Todos observan a Misel, la cual solo chasquea la lengua, al parecer buscando una manera de empezar.
- Madre - interrumpe Alix, ¿Se puede saber que tramas? ¿Y por qué todos parecen estar enterados de algo?
- Te voy a pedir, hijita, que aunque me odies, trates de aceptar las cosas, y no cerrarte...
Alix suspira.
- Sabes bien que no te odio....
- Pero quieres evitar a Sheila el sufrimiento que tu tuviste... bla, bla... mira, una vez que explique esto, podrás decir lo que quieras.
- Madre, esto me puede costar el trabajo
- Prima, relájate, verás que saldrás ganando.
Alix mira a Elian con duda.
- Bien - continua Misel - les contaré un poco acerca de mi historia familiar... apuesto que es lo que mas los intriga a todos. Como ya les mencioné, mi nombre es Misel McGonagall, tengo dos hermanas, Millie y Minerva... ambas fallecieron hace años.
Hermione siente como si cayera lentamente... ¿Misel hermana de la profesora? ¿Pero como...?
- Minerva decidió dar clases en Hogwarts, mientras que Millie se casó con un miembro del ministerio. Por mi parte, me enamoré de un muggle e hice mi vida como alguien normal, olvidándome de mis raíces... pero todos sabemos que eso no es muy bueno.
Misel observa a Hermione fijamente. Todos parecían entender a donde iba el tema, incluso Alix.
- 'Muggle' significa mezclado - sonríe Sheila.
- ¿Y tu como lo sabes? - pregunta Alix.
- Me lo dijo mi tía Mione - responde la niña con un tono alegre.
Alix posa su mirada en Hermione.
- Entonces quiere decir que tu también eres... una... - Alix abre los ojos totalmente sorprendida
- ¿Sabes de eso...?
- ¡Claro que lo sé!
- Pero... parecías muy reacia a creer en esas cosas...
- Tengo mis razones.
- En parte es mi culpa - interrumpe Misel - Alix y Andrea siempre crecieron un poco renuentes respecto al mundo mágico... 'Ver para creer'...
- No quiero que Sheila pase por la misma decepción por la que pasamos Andrea y yo, en caso de que no sea bruja...
- ¡Pero si lo soy! - exclama Sheila, entendiendo un poco de la platica - ¡Te lo dije, y me ignoraste!
- No quiero que te ilusiones...
- Supéralo, Alix... Si es, bueno, si no, tu la ayudarás a que la decepción no sea muy grande.
- Supongo - se queja Alix - pero espero que esa no haya sido la razón por la que nos reuniste aquí... especialmente a Hermione y al señor Weasley, son personas ocupadas.
- Cierto... bien, en esta habitación solo hay brujos, exceptuándote, Alix... así que las cosas serán más fáciles de explicar...
- ¿Solo hay brujos? - Alix se pone de pie, sorprendida - ¿¿Entonces el señor Weasley... y todos...?
- Si... somos brujos, Alix... - Hermione la mira con un poco de miedo.
- Habrá tiempo para aclaraciones... Todos sabemos de Voldemort... y como fue derrotado por el hijo de James Potter y Liliana Evans...
Harry se sonroja levemente.
- Si, muchacho... fuiste el niño que vivió.... una gran leyenda... un gran mago...
- N-no tengo ni idea de como lo hice - se defiende Harry.
- Yo te diré... con la fuerza de la amistad... con la fuerza de saber que se sacrificaron para hacer un mundo de paz... Aun cuando no estabas enterado de todo, sospechabas que todos los cambios que hubo en Hogwarts a partir del quinto curso, se hicieron con la finalidad de derrotar al fin a Voldemort y que la tranquilidad volviera a los mundos mágicos y muggles.
Harry asiente lentamente. Misel tiene razón, aun cuando nadie se lo dijo, él sabía que las cosas habían pasado para ayudar al derrocamiento de Voldemort.
