Capítulo 32: "Recuerdos: Abrazando el pasado" - Octava parte -
*********
Draco: El inicio del segundo año de Sheila en Hogwarts fue demasiado tranquilo, para mi gusto. Pensé que tendríamos demasiadas complicaciones por el hecho de que no veríamos muy seguido a Alix, pero todo resulto muy fácil, en parte porque ella nos dio la seguridad que necesitábamos para dejarla sin remordimiento.
Aun así, seguía un poco... ¿Como decirlo?... aprehensivo... si, creo que esa es la palabra. Iba a tener un hijo. Un hijo varón... pensé que iba a ser niña... es mas complicado de lo que cualquiera pueda imaginar.
¿Por qué?... bueno... si era niña, tenía un camino recorrido. Sheila es genial, y aunque no merezco el premio al padre del año, me defiendo. Pero jamás me imagine siendo padre de un niño. Me asusta la idea. Me asusta, porque tengo miedo de llegar a ser como MI propio padre. Es el ejemplo que tuve, y si me llego a equivocar, y hago a mi hijo sentir igual a como mi padre me hacía sentir a mi... Jamás me lo perdonaría.
¿Como puedo educar a un hijo, si yo mismo tuve demasiado sufrimiento en mi juventud?... Alix insistía en que no debía atormentarme por eso, pero es difícil... realmente difícil. Mi padre era mi figura de autoridad. Era mi "ídolo", mi "imagen ideal"... le temía, y mucho. Hacía lo que me pedía sin chistar, y siempre trataba de complacerlo. Pero eso era porque me daba temor desobedecerlo... no porque lo respetara, o lo amara. Cuando paso todo el asunto de los mortifagos, y mis padres murieron... me sentí aliviado. Me remuerde un poco, pero sentía que era libre. Que podía ser QUIEN YO QUERIA SER, y no quien ellos querían que yo llegara a ser. ¡Claro que me dolió!... pero fue un dolor muy vago... muy difícil incluso de percibir. Aun así, eran mis padres, y jamás les hubiera deseado lo que les paso.
De cualquier modo ese miedo siempre vivió en mi. De llegar a ser como ellos. De formar una familia igual a la de ellos. Fría, distante, sin conocernos realmente. Me equivoque, y tengo una familia maravillosa... pero ahora que viene un nuevo integrante, el temor de nuevo me invade. Es solo que no quiero llegar a ser como mi padre, y en ocasiones me parece que no es tanto de que yo quiera... sino de la influencia tan fuerte que tuvo en mi.
Unos leves golpes me interrumpen de mis pensamientos. Era Diciembre, estábamos a punto de salir de vacaciones, por lo que era común que vinieran estudiantes a tratar de convencerme de cambiarles las notas que ya había otorgado. Difícil de creerlo, pero pociones era la materia mas odiada por la mayoría de los alumnos. Llegué a la conclusión que no era tanto por el profesor que la diera... o quizás si.
- Adelante - conteste, viendo que estaba divagando.
Ni siquiera levanto mi vista cuando escucho la puerta abrirse. Pretendo estar acomodando papeles, eso le da mas importancia a mi clásico discurso de "no cambiare su nota" que daba cada día.
- ¿Estas muy ocupado, papá? - escucho la vocecita de Sheila, que se sentó frente a mi.
Levanto mi mirada, con una sonrisa.
- ¿No se te paso la hora de dormir, señorita?
- No tenía sueño - se encoge de hombros - además quería hablar contigo, pero siempre estas con estudiantes... estoy a punto de ponerme celosa - me sonríe.
- ¿Qué puedo decir? - me encojo de hombros - soy el profesor mas popular de Hogwarts.
- También el que pone las notas mas bajas.
- Quizás sea eso - suspiro - ¿Ya cenaste?
- Estaba tan entretenida leyendo sobre las materias optativas del próximo curso, que llegue demasiado tarde.
- Eso imagine cuando te vi con la profesora Belrmar...¿Ya tienes alguna de tu gusto?
- ¡SI! Creo que me quedare con "Preparación para aurores"
Frunzo el entrecejo. ¿Mi hija, un auror? Era un trabajo demasiado peligroso, aun cuando los tiempos de Voldemort ya no existieran, los mortifagos aun siguen por ahí.
- Sabía que harías eso - suspira Sheila, y me recuerda tanto a Alix, que no puedo evitar sonreír - pero por algo nos preparan desde Hogwarts, ¿No lo crees? Además es muy interesante. El tío Harry y el tío Ron hubieran sido aurores... pero cada uno se decidió por otra cosa.
