Hola otra vez!! Soy yo, la chinchosa de AomeRL intentando hacer un fanic yaoi de Youko y Hiei. Con este ya son 4 los que estoy publicando (por ahora).

Solo quiero decirles que este episodio me quedo de pelos (por lo menos este) y para que me haya gustado esta bien, porque soy muy exigente con mis ideas :P

Título: "Pidiendo imposibles"

Importante: Este fic es un UNIVERSO ALTERNO, quiere decir que con los mismos personjes, pero no la misma trama de la historia, así que por favor, no me digan que no les avisé.

Dedicatoria: Se lo dedico a...

Tipo: Yaoi (YxH), lo demás no estoy segura... Tal vez Lemon.

Capítulo: 2

Tema: Youko es un ladrón del Makai, que por un error que cometió en uno de sus robos, es llevado a un castillo. En el cual conoce a un demonio de fuego llamado Hiei. Crece una cierta atracción entre ellos ¿Qué ocurrirá?

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Youko Kurama´s Pov

- Sino esta en su habitación, se encuentra practicando su estilo de lucha. Es más ni siquiera necesitó ningún instructor o algo parecido. Es bastante hábil, pero definitivamente desprovisto de tacto con los demás.

Aquel demonio llamado Rei, simplemente me sonrió... ¿Acaso quería que lo felicitará por tener un hijo antisocial?

Él dejo de sonreirme y simplemente siguió mirándome interrogativamente como si se preguntase algo a si mismo... No estaba seguro de que podría ser.

- Mira, ya sé donde podrás dormir - dijo después de 10 segundos de meditación - Ven, ya puedes pararte.

Me pare silenciosamente, no quería meterme en problemas mientras todavía estuviera aquí. Debería parecer del todo educado, para que comenzaran a confiar en mí y al fin podría escaparme... No sería tan difícil... ya lo había hecho antes.

- Ven, sígueme - me dijo más seriamente mientras salia de la habitación por la puerta.

Lo seguí lo más tranquilamente posible, afuera del cuarto (el cual era lujoso y parecía el de un rey), los pasillos eran toscos, como de piedra, eran bastante oscuros, lo que les daban una impresión bastante misteriosa y triste.

Habían varias puertas, la mayoría era de madera, pero bastante elegantes. Algunas tenían inscripciones, que las identificaban de las demás.

Él me guió por todo el pasadillo hasta que paro frente a una puerta algo oscura, de madera y despintada, la cual se encontraba no muy lejos de una puerta color dorado despintado, como si alguien la hubiera rasguñado a propósito. La puerta que esta frente a mí debe ser mi habitación de seguro, por lo que él saco una llave (de... quien sabe donde) y abrió la oxidada cerradura.

- Entra, este es tu cuarto - hicé lo que me dijo y despué él cerró la puerta detrá mío.

La habitación no era lo que me había esperado. Esperaba una habitación sucia, vieja, de mal olor y sin cama. Sin embargo la habitación que yo tenía ahora era bastante agradable, tenía una cama, tampoco era lujosa, pero se sentía muy a gusto aquí. Además los rayos del sol fluían por una no muy pequeña ventana.

Me trataban más como a un visitante que como a un ladrón.

Al principio vino a mi mente que podrían aprovecharse de mí en mi condición, pero Rei me había dicho que me necesitaban para algo, de seguro esos demonios querían que robará algo, tal vez uno de los tesoros del Reikai.

Me eché sobre la cama, realmente estaba cansado, me sentía muy exhausto, además que mis poderes no regresaban... Aún estaban atrapados en algún lugar. No me preocupe por eso por ahora lo único que tenía era sueño.

Mis parpádos no aguantaron ni 1 minuto, mientras estaba echado en la cama, tenía mucho sueño y además...

Me desperté... Era de día... o es que acaso yo...

Me sobresalté, había dormido un día entero... No pensé estar tan cansado, pero creo que así fue. ¡Rayos! la paliza que me dieron esos sujetos si que me agoto.

Me levanté y examine mis poderes... aún no habían regresado. No entiendo ni siquiera porque lo hice, sabía que esos seres no querían que recuperará mis poderes, no todavía.

Miré por la ventana, desde aquí se podía ver afuera. Era un día realmente hermoso. Afuera se podía ver una hermosa vista hacia la aldea, pero como lo dije antes no creo que dure mucho.

Justo cuando estaba mirando por la ventana alguien llamó a la puerta.

Me dirigí hacia ella, preguntándome si estaba cerrada con llave o no. La abrí lentamente y pude ver a cuatro demonios, los cuales se me quedaron mirando cuando abrí la puerta.

- ¿Los puedo ayudar en algo? - les pregunte, intentando parecer que no me daba cuenta el porque me miraban de esa forma.

Era más que obvio. Esta no era la primera vez que alguien me miraba así. Después de todo soy Youko Kurama una de las criaturas más hermosas y peligrosas del Makai. Ese era mi destino entonces, ser admirado y odiado por muchas criaturas sean demonios o no.

