Hermione termino, no pudo evitar que las lagrimas corrieran por su rostro, siendo observada con pena por sus padres.

- Y eso es lo que pasa... - dice Hermione, finalizando.

- Bueno... no sé que decir, hija... no te había visto tan feliz desde que asistes a Hogwarts... antes no sonreías, y siempre estabas encerrada en tu habitación leyendo libros...

- Nadie me aceptaba como era - reclama Hermione - todos se burlaban de mi siempre... en Hogwarts encontré amigos verdaderos...

- Lo entendemos, hija, pero la profesora te lo dijo por tu bien - recalca el señor Granger.

- Lo sé, papá, y por eso he decidido no asistir mas a Hogwarts... Aunque ni Harry ni Ron entiendan la situación, los amigos siempre buscaran cuidarse como sea.... Harry me ha protegido estos cuatro años, y es mi turno de protegerlo a él...

- En realidad quieres mucho a ese chico, ¿Verdad hija? - dice la señora Granger, en un tono pícaro.

Hermione se sonroja totalmente.

- B-bueno... también a Ron... y a Ginny.... todos me importan mucho...

- Claro - agrega el señor Granger con una sonrisa - todos....

El señor Granger guiña un ojo a su hija, y Hermione baja la mirada avergonzada.

- Estas segura, ¿Verdad, hija?

Hermione asiente, triste.

- Entonces te apoyaremos.... tus decisiones siempre han sido las correctas, cariño, y esta vez no será la excepción...

- Eso espero papá...

El día paso demasiado rápido, desde el punto de vista de Hermione. Y aun así, no pudo dejar de llorar en toda la noche. Estaba renunciando a lo mas querido para ella, y no era fácil... lo hacía por el bien de todos, pero aun así dolía... dolía mucho.

Cuando menos lo espero, su madre le anunciaba que la profesora McGonagall la esperaba en la sala.

- Enseguida bajo, mamá...

- No la hagas esperar mucho, hija...

- No...

Hermione se mira detenidamente al espejo. Es un desastre total, tiene los ojos hinchados, y su cabello mas alborotado de lo normal. Trata de poner un poco de orden en su rostro, sin conseguirlo. Resignada, decide bajar de una buena vez, no tiene caso posponerlo mas.

- Señorita Granger.... veo que ha pasado una noche terrible - afirma la profesora McGonagall viéndola detenidamente.

Hermione asiente lentamente, y toma asiento frente a la profesora.

- Disculpe mi rudeza, Hermione, pero, ¿Qué ha decidido?

- He decidido...

Hermione dio un gran suspiro, y apretó los puños para contener las lagrimas.

- He decidido que no regresare a Hogwarts....

La profesora McGonagall, el lugar de lucir feliz, solo desvía la mirada.

- Ya veo....

- Profesora.... ¿Que pasa? Creí que eso quería que decidiera...

- No, Hermione, yo no quería que decidiera nada, no me alegra, porque usted es alguien muy valioso en Hogwarts, pero el bien de todos depende de eso.... y no queda otra salida mas que la resignación, ¿No cree?

- Si... supongo que si...

- En ese caso, iré enseguida a avisarle al profesor Dumbledore.... debemos comenzar a trabajar en todo para que este bien cuidada...

- ¿Bien cuidada?

- Mientras yo sea subdirectora de Hogwarts, a usted nadie le tocara ni un solo cabello, de eso me encargo yo.

Hermione parecía no entender.

- Mortífagos querrán acosarla, señorita Granger, y eso no podemos permitirlo... Bueno, será mejor que me vaya de una vez...

La profesora McGonagall se pone de pie, dirigiéndose a la puerta. Hermione la sigue cabizbaja, conteniendo las lagrimas.

- Señorita Granger.... le prometo que nadie hará nada en contra de su familia.... Usted es como una hija para mi, ya que no voy a darle clases en el futuro, no creo inapropiado decírselo, me encargare de que usted este a salvo siempre....

La profesora tenía los ojos llorosos, y Hermione, sin poder contenerse, corre a abrazar a la profesora, sin contener por mas tiempo sus lagrimas. La profesora McGonagall corresponde al abrazo, llorando también.

- Gracias, usted siempre será mi profesora favorita...

- Eso espero - murmura McGonagall con voz ahogada.

Al separarse, Hermione y la profesora sonríen.

