"Verde":
Segundo capítulo: Encontrando algo o a alguien
Se había subido al coche casi por desidia. Ese hombre de cabellos oscuros y mirada bondadosa detrás de unos increíbles ojos celestes no le era de mucha confianza, y mucho menos conocido...
Al verla lanzar su bolso hacia la playa que en esa mañana se encontraba aún desierta, esa chica de cabello castaño claro y delgada figura le había llamado la atención. Se acercó a ella tan sólo para comprobar que era tan hermosa como él se lo imaginaba, aunque no sólo pudo comprobar eso, sino que también descubrió la infinita tristeza oculta en esos ojos esmeralda. Tampoco tenía dudas con respecto a la procedencia de la chica, no era española ni de casualidad... Sólo podía limitarse a mirarla de reojo mientras conducía a su lado, ya que había intentado en vano iniciar una conversación con la desconocida que ya lo atormentaba con su presencia.
Ella tampoco sabía por qué no le dirigía la palabra a ese hombre que la miraba con curiosidad, pero a la vez, con deseo, cosa que no pasaba desapercibida para Sakura. Tal vez el silencio era parte de su nueva vida... al lanzar sus cosas al aire, sentía que había perdido todo rastro de lo que había sido. Ya nadie sabría quien era ella... podía ser una espía japonesa infiltrada en España por una misión secreta del gobierno, o tan sólo una viajera muda y pobre que recorría el país. "Por dios", pensó... en que cosas tan triviales podía llegar a pensar con tal de no pensar más en Yukito...
"Yukito..." y con tan solo nombrarlo en sus pensamientos su rostro sonriente y sereno invadió su mente. Sacudió un poco su cabeza, tratando de alejar el rostro invasor de sus pensamientos, haciendo que sus cabellos castaños se movieran todavía más de lo que los movía el viento en aquél instante.. El hombre que se encontraba a su lado la miró.
-Te sucede algo?- preguntó mirándola por primera vez a los ojos.
Sakura sólo sacudió su cabeza, pero esta vez en forma más lenta que la anterior, como para marcar la respuesta negativa a la pregunta de su interlocutor.
El hombre la volvió a mirar a los ojos pero en forma más centrada, como tratando de comprobar la veracidad de la respuesta de la chica y, también, tratar de descifrar el misterio de esos ojos tristes y el por qué la joven no hablaba.
-No eres española, cierto?- le preguntó esta vez sin mirarla, manteniendo sus ojos celestes clavados en la ruta.
-No... soy japonesa- contestó Sakura con algo de dificultad... Había decidido huir, por así decirlo, a España ya que era un lugar lo suficientemente lejos de su Tomoeda natal, y porque, aunque no tenía práctica con el idioma, el español era una lengua que le gustaba desde que era pequeña. Había decidido aprenderlo ya que uno de los pocos recuerdos que mantenía vivos en su memoria de su madre, era un trozo de un poema de un escritor español. Su madre se lo recitaba en las noches, haciendo referencia a sus ojos...
"Verde... verde que te quiero verde... verde viento, verde ramas... el barco sobre la mar, el caballo en las montañas..."
Solía cantarlo, como lo hacía su madre durante las noches para que se durmiera, sólo que ella se lo repetía una y otra vez cuando sentía miedo o extrañaba demasiado, para que esas sensaciones desaparecieran de su interior ante el recuerdo de esa mujer que siempre la miraba con dulces ojos y una mirada llena de amor... una mirada que ya no vería más...
-Lo supuse- dijo el hombre que seguía sin voltear a verla, sacándola así de sus pensamientos.
-¿Qué cosa?- preguntó Sakura, como saliendo de su trance y tratando de volver a la realidad...
-Que tú no eras española... - le contestó simplemente el joven- ¿cómo te llamas?
-Sakura- dijo con un tono muy japonés y de satisfacción. Adoraba su nombre, porque su madre lo había elegido, haciendo referencia a sus flores favoritas...
-Daniel- exclamó el joven, sonando serio sin proponérselo- un gusto- agregó, esta vez volteando a mirar los ojos esmeraldas que ahora lo miraban con un dejo de curiosidad.
-Igualmente... ... Daniel- dijo finalmente Sakura, haciendo un pequeño esfuerzo por pronunciar correctamente el nombre de ese joven que la estaba llevando a quien sabe donde.
Ella había guardado también ese absoluto silencio, casi sepulcral, cuando el hombre le preguntó si quería que la llevara a algún lugar en especial... ahora no sabía a ciencia cierta a donde se dirigía. Sakura se había subido sin pensarlo dos veces en el coche del extraño, dejando que el destino decidiera por ella. Podía dejar que la llevara a donde sea, total ella ya no era la misma, ella podía ser otra, aunque fuera sólo por un día, aunque fuera sólo por hoy...
