Boku no hero No me pertenece
Explosiones
Capítulo 1: El día que te volví a encontrar
Si Bakugou Katsuki tuviera que elegir un día donde todo se fue a la mierda, probablemente sería el día en que su mejor amigo Midoriya Izuku murió. Habían tenido 25 años en ese entonces, algunos años luchando a su lado y dejando atrás ese horrible pasado de su infancia, del cual fue culpable en su mayor parte (por no decir en toda). Katsuki paso varias etapas antes de llamar a Izuku su mejor amigo, sobre todo la principal de no sentirse merecedor de nada que este pudiera darle, cuando lo trato peor que la basura por tantos años. Casi como un karma del destino, Katsuki descubre que se enamoró del chico a sus 17 años y probablemente lo ha estado por mucho tiempo más. Sus sentimientos fueron tan confusos por mucho tiempo que es difícil precisar que tanto fue odio o que tanto fue su mente intentando convencerlo de que no era amor.
Al final Katsuki hizo un mal uso extremo de la idea de "jalar la coleta de la niña que te gusta" como una difícil realización de su sexualidad. Ambos unidos con su mal temperamento, además de no querer sentirse inferior, llevaron a toda la mierda de su infancia. Pero luego del tiempo, de calmarse un poco, no puede encontrar otra explicación a su siempre necesidad de ser mejor que Izuku, de siempre estar al pendiente de este y su forma de reaccionar cuando este estaba en peligro. Porque de algo que todos eran conscientes es que el chico solía sacar tanto lo mejor como peor de él, desde siempre.
En lugar de dejarlo atrás cuando eran niños, siguió haciendo una vida miserable de este, como no hizo con nadie más.
Porque no importa cuanto lo alejara y golpeara, no se sentía tranquilo hasta que el idiota estuviera detrás de este admirándolo.
Así que asumiendo que ha obtenido suficiente de este al ser amigos, cuando claramente no se lo merece, no es codicioso con el destino y no pide más. Se conforma con trabajar juntos en la misma agencia, con el fantasear con crear una agencia juntos como cuando eran niños, con ayudarle, con patrullar juntos y salir en ocasiones con el resto de idiotas que tienen por amigos. Katsuki es más que feliz de ver al idiota sonreír, más que feliz de verlo comer como una ardilla o como este siempre se voltea para sonreírle, como si Katsuki fuera el mejor amigo del mundo.
Es difícil controlarse al principio, pero con el tiempo lo hace todo un arte.
Reprimirse, no demostrar que es un estúpido enamorado, tener algo de orgullo.
Aunque a veces es demasiado obvio, por suerte Izuku no parece ser consciente de sus tropiezos o las veces que tal vez reacciona de más con este. A veces cual adolecente enamorada le prepara comida, ya que el idiota solo come comida rápida; en otras ocasiones se preocupa cuando el idiota trasnocha viendo videos de súper héroes, como si el idiota no fuera uno. También disfruta cuando debe arrastrarlo a descansar en medio de un entrenamiento donde suele sobre esforzarse o como era uno de sus contactos de emergencia, lo cual disfruta más de lo que aparenta.
Kirishima, quien parece ser consciente de sus sentimientos, lo alienta varias veces a confesarse y lo ignora con una explosión en su rostro. Algunos otros como Kaminari o Ashido, quienes nunca han escuchado nada de él, parecen sospechar algo y por eso lo molestan, hasta que los explota con un poco menos de impacto que Kirishima (ya que no tienen una piel de roca), pero cuando personas como Jiro intentan alentarlo, supone que toda la banda de amigos que tienen son una molestia.
Los ignora.
Les grita.
Los amenaza y estos parece con el tiempo aceptarlo.
Katsuki solo será el mejor amigo de Izuku, es todo lo que necesita. Aunque no puede negar que a veces le da gracias a cualquier deidad existente, porque el chico nunca menciona nada sobre tener pareja, joder, Katsuki ni siquiera sabe si es gay o no, pero nunca tocan esos temas (solamente ese extraño romance fugaz con Uraraka en la academia, pero que no fue más que algunas citas). Izuku solo parece concentrado en ser un héroe, lo cual está bien para Katsuki, que tiene el mismo sueño. Ambos ignoran su creciente aumento de fans o rumores en los medios, sobre dos de los solteros más codiciados, mientras siguen siendo mejores amigos.
Entonces ese villano aparece, un bastardo de tanda, que no lo es al final.
Katsuki se ha sacrificado muchas veces por Izuku, pero cuando este lo hace por él, Katsuki en realidad se queda en blanco cuando este cae frente a él. La batalla es olvidada luego de que la ganan, porque en realidad ganar no importa cuando ve a Izuku en el suelo sobre un charco de sangre. Hay lágrimas, hay gritos y aunque llegan a tiempo donde Eri, esta no puede hacer nada, aunque lo intenta.
Recuerda como el chico de cabello verde le traspasa el poder a Eri del One For All, ya que su propia particularidad de retroceso podría ayudarle a mantener la particularidad tan poderosa como esta. Katsuki recuerda a veces a Izuku comentar sobre el próximo sucesor, habiendo mencionado a Eri en ocasiones, pero ambos cambiando el tema sin haber querido entrar en detalles. Se arrepiente un poco de eso, pero el tema de la muerte e Izuku juntos, fue algo que siempre odio.
Katsuki lo ve con incredulidad, cuando Izuku le dice a Eri que Katsuki le ayudara, que está en buenas manos, antes de verlo a él.
Sabe que sus amigos están fuera del lugar esperando, algunos suficientemente heridos para estar en cuidados intensivos y nadie sabiendo la gravedad de la situación. Katsuki debe llamarlos, Katsuki debe ser un buen amigo y traerlos todos aquí. Pero realmente cuando se separa de Eri, Katsuki solo se queda inmóvil y sentado a su lado, queriendo que todo fuera una pesadilla de la cual despertaría en cualquier momento.
No lo es.
Levanta su propia mano derecha para sujetar la de Izuku con temor, la izquierda totalmente destrozada y que necesita atención medica pronto; no puede dejarlo, no puede irse.
Quiere llorar.
—Supongo que ahora ceras el número 1—escucha susurrar a Izuku, quien está demasiado destrozado, sin un brazo y pierna totalmente mutilados, lleno de sangre y con el rostro pálido al mismo tiempo.
Uno de sus ojos ya no está ahí funcional, pero el otro sigue brillando de una forma tonta e inocente, que le hace querer maldecir todo a su alrededor.
Porque esto no debe pasar.
Si alguien debe estar ahí, era él.
El mundo aun ocupa a Midoriya Izuku.
Katsuki ocupa a Midoriya Izuku.
—No quiero este puesto así maldita sea—dice con rabia, recordando cómo durante el último año había estado compitiendo con el bastardo y quedando en segundo lugar constantemente, a veces en tercero perdiendo contra Todoroki.
No quiere esto, no quiere esto maldita sea.
Quiere matar a alguien, al mismo tiempo que quiere llorar.
El rostro de Izuku parece tranquilo, casi en paz, lo cual es jodidamente más frustrante ahora. Sujeta la mano del chico entre las suyas (bueno entre su única mano funcional y no la herida), sintiendo que el tiempo se acaba, que tiene mucho que decir, al mismo tiempo que solo quiere una puta particularidad que detenga toda esta maldita mierda para no avanzar de aquí.
—Te quiero—es lo que dice Izuku, que provoca que levanté el rostro incrédulo, pero el rostro del chico no ha cambiado, casi en estado de paz y tranquilidad que odia ver—siempre tuve tanto miedo de decirlo, pero ahora, solamente…solo quería decirlo, una vez al menos—añade este con voz cada vez más baja y sus ojos casi cerrados.
No.
Mierda no.
Se levanta de tal forma tan brusca, que la silla cae detrás de él, pero poco menos podría importarle la puta silla de mierda.
No.
Es demasiado pronto.
No puede.
—No puedes morirte así Izuku, mierda, no puedes decir algo así y morir—dice sin poder contener esta vez las lágrimas que caen en sus mejillas, sin comprender del todo sus palabras, sin querer comprenderlas—tienes que vivir maldita sea y y-...no sé qué putas mierdas quieres en tu vida, pero solo tienes que vivir y te daré cualquier maldita cosa de este puto mundo, yo soy totalmente tuyo si quieres esta mierda, solo no me dejes ahora por favor—gruñe sujetando tan fuerte su mano, en una esperanza que el dolor no lo deje ir.
Este apenas se mueve, pero sus ojos parecen dejar de brillar cada vez más rápido.
Eri sale alertada entre lágrimas, llamando por un doctor por algo que ha visto en sus signos vitales.
—¿Cualquier cosa? —
—Si maldito nerd, cualquier cosa—
—Me gustaría, ir a la playa contigo, con la clase…una última vez todos juntos—
Katsuki asiente enérgicamente, alarmado cuando el pecho del chico comienza a ralentizarse. Su desesperación comienza a llegar al punto que su mano herida, comienza a generar pequeñas explosiones inofensivas que no intenta controlar.
