CAPITULO 5

UN PARECIDO MARAVILLOSO

La noche siguiente llegó desde Gratz el hijo del restaurador de pinturas, del que solo diré que tenía un rostro fúnebre. Llegaba con una carreta cargada con dos grandes cajas llenas de pinturas que habíamos mandado restaurar. Puesto que, como ya mencione antes, vivíamos muy lejos de centros urbanos de importancia. Esa clase de visita producía entre nosotros una gran excitación pues era la única forma en que nosotros teníamos noticias de lo que pasaba.

Todas las cajas quedaron en el patio en lo que pasábamos a cenar. Una vez que la cena había concluido, las cajas fueron movidas al vestíbulo y entre varios ayudantes y algunas herramientas como cuñas y cinceles, se las ingeniaron para abrirlas, mientras nosotros éramos presa de una enorme expectación. Bueno, no todos. Tomoyo se encontraba viendo con una gran indiferencia como las pinturas eran sacadas una a una; todas eran pinturas bastante viejas que necesitaban del delicado proceso de la restauración; la mayoría de esas pinturas eran una herencia legada por parte de mi madre, o más específicamente, por la familia de la que ella descendía.

Mi padre tenía una lista donde se encontraban numeradas cada una de las pinturas, y cada que una pintura salía a la luz, se anotaba el numero de esa obra de arte. No sabía, y hasta ahora no se si esas pinturas eran en verdad buenas o no, pero indudablemente eran muy antiguas y tenían el enorme mérito de que yo las hubiera visto. Desde luego espero que no tomen esto tan en serio.

-Aquí tenemos una que no hemos visto.- Dijo mi padre. -No se alcanza a leer bien el nombre. Solo se distinguen algunas letras "o" y el apellido Daidouji y una fecha que es "1698".-

Yo recordaba bien ese retrato. Era como de 60 centímetros de alto y sin marco, pero estaba tan ennegrecida por el tiempo que ya no se distinguía nada. Pero ahora se encontraba tal y como si hubiera sido recién pintada. Al verla me sorprendí no solo por el hecho de que ahora parecía estar tan llena de color y vida sino por otro detalle: ¡Era la viva imagen de Tomoyo!

-Tomoyo, querida, esto es un milagro. Ahí te ves tan llena de vida, sonriendo, como si estuvieras a punto de hablar. ¿Qué dices, padre? Hasta el mismo color de amatista de sus ojos.-

-Es verdad, hija. Es muy interesante.- Pero mi padre dio poca importancia al hecho y continuó hablando con el hijo del restaurador sobre las otras pinturas.

-¿Al menos me darás permiso de colgarlo en mi habitación? Vamos; di que si.-

-De acuerdo hija. Si eso es lo que quieres.-

Voltee hacia donde estaba Tomoyo para ver su reacción, la cual fue de absoluta indiferencia. No dio la menor muestra de agradecimiento, o tal vez ni siquiera oyó lo que dije. Se encontraba sentada en un sillón, completamente hechada hacia atrás, mirándome fijamente con sus hermosos ojos y sonriendo en una especie de éxtasis.

-Y ahora ya puedes leer con toda claridad lo que el texto dice, padre. Parece como si estuviera en oro. El texto dice "Motoko, condesa de Daidouji" y debajo esta una pequeña corona heráldica y debajo dice "1698 D.C.". Desciendo de los Daidouji; bueno, mi mama descendía de ellos.-

-¡Ah!- Dijo la dama de una forma muy lánguida. -También yo, según creo. Una ascendencia muy remota. Dime ¿acaso vive algún Daidouji?-

-Ninguno que lleve el apellido. La familia se arruinó en las guerras civiles hace mucho tiempo, según se, pero las ruinas de su castillo están a solo tres millas de aquí.-

-Que interesante.- dijo Tomoyo de una forma desinteresada. -¡Pero ya viste que hermosa luna!- Dijo esto al mirar por la puerta abierta del vestíbulo.

-¿Qué te parece si salimos a pasear un poco?- Dijo Tomoyo.

-Fue en una noche como esta en que tu llegaste aquí.- dije, y como respuesta ella suspiró y sonrió un poco.

Salimos al patio abrazándonos de la cintura y así caminamos hasta pasar por el puente levadizo.

-¿Y así estabas de pensativa cuando yo llegue aquí, mi estimada Sakura?- susurraba. -¿Estas contenta de mi venida?-

-Encantada. Mi querida Tomoyo.- le respondí.

-Y has pedido la pintura en la que tu vez un parecido conmigo para colgarla en tu habitación.- murmuro mientras apretaba su brazo alrededor de mi cintura, al mismo tiempo que dejaba caer su linda cabeza sobre mi hombro. -¡Que romántica eres Tomoyo! Si algún día me cuentas tu historia, de seguro que abra un gran romance en ella.-

Así, bajo esa luz de luna, me besó en silencio.

-Estoy segura de que tú ya te has enamorado antes. Incluso creo que ahora mismo tienes algún asunto sentimental en curso.-

-Jamás me he enamorado de nadie, y jamás lo haré.- Entonces susurró. -A menos que sea de ti.-

¡En verdad que se veía hermosa bajo la luz de la luna esa noche! Su rostro tenía una expresión tímida y extraña cuando lo ocultó entre mi cabellera dando tumultuosos suspiros que casi parecían sollozos, y puso en mi mano su propia mano temblorosa. Su dulce mejilla ardía contra la mía.

-Querida, querida mía.- murmuraba. -Vivo en ti y tú morirías por mí; te amo tanto...-

Me aparté súbitamente. Me veía con unos ojos de los que había desaparecido toda expresión, todo significado.

