Capítulo 16:
Los anhelos de Ron

- Jaque mate - se escuchó en la habitación.

Sirius parpadeó un par de veces, Remus alzó las cejas en señal de asombro total, y Ron, como siempre, tenía una adorable sonrisa de triunfo. ¡Qué más daba que Percy sea el que más Premios recibió en el Colegio, o que Charles y Bill sean la predilección de su madre para poner ejemplo, o que ahora los gemelos Fred y George ayuden mucho con los gastos de la casa, eso era nulo comparado a la perspicacia de Ron en el ajedrez mágico, porque siendo objetivos el ajedrez es para personas astutas.

- Deberías competir en los internacionales - observó Lupin con sinceridad - Tu juventud y tu ingenio resaltarían notablemente -

A Ron se le iluminó tanto el rostro que hasta las pecas parecían destellar. ¿Él? ¿Él, siendo el orgullo de su madre por unos benditos instantes? Bueno, no es que envidie a sus hermanos mayores por haber hecho algo bien (los gemelos compensaban los malos ratos en la ayuda económica que daban) y no era que se considerara inferior a ellos, pero tanta dosis diaria de 'Percy ha recibido honores en su trabajo' 'Charles ha hecho otra hazaña' 'Bill es reconocido en sus labores' '¡¡Fred y George!! ¡¡¡Si no se detienen en este instante....!!!' Ah, esa no iba! 'A mis nenes les va muy bien en su negocio'.... y sólo faltaba él, Ron Weasley.

El menor de los varones de Molly quería hacer algo impresionante, algo que no le costara mucho esfuerzo y que deje sin habla a todos. ¿Cómo no se le había ocurrido antes el ajedrez mágico?

- ¿Tú qué crees? - preguntó Remus dirigiendo su cuestión a su amigo de tantos años.

Sirius seguía con el entrecejo fruncido y veía a su pieza de ajedrez de rodillas ante la otra, perteneciente a la de Ron, escenario fácilmente distinguible entre las destrozadas piezas regadas por todo el tablero.

- ¿Cómo pude perder ante un muchacho que bien podría ser mi hijo? - exclamó Sirius en respuesta.

La sonrisa de satisfacción no se iba del rostro de Ron, agregando a esto la expresión de fascinación que tenía al imaginarse alzando a una reina de ajedrez echa con galeones fundidos. Y el premio ¿Cuánto era? Ah, sí! ¡¡Dos mil galeones!!

- Excelente partida - admitió Sirius estrechándole la mano al pelirrojo - Al menos me sirvió para darme cuenta que hay otro mejor que yo en el ajedrez, y para olvidarme por un rato en dónde demonios se metió este muchacho -

Ron sonrió levemente estando completamente seguro que Sirius no había dejado de pensar ni en un instante en dónde estaría Harry, pero también tenía la certeza que, de cualquier forma, Sirius hubiera perdido la partida, aunque Ron nunca imaginó ganar de tan extraordinaria forma.

- Harry volverá bien, que es lo que importa - comentó el pelirrojo - Él tiene ese don de salir bien en lo que se propone -

Sirius miró brevemente a Remus quien asintió levemente. Para Ron, quien suele ser despistado en esos detalles, fue demasiado obvio que, los dos hombres que le acompañaban en aquella habitación, presentían que algo malo rodeaba a Harry; de hecho el propio pelirrojo tenía una mala espina sobre el asunto.

Si tan sólo Harry fuera menos impulsivo, si tan sólo pensara bien antes de actuar... si tan sólo no se dejara llevar por sus emociones.... si tan sólo...

- Hermione está durmiendo arriba - anunció apenas cruzó por la abierta puerta - Ah, lo siento - siguió hablando Harry y comenzó a buscar con la mirada algún reloj. Su verde mirar dio con un reloj negro en forma de perro (Sirius lo había transfigurado para que tenga esa forma) - Buenas tardes -

Por inercia los demás miraron el reloj el cual marcaba las seis menos cuarto.

- Casi buenas noches - dijo Sirius en un cortante tono.