- Cuando te dejo esa cicatriz en señal de su derrota, Millie tenía un hijo de 5 años... y yo estaba embarazada. Minerva nunca tuvo hijos, así que quería a sus sobrinos de esta forma. Por la cruza de sangre, Elian fue el único que heredo magia, no así mis hijas, Andrea y
Alix... en este caso, el gen mágico paso a la tercera generación.
Misel observa a Sheila con una sonrisa.
- Minerva vino a visitarme para decirme de un futuro que nos perjudicaba a todos... la ayude a aclarar su mente, y cambiamos las cosas... le costo la vida... y a Millie también, pero ahora tenemos paz, y donde quiera que estén, son felices de verlos a todos bien... señor Potter, no lo veía desde el funeral de Minerva, se ve tan guapo como siempre.
- Gracias - contesta Harry entre confundido y feliz. Así que había mas personas en esto... y hasta ahora se descubría quienes.
- Al principio creí que todo se quedaría en el pasado... pero cuando Alix entro a trabajar con Hermione... supe que tenía que intervenir para reunirlos de nuevo.
- Entonces - dice al fin Hermione - usted nos unió.... no fue el destino.
- Cariño - Misel la observa con ternura - yo propicie las cosas, pero no te obligue a tener los sentimientos que tienes ahora, o a actuar como lo hiciste... esas fueron tus decisiones solamente. Mi hermana me pidió que hiciera esta reunión alguna vez, y como ven, he cumplido con mi palabra...
- Gracias - dice Hermione, acercándose a Misel.
- No tienes que darlas... Minerva te quería como a una hija, y con el tiempo, yo también. Solo quería verlos... felices, como siempre debió ser.
Hermione no puede evitar las lágrimas de emoción al saber todo al fin.
- No seas tímida, muchacha, dame un abrazo...
Hermione obedece al acto, abrazando fuertemente a Misel.
Misel se pone de pie, extendiendo sus brazos, y Sheila corre a abrazarla también, junto a Alix.
- Saben que las adoro, mas que a mi vida... podrán seguir sin mi.
- Mamá...
- No quiero que lloren... porque he sido feliz, mis corazones...
Misel se separa de las chicas, viendo a Elian y asintiendo.
- Gracias, hijo, tu mamá esta muy orgullosa de ti, en donde quiera que este.
- Lo sé, tía...
Misel saca una varita del bolsillo de su vestido.
- Esta es mi varita mágica... espero que algún día la uses, hija...
Misel le da un beso en la frente a Sheila, y levanta su varita.
- Es de parte de todas nosotras... de Minerva, de Millie, y mía... ¡Florei felide!
Una luz blanca sale de la varita, chocando en el techo, y haciendo que caigan pétalos de rosas.
- Nos veremos... y sigan con la felicidad que les trae la vida.
Misel se dirige a las escaleras, y Alix trata de ayudarla.
- No te molestes, hija... buenas noches a todos, y gracias por haber venido... un placer verlos a todos.
Misel sube las escaleras, sonriendo, mientras todos la observan.
- No puedo creerlo... - exclama Hermione.
- Que pequeño es el mundo - suspira Ron.
Sheila toma la varita que le dio Misel, y se pone a jugar con ella.
Harry sonríe, pensando en como las cosas se habían solucionado, y Ginny aprieta su mano, dándole su apoyo incondicional, como lo había hecho desde que lo conoció.
- ¡No puedo creer que seas una bruja, y no me lo hayas dicho! - reclama Alix a Hermione.
- ¿Yo? ¡Tu nunca mencionaste nada tampoco!
- Tengo mis razones ¬¬
- Si, ya lo dijiste... además temía que no me creyeras...
- Sé todo sobre el mundo mágico, Hermione, solo prefiero hacerme la loca...
- Como si te costara tanto trabajo...
- ¬¬... cállate...
- ¿Crees que Misel este bien? - pregunta Hermione preocupada.
- Si... y espero que al menos se queden a cenar - pide Alix - no hay que desperdiciar tanta comida.
Todos asienten, y pasan al comedor, conversando. Alix pide que le cuenten un poco mas de Hogwarts, a pesar de que su madre ya le había hablado un poco de eso.
