En los brazos del sol

Cáp. II Engañando al destino…

La mañana ilumino su rostro, abrió sus ojos lentamente adecuándolos a la nueva luz. Una ligera sabana cubría su desnudo cuerpo, se levanto encontrando sobre la silla algunas prendas "seguro son del mocoso" pensó dirigiéndose hacia el baño. El espejo reflejo una figura que nunca antes había visto, una muy diferente a lo que él era. Era joven, alto y de cuerpo perfectamente moldeado: sus músculos parecían haber sido trabajados con ahínco sin llegar a ser totalmente voluminosos, su piel ligeramente bronceada "un tono verdaderamente encantador" sonrió sin apartar la vista del reflejo. Escucho la puerta del apartamento abrirse y después ligeros golpes en su propia habitación, la puerta se abrió.

- ¿Kero? ¿estas levantado?

- Pasa…Sakura…te levantaste temprano – la chica sonrió al encuentro del joven – ¿el mocoso se marcho ya?

- No… pero antes quería pasar a ver como seguía todo – se sentó sobre la cama – y… ¿qué piensas hacer con tu nuevo cuerpo? ¿quieres que te acompañe?

- ¡No!… no creo que debas – interrumpió una voz desde la puerta – debes descansar, ese hechizo no es cosa de juego y por algún tiempo tu magia estará restringida

- Pero Shaoran…- contestó suplicante

- El mocoso tiene razón, además yo podría ir a trabajar con él

- ¿Qué? ¿estas acaso loco? ¿piensas que te emplearé tan solo porque eres un guardián? - refunfuño el joven chino

- Bien si no quieres que te acompañe saldré con Sakura – el guardián se acerco hasta la joven, inclinándose y tomando su mano la acerco hasta sus labios – yo te agradezco lo que has hecho por mi y…

- ¡¡¿Qué?!! No… tu te iras conmigo – Shaoran había notado el sonrojo provocado por aquella acción sobre su novia. Sakura estaba totalmente sonrojada – así que vistete presentable

- Mmmm…no tengo ropa… - murmuró el rubio sonriendo

El convertible negro se detuvo frente a un semáforo atrayendo la mirada de las chicas que por el lugar transitaban, "es increíble lo que un cuerpo humano puede lograr" pensó Kero mientras levantaba una mano saludando y provocando sonrojo en las jóvenes. Shaoran procuraba no apartar la vista del frente, pero no podía evitar distraerse con su copiloto "no puedo creer que este sea el peluche, en su forma humana… ¿pero a quién debía tal cambio?" pensó echando a andar el auto.

- Mocoso, necesito de tu ayuda – Shaoran desvió su vista encontrándose con una dorada – Sakura ya debe haberte enterado del porque de mi decisión… no ha sido fácil… sin embargo creo que tu más que nadie podrá brindarme la ayuda que necesito

- ¿Qué te hace pensar que yo te ayudare? además no creo que necesites de mi ayuda para eso… tu mismo lo has visto hace un momento… incluso con Sakura – suspiro deteniendo el auto

- Ella es mi ama y ahora también mi creadora, esto que tu ves no es sino un reflejo de lo que ella es, de su corazón – el joven rubio se miro en el espejo retrovisor – así es como ella imagina que seria si fuese un hombre… no es mi culpa que hasta para ella resulte encantador… sin embargo, esto es diferente se necesita más que esto para conquistar el corazón de quien yo amo

- ¡Cállate peluche! no porque te veas así dejaras de ser un muñeco… si vas a intentarlo necesitaras ropa y esto –dijo bajando del auto y lanzándole las llaves junto con un par de tarjetas – pero recuerda tendrás que pagarme todo trabajando… ¿entiendes?

El joven chino se alejo entrando al enorme edificio. Entendía perfectamente al guardián, no bastaba con ser apuesto para que esa persona supiera apreciarte, aunque también Kero debía aprender que el dinero tampoco le daría lo que esperaba. Fuera del edificio el joven aún permanecía dentro del auto mirando los artículos sobre sus manos.