Me levanto, y salgo del despacho por unos momentos, dejando a Sheila confundida. Voy con los elfos domésticos para pedirles algo de comer, si como profesor soy estricto, como padre, creo que soy todo lo contrario (claro que no llego a los extremos de Ron... ayuda que Sheila ya es grande ^^U).
- Toma - le acerco a Sheila una bandeja con un poco de comida - no esta bien que te quedes sin cenar.
- ¡Gracias! - la sonrisa de Sheila me llena de gusto.
- Pronto regresaremos a casa - no puedo evitar ver una fotografía de Alix, que esta cuidadosamente colocada en mi escritorio. Su sonrisa siempre me animaba.
- Si... papá... pronto nacerá Sammy, ¿Verdad?
Doy un respingo. Habíamos decidido llamar a nuestro hijo "Samuel", pero no entiendo la razón por la que Sheila sacaba el tema.
- Si, tuvimos suerte, estaremos de vacaciones y podremos acompañar a tu mamá...
- ¿Es cierto que tomaras el resto del año escolar de descanso?
Alix ¬¬. Habíamos quedado de decirle a Sheila la noticia juntos, pero parece que no pudo aguantarse.
- Si... tu mamá necesitara ayuda con el bebé... y el profesor Potter me suplirá.
- Quiero quedarme también.
- No - respondo tajante - tu educación es primero. Entiendo que extrañaras a tu hermano, pero Hogwarts es parte de tu vida ahora... y parte importante.
Sheila baja la mirada, molesta. Sabía que tenía razón, pero no por eso le gustaba admitirlo. Comienza a jugar con el tenedor, como dudando entre decirme algo o no. Conozco esos gestos, y tengo curiosidad, pero prefiero esperar.
- ¿Sabes? - ella levanta la mirada, posando sus ojos castaños en los míos - creo que eres un padre maravilloso... Y te quiero.
De momento no sé que hacer. Mi primera reacción, como siempre, es sonrojarme. Después extrañarme... ¿A que venía eso?... pero de repente me inundo un sentimiento de felicidad que quisiera que nunca se esfumara. Quería gritar, quería llorar... quería que todos supieran el excelente padre que era, que mi hija me había dicho las palabras que todo padre espera escuchar.
Pero en lugar de hacer todo eso, trato de calmarme. No era bueno demostrando mis sentimientos... todavía. Aunque estuviera explotando de felicidad, se me había educado a no mostrarlo... símbolo de debilidad, o así me lo habían inculcado... era difícil deshacerse de todo eso.
- Yo también - es todo lo que puedo contestar.
Sheila da una risita. No sé si es porque esperaba en mi esa reacción, o porque no la esperaba, y eso le causa gracia.
- Y Sammy pensara lo mismo. Lo educaras y serás el mejor padre para nosotros, ya lo verás.
¿Lo sabía? ¿Sabía lo que me atormentaba cada día desde que supe que sería niño? ¿Como puede saberlo? O quizás... solo quería darme confianza... lo que sea, funciono. Mis dudas se esfumaron, y ahora solo estaba ansioso de tener a ese niño en mis brazos... y comenzar a ser lo contrario de lo que mi padre fue conmigo. No se repetirá la historia... no DEJARE que eso pase.
- Eso espero - ciertamente mi voz ya mostraba mas seguridad.
Ambos quedamos en silencio de nuevo.
- Te he visto platicar mucho con Michael Hewler...- había esperado mucho para preguntarle a Sheila sobre este muchachito, y creo que ahora es el momento adecuado.
- Ah... si - Sheila se sonroja, comprobando mis sospechas. Le gustaba ese... muchacho.
Sheila sigue tan sonrojada, que prefiero esperar un poco para seguir mi interrogatorio. No me agradaba, si tengo que confesarlo. Era de la familia Hewler, lo que significaba problemas. Tenía relación con los Gwendi, lo que aumentaba el pronostico de que fuera un idiota. Pero tenia que ser objetivo. Así como muchos me juzgaron a mi de "idiota", quizás pase igual con este niño. Es solo que no quiero ver a mi niña sufriendo por ese. Si llegara a pasar eso, no sé de que sería capaz.
- Solo somos amigos - me contesta al fin Sheila.
- ¿Ah, si? ¿Y por eso los veo platicando diario?
- ¡Papá, si no te conociera bien, diría que me espías! - Sheila luce un asombro de lo mas fingido. No sé como dice que es buena actriz ¬¬.
- No se molestan en esconderse exactamente... ¿Novio?
- Aun no.
- ¿Planes de que lo sea?
- Mmmm... quizás... todo va muy bien...
- ¿Te ha besado?
- ¡PAPÁ! - Sheila se vuelve a sonrojar.
- ¿Qué? ¡Me preocupan tus intereses!
