Amor cautivo:
Capítulo 5: Es el poder del amor
Adiós amor mío, no me llorés volveré
Antes que, de los sauces caígan las hojas
Piensa en mi, volveré, a por ti...
Hermione despertó una dulce y calurosa mañana de Verano, en una cómoda cama.
Se giró hacia la derecha, y con una sonrisa en los labios murmuró:
Draco
El nombrado se volvió hacia ella y le sonrió, acariciándole los cabellos castaños, y besándola tímidamente.
Ella le devolvió el beso, ciertamente se sentía extraña aquella mañana, era como... como si no recordara nada que hubiera pasado el día anterior, solo existía el presente y... un futuro con el muchacho que estaba a su lado en la cama.
Buenos días mi princesa, ¿Qué tal has dormido?. - Le dijo él amablemente.
Mejor que nunca. - Le sonrió. - ¿Debemos levantarnos ya?
Solo si tu quieres, por que también podemos hacer lo mismo de anoche.
Ella rió tímidamente, una risa que para el joven Malfoy era mejor que las miles de melodías que los pajarillos cantaban alrededor de las ventanas de su mansión.
No, será mejor que me levante, si quieres te preparo el desayuno.
Por supuesto que no, Hermione, un Malfoy siempre prepara el desayuno a su mujer, mientras esta le obsequia con su presencia.
¡Oh!, eres un cielo. - Susurró Hermione, algo confundida, pues ni siquiera había recordado que se llamaba Hermione, y se levantó.
Y tu un ángel. - Le respondió Draco, mientras descalzo y caminando por el tapiz corrió hasta la cocina, seguido por la chica.
Unas horas antes...
Remus Lupin corría bajo la lluvia que había comenzado a mojar el suelo, y que se mezclaban con las lágrimas de rabia que caían de sus ojos desde que había oído el último grito de la única mujer que había amado en su vida.
Avanzaba y seguía, tropezaba, pero le daba igual, quería quitar todas las imágenes que recorrían su memoria, como una lenta y dolorosa tortura, se repetían miles de veces los momentos vividos con Hermione, como la había hecho suya, y... como, sin él haber hecho nada había dejado que se marchara, ¡maldita sea!, que se hubiera ido de él para siempre.
Antes de que se diera cuenta se vio delante de la puerta del castillo. Pero no se vio con las fuerzas suficientes para entrar, para dar la cara, no quería que lo vieran con esas pintas, estaba loco, si, totalmente perdido por ella y sin ella.
No se podía explicar como le había ocurrido eso en tan poco tiempo, pero en seguida se pudo dar cuenta que ya le venía desde hacía muchos días, meses, e incluso, años, solo que no había querido creerlo.
¡Eh! Remus, no puedo creer que estés aquí, ¿Dónde estabais?. - Lo miró, y las pequeñas gotitas cristalinas que rodaban por sus mejillas. - ¿Qué ha pasado?. - Dijo mas seriamente, al ver el estado de su amigo.
Es una historia muy larga Sirius. - Sollozó Remus, entrando en el gran comedor donde las pocas personas que había, todos adultos y miembros de la orden, le voltearon a ver preocupados. De un salto se apoderó de una lechuza que entraba en el gran comedor, seguramente una edición de última hora, miró la portada, y con rostro de dolor, cayó al suelo de rodillas y desmayado.
Mientras Draco y Hermione desayunaban silenciosamente.
Cariño, ya he avisado al Profeta de nuestro compromiso, a estas horas ya todo el mundo sabrá que nos casamos, por supuesto, todos los que quieran asistir estarán invitados, todos que tu desees.
Gracias Malfoy, desde luego, tu pedida de anoche fue magnífica, y como terminó también. - Sonrió picaramente.
Si, acabamos tan felices que bebimos en exceso, que pena que no recuerdes... - Dijo Draco. Ni el mismo se creía que podía haberse inventado toda esa farsa. No había habido ninguna cena de compromiso, de hecho, había pasado apenas una hora desde que le arrojara a la chica el hechizo desmemorizador, pero había sido hábil colocándole un anillo de compromiso de diamantes en el dedo derecho, la había acostado junto a él en su cama, y la había convencido de que la pedida de mano había sido espectacular.
Si, te amo Draco, y todo el mundo mágico y muggle puede ser presente de eso. - Dijo convencida la joven, mirándole con amor.
Me amas y yo te amo mas que a nada en este mundo. - Le respondió Draco muy romántico. Solo la última parte era cierta, el si la amaba, pero ella a él no, lo había dicho antes de que le robara la memoria, haciéndole que casi se compadeciera y la dejara marchar, ella quería al licántropo, a Lupin, pensó que no debería interponerse, pero el deseo de tener a la sangre sucia que le había robado su corazón fue mas fuerte.
