HANA, the Vampire Slayer

By: reiko shiro

Chap VIII: who I ought to be

Menrick recorrió el lugar por enésima vez pero ni rastro del joven pelirrojo. Su rostro sereno y amigable no hacía más que reflejar el claro sentimiento de preocupación que lo aquejaba "dónde estás Hanachan?" se preguntaba a sí mismo. El sol ya se encontraba en lo alto del cielo... pero ni rastros del joven potencial. "Todo fue mi culpa" se repetía una y otra vez.

Hanamichi abrió sus ambarinos ojos para encontrarse en una habitación que no era suya y en una cama que tampoco le era familiar. Se sentó y se refregó su cabeza. Se sentía algo adolorido y mareado. Rodó su mano por sobre su rostro y la deslizó por sobre la piel de su cuello... allí donde sintió un dolor punzante. Se palpó con cuidado y pudo sentir dos orificios que rasgaban su piel morena. " qué demonios?" se puso de pie, dejando caer la sábana que cubría su cuerpo .... y quedando de esa manera, desnudo. " qué demonios?!" volvió a exclamar al verse sin ropas. En eso la puerta de la habitación se abrió, dejando ver la figura del jugador número 11 de Shohoku: Kaede Rukawa.

Sakuragi al ver la figura del muchacho se quedó estático durante unos segundos... luego pudo sentir como la mirada de Rukawa recorría su cuerpo sin descaro y fue cuando recordó estar como Dios lo había traído al mundo... manoteo las sábanas que estaban en el suelo y se cubrió con ellas.

"qué tanto miras??" le preguntó con mirada desafiante y no muy amable.

" aquí tienes ropa" le dijo el chico de ojos zorrunos mientras le extendía una muda para que se pudiera cambiar. Hana la tomó dado que no tenía nada más que vestir y luego le clavó la mirada a Rukawa " te piensas quedar a ver como me cambio?"... Rukawa sonrió mientras se apoyaba contra el marco de la puerta "no me importaría" le respondió.

El rostro del pelirrojo palideció. Qué estaba sucediendo? Estaba en un universo paralelo o qué?! O sea, Rukawa... el témpano de hiel como era conocido... estaba sonriendo.

" estaré en la cocina" dijo con voz monótona el joven de cabellos color ébano dado que veía la clara expresión de sorpresa en Hanamichi.

Y así fue como el pelirrojo quedó solo en la habitación. Quedó en silencio durante unos segundos, intentaba comprender que era lo que sucedía pero ninguna explicación venía a su mente. Suspiró y dejó caer la suave tela que cubría su cuerpo para poder, de esa manera comenzar a vestirse con las ropas del zorro.

" huelen.... a Rukawa" dijo en un susurro mientras acariciaba la suave tela azul de la remera. Quedó embriagado ante el aroma que invadía sus sentidos, no supo cuanto tiempo... pero supo que recién luego de varios minutos pudo reaccionar, observó la habitación... y se acercó a la puerta que supuso era el cuarto de baño.

Y efectivamente, lo era. Entro en esa pequeña habitación , se acercó al lavabo y abrió la canilla de agua fría. Humedeció su rostro y sus cabellos. Levantó un poco la mirada para encontrarse con el pequeño espejo que había frente de él. Fue allí cuando pudo examinar con cuidado la marca en su cuello. Estudió cada detalle de aquella marca, mientras que a su vez la palpaba con la yema de sus dedos. Le dolía un poco.... " son... parecidas..." dijo mientras tironeaba delicadamente del cuello de la remera para dejar a la vista otra cicatriz pero esta algo más antigua, de varios años atrás pero muy similar a la nueva.

Golpes a la puerta lo sacaron de su ensimismación. Abrió la puerta y se encontró con Rukawa " estás bien?" le preguntó.

" s....sí" susurró. Desde cuándo Rukawa era tan buen compañero? Desde cuando se preocupaba tanto por él?

" ok...." se giró sobre sus talones y se dispuso a salir de allí pero la voz de Hanamichi lo detuvo.

" qué sucedió?" la curiosidad podía más que cualquier otra cosa.

" qué sucedió ... con qué?"