- No, aun no me besa. Y no lo hará, hasta que seamos novios.
- Estas muy ilusionada con él, ¿Verdad?
- Pues... es genial, y es tan lindo... hasta me defendió una vez de Isabella... No se parece en nada a ella, no entiendo como son familia.
Ese argumento me elimina. Es cierto, no se debe juzgar sin conocer, y si Sheila dice que este muchacho la respeta y la defiende, entonces solo me queda estar al pendiente de que no la lastime. Me daba un mal presentimiento, pero por lo general me equivoco en mis corazonadas, así que no le doy mucha importancia.
- ¡Draco... DRACOOOO!
Sheila y yo volteamos sobresaltados a la chimenea, donde la cabeza de Alix aparece con cierta angustia.
- ¡Hola, cariño! - me acerco a la chimenea - veo que ya aprendiste a usar este método, mejor, así no seré yo el que...
- ¡Cállate y escucha! - me interrumpe Alix de forma brusca - ¡ROMPI FUENTE Y NO HAY NADIE QUE ME LLEVE AL HOSPITAL, Y NO PUEDO CONDUCIR PORQUE ME DUELE MUCHO, Y NO SÉ QUE HACER, AYUDAME, AYUDAME, AYUDAME!
Toda mi alegría se esfuma, convirtiéndose en un nerviosismo inexplicable.
- ¡¡Voy para allá con polvos Flu!! ¡Sheila, avísale a Harry!
- ¡TU NO SABES CONDUCIR! - Alix me grita molesta - ¡NECESITO ALGUIEN QUE ME LLEVE DE FORMA NORMAL AL HOSPITAL!
- ¿Donde están todos cuando los necesitamos? - mi angustia pasa a desesperación - ¿Y un taxi?
- ¡NECESITO AYUDA DESDE AQUI! - veo que Alix se dobla de dolor - ¡No sé que hacer!
- Mamá... - Sheila parece dudosa - quizás debas llamar... a Kyle...
¿Kyle? ¿Quien es ese?... ¡MOMENTO, MOMENTO, MOMENTO! Me vienen amargos recuerdos, ¿Acaso Sheila se refería al mismo Kyle que conocimos cuando Hermione tuvo a su bebé? ¿¿A DON MUSCULOS??
- ¡Tienes razón! ¡Lo había olvidado por completo! Nos veremos en el hospital...
- ¡Espera, Alix...!
- Tu hijo no PUEDE esperar, amor, alcanzame en el hospital.
- ¡Pero...!
El rostro de Alix va desapareciendo poco a poco, dejando solo fuego en la chimenea. Aun sigo con emociones encontradas. ¡¡VOY A SER PADRE!! Pero ¿¿POR QUE PEDIRLE AYUDA A DON MUSCULOS??
- Papá... ¿Iras a avisarle a tío Harry? - Sheila, al notar que sigo con mi vista en el fuego, me interrumpe.
- Vamos, tu también vendrás...
Camino sin darme cuenta siquiera que Sheila me guía de la mano. No puedo salir de mi estupor.
- ¡Ah, claro, no te preocupes, Sheila, solo quedaba una semana para las vacaciones, puedes irte antes!
La voz de Harry me saca de mis pensamientos sobre como asesinar a don Músculos con alguna maldición imperdonable.
- Draco, ¿Te pasa algo?
- No me pasa nada, vamonos Sheila ¬¬
- Kyle llevara a mamá al hospital - aclara Sheila.
- Ahhh... - ese tono en Harry no me gusta - es eso... iremos a visitar a Alix dentro de poco. ¡Mucha suerte!
- Mmmp.....
- Iremos a casa, y de ahí al hospital... Adiós, tío, y gracias ^^
La duda me embargaba... ¿Como es que Alix estaba en contacto con ESE?... Sheila debía saber, la interrogare.
- Sheila... ¡Hey!... ¿Donde estamos?
- En el taxi, camino al hospital. Papá, estas en la luna. Desde que mamá se despidió, ni siquiera notaste que te tuve que tomar de la mano para viajar con polvos Flu, y que te subí al taxi como si fueras un muñeco... no te preocupes, pronto llegaremos...
Frunzo el entrecejo. Ahora mi hija me dirigía en esta vida. Aun me carcome que OTRO TIPEJO IDIOTA ESTE CON MI MUJER EN MI LUGAR... debería ser yo ¬_¬...
- ¿Y COMO ES QUE SIGUEN EN CONTACTO?
- Pues mamá se lo encontró poco antes de que entráramos a la escuela - explica Sheila.
La observo, confundido.
- ¿Qué?
- Tu preguntaste que como es que siguen en contacto...
- ¿Lo dije en voz alta? Ô.
