Amor Cautivo:
Capítulo 2: Nueva vida
Mira lo que has hecho que he caído preso.....
En un agujero de tu corazón....
Y la libertad te juro no la quiero
Dejarme atado a este amor
Atado a este amor
Atado a este amor....
Hermione, con el odio y el dolor fluyendo por todo su ser apuntó su varita hacia Voldemort, y sin pensárselo dos veces murmuró:
¡Crucio!. - El que no debe ser nombrado rompió la conexión de su varita contra Lupin y cayó de rodillas, retorciéndose. Los mortifagos miraban atónitos la escena, como esa muchacha aplicaba la maldición al mago oscuro mas poderoso de los tiempos, susurrando de vez en cuando. - Esto, por mis padres. -
Después de unos minutos, Lucius Malfoy reaccionó, y de un empujón rompió el contacto de la varita de Hermione tirándola al suelo, dejando a la muchacha desarmada, con un movimiento brusco, dejó incosciente al ya débil Lupin y se situó enfrente de Hermione.
Tu pagarás por esto, sufrirás, ya lo creo, y vivirás. - Se volvió a mirar a Lupin y sonrió maléficamente a Hermione. - una buena temporada, sabiendo que vas a morir. ¡Desmaius!. - Y Hermione no escuchó, ni vio nada mas.
Unas horas mas tarde Hermione Granger habría lentamente los ojos, se giró perezosamente la derecha y casi se desmaya nuevamente al analizar su situación:
Se encontraba en una celda, que por lo oscura que estaba, similaba mas a una mazmorra, de escasos metros, como una habitación muggle pequeña, y que solo constaba de un colchón de aspecto incómodo, un retrete, un lavabo y una pequeña ventana enrejada, por la que apenas pasaba la luz.
Al volverse hacia atrás vio un pasillo en el que había otras celdas vacías, la suya estaba tapada por una resistente verja.
Intentó incorporarse, pero cuando se había levantado un escaso metro sintió una fuerza que la tiró hacia atrás y cayó sobre algo mas blando que el suelo.
Esa cosa emitió un quejido y Hermione se volvió a mirarlo, entonces, algo alterada, gritó:
¡Remus!
El nombrada abrió los ojos, y lo primero que pudo ver fue el rostro de la muchacha, que estaba literalmente encima de él, a escasos centímetros del suyo.
Sonriendo y reprimiendo un bostezo dijo extrañado:
¿Hermione?, ¿Qué estás haciendo?. - La chica se sonrojó un poco, pero se apartó decididamente y le contestó:
Mira esto.
Remus se volvió y tardó un par de minutos en razonar serenamente el problema en el que se encontraban.
Suspiró y se levantó, a la vez que Hermione, que se quedó quieta depie, entonces, Lupin tuvo la intención de observar mas detenidamente la sala, pero, tras dar dos pasos, Hermione y Remus se atrayeron hacia ellos mismos, golpeándose la cabeza el uno contra el otro ante la sorpresa.
Intentaron separarse desesperadamente doce o trece veces mas, pero cuanto mas empeño ponían, mas bruscamente se goleaban.
Acabaron en el suelo agotados, juntos espalda contra espalda y Remus dijo:
Bien, analicemos fríamente la situación: Estamos encerrados en una celda de seis metros cuadrados, en Dios sabe que parte del mundo, somos dos y apenas nos podemos separar tres palmos el uno del otro. - Terminó
Suena bien. - Ironizó Hermione.
Remus sonrió Se suponía que era un análisis frío, no sarcástico.
Francamente Remus, cualquier mujer pagaría por estar en mis situación, o algún que otro hombre, quizás. - Rió la muchacha.
Umm, pues yo conozco a dos que morirían por no poder despegarse dos metros de usted. - Dijo, inclinando la cabezay besándole la mano, como si fuera un caballero medieval.
¿Ah si, y quienes son esos especímenes de los que habla vos?. - Preguntó, continuando con el cachondeo.
Pues, S..¿Por qué habría de decírtelo?. - Cuestionó, volviéndose hacia ella.