- Alix, ¿Y por qué eres tan centrada, y no creer en la magia? al menos eso me decías cuando tu mamá mencionaba la magia interior - sonríe Hermione.
- En realidad Andrea y yo aplicamos el dicho 'ver para creer', aun cuando mi mamá era bruja, y ambas lo sabíamos, preferíamos hacer como si no lo supiéramos...
- ¿De cual decepción hablaron hace unos momentos? - pregunta Ron.
- Ahhh... bueno, verán.... cuando éramos pequeñas, mamá siempre nos hablo de la magia. Papá no estuvo muy de acuerdo, como escucharon, él era muggle... pero mamá siempre nos mostraba cosas que hacia con la varita, era muy divertido. Nos dijo que nosotras también seríamos brujas, y siempre lo decíamos en la escuela.... presumíamos que a los 11 años nos llegaría nuestra carta de Hogwarts... y ese día jamás llego... y cuando le pedimos a mamá que demostrara magia a nuestros amigos, para probarles que al menos ella si era bruja, se negó, diciendo que la magia debe ser mostrada solo a aquellos que puedan entenderla... Fue doloroso soportar las burlas, y decepcionarnos al ver que no teníamos poderes como mamá prometio... por eso no quería que Sheila pasara por lo mismo... pero bueno, creo que en esta habitación son mayoría, así que debo resignarme - sonríe Alix.
- Oye, debiste haberme dicho ¬¬ - Hermione se molesta.
- ¿Así como tu me dijiste que eras una bruja? Estamos a mano.
- Bueno ^^
La velada paso volando, e incluso Alix, que se gano fácilmente la simpatía de Harry y Ginny, había quedado como niñera oficial del pequeño James 'después de todo casi ni trabaja', se burlaba Hermione.
Al parecer todo lo que paso dejo algo en claro: Minerva sabía que si se cambiaba el futuro, Misel estaría ahí para que terminara bien, como dictaba el destino.
Hermione se siente mas tranquila, y duerme con una felicidad enorme... no culparía mas a las decisiones que tomo, pues ahora era feliz... y todo gracias a Minerva y a Misel.
Al otro día, la chica se levanta lentamente. Ron la había dejado en su casa para después acompañar a Harry y a Ginny. No puede evitar sonreír, al recordar el día de ayer. Siempre pensó que Minerva no tenía mas familia que Elian... y una de sus sobrinas estaba tan cerca de ella.
Decide bajar a desayunar, viendo a Alix en la cocina, sentada, tomando un café.
- Hola, Alix - saluda la chica.
Alix mira a Hermione y sonríe.
- Mi madre murió, mientras dormía...
Hermione siente como si una cubetada de agua helada la bañara.
- L-lo siento, Alix...
- No te preocupes... el funeral es a las 3, espero que puedan ir todos.
- ¿Por qué no me despertaste?
- No quería molestarte... además quería tomar una taza de café.
- ¿Como esta Sheila?
- Lo tomo muy bien... creo que ambas ya lo esperábamos, especialmente con lo de ayer.
Hermione abraza a Alix, la cual solo solloza.
- La voy a extrañar mucho...
- Lo sé...
Al separarse, Alix limpia sus ojos, sonriendo.
- Pero ahora estará con sus hermanas... que mejor... debo irme, deje a Sheila con Elian.
- Si, no te preocupes, si necesitas algo...
- Gracias... a las 3, en el 'Lote de los senderos'... sabes que ahí esta toda la familia.
Hermione asiente, viendo salir a Alix con melancolía. Le dolía, pero sabía que era feliz... que Misel había sido feliz y que estaba preparada para partir. Pareciera que solo había esperado reunirlos, dejar todo en orden antes de irse.
Ron habla con Ron por teléfono (ya le había enseñado a usarlo muy bien), y llegaría por ella para ir juntos. Vería la posibilidad de que fueran Harry y Ginny.
Hermione se viste lentamente, pensando que si no pudo ir al funeral de la profesora, al menos si podría despedirse de Misel.