La lluvia daba de lleno en su parabrisas. Las gotas resbalaban una detrás de la otra en el cristal, impidiéndole la visión y poniéndola lo suficientemente nerviosa delante del volante, como para tener un accidente. Disminuyó la velocidad, tratando de acertar el rumbo que tomaba su automóvil en la carretera cubierta por la niebla y la tormenta, pero todo fue inútil. Un ruido seco y una luz la sobresaltaron de su asiento... Quedó como anonadada mirando a través del cristal delantero, viendo sólo la encandilante luz amarilla de la parte trasera del automóvil con el cual había chocado.
La lluvia no cesaba de caer, cuando un golpe en la ventanilla que tenía a su lado la hizo reaccionar. Rápidamente, bajó el vidrio para ver a quien era el conductor que había sufrido el choque de su parte... no tuvo tiempo de observar bien a la persona, sólo volvió a sobresaltarse ante los gritos de la mujer que se encontraba empapándose bajo la lluvia...
-¿Qué? ¿Acaso no ve por donde va? Mire lo que le hizo a mi coche!!!!! Me imagino que tendrá seguro, porque sino, pobre de usted...- dijo casi chillando la mujer en un ataque de nervios mientras seguía mojándose por la fuerte tormenta.
-Si... lo siento muchísimo, y no se preocupe, que tengo seguro- exclamó algo preocupada Tomoyo, pero tratando de calmar a la otra joven- entre, por favor- agregó mientras destrababa la puerta del asiento trasero del auto.
En un movimiento rápido, y maldiciendo su suerte, la mujer que tenía su pelo sujeto por dos colas altas, entró en el automóvil de la amatista.
Tomoyo suspiró, tratando de procesar lo ocurrido y mirando de reojo a la desconocida a través del espejo retrovisor... Era una chica de más o menos su edad... veinticuatro años, cabello azabache azulado como el suyo, ojos marrones chispeantes... Parecía que de ellos emanaba fuego... quizás por la situación, quizás por el temperamento natural de la chica, no lo sabría decir con exactitud.
De repente, la mujer que hasta ese entonces se encontraba ocupada escurriendo su cabello, sacó de la nada un cigarrillo y, poniéndoselo en la boca, se abalanzó hasta la parte delantera el coche, apretando el botón para que se calentara la punta y así poder encender su cigarrillo.
-Me das uno?- preguntó algo tímida Tomoyo...
-Algo más?- le respondió en forma de pregunta un tanto histérica la joven.
-Lo siento- susurró Tomoyo mientras agarraba el encendedor del coche y así prendía el cigarrillo que le acababa de dar la, a su parecer, alterada mujer. Cuando exhaló el humo de la primera pitada, le pasó el encendedor a la chica que esperaba en el asiento trasero, agregando un tímido "gracias".
-D- nn-da- masculló entre dientes la chica un poco más calmada, mientras encendía su cigarrillo. Al devolverle el encendedor, preguntó:- ¿cómo te llamas?
-Tomoyo Daidouji... tú?- recibió como respuesta, además de una cálida sonrisa de la amatista. Tenía su mirada centrada en ella, para así descubrir que también tendría su edad, además de un hermoso pelo negro azulado, largo hasta su cintura...
-Meiling Li- dijo con un poco más de ánimo la joven de voz chillona.
Tomoyo enseguida comprendió que la joven era china. ¿Cómo no lo había notado antes?. Sus rasgos no eran muy japoneses que digamos y su pronunciación era un poco pobre, pero... ¿qué hacía en Tokio una joven china que, aparentemente, se encontraba sola?. No tuvo tiempo de seguir cuestionándose, cuando la chica habló:
-Ya llamé al servicio mecánico para que nos vengan a buscar- exclamó largando el humo que aún se encontraba en su boca- pero tendremos que esperar como media hora...
Tomoyo la miró nuevamente por el espejo retrovisor y sólo asintió levemente con su cabeza. Volteó su mirada al cristal para seguir observando las gotas caer, sin advertir que los ojos de la chica se encendieron al ver la enorme caja blanca, envuelta en un moño dorado, que se encontraba en el asiento del acompañante.
Meiling:- Qué es? ¿Se puede abrir?