Desde luego. - Sonrió, comiendo con él un par de tostadas, y diciéndole. - ¿Dónde vas tu hoy?.
Pues hoy faltaré a mi trabajo, pues tengo que avisar a mi familia personalmente del compromiso, que ha sido precipitado, por que apenas nos conocemos desde hace poco...
Pero nos quisimos ya en Hogwarts. - Dijo la muchacha. - Da igual además lo que piensen.
Claro que si mi amor, hablando de Hogwarts...
Si, debo ir allá a avisar a mi querido profesor Dumbledore de la boda, seguro que se alegra mucho, y a mis amigos, Harry, Ron, me alegro que os aceptéis tan bien.
Por supuesto, además, si tu estás cómoda con ellos, algo bueno deben tener...
Claro. - Rió Hermione. - ¿Sabes que?, esta mañana me he despertado extraña, recuerdo solo algunas cosas, pero hay detalles de mi pasado que desconozco, recuerdo todos mis años en Hogwarts, mi trabajo para la orden, que tu no tienes que ver con tu padre y los mortifagos... pero hay cosas de las que no recuerdo nada, como lo que hice ayer... y los últimos días, y de algunas personas. - Se confesó Hermione.
Ummm, eso es grave, ¿Quieres que llame a un médico?. - Dijo él sabiendo que la chica por su orgullo no cedería.
Por supuesto que no, dudo que sea Alzheymer... - Pensó Hermione.
¿Alzheymer?. - Dijo extrañado, pues desconocía esa palabra.
¡Oh!, déjalo Draco, creo que deberías haber tomado en Hogwarts estudios muggles...
Oye... que me casara con tigo no significa que haya cambiado algunas de las creencias de mi familia.
Mira que no me caso con tigo.... - Lo amenazó Hermione, en broma.
No, ¡Nooo! Los muggles sois muy buenos, perfectos, os quiero. - Se puso de rodillas Draco.
Eso me gusta mas... - Rió ella y se besaron apasionadamente, mientras el tomaba su capa y se marchaba hacia un parque cercano para aparecerse, mientras Hermione se dirigía a la chimenea, y arrojando unos polvos flú gritaba:
¡Hogwarts!
En el comedor todos se levantaron horrorizados al ver a su compañero de oficio desplomarse en mitad de uno de los pasillos.
Sirius se agachó junto a él tomándole el pulso, y tranquilizándose un poco al ver que estaba con la respiración normal le intentó arrebatar el periódico estrujado de la mano.
Cuando lo vio su cara adoptó un color pálido en la cara y cayó de rodillas al suelo. Dumbledore al ver que algo estaba mal se acercó también y leyó el titular, el también cambió su expresión por una mucho mas seria y con una fuerza especial para su edad incorporó al animago y se agachó junto a Remus, poniéndole las manos en la cabeza consiguió que este despertara, con su rostro bañado en sudor y lágrimas, mientras el periódico iba pasando por las manos de todo el comedor y las expresiones verbales de indignación iban creciendo.
La noticia, en titular, decía:
Tras un corto tiempo de noviazgo, nos ha sido anunciada la grata noticia de la boda de los conocidos Draco Malfoy y Hermione Granger, jóvenes e ilusionados, están enamorados y seguros de la decisión que han tomado, con una petición previa a la familia, que las aceptará encantada, se podrá asistir a la ceremonia.
Hola Remus, antes que nada, ¿Cómo estás?
Buenos días profesor, no había estado peor en toda mi vida, si eso es lo que quiere saber.
Se nota, y, ¿En cuanto a esta noticia?
Tiene una larga historia detrás, y empieza y termina con un nombre: Hermione.
Bien, Tonks, cierra las puertas del comedor, como ya estáis aquí convoco una reunión de gravedad de la orden, juntad una mesa y tomad asiento, vamos Remus hijo, te ayudo a sentarte. - Dijo amablemente el profesor.
Gracias. - Susurró débilmente Remus y sintió como lo arrastraban hasta la mesa y lo sentaban entre Snape y Sirius.
¿Y bien?. - Preguntó Ron impaciente.
