DISCLAIMER: Nada de este mundo de fantasía me pertenece. Todo es propiedad de JK Rowling y sus asociados.
CAPITULO 33: LA INQUISICIÓN.
Cuando ingresaron a la oficina de Dumbledore, Draco no podía creer lo que veían sus ojos. Harry, Ron, Sirius, Remus, Ojoloco Moody, McGonagall, Hagrid, Arthur Weasley y algunas otras personas desconocidas estaban sentados en cómodos sillones que habían aparecido contra las paredes de la oficina.
-Bueno –dijo Jennifer fríamente –parece que nos han invitado a una pequeña fiesta, me temo que no trajimos la ropa adecuada Draco.
-Jennifer, dejemos las ironías para otro momento. –dijo severamente Dumbledore –Estás aquí porque los señores Potter y Weasley me han informado que estás involucrada en una relación sentimental con Lucius Malfoy. Es cierto?
-VOY A MATARTE POTTER!
-Draco –dijo Jennifer poniéndo una de sus manos en el hombro de su ahijado –Tu harías lo mismo si el mortíf4ago fuese su padre. Siéntate ahí y guarda silencio, o me veré obligada a sacarte de aquí.
-Como digas Tiny –aceptó Draco, sentándose frente a Harry y Ron, que lo fulminaban con la mirada.
-Y bien? Es cierto?
-Lo es –dijo Jennifer con la cabeza erguida y sus congelados ojos azules enfocados en los del Director –De hecho, vamos a casarnos en noviembre.
Sirius bajó la mirada al suelo y apretó la mano de Harry, quien estaba sentado junto a él. Remus la miraba atónito, mientras McGonagall cerraba los ojos y negaba con la cabeza. Moody tenía su varita fuertemente empuñada y Severus suplicaba mentalmente que la dejen ir sin hacerle daño. Dumbledore sólo la miró decepcionado y continuó hablando.
-Entonces debo pedirte que dejes Hogwarts de inmediato.
-Bien. Recojo mis pertenencias y me voy? O prefiere que me vaya y luego usted me las hacer llegar?
-Puedes tomarte tu tiempo para guardar tus cosas antes de irte.
-Perfecto. –dijo Jennifer sin despegar sus ojos de los Dumbledore –Le informo que este será el último año de Draco en el colegio, porque su padre y yo hemos decidido que vaya a Durmstrang. El programa de estudio es mucho mejor que el de Hogwarts, además...esta institución deja mucho que desear ultimamente.
-QUÉ ES LO QUE PASA CONTIGO? –le gritó Sirius soltándose del agarre de Harry –NOS MENTISTE SIEMPRE! ERES LA ESCORIA MAS GRANDE QUE VI EN MI VIDA!
-Bienvenido al mundo real, Black.
-TU NO QUERÍAS MATARME POR HABER TRAICIONADO A JAMES Y LILY! TU QUERÍAS VERME MUERTO PORQUE SOY EL PADRINO DE HARRY, VERDAD?
-Pero que poder de deducción! –exclamó irónicamente Jennifer.
-CUANDO TE UNISTE A ÉL? CUANDO TE PUSO LA MARCA?
-Basta Black –dijo Severus amenazadoramente.
-No tengo Marca Tenebrosa –respondió Jennifer tranquilamente. –Hay otras maneras de demostrar lealtad, Black.
-TE ACOSTASTE CON ÉL!! –dedujo Sirius histérico ante la imagen de Jennifer y Voldemort juntos de esa manera.
-No. Lo hice contigo. Demasiado tiempo para mi gusto.
-NO ERES MAS QUE UNA MALDITA MORTÍF4GA! –le gritó Sirius peligrosamente cerca, desenfundando su varita.
-NO TE ATREVAS A TOCARLA BLACK! –lo amenazó Draco, sacando la suya propia e interponiéndose entre ellos, mientras Severus se acercaba imitándolo. –TU NO SABES NADA!
-Calla Draco y siéntate –ordenó Jennifer.