Su respiración comienza a ser jadeante.
—Bien, si te recuperas nos vamos mañana mismo. Derrotamos al villano, todo está bien ahora, estaremos bien—dice su voz, sus ojos parecen casi en pánico, pero su corazón comienza a entender que esto está sucediendo y no puede hacer nada para ganar—yo también te quiero Izuku—dice con voz ahogada, muy diferente a lo que alguna vez pudo imaginar para una confesión que no pensaba hacer.
Funciona, el ojo de Izuku brilla un poco en alegría como incredulidad, antes de darle una mirada de disculpa entre su felicidad momentánea.
Y luego.
Nada.
Su ojo sigue abierto, su sonrisa sigue en su rostro, pero su pecho deja de moverse al tiempo que la maquina demuestra que no hay nada ahí. Solo un pitido lejano. Llama al chico varias veces, lo mueve para que reaccione, pero no importa lo que haga o cuanto grite, este no se mueve y la vida lo abandona. No reconoce a Kirishima que lo arrastra fuera de ahí, el único capaz de contener sus explosiones y furia.
Es sujetado contra este, mientras llora y maldice por igual, hasta que alguien lo noquea.
Todo se vuelve negro.
.
.
Katsuki recuerda muchas cosas a lo largo de los años, una de las cosas más tristes que recuerda es el funeral de Izuku, recuerda los colores negros y los llantos de sus amigos. Realmente no cree que el chico se murió hasta casi un mes después, el dolor insoportable lo sigue los años siguientes, el vacío en su pecho realmente nunca se llena y el dolor es su compañero de vida. Sigue adelante por supuesto, no es un perdedor, no puede hacerlo, no puede detenerse, porque el idiota de Izuku no quiere eso; pero a veces desearía que todo se detuviera. El recuerdo de su amigo es quien lo impulsa todos los días cuando no quiere hacer nada, el recuerdo que es ahora el numero 1 porque su amigo murió, porque este le ha dejado su legado, lo impulsa adelante.
Entrenar a Eri ayuda bastante en realidad, ambos crean un vínculo extraño de mentor-alumno del cual no estaba preparado, pero es lo que ambos necesitan para afrontar la perdida. Un vínculo necesario y desesperado, tener alguien a tu lado, alguien que comparte tú mismo dolor.
Sus amigos también suelen ayudarle, a veces es doloroso, a veces es estúpidamente grosero y maldito, pero no se marchan. Ejiro principalmente, es quien más suele arrastrarlo a las reuniones de amigos, quien suele ir cuando está mal, quien lo saca de los bares cuando la vida parece demasiado complicada. Aun cuando este ahora es esposo de Mina, aun a sus 30 años, sigue sacando su culo de ser necesario.
A veces tiene citas, espontaneas y poco relevantes, generalmente para quitar la calentura de su cuerpo y tener sexo casual con algún desconocido. Hombres o mujeres, cualquiera en realidad estaría más que dispuesto a pasar un rato con Dynamight, así que lo hace en ocasiones para no preocupar a sus amigos más de la cuenta. Probablemente muera viejo y solo, pero no virgen, lo cual desde el punto de vista de Hanta y Denki, es un paso adelante. Ejiro quiere que tenga una vida, una pareja, un hogar, pero la única persona con la que quiso eso está muerta y Katsuki no tiene interés en nadie más.
Bromea que tiene a Eri, que, si bien es la pseudo hija de Aizawa, Katsuki la amerita como su hija también desde que la toma bajo su entrenamiento. Katsuki no sería un mal padre, algunos de sus amigos han tenido hijos y realmente es el tío genial que tiene el puesto número 1 de todos. Los mocosos de Todoroki lo quieren, también los hijos de Denki y de Iida lo quieren a su forma, por lo cual las reuniones navideñas en general terminan con Katsuki trayendo regalos para los mocosos antes de marcharse para trabajar.
Su vida no es del todo mala, pero es vacía en ocasiones.
No es All Might, no es el maldito número 1 que tiene todo sobre sus hombros, hay muy buenos héroes que lo respaldan en cualquier momento. La sociedad ha aprendido a que la estabilidad no depende de una persona, pero joder, Katsuki hace bien su trabajo y se ha ganado el respeto de todos, su presencia da seguridad a los civiles y todos buscan de su ayuda cuando las cosas son feas. Siempre salva a cualquier posible herido, derrota al chico malo, da seguridad y ayuda a entrenar a las siguientes generaciones. Tiene mucho tiempo libre con la baja tasa de criminalidad y la UA lo admite como profesor temporal para dar clases especificas al tercer año en ocasiones.
No la mierda que vieron en sus años escolares (bueno Aizawa-sensei les enseño bien, pero ese no es el caso), no, Katsuki se para frente a ese maldito grupo de adolescentes y les explica la realidad. Los lleva a campos de entrenamiento donde sus simulacros son casi de la vida real, les enseña sus casos más complicados de solucionar, los trata con juegos sucios recordándoles que ningún puto villano juega limpio y en más de una ocasión algún estudiante termina llorando. Pero quienes se quedan, quienes resisten a sus juegos mentales y son suficientemente inteligentes, reciben una pasantía para su agencia.
Una agencia que creo, con el estúpido nombre que había pensado tanto tiempo con Izuku, donde la mayoría de sus amigos están con él.
Es una agencia que solo tiene a los mejores.
Aunque una vez termina aceptando a una niña de corta estatura y cabellera castaña, que de alguna forma le recuerda a Izuku por como murmura, además es ingeniosa; también tiene grandes ojos verdes que le hacen sentir más tranquilo al verlos. Si bien no son pequeños que aceptaría, su particularidad que le hace tener una apariencia humana y con partes felinas, le hace pensar en Mirko y la entrena hasta convertirla en un héroe decente.
Katsuki no tiene una expectativa de su propia vida muy larga, pero va dar todo su maldito esfuerzo y hacerlo bien.
Una vez al mes visita a la tía Inko, la madre de Izuku a quien ha estado cuidando junto a sus padres desde lo sucedido. No solo él, Eri también suele visitarla, el matrimonio Iida (Tenya y Ochako junto sus mocosos), además de que el bastardo de Shoto también suele asegurarse que este bien y trabaja para la compañía de Momo. No se lo había prometido a Izuku, pero no pensaba dejarle sola. Esta quien sabe los sentimientos que tuvo por su hijo, siempre lo insta a buscar una pareja, a buscar su felicidad porque eso hubiera querido Izuku; pero Katsuki solo se encoge de hombros y sigue jugando el estúpido juego de mesa con ella, que Izuku jugaba todo el tiempo.
Inko siempre gana.
Estúpidos Midoriya y ser bueno para los juegos de Monopoly.
.
.
Katsuki había esperado que ese día seria tranquilo, lo cual no tiene nada de tranquilo cuando el puto edificio de 49 pisos comienza a caer sobre él. En general no fue su culpa y el estúpido villano que destruyo las vigas del edificio ya está derrotado, lo complicado en realidad es rescatar a todos los civiles y no dejar ninguna muerte de por medio. La ventaja es que ese día estaba trabajando con Shoto y Ochako, así que, con el hielo y la particularidad de hacer flotar las cosas, Katsuki pudo apresurarse junto otros héroes en sacar a la mayor cantidad de civiles. Todo iba bien, hasta que una madre con aspecto vagamente familiar llora por su hija y antes de saberlo, Katsuki ignora como otros gritan que el edificio no soportara más, solamente deja a sus piernas moviéndose.
Puede que tenga 30 años, pero piensa en Izuku, piensa en este diciendo que cuando lo intento salvar de aquel villano de lodo hace tantos años atrás, sus piernas se movieron sin pensarlo.
Katsuki recuerda la emoción del chico al decirlo un día entre patrullas, no le había prestado atención a eso hasta que este muere.
Entonces, se convierte en su karma.
En su lección de vida.
En moverse siempre que alguien ocupa ayuda, incluso antes que su cerebro procese que sucede.
No importa cuánto sus amigos lo amonesten por esa idea casi suicida, Katsuki no se quedará quieto si sabe que alguien está en peligro, porque el bastardo de Izuku lo haría.
Es difícil encontrar a la niña de 4 años, pero llega a tiempo para usar las explosiones (casi agotadas de su cuerpo) para empujarla fuera de la enorme viga que casi la atraviesa. Es irónico que sea así, había pensado que su muerte podría ser mucho más heroica o en medio de una lucha contra villanos de película; pero tampoco esta tan mal dar su vida para proteger a otro. El dolor en su costado es insoportable, pero la niña esta fuera de cualquier zona de impacto instantánea. Los gritos de las personas a lo lejos, le recuerdan que esta saldrá con vida, no importa que Katsuki quede atrás.
Salvo a alguien.
Es lo que importa.
Es lo que Izuku hubiera hecho.