- Ehhh... Sí - dijo uno de ellos - El señor Rei quiere verlo de inmediato. Por favor sígame

- Está bien - le dije y lo seguí. Los demás demonios, sin embargo se quedaron y se pusieron a murmurar una vez me hube alejado, aunque aún los podía oir.

Tal vez la razón por la que habían venido todos juntos era para asegurar si el rumor era verdad o no. Si en verdad su Señor Rei tenía ahora como sirviente al legendario ladrón del Makai.

No dijé nada mientras duro el recorrido al cuarto del señor Rei, ni tampoco ese demonio. Sin embargo, sentí como a veces me miraba de reojo mientras pasábamos por una parte del castillo llena de luz y yo hacía como si mirará la luz que fluía.

Una vez hubimos llegado al cuarto de Rei, el demonio se hizó a un lado dejándome pasar. No le pregunté su nombre... no era necesario. He conocido a muchos demonios antes que han sido mis amantes, pero nunca me han importado a menos que me sirvan de algo.

Entré al cuarto (el cual era bastante grande) y pude ver a Rei, si era él y se veía bastante serio y molesto, no tenía la misma sonrisa de en antes, se veía más como si acabará de discutir con alguien.

Entonces me di cuenta, a su lado se encontraba alguien.

Era una especie de youkai (lo supe por su reiki). En realidad era un muchacho... un hermoso muchacho diría yo. Era muy parecido a Rei, pero era más pequeño y más... excitante.

Aquel joven se encontraba recostado sobre la pared, al lado de Rei, revestido todo de negro, solo su bufanda, su cinturón y la cinta que tenía en la frente eran blancos, además de un mechón que tenía sobre el cabello, tenía los brazos cruzados y los ojos cerrados como si estuviera durmiendo, pero yo sabía que estaba despierto.

De pronto creo que sintió mi presencia en el lugar, porque repentinamente abrió los ojos, descubriendo un dulce rojizo en ellos, solo comparados con los de Rei. No puedo equivocarme, esos fueron los ojos que vi cuando llegué al castillo.

Él simplemente me miró, al principio creí ver una pequeña sorpresa en sus rostro, pero fue rápido, porque en seguida se pusó serio nuevamente y me miró como si fuera un ser inferior, como si fuera algo peor que un bicho.

Y yo simplemente no dejaba de mirarlo, la forma en como se paraba y como me miraba, no sé pués... nunca antes nadie me había mirado así por primera vez. Casi siempre los seres, la primera vez que me veían, me lanzaban una mirada algo nerviosa, asustada o incluso lujuriosa, todos sin excepción. Incluso el mismo Rei.

Ese muchacho, por una razón u otra se veía bastante provocativo y deseable. Por lo menos eso pensaba yo... Ese cuerpo suyo tan pequeño, pero a la vez tan bien formado, me hizó tener los más lujuriosos pensamientos, alguna vez permitidos a alguien. Inconscientemente, me relamí los labios

- Veo que recibiste mi llamada rapidamente - una voz me sacó de mi ensimamiento de como sería el cuerpo de ese muchacho en la cama. (AomeRL: No puedo creerme escribiendo esto)

- Sí - fue lo único que pude contestar cortadamente y volviendo a mirar a Rei. - ¿Para qué querías verme?

- Bien... Para empezar, quiero presentarte a mi hijo... Hiei - dijo él señalándome con su mano a aquel precioso Youkai que se encontraba recostado a su lado.

Sí, más o menos ya estaba empezando a sospechar que era su hijo por el gran parecido que tenían.

Pero Hiei simplemente siguió mirándome como si fuera algo que le repugnará o deseará exterminar por ser tan molesto.

- Hiei ¿Acaso no puedes saludar? - le reprendió su padre.

Hiei no dijó nada, simplemente se paro más seriamente (porque estaba recostado) y exclamó mientras me miraba con aquella expresión bastante fría.

- ¿Él es Youko Kurama? - lo dijo en un tono bastante jactancioso - No puede ser él el legendario ladrón del Makai... Que estado más deplorable.

- ¡Hiei! - lo volvió a llamar su padre.

- ¿Qué? Solo digo la verdad - dijo mirando a su padre, sonriendo algo maliciosamente.

Pero lo que dijo Hiei simplemente me hizó sentir mal. Era verdad... ¿Cómo fue que llegué a esta situación siendo quien soy? Se supone que siempre tengo un az bajo la manga ¿Por qué no ahora?

- Hiei ¿cuántas veces te he dicho que te comportes con los invitados? - ¿escuche bien? ¿Dijo invitados?

- Pero él no es uno - respondió Hiei señalándome - Por lo que me has dicho, solo lo retienes por tu conveniencia... Y ahora me vienes con que quieres hacerlo mi compañero de lucha... ¡Que tonteria es esa! (AomeRL: Era necesario que hiciera eso).

- ¡Hiei!

- No tengo porque quedarme a escuchar tus reclamos ¿entendistes? - dijo él, mientras se dirigía a la puerta y salía tirándola muy fuertemente.

Solo hasta entonces entendí la razón por la que Rei había estado tan enojado cuando llegué.

- ¡Hiei! ¡Vuelve aquí en este momento! - Hiei simplemente ignoró a su padre y le hizó una insinuación bastante grosera. (AomeRL: Eso era más

opinión propia, porque Youko Kurama ya estaba acostumbrado a eso).

