Rurouni Kenshin y todos sus personajes no son míos son de Nobuhiro Watsuki, por si alguien no se había enterado todavía
Bueno, la opinión generalizada es que soy mala malísima por cortar el capitulo cuando se ponía interesante, pero aún así hay algunas preguntas:
Y-Yukiko-Y: vamos por partes: lo de Tae y Owaki fue una inspiración de última hora. El personaje de Tae me da algo de pena en el anime y el manga, porque no le sale nunca un pretendiente y como Owaki también es un poco penoso, pues creí que quedarían bien el uno con el otro, porque a fin de cuentas Enishi es como Hiko en esta historia con su ego no necesita compañía. Megumi y Sano seguirán peleándose toda la vida, aunque terminen casados y felices. Lo del violador tuve cuidado al escribirlo porque aunque sea en una pelea o un lemon, hay palabras que me niego a teclear. Por otro lado, siempre he pensado que es un castigo adecuado para un violador. Kaoru entre la carta y lo del violador cada vez está más liada porque aunque por un lado empieza a ver bien lo que hace Kenshin, una parte de ella, le dice que matar está mal por mucho que se lo merezca el tipo, por eso no sabe qué hacer. Además Battousai no se lo va a poner fácil y no tengas miedo, él la quiere y nunca jamás le haría daño por muy Battousai que sea
Hitokiri Battousai 26: te hago caso en lo de Megumi, Sano y el bebé, pero que conste que ya lo había decidido así. Owaki puede ser un poco viejo para Tae, pero ten en cuenta que Tae es mayor que Kaoru y en este fic Kaoru tiene 22, así que Tae tendrá unos 24, lo que deja una diferencia de edad de 10. De todas formas esa pareja va a funcionar porque lo que importa no es la edad sino la madurez de cada uno. Tae es muy madura para su edad, porque desde siempre ha tenido que trabajar y buscarse la vida por sí misma para ayudar a su familia, en cuanto a Owaki, es muy idealista, por eso trabaja para Katsura, ha estado siempre centrado en su trabajo que se ha olvidado de vivir la vida, más o menos como le pasaba a Kenshin
mer1: hey no protestes tanto, que actualizo una vez por semana. Kaoru vio a Kenshin otra vez en la calle, pero igual que la primera vez, creyó que estaba teniendo alucinaciones
relenav: sorry pero Aoshi no sale en este fic, pero si quieres puedes leer mi otro fic "Rayos de Primavera" está terminado y todo pero te advierto que no es un Misao/Aoshi, es que me cuesta ver esa pareja
CHERRY: puedes escribirme si quieres mi dirección es varngsupercable.es, el mismo nombre también en hotmail, pero te advierto que no suelo pasar mucho por el messenger y ahora al fic: supongo que lo dices por la diferencia de edad, pero el caso es bastante distinto. Yo veo a Aoshi frío, distante con los demás, siempre con el más absoluto y perfecto control, mi Owaki no es así, sabe ser serio cuando tiene que serlo y es muy eficaz en su trabajo pero creo que el problema de Owaki es que siente demasiado y como no está acostumbrado a tratar con personas 'normales' es un completo desastre en las relaciones porque no puede controlar esas emociones mientras que Aoshi las controla perfectamente, no muestra sus sentimientos porque no quiere. Tae y Misao si se parecen, más o menos Tae puede ser una Misao con unos años más, sigue siendo alegre y un poco alocada, pero ya ha madurado un poco y sabe bien lo que es la responsabilidad
naoko lizi kinomoto:si, bueno, sin comentarios por lo del violador, podría haber dado más detalles pero me hubiera quedado una escena demasiado gore. A esta historia le quedan por lo menos 10 capítulos y hasta que no la acabe no creo que empiece con otra, aunque últimamente me han dejado algo de Hellsing y se me está ocurriendo alguna que otra cosilla
limekamiya: sip ahora es totalmente Battousai, y él ve las cosas de otro modo, pero tranquila que con este capítulo y el siguiente se aclaran algunas cosillas
Noelia: en este fic va a haber un lemon Battousai/Kaoru pero no la va violar, no me veo capaz de escribir una violación y sobre todo porque los dos están enamorados y por muy enfadada que esté Kaoru si Battousai se pone sexy a ver quién se resiste
y como siempre gracias a todos los demás: ella-shin, sakura, misao-chan, KaOrA-FGV-16, makarena, gaby (hyatt , kaoruluz. Kaoru-dono18, megek, Angy, justary, Kazy y Yuky, Nakuru-Tashida, nattzumi, silvia, hcz por acordarse de darle al botoncito y sobre todo por no matarme cuando corté el capitulo anterior
23. Punto de inflexión
Kaoru cerró la puerta lentamente, como si con ella cerrase su propio corazón. Reunió sus fuerzas y enfrentó su mirada. Azul contra ámbar
-"¿Qué haces aquí....Battousai?"