Pero entonces la niña de cuatro años, morena y con el cabello oscuro, llora asustada al ver su herida. Katsuki intenta tranquilizarle, pero cuando los ojos chocolate de la pequeña se vuelven de un azul brillante, solo puede abrir los ojos levemente sorprendido y murmurar un: "mierda", antes que todo a su alrededor se vuelva brillante y el dolor desaparezca.
.
.
.
.
Cuando Katsuki vuelve a despertar, tiene una leve sensación de mareo que le recuerda a sus peores borracheras, pero en lugar de levantarse para vomitar, siente su cuerpo demasiado pesado y un mareo prominente en toda su cabeza. Tiene que sentarse en la cama con ambas manos en su rostro, maldiciendo la luz que se presenta por la ventana. Todo es ruidoso y confuso, le toma unos momentos de respiraciones, recordar vagamente que estaba sucediendo antes de caer inconsciente, pero el recuerdo de una viga empalándolo es suficiente para que todo lo demás caiga como pieza de rompecabezas.
Alarmado deja de lado el malestar de su cuerpo, para levantar su camiseta negra y sorprenderse de la piel liza de su vientre.
Totalmente liza.
Demasiado.
Su ceño se frunce sin encontrar la mayoría de sus cicatrices, por no decir todas. Eso está mal, procesa su cabeza aun mareada, viendo a su alrededor confundido, claramente sin estar en algún hospital o su departamento. Cuando intenta levantarse, nota también que las cosas se mueven incomodas a su alrededor, como si todo fuera confuso y claramente su cuerpo no se siente bien.
Está bien, parece que no está empalado y de alguna forma está vivo milagrosamente, pero no se siente…correcto.
¿Dónde rayos esta?
Se pregunta confundido, cuando todo a su alrededor es extrañamente familiar, pero diferente, como algo que no puede ubicar. Casi por inercia es que sus pies se mueven contra una de las puertas de esa habitación, aliviado de ver que en el interior hay un baño, alivio que dura solamente unos pocos segundos cuando su reflejo lo recibe en medio del lugar.
Han pasado años, incluso antes de la AU, que ha activado su particularidad de forma sorpresiva, pero supone que hoy podría ser una excepción cuando ve su rostro años más joven en el reflejo del baño. Sus palmas han generado algunas explosiones, probablemente de nervios y el mareo, antes de correr apresurado contra el espejo, casi deseando que esto sea un engaño.
Casi choca su rostro contra el espejo, tocando sus mejillas y cabello varias veces.
Está mal.
Está muy mal.
Es un maldito crio.
¿15…16 años?
No puede saberlo.
Eso fue hace casi la mitad de su vida. Ahora que tiene 30 años, su cabello suele ser más corto que esta gran cantidad de cabello alborotado, su rostro no tiene toda esta grasa de bebé inútil y por todos los cielos se ve como alguien respetable. Todas las burlas de sus amigos de cuando era joven, comparándolo con un Pomerania enojado, parecen saltarle en la cara, de una forma mucho más real que cuando ven fotografías de jóvenes.
El ceño fruncido es reflejado en el espejo, que parece un chiste en lugar de lo serio que es.
¿Una particularidad ilusoria?
—¡KATSUKI DEJA DE EXPLOTAR COSAS! —es el grito inconfundible de su madre, que lo hace fruncir más el ceño antes de colocar una mano contra su vientre.
La explosión es pequeña, pero deja una quemadura notable en su piel que provoca dolor incluso sobre la niebla de mareo a su alrededor. Se sorprende también de haber escuchado tan claro el grito de su madre, debido a su propia particularidad a través de los años había estado perdiendo levemente la audición debido a sus propias explosiones. La Tinnitus en realidad no tiene nada de extraño por su trabajo y particularidad, incluso con tratamiento médico solamente habían atrasado lo inevitable de quedarse parcial o totalmente sordo.
Con 30 años había perdido casi un 50% de audición en su oído derecho y un 25% en el izquierdo.
La voz de su madre fue extrañamente clara.
El dolor de su vientre también era doloroso y penetrante.
Extraño, ni siquiera las ilusiones de la perra de Camie eran tan buenas, lo cual es mucho decir de la maldita compañera de agencia de Inasa, que en más de una ocasión se burlaba de él descaradamente. Otros villanos o héroes con particularidades ilusorias con quienes se enfrentó, tampoco habían provocado que la ilusión doliera mucho con el dolor incorporado.
¿Una particularidad de sueño?
No.
La herida en su propio cuerpo lo hubiera levantado.
¿Coma?
Torció el rostro al recordar la cantidad de sus heridas, provocando que fuera posible que esto fuera una forma de revivir su vida en medio de algún coma. Aunque sus recuerdos parecen borrosos, también estaba la imagen de la niña que había terminado salvando antes que esto sucediera, puede que hubiera activado una particularidad y que lo enviara a… ¿un sueño de su adolescencia? No es lo más raro que se hubiera enfrentado, pero parece poco creíble y ocupa pruebas.
¿Un villano?
¿Realmente tiene todos sus recuerdos?
¿Fueron algunos modificados o perdidos?
Sale del baño, acostumbrándose un poco más a su alrededor, pero sintiendo el mareo de su cuerpo y el dolor de su cabeza aun permaneciendo ahí. La idea de sueño o ilusión se descarta por el dolor de su cuerpo, es pasable, pero en todas las veces que enfrento esta clase de particularidad se sintió diferente, más que todo como una nube y ensoñación, nada tan nítido y doloroso como lo que está viviendo.
¿Está en la casa de sus padres?
Raro.
Piensa cuando al salir del baño la habitación parece mucho más familiar al haber escuchado el grito de su madre, sus ojos se entrecierran peligrosamente por eso también. La mayoría de ilusiones o sueños provocados por particularidades, eran relacionadas a lo que el usuario podría modificar, por lo cual en general tendrían alguna falla o dos, pero todo parece tan cercano a lo que sus recuerdos pueden re crear, que da algo da miedo.
La sensación de inquietud y no saber qué pasa.
Camina descuidadamente al ver frente al ropero el uniforme de la UA en un sujetador, eso podría darle una idea del tiempo en que "supuestamente" se encuentra. No entiende porque alguien recrearía esto en sus recuerdos, pero tampoco es que tenga muchas oportunidades de preguntarle al causante de esto. Su teoría ganadora es que estaba en una especie de sueño o ilusión en algún tipo de hospital, si no es que estaba completamente muerto.
La puerta se abre violentamente, haciendo que entre en estado de alerta listo para la lucha, deteniéndose solo cuando la imagen de su madre aparece ahí. La mujer sigue luciendo tan joven como su maldita particularidad lo permite, aunque incluso más de la última vez que lo vio; esta luce tan inocente e ignorando a que estuvo a punto de lanzarse para atacar, si estuviera más familiarizado con este cuerpo diminuto, pero estaba con vida.
Baja la mano aun en estado de alerta y con el ceño fruncido, cuando su madre gira a verle molesta.
—Por todos los cielos mocoso, baja a comer de una maldita vez, sé que estas molesto por el ataque a la USJ de ayer, pero no tienes que explotar nada de nuevo. Joder, ya hiciste tu rabieta ayer, así que madura un poco—gruñe está en tono mordaz como recuerda hizo en esa época, lo cual lo desconcierta un poco más.
Han pasado años desde que su madre lo trato así.
Probablemente desde lo ocurrido en la época oscura contra la lucha de AFO, el salir de la academia lo hizo madurar mucho más de lo que debió hacer en condiciones normales y las interacciones continuas de Izuku en su vida, terminaron de pulir esa paciencia en él. Izuku era demasiado unido a su madre, entonces siempre terminaba arrastrándolo con él a las comidas con los Bakugou, que generalmente eran como campos minados.
Entonces este murió.
Entonces todo parecía dejar de tener sentido.
Entonces su madre prácticamente lo arrastro fuera de su miseria a terapias, que incluyeron muchas veces terapias con su madre (porque si eran sinceros su padre era un santo, algo débil y sumiso, pero soportaba mucha mierda de ellos), lo cual no fue sencillo. Fueron muchos gritos y blasfemias sin la intervención de Izuku, pero en algún punto dejo de llamarle vieja bruja para tratarle con algo de respeto, su madre dejo de golpearlo y entender la seriedad de sus palabras cuando era joven.
Ambos siguieron con carácter fuerte, pero más equilibrado.
Hasta el punto que cada año nuevo pasaba con ellos, ignorando las burlas de su madre de jamás tener nietos, al tiempo que cocinaba tal vez con demasiado picante la parte de su madre y disfrutaba verla luchar contra el calor. No era una relación perfecta, pero estaba a años luz de la relación que tuvieron casi toda su vida.
Verla nuevamente en la etapa de perra maldita, lo hizo sentir confundido.