Tomoyo se sorprendió un poco ante la pregunta de la joven, y volteando a verla con una plácida sonrisa le dijo:
-Si, se puede... es... mi vestido de novia.- la sonrisa de satisfacción en el rostro de Tomoyo creció al ver la cara sorprendida e intrigada de Meiling, por lo que agregó con la misma satisfacción:- lo hice yo.
-¿En serio?- los ojos de Meiling se abrieron aún más en ese grito-.
La otra joven sólo asintió, formando una sonrisa divertida con sus labios.
-¿Puedo verlo?- preguntó la china todavía más emocionada.
-Si, claro- exclamó Tomoyo, comenzando a quitar con cuidado el dorado moño que cubría la tapa de la caja.
-Es hermoso- susurró Meiling cuando tuvo en sus manos el blanco vestido... Pequeñas piedras blancas en la pechera que estaba diseñada para cubrir los pechos de la persona que lo usara en forma de corazón... el tul de la parte inferior se extendía blanco y prolijo. Era un vestido sencillo, pero no por eso menos hermoso. La joven de roja mirada dijo aún emocionada:- no puedo creer que lo hayas hecho tú...
-De pequeña solía diseñar vestidos para mi mejor amiga... algunos eran extravagantes y un poco ridículos, pero Sakura nunca se negó a probarlos... siempre me daba ese gusto- le contó la muchacha con un leve dejo de melancolía en sus viólaselos ojos.
-Siempre soñé con casarme con un vestido así- comentó Meiling- es más... una vez estuve a punto de casarme...
-Y qué sucedió?-preguntó Tomoyo algo intrigada.
Meiling:-Él... murió.
-Oh, lo siento mucho, yo no sabía... - trató de excusarse Tomoyo, un poco apenada.
-No te preocupes- exclamó Meiling con la mirada baja. Para cuando la levantó sus ojos mostraban nuevamente ese fuego característico en su mirada, sólo que ahora era acompañado con algo de melancolía y tristeza...- Todavía su voz está grabada en el contestador automático de mi casa en Hong Kong... a veces suelo ir a un teléfono público y llamar a mi casa desde ahí, sólo para oír su voz... luego del tono le dejo un mensaje, contándole como va mi vida, como si él pudiera oírme, aunque yo creo que puede...
Tomoyo no emitió respuesta, al fin de cuentas no sabía que decir, así que por un instante apartó su vista de la joven china y la dirigió a su vestido de novia, que se encontraba en el regazo de aquella muchacha.
-¿Cuándo es el gran día?- preguntó Meiling sacando de su ensimismamiento a la amatista.
-Dentro de dos semanas- contestó Tomoyo con algo de desanimo.
-¿Qué pasa? Tú... – dijo la joven observando cuidadosamente a Tomoyo.
Tomoyo:- Oh, no! No pienses que no lo amo... es sólo que... lo conozco hace tres meses.
-A veces toda una vida no es tiempo suficiente para terminar de conocer a alguien- exclamó Meiling, buscando donde apagar su cigarrillo.
-Tíralo afuera- dijo Tomoyo notando la búsqueda de los ojos de la china por un cenicero o algo por el estilo- Tienes razón... a veces toda una vida no basta- agregó bajando su mirada... "Eriol..."
-Así es- respondió Meiling dibujando una sonrisa en su rostro, mientras afuera un par de luces se estacionaban detrás del auto. El servicio mecánico finalmente había llegado...
Se había despertado temprano y también había sido uno de los primeros en bajar a desayunar en el hotel, quería disfrutar desde el inicio cada día en España.
Luego del desayuno, se vistió con un pantalón negro y una camisa blanca, dejando los dos botones superiores desabrochados y levantando un poco las mangas. Peinó un poco su desordenado cabello castaño y se preparó para salir. Primero caminaría un rato por la ciudad... quizás por la costanera, quería ver el mar. Luego debía pasar por la agencia a retirar su vehículo... una vez que había logrado huir de sus obligaciones, no se quedaría quieto en Barcelona... había tanto por descubrir.
Cerró los ojos frente a la brisa marina y, sin quererlo, su imagen se le cruzó por la cabeza. Sacó su celular y marcó un número de varios dígitos. Mientras, en Italia un teléfono sonaba. La rubia corrió a atenderlo.
La italiana voz que él esperaba escuchar, le contestó al otro lado del teléfono...
-Pronto, Fran?
-Chi é?
-Sha- shaoran... sono in Spagna… nel mare, ti ricordi?… nostro mare.
-Shaoran, ti ho detto di non telefonarmi piú... non mi interessa dove sei, lasciame in pace.
-Ma... io ti seguo amando...
-Devo andare via... per favore, non mi chiami piú. Puoi capirlo?