El tiempo le parece eterno, pero recuerda todos los momentos felices desde que conoció a Misel... como si fuera ayer...
****
- Mira, mamá, ella es Hermione Granger, mi jefa.
- Gusto en conocerla, señora.
Hermione estrecha la mano de Misel, la cual la observa de pies a cabeza con menuda sorpresa.
- Vaya, Granger... una brujita peculiar, ¿Eh?
Hermione se pone nerviosa, viendo a Misel con duda.
- Mamá - Alix suspira - no empieces.
- No empiezo - sonríe Misel - dime, muchacha, ¿Como estas?
- Bien, gracias por preguntar.
- Na, na, siempre es bueno ser amable... hija, recuerda que iremos a la misa conmemorativa de tu tía Minerva, ya que tu no fuiste al funeral.
Hermione mira a Alix extrañada.
- No sabia que tenias una tía de nombre 'Minerva'
- Me visitaba poco, solo en los veranos.
- Muchacha - Misel señala a Hermione - nunca olvides quien eres, preciosa.
- ¿Disculpe?
- Sabes de que hablo... magia interior... iré a cambiar a Sheila.
Misel sale de la habitación, dejando a Alix y a Hermione.
- Lo siento, te dije que mi mamá es extraña.
- Es simpática - sonríe Hermione.
- No tienes que mentir... pero gracias...
****
¿Como no lo había notado antes? ¡Misel siempre le había dado pistas! Jamás pensó que la tía de Alix fuera la profesora McGonagall... no cabe duda que cuando uno se entera de las cosas es cuando hilvana todos los acontecimientos. Tuvo la verdad frente a ella, y jamás lo noto.
Ron llega con Harry y Ginny.
- ¿Como te sientes, amor? - pregunta Ron.
- Bien... creo que todos ya lo esperábamos.
- Vamos - apremia Harry - llegaremos tarde.
- Si...
Hermione sale con pesar, y guía a los chicos al lugar donde se llevara a cabo el funeral.
Llegan a un enorme lugar, que parece un bosque.
- Muy bonito - murmura Ginny.
- Aquí solo esta la familia de Alix... abuelos, bisabuelos...
- Si, la profesora fue sepultada aquí... es hermoso.
Los chicos entran, viendo en cada árbol una inscripción... como si fueran lápidas.
A lo lejos ven a muchas personas, reunidas alrededor de un árbol.
- Debe ser ahí - señala Ron.
Al aproximarse al lugar, Hermione nota que Alix, Elian y Sheila tienen unos sombreros negros muy parecidos a los que siempre usaba la profesora McGonagall.
La ceremonia es muy corta, y no hay nadie llorando, o mostrando tristeza. Solo tranquilidad. Poco a poco la gente se retira, dejando a Alix, Sheila y Elian con los chicos. Hermione se acerca a Sheila.
- Hola, nena.
- Hola, tía Mione.
- ¿Como estas?
- Feliz ^-^
Todos observan extrañados a la niña.
- ¿Ah, si? ¿Y por qué?
- Mamá ya no esta solita... tiene a mi Lita para que la cuide, y eso me hace muy feliz.
Todos sonríen, viendo con ternura a Sheila.
- Ven, nena, vamos a visitar a tu mami para que le dejes flores - Elian toma de la mano a Sheila.
- ¡SI!
- Iré en un momento - se excusa Alix.
- Tío Ron, ¿Quieres conocer a mi mami?
- Claro, cariño, vamos...
- ¿Podemos ir también? - pregunta Harry.
Sheila asiente, y todos se alejan, exceptuando a Alix y a Hermione.
- Alix...
- ¿Sabes? Mi mamá adoraba estos sombreros... por eso siempre los usamos cuando nos despedimos de alguien de la familia... tradición...
- Es una tradición muy simbólica.
- Recuerdo cuando era niña... mamá siempre nos hablaba de la magia, y nos mostraba su varita, con una luz en la punta. Era hermosa - Alix sonríe - y le preguntaba si no dolía, porque a los magos de la televisión los cortaban... y reíamos cuando mamá nos decía que ella no era una vil ilusionista...