La idea de que todo esto era una ilusión o sueño, cada vez más débil debido a que nunca comento sobre esto al público, nadie debería saber esta relación con su madre. Tampoco nadie debería ser tan bueno en recrearla de esta forma, para hacerlo sentir como una maldita mosca bajo el zapato de alguien. Su madre había tenido algunos comentarios dolorosos en su pasado, que lo hicieron sentir tan culpable y molesto con él mismo, que la terapista que los trato debería haber recibido un aumento por ayudarles a reparar una relación tan destrozada.
Nadie debe saber esto.
Su madre parece confundida al verlo tan silencioso, pero su rostro parece un poco preocupado cuando pasa tranquilamente a su lado sin explotar o decir nada, con la cabeza corriendo por mil y decidido a averiguar más.
El primer piso de la casa luce como debió lucir en este tiempo, de reojo nota el calendario al pasar a su lado, casi tropezando al ver el año que era. Cálculos mentales pasan al mismo tiempo que analiza todo a su alrededor, intentando averiguar algún detalle que pueda ser incriminatorio, demasiado acostumbrado a siempre estar alerta como el héroe número 1 de Japón. Incluso con estos "padres" hay cosas que no puede apagar, sobre todo cuando puede significar la diferencia entre la vida o muerte de alguien. Cuando toma asiento, decide que este era el año cuando estuvo en su primer año de la UA.
El cual fue un año con mucha mierda.
El comentario de su madre del ataque de la USJ, también le hace sentirse un poco más encontrado en el punto de la historia de la cual "está ubicado" momentáneamente. Pocas semanas de haber ingresado, tiene 15 años, está en la UA, tiene una relación de mierda con su madre.
¿Qué más puede sacar de esto?
Lo más obvio.
Esto es una puta mierda.
¿Cómo rayos puede salir de aquí?
Toma asiento frente a su padre, que luce claramente sorprendido bajando la Tablet con las noticias, viéndolo preocupado. Su madre también toma asiento al lado de su padre, viéndolo como un puto mono de circo mientras toma los palillos para comer. Da un leve gracias por la comida, recordando cuantas veces Uraraka lo mando a la mierda por no ser respetuoso o como Inko Midoriya lo obligaría en sus visitas. Claramente eso parece alertar más a sus padres, pero sigue perdido en sus pensamientos y todo a su alrededor.
Intenta determinar si es un factor de tiempo o si se golpea con fuerza despertara en su cuerpo real.
La comida en su boca tiene un sabor fuerte, lo cual lo hace torcer la nariz. Había sido sometido a un incidente con un villano a sus 24 años, provocando que gran parte de su sentido gustativo se fuera a la mierda. Izuku se había terminado acostumbrado a comer tanto picante como lo hizo, ya que, sin su sentido del gusto, solo altas cantidades de picante surtían efecto, lo cual era ya bastante malo porque siempre amo el picante. La mayoría de veces la comida era insípida, sus conocidos siempre tenían una salsa picante extra para él en sus visitas, dejo de comprar comida que le sabe arena.
Pero aquí está, con el sabor de la comida tan fuerte como pensó que había olvidado.
Su ceño se frunce sin entender como esto era posible.
—¿Está todo bien Katsuki? —pregunta su padre habiendo detectado su mirada disconforme, el maldito viejo desgraciado siempre fue demasiado observador
No sabe cómo decirle todo lo que está pasando, que probablemente sea solo una creación de su mente, que esto debe ser un sueño o ilusión, que no tiene sentido y una parte de él quiere volver desesperadamente a casa.
Aunque.
¿Cuál es su casa?
Sigue masticando el pescado con un solo asentimiento de cabeza, sus padres intercambian miradas preocupados.
.
.
Katsuki ignora los intentos de su madre para discutir con un encogimiento de hombros y entrando a su habitación por las siguientes horas, intentando descubrir que mierda está sucediendo. Su computadora es su nuevo mejor amigo, cuando piensa que no importa que puto mundo de ilusión, sueño o coma fuera esto, hay cosas que no debería ser capaz de recrear. No importa que buen prodigio sea, hay cosas que ha buscado que no deberían aparecer sin importar que clase de persona controlara este mundo, Katsuki o la persona que lanzo alguna particularidad… ¿y si fue la niña de 4 años que rescato? Imposible, hay demasiada complejidad en este mundo, demasiadas reacciones naturales.
Sus padres lucen preocupados de que no haya dicho ninguna palabra el todo el día, incluso cuando comentaron que sus clases fueron suspendidas dos días por el incidente, apenas parpadeo, porque recordaba eso. Su teléfono estaba silencioso, recordando que en realidad no obtuvo el número de sus amigos hasta las pasantías, más que todo porque Kirishima había robado su teléfono y unido al puto grupo virtual, del cual nunca escapo realmente. Fue extraño no ver mensajes de sus amigos, siempre había gritado por el silencio o dejar de hacer spam estúpido, pero ahora fue muy…solitario.
Tiene mensajes vagos y aleatorios de tipos de la secundaria que no guardo nunca por nombre, que ignora ya que son estos pidiendo reunirse en el salón de video juegos. Los ignoro la primera vez, en esta ocasión fuera lo que suceda ahora, tampoco merecen mayor importancia.
¿Qué tan grande es este mundo?
Abarco las personalidades de sus amigos o se limita a esta casa. Las noticias que ha encontrado son tan viejas que es difícil recordar si son reales o no, la frustración de que sucede parece quemar en sus venas con ganas de salir explotando.
Eso sí, ha atado cabos, probablemente el mareo y dolor de su cuerpo, es producido porque está acostumbrado a un cuerpo diferente, más alto, más lleno de heridas y problemas, que este cuerpo de joven. Los pequeños sonidos lo alteran, ya que no suele identificarlos antes, los audífonos no tienen tanto volumen como recuerda colocar, sus ojos incluso también parecen ver mejor; aunque la vista nunca fue un problema real, había usado anteojos en casa a partir de los 26 años para leer.
Con una mano golpeteando el escritorio, donde había pasado toda la noche (acostumbrado a largas horas de patrullaje y turnos espartanos) sintiendo su interior agitarse nervioso.
¿Y si es real?
Suena imposible y estúpido, pero no sería la única cosa anormal que le ha pasado, una vez habían luchado contra un villano que pudo hacer sus sueños realidad, no había estado preparado para volver a ver el cuerpo fantasmal de Izuku sonriéndole. También estuvo la ocasión, donde habían recibido viajeros de otra dimensión, hasta el momento uno de los eventos más anormales de su vida, aunque los había ayudado con el dolor de ver que el Izuku de esa dimensión se parecía tanto al suyo, pero con vida; probablemente estaría viviendo sus aventuras en aquella extraña existencia de fantasea medieval.
Pero esto se llevaría el premio gordo.
Debe investigar.
Los dos días libres pasan demasiado rápido y apenas sale de su habitación, sus padres parecen alarmados cuando no grita o maldice, casi está seguro que estuvieron al borde de llevarlo al médico en las dos ocasiones que no llamo a su madre "vieja bruja", lo cual era difícil de controlar cuando la perra era tan molesta como recordaba. La leve quemadura de su vientre estaba mejor y gracias a todo lo que investigo en internet, pudo darse una idea de que estaba sucediendo actualmente.
Para su suerte, recordaba bien este año por todos los eventos ocurridos, lo que le dejaría ver que tan real era toda esta mierda o que tanto era algún extraño coma inducido por alguna particularidad.
Luego actuaria.
No era la persona más paciente del mundo, pero como pro héroe número 1 del ranking, sabe que debe evaluar cada situación y no lanzarse al agua sin algún plan de respaldo. Por mucho que quisiera salir y explotar todo, para verificar la realidad de este mundo, algo dentro de él lo impedía y se movía con agitación. La UA significaba que cierto chico de cabello verde estaría ahí, probablemente la razón por la cual quería creer desesperadamente que este mundo era real y que todo parece ser un milagro a su favor, lo cual el mundo no le da facialmente.
La idea de volver a ver a Izuku hace cosquilla bajo su piel y lo impulsa demasiado temprano esa mañana para ir a clases, que probablemente no recuerda. Agradece mentalmente que están iniciando el año escolar, así que no ocuparía repasar mucho más que sus notas, que, si bien parecen confusas luego de tantos años de haber tenido clases, no lo son tanto para él que fue un maestro ocasional y recuerda sus conversaciones con Uraraka (quien era una profesora de la UA con Yaoyorozu) y sus quejas de los temas actuales.
También estarían sus amigos, no extras, amigos que han sido creado por la cantidad de inmensas batallas juntos.
Ese pensamiento es que lo detiene en medio de su camino a la estación, casi llegando a piloto automático cuando todo a su alrededor parece un mundo inmenso y real. Rostros, hombres, mujeres, niños, ancianos, animales, todo parece tan real, que le hace sentir incomodo; pero no tanto como una idea que surge en su mente.
Si esto fuera real.
Como mierda ya saben…Real.
Viaje en el pasado.
Perra en su vida.