-Si... ho capito... quindi questo sarà il nostro adío. "Sayonara", Fran.
-Arrivederci per sempre, mio Shaoran.
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-Hola, Fran?
-Quién es?
-Sha-Shaoran... estoy en España... en el mar, te acuerdas?... Nuestro mar...
-Shaoran, te dije que no me llamaras más... no me interesa donde estés, déjame en paz.
-Pero... yo te sigo amando.
-Tengo que irme... por favor, no me llames más.. puedes entenderlo?
-Si, entendí... entonces este será nuestro adiós. Adiós, Fran.
-Adiós para siempre, mi Shaoran...
Cayó sentado en la arena... cerró su negro celular y volvió a meterlo dentro de su bolsillo. Todo estaba perdido... a Francesca ya no le importaba ese mar que alguna vez había sido de los dos, definitivamente ya lo había olvido... Quizás sería mejor no volver nunca más a Venecia. Esa mujer ya no valía la pena.
Bajó su mirada algo dolido... ¿alguna vez la había querido? ¿eso había sido amor? Sin embargo, él mencionó algo sobre amarla... el deseo se había mezclado con el corazón, y cuando hay grandes distancias y se da prioridad a lo terrenal, a veces las cosas no salen tan bien. Fue el cariño de una vez, pero ambos ya habían dicho adiós.
Al levantar nuevamente su mirada se encontró con un pequeño bolso negro como su pantalón... miró a sus costados y no vio a nadie más que un par de niños corriendo a lo lejos, bordeando el mar. Seguramente alguien lo habría olvidado... ¿lo agarraría?
Su curiosidad lo venció y estiró su mano con algo de incertidumbre. Finalmente tomó el objeto entre sus manos y se dispuso a abrirlo. Vació el contenido del bolso en la arena... una foto, una pequeño papel amarillo doblado, algunas monedas, un pequeño frasquito de esos de hacer burbujas, un paquete de pañuelos, la cédula de identidad, que dejaba ver quien era la persona dueña de todo aquello, y demás cosas.
Tomó el papel amarillo y al desdoblarlo, comenzó a leer su contenido... una frase muy conocida para él, escrita en perfecta prolijidad, se leía en japonés...
"Verde que te quiero verde... verde viento, verde ramas... el barco sobre la mar y el caballo en la montaña..."
-Federico García Lorca- murmuró forzando su conocimiento del español para lograr una correcta pronunciación.
En las clases que había tomado cuando era pequeño, alguna vez vio algo sobre ese poeta y dramaturgo español. Lo único que recordaba de su biografía era que la vida del tipo terminaba en la guerra civil española, al igual que donde comenzaba su aburrida clase de historia.
Siempre tuvo habilidad de recordar cosas, aunque en su momento no les prestara atención. Sin embargo, aquella poesía hecha canción se le había grabado en uno de sus tantos viajes, al igual que otras poesías de ese hombre tan reconocido. Seguramente la dueña del lanudo bolso también lo conocía, y era japonesa. Tomó el frasco de hacer burbujas, dispuesto a tirarse boca arriba a enviar burbujas al cielo, dejando salir el niño que todavía guardaba en su interior... Parecía no crecer más. "Peter Pan" solía llamarlo su madre... ¿Crecer sería tan malo?... Y en el caso de que no lo fuera, ¿no comprendían que él deseaba no crecer jamás?.
Cuando iba a lanzar las primeras burbujas, recordó que había una foto en ese bolso. Ahora la foto estaba un tanto cubierta por la arena, pero Shaoran con su mano la limpió... quería ver a la dueña de esas cosas.
La foto era de una joven de unos veintitrés años, cabellos castaños claros y unos hermosos ojos verde esmeralda... "Verde...", pensó.
ContinuaráN/A: Hola a todos! Sé que tardé bastante pero entre peleas con una personita que aunque es muy importante para mi, me vuelve loca con su demandas y demás, y las mil y una pruebas que tuve estas semanas en la escuela no pude ni tuve el ánimo para actualizar.
Primero que todo quiero agradecerles a todos los que dejaron review, porque en un solo capítulo, entre ff e hispafics, junté 16 reviews y no lo puedo creer... Al ser mi primer fic largo de CCS, no me tenía tanta fe, ya que no era conocida ni nada por el estilo, tan acostumbrada a escribir sobre Inuyasha que animarme a escribir este fic fue toda una aventura...