Harry respiró profundamente y atinó a asentir.

- En verdad lo siento mucho, es que recibí esa nota... Hermione en peligro - Harry comprendió que fue un fatal error decir aquellas palabras porque su padrino, su mejor amigo y su antiguo maestro del colegio se pararon al mismo tiempo y por instinto adoptaron una actitud tipo 'Vamos a luchar' - Pero ella está bien - se apresuró a agregar Harry.

- ¿Y no que estaba en peligro? - indagó Sirius.

- Pues se equivocó.... o se equivocaron - sus dos últimas palabras las dijo en forma muy suave, como deseando que su padrino nos las hubiese escuchado.

- Harry ¿Quién firmó aquella nota? - indagó Remus.

- No lo sé - Harry deslizó una mano por sus azabaches cabellos sintiendo una especie de deja vu en esta plática, Remus tenía, en cierta forma, una actitud muy paternal para interrogarlo, al igual que Sirius - Y ya sé que fue precipitado pero no sé cómo explicarme... yo... yo tan sólo quería hablar con ella -

- ¿Y hablaron? - indagó Sirius en un tono un poco más amigable, denotando que seguía enfadado por su salida precipitada y al mismo tiempo que estaba preocupado por su seguridad.

Harry negó con la cabeza.

- Se quedó dormida mientras viajábamos y luego cuando... - Harry no sabía qué palabras utilizar, se sentía incómodo diciéndole a aquellas tres personas que la había abrazado por dejarse llevar por lo que le dictaban sus emociones en aquel instante, a pesar de que confiaba ciegamente en los 3 -... cuando comenzábamos a platicar aparecieron Fred y George..... y luego.... volvió a dormirse -

Ron arqueó una ceja. ¿Hermione pasándosela sólo durmiendo?

- Y está durmiendo ahora - comentó Remus, a lo que Harry asintió - Bueno, entonces dejémosla descansar. Quizá fue muy estresante para ella aquella exposición y no durmió bien algunas noches - el antiguo profesor de Ron miró a Sirius quien tardó unos segundos en captar las palabras de su mejor amigo.

- Sí... Sí... Muy estresante - repitió algo distraído aunque inmediatamente adoptó una actitud de padre enojado - ¿Y por qué no nos dijiste nada? Pudimos haber... -

- Ido a acompañarme - le completó Harry sintiendo que su interior se revolvía entre los remordimientos de culpa y el instinto de que hizo bien en ir sólo - Lo siento mucho pero ya dije que era algo que... tenía que hacer solo -

Sirius frunció el entrecejo un tanto confundido. Pensaba que Harry ya había superado esa fase de expresar lo que siente. Al hombre Black no le hubiese asombrado que su ahijado le contestara 'Tenía que ir a verla porque no puedo estar más sin ella'... no obstante Harry parecía incómodo hablar de lo que siente ante Remus y el propio Ron. Quizá sólo tenga confianza con él para hablar de sus sentimientos... o tal vez fue un momento de debilidad por parte de Harry en aquella noche que se dio cuenta de lo enamorado que estaba.

Sirius dio un par de vueltas alrededor de la mesa, el ambiente estaba un poco tenso. Él no se imaginaba esos pequeños inconvenientes a la hora de vivir con su ahijado. Tenía que admitirlo: Harry enamorado es más impulsivo y a la vez enigmático para explicarse. Una fiel copia de James Potter.

- ¿Y en dónde vive actualmente? - indagó Sirius para calmarse.

Harry cerró los ojos. De todas las preguntas existentes Sirius tuvo que hacerle con la cual delataba que había tomado un traslador.

- A doscientos cincuenta kilómetros al este... al oeste - se rectificó de inmediato - en un edificio de cuatro pisos... en el último -

No le había mentido, era la verdad. Sirius dijo un 'Ah, ya' como respuesta denotando el fin del interrogatorio......

- Harry, ya no eres un niño al cual tenga que estar controlando, de hecho yo no quiero controlarte.... -

..... pero no el final de la plática.