Todo empezó el día de la batalla, nos quedamos rezagados, como todos sabéis, en el centro con el Lord oscuro y rodeados de mortifagos, Voldemort comenzó sus juegos de palabras, de tratos, antes de matar a la gente, y a mi me sometió bajo un Crucio, mientras que a Hermione le hablaba de la muerte de sus padres y otras cosas horribles, entonces ella, sacando fuerzas de no se donde, le lanzó la maldición cruciatus, al señor tenebroso, y lo mantuvo bajo su efecto durante un buen rato, hasta que Malfoy la detuvo, nos cogió y desmayó y cuando despertábamos estabamos en una celda, incomunicados, solo hablamos con los dos Malfoys, y sin podernos separar el uno del otro menos de dos metros.
Fue cortado por los murmullos que resonaron en la sala, y le pidieron que siguiera.
Como sabréis, hubo un cambio lunar a última hora, así que, estando ligados mágicamente, el día de la transformación no nos podríamos separar y yo... la mataría, Lucius Malfoy quería que ella muriese, pero Draco Malfoy apareció dándole otra propuesta: Viviría casada con él el resto de su vida, que sería mucha, totalmente enamorada de Draco, y olvidaría al resto, pero si que podría venir a Hogwarts, recordar a sus amigos de la infancia y eso, solo que estaría enamorada de Malfoy, por siempre.
Y ella aceptó, como es lógico. - Dijo Tonks.
No, yo acepté por ella, Hermione no quería dejar de ser Granger, no quería ser una Malfoy, casi prefería la muerte a vivir atada a él eternamente.
Me alegro de que hicieras eso por ella, Remus, no podrías haber cargado con su muerte.
Es cierto. - Se confesó Remus. Sabía que no podría evitar eternamente su amor por la muchacha, pero no se veía con fuerzas para decirlo delante de toda la orden.
De acuerdo, supongo que es cuestión de tiempo de que la chica venga, creo que Malfoy la quiere tanto que incluso la dejará seguir en la orden, no lo dudo, ese chico me ha sorprendido favorablemente, pero eso sí, no podré hacer nada para evitar el resto.
Pero... - Se quejó Ron.
No hay peros, señor Weasley, lo siento mucho, se da por terminada la reunión.
Todos se levantaron de sus sitios, y Sirius, entristecido, se acercó a Remus, quien no levantaba la vista del suelo.
A mi no me engañas como al resto Moony, te conozco bien. - Le dijo Sirius.
¿Por qué iba a engañar a nadie?. - Preguntó Remus.
Por que esa mirada de enamorado es la misma que tuvo James hace unos años, y me la conozco bien, tu acabaste loco por la chica.
Se nota que me conoces bien, Padfoot, pero no me encuentro con ganas de hablar de ello... - Calló al ver que un fénix se posaba en su hombro y desenrolló el pergamino que había atado.
Dumbledore nos llama a su despacho, rápido. - Leyó Remus. Y hecharon a correr por los pasillos.
Hermione aterrizó descontroladamente sobre el escritorio de Dumbledore.
Hola profesor, ¿Qué tal está?. - Dijo dirigiéndose al hombre que se acababa de dar la vuelta.
Hola, señorita Granger, que placer tenerla aquí. - Dijo, besándole la mano. - ¿Que la trae por este viejo castillo?
No es tan viejo... dar una noticia realmente importante para mi.
¡Oh!, ¿En serio?, pues llamaré a sus mas allegados. - Y comenzó a escribir en un pergamino, lo multiplicó y Fawkes los llevó a sus destinatarios.
Unos minutos mas tarde...
Ya estamos aquí prof... ¡Hermione!. - Exclamó Harry abrazándola, cuando la soltó fue abrazada por Ron, y les dio un beso a cada uno en la mejilla, justo entonces entraron la profesora McGonagall y Snape, quien también la saludaron amablemente.
Bueno, ya estamos casi todos, solo faltan...
Nosotros. - Sirius dijo desde la puerta. - ¿A caso no me recuerdas, caperucita?. - Rió Sirius.
Claro, ¿Cómo no me iba a acordar del gran y egocéntrico Padfoot?. - Rió la chica, dándole un cariñoso beso en la comisura de los labios.
Mientras Remus se había quedado paralizado en la puerta.
Ahí estaba ella, la chica de sus sueños, dándole besos a todo el mundo, mas féliz que nunca, sonrió bobamente al ver que tampoco había sido mala idea y se acercó a ella.
Hola caperucita, no me digas que te olvidaste del lobo de verdad... - Dijo, falsamente enfadado Remus.
Hermione entonces sintió un escalofrío recorrerle todo el cuerpo, una corriente subir por su médula espinal, y como si se le parara el corazón, tenía un presentimiento muy extraño con... con esos ojos de color miel, algo, raro, pasado... pero si lo recordaba, aunque no sabía de que.