Si no quieres que te ocurra como a Lord Voldy.. - Se giró a verlo a los ojos.
Conectaron sus miradas hasta que una voz fría que arrastraba las palabras interrumpió:
Vaya, vaya, vaya, ¿A quién tenemos aquí?, a sangre sucia Granger y al lunático Licántropo.
Remus se levantó de un salto e intentó acercarse a la verja, casi derribando a Hermione al caer de nuevo sobre el suelo.
Lucius Malfoy rió:
¿Es una incómoda situación, Lupin?, apuesto a que hasta te gusta la sangre sucia, no podías caer mas bajo, amigo...
Cállate. - Ordenó Hermione
¿Es que crees que me vas a hacer lo mismo que a mi señor con tu vocecita?. El único valor que tenías era un palo de madera, Granger.
Maldita sea Malfoy, sácanos de aquí o si no...
¿O si no que. Lupin?, ¿A caso tus mordiscos van a abrir un agujero en las rejas? Aunque ten por seguro que tus dientes devoraran otra cosa dentro de poco...
¿Qué quieres decir mortifago?. - Escupió las palabras Remus, algo atemorizado.
Yo que tu empezaría a contar los días que quedan para luna llena, bestia inmunda, los dísd de vida que le restan a Granger.
Remus cargó a Hermione, que estaba paralizada en el suelo, y de un salto comenzó a golpear la verja, cerca de donde había estado Malfoy, que ya se marchaba.
Malfoy cabrón, vuelve aquí hijo de..., pero no volvió.
La muchacha se bajo de sus hombros y seria, dijo:
Remus, tranquilízate, ya pasó, todo, ya..
Las palabras amansaron a Lupin, quien bajó los brazos y cayó al suelo, sollozando:
¿A caso no entiendes Mione?, te mataré, yo, estás aquí, y estas ligaduras mágicas no se pueden separar sin varita, mierda, si no fuera una bestia..
No eres ninguna bestia, Remus. - Dijo friamente. - Nos encontraran el resto, ya verás, por que Voldemort no me ha matado todavía y parece estar grave, y además. - le tembló ligeramente la voz. - No, no temo a la muerte, y jamás te culparía, si me matara el lobo que llevas dentro.
Remus la abrazó, desconsolado, hundiendo su rostro en el cabello enmarañado de la chica. Tras unos instantes se separó, y le pidió con los ojos dorados repletos de lágrimas.
Eres fuerte, pero solo queda una solución, mátame, o me quitaré la vida yo mismo, no soportaría hacerte daño.
Eso que ni se te pase por la cabeza, ¿Me oíste?. - Dijo con voz peligrosamente suave.
Vale, vale, de acuerdo. - Murmuró algo asustado Remus.
Ya he comprobado que no me puedo convertir en animaga, pero ya verás como vendrán a salvarnos, y si no, ya pensaremos en algo, yo creo que leí en alguna parte una forma de dominar al hombre lobo, ya recordaré, mientras, a aprovechar el tiempo que nos queda por vivir, y nada de lágrimas. - Dijo, pasándole el dorso de la mano por el rostro.
De acuerdo, aprovechemos el tiempo... - Rió y bostezó. - Tengo sueño.
Hermione sonrió
Pues ¡hala! Los dos a dormir. - Se dirigieron un poco torpemente al colchón.
Se dejaron caer sobre la nueva cama y se acomodaron lo mejor posible, ya que se estaban acostando juntos por primera vez.
Al cabo de unos minutos Hermione movió la cabeza, algo incomoda. Remus se percató:
¿Te ocurre algo?. - Preguntó, volviéndose hacia ella, algo preocupado
No, bueno... si, es que no me acostumbro a no tener almohada, siempre me ha ocurrido, pero da igual, ya pasará. - Añadió, sonriéndole.
¡Pero hombre!. -Exclamó Remus, divertido. - Aquí tienes una buena almoada. - Se golpeó el pecho y añadió. - Tiene el cerificado de calidad por Sirius Black.