Les cuento que mi msn está malito y no se deja actualizar ni abrir, así que si quieren escríbanme al mail que con muchísimo gusto les respondo... yashi_nuyasha @hotmail.com
Ahora, gracias a:
Sayo mi hermana del alma que posiblemente no podrá dejarme review por un largo tiempo, pero que con nuestros mails kilométricos me da todo su apoyo. Te adoro, loka!
Miles una persona increíble, copada y simpática que me da el lujo de poder ayudarla en sus fics y de darme su amistad. Este cap. te lo dedico por tu cumple que ya pasó, por haber terminado tu primer fic, y por ser como sos.
S.L. muchísimas gracias por tu comentario. Espero que este capítulo te guste.
Hoshimeisita-chan Me alegra que te haya resultado interesante mi fic, esa era mi intención. Claro que será un Shao/Sak... Please, seguí leyendo que creo que te va a gustar. Espero tu review.
Iya-corazón siempre apoyándome y ayudándome, en las buenas y en las malas, cierto mi sis?? Gracias de todo corazón por tu apoyo y amistad, por decir que me superé al escribir este fic... Pues, claro que fue todo un desafío escribir sobre otra serie que no fuera Inu. Espero poder volver a entrar al msn prontito. Te kiero muchis-muchis, tu chibi-onne
Erusel te extraño!! Gracias por tu comentario, cortito pero comentario al fin... Si, está algo tristón pero creo que esa será la línea del fic en general... Te mando un fuerte abrazo.
Natulys de mi corazón, hace tanto que no te veo ni tengo noticias tuyas... Espero que me escribas prontito porque sabés que no puedo entrar al msn porque no se actualiza. Escribime que te extraño, loka!!!! Gracias por tu infaltable review y por gustarte lo que escribo. Con todo mi cariño de hermana, "Gabinchu".
Sakurely sos una autora que admiro muchísimo y lo sabés... El hecho de que me hayas dejado un review y que encima te gustara fue lindísimo para mí. Espero ver pronto tus fikis actualizados.. Lamento que justo cuando comenzábamos a hablar más por MSN me haya sucedido esto de que no puedo entrar...T_T Gracias por tu comentario y espero recibir uno también en este cap. eh??
Tsuki-lunita claro que podés llamarme Yashi-chan! Por el simple hecho de dejarme un review ya mi hiciste muy feliz, así que gracias!! Me gustó tu reflexión sobre el primer cap., veremos que te parece este... Espero tu review, eh? Animo!
Chibi Kinomoto Sakura me alegra que te guste mi idea, veremos que te parece este segundo capítulo. Espero que sigas adelante con tu historia si es que ya la publicaste, mucho ánimo y suerte.
Celina Sosa quizás todavía no está bien definido que pasará en la vida de Sakura y Shaoran, ni siquiera se encontraron, pero ya verás que pronto lo harán. Espero que te siga resultando interesante, por favor hacemelo saber a través de un review... Lo espero, gracias por todo...
Yami-Battousai Me alegra que te haya gustado el comienzo, me gustaría saber que opinás de este segundo cap. Sobre tu fic, lo leí, lo recuerdo, pero hace rato que no vi que lo actualizaras y por eso mi review no estuvo allí. Ando con exámenes y demás cosas en la cabeza, pero te prometo que pronto, al igual que Iyari, lo leo y te dejo mi review ^_ ^
Zhimeno 9, gracias por leer mi fic como te lo pedí en mi review a tu historia. Siii, me gusta el melodrama, se me nota mucho?? ^^ Gracias por tu comentario, espero uno tuyo también en esta ocasión. Besos
Ropna siempre tan lindos reviews!! Yashi feliz!!! Creo que te agregué al msn con ese mail que me diste, pero con esto de q no puedo entrar, nunca pude hablar con vos T_T Escribime a mi mail, dale? Que me gustaría hablar con vos porque decis siempre cosas lindísimas de mis fics y eso lo valoro muchísimo. Prometo no descuidar a los demás fics que tengo dentro de lo que este en mi alcance, aunque ya se sabe que soy de tardar en actualizar, jeje. Te mando un beso y espero tu review
Yuen Otra que lo encontro interesante!! Muchísimas gracias! Espero tu review para saber que te parece el resto del fic...
Mandy gracias por tomarte el tiempito de leer mi fic. Gracias por todo lo lindo que decis de mi, y como ves amiga, lo continué. Te quiero, mandiux!! Nos vemos
Uff!!!! Terminé..Espero recibir tantos
en este cap. como en el otro... Gracias denuevo a los que dejaron review y a
los que leen lo que escribo. Ahora que esperan para dejar de leer mis tonterías
y dejarme su review??
Nos vemos en la próxima actualización... YaShi