Siento mucho la tardanza, pero mi computadora no sirve, creo que eso de instalar y desinstalar tanto el juego de los sims por fin termino de descomponerla, pero bueno, estoy en un cibercafé así que mejor me voy apurando a terminar el cap.
Por cierto muchas gracias por sus reviews, son muy importantes para saber que opinan, así que aquí les contesto:
hikaru-chan15: Gracias por el consejo, y si deberías escribir tus fics es divertido!!! en especial cuando ya no sabes como continuarlo y te pones a pensar por horas y horas como seguirlo :p , ahh y prometo que terminaré el fic sólo que vayanme diciendo que les gusta y que no para que no quede aburrido.
Annya Hiwattari: No, no, no lo hará aunque creo que si va a haber algo de eso, pero al final el neko y Kai vivirán felices para siempre :D.
Oriko Asakura-Tao Lee: Gracias por la opinión, es importante, no te preocupes pretendo que salga Ray ya en este cap, o no se se me están ocurriendo muchas cosas, pero trataré de ponerlo, o si no prometo que ya en el que sigue sale. Ahh y de lo de Kai, se porta así porque extraña a su amado neko y por eso se la vive en las nubes, pero ya pronto se volverá muy parlanchín (o eso espero), es que no se, por su personalidad hacer hablar a Kai se me ha vuelto dificil.
Skarlet-Camil: Hey gracias! eres muy amable, bueno aqui ya va el siguiente cap (que espero que el final salga bien porque aqui con tanta gente como que no me inspiro :S).
Capítulo 5 Como en los viejos tiempos
- Joven Kai, que bueno que llega, su abuelo lo ha estado esperando –dijo el mayordomo.
- ¿Ya llegó mi nieto? – preguntó una voz a lo lejos, con un tono de enojo.
- Si señor.
- Más vale que me vaya Kai, tu abuelo no parece estar muy contento. – dijo la castaña a su acompañante un tanto preocupada.
- ¿Pero qué horas son estas de llegar Kai? –continuó la voz, mientras se iba acercando hacia la entrada. –Deberías avisar cuando vayas a... - se detuvo al percatarse que su nieto estaba acompañado- ¿Acaso eres Natalia Tereshkova?
- Ahh... ahmm... sí señor, buenas noches.
- ¿Por qué no me dijiste que teníamos visitas? – reprendió el viejo dirigiéndose al mayordomo.
- Lo siento señor, es que usted...
- No, no se preocupe Sr. Hiwatari, yo ya me iba – interrumpió la nerviosa chica.
- Por supuesto que no chiquilla, tienes mucho que explicar. –repuso Voltaire.
- "¿QUEEEE?" – pensó para sí la chica – ehmm... disculpe señor pero no lo comprendo.
- Me refiero a que no puedes irte sin contarme que ha sido de ti y tu familia en todo este tiempo, ¿por qué no nos acompañas a cenar?, así podremos hablar, además no puedes irte con esta tormenta.
- "fiuhhh! pensé que el viejo iba a mandar soltar a los perros"- pensaba Natalia-pues... me gustaría pero...
- No te preocupes por la tormenta abuelo, le ofrecí que un chofer la llevaría a su casa –interrumpió Kai.
- No, ningún pero, te quedarás a cenar, si quieres puedes llamar por teléfono a tu casa– dijo el imponente Voltaire – ¡Como has crecido!, no sabía que tu y Kai se veían de nuevo, es un gusto que tenga nuevas amistades.
Voltaire estuvo haciendo varias preguntas a Natalia durante la cena, a las cuales la chica contestaba un tanto torpemente, tenía muchas cosas dándole vueltas en la cabeza, y entre ellas estaba el ver a un Voltaire tan pero tan amable. Por fuera aún seguía siendo el mismo viejo imponente y orgulloso, pero definitivamente algo en su trato había cambiado y mucho.
- Abuelo, ¿no te parece que ya fue suficiente? –dijo Kai, hacía ya un rato que habían terminado de cenar y el viejo no paraba de abrumar a su invitada con sus preguntas.
- ¿A qué te refieres Kai? – dijo Voltaire.
- Me parece que ya has cansado con tus preguntas a Natalia, además ya es muy tarde.
- No, claro que no, no se preocupe – dijo la chica, a pesar que ya estaba bastante aturdida con todo lo que había pasado desde que había llegado a la mansión Hiwatari.
- Bueno en eso tienes razón Kai, ya es algo tarde, fue un placer Natalia.- repuso Voltaire.