Ya Remus, pero no es necesario, no te quiero incomodar mas. - Dijo sonrojada.
¿Me ves pinta de loco?, ¿Qué me va a incomodar?, ven anda. - La atrajo hacia él, posando la cabeza de Hermione sobre su pechi.
Buenas noches, Remus. - Suspiró.
Si, buenas noches. -Sonrió, y se quedo mirando y sintiendo a la chica, algo distraidamente.
Tuvo que contener la risa al escuchar, quince minutos después a Hermione murmurar entre sueños:
Ummm, si que esta blandito esto...
Y como, primero timidamente, se fue abrazando mas y mas a Remus, pero luego, incoscientemente, tanteó con una mano por dentro de la túnica de él, sirviéndose con el dorso de la mano para acomodarse.
Remus se sonrojó violentamente al sentir el contacto de la suave piel de la muchacha contra el vello de su pecho.
Se descubrió a si mismo soñando y esperando que Hermione repitiera ese contacto totalmente consciente.
Sacudió la cabeza, alejando esos pensamientos y empezó a cantar entre susurros una conocida canción muggle.
Dime que tu piel será mi piel.
Dime que tu cuerpo, será como mi propio cuerpo
Dime que tu sal será mi sal
Saliva de mis labios, salada y transparente, como tu.
Hola a todos!!!
Reviews:
Herms Malfoy: Aquí esta el nuevo capítulo, y haber cuando me devuelven mi libreta y puedo continuar con mi historia favorita, el pasado lo cambia todo.
Malfoy-Obsession: Hola!! Me alegró que te haya gustado, jejeje, gracias por las felicitaciones.
Kat Basted: Aquí está el acto heroico de Hermione, para que luego digan...
Luna-Wood: jejeje, creo que la pareja quedó bastante clara, pero aun así, si quedaba alguna pequeña duda....¡Remus/Hermione! Xddd
Y como diría Karina... ¡GRACIAS, GRACIAS, MUCHAS GRACIAS!
Capítulo 2: Nueva vida
Mira lo que has hecho que he caído preso.....
En un agujero de tu corazón....
Y la libertad te juro no la quiero
Dejarme atado a este amor
Atado a este amor
Atado a este amor....
Hermione, con el odio y el dolor fluyendo por todo su ser apuntó su varita hacia Voldemort, y sin pensárselo dos veces murmuró:
¡Crucio!. - El que no debe ser nombrado rompió la conexión de su varita contra Lupin y cayó de rodillas, retorciéndose. Los mortifagos miraban atónitos la escena, como esa muchacha aplicaba la maldición al mago oscuro mas poderoso de los tiempos, susurrando de vez en cuando. - Esto, por mis padres. -
Después de unos minutos, Lucius Malfoy reaccionó, y de un empujón rompió el contacto de la varita de Hermione tirándola al suelo, dejando a la muchacha desarmada, con un movimiento brusco, dejó incosciente al ya débil Lupin y se situó enfrente de Hermione.
Tu pagarás por esto, sufrirás, ya lo creo, y vivirás. - Se volvió a mirar a Lupin y sonrió maléficamente a Hermione. - una buena temporada, sabiendo que vas a morir. ¡Desmaius!. - Y Hermione no escuchó, ni vio nada mas.
Unas horas mas tarde Hermione Granger habría lentamente los ojos, se giró perezosamente la derecha y casi se desmaya nuevamente al analizar su situación:
Se encontraba en una celda, que por lo oscura que estaba, similaba mas a una mazmorra, de escasos metros, como una habitación muggle pequeña, y que solo constaba de un colchón de aspecto incómodo, un retrete, un lavabo y una pequeña ventana enrejada, por la que apenas pasaba la luz.
Al volverse hacia atrás vio un pasillo en el que había otras celdas vacías, la suya estaba tapada por una resistente verja.
Intentó incorporarse, pero cuando se había levantado un escaso metro sintió una fuerza que la tiró hacia atrás y cayó sobre algo mas blando que el suelo.