El se volvió a recostar contra la pared, sin ninguna intención de contestar mientras examinaba a la chica. Kaoru notó cómo ignoraba su pregunta y aceptó el reto de sus ojos dorados, concentrando toda su fuerza de voluntad para mantener la intensidad de su mirada. Battousai se estaba perdiendo en las azules profundidades de sus ojos, era una sensación totalmente nueva para él. ¿Qué tenía esta chica para tener un efecto tan poderoso sobre él? Desde el día que la conoció, había visto diferentes caras de Kaoru y todas y cada una de ellas le gustaban. Era cómo si para cada parte del alma de ella, existiera una parte de su propia alma. Había empezado a enamorarse de ella cuando era una chiquilla aterrorizada y su temor no hizo más que inflamar su deseo de protegerla. Después, cuando por fin fueron una pareja, la había visto feliz, y él se había sentido maravillado porque era él quién le había proporcionado esa felicidad, se había dado cuenta que quería pasar el resto de su vida haciéndola feliz. Y ahora, ahora ella le miraba con los ojos brillantes de cólera, con la barbilla alta, sin ningún rastro de temor. El pajarillo asustado se había convertido en una mujer fuerte que se le enfrentaba sin miedo. Aquella fuerza estaba excitando a Battousai, nunca nadie le había mirado de aquella manera. Kaoru abrió la boca para hablar, harta de aquel incómodo silencio, pero justo en aquel momento Megumi y Sanosuke regresaron, interrumpiendo el duelo silencioso
-"Bueno, y ya que nos honras con tu presencia, ¿podrías explicarnos qué demonios ha pasado?" – preguntó Megumi, mientras Sanosuke asentía
-"Es una larga historia, pero ahora no tenemos tiempo. Tengo que hablar con Kaoru a solas primero, luego vendrán las explicaciones"
-"Como quieras"- dijo Sanosuke encogiéndose de hombros. Sabía que sus amigos habían aplazado una larga charla durante todo ese mes de lamentaciones y lágrimas, cuando ellos estuvieran listos ya vendría el tiempo de las explicaciones
-"¿Ya te han dado la ecografía Megumi?" – preguntó Battousai señalando a la cinta de video que estaba sobre la mesa
-"Sí, y también le han dicho el sexo del bebé, pero ella no quiere decírnoslo" – protestó Sanosuke de nuevo
-"Entonces es el momento adecuado" – comentó Battousai mientras sus ojos centelleaban divertidos
-"Adecuado ¿para qué?" – preguntó Megumi mirándole directamente, él se limitó a sonreír un momento antes de contestar
-"Tu padre te está esperando abajo, en el coche" – Megumi palideció –"quiere hablar contigo"
-"No tengo nada que hablar con él"
-"Pero yo sí" – intervino Sanosuke.
La sonrisa de Battousai se incrementó mientras veía como su amigo tomaba a una alucinada Megumi de la mano y la conducía hacia la calle. La puerta se cerró tras ellos y se escuchó el sonido del ascensor. Kaoru sintió cómo su cuerpo empezaba a temblar, de nuevo se habían quedado a solas. Un torbellino de ideas y emociones pasaron por la mente de Kaoru y se sintió incapaz de decirle ninguna de las palabras que gritaban tanto su mente como su corazón. Battousai seguía mirándola en silencio, como si fuera capaz de leer sus pensamientos.
-"Has leído mi carta"- dijo él rompiendo el incómodo silencio
-"S
-"Bien"
-"¿Bien? ¿Sólo eso? ¿Nada más?"
