Hola este fic es escrito por mi y una amiga mía llamada =SaRiA=, esta idea fue suya pero los dos escribiremos esto, si les gusta no nos pidan que actualicemos pronto porque la inspiración esta cara hoy en día XD, espero que les guste adiós.

Capitulo 1

La llegada del intruso

El viento mecía las hojas de los grandes árboles mientras llevaba con sigo una suave y dulce melodía, en eso en unas ruinas sentada en un tronco cortado una niña de cabello verde tocaba un delicadeza un ocarina, mientras que una pequeña hadita estaba dando vueltas alrededor de ella, como si le gustara la melodía

Al finalizar la bella música la joven alejo de sus labios el instrumento de viento, mirando el cielo despejado, en eso los gritos de otros niños llego a sus oídos, asustada corrió de su lugar, como si conociera cada rincón, cada centímetro de ese bosque.

Llego a su aldea, puros niños de vestimenta verde se amontonaban mientras que uno, de cara estúpida les decía que se alejara y amenazaba con una pequeña espada a una mujer mal herida que cargaba un pequeño bebe dormido.

Las heridas de su cuerpo, profundas dejaban salir con libertad su sangre, aun con el dolor y el gran ardor que recorría su cuerpo a cada pequeño movimiento que hiciera, trataba de hablar

-Por favor.... llévame con el árbol Deku...

Déjala pasar Mido por favor-- suplico uno de los Kokiris al ver a la mujer en ese estado, pero el no bajaba la filosa espada --Grrr no, ¡¡¡no la dejara pasar!!!--grito con furia Mido. Muchos Kokiris trataban de convencerlo mientras la mujer se debilitaba con rapidez

--¡¿Mido pero qué haces?!-- pregunto con algo de furia Saria al ver eso empujando a sus compañeros acercándose a la mujer que como pudo logro ayudarla a levantarse y llevándola --Pero Saria....-- trato de hablar Mido solo para recibir una gélida mirada de la joven, algo que nunca se veía.

Saria y la mujer se alejaron de los Kokiris y se dirigieron hacia donde esta el gran árbol Deku. Aun con la furia corriendo en su cuerpo Saria mira con atención a la mujer que ayudaba, se veía muy herida y cansada --Siento lo que paso pero... Mido es así algunas veces se cree muy superior-- se disculpo Saria por la actitud de su amigo.

--Pero no todos somos como el-- la mujer sonrió con fuerza pero era un sonrisa sincera --No te preocupes, conocí algunas personas así--

--¿Por qué desea ver al gran árbol Deku?-- pregunto Saria mientras que su Hada rodeaba a la mujer viendo su estado --necesito verlo, quiero pedirle que cuide lo mas preciado para mi-- respondió con dificultad.

--Mandy no molestes ¬¬X-- le dijo Saria a su hada mientras esta, al ver su cara, se fue a su lado --Perdón -- dijo Mandy muy asustada.

--Señora... emmmm... no se si podría saber... ¿Qué es lo mas preciado para usted?- preguntó Saria algo nerviosa.

--Mi pequeño -...-- sonrió con dulzura al pequeño que llevaba entre sus brazos --"¿que es un 'pequeño'?"-- pensó Saria, asomándose hacia donde estaba 'el pequeño'.

Era un bebé, que dormía en los brazos de su madre. Estaba envuelto en una sabana, solo se podía ver sus pequeñas manitas y su rostro, algunos mechones rubios caían a su frente.

--¡¡AYYY QUE LINDO!! -- gritó Saria, ehm... despertando al bebe y asustando a su mama --ehh jejeje lo siento-- se disculpo Saria con un gran sonrojó de vergüenza.

El pequeño miraba el hada con interés, mandy al sentir la mirada azul del infante se oculto detrás de su amiga.

--eeehhh Sariaaa... oo ¿porque me mira así?— dijo Mandy nerviosa mientras se asomaba para ver al pequeño. Éste todavía miraba al hada, pero ahora de forma juguetona, estirando sus pequeños bracitos con la intención de tocarla – o0 Sariaaa—dijo Mandy aún mas nerviosa.

--Jajaja - vamos Mandy, no te va a hacer daño—dijo Saria con una sonrisa -- ¬¬ ¿e-estás segura? – dijo Mandy con desconfianza – ¡¡Claro!! nn – dijo Saria con una risita.

La mujer sonrió, pero un gemido de dolor salió de sus labios, la Kokiri al ver esto se asusto y la ayudo a caminar acercándola más al gran árbol Deku.