DISCLAIMER: SOLO TOME PRESTADO LOS PERSONAJES Y LOS LUGARES DE LA TALENTOSA ROWLING... NO ES MIO POR SUPUESTO.

CAPITULO 17: CARA A CARA.

Sirius se quedó estupefacto, tanto que se convirtió en hombre sin pensarlo. Él no le había roto el corazón, fue el revés. Ella desapareció y volvió casada con Trangus Malfoy.

Durante los siguientes días se la pasó planeando cómo hacer para hablar con ella. Necesitaba saber por qué decía que él le había roto el corazón, pero sobre todo, decirle que era inocente.

Harry estaba preocupado por su padrino. No lo veía hacía unas semanas y ni siquiera lo felicitó por ganarle a Slytherin. Cuando terminó la clase de Defensa contra las Artes Oscuras de ese día se dirigió a Lupin.

-Remus...que le pasa a Sirius? Dónde está? Se fue del colegio?

-No..está...encerrado en su habitación. Escuchó a Jennifer decirme que iba a matarlo y...
-No!!! Tengo que hablar con ella! Tiene que saber la verdad!

-Harry...Sirius debe decírselo. Además...Recuerdas que te dijimos que ni tu madre sabía por qué se había ido de esa forma?

-Si. Qué tiene que ver eso?

-Bueno, ella me dijo que Sirius le rompió el corazón. El problema es que él jura que nunca le hizo nada y yo le creo.

-Tal vez yo pueda averiguarlo.

-No! Harry! Ven aquí! –gritó Remus, pero ya era tarde, Harry había salido corriendo en busca de su madrina.

Jennifer estaba preparando la clase de esa tarde para los alumnos de 7 cuando Harry entró a su salón, jadeando por haber corrido.

-Ey! Qué te pasa? Por qué estás tan agitado?

-Necesito...saber...si...algo..que...me..enteré..es...verdad..

-Claro, pero primero siéntate y respira.

-Jennifer, tú fuiste novia de Sirius Black?

-Ay Harry, lo siento. Sí, lo fui –respondió Jennifer bajando la mirada. –Mucho tiempo atrás, cuando creí conocerlo.

-Y...por qué terminaron? Qué te hizo?

-No me gusta recordar esas cosas. Me hace mal saber que estuve por casarme con semejante escoria. Pero Harry, escúchame bien: él no va a hacerte daño, yo no lo voy a permitir.

-Sí...claro. –Respondió Harry conteniéndose para no reír. –Eh...voy a almorzar, que ya perdí mucho tiempo y no quiero llegar tarde a Pociones. El profesor es un ogro.

-Me imagino. –Dijo Jennifer riendo.

En el Gran Salón, Harry se acomodó junto a Ginny y le hizo señas a Lupin sobre sus malos resultados como detective, negando con la cabeza.

-Qué te sucede?

-Nada Ginny, intenté averiguar por qué Jennifer dejó a Sirius, pero no me respondió. Me dijo que ella me iba a cuidar o algo así.

-Tal vez Malfoy sepa el motivo. –Dijo Hermione, entrando en la conversación.

-Y se supone que le tengo que preguntar?

-Si quieres saberlo...es tu última opción. –Dijo Ginny.

-No! También le queda Snape! –exclamó Ron riéndo a carcajadas.

-Gracias, pero prefiero a Malfoy.

Luego de la clase de Pociones, donde hicieron un repaso de todo lo aprendido en la primer mitad del año, Harry se decidió a hablar con Draco.

-Malfoy! Necesito hablarte.

-Qué quieres Potter? No tengo tiempo que perder.

-Sólo quiero hacerte una pregunta sobre la profesora Snape.

-Crabbe, Goyle, esperen en la Sala Común. Cuál es esa pregunta?

-Eh...Tu...sabes por qué dejó a Sirius Black?

-Qué? –Malfoy rió cínicamente, torciendo la boca y levantando una ceja –Pretendes unir a tu asqueroso padrino con Tiny nuevamente? Olvídalo! No sé por qué lo hizo, y de saberlo no te lo diría jamás. Estás intentando formar una familia, huerfanito? Escucha bien: búscale otra mujer, porque Tiny es mía y no pienso compartirla contigo, Potter. –Sentenció Draco girando sobre sus talones y dejando a Harry parado solo en el pasillo.

Llegó el receso de Navidad y Hogwarts quedó prácticamente vacío. Harry y los Weasleys eran los únicos en Gryffindor (los padres de Ron habían ido a visitar a Charlie a Rumania y no tenían dinero para llevarlos a ellos). En Slytherin, habían quedado sólo Draco y Pansy Parkinson. El rubio sospechaba que ella sólo estaba ahí porque él se quedaba y le molestaba muchísimo.