- El placer fue mío, gracias por la cena.
- Creo que no necesito decirte que eres bienvenida a venir cuando quieras.
- Muchas gracias.
- Yo me retiro, Kai acompaña a tu invitada para que la lleven a su casa – dijo Voltaire mientras se iba.
- Sí abuelo.
Los dos chicos se dirigieron a la entrada a esperar a uno de los autos para llevar a Natalia.
- Disculpa la intromisión de mi abuelo, últimamente ha estado muy extraño.
- "¡Vaya que sí!"- pensó la chica- Esta bien, no te preocupes.
- Parece que ya está listo el auto –dijo el peliazul, tratando de romper el silencio.
- Sí... gracias por todo lo de hoy.
- De nada.
- Bueno me voy, nos vemos el lunes. – dijo la chica despidiéndose.
- Sí... oye... - dijo Kai, mientras la chica entraba en el auto.
- Dime...
- Creo que no te di las gracias por esperarme cuando salí de la escuela.
- Ahhh... pues... no fue nada, ha... hasta luego. –dijo sonrojándose.
- Adiós.
Natalia llegó a su casa y se dirigió a su habitación, tenía muchas cosas en que pensar, todo en ese día había sido muy singular; desde el estar de nuevo en la mansión Hiwatari, aunado a la extraña pregunta que había hecho Kai antes de llegar, hasta el encontrarse con un Voltaire tan diferente al que había conocido en los últimos años.
Pasaban ya de las 10 de la noche y la chica no podía dejar de pensar en todo lo ocurrido, en especial en esa pregunta, no podía sacarla de su cabeza y estaba realmente molestándola, así que decidió dormir para poner fin a sus pensamientos aunque fuera sólo por un rato ya que seguramente al despertar comenzarían a atormentarla de nuevo. Pero por más que lo intentó, no logró conseguirlo.
- ¿Qué harías si quieres a alguien que está lejos? – se preguntaba la chica, que al no poder dormir se levantó de la cama y se dirigió hacia la ventana de su habitación para mirar los copos de nieve que seguían cayendo- pero... ¿a quien se refiere con eso?
Tal vez se refiere a sus amigos de los Bladebreakers o a alguien que conoció en uno de sus viajes... pero cuando yo dije que simplemente iría hacia donde esa persona estuviera, él me dijo que no podía, pero no veo por qué, él tiene suficiente dinero como para costearse un viaje al fin del mundo... Aunque supe que a su abuelo no le agradan esos chicos, tal vez por eso él no puede ir a verlos. O tal vez no se refería a ellos, puede que sea a sus padres... aunque después de tanto tiempo creo que ya debe haber superado su pérdida.
También recuerdo que cuando le dije que si no podía ir a donde esa persona estuviera hiciera que la ella viniera hacia él, siento que después de eso se tranquilizó bastante, ¿será que piensa traer a esa persona?
¿Pero quién puede ser?, tal vez sí es uno de los Bladebreakers, pero... ¿por qué ponerse así? ¿No puede conformarse con simplemente llamarlos por teléfono?, además no creo que se trate de alguno de ellos, porque si al viejo no le agradan, no creo que vaya a traerlos y meterlos en su mansión, su abuelo se infartaría...
Aunque ahora que lo pienso el viejo ha cambiado bastante, recuerdo que los últimos años se portaba aterrador, hoy estuvo bastante amable, no pensé que me invitara a cenar... estar de nuevo en esa casa me trajo muchos recuerdos...
La chica seguía pensando en todo lo ocurrido, y los rostros de todas las posibles personas que podrían ser "esa persona" pasaban por su cabeza. Después de un rato el tanto poner a funcionar a su cerebro comenzó a cobrar efectos, así que decidió volver a la cama y tratar de dormir.
- Y... y que tal si lo que dijo no significa lo que yo pienso... - pensaba mientras se cubría con las sábanas- no, no lo creo... o tal vez sí, puede que eso de "alguien que está lejos" sea una algo como una metáfora, tal vez no se refiere a lejos de distancia, si no simplemente a alguien con quien está disgustado o que piensa que no le correspondería... y si se refiera a... no, no lo creo, sería demasiada suerte...
Uhmm creo que me extendí un poco, a ver si no quedó muy aburrido, quería sacar ya en este capítulo a Ray, pero creo que me emocioné demasiado con lo último, espero que no se aburran, si quieren que le cambie o agregue algo ahí me dejan un reviewie, en el proximo cap ya saldrá nuestro querido Ray.