Esperando que sea para siempre y no despierte de repente en su cuerpo de 30 años, esto es una mierda. Sus amigos no están, solo son recuerdos de algo que no sucedió, lo más atemorizante de todo que lo confunde cuando el tren avanza, es Izuku. La mierda que habían dejado atrás, en este caso hipotético seria mierda muy reciente con olor y tacto, que pueden absorberlo hasta el punto que quiere matarse a sí mismo y dejar todo esto de lado. La forma tan maldita de haber trato al idiota del que luego de enamoraría, en realidad fue hace pocas semanas, pocos días…la lucha en parejas fue hace pocos días atrás si no se equivoca.
Este Katsuki no habría hecho nada bueno por Izuku en años.
De repente la idea que esto fuera real, sonó demasiado mal para su gusto, queriendo irse rápidamente y vomitar en algún lugar cercano. El desayuno se revuelve molesto en su interior, con sabores que realmente no había extrañado en este momento. Su mareo que había sido controlado luego de dos días de estar en este cuerpo, vuelve como una maldita perra y de repente cualquier lugar parece mejor que en el que está.
Cuando llega torpemente a la entrada del edificio, ignorando a la mierda de reporteros que parecen interesados en conocer lo sucedido en el incidente, los ignora con años de experiencia que los deja fríos por su indiferencia. Sus pasos parecen cada vez más pesados y se recuerda a si mismo que esto no es una maldita ejecución.
Por mucho que se parezca.
Los rostros de estudiantes son confusos para él, la mayoría no procesándose directamente ya que no recuerda a los de otras clases. Sus pies casi quieren bailar en medio del pasillo, preguntándose qué tanto debería hacer ahora o si podría simplemente ir a la enfermería listo para morir. En general es alguien que evita los lugares con médicos todo lo posible, pero incluso su peor pesadilla blanca, parece mucho mejor que la idea de entrar con un montón de adolecentes de su edad, específicamente estos adolescentes de 15 años.
En medio del pasillo frente a la puerta de su clase, medita sobre su existencia y la realidad de este mundo.
Se ha convertido en un idiota como Denki, decide cuando entra al salón, casi suspirando aliviado al verlo totalmente vacío. Demasiado temprano, se palmea la espalda agradecido por eso, antes de literalmente correr a su escritorio donde coloca la mochila en la mesa y literalmente se hunde en esta para "dormir". Esperando que tomen la indirecta de dejarlo atrás, casi levemente agradecido por la falta de unión con los idiotas en ese tiempo, ocupa pensar, ocupa meditar, ocupa… ¿dormir?
Es extraño, en cualquier situación, en cualquier otro momento, jamás se hubiera dormido sin importar la cantidad de sueño que puede tener. Es un puto héroe, el puto héroe número 1 y ha trabajado jornadas de largas horas ayudando a los demás. También es muy desconfiado, siempre alerta, siempre al pendiente de los demás y conociendo que cualquier descuido puede ocasionar la muerte de un civil; eso ultimo lo había aprendido por las malas, demasiado novato, demasiado crédulo en muchas cosas.
Izuku fue quien lo había sacado del bar ese día, quien como de costumbre lo había visto desmoronarse ante la muerte de un inocente en su espalda y quien ayudo a recoger los trozos de su mente rota, para unirlos y ayudarlo a ponerse de pie.
Si se concentra puede verlo, jamás pudo olvidarlo. El adulto levemente más bajo que él, con el cuerpo formado y el rostro de un idiota amable, que siempre le tiende una mano en espera de que acepte dejar su orgullo de lado y la tome. Ojalá la hubiera tomado más antes, ojalá hubiera tenido la oportunidad de verlo una vez más, de poder ser sincero y hablar con este; probablemente lo maldeciría y exigiría saber desde cuando el estúpido masoquista tenía sentimientos por él, desde cuando también estaba interesado.
Porque si veía para atrás, no había algún cambio en su actitud que lo delatara.
Frustrante, medita levemente adormilado.
Debe ser la sensación de seguridad que tiene la UA con él, que incluso dentro de este mundo, real o creado, que termina dormido al sentirse que está protegido por otros. Fuera de estar paredes no lo está, fuera de estas paredes hay una cantidad inhumana de enemigos a que derrotar, pero aquí está en casa.
Aquí están sus amigos.
Sus personas importantes.
Medita descuidadamente, antes que dos días enteros sin dormir, no sean soportados por este cuerpo de mierda débil, antes de caer inconsciente.
.
.
Comienza a dudar en donde está metido y si esta es su nueva realidad, cuando parece tener un sueño. No tiene sentido la idea de un sueño dentro de un sueño, pero nuevamente, Katsuki ha visto muchas cosas locas en su vida como héroe. El sueño es más bien un viejo recuerdo, lo que le hace pensar nuevamente, que esto es real, porque nadie aparte de él puede ser capaz de recordar la vida cuando era niño y todo era más simple. Es un recuerdo muy lejano en su vida, uno cuando no tenía particularidad, cuando aún era un idiota estúpido y curiosamente con Izuku rondándolo como de costumbre.
Estaban en la casa de Katsuki, la madre de este lo había llevado a jugar y mientras ambas mujeres hablaban, ellos veían emocionados el video de All Might en una Tablet. Recuerda vagamente ambos decir que serían héroes, Izuku comentar emocionado la idea de ambos tener una agencia y de ahí comenzó un juego que duro horas probablemente. Vagamente mientras ve el recuerdo pasar por su mente, una y otra vez, de ambos niños riéndose de forma infantil, supone que si hay una posibilidad de que este mundo fuera producto de una particularidad, o si no el cabron que lo hizo fue bastante bueno en joderle la vida.
El sonido de Tenya gritando, es lo que termina despertándolo y sentándose erguido alarmado. Escucha algunas risas y murmullos a su alrededor sobre él, ahora que su audición es mejor, no es difícil identificar su apellido y la palabra dormir, junto con un parecido a un perro, que lo hubieran molestado en cualquier situación. El problema de haberse levantado de golpe, fue que sus ojos han caído irremediablemente en un personaje algunas sillas frente a él.
Algo que había olvidado.
Sus puños se aprietan sobre la mesa y tiene que hacer uso de todo su autocontrol sueño, fantasía, realidad o no, para no lanzarse frente a él con una explosión listo para el ataque. Izuku y sus amigos pueden haberle perdonado, pero hay una parte de Katsuki que simplemente no puede perdonar a la perra que está viendo. Aoyama Yuga, la perra traidora de su grupo, que, si bien con historia triste de fondo que hizo a todos perdonarlo, era una perra traidora. Le detestaba sobretodo porque había confiado en él, como en el resto del grupo.
Pero donde todos habían decidido perdonar, Katsuki decidió ser rencoroso y siempre recordarle a ese maldito sobre cómo no importa cuánto se arrepintiera de lo que hizo, estaba fuera del grupo para él y si se acercaba a solo uno de ellos con mala intención, Katsuki no dudaría en explotarle hasta la muerte. Lo hizo para proteger a sus padres, en el fondo era alguien que también debieron proteger, pero una parte de él no puede evitar ser rencorosa.
Incluso con su apariencia extraña y demasiado detestable, este parece saltar cuando siente su intensa mirada y parece nervioso. Debe sujetarse de su asiento, porque está listo para saltar a la yugular y cometer un asesinato. El ataque a la USJ fue gracias a él, el incidente en el campamento de entrenamiento, que lo secuestraran y muchas tantas cosas más.
No Katsuki, asesinar no es bueno, Izuku no lo permitiría.
Hay una bendición en el cielo que como el bastardo este frente a él a la derecha, Izuku deba estar detrás suyo en este momento. Ignorando a todos en realidad, algunos que han visto curiosos su despertar, hay un cosquilleo en la nuca de Katsuki, quiere voltearse, quiere ver si es verdad que Izuku está detrás de él, quiere poder verlo con vida una vez más, sea real o no.
Lo único que lo detiene es saber, que, si lo hace, probablemente haga algo estúpido. El porcentaje en su mente que le hace pensar que esto es real, es lo que le detiene para no humillarse y decide ir por un viaje más seguro. Sobre su izquierda puede ver el ventanal que da al exterior, pero decide enfocarse en el reflejo de este, casi maravillado que efectivamente, ahí está.
No tan nítido como verlo si girara la cabeza un poco más, pero puede ver el reflejo del chico en la ventana. Ahora si es mucho más difícil mantenerse sujeto a su asiento, cuando claramente quiere voltearse, abrazar al chico, maldecirlo por ser un estúpido en morir, gritarle que lo extraña y patearlo; todo al mismo tiempo. Su cabello parece mucho más alborotado de lo que recuerda y es demasiado pequeño, está seguro que si lo levanta de los brazos puede alzarlo sin problemas.
Por suerte no ve sus ojos, medita Katsuki volteando al frente cuando una momia Aizawa aparece al frente del salón, tiene miedo de ver los ojos de Izuku.
De ver temor, desprecio, inseguridad en sus ojos.
