"COSAS QUE PASAN"
Spoilers: Pues no, ninguno.
Tipo: Challenge-Fic. Lo puso Laia. Las condiciones eran: Oliver Wood, Marcus Flint y Pansy Parkinson; la habitación de Oliver; y la frase "¿por qué tiene que ser de así?"
Rating: Para tooooooooodos ;)
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Hay días en los que todo cambia, y ya no vuelves a ser la misma persona de siempre. Pueden ser grandes cambios, o, por el contrario, ser tan nimios que ni siquiera te des cuenta de ellos. Pero están ahí. Por lo general, estos días no se esperan, ni siquiera se intuyen. Te levantas una mañana como si fuera cualquier otro día corriente, ignorando que los cambios están ahí, acechando.
Evidentemente, Marcus Flint sabía que aquel no era un día corriente. No porque fuera Navidad, y abajo en el comedor estuvieran todos los alumnos celebrando el festín. Una fiesta era una fiesta, y el debería estar abajo con los demás. Sin embargo, corría sigilosamente por los pasillos de Hogwarts para llegar hasta el cuadro de la Señora Gorda.
No todos los días vas a colarte en la casa Gryffindor para robar unos planos de entrenamiento de Quidditch. Respiró nervioso frente al cuadro, cuando este le preguntó la contraseña:
- Ca.. Caramelos de manzana...- dijo con la voz ahogada por el nerviosismo y por la carrera.
Y el cuadro se abrió. Marcus tragó dificultosamente y cruzó el umbral. Había tenido que zurrarle a un griffindor de primer curso y después borrarle la memoria para conseguir la contraseña. En breve vería si el esfuerzo había valido la pena.
Tardó algo mas de lo previsto en encontrar el cuadro de Oliver Wood, capitán del equipo de Gryffindor. Miró nerviosamente el reloj, respirando aliviado cuando comprobó que aun tenía tiempo de sobra. Estas cosas había que hacerlas bien. Rebuscó entre los baúles de Wood hasta que por fin dio con los planos. Desgraciadamente, ni siquiera le dio tiempo a mirarlos, porque escuchó unas voces y pasos que indicaban que alguien se acercaba. Le dio el tiempo justo a meterse bajo la cama.
Oliver entró en la habitación. Y, aparentemente, no venía solo. Marcus escuchó una voz femenina. La voz le resultaba francamente familiar. Ahogó la risa, pensando que podría sacar un buen partido de aquello. Pero la risa se le congeló en la garganta cuando la chica habló. Entonces la reconoció plenamente.
-Pansy!!- dijo Oliver visiblemente alterado.- entonces.... ¿qué significa esto?
- Significa que hemos acabado, que hemos cortado... llámalo como quieras- la voz de Pansy era fría como el hielo, arrastrando ligeramente las palabras.- Está claro que no congeniamos. No hay dos casas mas diferentes entre si que las nuestras. Hay diferencias irreconciliables.
- Ehh....¿Pero porqué tiene que ser así?- aparentemente, Oliver estaba casi al borde de las lágrimas- ¿por qué las cosas no pueden ser de otra forma? Puedo cambiar, Pansy, te lo juro...
- Por favor, Oliver- la voz de Pansy, sonaba fastidiada e incluso monótona, como si estuviera acostumbrada a decir esas cosas todos los días.- No vayas a hacer un drama de esto.
Mientras tanto, Marcus estaba ligeramente en shock. Si habían roto, eso significaba que antes habían estado saliendo juntos. ¡La muy zorra! ¿lo había rechazado a el , Marcus Flint, Capitán de Quidditch de su casa, por Oliver Wood? Que ellos eran de la misma casa, por dios, y Oliver era el enemigo. había que abatirlos, no confraternizar con ellos. ¿Que era lo que tenía Oliver Wood que no tuviera el? De acuerdo, quizás sus dientes no eran lo mejor del mundo, pero nunca había tenido queja de ninguna chica. Por favor, pero si Pansy ni siquiera era guapa!! ¿Sería cierto eso de que había aprendido mucho sobre pociones amorosas?.
- Supéralo, Oliver. Vuelvo al banquete, y no, no hace falta que me acompañes hasta la puerta. Ya se el camino- dijo Pansy socarronamente, desapareciendo por la puerta.
Oliver Wood se quedó de pie en medio de su habitación, muy quieto. Se arrastró hasta la cama, donde se sentó pesadamente. De repente, sintió que alguien le daba unas palmadas en la espalda.
- Oye, que putada lo de Pansy- le dijo Marcus mientras se sentaba a su lado en la cama, y le seguía palmeando la espalda para consolarle.- Tu por lo menos has salido con ella. A mi ni siquiera me dio esa oportunidad....
- Ahh, ¿no?... Pero si tu eres de su misma casa...un momento...¡¿¿SE PUEDE SABER QUE HACES TU AQUÍ??!!
- Eres consciente de que ahora voy a tener que borrarte la memoria, ¿no?- dijo Marcus pacientemente.
-¿Qué?- dijo Oliver sin comprender muy bien. Marcus se encogió de hombros, y aquello fue lo último que vio Wood antes de que el chorro luminoso que salía de la varita de Marcus le alcanzara.
Fin