- Pero… yo no se… conducir

En los brazos del sol

El centro comercial, las grandes tiendas y los enormes gastos. El joven Kinomoto caminaba dentro de este en compañía de su esposa, Nakuru; se habían casado hacia poco tiempo y disfrutaba de los fines de semana con ella. Se acercaron hasta una tienda de ropa para caballero, Touya sabia del pasatiempo de su mujer… comprarle ropa.

- Vamos aquí hay un traje que me encanta

- Nakuru ya hemos recorrido muchas tiendas… ¿qué no te cansas?

- Claro que no tontuelo… todo sea por mi querido esposo

Entraron a la tienda; la mujer recorría cada pasillo tomando diversas prendas y apilándolas, repentinamente se detuvo atrayendo la atención de su pareja. Touya levanto la mirada encontrándose con un hombre, uno fuera de lo común. Akizuki avanzo al encuentro de aquel para desconcierto de Kinomoto, lentamente el joven giro topándose con la pareja. El corazón de Kero se acelero, "¿acaso me habrá descubierto?" pensó "aunque, es una buena oportunidad para probarme" La mujer se detuvo justo frente a él

- Disculpa… ¿nos conocemos?

- No lo creo… pero es un placer – dijo inclinadose levemente – yo soy Mishima no Takemaru

- Yo soy Akizuki Nakuru y también es un placer… - estaba sonrojada, algo de pocas veces, aquello tan solo le había pasado con el que ahora fuera su marido. Pero aquel joven tenia algo peculiar, su energía transmitía una calidez que le resultaba conocida, además era en verdad apuesto

- Parece ser usted una mujer muy interesante… además de hermosa – dijo el joven rubio sonriendo por el sonrojo de su acompañante - …me gustaría poder invitarle algo, claro, si no esta ocupada

- Ella esta ocupada – sonó desde atrás. Kero rió por dentro, se divertiría un poco mas

- Disculpe usted… no sabia que estuviera acompañada… se puede saber quien es

- Bueno… él es ummm – dudó la guardiana

- Soy su esposo…

Touya estaba realmente sorprendido, Nakuru no se había siquiera molestado en mencionarlo, ella acostumbraba hacerlo para quitarse de encima a otros hombres a los cuales también provocaba celos que fuera su esposa, pues ella no solía fijarse en ningún otro hombre, y les veía inferiores incluso para cortejarla; suspiro mirando el sonrojo de su mujer al despedirse de aquel joven.

El altercado con la nueva familia Kinomoto había pasado, estaba completamente sorprendido, incluso esa poderosa guardiana no lo había reconocido… y si había logrado engañar a la perspicaz Rubí moon cualquier otro seria pan comido. La noche caía cuando regreso al apartamento de Li; claro esta que "ese mocoso" le había prohibido regresar al lugar donde Sakura vivía. La tarde se paso volando mientras practicaba conduciendo, después de contratar a alguien que le enseñara, había conocido varias chicas, comprado mucha ropa y claro esta encontrando posibles lugares para visitar.

El joven chino se encontraba sentado en el sofá, parecía esperar algo o a alguien. Cuando Kero entro se levanto inmediatamente dirigiéndose a su encuentro.

- ¿Dónde esta el auto?

- En el estacionamiento… ¿Qué esperabas?

- ¿Aprendiste a conducir? - Shaoran regresó hasta su lugar en la sala seguido por el guardián – mañana tienes que presentarte a trabajar… ya se me ocurrirá de que

- Gracias

- Creo que va siendo tiempo de que me digas quien es la desafortunada mujer que merece todo este esfuerzo

- Esa mujer es…

Continuará...

Notas: Hola!!!!!!!!!!!!!! Hola de nuevo, aquí esta ya el segundo capítulo, ya aumentamos el tamaño se dieron cuenta, aunque no fue mucho, por lo menos nos quedó más largo que el anterior. ¿Qué les ha parecido el apuesto Kero? Lo hemos hecho lo más sexy que pudimos, más adelante se darán cuenta de sus otras cualidades.

Perdón por la tardanza les prometemos recompensarlos en el próximo capítulo que por cierto esta super interesante. Muchas gracias por leer nuestro fic y sobre todo MUCHAS GRACIAS POR SUS REVIEWS, en este fic no tendremos la oportunidad de responderlos pero estamos sinceramente agradecidas.

Manden REVIEWS POR FAVOR!!!!!!!!!!!!!!!

Matta ne