¿Remus?. - Dijo, indecisa, umm ¿Moony?
Claro, ¿Quién sino?. - Y él sin poder contenerse la abrazó, un abrazo que duro unos eternos segundos, pero del que no se habrías separado, secretamente, jamás.
Yo bueno, yo... - Seguía mirando a Remus, miles de preguntas se formulaban en su cabeza, y de vez en cuando aparecía la imagen de Draco, causándole un gran revuelo mental.
¿Si Hermione?. - Le ayudó Dumbledore.
Yo quería deciros... - Su mirada se perdió en los ojos de color miel, y, reflejadas, pudo ver unas siluetas borrosas, dos siluetas, que se iban haciendo a cada segundo mas claras.
¿El que?. - Preguntó la profesora McGonagall.
Que yo me caso... - Se interrumpía constantemente, pues ahora estaba casi segura que se estaba viendo reflejada en el iris de aquel hombre, Remus Lupin.
¿Si?-
Que yo me caso... - Abrió mas los ojos y los cerró, pero seguía viendo esa imagen mentalmente, se observaba a ella, y, y.. a Lupin.
¿Te casas Hermione?. - Dijo Harry algo harto de la indecisión de su amiga.
Que me casó con Draco Malfoy. - Pero entonces lo vio claramente, una imagen, que la hizo abrir la boca, y caer hacia atrás tirando la silla.
Lo que acababa de ver... no, no... no podía ser cierto...
TO BE CONTINUED
Hola a todos!!!!
Bueno, no se si podré continuarla el próximo Martes, pero a lo mejor hago un esfuerzo por que esta historia me encanta jejejeje.
¿Qué será será...? Bueno, solo digo que, si los fans españoles le han cogido algo de cariño a la historia, jajaja, que sepan que a mi solo me inspira VICENTE, DE OT, y yo solo escribo si lo oígo cantar, asdi que de vosotros depende que me inspire o no, bueno, se que suena a chantaje, pero por favor, si os gusta amor cautivo y tenéis el saldo del móvil lleno escribir EURO VICENTE (AL 5005.) POR FAVOR, BAJAOS SUS CANCIONES, JEJEJEJE
Y ahora, los reviews:
Annita69 Lupin Black: Yo tambien estoy infinitamente agradecida y satisfecha hacia ti Ana, jejejeje. Es la falta de experiencia lo que lo hace menos detallista, pero espero que el segundo polvo me quede mejor (que fina soy) Mis ficts son mas cursis que un arcoiris rosa, jejeje, no lo niegues!! Bueno, la verdad es que le permití que recordara un poquito, por que si no no sabía como seguir la historia, que se presentara ahí en Hogwarts diciendo algo parecido a hola, yo soy Forrest. Forrest Gump, asi que se olvide de esa noche (Dios que cabrona que soy) Jajajaja lo de se buena, prefiero ser mala jajajaja jaja jajaja (Risa sádica)
Relley-Chan: Siiii, que los uno que se vuelven a ver, pobrecitos, la verdad yo casi lloro escribiendo jejeje, ¡TE AMO REMUS!!!! Ya estoy yo con las cursilerías, hoy les dio a todos bajadas de tensión, pero bueno, es la emoción.... Vamos, es que tengo un estilo... mas que Támara y Pocholo jejejeje, somos únicos, anda, ya te vale.... gracias por todo!
Luna_Wood: Hola wappa!!! Jodo que si es tonta, si vuelvo a Hogwarts y soy Remus le meto un tiro con la escopeta de perdigones de mi tío que lo flipa, pero en fin... Pues si, tienes razón quien pudiera ser Herms, y quien podría ser Remus?? Miento, ese no existe, aunque no pierdo la esperanza de verlo algún día...
Agus y Moony: ¿Tu también crees que soy una pervertida? Pues por que no me conoces, jejeje. A ver que te digo, si que lo voy a continuar, tengo esa esperanza, lo que a partir de ahora no se cuando, y... como ves, Draco estuvo adorable, si, estoy perdida por Remus, yo y Hermione, solo que yo no soy correspondida, (snif, snif), en fin, besos y cuidaté.
Kmila: jajajaja, si que publiqué, por cierto ¿Cuánto tiempo hace que no hablamos? Mucho, fijaté, me pegaste con tu días de playa la afición de los Remus/Hermione y ya llevo tres , y dos bastante avanzados, ¿Vas a actualizar? Sorry por la pregunta pero es que me va a dar algo, jejeje. Besos y que sigas enamorando a la gente con tus canciones de Bacilos.