- Una pregunta mas, profesora.... ¿Puedo decirles personalmente a Harry y a Ron sobre.... mi decisión?

- No veo ningún inconveniente en eso... solo que no debe decirle los motivos, podría cambiar el futuro...

- Si, entiendo.... Adiós... profesora...

- Hasta luego, señorita Granger...

La profesora se pone su capa, y sonríe a Hermione, antes de alejarse.

- Hasta luego.... - murmura Hermione, cerrando la puerta.

******

- ¡HERMIONE! - grita Ron, desesperado.

- ¿Qué?

- ¡Otra vez te quedaste como ida! ¿Ya nos vas a contar o que?

- ¡Oh, lo siento! - se disculpa Hermione. No se había dado cuenta de que todos estaban esperando que contara la historia.

Hermione comenzó con la historia, sin obviar nada, solo observando a Ginny y a Harry de vez en cuando. Le daba demasiada vergüenza, pero ahora que eran esposos, ya no había nada que temer.

El que no lucía nada feliz era Ron. Continuamente estaba apretando los puños y mordiéndose el labio inferior, quizás para evitar decir alguna tontería, o solo para detener la furia que sentía contra Harry.

- Y eso fue lo que paso - dice Hermione, completamente roja.

- Ya veo... - dice agudamente Ginny - así que te querías quedar con mi esposo, ¿Eh, Hermione? - bromea la chica, haciendo que Hermione sonría.

- ¡Ginny! - regaña Harry - no hagas que Hermione se apene mas de lo que ya esta...

- No seas modesto, cariño - responde Ginny picaramente - siempre fuiste un rompecorazones en Hogwarts.... Era raro que Hermione no hubiera caído también en tus redes.

Todos sonríen, excepto Ron, que tenia la furia contenida.

- No es gracioso - dice al fin.

- ¿Qué no es gracioso, Ron? - pregunta Ginny.

- ¡ESO! ¡No sé como le pueden dar tan poca importancia!

- El que le da demasiada importancia eres tu, hermanito - contesta Ginny de mala manera.

- ¡No lo hago! ¡Tu eres una tonta!

- Escucha, Ron, no vamos a dejar amargarnos por cosas del pasado - le aclara Ginny.

- ¡Es que...! - Ron parece no tener mas argumentos - ¡Voy por un vaso de agua!

Ron se levanta molesto, y se dirige a la cocina, dejando a todos perplejos.

- Quizás hice mal en decirles todo - se lamenta Hermione.

- No digas eso, Hermione - la reconforta Ginny - es mejor saberlo, porque también tu sufriste, no te arrepientas de haber sido sincera solo porque mi hermano es un cretino.

- Iré a hablar con él - dice Harry.

- No, será mejor que yo vaya - se ofrece Hermione.

Harry asiente, y Hermione se dirige a la cocina, dejando a Harry y a Ginny solos. Al llegar a la cocina, Hermione no ve a Ron por ninguna parte, y logra divisarlo afuera, sentado bajo un árbol.

Suspirando, la chica sale y se acerca al pelirrojo, que solo la mira indiferente.

- ¿Qué pasa, Ron? - pregunta Hermione, sentándose a su lado.

- Nada.

- No mientas, te conozco muy bien, estas molesto.... ¿Por qué?

- ¿Por eso dejaste Hogwarts? ¿Por que amabas a Harry? - pregunta Ron, conteniendo la ira.

- Bueno... yo no diría que era amor.... quizás en el futuro mi cariño hacia el se hubiera convertido en ese lazo tan fuerte...

- ¿Todavía lo quieres?

Hermione observa a Ron detenidamente.

- Claro que si... siempre lo voy a querer, Ron, es mi amigo...

- No me refiero a eso - contesta Ron con impaciencia - me refiero a si todavía lo quieres.... románticamente...

Hermione pone una mano en su mejilla, apoyándose en ella, y observa al frente.

- No... creo que no.... Cuando lo vi, sentí un vacío en mi estomago, pero cuando observe que feliz era con Ginny, me embargo también una felicidad... como si hubiera sabido que mi sacrificio valió la pena, y todo había salido como la profesora McGonagall y yo esperábamos...

Ron parece tranquilizarse, pero aun tenia su mirada triste.

- Era de esperarse... - murmura Ron.

- ¿Era de esperarse que, Ron? - pregunta Hermione curiosa.

- Que nunca..... que nunca te fijaras en alguien como yo...