" por qué estoy aquí??... yo estaba en el cementerio..." comenzaba a hacer memoria de los hechos sucedidos " me encontré con.... Menrick!!" fue recién que recordó a su vigilante. Dónde se encontraba él? Estaría bien? Debía ir a buscarlo. No lo pensó dos veces y se dispuso a salir de allí pero algo lo sujeto fuertemente del brazo. " dónde crees que vas?" le preguntó Rukawa con voz fría.

" debo ir a buscar a Menrick, tal vez necesite ayuda..... tal vez esos monstruos lo atraparon" decía cada vez más horrorizado ante las ideas que venían a su mente.

" o tal vez esta mucho mejor que tú" cada vez que escuchaba el nombre de Menrick pronunciado por los labios de Hanamichi le daba una oleada de celos que jamás creyó poder llegar a sentir.

Durante toda su existencia había compartido algunos años con sus casuales 'amantes'... seres hermosos ya sean humanos y o hijos de la oscuridad como él pero ninguno de ellos lograba lo que aquél pelirrojo lograba en él. Ni siquiera Haru, aquella mujer que lo había convertido en lo que era.... Pero Hana era diferente a todos, de alguna extraña manera lo hacía sentir vivo... lo hacía pasar por una diversa gamas de sentimientos que ni en sus años de vida mortal llegó a sentir.

"o tal vez no...." dijo deshaciéndose de ese agarre. "tal vez esté peor que yo" le dijo desafiante.

" es tú vigilante, se supone debería de cuidar de ti... y no dejarte a la merced de esos monstruos... debería haber analizado la situación y haberse dado cuenta de que aún no estabas listo... debía de haber sacado cálculo y haberse informado mejor" soltó sin pensar.

Hana escuchó cada palabra atentó. Cuánto sabía ese zorro apestoso?. Rukawa se dio cuenta de que había hablado más de lo conveniente.

" pero haz lo que quieras, ahí tienes la puerta" le dijo mientras huía de las posibles preguntas de Hanamichi.

"......" Hana quedó pensativo por unos instantes, luego se atrevió a seguir a Rukawa "tú que sabes de todo esto?" Era claro que sus sospechas eran ciertas, Rukawa sabía cosas... sabía más que él tal vez.

"lo suficiente" fue su única respuesta.

"........ y que comprende saber lo suficiente?" esas respuestas poco carente de aportes a sus dudas lo estaban desesperando.

" comprende......." se acercó al cuerpo de Hanamichi hasta quedar a escasos centímetros del joven " haber vivido centenares de años... ver la evolución del ser humano.... y comprende las mordidas de aquí" dijo acariciando con sus delgados y largos dedos el cuello de Hanamichi.

El pelirrojo quedó en silencio, como si estuviera haciendo un esfuerzo sobrehumano por entender las palabras del morocho, pero no podía concentrarse demasiado al sentir esas caricias sobre su piel..... "no entiendo...." susurró luego de varios minutos. Rukawa lo miró sorprendido... y luego le dieron ganas de reír, esas actitudes tan sinceras e infantiles de Hanamichi le generaban cierto sentimiento que no podía reconocer. Lo único que sabía que por detalles como esos a veces sentía que Hana era nada más que un niño

" pues... digamos.." decía mientras apoyaba su cabeza sobre el hombro del moreno.... " soy mucho mayor a ti...." comenzó a deslizar sus labios por esa sabrosa piel "pero por sobre todas las cosas.....me perteneces" y sin más, realizó una pequeña incisión en el cuello del pelirrojo una vez más.

El cuerpo de Hanamichi se tensó, pero no hizo nada por intentar liberarse, simplemente no podía. Ante la mordida, sintió como una corriente eléctrica corrió por todo su cuerpo. Podía sentir esos labios sobre su piel... y sentir ese punzante dolor no era más que eso, una pequeña molestia física. No estaba asustado, solo estaba algo sorprendido. Cerró sus ojos y dejó que Rukawa terminara de hacer lo que estuviera haciendo.

El morocho de ojos azules saboreo en su boca el sabor de aquella tibia sangre. Deliciosa. Si por él fuera, jamás se detendría y la bebería hasta que no quedara más en ese cuerpo.... pero eso no era lo que quería. Él adoraba a ese muchacho. Si, esa era la palabra: lo adoraba. Era hermoso, de cuerpo atlético y carácter de los mil demonios. Todavía no comprendía como era que había sucedido todo aquello, como era que había llegado a enamorarse de aquel pelirrojo.... enamorarse.... sería esa la palabra indicada?... no estaba seguro, pero era la más acertada.