- Sin embargo quiero que recuerdes que allá afuera hay un imbécil maniático que anhela que desaparezcas de este mundo. Comprende que me asusta el no saber de ti, comprende lo fatal me sentiría si el maldito de Voldemort llega a cumplir con su objetivo sólo por un descuido. Comprende que muchos se sentirían morir si algo malo te llegara a pasar, esos muchos somos quienes te queremos -

Sirius lo había conseguido. Harry sintió por breves instantes que estaba frente al Profesor Dumbledore mirándolo decepcionado.

- Está bien.... Prometo no meterme en situaciones raras.... sin avisarte antes -

- Bueno... demos la vuelta a la página y comencemos otra vez - dijo Sirius - Por mi lado creo que hay que comenzar a preparar la merienda. ¿Hermione se quedará esta noche? -

- ¡Por supuesto! - exclamó Harry y al instante sintió un calor invadirle el rostro.

Ron silbó aparentemente distraído mientras abría el refrigerador para servirse un poco de jugo. Luego se volvió a su mejor amigo cuando recordó algo.

- Hey, Harry... ¿Sabes? Pienso entrar al Torneo Internacional de Ajedrez Mágico!! -


Suavidad y calidez. Eran dos sensaciones tan agradables. Hace mucho tiempo que no sabía cómo eran, en especial la última.

Hermione se movió lentamente entre las sábanas mientras batallaba contra sus ojos los cuales parecían curiosos por saber el entorno que los rodeaba. Sin embargo se siente tan bien. Además Harry está cerca de ella ¿No? Se quedó dormida entre sus brazos en el auto y también en el restaurante. Tanto que anhelaba verlo luego de haberle dicho esas tonterías de que iba a dejar todo lo relacionado con la magia.

A Hermione el corazón le dio un brinco y se incorporó abruptamente en la cama. Por instinto llevó sus manos hacia su cabellera intentando acomodarla y luego hacia su rostro para bajar el tono de piel aunque sí le hacía falta un poco de color.

Harry estaba frente a ella.

- Harry... yo lo siento.... me quedé dormida... estaba cansada -

- Buenas noches a ti también Hermione - replicó la conocida voz del pelirrojo Weasley quien se hallaba en el borde de la puerta.

- ¡¡Ron!! - dejó escapar la chica en un tono de alivio intenso, como si fuese la primera vez que lo veía después de tanto tiempo.

El mencionado frunció el entrecejo, no obstante esto fue breve, notable para Hermione pero no para Harry quien le daba la espalda.

- Sí, Ron Weasley. ¿A quién esperabas? ¿A Vicky? - Hermione suspiró pesadamente en respuesta. Esto no le daba buena espina al pelirrojo quien se apresuró a cambiar el tema - Iré a verte algo de comida, sino los 3 elfos domésticos te prepararán algo -

Harry se levantó abruptamente.

- No es cierto, Hermione. Aquí no hay ningún elfo -

- ¿Ah, no? - exclamó el menor de los varones de Molly mientras comenzaba a enumerar con los dedos - Sirius, Remus y Ron - luego se volvió a su amiga - Hemos trabajado como elfos limpiando esta casa, Hermione, mientras nuestro amo Harry se iba de paseo -

- Yo iré por la comida - comentó Harry sonriendo notablemente avergonzado. Él no se sentía capaz de estar en la misma habitación que Hermione para que ella le cuestione el porqué de ese comentario.

Cuando Harry salió de la recámara Ron atinó a sentarse en la misma silla que anteriormente había ocupado el dueño de casa.

- ¿Y bien? - comenzó el pelirrojo.

- Y bien... ¿Qué? - replicó Hermione apretando con las manos las sábanas. Ella sabía perfectamente a lo que Ron se refería. Y Ron sabía que ella sabía.

- ¿Qué demonios hacías junto a esa nauseabunda rata? - encaró directamente Ron, no estaba dispuesto a darle vueltas al asunto, en especial cuando Harry volvería en pocos instantes.