Sirius ya salía de su habitación y, dentro de la Sala Común de Gryffindor (donde pasaba la mayor parte del tiempo), tomaba su forma humana.

-Tenemos que aprovechar que Snape no está. Se fue a hacer algo que le pidió Dumbledore por ahí.

-Si Harry, pero está Malfoy, y no se separa de ella ni un segundo. –dijo Ron.

-Yo me hago cargo del estúpido –ofreció Ginny. –no se preocupen.

-Estás segura? –preguntó Harry –no quiero que te haga nada.

-Tranquilo, tengo una idea que va a funcionar seguro.

-Si tu lo dices...sólo falta un "detalle"...Sirius.

-Malfoy!
-Qué quieres Weasley? No molestes! Vete a pedir limosna por ahí!

-Es tu tía IDIOTA! Me mandó a buscarte!

-Vete Pansy. Después te alcanzo. –dijo Draco siguiendo a Ginny en silencio hasta un salón vacío.

-Ahora –dijo Ginny sonriendo –quiero que me digas por qué me sigues tratando así de mal. Creo haberte demostrado que puedes confiar en mí. Nadie se enteró que te vi llorar.
-Para esa estupidez me hiciste venir?

-Si. Accio varita! –la varita de Draco voló hacia sus manos, luego se dio vuelta y apuntó a la puerta –cerra porta. No te irás hasta que no me contestes.

-Déjame en paz Weasley! Abre la puerta!

-No. –dijo Ginny sonriente.

-Dame mi varita!

-Jamás! Si quieres puedes quedate en silencio, pero no te lo recomiendo, porque hasta que no me hables no te dejaré salir.

-Te digo que me des mi varita! –dijo Draco apretando los dientes y acercándose a Ginny.

Ginny llevó sus manos con las dos varitas hacia su espalda y se apoyó en una pared para que no pudiera quitárselas. Draco se acercó a ella desafiante, con los dientes aún apretados y los ojos furiosos.

-Vas a golpearme? Sería lo último que te falta Malfoy.

-Es tu última oportunidad Weasley. Dame mi varita.

-No Malfoy. Y no me asustas, te he visto llorar, recuerdas? –repuso Ginny intentando sonar segura, pero por dentro estaba muerta de miedo, qué iba a hacer si Malfoy le pegaba?

-Tú te lo buscaste –dijo Draco y comenzó a pellizcarle suavemente la cintura.

Ginny no podía detener su ataque de risa. Odiaba que le hagan eso porque era muy sensible a las cosquillas. Pero se mantenía firme y no le iba a entregar la varita.

Poco a poco, lágrimas de alegría comenzaron a brotar de sus ojos. El ataque de risa que tenía era tan incontenible que ni siquiera notó que Draco había dejado de hacerle cosquillas y la miraba sorprendido.

Ella era como su Tiny, capaz de llorar de risa. Ël nunca había logrado eso, él casi nunca reía genuinamente. Con una de sus manos secó las lágrimas de Ginny, sin dejar de mirarla. En ese momento, la pelirroja se dio cuenta de que algo extraño le sucedía a Malfoy.

Draco la miraba muy intensamente, como nunca antes lo había hecho, apreciando cada una de sus pecas y el azul profundo de sus ojos, y se acercaba cada vez más a ella. Le tomó gentilmente el rostro con sus manos y posó sus labios en los de ella. Luego presionó con sus labios y le abrió la boca para besarla. No sabía por qué lo estaba haciendo, pero le gustaba.

Ginny lo dudó un momento, pero luego pensó en Sirius y le devolvió el beso. Definitivamente sabía besar, lo hacía con firmeza, pero dulcemente, como si de verdad la quisiera.

Draco tomó a Ginny por la cadera y la acercó a él, al tiempo que le besaba el cuello. Luego la miró a los ojos, le sonrió y volvió a besarla. Estuvieron así unos minutos, hasta que Ginny reaccionó y se dio cuenta de que estaba besando a Malfoy y que ese era su primer beso! Además, ella quería a Harry.

-Draco...detente....por....favor.

-Por qué? –preguntó sin dejar de besarla.

-Porque...esto no está bien. Yo no te quiero, y tu no me quieres a mí.

-Ya lo sé Weasley, sólo intentaba recuperar mi varita. –Dijo Draco sonriendo cínicamente, como siempre lo hacía y separándose de Ginny.

-Aquí la tienes. Y te agradecería que no abras la boca.

-Ya la he abierto –contestó arrastrando las palabras y sonriendo de costado.

-IDIOTA! Te digo en serio! Tu no hablas y yo tampoco.

-Si, si..de cualquier modo, no me interesa divulgar que tuve que besar a una pobretona. Alohomora. Adios!