Esa cosa emitió un quejido y Hermione se volvió a mirarlo, entonces, algo alterada, gritó:
¡Remus!
El nombrada abrió los ojos, y lo primero que pudo ver fue el rostro de la muchacha, que estaba literalmente encima de él, a escasos centímetros del suyo.
Sonriendo y reprimiendo un bostezo dijo extrañado:
¿Hermione?, ¿Qué estás haciendo?. - La chica se sonrojó un poco, pero se apartó decididamente y le contestó:
Mira esto.
Remus se volvió y tardó un par de minutos en razonar serenamente el problema en el que se encontraban.
Suspiró y se levantó, a la vez que Hermione, que se quedó quieta depie, entonces, Lupin tuvo la intención de observar mas detenidamente la sala, pero, tras dar dos pasos, Hermione y Remus se atrayeron hacia ellos mismos, golpeándose la cabeza el uno contra el otro ante la sorpresa.
Intentaron separarse desesperadamente doce o trece veces mas, pero cuanto mas empeño ponían, mas bruscamente se goleaban.
Acabaron en el suelo agotados, juntos espalda contra espalda y Remus dijo:
Bien, analicemos fríamente la situación: Estamos encerrados en una celda de seis metros cuadrados, en Dios sabe que parte del mundo, somos dos y apenas nos podemos separar tres palmos el uno del otro. - Terminó
Suena bien. - Ironizó Hermione.
Remus sonrió Se suponía que era un análisis frío, no sarcástico.
Francamente Remus, cualquier mujer pagaría por estar en mis situación, o algún que otro hombre, quizás. - Rió la muchacha.
Umm, pues yo conozco a dos que morirían por no poder despegarse dos metros de usted. - Dijo, inclinando la cabezay besándole la mano, como si fuera un caballero medieval.
¿Ah si, y quienes son esos especímenes de los que habla vos?. - Preguntó, continuando con el cachondeo.
Pues, S..¿Por qué habría de decírtelo?. - Cuestionó, volviéndose hacia ella.
Si no quieres que te ocurra como a Lord Voldy.. - Se giró a verlo a los ojos.
Conectaron sus miradas hasta que una voz fría que arrastraba las palabras interrumpió:
Vaya, vaya, vaya, ¿A quién tenemos aquí?, a sangre sucia Granger y al lunático Licántropo.
Remus se levantó de un salto e intentó acercarse a la verja, casi derribando a Hermione al caer de nuevo sobre el suelo.
Lucius Malfoy rió:
¿Es una incómoda situación, Lupin?, apuesto a que hasta te gusta la sangre sucia, no podías caer mas bajo, amigo...
Cállate. - Ordenó Hermione
¿Es que crees que me vas a hacer lo mismo que a mi señor con tu vocecita?. El único valor que tenías era un palo de madera, Granger.
Maldita sea Malfoy, sácanos de aquí o si no...
¿O si no que. Lupin?, ¿A caso tus mordiscos van a abrir un agujero en las rejas? Aunque ten por seguro que tus dientes devoraran otra cosa dentro de poco...
¿Qué quieres decir mortifago?. - Escupió las palabras Remus, algo atemorizado.
Yo que tu empezaría a contar los días que quedan para luna llena, bestia inmunda, los dísd de vida que le restan a Granger.
Remus cargó a Hermione, que estaba paralizada en el suelo, y de un salto comenzó a golpear la verja, cerca de donde había estado Malfoy, que ya se marchaba.
Malfoy cabrón, vuelve aquí hijo de..., pero no volvió.
La muchacha se bajo de sus hombros y seria, dijo:
Remus, tranquilízate, ya pasó, todo, ya..
Las palabras amansaron a Lupin, quien bajó los brazos y cayó al suelo, sollozando:
¿A caso no entiendes Mione?, te mataré, yo, estás aquí, y estas ligaduras mágicas no se pueden separar sin varita, mierda, si no fuera una bestia..