- Si, papá... - Sheila da una risita burlesca ¬¬ - ¿Quieres que siga explicando?
Que pregunta tan obvia ¬¬X... igual a su madre, sin duda alguna.
- ... Se pusieron a recordar sobre su fugaz encuentro - Sheila interpreta mi silencio como un "continua" - mamá le platico que estaba casada y que ya tenía una familia. Al preguntarle sobre... bueno, pues sobre ti, mamá le explico que tu viajabas mucho por tu trabajo, y Kyle le reitero que si necesitaba algo, podía llamarlo. Como amigos. Ahora lo necesitaba, así que lo llamo... no estarás celoso, ¿O si?
- ¿YO? ¡Ay, por favor! - chasqueo la lengua - ¿Por qué habría de estarlo? ¿Porque un perfecto extraño esta llevando en estos momentos a mi esposa embarazada al hospital? ¡Que tontería!
- Mmmm... papá, asimílalo. Lo necesitaba.
- ¬¬....
Por suerte llegamos al hospital antes de que sigamos con la discusión. Entro corriendo, y una enfermera me detiene.
- ¿A donde cree que va?
- ¡Mi esposa va a tener un bebé! ¡Suélteme!
- Alix Malfoy - Sheila dice detrás de mi.
- ¡Ah, si! ¡Recién llego, debe estar en el área de maternidad, segundo piso! Su esposo es muy amable, incluso la cargo hasta su cama debido a que no teníamos una silla movible disponible...
- ¡¡YO SOY SU ESPOSO!! - me sobresalto. ¡Yo debería ser quien se llevara el crédito por eso!
- Ah - la enfermera me mira de arriba a abajo - bueno, la ubicaran fácilmente.
Me alejo totalmente molesto. Idiota ¬¬'.... lo que faltaba es que el niño se pareciera a él, y entonces si ¬___¬'. Sheila me sigue con una sonrisa, sabe lo que estoy pensando.
Al llegar a la sala de espera, visualizo a un tipejo que reconozco enseguida.
- Hola, Kyle ^^ - Sheila saluda.
- ¡Sheila! - el idiota se levanta, abrazando a Sheila. ¿Y POR QUE ABRAZA A MI HIJA? ¬¬X - la acaban de pasar a un quirófano, pronto nacerá el niño.
- EJEMMMMMMMMMM - tengo que hacerme notar ¬¬
- Ah, mira, él es mi papá.... Draco Malfoy...
- ¡Gusto en conocerlo! - el tipejo me extiende su mano, que tomo de mala gana.
- Si, si....
- Puede ponerse bata y prepararse para acompañarla. Estoy seguro de que Alix lo espera ansiosa...
Me extraña el tono de voz de este tipo. Lo observo con duda.
- No paro de hablar de usted en todo el camino - sigue diciéndome con voz apagada - lo ama mucho... espero que todo salga bien.
Mi enojo anterior se esfuma. Pobre tipo, esta enamorado de Alix, pero se ha resignado de que ya me tiene a mi (y que ni intente nada ¬¬)... siento pena por él.
- Me quedare con Kyle - dice Sheila - tu pasa con mamá.
- Si...
Obedezco, aun un poco aturdido, y paso sin saber lo que me espera.
- ¡DRACO!
Alix esta en una cama, al parecer en el peor sufrimiento de su vida.
- ¡Aquí estoy! ¡Tranquila!
- ¿¿¿QUE RAYOS HACIAS QUE NO ENTRABAS???
- ¡Me encontré a Kyle! - momento... eso no es justificación ¬¬ - ¿Como te sientes?
- ¿¿COMO CREES TU??...
- ¡¡Llego la hora, señora Malfoy, debe pujar!!
- ¡No, no quiero pujar, me va a doler!
- Cariño, debes hacerlo - trato de escucharme lo mas convincente que puedo.
- ¡NO TENGO QUE HACER NADA QUE NO QUIERO, ESTA EN MIS DERECHOS COMO SER HUMANO, YO SOY FELIZ ASÍ, SAMMY ES FELIZ ASI... NO VOY A PUJAR!
- ¡Viene el bebé!
Todo de aquí se vuelve confuso. Alix grita de manera tan desgarradora, que lo único que se me ocurre hacer es sostener su mano y besarla en la frente para calmarla (no es que me este haciendo mucho caso).
Nunca había visto algo tan maravilloso.... el llanto de un bebé nos llena de alegría tanto a Alix como a mi, y me doy cuenta de cuanto la amo. Creo que jamás había tenido tanta felicidad en mi vida.
- Felicidades, papas... es un niño...
El doctor me acerca a una pequeña figurita que aun llora desconsoladamente.
- Alix...