VICENTE A EUROVISIÓN POR FAVOR
Capítulo 5: Es el poder del amor
Adiós amor mío, no me llorés volveré
Antes que, de los sauces caígan las hojas
Piensa en mi, volveré, a por ti...
Hermione despertó una dulce y calurosa mañana de Verano, en una cómoda cama.
Se giró hacia la derecha, y con una sonrisa en los labios murmuró:
Draco
El nombrado se volvió hacia ella y le sonrió, acariciándole los cabellos castaños, y besándola tímidamente.
Ella le devolvió el beso, ciertamente se sentía extraña aquella mañana, era como... como si no recordara nada que hubiera pasado el día anterior, solo existía el presente y... un futuro con el muchacho que estaba a su lado en la cama.
Buenos días mi princesa, ¿Qué tal has dormido?. - Le dijo él amablemente.
Mejor que nunca. - Le sonrió. - ¿Debemos levantarnos ya?
Solo si tu quieres, por que también podemos hacer lo mismo de anoche.
Ella rió tímidamente, una risa que para el joven Malfoy era mejor que las miles de melodías que los pajarillos cantaban alrededor de las ventanas de su mansión.
No, será mejor que me levante, si quieres te preparo el desayuno.
Por supuesto que no, Hermione, un Malfoy siempre prepara el desayuno a su mujer, mientras esta le obsequia con su presencia.
¡Oh!, eres un cielo. - Susurró Hermione, algo confundida, pues ni siquiera había recordado que se llamaba Hermione, y se levantó.
Y tu un ángel. - Le respondió Draco, mientras descalzo y caminando por el tapiz corrió hasta la cocina, seguido por la chica.
Unas horas antes...
Remus Lupin corría bajo la lluvia que había comenzado a mojar el suelo, y que se mezclaban con las lágrimas de rabia que caían de sus ojos desde que había oído el último grito de la única mujer que había amado en su vida.
Avanzaba y seguía, tropezaba, pero le daba igual, quería quitar todas las imágenes que recorrían su memoria, como una lenta y dolorosa tortura, se repetían miles de veces los momentos vividos con Hermione, como la había hecho suya, y... como, sin él haber hecho nada había dejado que se marchara, ¡maldita sea!, que se hubiera ido de él para siempre.
Antes de que se diera cuenta se vio delante de la puerta del castillo. Pero no se vio con las fuerzas suficientes para entrar, para dar la cara, no quería que lo vieran con esas pintas, estaba loco, si, totalmente perdido por ella y sin ella.
No se podía explicar como le había ocurrido eso en tan poco tiempo, pero en seguida se pudo dar cuenta que ya le venía desde hacía muchos días, meses, e incluso, años, solo que no había querido creerlo.
¡Eh! Remus, no puedo creer que estés aquí, ¿Dónde estabais?. - Lo miró, y las pequeñas gotitas cristalinas que rodaban por sus mejillas. - ¿Qué ha pasado?. - Dijo mas seriamente, al ver el estado de su amigo.
Es una historia muy larga Sirius. - Sollozó Remus, entrando en el gran comedor donde las pocas personas que había, todos adultos y miembros de la orden, le voltearon a ver preocupados. De un salto se apoderó de una lechuza que entraba en el gran comedor, seguramente una edición de última hora, miró la portada, y con rostro de dolor, cayó al suelo de rodillas y desmayado.
Mientras Draco y Hermione desayunaban silenciosamente.
Cariño, ya he avisado al Profeta de nuestro compromiso, a estas horas ya todo el mundo sabrá que nos casamos, por supuesto, todos los que quieran asistir estarán invitados, todos que tu desees.
Gracias Malfoy, desde luego, tu pedida de anoche fue magnífica, y como terminó también. - Sonrió picaramente.
Si, acabamos tan felices que bebimos en exceso, que pena que no recuerdes... - Dijo Draco. Ni el mismo se creía que podía haberse inventado toda esa farsa. No había habido ninguna cena de compromiso, de hecho, había pasado apenas una hora desde que le arrojara a la chica el hechizo desmemorizador, pero había sido hábil colocándole un anillo de compromiso de diamantes en el dedo derecho, la había acostado junto a él en su cama, y la había convencido de que la pedida de mano había sido espectacular.
Si, te amo Draco, y todo el mundo mágico y muggle puede ser presente de eso. - Dijo convencida la joven, mirándole con amor.
Me amas y yo te amo mas que a nada en este mundo. - Le respondió Draco muy romántico. Solo la última parte era cierta, el si la amaba, pero ella a él no, lo había dicho antes de que le robara la memoria, haciéndole que casi se compadeciera y la dejara marchar, ella quería al licántropo, a Lupin, pensó que no debería interponerse, pero el deseo de tener a la sangre sucia que le había robado su corazón fue mas fuerte.
