Papá

Jordan se dirigía a su próxima clase conversando alegremente con Jaine, Olivia y James.

En el camino, una niña le golpeó suavemente el hombro.

"Quién era ese rubio que estaba hablando contigo?"

"Mi papá. Por qué?" preguntó Jordan.

"Tu papá? Por Dios que es sexy!" le dijo.

"Tiene 33 años," dijo Jordan.

"33? Vaya, parece más como de 26! No importa, es muy sexy! Envidio a tu madre," dijo con entusiasmo.

"Es gay," dijo Jordan defensivamente.

"Entonces cómo explicas el hecho que estás aquí?" le preguntó, sin creer lo que Jordan le estaba diciendo.

"Supongo que tus padres son muggles? Con razón. No sabes nada sobre el mundo mágico. Aquí los hombres pueden tener hijos," dijo Jaine, presintiendo que si amiga se estaba enojando. Y enojar a un Malfoy no era una buena idea.

La niña palideció. "Ustedes los sangre pura siempre creen que son mejores que los demás," se quejó.

"No me refería a eso, y lo sabes. Simplemente estaba diciendo que hay cosas de las que no estás enterada cuando no creces en el mundo mágico, estúpida," dijo Jaine. "Si yo pensara que soy superior a los demás, #1 estaría en Slytherin, y #2 no sería amiga de James."

Se alejaron de ella y decidieron que no tenían ganas de ir a clases. En vez de eso, decidieron regresar a la sala común.

"Estoy feliz de que mi papá me viniera a ver. Eso sólo demuestra lo mucho que me quiere," dijo Jordan, sentándose en un sillón.

"Sí. Yo quisiera que mi padre me visitara," dijo Olivia, un poco desanimada.

"Sé cómo te sientes, Livy. Pero míralo de esta forma. Mis dos padre son muggles y estaban sorprendidos cuando llegó mi carta. Por mucho que me agradaría que me visitaran, yo creo que están demasiado asustados para hacerlo," dijo James.

"Lo lamento por ti. En verdad lo hago. Supongo que soy la más afortunada. Puedo ver a mi papá siempre que quiero. Él trabaja en Hogsmeade así que le es fácil escaparse un rato," dijo Jaine, orgullosa.

"Bueno, por otro lado, al menos ustedes tres tienen dos padres que los cuiden," Jordan dijo con una leve sonrisa. "Quisiera que mi papá me dijera más sobre mi otro padre. Mierda! Se me quedó mi pluma en la sala del Profesor Potter. Regreso enseguida," dijo mientras buscaba en su mochila al no encontrar nada con qué escribir una excusa falsa por no haber ido a clases.