Recuerdos Amargos
««»»
Gracias a Xanae, Gabz, alba-chan por sus review's
Advertencia: Yaoi TrowaXQuatre, mención de HeeroXDuo.
««»»
««»»
Estaban en el baño de la habitación del rubio, tenia una leve herida en la cabeza, y algunas otras en la espalda, Quatre aun se sentía nervioso, y aun mas al tenerlo cerca, sentir sus manos en su piel, su rostro estaba sonrojado, y agradeció estar de espaldas.
-donde están Duo y Heero?- pregunto para evitar sentirse incomodo
-salieron-
-a donde?-
-Duo descubrió porque Heero lo fue a visitar-
-a si?-
-Heero se le declaro y Duo lo acepto así que fueron a festejar, le pidieron dinero a Rasid, después te dirían-
-ah- la plática lo había puesto más nervioso, sintió una leve punzada de celos, al saber que sus amigos se encontraban junto mientras que él sufría de amor y decepción.
Trowa lo hizo voltearse en cuanto termino, Quatre sintió una mirada penetrante recorrer su torso desnudo seguido de una mano que acariciaba su mejilla, conocía esa sensación, una que le indicaba deseo, lujuria, salió del baño, aun sintiendo la mirada encima.
Busco los ojos de Trowa, los vio recorrer su cuerpo, Quatre se le acerco y lo beso fugazmente pero sin separarse. Los ojos verdes subieron a ver su mirada, Quatre vio una mirada de desconcierto pasar a una que no comprendió del todo.
Unos brazos rodearon su estrecha cintura, Quatre recargo su cabeza en el pecho del mas alto, mientras sentía las manos recorrer su espalda sin importar sus heridas, a él tampoco le importo, cuanto tiempo había deseado tenerlo cerca, sentir su cuerpo, descubrir su olor.
Alzo su vista, pudo ver en los ojos de Trowa el deseo, entendió entonces lo que quería, lo volvió a besar, pero esta vez el beso se profundizo en ambas partes, ambos caminaron y cayeron en la cama aun besándose sintió las manos del moreno recorrer su cuerpo, esta vez no detendría a nadie, si entregaría su virginidad seria a alguien que amara, aunque esa persona no sintiera lo mismo.
-me deseas?- pregunto Quatre, al sentir esa boca recorrer su pecho y abdomen
Trowa no le contesto, pero lo miro fijamente, como si quisiera entender la pregunta, Quatre vio la respuesta en ella poco después.
-tómame- dijo sin dudar pero esquivando la mirada
Las manos continuaron su recorrido, Quatre quedo desnudo sin atreverse a hacer los mismo con Trowa, pero este se desvistió a si mismo, sabia que no había vuelta atrás, ya no podía detenerlo, ni detenerse, no era lo que esperaba pero ya había tomado una decisión.
-te quiero dentro de mi- dijo entre gemidos
Trowa se coloco en su entrada, y lo penetro de una sola vez, Quatre tuvo que callar sus gritos, mientras cerraba con fuerzas sus puños en la sabanas, lastimándose con la fuerza que utilizo, el dolor era intenso, varias lágrimas fueron derramadas de sus ojos. Trowa se detuvo, lo miraba confuso.
-continua- le dijo al verlo mientras se acomodaba, y Trowa comenzó a moverse dentro de Quatre.
Podía sentir la excitación tras el dolor recorrer su cuerpo, pero una parte de él le decía que eso estaba mal, no podía entregarse a un amor irreal para huir, impidiéndole disfrutar libremente. Su cuerpo se tenso, supo que todo había terminado, cuando sintió el calor de Trowa dentro de él.
Sintió a Trowa salir de él, y sentir nuevamente su mirada, esta vez le dolió verlo, saber que solo había sido una noche de deseo, que nunca lo amaría, pero lo único que podía decir es que se entrego al amor, cerro los ojos huyendo de la realidad. Sintió que lo tapaban con una sabana, y escucho el ruido de la puerta cuando él salió. Nuevas lágrimas brotaron de sus ojos, el llanto no se hizo esperar, se sintió vacío, sin ganas de nada, solo sacar todo el dolor que llevaba dentro.
-Trowa- dijo en susurro, se hizo ovillo en su cama y dejo que el sueño le diera la calma que necesitaba su adolorida alma.
ζ ««»» ζ
Había sido apenas la noche pasada, sus ojos rojos se nuevamente se humedecieron, varios gemidos llenos de tristeza salieron de su boca, el dolor físico aun no desaparecía, pero no era nada comparado con el dolor de su corazón, de su lastimada alma, bajo la vista para ver el objeto en sus manos resplandecer con los rayos de luna. Sentía que ya nada le quedaba nada, ya no había sentido, había sido su amor un pecado?, era por eso que no podía ser amado?, que su cuerpo sirviera solo para satisfacer a otros?.
