- Bueno, bueno, bueno… qué tenemos aquí…- dijo un Gryffindor acercándose peligrosamente a la nueva.
La chica se lo miró de arriba a bajo y volvió a escuchar lo que hablaban Draco, Blaise, Crabbe, Goyle y Pansy (ésta ultima estaba más enganchada a Draco que una paparra).
- ¡Ei, tu! - dijo el Gryffindor cogiendo a la chica por el brazo, haciéndola voltear hasta quedar en frete de él.- ¿No atiendes cuando te hablan?- los Slytherin's callaron a la vez y también se fijaron en ese Gryffindor. Draco y Blaise ya estaban a punto de hablar cuando alguien se les adelantó.
- ¿No captas las indirectas que te las tienen que escribir y explicar?
- Vaya… tienes genio…
La chica lo miró, por segunda vez, de arriba a bajo.
- Y tú por lo que veo, no tienes nada.
El Gryffindor se había puesto chulito, pero en ese momento el profesor de Pociones entró por la puerta cerrándola de golpe. Así que el Gryffindor y la Slytherin se sostuvieron la mirada. Ella sin mostrar sentimientos y él aguantándola porque tocaba demostrar que era más fuerte que una chica, y más si ésta era de Slytherin.
El profesor Snape se detuvo al ver a los dos mirándose sin cortar su visión (estaban en medio del pasillo, así que los tenia que ver…). Eran los dos únicos alumnos que estaban de pie.
- ¿Señor Thomas tiene algún problema?- la voz del profesor hizo que el chico perdiera el contacto visual.
- Eh…eh… yo…
- 10 puntos menos para Gryffindor, por no estar sentado cuando llega el profesor y 10 menos por impedirme el paso.- El chico se fue a regañadientes a su sitio.
- Señorita Malfoy, hay algún problema.
- No.- Y se sentó al lado de Draco.
- Bueno, como veo, alumnos, no habéis cambiado mucho, así que esto tampoco.- Snape hizo un movimiento con la varita y apareció en la pizarra unas instrucciones, unos materiales y unos minutos (90 minutos, es decir una hora y media).- Esto es lo que debéis hacer, el tiempo ya está indicado, así que a trabajar.
La clase transcurrió sin más los primeros 85 minutos, pues al faltar 5 minutos para el final de la clase se oyó un ruidoso "¡BUM!" que hizo girar la vista de todos hacia un caldero de un Gryffindor.
- ¡¡Longbotton!! – el profesor Snape se levantó e hizo un par de zancadas hasta llegar al caldero que había hecho ese ruido. Los Slytherin ya se reían todos, menos una, la nueva. Y los de Gryffindor lo miraban con desesperación.- ¿Y ahora qué se supone que ha hecho?- esperó una respuesta en vano.- ¡¡Es el primer día!!- El chico lo miraba con un miedo atroz. La nueva mientras miraba la situación tan impasible, que no se sabía si estaba o no feliz por el acontecimiento.- ¡20 puntos menos para Gryffindor!- y añadió con sarcasmo- Y espero que no se vuelva a repetir.- Se fijó en la clase en general.- Pueden empezar a dejar sus pociones en mi escritorio, con su nombre.
Todos fueron a dejar la muestra en el escritorio de Snape, todos menos dos personas. Neville Longbotton, que no tenía poción y la nueva Sly. Ésta se levanto cuando Malfoy, Draco, estaba recogiendo las cosas de su pupitre.
- Draco, recógeme las cosas y sal. Ahora vengo.- La chica fue con su muestra de poción hacia su profesor. Pero en vez de dejarle en su escritorio, espero a que éste se fijara en ella, para darle personalmente.
- ¿Qué opina de la clase?
- ¿El nivel?- dijo ella con su tono de voz impasible. El profesor asintió.- Aburrido. Pero veo que hay gente que no da para más.
El profesor hizo un intento de sonrisa.
- Hay algo…
- Si. Dígame… ¿las clases irán subiendo el nivel?
El profesor no contesto, pero ella dio por entendido un "si". Y se fue.
- Gracias…- dijo ella saliendo del aula.
.-.-.-.-.-.
- ¿Os habéis fijado en la nueva? – preguntó Ron al salir de la clase de Pociones.
- Si y parece… parece… ¿Cómo decirlo?- empezó a contestar Hermione.
- ¿Un muro?- acabó Harry.
- Si, eso.
- Pero… hay algo en ella muy raro.- dijo Harry entre dientes.
- ¿Decías?
- No, nada, que… Snape ya nos ha empezado a bajar puntos.
- Si, pero como Prefecto yo puedo bajarles a los Slytherin.
- ¡Ronald Weasley! No hagas uso de tu poder a no ser que sea algo que realmente…
- Vamos Herms, seguro que tu también les tienes ganas…
- Si claro, pero somos prefectos.