Joder.
¿No pudo volver cuando eran rivales?
Hubiera preferido la época de ser amigos, pero con rivales se conformaba. Moviéndose inquieto en su asiento sin estar seguro de su nuevo plan de acción. Sentir la presencia de Izuku en su espalda, fue lo que le hizo esperar que esto fuera real, porque si fuera real, significa que hay una oportunidad de salvarlo. Primero que todo no lo llevaría a esa puta misión contra ese héroe de mierda, lo entrenaría, se entrenaría, maldita sea, esta vez serian el estúpido Dúo de héroes que siempre intentaron ser y mantendría su culo de mierda a salvo.
En realidad, podría hacer algunas cosas diferentes, medita la posibilidad que ignoro los días anteriores.
Hay muchas cosas que conoce del futuro, si fuera real…y que importa una mierda si esto es real o no. Si fuera un puto sueño no puede hacer ni mierda, pero si hubiera una posibilidad de que fuera real, puede hacer muchos cambios y disfrutar de su vida diferente. La había cagado muchas veces, una y otra vez, lo que lo hizo aprender, lo que lo hizo madurar; pero joder, odiaba la soledad de su actual vida. Había una sensación entre felicidad y odio de ver a todos sus amigos seguir adelante, pero él siempre atrás; incluso como héroe número 1, con una carrera exitosa, con amigos y seres queridos, siente que ha quedado atrapado en ese día.
En el día donde el idiota detrás de él murió.
Puede que todo esto no sea real.
Si.
Pero si fuera real, si hubiera la posibilidad, si fuera una segunda oportunidad.
¿No debería hacer algo?
Maldita sea.
Si.
Fuera un día, dos, una hora o un minuto más en este mundo, tiene que hacer algo o se volverá loco cuando regrese. Si regresara seguiría adelante, salvando a las personas, pero disfrutando de este pequeño tiempo de paz donde ayudo a corregir toda la mierda creada por sí mismo. Si de alguna forma había una posibilidad que la particularidad de esa niña lo regresara al pasado, sería mejor, podría cambiar las cosas, podría hacer que no se arrepintiera de tantas cosas en un futuro.
O podría joderlo todo incluso más y hacer un desastre en este universo.
Bueno.
La vida siempre es un riesgo, piensa con una sonrisa maliciosa al ver al chico brillante invisible frente a él, que parece saltar en su lugar alarmada. No trataría con esta molestia por ahora, ignorarla sería lo mejor hasta que estuviera seguro que puede cambiar o que no. Si comienza con cambios demasiado radicales, como saltar y decirle a All Might que conoce su secreto o gritar a los cuatro vientos quien es realmente Dabi, todo se descontrolaría demasiado rápido.
Ignora como Aizawa comienza hablar sobre el festival deportivo de la UA o como todos parecen emocionados por la idea, es divertido como luego de tantos años, algo que había parecido tan importante en el pasado, carece de interés en este punto de su historia.
Que cambiar o que no cambiar.
Eso sí parece importante.
No le gusta ir con la corriente, sobre todo en algo que desea cambiar desesperadamente, pero aventarse al frente sin un plan de respaldo, no siempre es la mejor idea. Cualquiera de sus compañeros a esta edad, pensarían que estaba enfermo por el giro de pensamientos que pudo tener, pero ahora que es mayor ve las cosas con más claridad. Cambiaria algo, si, a su manera, totalmente, nadie podría detenerlo, absolutamente; pero usaría un método un poco más sutil que lo haría ganar. Odia las sutilezas, es mejor irse por todas de frente, solo que también sabe cómo elegir una buena batalla.
AFO está por ahí.
Debe ir con cuidado, por mucho que odie admitirlo, ese bastardo es peligroso. Si bien fue el héroe número 1, ya que en este momento no lo es, sabe que lo tendría difícil contra ese hombre solo. La primera vez ese villano fue derrotado por la ayuda de todos, también su cuerpo estaba mejor entrenado, mierda tiene que hacer una nota de entrenar con seriedad actualmente y probar sus límites. Aunque tenga mayor conocimiento, experiencia y habilidades, también sabe que su físico está muy por detrás de lo que recuerda haber estado.
Sus amigos también.
Joder.
Ocupa corregir eso, la mayoría de ellos no tienen ningún ataque especial o neuronas juntas para pensar en batallas reales.
Su cabeza comienza a doler ante la molestia de lo que vendrá adelante. Había pasado los anteriores dos días acomodándose un poco a este mundo e investigando, pensando que era un sueño que acabaría en cualquier momento, que ahora en la UA, puede ver que tanto camino les toca avanzar.
No tiene ni la puta licencia provisional, que se joda todo el mundo, esta vez la piensa obtener de primera, no soportaría la humillación de no obtenerla con su estado actual.
Luego de que Aizawa se fuera, dándole una leve mirada de más que lo ha tensado, siente que su profesor es demasiado observador para su propio bien. Mientras todos parecen animados por el festival, Katsuki medita vagamente en todos los puntos importantes que verán a continuación en sus vidas, la mayor parte de luchas y los nombres de todos los villanos posibles. Lamentablemente para él, en la mayoría de ellos no conoce su ubicación actual, cambiar algo repentinamente, también puede hacer varias las cosas a un futuro a tal punto, que cambiarían completamente.
El resto de las clases la pasa totalmente distraído, apuntando notas ocasionalmente y muchas otras rasgando ideas vagas en el cuaderno, que claramente ocultaría si alguien ve de cerca o si siente la mirada de la molestia brillante; por suerte sus miradas molestas la han detenido de acercarse. Si bien no es tan ágil escritor como fue Izuku, el nerd de mierda era bueno tomando notas, si ha reunido varios puntos importantes que nadie podría entender, aunque robara su cuaderno. La situación del campamento, las pasantías, la batalla de All Might, son las que más le preocupan a pesar que tiene varias semanas para prepararse.
La idea de estar el tiempo suficiente o que esto sea real, cada vez más consolidada.
Deja una nota aparte, para investigar sobre la niña que uso su particularidad con él, debe tener familia ya que no existe en este tiempo, tal vez si los encontrara, podría averiguar un poco más de su paradero actual. Ocupa hacerlo antes del campamento y que se instalen los dormitorios, o perderá más libertad de la que tiene actualmente. No era bueno con situaciones de búsqueda especifica de personal, su usual comportamiento era más de batallas, destruir grupos criminales, luchar contra villanos o colaborar con la policía.
Buscar una persona con sus recursos actuales.
Complicado.
Extrañaba tanto el acceso a las redes policiales, ese pensamiento le hizo suspirar vagamente.
Apenas empezó el almuerzo, se levantó saliendo del salón alertando a todos. No puede con Izuku en el mismo salón, haberlo escuchado comentar algunas cosas durante las clases, fue suficiente para hacerlo saltar en su asiento nervioso. Que cuando saliera del salón, y que tanto Ejiro como Denki no fueran detrás de él, fue una bofetada al recordar que no eran amigos. Haber luchado con Ejiro en la USJ, había provocado que el chico lo tolerara, el festival los hizo un poco más unidos, pero actualmente no eran nada.
No tiene amigos, medita deteniéndose en medio de un pasillo desanimado.
Siempre los había molestado, tratado mal, gruñido si se acercaban, deseando que lo dejaran solo; hasta que se volvieron amigos. Es extraño, antes de la UA, excepto por Izuku, nunca antes había tenido realmente amigos que lo soportaran con su mal carácter. Pero luego paso la UA y nunca había vuelto a estar solo, esos bastardos fueron cuando lo secuestraron en este año, siempre a su lado, luchando juntos y compartiendo tantas experiencias.
¿Podría volver a obtener eso?
Con los puños apretados y casi seguro que su versión joven lo patearía, estaba dispuesto a obtener esa mierda de amistad de nuevo.
Gruñe una maldición cuando en el siguiente pasillo se encuentra a Aizawa-sensei, quien parece haber estado esperando a alguien, pero solamente lo vio con su rostro totalmente vendado. Puso las manos en sus bolsillos, caminando a él con una idea en mente.
—Sensei—lo llama y probablemente este debe estar sorprendido por su respeto detrás de sus vendajes.
Bueno, el viejo bastardo se había ganado su respeto por todo lo que hizo por ellos. Aun cuando fue un héroe adulto, viejo salido de la UA, siempre pudo contar con un consejo de su profesor si fuera necesario. Cuando su terapeuta le recomendó tener algún animal de apoyo, Aizawa le había ayudado a conseguir un puto gato que le hizo sentir mejor en su departamento. No era alguien de gatos, pero el pequeño bastardo era demasiado cariñoso, le hizo sentir menos solo algunas noches.
—¿Sucede algo Bakugou? —pregunto sin revelar o no la sorpresa en su voz.
Aunque sus ojos no mentían, estaba cauteloso.