Hermione abraza a Alix.
- Pero ahora es feliz... como dice Sheila, esta con Andrea y con sus hermanas... todo tiene su tiempo y su lugar.
Alix se deja caer, con cierto aire de resignación, suspirando.
- A veces quisiera irme con ellas - la voz de Alix se apaga - pero esta niña es fuerte, y yo tengo que ser mas para sacarla adelante.
- Y lo eres, Alix... lo eres.
Hermione se sienta al lado de Alix, y ambas se quedan en silencio, dejando que el aire las reconforte.
- ¿Qué va a pasar con Sheila ahora, Hermione?.... No puede quedarse aquí... tendré que irme a Florida con ella...
- Podrías hacer la prueba a ver si soporta el clima de aquí...
- Pero... ¿Alejarla de sus amigos? No...
- Consúltalo con ella...
- ¿Sabes? Quiero adoptarla..
- Pero Alix...
- Si, sé que dije que quería que recordara a sus papas... pero aun cuando la adopte, ella los seguirá teniendo presente... y mi mamá siempre me lo pedía... es hora de hacerle caso...
Alix sonríe, y pone un clavel blanco bajo el árbol.
Mientras tanto, con Sheila, la pequeña pone muchas flores cerca de las raíces del árbol.
- Mira, tío, aquí esta mi mamá.... es un roble porque a mi mamá le gustaban mucho...
- Es hermoso.
- Si, como mi mami... Pensé que cuando la abuelita se fuera, me iba a sentir muy sola, pero mi mami los envió a ustedes para hacerme compañía, a mi y a mi tía Alix, y por eso no debemos estar tristes... a mi lita no le hubiera gustado.
Ron abraza a la pequeña Sheila.
- Si, siempre estaremos aquí para ayudarte.
Alix se acerca con Hermione.
- Bien, es hora de regresar, chaparra...
Todos se dirigen a la salida.
- Bueno... yo me despido - se escucha la voz de Elian.
- ¿Te vas tan rápido? - se sorprende Alix - ¡Apenas acabas de llegar!
- Tengo mis negocios, prima... solo vine porque tia Misel lo pidió, no me hubiera perdido esto por nada.... pero yo no pertenezco aquí, y es hora de retirarme... pero vendré a visitarlos de vez en cuando...
- Eso espero...
- Nos veremos en unos meses... adiós a todos, y Hermione, es un gusto verte sonreír de nuevo.
Hermione asiente, recordando que Elian no la había visto sonreír en todo lo que la había auxiliado en la magia.
- Ven cuando quieras, Elian - ofrece Alix - siempre es un gusto verte.
- Gracias... por cierto, Harry, te mando saludos Oliver.... lo veo seguido en el trabajo...
- Gracias, salúdalo de mi parte.
- Con gusto...
Elian sonríe, y toma el camino contrario a los chicos. Alix suspira.
- Supongo que tendremos que dejar la casa rápido - planea en voz alta.
- ¿Qué? ¿Por qué? - se queja Alix.
- Chaparra, ahora que tu lita no esta, tengo que irme a Florida contigo..
-¿Y por qué no vivimos aquí...?
-¿Aquí? ¿Y que hay del clima? ¿Y tus amigos?
- ¡Por favor, tía! - pide Sheila - El clima, prometo que no me enfermare, de verdad... no me importan mis amigos, les podré escribir! ¡¡Quiero quedarme aquí, por favor!!
Alix parece sorprendida, pero asiente lentamente.
- Haremos la prueba... pero si te enfermas, nos vamos a Florida.
- Si, lo prometo.
- Alix... ¿Por qué no vamos todos a comer algo?
- ¡¡Si, vamos!! - sonríe Sheila.
- Esta bien... espero que no sea molestia...
- Claro que no, bien lo sabes...
Todos se dirigen a comer, charlando en voz baja, mientras Sheila sonríe. Su lita ya era feliz, y todo marchaba bien.... su mamá ya no estaría sola.