No eres ninguna bestia, Remus. - Dijo friamente. - Nos encontraran el resto, ya verás, por que Voldemort no me ha matado todavía y parece estar grave, y además. - le tembló ligeramente la voz. - No, no temo a la muerte, y jamás te culparía, si me matara el lobo que llevas dentro.
Remus la abrazó, desconsolado, hundiendo su rostro en el cabello enmarañado de la chica. Tras unos instantes se separó, y le pidió con los ojos dorados repletos de lágrimas.
Eres fuerte, pero solo queda una solución, mátame, o me quitaré la vida yo mismo, no soportaría hacerte daño.
Eso que ni se te pase por la cabeza, ¿Me oíste?. - Dijo con voz peligrosamente suave.
Vale, vale, de acuerdo. - Murmuró algo asustado Remus.
Ya he comprobado que no me puedo convertir en animaga, pero ya verás como vendrán a salvarnos, y si no, ya pensaremos en algo, yo creo que leí en alguna parte una forma de dominar al hombre lobo, ya recordaré, mientras, a aprovechar el tiempo que nos queda por vivir, y nada de lágrimas. - Dijo, pasándole el dorso de la mano por el rostro.
De acuerdo, aprovechemos el tiempo... - Rió y bostezó. - Tengo sueño.
Hermione sonrió
Pues ¡hala! Los dos a dormir. - Se dirigieron un poco torpemente al colchón.
Se dejaron caer sobre la nueva cama y se acomodaron lo mejor posible, ya que se estaban acostando juntos por primera vez.
Al cabo de unos minutos Hermione movió la cabeza, algo incomoda. Remus se percató:
¿Te ocurre algo?. - Preguntó, volviéndose hacia ella, algo preocupado
No, bueno... si, es que no me acostumbro a no tener almohada, siempre me ha ocurrido, pero da igual, ya pasará. - Añadió, sonriéndole.
¡Pero hombre!. -Exclamó Remus, divertido. - Aquí tienes una buena almoada. - Se golpeó el pecho y añadió. - Tiene el cerificado de calidad por Sirius Black.
Ya Remus, pero no es necesario, no te quiero incomodar mas. - Dijo sonrojada.
¿Me ves pinta de loco?, ¿Qué me va a incomodar?, ven anda. - La atrajo hacia él, posando la cabeza de Hermione sobre su pechi.
Buenas noches, Remus. - Suspiró.
Si, buenas noches. -Sonrió, y se quedo mirando y sintiendo a la chica, algo distraidamente.
Tuvo que contener la risa al escuchar, quince minutos después a Hermione murmurar entre sueños:
Ummm, si que esta blandito esto...
Y como, primero timidamente, se fue abrazando mas y mas a Remus, pero luego, incoscientemente, tanteó con una mano por dentro de la túnica de él, sirviéndose con el dorso de la mano para acomodarse.
Remus se sonrojó violentamente al sentir el contacto de la suave piel de la muchacha contra el vello de su pecho.
Se descubrió a si mismo soñando y esperando que Hermione repitiera ese contacto totalmente consciente.
Sacudió la cabeza, alejando esos pensamientos y empezó a cantar entre susurros una conocida canción muggle.
Dime que tu piel será mi piel.
Dime que tu cuerpo, será como mi propio cuerpo
Dime que tu sal será mi sal
Saliva de mis labios, salada y transparente, como tu.
Hola a todos!!!
Reviews:
Herms Malfoy: Aquí esta el nuevo capítulo, y haber cuando me devuelven mi libreta y puedo continuar con mi historia favorita, el pasado lo cambia todo.
Malfoy-Obsession: Hola!! Me alegró que te haya gustado, jejeje, gracias por las felicitaciones.
Kat Basted: Aquí está el acto heroico de Hermione, para que luego digan...
Luna-Wood: jejeje, creo que la pareja quedó bastante clara, pero aun así, si quedaba alguna pequeña duda....¡Remus/Hermione! Xddd
Y como diría Karina... ¡GRACIAS, GRACIAS, MUCHAS GRACIAS!
