Capitulo 4: Fiestas de confesión

No había tenido el suficiente tiempo como para volver al cuarto cuando el dueño de la casa volvía con un vestido entre los brazos y una joven criada atrás. La chica no parecía superar los 15 años, tenía el pelo castaño claro casi gris por el hollín, el vestido arreglado con retazos y los pies envueltos en una precaria zapatilla.

-Ten, es de mi madre...quiero que vengas conmigo

-Pero yo...

-Shh- le cerró los labios con un dedo- Towa, ayúdala a vestirse- ordenó algo severo a la joven muchacha que veía con malos ojos a Riku. Las dos se introdujeron en el cuarto donde también se había desatado la pelea al alba.

Towa ajustó con firmeza y algo violenta el corsé del traje azul. Era un vestido azul con un escote digno de la época y como accesorios tenía una cinta negra que iba al cuello.

Con tranquilidad se sentó en un taburete para que la joven le arreglará el cabello.

-Y tu quién eres?- preguntó con voz intrigante

-Yo...soy la prometida de Dark- respondió con timidez viendo en el espejo como sus mejillas se ruborizaban.

-Prometida? No lo sabía...van a casarse pronto?

-No lo sé...me pase gran parte de mi vida encerrada en un monasterio, creo que necesito conocerlo bien antes de casarme.

-Vaya- terminó el arreglo e hizo espacio para que la joven se parara- ya estás lista.

Salieron y Dark no tardó en ofrecerle el brazo a su prometida para conducirla hacia la puerta. Afuera los esperaba un caballo negro.

-No es este el vehículo digno de una dama como tú, pero debemos llegar a prisa- comentó avergonzado

-No te preocupes por mí...las etiquetas no me importan mucho- respondió dedicándole una de sus mejores sonrisas mientras él la ayudaba a subir.

Cuando estuvieron listos, él le ordenó con firmeza al caballo que se pusiera en marcha. Varios minutos más tarde estaban en las puertas de la catedral del pueblo.

-Wiz, busca un lugar- le dijo con suavidad a su corcel.

Entraron en silencio al recinto, donde había bastante gente y el coro cantaba. Se sentaron a la derecha, del lado del novio. Momentos más tarde entró Miyuki, con un gran vestido blanco. Riku dio un respingo de emoción al verla.

Mientras las campanas sonaban en la catedral del pueblo, dos sirvientas hablaban en la cocina de la familia Mousy. Una era la más joven de todas, Towa, que cosía un trapo; la otra, al mayor amasaba con fuerza un bollo de maza.

-Lo puedes creer?- refunfuñó la joven- me había dicho que no tenía compromisos, que yo iba a ser la única, que por fin iba a ser una elegante señora

-Towa, niña, si que eres tonta- se rió por lo bajo la cocinera- Un hombre de su categoría nunca podría casarse con una sirvienta...

-Y todo por esa novicia, Riku- colocó una mueca de asco en su rostro- si tan sólo pudiera esfumarla...- suspiró pero al instante un brillo de malicia centelló en su mirada- ya lo tengo, ahora vuelvo

-Towa!!- gritó asustada la mujer- no te guíes por la locura, vuelve...!!- ya era muy tarde, la chica había desaparecido por la puerta.

Una vez finalizada la ceremonia, todos se dirigieron a la casa de la joven, donde se celebraba la fiesta de bodas. Sería un pasatiempo de toda una tarde, habría doma, charlas, cartas, etc.. Nuevamente estaban arriba de Wiz cabalgando. La chica suspiró y miró anonada el paisaje que pasaba con cierta velocidad por sus costados. Se apoyó con suavidad contra el pecho de él y se dedicó a juguetear con su pañuelo. Él parecía disfrutar cualquier actividad que le elevara la temperatura de la sangre, como cabalgar velozmente o batirse a duelo a menudo. Era un pendenciero, pero lo quería. Alzó la vista para ver su rostro, sonriente y con la vista fija en el horizonte. Posó sus ojos en sus labios, quería besarlo, pero no estaba bien que una mujer diera el primer paso. Llegaron a la lujosa casa, ya mucha gente estaba reunida allí. Atravesaron los jardines y se metieron en la caballeriza. La ayudó a bajar con sutileza, tomándola de las caderas, pero cuando la depositó en el suelo no la soltó. Lentamente se acercó y, sin previo aviso ni autorización, la besó. Riku tembló, imaginando que él le había leído el pensamiento. Se separaron, para que la mirara fijamente. Luego la estrechó fuertemente contra él.

-Te quiero tanto- le susurró al oído- no te separes de mí- le rog

Riku sentía que el corazón iba a salírsele de su ser. Se estremeció totalmente al sentir aquella respiración, caliente y exaltada, cerca de su cuello.

-Yo...yo...- suspiró- también te quiero

-Dark?!!- escucharon alguien atrás de ellos.

Cuando se dieron vuelta el alegre y felizmente casado Daisuke estaba en la puerta, esperando a su amigo. Se aproximó a ellos dando grandes zancadas.

-Ven rápido, las mujeres desesperan por...- miró la cara de espanto y enojo de su amigo, comprendiendo que se había equivocado- ti- concluyó sonrojándose por su equivoco

-Ya vamos- respondió él entre dientes- toma, mi regalo de bodas- le entregó una bolsa de cuero con el dinero de su apuesta.

-Mu-muchas gracias...- sonrió el pelirrojo mientras veía al moreno encaminándose hacía la fiesta con la chica del brazo.

En el parque, donde estaba situado el banquete, varias mujeres se acercaron a la pareja. Una muy hermosa de cabellos rubios y ojos azul mar se abrió paso hasta quedar enfrente del joven Mousy.

-Dark, que gusto verte de nuevo

-Ah, hola Agate- respondió al saludo tímido

-Se me ha ocurrido que podríamos tener alguna aventurilla en esta fiesta- agregó seductoramente ella.

Dark notó la cara de desilusión, enojo y tristeza de su compañera, por lo que decidió que era momento de dejar todo en claro y que no hubiera más confusiones.

-Agate- dijo ignorando el comentario- ella es mi prometida, Riku Harada

La chica de cabellos oro le dedicó una expresión de desprecio a la castaña que se aferró con seguridad al brazo de su compañero. Al escuchar tal declaración muchas mujeres salieron de aquel cuadro. Pronto Riku se vio envuelta en una conversación con las viejas amigas de su madre, quienes estaban allí y se emocionaron mucho al verla.

Mientras tanto, Dark había entrado en la doma de un potro salvaje color blanco llamado Yuki.

Notas de la autora: Kyaaaaa!!! Estoy de vuelta, gracias al Review de Kary Anabell Dark8 menudo nombre ). Espero que este cap te haya gustado, cuando tenga otro respiro voy a poner el resto de la historia.