- ¿Qué? ¿Por que dices eso?

- Nadie puede compararse con Harry, es un héroe... Los demás solo somos pobres diablos...

- ¡Ay, Ron! - Hermione utiliza un tono duro - jamás debes subestimarte, si alguien te va a querer, es por lo que eres, y no por quien puedas llegar a parecerte. Aquella que no aprecie tus enormes cualidades, entonces no te merece...

- ¿Cualidades? - ron sonríe sarcástico - ¿Cuales, si se pueden saber?

- Eres muy lindo, y valiente... además de gracioso, y muy inteligente.... cualquiera sería afortunada con un chico como tu a su lado - sonríe Hermione.

- ¿En serio lo crees?

- ¡Por supuesto!

- Q-que bueno... porque yo.... Hermione, tu.... desde que estábamos en Hogwarts creo que yo...

- ¿Tu que?

- Y-yo... yo siento.... creo que estoy enamo....

- ¡¡CHICOS!! - grita Ginny, interrumpiendo a Ron - ¡Será mejor que entren, parece que lloverá!

- Ginny tiene razón - afirma Hermione - entremos...

- Si - afirma Ron, un poco decepcionado.

Una vez que los dos se ponen de pie, Hermione mira interrogante a Ron.

- ¿Y que ibas a decirme?

- Esteee.... nada....

Ron se sonroja, y Hermione se adelanta a entrar a la casa, mientras Ron la observa fijamente.

- Aun hay tiempo para decirlo.... tenemos todo un futuro por delante, volviste a mi de nuevo, y ahora no te dejare ir - murmura el chico, caminando lentamente.

Una vez dentro, todos cenan felices, platicando cosas de Hogwarts, y recordando los viejos tiempos.

- ¡Cielos! - exclama Hermione sorprendida - ¡Ya es muy tarde!

- Es verdad, el tiempo se ha ido volando -afirma Harry.

- Será mejor que me vaya - apremia Hermione, levantándose - no me gusta andar sola en el mundo muggle tan noche...

- Yo te acompaño - se ofrece Ron.

- ¿Seguro? - pregunta Hermione.

- Claro que si, yo te traje, yo te llevo.

- Esta bien, gracias Ron..

- Si... gracias Ron - dice Ginny picaramente.

- Cállate, Ginny ¬¬

- Bien, entonces no los detenemos mas, Hermione, espero que nos visites seguido, ahora que ya no hay nada que temer.

- Me encantaría, gracias Harry... nos vemos Ginny...

- Cuídate, Hermione, y regresa pronto, necesito una chica con quien platicar, estoy rodeada de hombres, y eso es aburrido - afirma Ginny, en un lamento.

- No te preocupes, lo haré -sonríe Hermione.

- Bien, bien, bien.... andando...

Para sorpresa de Hermione, Ron se dirige a la puerta.

- ¿No nos iremos con polvos flu? - pregunta la chica.

- No, me parece que te gustara ver el paisaje mientras llueve...

- Si, es muy romántico - afirma Ginny.

- ¬¬... ¡GINNY! - regaña Ron, sonrojándose.

- Esta bien - se encoge de hombros Hermione - si tu lo dices...

Ron saca su varita, y aparece un enorme paraguas con colores brillantes.

- Ron...

- ¿Qué ocurre, Hermione?

- Esa es una sombrilla para el sol.... es muy delgada, y nos mojaríamos ^^ - sonríe la chica.

Ron se sonroja.

- Déjamelo a mi - dice Hermione, tomando la varita de Ron.

La chica hace unos movimientos, y aparece un paraguas negro.

- Listo...

- Vaya, si que te enseñaron bien en el verano - dice Harry sorprendido.

- Al menos lo intentaron....

Ron espera que Hermione se despida de Harry y Ginny, y ambos salen caminando cubriéndose con el paraguas.

- Hacen muy bonita pareja, ¿No crees? - afirma Ginny, viéndolos alejarse.

- Si... afirma Harry.

- Harry.... ¿Qué crees que hubiera pasado si Hermione y tu hubieran terminado juntos?

Harry observa a Ginny, sorprendido.

- Por algo no se dan las cosas, amor, además.... yo no podría imaginar mi futuro sin ti...

- Yo tampoco...

Ginny y Harry se abrazan tiernamente, mientras observan a Ron y a Hermione alejándose.