Jennifer estaba en los terrenos del colegio descansando. Le encantaba estar entre la nieve y sentir el frío a su alrededor. Todo el frío de la nieve y la brisa rozando la piel de su rostro la hacía sentir viva. En esos momentos no se sentía la "Señora Fría", como le decían algunos alumnos y como ella misma solía verse al mirar su reflejo en el espejo.

-Accio varita –dijo una voz detrás de ella, y su varita salió de su túnica para ir a parar a las manos de un hombre.

-Siruis Black! Cómo te atreves a venir a Hogwarts? –gritó Jennifer poniéndose de pie.

-Jennifer, escúchame.

-Entrégame la varita! Pelea con dignidad por lo menos!

-No quiero hacer esto, pero me obligas. –dijo Sirius, y con un movimiento de su varita hizo que de la nada aparecieran sogas que ataron a Jennifer.

-Cobarde!

-Me vas a escuchar, sin hablar...o tengo que amordazarte también?

-Habla de una vez!

-Jennifer, yo no los maté. Soy inocente.

-Crees que soy idiota? Yo fui a verte a Azkaban!

FLASHBLACK

Sirius estaba por cumplir su primer semana en Azkaban. La puerta de su celda se abrió. Esperaba ver una mano viscosa dejando comida en el suelo, pero lo que vio fue un par de piernas que se asomaban debajo de una túnica negra.

Alzó la vista lentamente y la vio. Jennifer estaba de pie frente a él, mirándolo incrédula. Pudo ver las lágrimas que brotaban de sus preciosos ojos azules, que ahora lucían apagados y sin vida. Pálida y con ojeras, parecía no haber dormido en días.
Sirius comenzó a llorar también. Jennifer se acercó y se arrodilló ante él. Acarició su sucio cabello negro, llevándolo hacia atrás, dejando su cara libre y lo tomó del mentón para levantar su rostro, buscando su mirada.

-Es mi culpa, Lily y James, es mi culpa, yo los maté, Peter, es mi culpa. –Repetía Sirius sin dejar de llorar y sin poder mirar a los ojos a Jennifer.

-Ojalá mueras pronto Black. –le dijo Jennifer fríamente al oído y salió de la celda. En cuanto atravesó la puerta corrió desesperada hacia fuera de esa horrorosa cárcel.

Cómo habia sido tan idiota de creer en él y tener la esperanza de que todo fuese un error?

FIN FLASHBACK

-Lo...lo había olvidado. Jen, te juro que no fui yo. Fue mi culpa, no lo niego, pero yo no los traicioné. Fue Peter, él era el espía, él era el guardián de su secreto.

-PETER ERA INCAPAZ DE HACER ALGO ASÍ!!!! EL IDOLATRABA A JAMES Y ADORABA A HARRY!!!! ÉL ERA TU AMIGO Y LO MATASTE TAMBIÉN!!!!

-Yo no maté a nadie Jen, te lo juro –dijo Sirius con lágrimas en los ojos y arrodillándose frente a ella. –Peter simuló su muerte para que me culpen. Él...fue mas rápido que yo.

-SÍ!!! SEGURO!!! Y C"MO SE FUE SIN QUE LO VIERAN?? ÉL NO PODÍA DESAPARECERSE!!!

-Peter es un animago. Una rata. Se transformó después de matar a todos esos muggles y escapó. Tienes que creerme. –rogó Sirius acariciándole el cabello.

-NO ME TOQUES CON ESAS MANOS DE ASESINO!!!! TRAIDOR!!!

-Te juro que yo no lo hice! Es mi culpa porque yo convencí a James de que Peter guardara su secreto. Debería haberlo hecho yo...

-PETER PETTIGREW ERA UNA EXCELENTE PERSONA!!! PERO ERA EL MAGO MÁS INÚTIL QUE CONOCÍ EN MI VIDA!!! ÉL NO ERA CAPAZ DE VOLAR LA CALLE COMO TÚ LO HICISTE!!! Y MUCHO MENOS DE SER UN ANIMAGO!!! SUÉLTAME Y PELEA, O MÁTAME AHORA, PERO NO VOY A CREERTE ESA MENTIRA!!!!!

-Tiny? Con quién hablas? –dijo una voz a lo lejos.

-Draco. –Susurró Jennifer mirándo al lugar de donde provenía la voz, y cuando volteó a ver a Sirius, él ya se había ido, dejando su varita y deshaciendo el hechizo.

-Tiny?? Estás bien?

-Si...estaba soñando. Me quedé dormida acá afuera. No pasa nada.

QUE OPINAN?

DEJENME SUS REVIEWS....

BESOS

BARBYMALFOY