Se separó de Sakuragi, quedando frente de él una vez más. Se relamió sus delgados labios, limpiando los rastros de sangre que habían quedado en estos. " eres mío" le dijo " y quiero que te queda claro" y ya que todo era demasiado extraño y había cometido tantos tontos errores, uno más no le haría daño. Es por ello que fundió sus labios a los de Hana. En un beso en donde Hana pudo saborear el sabor de su propia sangre.

Un doloroso suspiro escapó de sus delgados labios.

Se encontraba recostado a lo largo del sofá. No había tenido las fuerzas suficientes para llegar hasta su habitación. Todo su cuerpo le dolía. Deslizó sus dedos por sobre su abdomen, levantando la remera que vestía... dejando a la vista los vendajes... presionó con cuidado sobre una zona especifica... allí donde los vendajes níveos se teñían levemente con un tono rojizo. "aparentemente... por el momento no podré hacer mucho" se dijo a si mismo.

Durante las pasadas horas no había estado más que reflexionando sobre su vida. Si es que a aquello se le puede llamar vida.

Desde que tenía memoria había sido instruido únicamente para llevar a cabo un fin: destruir a aquél ser que vagabundeaba por el mundo con la figura de uno de sus antecesores.

Desde tiempos remotos, los hombres de la familia Rukawa habían tenido esa misión pero nadie había logrado nada al respecto. Y él estaba demasiado cerca como para dejarlo escapar.

Debía de acabar con él, debía de hacerlo por el honor de la familia.

Suspiró una vez más.

La noche pasada habían sido más demonios de lo esperado... y más fuerte de lo planeado. Y definitivamente no había estado calculado encontrarse con un inconsciente Youji a merced de los monstruos ni en sus más remotos planes. Para que negarlo, eso había entorpecido las cosas... pero simplemente no pudo dejarlo allí.

Pero si de una cosa estaba seguro era de que... ese muchacho le causaría problemas. No tenía tiempo para estar de niñera del chico... y aunque no quisiera admitirlo, el muchacho invadía recurrentemente sus pensamientos.

Llevó su mano a su rostro para cubrir sus ojos "si tan solo tuviera una vida normal" se dijo a sí mismo.

" pero no la tienes" escuchó una voz grabe contestarle. Como reflejo se puso de pie en solo segundos, y desenfundó el puñal que traía siempre consigo..... sus pupilas se dilataron ante la figura que se encontraba frente de él "padre...."

" Reiji.... qué es lo que esperas?... tuviste más de una oportunidad para acabar con ese ser...." le dijo mientras lo observaba severamente

" es que... lo siento, no pude hacerlo aún"

" eso no es excusa" examinó con su mirada el maltrecho cuerpo de su hijo. " a caso olvidas cuál es el sentido de toda tú vida?... tú solo vives para destruirlo.... para nada más. Fuiste criado como un cazador... y nada más....."

"...." solo podía más que escuchar las palabras de su padre. Siempre era la misma historia, siempre tenía que escuchar lo que se suponía ser.

"lo sabes, verdad?

" si...." susurró

"qué te sucedió???" le preguntando qué había sucedido para que si hijo hubiera quedado en el estado en que se encontraba.

" anoche... planeaba acabar con un nido de monstruos que había en el cementerio... pero...."

"pero?"

" ... surgió un pequeño inconveniente" susurró

La mirada de su padre se volvió aún más severa hacia él. De seguro sabía la razón.

" ese muchacho....... esta interfiriendo en los planes.... te está 'distrayendo' demasiado" le dijo el hombre

".........."

" deberías de exterminar tu distracción"

"nooo... no puedo hacer eso"

"...... por qué no?"

Qué razón dar? Ni él mismo sabía porque no podría acabar con el muchacho "... él... es hermano del elegido.... puede llegar a ser útil en algún momento" fue lo único que se le ocurrió alegar.

" el elegido...... está aquí?"

" sí.... su nombre es Hanamichi Sakuragi" dijo bajando la mirada.