Desde luego. - Sonrió, comiendo con él un par de tostadas, y diciéndole. - ¿Dónde vas tu hoy?.
Pues hoy faltaré a mi trabajo, pues tengo que avisar a mi familia personalmente del compromiso, que ha sido precipitado, por que apenas nos conocemos desde hace poco...
Pero nos quisimos ya en Hogwarts. - Dijo la muchacha. - Da igual además lo que piensen.
Claro que si mi amor, hablando de Hogwarts...
Si, debo ir allá a avisar a mi querido profesor Dumbledore de la boda, seguro que se alegra mucho, y a mis amigos, Harry, Ron, me alegro que os aceptéis tan bien.
Por supuesto, además, si tu estás cómoda con ellos, algo bueno deben tener...
Claro. - Rió Hermione. - ¿Sabes que?, esta mañana me he despertado extraña, recuerdo solo algunas cosas, pero hay detalles de mi pasado que desconozco, recuerdo todos mis años en Hogwarts, mi trabajo para la orden, que tu no tienes que ver con tu padre y los mortifagos... pero hay cosas de las que no recuerdo nada, como lo que hice ayer... y los últimos días, y de algunas personas. - Se confesó Hermione.
Ummm, eso es grave, ¿Quieres que llame a un médico?. - Dijo él sabiendo que la chica por su orgullo no cedería.
Por supuesto que no, dudo que sea Alzheymer... - Pensó Hermione.
¿Alzheymer?. - Dijo extrañado, pues desconocía esa palabra.
¡Oh!, déjalo Draco, creo que deberías haber tomado en Hogwarts estudios muggles...
Oye... que me casara con tigo no significa que haya cambiado algunas de las creencias de mi familia.
Mira que no me caso con tigo.... - Lo amenazó Hermione, en broma.
No, ¡Nooo! Los muggles sois muy buenos, perfectos, os quiero. - Se puso de rodillas Draco.
Eso me gusta mas... - Rió ella y se besaron apasionadamente, mientras el tomaba su capa y se marchaba hacia un parque cercano para aparecerse, mientras Hermione se dirigía a la chimenea, y arrojando unos polvos flú gritaba:
¡Hogwarts!
En el comedor todos se levantaron horrorizados al ver a su compañero de oficio desplomarse en mitad de uno de los pasillos.
Sirius se agachó junto a él tomándole el pulso, y tranquilizándose un poco al ver que estaba con la respiración normal le intentó arrebatar el periódico estrujado de la mano.
Cuando lo vio su cara adoptó un color pálido en la cara y cayó de rodillas al suelo. Dumbledore al ver que algo estaba mal se acercó también y leyó el titular, el también cambió su expresión por una mucho mas seria y con una fuerza especial para su edad incorporó al animago y se agachó junto a Remus, poniéndole las manos en la cabeza consiguió que este despertara, con su rostro bañado en sudor y lágrimas, mientras el periódico iba pasando por las manos de todo el comedor y las expresiones verbales de indignación iban creciendo.
La noticia, en titular, decía:
Tras un corto tiempo de noviazgo, nos ha sido anunciada la grata noticia de la boda de los conocidos Draco Malfoy y Hermione Granger, jóvenes e ilusionados, están enamorados y seguros de la decisión que han tomado, con una petición previa a la familia, que las aceptará encantada, se podrá asistir a la ceremonia.
Hola Remus, antes que nada, ¿Cómo estás?
Buenos días profesor, no había estado peor en toda mi vida, si eso es lo que quiere saber.
Se nota, y, ¿En cuanto a esta noticia?
Tiene una larga historia detrás, y empieza y termina con un nombre: Hermione.
Bien, Tonks, cierra las puertas del comedor, como ya estáis aquí convoco una reunión de gravedad de la orden, juntad una mesa y tomad asiento, vamos Remus hijo, te ayudo a sentarte. - Dijo amablemente el profesor.
Gracias. - Susurró débilmente Remus y sintió como lo arrastraban hasta la mesa y lo sentaban entre Snape y Sirius.
¿Y bien?. - Preguntó Ron impaciente.