- Es hermoso - dice ella con una sonrisa.
- Es perfecto - es todo lo que puedo contestar, aun inundado con el sentimiento de la emoción.
Ron tenía razón. No hay emoción comparable con la de ser padre... Ya lo había pasado cuando Sheila me dijo por primera vez "pap"... y ahora, que veo este pequeño en mis brazos... tan indefenso... me esforzaría por ser el mejor de los padres. Sheila y Samuel no tendrán queja de mi, lo prometo.
No me separo de Alix en ningún momento. Poco después la trasladan a una habitación, y nos llevan a Sammy. Sheila esta fascinada, y explico que Kyle ya se había retirado... y esta vez, fue para jamás volvernos a encontrar. Le agradezco que estuviera ahí para ayudar a mi esposa, pero le agradezco mas que entendiera que Alix ya tenía una familia... y que él no entraba en ella (y mas le vale que lo entendiera ¬¬).
Recibimos la visita de todos poco después. Ginny había llevado a James con el doctor (tenía tos o algo asi ¬¬), Hermione estaba en la presentación de otro de sus libros, y Ron en el ministerio, que jamás supo como pasar la llamada de Alix a su línea personal (jamás había conocido a alguien que no pudiera retener como utilizar un aparato después de tantas explicaciones ¬¬')... vaya, hasta los señores McLinder estaban de viaje.
Aun así, todo fue perfecto. Samuel Malfoy McLester venía a completar nuestra felicidad. Sus ojos grisáceos y su cabello castaño oscuro nos mostró que era el producto del amor entre Alix y yo... y lo que nos uniría mucho mas de lo que imaginábamos.
*********
*********
James: El tercer curso empezaba, y me ponía mas ansioso. Pronto podría ir yo también a Hogwarts, y estar con Sheila ^^. Aunque solo sería por un año, pero de seguro sería muy divertido.
- Vamos, James, no te quedes atrás - me dice ella.
Ahora ya íbamos solos al callejón Diagon. Tía Alix y tío Draco se habían quedado con Sammy (estaba un poco resfriado), y tía Hermione debía cuidarse. Estaba embarazada de nuevo, y ya sabíamos que iba a ser un niño... la parejita, como decía el tío Ron emocionado. Mi papá tenía trabajo atrasado, y mamá estaba cuidando a la tía Hermione.
Por mi no había inconveniente, me encantaba salir con Sheila. Ella tenía ya 13 años, y era "responsable". A mis 8 años, era difícil no dejar que me embargara la emoción de que ya me tratara como un niño grande (a mi alrededor me trataban como un bebito, especialmente mamá, pero Sheila siempre me hablaba como si fuera alguien grande)
- ¡Ay, necesito un libro! ¡Lo había olvidado!
- Pero si ya habíamos llegado a la librería - me quejo - tengo hambre.
- Es que tomare "Preparación para aurores" como optativa este año, y se me olvido ^^'
Me habían dicho que esa materia era un poco "riesgosa"
- ¿Y estarás bien?
- Claro, el profesor es muy amable... al menos así se ve, es muy joven, creo que tiene 23 años...
Frunzo el entrecejo. ¿Hasta la edad del profesor sabía?
- Puedes esperar aquí, James, ya sabes como esta la librería, y no te gusta mucho que te estén empujando.
Sonrío. Sheila siempre piensa en mi bienestar.
- Esta bien.
- ¡No tardare! Quédate aquí, para que pueda verte desde la librería.
- Si, mam - le digo en tono divertido.
- Ja, ja - responde sarcástica.
La veo desaparecer entre la multitud que esta apiñada en la librería. No entiendo como pueden siquiera respirar con todo ese gentío.
Comienzo a impacientarme, Sheila tardaba, pero esperaría un poco antes de ponerme paranoico (ella siempre decía que tendía a exagerar todo, pero ella me pone el ejemplo ¬¬')
Noto que alguien me observa. Un hombre de mediana edad y ojos oscuros no me quita la vista, lo cual empieza a impacientarme.
- ¡Listo, James, vamonos!
Sheila se acerca a mi, pero el hombre que me miraba también se acerca.
- Disculpa mi impertinencia, ¿Tu eres el hijo de Harry Potter?
Sheila se pone frente a mi, como si me fuera a atacar o algo así. No entendí su actitud hasta mucho después.
- Si - le contesto con timidez.
- Lo sabía. Tus ojos... igual a los de tu padre... igual a los de Liliana Evans.
Sabía que ese era el nombre de mi abuela... pero que papá jamás pudo conocerla, ya que murió poco después de que él nació en un accidente, con mi abuelito.
- Disculpe, señor, pero tenemos prisa - Sheila se pone tensa, y no me agrada.