-NO! YO NO VOY A PERMITIR QUE TE VAYAS CON ÉL! –Draco volteó hacia Dumbledore –USTED NO PUEDE DEJARLA IR! ÉL NO SÓLO QUIERE MATAR A POTTER!
-Cierra la boca ahora Draco!
-NO! EL MATÓ A MI MADRE! ES CAPAZ DE MATAR A GINNY SI SE ENTERA QUE ESTOY ENAMORADO DE ELLA! Y TE VA A MATAR A TI!
Jennifer cerró los ojos, ante la confesión inesperada de Draco, mientras el rubio sólo miraba a Dumbledore esperando una respuesta satisfactoria a su pedido. Sirius aún sostenía su varita en alto, pero su mano temblaba incontrolablemente. Severus observaba a Draco a los ojos, y supo que las tormentas grices no mentían, entonces comprendió.
Harry y Ron no daban crédito a sus oídos. Malfoy había dejado a Ginny para salvarle la vida? O era sólo un plan que ellos dos habían formado para evitar que echen a Jennifer de Hogwarts?
Arthur Weasley miraba al pequeño Malfoy atónito. El sólo hecho de que su hija corriera peligro era escalofriante y aterrador. Minnerva McGonagall relajó sus facciones y reprimió las lágrimas que deseaban abandonar sus ojos. Mientras que Dumbledore se permitió una pequeña sonrisa.
-Jennifer –la llamó Severus –Estás arriesgando tu vida por ese juramento? –ante el silencio de su hermana prosiguió –Por qué no me lo dijiste? Por qué me hiciste creer que aún lo amabas?
-Creí que me conocías un poco mas Sev, y que conocías la clase de mierda que es Lucius Malfoy. Sabes muy bien que él no fue capaz de defender a Draco cuando ese hombre lo atacó. –dijo Jennifer en un susurro enfrentándo los ojos negros de su hermano –YO tuve que ponerme delante suyo para que deje de agredirlo! Lucius Malfoy no evitó SU muerte!
-Jenny, cálmate –pidió Severus al ver las primeras lágrimas escaparse de los ojos azules frente a él.
-Lucius Malfoy dejó que Trangus, su propio hermano, se enfrente a duelo con él, sabiendo que no tenía posibilidades de vencerlo. Trangus murió defendiéndonos a nosotros! Sabes que ese día yo morí con ÉL!
-No digas eso Tiny –le pidió Draco.
-Si no fuera porque juré sobre SU tumba que iba a proteger a mis dos ahijados con mi vida, yo no estaría aquí y lo sabes. Si tengo que casarme con el hombre que mató lo mas importante para mí, lo haré. Porque Lucius lo planeó.
-Qué? –preguntó Severus.
-Lucius pretendía que Narcissa se enfrente a él y muera. Conociendo a Trangus, sabía que iba a retarlo a duelo para vengar la muerte de Narcissa, porque no iba a dejar que lo haga yo. El muy bastardo no me dejó matarlo! Pero lo peor...es que, si los aurors del Ministerio no llegaban en el momento en que lo hicieron, él se habría escapado, porque Lucius lo estaba ayudando a hacerlo! LUCIUS MALFOY ES TAN CULPABLE COMO ÉL! CÓMO DEMONIOS CREÍSTE QUE PODÍA ESTAR ENAMORADA? –Jennifer hablaba con un incrédulo Severus Snape, mientras todo su cuerpo se sacudía debido a los sollozos que se habían apoderado de ella. –Sabes lo que sentí cuando me desperté?? Sabes lo que quise...
-BASTA! –le ordenó Draco sujetándole los hombros, pero su tía no reaccionaba –BASTA MAMÁ!
Bingo. Draco dijo la palabra clave. Ahora Jennifer lloraba mas que antes, pero ya no hablaba ni gritaba a su hermano. En cambio, apoyó su cabeza en el hombro de su ahijado y se dejó abrazar y consolar por él.