Todo empezó el día de la batalla, nos quedamos rezagados, como todos sabéis, en el centro con el Lord oscuro y rodeados de mortifagos, Voldemort comenzó sus juegos de palabras, de tratos, antes de matar a la gente, y a mi me sometió bajo un Crucio, mientras que a Hermione le hablaba de la muerte de sus padres y otras cosas horribles, entonces ella, sacando fuerzas de no se donde, le lanzó la maldición cruciatus, al señor tenebroso, y lo mantuvo bajo su efecto durante un buen rato, hasta que Malfoy la detuvo, nos cogió y desmayó y cuando despertábamos estabamos en una celda, incomunicados, solo hablamos con los dos Malfoys, y sin podernos separar el uno del otro menos de dos metros.
Fue cortado por los murmullos que resonaron en la sala, y le pidieron que siguiera.
Como sabréis, hubo un cambio lunar a última hora, así que, estando ligados mágicamente, el día de la transformación no nos podríamos separar y yo... la mataría, Lucius Malfoy quería que ella muriese, pero Draco Malfoy apareció dándole otra propuesta: Viviría casada con él el resto de su vida, que sería mucha, totalmente enamorada de Draco, y olvidaría al resto, pero si que podría venir a Hogwarts, recordar a sus amigos de la infancia y eso, solo que estaría enamorada de Malfoy, por siempre.
Y ella aceptó, como es lógico. - Dijo Tonks.
No, yo acepté por ella, Hermione no quería dejar de ser Granger, no quería ser una Malfoy, casi prefería la muerte a vivir atada a él eternamente.
Me alegro de que hicieras eso por ella, Remus, no podrías haber cargado con su muerte.
Es cierto. - Se confesó Remus. Sabía que no podría evitar eternamente su amor por la muchacha, pero no se veía con fuerzas para decirlo delante de toda la orden.
De acuerdo, supongo que es cuestión de tiempo de que la chica venga, creo que Malfoy la quiere tanto que incluso la dejará seguir en la orden, no lo dudo, ese chico me ha sorprendido favorablemente, pero eso sí, no podré hacer nada para evitar el resto.
Pero... - Se quejó Ron.
No hay peros, señor Weasley, lo siento mucho, se da por terminada la reunión.
Todos se levantaron de sus sitios, y Sirius, entristecido, se acercó a Remus, quien no levantaba la vista del suelo.
A mi no me engañas como al resto Moony, te conozco bien. - Le dijo Sirius.
¿Por qué iba a engañar a nadie?. - Preguntó Remus.
Por que esa mirada de enamorado es la misma que tuvo James hace unos años, y me la conozco bien, tu acabaste loco por la chica.
Se nota que me conoces bien, Padfoot, pero no me encuentro con ganas de hablar de ello... - Calló al ver que un fénix se posaba en su hombro y desenrolló el pergamino que había atado.
Dumbledore nos llama a su despacho, rápido. - Leyó Remus. Y hecharon a correr por los pasillos.
Hermione aterrizó descontroladamente sobre el escritorio de Dumbledore.
Hola profesor, ¿Qué tal está?. - Dijo dirigiéndose al hombre que se acababa de dar la vuelta.
Hola, señorita Granger, que placer tenerla aquí. - Dijo, besándole la mano. - ¿Que la trae por este viejo castillo?
No es tan viejo... dar una noticia realmente importante para mi.
¡Oh!, ¿En serio?, pues llamaré a sus mas allegados. - Y comenzó a escribir en un pergamino, lo multiplicó y Fawkes los llevó a sus destinatarios.
Unos minutos mas tarde...
Ya estamos aquí prof... ¡Hermione!. - Exclamó Harry abrazándola, cuando la soltó fue abrazada por Ron, y les dio un beso a cada uno en la mejilla, justo entonces entraron la profesora McGonagall y Snape, quien también la saludaron amablemente.
Bueno, ya estamos casi todos, solo faltan...
Nosotros. - Sirius dijo desde la puerta. - ¿A caso no me recuerdas, caperucita?. - Rió Sirius.
Claro, ¿Cómo no me iba a acordar del gran y egocéntrico Padfoot?. - Rió la chica, dándole un cariñoso beso en la comisura de los labios.
Mientras Remus se había quedado paralizado en la puerta.
Ahí estaba ella, la chica de sus sueños, dándole besos a todo el mundo, mas féliz que nunca, sonrió bobamente al ver que tampoco había sido mala idea y se acercó a ella.
Hola caperucita, no me digas que te olvidaste del lobo de verdad... - Dijo, falsamente enfadado Remus.
Hermione entonces sintió un escalofrío recorrerle todo el cuerpo, una corriente subir por su médula espinal, y como si se le parara el corazón, tenía un presentimiento muy extraño con... con esos ojos de color miel, algo, raro, pasado... pero si lo recordaba, aunque no sabía de que.