Katsuki de 15 años no lo hubiera identificado, tan lleno de si (aunque a estas alturas algo de su ego había sido desinflado al saber que no era tan fuerte e único como pensó que era) y arrogante que solo piensa en ser un héroe, como para notar a los demás.
Pero el viejo Katsuki, con el doble de edad que el adolecente y conociendo a este hombre por años, puede notar detalles sutiles.
—Me gustaría tener permiso para entrenar en un campo de entrenamiento durante el almuerzo…por favor—comenta lo último como una ocurrencia tardía.
A este punto Aizawa no puede ocultar su sorpresa.
No es que importe mucho.
Solo quiere probar sus habilidades, algunas de ellas, dado que no tiene licencia probarlas fuera de este lugar seria problemático. La idea de no poder usar sus explosiones como de costumbre, comienza a molestarle ante otra perdida de libertad que no sabe que poseía. Jamás lo usaría contra algún civil, pero era un héroe, puede usarlas a libertad de ser necesario y ahora…mierda.
Sin decir mucho el hombre le pide que lo siga, lo cual Katsuki acepta con tranquilidad al saber que es su forma de aceptar su extraña petición, aunque todo el viaje no deja de darle miradas que le recuerda mucho la de sus padres.
Confundidas.
Katsuki se siente ofendido, sabe que fue un adolecente de mierda, pero este trato raya el nivel verlo como un puto alíen de mierda.
Cuando llegan al campo de entrenamiento al lado de la escuela, pero algo alejado de la parte del comedor para que alguien note algo en medio almuerzo aparte de los de tercer año, supone que podría averiguar sus límites. Aizawa es llamado por el presentador Mic, provocando que solo le dé una advertencia de no hacer daños en el material escolar.
Los siguientes minutos de Katsuki, son bastante decepcionantes para sí mismo. No llega al límite de su físico sobre su velocidad, resistencia o fuerza, solo usa su particularidad porque no tendrá muchas oportunidades; pero es suficiente para hacerlo gruñir maldiciones. Sus explosiones son tan diminutas comparadas a lo que puede hacer cuando tenga 30 años, sus glándulas de sudor diminutas, su control de habilidad por los suelos, es una mierda andante. Sabe que puede controlar las explosiones pequeñas y puede hacer muchos de los trucos que ha aprendido por los años, el control aún se mantiene hasta cierto punto.
Pero su nivel de poder de explosión ha caído fácilmente un 80% o más. No es que siempre sea necesario, una buena técnica, un control y plan, son mucho más importantes que poder bruto; al menos lo eran en su tiempo, no ahora con la gran cantidad de villanos mortalmente potenciales a su alrededor y pronto contra él. En este momento en su primer año, están intentando hacerlos crecer como personas y madurar, pero no sus habilidades. Katsuki tiene un gran conocimiento y experiencia, ahora ocupa nivelar un poco su cuerpo.
Mientras ve algunos limites más de su habilidad, va haciendo un plan mental de entrenamiento que deberá seguir rigurosamente si quiere ver un cambio rápido. Es más estricto del que suele ponerle a sus nuevos reclutas o pasantes, pero está seguro que su cuerpo podrá con él. Una nueva dieta comienza a aflorar en su mente, cambiando rápidamente algunas cosas al recordar que su paladar tiene nuevamente gusto por la comida.
Su traje.
Mierda.
Tiene ese primer traje de mierda, que ocupa tantas modificaciones. Si las entrega rápidamente en estos días, puede que estén listas para sus pasantías.
¿Best Jeanist de nuevo?
Aunque el extraño bastardo fue de los primeros en recibirlo y le tiene aprecio, Endeavor podría ser más útil debido a lo que vendría a continuación, pero tampoco es que añore mucho al viejo bastardo Todoroki. Extraña realmente su agencia de héroes, si estuviera una similar ahora, iría ahí sin duda porque obviamente intentarían reclutarlo. Puede que sea mayor, que tenga conocimiento de que no fue el mejor adolecente del mundo, pero siempre tuvo potencial. A pesar de la gran cantidad de agencias actualmente, ninguna era la mitad de buena de lo que sería la suya a futuro.
Héroes, entrenamiento, capacitaciones, misiones, alianzas…su agencia era tan asombrosa, joder, era el héroe número 1, pero tenía todo un grandioso equipo de trabajo. Momo siempre fue buena con la parte del público, otros como Mina y Ejiro eran claramente amados por los demás, Shoto era su puta mano derecha (a pesar que los años no disminuyeron del todo sus luchas), Denki y Kyoka, joder, también estaban Ochako y Tenya, sin olvidar al bastardo de Hanta que siempre estaba ahí para luchar a su lado. Con el tiempo otros también se acercaron a la agencia, por nostalgia o por otra cosa, y la vena débil de Katsuki para la UA siempre los incluyo rápidamente. Koji, Mashirao, Mezo, Rikido y Fumikage.
Maldición.
A pesar de lo feliz que estaba en esta segunda oportunidad, la nostalgia por lo que pierde también lo ata de espaldas.
Era una mierda que no se alegra fácilmente.
Frustrado y algo molesto, suelta más poder, que es estúpidamente diminuto sin la ayuda de sus guantes, que ocupan mejoras; todo su puto equipo necesita mejoras.
Resignado a que ocupa entrenar como una mierda, comienza a caminar con su teléfono abierto y apuntando rápidamente todas las modificaciones que necesita para su traje, muchas más que en su traje de 30 años; claramente ocupa compensar muchas deficiencias que tiene ahora. Pero si no se equivoca la perra de Mei está en el departamento de soporte y esa idiota siempre le han gustado los retos; no por nada la había contratado en su agencia, asegurando muchos héroes en el top y una planta completa para sus inventos.
Por suerte su edificio de agencia estuvo asegurado luego de la explosión masiva número 3.
Bueno, con la idiota de Mei cerca, algunas de sus ideas podrían ser creadas en esta época, a pesar que en su creación original fue bastante adelantada. Puso la mayoría de especificaciones que recordaba, detallo lo mejor que pudo sus funcionamientos y sabe que tendría que hacer algunos bocetos de dibujos en su casa, antes de irse a entrenar toda la maldita tarde si quiere mejorar pronto. También recordó vagamente le tamaño gigante de sus guantes en esta época, ocupaba un diseño más aerodinámico, pero al mismo tiempo que pudiera causar el mismo impacto y almacenar mucho más sudor. Las granadas de luz y explosiones pequeñas, también ocupaba una nueva mascara que tuviera una visión mejorada, los audífonos que se activarían para bloquear el sonido de las explosiones (La Tinnitus no volverá aparecer tan tapido esta vez) y sus botas especiales.
Maldita sea, habían sido idea de Deku, que sus botas también provocaran pequeñas explosiones para aumentar su alcance de lucha. Solamente el sudor de sus palmas podría ser activado, pero con una especie intrincada de mecanismo, lograron crear un traje especializado para que de sus pies también salieran explosiones.
Bueno la mierda de Mei tendría que crearlo…de nuevo.
Sigue su camino al aula, anotando rápidamente todo lo que puede en su teléfono. Llega al salón ignorando a todos, caminando a su asiento sin despegar la vista del teléfono. Solamente ve de reojo la ventana, para asegurar que el bastardo de Izuku siga ahí, suspirando internamente al verlo ahí detrás de él. Aunque debe entrecerrar la mirada para verlo bien, puede notar que esta intranquilo y preocupado.
¿Por qué?
Un destello de recuerdo de Izuku mayor, comentando viejos recuerdos del pasado, sobre su idea de haber destacado más en su primer festival por un comentario de All Might, casi le saca un gruñido. Admiraba a All Might, joder, pero a veces era un idiota.
¿Cómo le dejaron ser profesor?
Porque era el número 1, motivo por el cual Katsuki también lo hizo en su momento, aunque claramente él fue un mejor profesor que All Might.
Recordando sus actualizaciones, rápidamente comienza apuntarlas en una hoja de cuaderno, deseando ir hoy mismo a dejar una parte de sus ideas. En los próximos días podría ir con más bocetos, pero ocupa que Mei comience a trabajar con ellos desde ahora. Ignora el comentario de Kyoka y Hanta sobre que tiene algo de hollín en su uniforme, sigue apuntando rápidamente para no olvidar la mayoría de cosas. El recuerdo de sus guantes más actualizados, que acumulan explosiones en sus dedos, lo cual permite hacer disparos rápidos y precisos, son anotados rápidamente. No ocupaba pistolas con un traje adecuado, además siempre había sido excelente en el tiro al blanco.
El resto de la clase las pasa metido en sus anotaciones, siente la mirada de la clase sobre él, especialmente la verde en su espalda.
Los ignora, porque no sabe que pasara si ve a sus amigos y nota la mirada indiferente o poco familiar de ellos.
.
.