Las peleas entre los amigos del Trío empezaban, este año, un poco más temprano de lo habitual.
Mientras Ron y Hermione discutían sobre los prefectos etc, etc, etc… alguien agarró a Harry por su antebrazo y lo entró en un aula vacía.
- ¡Se puede…!- la persona que lo había llevado ahí dentro le tapó la boca.
- Shhhh… o callas o nos oirán.- Harry miró a la persona un poco desconcertado.- Quitaré la mano, pero tu no dirás nada, sólo escucharas y cuándo acabe asentirás e iras de vuelta a tus clases como si nada hubiera ocurrido.- El chico asintió con la cabeza. La mano se apartó suave mente de su boca.- A las 14 horas te espera alguien en el lago, no llegues tarde o se ir
- ¿Luna?- la chica sólo asintió.- Vaya pues si que has cambiado…
- La gente crece.- se acercó a la puerta.- Recuerda a las 14 horas.- Y dicho ésto abrió la puerta y se fue.
Harry se quedó pasmado mirando la puerta por donde segundos antes la nueva Luna había salido. Había cambiado desde el último año. Había crecido y sus 16 años se empezaban a notar, además sus facciones habían cambiado y él estaba seguro de que empezaría a tener éxito con los chicos.
Salió de la clase aun con los pensamientos metidos en Luna Lovegood cuando de repente chocó con alguien a quien hizo caer.
- Lo… lo siento- dijo el mirando a la chica que había tirado. Ella tenia todo su pelo revuelto, pues al llevarlo suelto y caerse se le habían puesto en la cara.
Harry le tendió la mano para levantarse, y ella la aceptó.
- Así, que tú eres Harry Potter…- dijo Malfoy, la nueva Sly, ya sacudiendo su ropa. El chico se quedo mudo al ver quien era la chica que había tirado.- ¿Todos los Gryffindor's sois así?
- ¿Somos cómo?- contesto él un poco a la defensiva.
- No, ya veo que no, que al menos algunos sabéis hablar.
- Y eso a que viene…
- El Gryffindor de la Poción mal hecha no dijo nada…- su tono permanecía impertérrito. No mostraba emoción alguna.- Harry Potter… vaya, nunca te imagine as
- ¿Imaginarme? ¿Así?… ¿A qué te refieres?
- Pues eso… como creo que ya sabrás, todo el mundo Mágico te conoce.- Los chicos empezaron a andar, tenían la siguiente clase juntos en el aula de Historia de la magia- Y yo no soy una acepción.
- Vaya…- Harry lo dudo un momento, pero prosiguió.- Esto… ¿puedo hacerte una pregunta?
- Ya la has hecho y la verdad es que no. No me hagas ninguna pregunta, hago tarde.- Se hecho a correr hacia el aula como si conociera el camino de toda la vida.
Harry se quedó pasmado ahí, ante la respuesta y miró su reloj. Efectivamente él también llegaba tarde y se puso a correr.
.-.-.-.-.-.-.
- ¿Por qué llegaste tan gusta de tiempo?
- He estado hablando con alguien…
- Draco estaba preocupado por ti, se pensaba que te habrías perdido.- calló un momento y prosiguió.- ¿Y con quien hablabas?
- No es de tu incumbencia, Pansy…
-Tampoco es para que te pongas as
El profesor Binns fue interrumpido cuando la puerta se abrió y apareció la profesora McGonagall.
- Profesor, siento interrumpir…
- No, nada. Quería…
- Señorita Malfoy puede acompañarme por favor.- La morena se levantó y fue hasta donde se hallaba la profesora.- Usted también, señor Malfoy.- El chico hizo lo mismo que su compañera.
Siguieron a la profesora hasta llegar al despacho del Director. Ahí la profesora los dejó que entraran solos.
- Empezamos bien el curso- dijo Draco a su compañera muy flojito.
- Malfoy's pueden tomar asiento, por favor - dijo un viejecito mostrándose muy amable, desde detrás de un gran escritorio con una carta en sus manos.
Los dos se sentaron y miraron con atención al viejecito, mostrándose impasibles.
- ¿Y bien, qué quería?- empezó a hablar Draco al ver que Dumbledore no hacia más que leer la carta.
- Perdonen…- Dumbledore dejó la carta a un lado.- Quería hablar con ustedes… Sobre lo hablado con su padre- dijo señalando a Draco. Éste asintió.- Quería decirles que serán ustedes y nadie más quien haga saber su situación. Son libres de decírselo, ningún profesor sabe nada al respeto, menos, claro esta, su jefe de casa, el profesor Snape.- Hizo una pausa.- Sobre sus calificaciones, señorita Malfoy, hemos recibido los informes- y señaló la carta que antes leía.- y son muy buenas, espero que sigan así…- ella asintió.
Después de hablar un poco más, Dumbledore les dejó salir para poder ir a comer. Era tarde, se habían entretenido más de lo esperado.