- ¿Y tu quien eres? - el hombre la escudriña de pies a cabeza - ahhh... la obra de caridad del profesor Malfoy.... la hija de muggles...
El hombre mira con desprecio a Sheila, y eso me enfurece. ¿Qué le pasaba? ¿Quien se creía para decirle esas cosas?
- Muy educado de su parte - responde Sheila secamente - vamonos, James.
Sheila me toma de la mano para alejarnos.
- Debes pensar que tu padre es un héroe - me dice el hombre en voz lo suficientemente alta para que lo escuchemos - cuando en realidad solo tuvo suerte, y de cualquier modo sigue siendo un asesino...
¿Qué? ¿Un asesino? ¿Por qué ese hombre decía eso? ¿¿Qué pasaba??... me sentía confundido. Sheila reacciono mas rápido, sacando su varita.
- Le recomiendo que cuide sus palabras, señor ... si vuelve a molestar a James, tendré que informarle a su padre... después de todo, con todo lo que ha dicho, apuesto a que muere por decírselo frente a frente, ¿No?... ¿O será que le tiene miedo al HEROE Harry Potter?
El hombre aprieta los puños, pero no contesta. Debido a que Sheila lo dijo en voz mas alta que él, todos voltean, y parece que eso no le conviene.
- Maldita sangre sucia - murmura, alejándose.
Nuestra primera visita solos al callejón Diagon se había convertido en un fiasco. Las palabras de ese hombre aun retumbaban en mi mente "y de cualquier modo sigue siendo un asesino"... ¿Por qué?... ¿Mi papá... había matado a alguien?
- ¿Qué tal si comemos aquí? - sugiere Sheila.
- No tengo hambre - no mentía. Se me había quitado después de ese encuentro.
- No tienes opción - me sonríe - eres mío estas 24 horas.
Sheila me guiña un ojo, y eso me hace sentir un poco mejor. Después de todo ese tipo la había insultado, y aun así conservo su dignidad y seguía tan alegre como siempre. Algo que le admiraba.
Nos sentamos en uno de los lugares mas alejados. Se veía muy lindo, por la ambientación nocturna (siempre comíamos aquí en familia, aunque era mas concurrido por parejas). Quizás era solo yo, pero cuando estábamos juntos, Sheila y yo parecíamos adultos pequeños... y de repente nos salía lo "niños"... era muy divertido.
Una vez que ordenamos, no puedo evitar mirar a Sheila con duda.
- ¿Papá mato a alguien? - bien, no me llevare el premio al mas sutil, pero debía saber.
- James, no soy la mas adecuada para hablarte de esto... quizás debas esperar a hablar con el tío Harry.
- ¿Entonces eso es un si?
Sheila solo desvía su mirada.
- ¿Así que ese señor tenía razón? ¿Todos consideran a mi padre un héroe, cuando en realidad es un asesino?
Sheila frunce el entrecejo, molesta, pero poco a poco cambia su gesto a uno de comprensión, y suspira.
- James... ¿Recuerdas cuando tomaste mi álbum fotográfico?
- Si... - luzco confundido, ¿Qué tenía que ver eso con mi padre y su pasado que ya no comenzaba a gustarme? - ¿Y?
- Bueno, yo creí que lo habías perdido, ¿Y que fue lo que hice?
- Le dijiste a mis papas.
- ¿Qué hicieron ellos?
- Me regañaron....
Ahora estábamos peor que antes. Me hizo recordar algo que me desagradaba en sobremanera. Solo había tomado el álbum de Sheila para adornarlo por su cumpleaños, pero mis papas me regañaron sin escucharme. Quizás porque no les quise explicar, para no arruinar la sorpresa. Después me pidieron una disculpa, y me dijeron que podía confiar en ellos para lo que sea.
- ¿Y acaso te gusto eso? ¿No te molesto haber sido juzgado sin explicar tus razones para tomarlo?
- ¡Esto no es lo mismo! - me enojo.
- ¡Claro que si! - Sheila levanta su voz para opacar la mía - Estas juzgando a tu papá sin saber sus verdaderas razones. Así como tu tuviste la oportunidad de explicar tus motivos, creo que no eres nadie para sacar conclusiones de algo en lo que no tienes conocimiento. Solo porque un idiota viene y te dice algo, no significa que vas a creerlo, ¿Verdad?... habla con el tío, y después de eso, veamos si todavía sigues pensando de esa forma tan tonta como hace unos momentos.
Nos quedamos en un pesado silencio. No puedo evitar que todo el enojo que tenía se me bajara de nuevo. Sheila tenía razón. No soy nadie para juzgar a mi padre... además él siempre ha sido mi modelo a seguir, mi héroe personal.... me ha enseñado a respetar a todos, y a conocer siempre a las personas antes de juzgarlas. Es hora de seguir su ejemplo.