Es al finalizar la clase, cuando está listo para correr al departamento de soporte, que aparece una ola de personas en la salida. Katsuki frunce el ceño vagamente olvidando eso, ya que tiene cosas mucho más importantes por hacer. Ignora como algunos de sus amigos parecen alarmados por la presencia de desconocidos, aunque Katsuki recuerda vagamente que deben haber venido para obtener información, por el motivo del festival deportivo. Quiere gruñir una maldición, porque este puto festival no importa ni una mierda, claro que podrían obtener recomendaciones, pero al final lo que importa es la pasantía, que incluso con recomendación o no, tienes que ir algún lugar. El trabajo real comienza fuera de este lugar, fuera de las cuatro paredes que te protegen y donde hay malditos villanos intentando matarte.
Los adolescentes son estúpidos, medita Katsuki con molestia cuando ve que no hay paso.
—Miren pedazos de mierda—dice con un rostro completamente desprovisto de emociones, que deja confundidos a los desconocidos como a sus compañeros de clase, que no lo han escuchado en todo el día—estoy ocupado y ustedes están en mi camino—añade comenzando a molestarse aún más.
Mei podría quedarse hasta más tarde, supone, no está seguro, no le presto mucha atención en estos años, con suerte siga siendo la maldita friki de las maquinas que conoce; si este fuera el caso, está totalmente seguro que sigue en este edificio.
—No deberías ser tan arrogante, solo venimos a conocer a quienes lucharon contra los villanos, ¿todos los estudiantes del curso de héroe son así? —dice una voz vagamente familiar, que le hace levantar el rostro para ver a Shinso Hitoshi, mientras todos detrás de él niegan.
El chico parece demasiado pequeño y delgado, pero es el mismo idiota de siempre. El recuerdo del tipo de lavado de cerebro que también trabajaba en su agencia (había sido un buen amigo de Izuku y una parte dentro de él también era débil a eso) y que solía burlarse de su persona, vaga levemente ante el mocoso molesto que tiene frente a él.
Tiene ganas de darle un puñetazo.
Aunque este había sido un combatiente interesante, fue entrenado por el mismo Aizawa y por lo tanto tiene muchos trucos bajo la manga como héroe clandestino. Envidiaba un poco la poca presencia ante el público y el no tener que relacionarse en eventos sociales. Varias veces habían entrenado bajo el control mental, para hacerlo más fuerte y no caer ante cualquier particularidad de ese tipo…no era el más ágil mentalmente para librarse de su particularidad (Izuku gano esto siempre que entreno con Hitoshi antes de morir), pero era decente.
Motivo por el cual cada segundo duda que esto no es real, casi convencido que de alguna forma misteriosa viajo al pasado.
—Hay muchos estudiantes que están en estudios generales porque no entramos al curso de héroes, pero el festival nos da una oportunidad nueva—comenta Hitoshi pareciendo desinteresado, cuando el bastardo claramente quiere el curso de héroes.
Katsuki se mantiene poco sorprendido cuando este comenta sobre la posibilidad de ascender, si bien sus estúpidos amigos parecen sorprendidos ante la idea sin saberlo, no es algo nuevo o que le importe a él. Claramente en el festival escolar, puede ganar sin mucha dificultad, lo cual no es que importe ya que luchar con sus amigos en este nivel, es cari aburrido. Incluso aunque logre entrenarlos en este poco tiempo (algo imposible ya que técnicamente aun no es cercano a ninguno) jamás podrían acaparar sus años de experiencia y que conoce las habilidades de todos ellos, en este momento, mejor que cada uno.
—Vine con una declaración de guerra—dice Hitoshi luego de la explicación completamente aburrida e innecesaria según Katsuki.
Ve de reojo el reloj de pared ignorando al peli morado, notando que le siguen quitando tiempo precioso para él. Que el idiota de metal que era amigo de Ejiro hiciera acto de presencia, provoco que sintiera un ligero dolor de cabeza aparecer en su cerebro.
Si no fuera porque Izuku está detrás de él, hubiera explotado todo y mandarlo a la mierda.
Saca lo mejor de él.
Así que como saca lo mejor de él, está por marcharse para no asesinar a nadie. Recuerda vagamente que dijo algo en esta situación, pero ahora no lo recuerda o no tiene importancia, algo sobre ir a la cima, algo probablemente infantil y estúpido que no ayudo en nada. No es que importe, simplemente iba a ganar como de costumbre y sería tan ridículamente fácil ahora, que le frustraría más.
Nadie es un reto para él ahora.
Detiene sus pasos frente Hitoshi, quien lo ve de forma aburrida, su semblante sigue sin moverse.
Debe irse.
Pero no lo hace.
Porque si no dice nada, los estúpidos de sus amigos seguirán como siempre, los estúpidos de esta escuela también, todos putamente confiados de que nada pasara a pesar del ataque hace unos días. Nadie sabe la gravedad de lo que podría venir adelante, todos son unos malditos confiados que no saben que el tiempo frente a ellos es precioso.
—Eres débil al igual que la bola de idiotas detrás de ti—señala Katsuki sin piedad, ganando miradas incrédulas de sus amigos e indignadas de los extras estúpidos, Hitoshi entrecierra levemente los ojos con molestia—vienen aquí para revisar la competencia que tienen, cuando todos en esta puta escuela queremos ser héroes, tan patético…todo este tiempo que desperdicias codiciando un asiento en este salón deberías usarlo para entrenar tu estúpido y escuálido cuerpo, porque en una batalla sin particularidades te ganaría sin pestañear—habla casi con aburrimiento al pensar las muchas veces que ambos se enfrentaron sin particularidades.
El chico no era malo, pero Katsuki siempre fue mejor.
—Alguien bendecido con una particularidad como la tuya diciendo eso, suena casi hipócrita Bakugou—comenta Hitoshi con voz calmada, pero claramente destilando veneno.
Oh.
La sonrisa salvaje se posa en sus labios, ha tocado un tema sensible.
No es que le importe.
—Digo la verdad lava cerebros—explica con las manos en sus bolsillos, disfrutando de la leve incredulidad del chico ante su apodo tan familiar, un claro indicio de que conoce su particularidad—te lo dije, entrena tu puto cuerpo y forma de pelear. Si ganas un lugar en esta clase significa que alguno de estos idiotas no merece estar aquí—Katsuki escucha sonidos indignados de sus amigos, pero realmente cambiaria a Hitoshi por la perra brillante en cualquier momento…también al chico uva, nunca termino de agradarle del todo—pero ahora solo veo un montón de extra que pierden su tiempo de entrenamiento, ganar el festival va ser tan aburrido de esta forma—gruñe lo último al saber que era verdad.
Incluso duda que Shoto haga un buen encuentro con él, ni siquiera va usar su lado de fuego, olvida eso, ni siquiera sabe cómo usarlo.
Eso lo pone de mal humor.
El héroe número 2 que era su actual rival en sus 30, ahora apenas si sabe luchar.
Joder.
Pasa al lado de Hitoshi ignorándolo olímpicamente como los demás, pero justo cuando esta por doblar por la puerta, se permite un segundo, solo un segundo. Sus ojos vagan momentáneamente en el salón de clase, donde todos parecen incrédulos de sus palabras, pero se detienen solamente en una persona. Izuku está ahí, luciendo incrédulo de sus palabras, pero lo ve. Su cabello verde esponjoso, sus ropas algo grandes para él, su estúpida mochila amarilla y las pecas de su rostro.
Es perfecto, piensa con dolor en su interior, casi regresando sobre sus pasos para abrazarlo y pegarle un golpe.
Cuando sus miradas se encuentran, Katsuki se retuerce al ver nerviosismo en su rostro, claramente asustado de su persona. Los recuerdos de todo lo que le hizo en la secundaria, provocan una patada en su interior y se obliga apartar la mirada viendo su camino. Respira con dificultad mientras camina al aula de profesores, para pedir permiso (odia tener que pedir permiso para esta mierda, cuando generalmente le piden permiso a él como líder de su agencia) de entregar estas nuevas mejoras al departamento de soporte del lugar.
Ocupa modificaciones.
El recuerdo de los ojos verde de Izuku, es un recuerdo agridulce de lo que ha obtenido ahora.
Tiene mucho que compensar con el chico de cabello verde, no solo él, con sus amigos. Ocupa obtener a sus amigos de regreso, pero más importante, ocupa obtener la amistad de ese chico de cabello verde brócoli.
Hoy fue el día que lo volvió a encontrar después de tanto tiempo.
Hoy es el día en que su nueva vida comienza a caminar cual manecilla de reloj.
Indiferentemente de que sea este lugar, Katsuki piensa hacer las cosas bien ahora.
Y nadie podrá detenerlo.
Continuara…
Espero les gustara.
Idea piloto que no se cuando continuare, pero sin duda que quiero escribir.
Nota:
Por si no lo saben en mi perfil tengo un link de mi página en Facebook donde publico mis actualizaciones y donde chateo con los chicos sobre temas de anime, manga, juegos, libros, series…etc por si alguno quiere comunicarse conmigo o visitar un rato para conocerme mejor.
Sayonara sexys lectores.