ζ ««»» ζ
La alarma del reloj lo obligo a despertarse, su corazón le dolía al igual que su cuerpo, tan solo de recordar lo sucedido llevo a varias lagrimas escaparse de sus hermosos ojos que ahora lucían tristes, opacos.
Se dispuso a cumplir con sus obligaciones y tratar de olvidar, se baño borrando todo rastro de él de su cuerpo, pero por dentro lo tenia grabado perpetuamente. Vio el reloj y se dio cuenta que era tarde, al llegar al comedor vio a Heero y a Duo, juntos, felices, de nuevo sintió celos, sabiendo que él nunca podría estar como ellos, sacudió su cabeza alejando esos pensamientos pues no tenia razón para sentirse así, ellos son sus amigos y debería estar feliz al felices y juntos.
-buenos días chicos- se forzó a sonreír
-Hola Quatre, pasaste mala noche?-
-si, hay mucho trabajo-
-eso significa que no estarás hoy tampoco con nosotros-
-no, lo siento Duo, pero tal vez quieran estar mejor solos-
-eh?-
-Trowa me lo contó-
-ooh-
-bueno chicos, nos vemos porque ya se me hizo tarde-
-adiós-
-adiós-
Al llegar al auto, nuevas lagrimas salieron, lagrimas de tristeza y soledad, no era lo suficientemente fuerte para evitarlo. No lo vio a él ahí, pero no sabia… si realmente lo quería ver.
««»»
Al llegar, ya entrada la noche, se alegro de no ver a nadie, y de no haber tenido antes algún percance con esos chicos que lo molestaban.
Escucho ruidos en el comedor, se dio cuenta que era hora de la cena, dudo en entrar, sospechando que él estaría ahí; pero no podía seguir escapado, paso todo el día pensando, y había decidió hablar con Trowa.
Vio a Duo platicando alegremente en la mesa, al buscar el rostro de él lo vio tranquilo, se preguntaba como es que podía permanecer así, mientras él se sentía morir por dentro. Se sentó en la mesa, y se puso a platicar con Duo.
La cena rápido termino y todos se levantaron a diferentes lugares. Trowa salio rápido ahí, mientras que él aun seguía en su lugar, juntando valor.
Lo encontró en el jardín, se acerco sigilosamente, no quería molestarlo.
-Trowa- el aludido volteo, quedaron de frente, pero sin mirarse -tengo algo que decirte-
-si es por lo de anoche, no importa-
-que?- sabia que no lo amaba, pero saber que lo de anoche no significo nada para él, le dolió mas, no quería llorar, no quería que él supera que tanto le afectaba, pero no podía, era sensible, eso nunca había sido un crimen o si?, así que se decidió -te amo Trowa- y salió huyendo ahí, no quería saber la respuesta.
ζ ««»» ζ
Por eso estaba ahí, después de su huida se refugio en su estudio; miro sus manos, sus muñecas derramaban lagrimas rojas. Alzo su vista, sus ojos acompañaban a sus muñecas en llanto.
Escucho la puerta abrirse, su cuerpo se tenso, no quería que lo vieran, que notaran lo débil que es.
-Quatre- reconoció la voz, he hizo girar la silla, bajando sus manos para no ser descubierto
-Trowa-
-lo que me dijiste hace un momento es verdad-
Bajo la mirada -si, yo te amo- suspiro -perdóname se que nunca me amaras- sus lagrimas parecían no detenerse
-entonces ¿por que te entregaste a mi, si crees eso?- dijo con dolor en su interior
-yo... no lo se... creo que quería que la persona que amaba fuera la primera-
-creí que ya lo habías hecho-
Negó con la cabeza -no, eso es lo que creen todos, pero no me importa- esquivo su mirada
-te entregaste a mi porque me amas?-
-si- Trowa buscaba la respuesta en la mirada que le huía.
-Quatre- el rubio levanto la vista -por que no me lo dijiste en ese momento?-, su voz se oía suave
-eh?, porque no quería que te fueras de mi lado-
-por que crees que haría eso?- el rubio no supo que contestar -Quatre yo también te amo-
Las lagrimas fluían con rapidez en los ojos aqua -pero... pero tu amas a otra persona-
-por que cree eso?-
-hace tiempo fui a buscarte, y te besabas con una chica, no soporte verte con alguien mas y me fui-
-pero yo no la amo, yo te amo a ti, ella solo era una novia para tratar de olvidarte, porque creí que tu no me amabas-, ambos se miraron
-los dos nos equivocamos no lo crees- levanto la vista al techo -lastima que sea demasiado tarde-
-qué quieres decir con eso?, aun no es tarde, nos amamos-
-no,… ya es tarde- levanto sus brazos, Trowa sintió horror al ver las la sangre brotar de las muñecas de quien había conquistado su corazón.
-qué has hecho Quatre?-
-estaba muy triste y… no supe lo que hacia- Trowa lo cargo en brazos y lo saco de ahí para curarlo, pudo sentir la debilidad en el cuerpo de Quatre y temió que realmente fuera muy tarde.