- No es para que te enojes - sonrío a Sheila, dándole a entender que al fin capte su mensaje.
- Eres aun pequeño, Jamie- me dice ella mostrándome su dulce mirada - pero eres mucho mas maduro que muchos niños de tu edad... eso es algo muy bueno, y en parte es por la influencia del tío Harry... Ya verás que cuando hablen, te sentirás mucho mejor.
Hacía tiempo que no me llamaba Jamie... sonrío. Tiene razón... debo hablar con mi papá en definitiva.
- Esto se ve delicioso - Sheila se saborea. Nos había llevado ya la comida.
- Oye, creí que no dejaban pasar a niños a restaurantes.
- Ay, solo le dije que venía de parte de la tía Hermione... ella y el tío Ron vienen seguido. Además ya tengo 13, así que estoy en el promedio ^^
- ¿Les dijiste que nos alcanzarían aquí?
- Si -____-'.... era la única forma de que nos dejaran entrar.
No puedo evitar el reírme.
- Oye, ¿Qué crees? ¡Natalia y John ya son novios! - Sheila parece estar contando una noticia sorprendente.
- ¿De verdad? - me sorprendo. Con razón Natalia casi no había visitado a Sheila este verano.
- Si ^^.... te dije, mis planes siempre funcionan.
- ¿Desde cuando? ¬¬
- Gracioso ¬¬'
Sheila sonríe, y seguimos conversando. Ella no nota que hay ocasiones en las que me sonrojo levemente. Sé que muchos dirán "es tan tierno, la quiere como una hermana", pero yo creo que el sentimiento por una hermana es diferente a este. Es decir, a Eli la quiero como a mi hermana pequeña. Con Sheila es diferente. Ella me hace reír, y siempre me hace entrar en razón. Incluso mamá recurre a ella en cuanto a como tratarme cuando ando en momentos "rebeldes". Y hasta ahora, no he visto a alguien que tenga tan linda sonrisa y ojos como los de ella. Le digo a papá que estoy enamorado... así como el tío Ron de la tía Hermione. Así como el tío Draco de la tía Alix. Así como él de mamá.
Aun así tenía que hablar con papá... sin saber que esa platica nos acercaría aun mas, y me haría entender que no todo es perfecto en este mundo, como yo pensaba.
*********
*********
Harry: Habíamos decidido no hablarle a James acerca de lo que había pasado con Voldemort. Al menos no a grandes rasgos, y esperar a que tuviera 10 años, para explicarle todo. Por el momento solo le inventamos que sus abuelos paternos habían muerto en un accidente (lo cual es... 3/4 cierto, ¿No?). Ginny no estaba del todo convencida, pero respeto mis puntos de vista. Es solo que no quería que James supiera todo lo que había sucedido, siendo tan pequeño. Quizás lo hubiera entendido, pero aun así creía que era quitarle inocencia que no debería de desaparecer. Y esa inocencia era la de confiar en los demás, y que no había maldad en nadie.
Cuando Sheila llevo a James después de que había pasado dos días en casa de Draco y Alix, supe que había algo mal. James solo me dirigió un seco "hola", y subió a su habitación, sin mirarme de nuevo siquiera. Ginny también estaba extrañada.
- ¿Qué paso? - le pregunto Ginny a Sheila.
- En el callejón Diagon... creo que un mortifago nos molesto...
- ¿Como que crees? - pregunto, tratando de escucharme calmado. El simple hecho de oír la palabra "mortifago" hace que se me crispen los nervios.
- Un hombre se acerco a James, preguntando si era hijo tuyo, tío. Cuando James contesto que si, pude notar algo negro en su brazo... como la marca característica de los mortifagos. Sabes que aunque Voldemort fue derrotado, existen mortifagos... y siguen con su sello para que sean llamados... quise alejar a James antes de que pasara algo, pero el alcanzo a mencionarle que habías asesinado a...
- Entiendo - interrumpo a Sheila - debió ser desagradable... ¿Menciono a Voldemort?
- No... solo dijo que todos te consideraban un héroe, cuando no lo merecías... y soltó su repertorio de groserías hacía mi por ser de sangre muggle... eso me comprobó que era mortifago.
- Lo lamento, Sheila, no quería que pasaras por ese momento incomodo.
- No te preocupes, tío... ¿Crees que es la primera vez que me insultan así?... ya hasta me estoy acostumbrando.
- ¿Le hablaste a James sobre... quien-no-debe-ser-nombrado? - Ginny parece un poco asustada.