" creo que debería hacerle una visita...." se giró para disponerse a salir del lugar "pero recuerda.... eres vigilado, en cuanto me lleguen informes de que ese muchacho interfiere y entorpece tu desempeño... yo mismo me encargaré de él" y sin más se fue como llegó.

"..............."

Vio a su padre desaparecer. Se refregó sus cabellos en claro signo de frustración. Qué debía hacer al respecto? Con pasos lentos se dirigió a la habitación donde Youji se había encerrado, la abrió con cuidado y observó al joven que yacía recostado.

"parece que los Sakuragi son la debilidad de los Rukawa..." susurró al recordar como su 'antecesor' observaba al joven pelirrojo. Era claro que sentía algún tipo de atracción.

Se sentó a un lado del joven y descendió lo suficiente para quedar a escasos centímetros de su rostro, allí donde le deposito un beso sobre su mejilla. Para que negarlo, él también se sentía atraído por el joven que estaba frente de él.... pero no podía ser, estar interesado en alguien solo implicaba que su misión quedara relegada a un segundo plano... y si eso sucedía su padre se encargaría de hacer desaparecer a la 'molestia'. Por el bien de Youji tendría que dejarlo... aunque eso no afectaría tanto al muchacho en cuestión ya que aparentemente no le agradaba su compañía.

Cuando Youji despertó, sintió algo cálido contra su cuerpo... y fue allí que descubrió al joven de cabellos azabaches acurrucado contra él. Lo iba a empujar y comenzar a gritarle pero no pudo evitar que un sentimiento de 'ternura' le embargara. Se lo veía indefenso... y muy diferente a la personalidad altanera que mostraba por lo general. Se lo veía como a un niño desprotegido... y no pudo más que rodearlo con uno de sus brazos protectoramente.

Se reprendió mentalmente por su actitud y planeaba retirar su brazo pero era demasiado tarde, el joven de ojos verdes estaba despertando. Levantó un poco su rostro adormilado y para su sorpresa se encontró con un sonrojado Youchan. Miró a los costados y se descubrió recostado junto a él, aparentemente se había quedado dormido ... pero toda su atención se enfocó en el brazo que rodeaba su cuerpo " huum.... que planeabas hacer conmigo? Ibas a abusar mí?" le preguntó pícaro. Youji se quedó atónito ante el comentario... y cuando reaccionó lo único que atinó a hacer fue darle duro con un almohadón, lo único que había estado a su alcance.

"hey... así me pagas?... recuerda que te salé la vida!" no se cansaba de echárselo en cara... sobretodo porque era claro que aquello molestaba al moreno.

" y creo ya haberte agradecido" le dijo mientras se despegaba de ese cuerpo y tomaba distancia considerable.

" huuummm.. no, no lo haz echo... creo que debería cobrarme por ese favor" dijo mientras se acercaba peligrosamente al rostro de Youchan "y lo haré en este mismo instante" y sin más deposito un fugaz beso sobre aquellos labios. Youji se quedó inmóvil, hasta que minutos más tarde reaccionó y empujo al muchacho. "qué demonios crees que haces?!??" le decía al chico de ojos verdes que ahora yacía recostado en el colchón... " te estoy hablando!!" le repitió una vez más al ver que no le prestaba atención alguna. Lo podía ver allí, tomándose con fuerza en el abdomen, donde él había empujado hace no mucho. Luego miró sus manos y las vio teñidas levemente de un color rojizo. "que......." se acercó a Reiji y le levantó la remera, para ver los vendajes teñidos de un rojo intenso " que te sucedió?!?!?!?!" le preguntaba claramente preocupado pero el muchacho no le contesto.

" vete...." le susurró Reiji.

" pero......."

"VETE!" se levantó como pudo y se encaminó a alguna de las habitaciones, para encerrarse en ella y dejar solo a Youji. Aparentemente tanto movimiento no había ayudado a que sus heridas cicatrizaran como debía.

NOTA AUTORA: ................. más de medio año sin actualizar este fic! Y bueno, no logré gran cosa tampoco... más que nada es un chap de relleno para los capitulos venideros.

Como la mayoría debe saber y quienes no lo hacen lo sabrán ahora, estoy en una etapa de bloqueo mental mayúsculo, pero espero salir pronto.

Desde ya muchas gracias por los pasados reviews... y seguir leyendo este fic.

Felices fiestas and happy new year xD!