Una vez Hiei se hubo ido, ambos nos quedamos mirando la puerta que se acababa de cerrar bruscamente, ninguno de los dos dijimos nada durante aproximadamente 10 segundos. Y yo ya podía ir olvidándome de la excitante noche que tenía pensado pasar con aquel youkai. (AomeRL: Ni lo conoce y ya esta pensando en eso... Típíco de Youko.)

- Quiero disculparme por la conducta de mi hijo - empezó Rei como para romper el silencio - Realmente no es muy...

-... Tratable - le termine la frase y dirigí mi mirada hacia él. Él asintió.

- Mira... Con respecto a lo que dijo... Es verdad. Yo tenía pensado que fuerás su compañero de lucha. No solo para que lo ayudarás a entrenar, sino también para que le enseñarás a tener más libertad con los demás. Como tú has sido un ladrón y has tenido muchas relaciones con varios demonios... - Y vaya que sí - Y también que lo acompañarás cuando a veces se mete en problemas.

- Pero no creo que pueda servirle mucho de ayuda en el entrenamiento. Aún no he recuperado mis poderes - Esa era una insinuación bastante directa.

- Sí... Respecto a tus poderes, estaba pensando en devolvertelos después, por ahora no... - dijo él - Quiero que te acostumbres a vivir en este castillo ¿entendistes? Desde ahora este castillo será tu hogar.

Bueno, ahora era oficial. Tenía que quedarme en este castillo durante un largo tiempo y ser el compañero de un youkai de fuego llamado Hiei el cual era malhomurado y poco tratable con los demás, además de que era el ser que más me provocaba excitación por ahora.

- Escucha - volvió a hablar - cualquier noticia a cerca de que quieras escapar llegará a mi y el trato que te estamos dando será sustituido por otro. Además este castillo tiene un fuerte campo de energía que impide la salida de demonios sin previa autorización. - No me esperaba menos.

Hiei´s Pov

Salí furiosamente del cuarto ¿Quién se creía que era Rei para decirme que hacer? Bueno, es mi padre para empezar. Pero de todas formas, no tengo porque hacerle caso.

¿Cómo espera que haga equipo con ese zorro debilucho que había perdido todos sus poderes por una estúpidez? Realmente me subestima, no necesito a nadie, conmigo basta para volverme más fuerte.

Y ese estúpido zorro (AomeRL:Sí, empezamos con eso) ¿Por qué me estaba mirando así... tan directamente? Debería haberle castigado por estar mirándome de ese modo. Pero no pude hacerlo, porque de lo contrario Rei me habría expuesto a otra de sus estúpidas ordénes. Estúpido Rei... siempre me tiene que dar ordénes.

¿Desde cuándo se da eso? Creo que desde siempre. Desde que era un bebé para ser exactos. Fue cuando fuí separado de mi madre. Me dijeron que me habían separado de ella para salvarme... pero no lo creo. Ese Rei es un egoista... de seguro lo hizó para tener a alguien a quien dejar su castillo y fortuna.

A penas puedo recordar a mi madre... Recuerdo a una hermosa mujer cargándome en sus brazos, meciéndome, mientras me sonreía. Pero se encontraba triste, porque una lágrima escapó de sus ojos. Tal vez para ese instante ella ya sabía que Rei quería separarla de mí.

Él nos separo a mí y a mi madre, pero juró que algún día he de encontrarla... tan pronto y como pueda escapar de este estúpido castillo. Eso es seguro.

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O.O Un poco cursi tal vez. Y la última parte era para aclarar ciertas cosas.

Parece que Youko esta empezando a tomar interés en Hiei (jajaja si claro).

Y Hiei parece el típico niño rebelde, a quien no le importa lo que sus padres le digan (y eso que planeo otras cosas para el futuro).

¿Les gusta este episodio? Ojála que sí, a mi me gusto tipearlo.

A contestar reviews:

Jen-Sweet: Hola!! ¿Cómo te ha ido? (Espero que bien). Bueno, tú sabes que siempre continuó todas mis historias, así que no hay porque preocuparse. (Eso creo). Y también... Eres la primera persona que me envio review. Así que este fic va dedicado a ti...Por segunda vez consecutiva ("Aclarando sentimientos" también va para ti)... Besos cuidate.

Nim: Hola. Espero que te guste este episodio... Aunque esta un poco muy mmm... llena de malos pensamientos (también siendo Youko). Y en cuanto a la relación padre/hijo... Uuhhhh... Bueno ya leiste este episodio, así que imagínate nomás (Se ve que lo quiere mucho o.o). Gracias por enviar reviews... Sayonara.

Florchi: tu amiga del alma: Holas! Bueno este en realidad es un fic YoukoKurama x Hiei. Espero que este episodio haya sido de tu agrado. Gracias, la verdad no estoy segura si haya sido un buen trabajo o no. Y ya tienes a Hiei en este episodio (se ve que quiere a su papi XD). Besos... Bye

VALSED: Sí, a mi tambien me gusta como esta quedando, gracias por escribir. Adios