-¿Es que ha comenzado a hacer frió, querida? Estoy temblando de frío. ¿Acaso he estado soñando? Lo mejor es que regresemos. Si; eso es lo mas prudente con este frío que hace.-

-Pareces enferma, Tomoyo. Algo débil. Pienso que te caerá bien un poco de vino.-

-Si; tienes razón, Sakura. Ya comienzo a sentirme mejor. Tomaré vino. Eso me ayudara.-

Mientras caminábamos hacia la puerta me dijo: -Espera un poco. Quiero ver esta hermosa luna contigo por última vez.-

Eso me hizo preocuparme por su salud. Sobre todo el pensar que hubiera contraído esa epidemia que asolaba la región. -Papa se afligiría mucho si algo te llegara a pasar. Has llegado a ser tan querida en este hogar como si fueras la hermana que nunca tuve. Podemos llamar al médico que viste ayer para...-

-No hace falta querida. Puede que sea muy hábil; pero mira, mi pequeña niña, ya me siento bien una vez mas. Solo ha sido un momento de debilidad. Solo eso y nada más. La gente dice que soy muy lánguida, y es verdad que no soy capaz de hacer grandes esfuerzos. A veces me cuesta trabajo caminar el mismo trecho que un infante de tres años recorrería sin problemas. Pero observa, Sakura. Observa lo rápido que me repongo.-

¡Y realmente era cierto! En unos momentos se encontraba como si nada hubiera pasado. Seguimos platicando un rato más, pero ya no volvió a tener ninguna reaparición de lo que yo llamaba sus apasionamientos, es decir, de su loca forma de hablar y de mirarme que me turbaba e incluso me aterraba. Pero esa noche habría de pasar algo que me llevaría a pensar cosas que nunca imaginé que pensaría.

Continuara...

Hola a todos una vez más. Para este momento deben haber notado un pequeño error técnico de mi parte, que aunque tal vez no afecte demasiado la historia, tal vez si llegue a hacerlo. Pero eso tendré que dejarlo a su sabia opinión. Tambien se que el capítulo quedo corto en comparación con el anterior, pero como mencione antes, solo trato de seguir la estructura original de la historia. Pido sus disculpas en caso de que esta situación no sea de su agrado. Ahora respondamos sus reviews.

Celina Sosa: Como podrás ver tenemos suficientes frases para que Sakura se siga quebrando la cabeza respecto a Tomoyo, pero eso pronto dejara de ser algo de preocuparse. Te lo garantizo. Y en cuanto a Shaoran, aún no se en que forma lo llegaría a agregar, y eso si lo hago. Necesito tratar de buscar algún hueco donde el entre, porque en la novela original la chica no tenía novio, ni lo tuvo. Veré que se puede hacer pero por ahora no prometo nada en ese sentido.

JKatty: Me da gusto que te hayas animado a dejarme un review. Eso significa que si te gusta mi pequeña historia. Que puedo decir. Si existen los que creen que la hermosísima Tomoyo es un poco rara, pero en lo personal a mi me gusta tal como es. Ahora te contaré algo curioso. Cuando vi tu nick sentí que ya lo había visto en alguna parte, y finalmente recordé donde: Tu historia "Ojos que no ven" fue una de las primeras historias que leí y deje un review. Checa tu lista de reviews para esa historia y veras mi nick justo ahí. Ahora solo te pido un pequeño favorcito: ¡Por favor! ¡Actualiza esa historia! Te lo pido, te lo ruego. Please, onegai. Me muero por saber que va a pasar con Tomoyo ahora que conoció a Ami. Y me quedo con la opción b.

ultimate spider: No se si te aclaré tus dudas o te saque de onda mas todavía, pero no desesperéis. En el siguiente capítulo abra algo que espero sea más de tu agrado.

Aneth: Respecto a la bellísima Tomoyo se puede decir que por ahora solo es una chica demasiado... apasionada con Sakura, y los diálogos que tiene no dejan mucho a la imaginación. Volviendo al tema Shaoran, aún no se si lo incluiré o no, o si lo hago, ver en donde encaja. Se hará la lucha. ¿Crees ser insoportable? Yo no lo creo.

Nalene: ¿Crees que soy misterioso? Tal vez si lo sea. Después de todo algo que yo adoro es mi privacidad. Es raro que alguien sepa algo sobre mi, pero lo que siento que si vale la pena de decirse esta en mi profile, que por cierto voy a actualizar antes del sábado. Y eso es por una razón, que diré algunas líneas mas adelante. No tienes ni idea del gusto que me da que sigas esta historia. En verdad gracias.

Lyz: El placer de conocerte es todo mío. Es cierto lo que dices. Por como una persona escribe se puede llegar a saber mucho de su forma de ser. La novela en cuestión se llama "Carmilla" y es del escritor irlandés Joseph Sheridan Le Fanu. Algunos consideran a "Carmilla" como una de las referencias obligadas en la literatura de vampiros. La otra es, desde luego, "Drácula" de Bram Stoker. Seguiré esperando tus reviews con mucho gusto.

Bueno, es todo por ahora. Solo daré un pequeño anuncio. Pienso remodelar mi profile y ponerlo al día. Así si sienten curiosidad por saber un poco mas de este, su humilde servidor, será tan fácil como dar uno o dos clicks. Ademas espero no solo actualizar este fic como lo hago cada semana, sino también iniciar dos historias y un one-shoot, pero en la sección de Shaman King. ¿Por qué hacer algo así? Es porque cumplo años el siguiente fin de semana. Asi es. 24 años y aún así me siento tan viejo a veces. Ya no los aburro mas así que los dejo por lo mientras y nos vemos la siguiente semana con mas de esta historia. Misma pagina, mismo lugar. Sean muy felices.