- Yo no lo invité - se defendió Hermione y desvió su mirada hacia la puerta, como vigilando si Harry hiciera su aparición por la misma - Quizá supo de la exposición y simplemente fue -

- Él le dijo a Remus que él había planeado un encuentro entre Harry y tú -

- ¡¡Tonterías!! - se exaltó Hermione - Otra de sus asquerosas mentiras -

Ron notó el tono dolido de su amiga, como si hubiese puesto el dedo de una profunda herida existente en ella.

- Harry quedó afectado, repentinamente salió de la casa y no volvió hasta horas después diciéndonos que estabas acá durmiendo. Se ha puesto bien reacio a contestar totalmente las preguntas de Sirius -

Hermione cerró los ojos en señal de preocupación. Ron sonrió ampliamente.

- Veo que sigues amándolo - comenzó a molestarla.

La femenina sobresaltó más aún y se inclinó hacia la puerta.

- ¿No le habrás.... ? -

- No, claro que no - le cortó Ron con aire ofendido - Me molesta saber que no confías en mí -

- Eres más amigo de él que de mí - se justificó Hermione.

- Bueno, puede ser - replicó Ron - sin embargo no me corresponde a mí decírselo sino a ti -

- No volvamos con lo de antes - pidió Hermione - Ya quiero dejar atrás todo eso -

- ¿Qué fue lo que pasó aquel día? ¿Por qué ese distanciamiento? -

- Ron.. no quiero hablar de nada -

- ¿Por qué el miedo? ¿Acaso no se supone que eres de Gryffindor? - Ron entrecerró los ojos buscando ser lo suficientemente convincente para sacarle información.

- En serio que no quiero hablar... -

- Pues tendrás que hacerlo, luego de la temporada que has de pasarte por aquí - Hermione frunció el entrecejo. ¿A qué se refería Ron? - Porque Harry dijo que te quedarás aquí esta noche... y supongo entonces que a esa noche seguirá otra y otra y otra y otra y... -

- Capté - le cortó Hermione llevándose una mano al pecho en señal de nerviosismo.

- Hermione... ¿Estás bien? - la chica le miró entre confundida y perturbada, lo cual fue aprovechado por Ron - Es que sino te has dado cuenta ya van más de cinco minutos y no hemos discutido... bueno, no como solíamos hacerlo -

La femenina sonrió débilmente. En verdad no se sentía con ánimos de llevarle la contraria por mucho que la haya divertido ese juego amistoso que tenían en el Colegio.

- Sólo estoy.... cansada -

Ron bufó molesto. No había conseguido ni una respuesta satisfactoria por parte de Hermione, si siquiera logró lavarle el cerebro con eso de una declaración amorosa pendiente.

Y lo peor fue que no pudo hacerle ni una pregunta más. Harry llegaba en esos instantes con una bandeja la cual desprendía un exquisito aroma de carne guisada.

- Ummm... - comenzó a decir Ron - Por cierto, Hermione: Quiero entrar en el Torneo Internacional de Ajedrez Mágico -

Harry negó levemente. Cuando a Ron Weasley se le mete algo en la cabeza es muy difícil quitárselo, por no decir prácticamente imposible. Y eso que Harry no imaginaba todas las ideas que pasaban por la mentecita del pelirrojo.

Continuará!!


Jo, jo, jo, jo... y esto qué tiene que ver con el desarrollo de la historia?? U

Y ahora sí!! A la favorita de mis secciones!!! (No hay lata con las vainas que pasan por mi mente en esta ocasión) Contestando a los reviews

Harumi-chan: Intento seguirle, no lo pienso soltar con facilidad aunque el tiempo es cruel (quiero un giratiempo!!!) Gracias por tu mensaje y no te pierdas .

Ilovehermi: (Umm.. quién diría lo de tu nick? Harry? .) Antes de que te vuelvas loca yo estaré internada nn Espero que te haya gustado este capítulo.