Lo recostó en su cama, la misma que ya habían compartido, las heridas fueron rápidamente atendidas, pero la palidez en Quatre no ayudaba. Se alejaba para llamar a una ambulancia cuando fue detenido.
-Trowa-
-si Quatre?- se coloco a su lado
-no me dejes- suplico
-nunca lo haré, pero tú no me dejes- dijo con tristeza
-no, yo se que estaré bien, porque te tengo a mi lado-
Trowa acomodo algunos cabellos rubios desacomodados, y se acostó a su lado abrazándolo, Quatre se acomodo en ese cuerpo sintiéndolo mas cerca que nunca. El sueño pronto los alcanzo.
««»» ««»» ««»»
Trowa se despertó, a su mente llego lo sucedido en la noche, fijo su atención en quien tenia a su lado, ahí estaba dormido tranquilamente, su corazón se relajo. Varias lagrimas salieron de sus ojos al recordar cuanto daño le había hecho, había estado platicando con Zack y Mattew y se había dejado llevar por sus viles palabras, por eso esa noche se confundió al saber que era el primero dentro de ese frágil cuerpo.
No lo había entendido, ni cuando escucho sus llanto; esa noche no había salido del cuarto, pues la necesidad de contemplarlo no lo había dejado, escucho pronunciar su nombre con mucho dolor en esa dulce boca, fue entonces que entendió su error, pero lo dejo dormir, que descansara, esperaría a que despertara.
Pero no pudo verlo en todo ese día, no lo había encontrado en el desayuno y había llegado muy tarde.
Cuando lo llamo en el jardín, y lo vio ahí tan hermoso quería decirle que esa noche no significaba nada para él, que olvidara su error y lo perdonara; pero cuando escucho la confesión de Quatre, esas palabras que tanto deseaba, no supo que hacer, se había quedado clavado en el piso, fue tal su sorpresa que no se había dado cuenta de cuando el corrió de ahí.
Se arrepentía de ser tan lento y no haber podio reaccionar antes, así no tendría que sufrir al ver la palidez de Quatre.
Había salido de la habitación, llego a la cocina ahí estaba Rashid, le pidió que avisara que ese día Quatre no iría a trabajar.
Llevaba una bandeja con comida cuando se encontró a Duo y a Heero-
-Tro amigo a donde vas con esa comida?- pregunto inquisitivamente
-es para Quatre, se siente mal-
-oh, si lo vi algo cansado ayer, esta bien?-
-si-
-Trowa puedo saber porque se lo llevas tu?- la pregunta fue hecha adrede
Lo miro fijamente -Duo, si es lo que tú piensas-
-qué?, si. Ya escuchaste Heero, siguieron nuestro ejemplo-
-somos un mal ejemplo-
-por que dices eso Heero?-
Trowa se alejo de ahí dejándolos discutir.
Entro a la habitación y lo vio aun dormido, la luz del sol entraba a la habitación dándole la visión de ver a un hermoso ángel. Dejo la bandeja a un lado y se sentó a un lado de su ángel, acaricio delicadamente la mejilla, que empezaba a recuperar su color. Vio descubrir los cristales aqua y sonrío.
-Trowa, estas aquí- exclamo alegremente
-te dije que no te dejaría- se agacho y le beso la frente, sonrojando al rubio. -te traje algo de comer-
Quatre se incorporo para quedar sentado -comerás conmigo-
-si-
««»» ««»» ««»»
La noche llego, Quatre estaba en su cuarto mirando las estrellas, pero esta vez su rostro no mostraba tristeza, sintió unos brazos rodear su cintura y aferrarse a su cuerpo. Quatre tomo los brazos con cariño.
-Quatre, cuando te dije que lo que paso esa noche no significo para mi, me refería que lo olvidaras, quiero que lo volvamos a hacer, y que tu lo disfrutes-
-Trowa- fue todo lo que dijo
El latino lo llevo hasta la cama, esta vez podía ver la mirada resplandeciente de color aqua sin sentirse él mal. El árabe sintió las caricias en su cuerpo, las podía disfrutar sin limitaciones, eran diferentes a la de la primera vez, no eran simples contactos.
Trowa besaba delicadamente cada parte del blanco cuerpo, escuchando los gemidos de placer, cada caricia que se prodigaban eran excelsas, no había limitaciones que les impidieran disfrutar, su respiración aumentaba, antes todos esos sonidos no se habían escuchado tan bien. Quatre sentía descargas recorrer su cuerpo por cada beso en su piel, sus manos ya no se encontraban perdidas en la sabana, sino recorriendo la excitante piel morena.
Una vez mas Trowa se introdujo en el pequeño cuerpo, pero esta vez no fue una invasión, fue una unión de cuerpos, de almas entregándose el amor mutuo. Sus cuerpo se movían a la par, se veían con amor, se besaban sintiéndose juntos, correspondidos.
Unidos ahora después de tanto tiempo, olvidando complicaciones.
««»» ««»» ««»»
Fin
««»» ««»» ««»»