¿Remus?. - Dijo, indecisa, umm ¿Moony?
Claro, ¿Quién sino?. - Y él sin poder contenerse la abrazó, un abrazo que duro unos eternos segundos, pero del que no se habrías separado, secretamente, jamás.
Yo bueno, yo... - Seguía mirando a Remus, miles de preguntas se formulaban en su cabeza, y de vez en cuando aparecía la imagen de Draco, causándole un gran revuelo mental.
¿Si Hermione?. - Le ayudó Dumbledore.
Yo quería deciros... - Su mirada se perdió en los ojos de color miel, y, reflejadas, pudo ver unas siluetas borrosas, dos siluetas, que se iban haciendo a cada segundo mas claras.
¿El que?. - Preguntó la profesora McGonagall.
Que yo me caso... - Se interrumpía constantemente, pues ahora estaba casi segura que se estaba viendo reflejada en el iris de aquel hombre, Remus Lupin.
¿Si?-
Que yo me caso... - Abrió mas los ojos y los cerró, pero seguía viendo esa imagen mentalmente, se observaba a ella, y, y.. a Lupin.
¿Te casas Hermione?. - Dijo Harry algo harto de la indecisión de su amiga.
Que me casó con Draco Malfoy. - Pero entonces lo vio claramente, una imagen, que la hizo abrir la boca, y caer hacia atrás tirando la silla.
Lo que acababa de ver... no, no... no podía ser cierto...
TO BE CONTINUED
Hola a todos!!!!
Bueno, no se si podré continuarla el próximo Martes, pero a lo mejor hago un esfuerzo por que esta historia me encanta jejejeje.
¿Qué será será...? Bueno, solo digo que, si los fans españoles le han cogido algo de cariño a la historia, jajaja, que sepan que a mi solo me inspira VICENTE, DE OT, y yo solo escribo si lo oígo cantar, asdi que de vosotros depende que me inspire o no, bueno, se que suena a chantaje, pero por favor, si os gusta amor cautivo y tenéis el saldo del móvil lleno escribir EURO VICENTE (AL 5005.) POR FAVOR, BAJAOS SUS CANCIONES, JEJEJEJE
Y ahora, los reviews:
Annita69 Lupin Black: Yo tambien estoy infinitamente agradecida y satisfecha hacia ti Ana, jejejeje. Es la falta de experiencia lo que lo hace menos detallista, pero espero que el segundo polvo me quede mejor (que fina soy) Mis ficts son mas cursis que un arcoiris rosa, jejeje, no lo niegues!! Bueno, la verdad es que le permití que recordara un poquito, por que si no no sabía como seguir la historia, que se presentara ahí en Hogwarts diciendo algo parecido a hola, yo soy Forrest. Forrest Gump, asi que se olvide de esa noche (Dios que cabrona que soy) Jajajaja lo de se buena, prefiero ser mala jajajaja jaja jajaja (Risa sádica)
Relley-Chan: Siiii, que los uno que se vuelven a ver, pobrecitos, la verdad yo casi lloro escribiendo jejeje, ¡TE AMO REMUS!!!! Ya estoy yo con las cursilerías, hoy les dio a todos bajadas de tensión, pero bueno, es la emoción.... Vamos, es que tengo un estilo... mas que Támara y Pocholo jejejeje, somos únicos, anda, ya te vale.... gracias por todo!
Luna_Wood: Hola wappa!!! Jodo que si es tonta, si vuelvo a Hogwarts y soy Remus le meto un tiro con la escopeta de perdigones de mi tío que lo flipa, pero en fin... Pues si, tienes razón quien pudiera ser Herms, y quien podría ser Remus?? Miento, ese no existe, aunque no pierdo la esperanza de verlo algún día...
Agus y Moony: ¿Tu también crees que soy una pervertida? Pues por que no me conoces, jejeje. A ver que te digo, si que lo voy a continuar, tengo esa esperanza, lo que a partir de ahora no se cuando, y... como ves, Draco estuvo adorable, si, estoy perdida por Remus, yo y Hermione, solo que yo no soy correspondida, (snif, snif), en fin, besos y cuidaté.
Kmila: jajajaja, si que publiqué, por cierto ¿Cuánto tiempo hace que no hablamos? Mucho, fijaté, me pegaste con tu días de playa la afición de los Remus/Hermione y ya llevo tres , y dos bastante avanzados, ¿Vas a actualizar? Sorry por la pregunta pero es que me va a dar algo, jejeje. Besos y que sigas enamorando a la gente con tus canciones de Bacilos.
VICENTE A EUROVISIÓN POR FAVOR