CieloCriss: Olvidar lo que dijiste?? Nones, amiga; por algo este fict se llama Olvidar es imposible (un loco título que hasta ahora le veo el motivo =S) ¿Cómo crees que estuvieron las reacciones? Muchas cosas pasan por la mente de nuestros queridos magos, pero no las pongo sólo por pereza (y porque así no echo a perder el fict) Muchas gracias por tus comentarios, me llenan de orgullo. Sí, el tiempo es corto y sí, nos estaremos viendo (no te librarás de mí tan fácilmente risa maquiavélica)

Grisel: En serio una de las mejores? (Je, je.. perdona mi incredulidad pero estoy en las ligas menores) Si te interesa puedes leer 'Presagio Total' o 'Somnium Insidiae' (están en mis historias favoritas, no son ficts míos) y de paso le dan un halón de orejas para que la primera termine el fict y la segunda le siga (Umm.... mejor ni hablo que yo les gano en tardanza nn) O sino 'Una hechicera diferente' que amenaza con volverse cada vez más adictivo.

Queridísima Ady-chan: (Cuidado no te vayas a fracturar algún hueso por tus acrobacias) Y vuelvo a decir (aunque suene monótono) sip, tienes la razón. Arg! O cambio la trama (aunque me quedaría incoherente por el desarrollo) O definitivamente me apunto a tus clases de adivinación, porque.. está bien que aciertes de cuando en cuando pero en todos los mensajes que me has hecho llegar aciertas en un 85%. Por cierto... revisando el otro día unos archivos en mi computadora encontré algo muy interesante sobre un sabor dulce-salado en la palma de la mano..... y un terrible golpe en la cabeza nn ¿Te suena esto? Y te felicito inmensamente porque en hay esa grandiosidad que has hecho!!

Notas finales: El sábado 12 de junio del 2004, a las 14h00 local (Guayaquil - Ecuador) vi la tercera película de Harry Potter, y muy pronto sabrán las consecuencias de este episodio. Por lo consiguiente aquel fict será el único (creo yo) en el cual me basaré estrictamente en los acontecimientos de esa maravillosa película. Y ojalá lo pueda publicar antes de este capítulo y no sea uno de mis alocados proyectos pendientes que no termino de hacer

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Y si le dan clic en mi nick lograrán ver que ese fict ya está hecho (qué lenta que soy, se supone que ese fict iba a publicarse después de este capítulo y todo me salió al revés n.n) y su título es Noche sin fict, información dada para quienes les guste los songficts y La Oreja de Van Gogh. Estoy orgullosa de ese fict, no es que quiera pecar de vanidosa pero me encanta como muy pocas de mis historias, estoy satisfecha con el desarrollo y más que nada por el desenlace. Os invito a leerlo para que se impregnen más de la mágica pareja de Hogwarts. (O como he leído en la red La pareja del Fénix)

Harry Potter y Hermione Granger pertenecen a la escritora J.K. Rowling, la causante de que pase parte de mi existencia escribiendo ficts (principalmente sobre estos dos), todo lo escrito y utilizado es hecho sin fines de lucro, sólo con el mero objetivo de entretener (y de unir más partidarios al HrH nn)

Era casi media noche cuando Harry salió del despacho de la profesora Umbridge. La mano le sangraba tanto que se le había manchado el pañuelo con que se la había envuelto. Se había imaginado que al regresar encontraría la sala común vacía, pero Ron y Hermione estaban esperándolo. Se alegró de verlos, sobre todo porque Hermione no se mostró crítica con él, sino comprensiva.

- Toma - dijo con inquietud mientras le acercaba un pequeño cuenco lleno de un líquido amarillo - , pon la mano en remojo, es una solución de tentáculos de murlap pasteurizados y escabechados. Te ayudará.

Harry metió la mano, adolorida y sangrante, en el cuenco y experimentó una agradable sensación de alivio. Crookshanks se enroscó alrededor de sus piernas maullando fuerte; luego saltó a su regazo y se quedó acurrucado.

- Gracias - dijo Harry reconfortado, acariciando a Crookshanks detrás de las orejas con la mano izquierda.

Harry Potter y La Orden del Fénix (Cap. 15 "La Suma inquisidora de Hogwarts" pág. 339 )