Severus sentía que su corazón se estaba quebrando en dos. Odiaba ver llorar a su hermana, y odiaba que recuerde el fatídico día que se quedó sin su familia. Se acercó a ellos dos y los abrazó también, en un intento de contenerlos. La culpa que sentía por no haber estado ese día con ellos era demasiada, tanta que no podía vivir en paz consigo mismo.
El resto de los miembros de La Orden Mágica, así como Ron y Harry, observaban a los tres cuerpos en el centro del despacho con una mezcla impresionante de sentimientos. Cómo era posible que nadie se hubiera dado cuenta de lo que verdaderamente sucedía? Cómo habían desconfiado de esa mujer, que estaba a punto de sentenciar su propia vida junto a uno de los hombres mas despiadados sobre la Tierra?
-Jennifer –dijo Dumbledore interrumpiendo el silencio sepulcral del despacho –Te prohíbo que te vayas del Colegio. Draco, llévala a su cuarto, necesita descansar.
-Vamos Tiny...no estás bien..tienes que dormir. –susurró Draco secándo con su mano las lágrimas de su madrina –POTTER! SI TANTO LA QUIERES...ME PUEDES EXPLICAR QUE HACES AHÍ SENTADO?
Harry se puso de pie, impulsado por una fuerza extraña a su cuerpo y se acercó a Jennifer y Draco, dispuesto a acompañarlos. Draco se volvió hacia Ron y lo amenazó, diciéndole que si ginny se enteraba de sus motivos para dejarla, él iba a sufrir las consecuencias.
Ya en el domitorio de Jennifer, la acompañaron hacia la cama, y dejaron que se siente, apoyándo se espalda contra la pared. Abrió sus brazos, incitándolos a que ambos la acompañen y los abrazó como si se le fuera la vida en ello.
-Lo siento Jen....yo creí que...
-No Harry. Está bien. Hiciste lo que debías. No tienes por qué pedirme perdón.
-El único que tiene que arrastrarse para pedir disculpas es mi padre. –escupió Draco –Si pudiera lo mataría con mis propias manos.
-No me gusta escucharte hablar así, Draco –dijo Jennifer acariciándole el cabello. –No quiero que te llenes de odio contra él. Créeme que yo se que no es agradable odiar a tu padre.
-Y qué quieres que sienta Tiny? Él mató a mi mamá!
-Lo sé. Y te juro que pagará por eso. Pero hay que esperar, no voy a permitir que tu te conviertas en un asesino y que él muera como un mártir.
-Jen? Quién fue ese hombre del que hablaste? –preguntó Harry muy confundido.
-Creo que tengo que explicarte algunas cosas –dijo Jennifer sonriendo demasiado forzadamente –Verás...
-No! –la interrumpió Draco –Yo voy a contárselo, no quiero que tu lo revivas...suficiente tienes ya.
-Está bien. –aceptó Jennifer agradecida –Pero ahora vayan a dormir, yo necesito descansar.
-No nos movemos de aquí hasta que estés dormida –dijo Harry.
-Estoy de acuerdo.
-Chicos...de verdad estoy bien. Sólo cansada. Quiero dormir y ustedes deben hacer lo mismo. Vayan por favor –Jennifer les dio un beso de despedida en la frente, haciéndoles notar que no iba a aceptar que se queden.
Ambos besaron sus mejillas y se dispusieron a irse del dormitorio. Pero cuando abrieron la puerta, se encontraron con Sirius, que aún estaba pálido y con los ojos irritados de llorar.
-VETE BLACK! TINY NECESITA DESCANSAR!
-Es lo mejor Sirius –dijo Harry impidiéndole el paso -Vamos.
-No chicos, necesito hablar con él. Déjenlo entrar y vayan a sus habitaciones. No me quiero enterar que estuvieron dando vueltas por ahí.
POR CADA CAPITULO QUE ALCANZO A PONER, NOS ACERCAMOS MAS A DONDE LO DEJAMOS EN EL FORO.
BESOS PARA TODOS Y GRACIAS POR SEGUIRME ACA.
BARBY