No podía pedirle que llamara a Voldemort de esta forma cuando toda su vida estuvo acostumbrada a temerle a ese nombre. Pocas veces lo menciono así, y aun cuando ya estaba en el pasado... era difícil olvidar esa vieja costumbre.
- No, tía Ginny, pensé que el mas adecuado era el tío Harry... solo lo calme, pero aun necesita que hables con él.
- Ya veo... - acomodo mis gafas, meditando que hacer.
- Iré a hablar con él - tía Ginny se dirige a las escaleras.
- No - la detengo - iré yo - lo sabía, tendría esta plática con mi hijo tarde o temprano.
Subo lentamente, y veo que Ginny se despide de Sheila, agradeciéndole lo que ha hecho. No me pasa de largo la mirada de esperanza en mi esposa. Ella ansia que James crezca para que se case con Sheila. "Son el uno para el otro"... pero en el fondo sabía que era su elección, por mas que ella quisiera casarlos en estos momentos. Si quedaban juntos, ella sería la mas feliz. Sino... tendría que habituarse a eso.
Entro a la habitación de James, el cual estaba sentado sobre su cama, como si me esperara.
- Tenemos que hablar - le digo en voz suave.
- Lo sé...
Cuando me siento frente a él, me invade un sentimiento de felicidad. Lo que voy a narrarle será muy duro, pero sabrá porque hay tanta gente que me llama héroe, aun sin serlo, o porque otra gente me odia. Al verlo... de verdad se parece tanto a mi. Era delgado, con ojos verdes y cabello negro. Sus lentes que tuvo que empezar a usar desde los dos años eran inevitables. Si no fueran por las pecas que están en sus mejillas, sería una exacta copia de mi mismo.
- Papá.... - la voz de James me distrae - ¿Vas a platicarme sobre tu pasado?
Asiento lentamente, dando un largo respiro.
- Las cosas que voy a decirte quizás sean un poco... duras... para tu edad... pero ya estas para saberlo... y entenderlo... escúchame, y después sabrás que postura tomar....
Comienzo a narrarle con calma todo lo que había sucedido en mi vida. Desde como crecí engañado hasta los 11 años... hasta como poco a poco tuve que enterarme de la realidad. Y de todas las personas que hicieron sus sacrificios personales para que ahora estuviéramos "en paz". Desde Hermione, que renuncio a quien era, hasta sus abuelos, que me dieron la vida.... todos igual de importantes para mi, y todos igual de valiosos.
Y de repente, al estar con mi relato, me di cuenta de algo. Parte de mi no quería decirle a James todo, por su bondad que había heredado de su madre. Pero creo que la mayor parte es la que no quería RECORDAR lo que había pasado. Ya no quería revivir todo, el sufrimiento, el dolor... Quería dejarlo atrás. Comenzar una nueva vida... con un nuevo futuro.
Es tonto. Es parte de quien soy. Todo lo que viví... YA ES PARTE DE MI... no puedo borrarlo como si nunca hubiera existido. Así como hubo dolor, hubo alegría. Supe que mis padres me amaban como nunca. Que mi padrino daría todo por mi. Que mis amigos eran verdaderos y se sacrificarían por ayudarme. Y que incluso mis enemigos podían cambiar. Tengo mi vida hecha gracias a lo que paso. Y diciéndoselo a James, es como abrazar de nuevo ese pasado e integrarlo a mi vida.
Al terminar mi relato, no sé que esperar. Quizás James piense que estoy exagerando, y que me encanta ponerme como protagonista de las cosas. Hermione tenía razón en eso, siempre era la victima, y narrar eso me hizo notar que yo también era un verdadero idiota en ocasiones.
Por toda respuesta, James solo se acerca a mi, y me abraza fuertemente. Mi hijo había entendido a la perfección todo... me había dado el beneficio de la duda... y comprendió lo que paso. Así como yo lo hice con mi padre cuando me hicieron notar que no era tan bueno como yo creía... pero a final de cuentas era humano. Y yo también.
Al ver el reflejo de James abrazándome, podría jurar que vi el reflejo de mi padre detrás... sonriendo. Igual a mi, solo que con sus ojos azules. Parpadeo, y la imagen desaparece. No sé que habrá sido, pero me hizo sentir muy bien.
En la cena, Ginny noto que James y yo hablábamos con mas soltura de las cosas. Notaba como James me tenía cierta admiración como héroe que todos mencionan. Ahora me tenia confianza... ahora éramos amigos.
No tenía idea que el aceptar mi pasado, también me acercaría a mi hijo... quizás es algo que muchos no tomamos en cuenta.
*********
*Sheila Malfoy McLester.... Abrazando el pasado.... 31 de Octubre…*