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- ¡Malfoy!- tanto Draco como la nueva Sly se giraron al unisón viendo como Blasie se reía por lo sucedido, mientras llegaba a ellos.
- ¿Tanta gracia te hace?- le soltó ella al verle.
- Es que por si no recuerdas… Ayer hablamos y nadie nos presento formalmente. Hoy has bajado rápido a comer y al ir de las aulas no has dicho nada y en estos momentos…- Pansy fue cortada por Blaise, quien quiso terminar la frase.
- Aun no sabemos cómo te llamas.
- Es cierto aun no se te ha presentado como Dios manda - dijo Draco mirando a la nueva Sly. Ella lo miró y luego a sus dos compañeros.
- ¿Y que más da el nombre?
- Pues… no da igual, porque puede pasar esto mismo que acaba de ocurrir.
- ¿Si? ¿Y qué? así al menos tienes para tu risa diaria.- Se sentó en su sitio y se puso algo de comida en el plato, que no tocó.
- Crees que lo que haces tiene sentido- dijo Draco un poco en tono de reproche.
La chica se levantó con una manzana verde en la boca.
- Haz lo que quieras.- Y salió del comedor.
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Eran las dos menos cinco cuándo Harry llegó a la orilla del lago. Miró a su alrededor. No había nadie. Se sentó apoyándose en un árbol, dónde muchos años atrás lo había hecho su padre… se acordaba del recuerdo de Snape…
Alguien llego al lagó. Él se dirigió donde ella estaba.
- Así que eras t
- ¿Yo que?
- Tú eres la que me ha citado aquí a las dos en punto…
- ¿Yo? Creo que te confundes…
- ¡¡FELICIDADES HARRY!!- la voz sobresaltó a la Slytherin a quien la manzana casi se le cayó por el suelo. Harry también se sobresaltó pero éste en vez de caérsele la manzana (puesto que no tenia) dio un bote y se giró para ver que llegaban Ron, Hermione, Luna, Neville, Ginny y unos cuantos más con una tarta y una sonrisa en la cara.
- Fe…fe… ¿Felicidades? ¿Yo?-el chico no daba crédito.
- Creo que si- dijo la Slytherin dándole un suave golpecito en la espalada para que reaccionara.- Será mejor que hagas algo…- y se fue hacia la otra orilla del lago.
- Esto… Gracias.
- Sabemos que el cumpleaños ya ha pasado, pero queríamos celebrarlo a lo grande.
- Y como en vacaciones estas con los Dursley…
- ¡¡La idea se le ocurrió a Ginny!!
- Vaya, pues gracias Gin y también a vosotros.- Harry no cabía en si. Eso le había hecho mucha ilusión.
Los diferentes participantes de la fiesta fueron saludando a Harry y felicitándolo.
- ¿Oye Harry, qué hacías con Malfoy?- preguntó Ron, cuando se dio cuenta de que todos ya no escuchaban mucho y estaban más por el pastel que no por el invitado especial.
- ¿Malfoy?
- Si, la nueva Slytherin…
- Pues nada, ella vino y yo… ¿Por cierto, donde esta?- Ron le mostró con la cabeza la otra orilla del lago.
Allí ahora además de la chica se acercaba un grupito de Slytherin's coronado por Draco.
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- Por fin te encontramos…
- ¿A caso jugábamos al escondite y no me di cuenta?
- Venga va, no seas así.- Blaise se sentó a su lado y Draco al otro. Pansy, como no, se sentó al lado de Draco.
- ¿Ya habéis averiguado mi nombre?
- No, Draco no nos lo quiso decir…
- Dice que si tú no quieres, él no es quien…
- Alguien si es ¿no crees Draco? Tienes el derecho a decirles…
- Ya pero…
- El amor de primos, que bonito…- dijo Pansy al ver como la conversación había sido monopolizadas por los dos Malfoy's.
- ¿Primos?- preguntaron los tres a la vez.
- Si… ¿o no?- Pansy puso una cara rara.
- Es cierto, sino como es que lleváis el mismo apellido. Hermanos no lo podéis ser… sois muy diferentes y tu- dijo Blasie señalando a la chica- no te pareces ni a Draco ni a sus padres…
Ninguno de los dos Malfoy's contesto.
- Me llamo Nayra
- Pues es muy bonito, no entiendo porque no querías decirlo…- la chica sólo alzo los hombros y se acurrucó en el hombro de Draco. Él ni se incomodo ni nada. Dejo que la chica se acurrucara.
- Pansy y yo vamos a ir hacia el campo de Quidditch… a ver que tal se preparan los novatos…
- ¿Novatos?- Nayra levantó la cabeza…
- Si es que hay un par de sitios en el equipo y…
- ¿Cuales son?
- 2 encestadores… Bueno nos vamos.
- ¿Draco, puedo?- preguntó la chica con ganas de que éste respondiera si.