N/T: lamento haberme tardado tanto. Hubiera puesto esto antes, y tenía planeado avanzar más en la traducción, pero mi padre decidió que deberíamos ir a visitar a mi abuelita para su cumpleaños. Así que estuve varios días en Santiago pasando tiempo con mis familiares. Gracias a todos los que dejaron reviews!!

La carta

Draco levantó la vista del periódico que estaba leyendo, justo mientras su lechuza entraba por la ventana para entregar el correo. Lo primero que reconoció fue la caligrafía de su hija- sin duda una carta sobre su primer día de clases. Sonrió a sí mismo y abrió la carta.

Hola papito!

Estoy de regreso para otro año de aburrida tortura, como dijo Dumbledore. Ya te extraño. Por qué la Navidad tiene que ser en Diciembre? En todo caso, hoy fui a todas mis clases. Un 'hurra' para mi por no faltar a ninguna. Como siempre, tenemos un nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras. Adivina quién es? Harry Potter! Al fin regresó a Inglaterra de... donde sea que haya estado. No es emocionante, papá? Y por qué no me dijiste que solían ser amigos? Me pidió que me quedara después de clases. Me preguntó cómo estabas y me pidió que te saludara de su parte. James, Jaine y Olivia estaban celosos porque quería hablar conmigo. Wow, papá. No puedo creer que sea nuestro profesor. Aparte de eso, todo es tan aburrido como siempre. Te amo, papá. Escríbeme pronto. Abrazos y besos.

Jordan

Draco releyó la carta. Harry Potter. En Hogwarts. Enseñando. 'Después de todos estos años decide regresar? Por qué ahora? Por qué se fue en primer lugar?' Draco pensó. Se le cayó su taza de café y escuchó cómo se rompió. Afortunadamente era su día libre.

Reparó la taza y limpió el desastre con un simple encantamiento, después se vistió. Eligió una camisa negra y un par de jeans y se apareció en Hogsmeade.

Antes de ir a Hogwarts, compró unas flores y un regalo para Jordan. Después, se dirigió al castillo.

Para la hora que Draco alcanzó la puerta principal, sonó la campana. Como no sabía cuál era el horario de Jordan, y no tenía idea do dónde podía estar Harry, Draco fue a buscar a Dumbledore. Al llegar a la gárgola que escondía la entrada a su oficina, comenzó a decir los nombres de todos los dulces que conocía. Este año, era de nuevo 'caramelo de limón'. Incluso antes de golpear la puerta, escuchó a Dumbledore invitándolo a entrar.

"Ah, Sr. Malfoy. A qué se debe esta inesperada visita?" preguntó Dumbledore.

"Mi hija me escribió una carta. Harry regresó?", preguntó Draco.

"Oh, sí. Olvidé enviarle una carta informándole de eso. Sí, el Sr. Potter regresó a Hogwarts a enseñar. En este momento, está en una clase. Pero usted es más que bienvenido a unírsenos para comer. Estoy seguro que los estudiantes no tendrán ningún problema con eso. Y luego podría ponerse al corriente con Harry. Tiene un período libre después del almuerzo," respondió Dumbledore.

Draco asintió, y esperó a que la campana sonara nuevamente.

Cuando Draco Malfoy entró al Gran Comedor, muchos estudiantes se giraron para observarlo. Incluso a los 34 años era /muy/ apuesto. Se dirigió a la mesa de Gryffindor y se sentó junto a Jordan.

"Hola, papi!" dijo Jordan, abrazándolo.

"Hola, cariño. Sentí pena por ti, y decidí venir a visitarte. Oh, y te traje esto," dijo Draco, entregándole la bolsa que traía.

"Vaya! Lilas! Gracias, papá, me encantan!" dijo Jordan, oliendo las flores.

"No es problema. Ahora, come algo o si no lo lamentarás cuando estés en tu próxima clase."

Durante todo el almuerzo, Draco sintió que unos ojos lo observaban. No levantó la vista, pues sabía a quién le pertenecían esos ojos. Cuando él, Jordan y sus amigos terminaron su comida hablaron sobre el colegio y Quidditch hasta que sonó la campana. Lentamente, Jordan, Olivia, James y Jaine se fueron a sus respectivas clases. Jordan, antes de irse, abrazó a su papá, y luego siguió a sus amigos.

Ahora Draco estaba libre para hablar con Harry, quien le estaba esperando a la salida del Gran Comedor, igual que cuando eran novios.

Cuando Harry comenzó a caminar, Draco lo siguió, sin hablar. Tan pronto llegaron ala sala de clases, que estaba vacía, Harry cerró la puerta y empujó a Draco contra la pared y comenzó a besarlo apasionadamente. Draco respondió besándolo también, enredando sus dedos en el cabello de Harry, que seguía siendo tan desordenado como siempre. Harry terminó el beso y lo miró por un momento.

"Hola," Harry dijo, con la respiración entrecortada. "Te extrañé."