-"No voy a darte más explicaciones"
-"¿Entonces para qué has venido?¿Sólo para decirle a Megumi que su padre la espera?" – Battousai sonrió por un momento y después volvió a mirarla seriamente. Ella tragó saliva, estaba muy nerviosa. Le devolvió la mirada, pero esta vez no se fijó en sus ojos, sino en su cicatriz. Aquella cicatriz en forma de cruz parecía agravarse en el rostro de Battousai, y ella temió que empezara a sangrar de un momento a otro. Durante todo el tiempo que había pasado con Kenshin, casi había pasado por alto su cicatriz, parecía menos profunda e incluso podría pasar casi desapercibida. Siguió mirando su rostro y percibió una nueva herida, pequeña, cerca de su frente. Battousai pareció notar su descubrimiento y sacudió un poco la cabeza, dejando que su pelo ocultase cualquier nueva herida
- "Supongo que hubieras preferido que volviera arrastrándome y gimoteante, rogando por tu amor. Las cosas ya no son así" – algo en el interior de Kaoru se revolvió desesperado ¿las cosas ya no son así? ¿había dejado de amarla?
-"Entonces ¿por qué todo esto? La carta, los jazmines,....¿y a qué ha venido ese numerito con Enishi?"
-"Tenías que saber que seguiría protegiéndote a pesar de todo"
-"¿Protegiéndome?¿de la manos de Enishi?" – sus palabras parecieron activar un resorte secreto y los ojos de Battousai centellearon de celos
-"Eres mía. Sólo yo puedo tocarte"
-"No pertenezco a un asesino que tiene las manos manchadas de sangre"
-"Y sin embargo, no has permitido que Enishi te toque. Le has vuelto a rechazar, porque sabes que es la verdad. Eres mía y eso nunca cambiará" – una parte de Kaoru no pudo más que estar de acuerdo con él, la parte que aún buscaba su calor por las noches. Pero en aquellos momentos, Kaoru estaba muy enfadada y Battousai parecía estar divirtiéndose mucho provocándola. Le estaba haciendo daño al soltarle en la cara aquellas verdades que ella no podía negar por mucho que quisiera. Quería poder hacerle el mismo daño a él
-"Espero que la próxima vez tengan más puntería y acaben contigo. Espero que tu muerte sea tan dolorosa como lo que yo he sentido en este tiempo"
-"¿Ahora quieres verme muerto? ¿tú, que ibas a denunciar a Shissio para protegerme?"
-"Sí, así recuperaría mi vida y me alejaría por fin de todo esto. Sería perfecto"
-"¿Perfecto? Tú y yo juntos somos perfectos. Tu cuerpo bajo el mío es perfecto"– su voz había ido bajando mientras se acercaba lentamente hasta adquirir ese tono aterciopelado que tanto la enloquecía –"Estar dentro de ti es perfecto" susurró en su oído. Kaoru cerró los ojos tratando de encontrar las fuerzas para luchar contra el hechizo de su voz. Se aferró desesperada a su cólera, a su dolor, a su resentimiento, a todas las lágrimas vertidas, pero todo quedó olvidado en el mismo instante en que sintió sus labios presionando salvajemente contra los suyos. Alzó los brazos para empujarle lejos de ella y acabar con aquel beso, pero sólo consiguió que él pasara un brazo por su cintura y la atrajera más hacia él. Ella trataba de resistirse y sus vanos intentos no hacían más que excitar aún más a Battousai. Sonrió diabólicamente contra sus labios para después tantear con su lengua entre los labios de Kaoru, tratando de que ella los abriera para él, estaba sediento de la dulzura de su boca. Al ver que Kaoru se la negaba, probó algo más drástico y atrapó entre sus dientes su labio inferior mordiéndolo. Por acto reflejo, Kaoru abrió la boca por el dolor y Battousai aprovechó ese momento para por fin introducir su lengua en su boca. Kaoru gimió de indignación primero ante la invasión pero después no pudo evitar gemir de placer. Sentía sus propios labios arder, aquellos labios que presionaban contra los suyos estaban calientes, la quemaban, pero por nada del mundo quería apartarse de ellos. También sentía aquella lengua invasora en su boca, rozando la punta de sus dientes, lamiendo el interior de su boca, buscando. No pudo resistirlo más y devolvió el beso con la misma intensidad con que Battousai se lo estaba dando, sus manos se crisparon en su pecho, retorciendo la tela de su camisa y por fin, sus lenguas se encontraron en el interior de su boca, tanteándose, reconociéndose, amándose de nuevo.
Tan súbitamente cómo había empezado, el beso terminó cuando Battousai alejó su cabeza buscando aire mientras la mantenía sujeta por la cintura. Kaoru podía sentir bajo sus manos el frenético latido de su corazón y cómo al igual que ella luchaba por recuperar el aliento. De pronto sintió el sabor metálico de la sangre en su boca y la realidad volvió a ella. Más furiosa que nunca por haberse dejado vencer, levantó una mano y con toda la fuerza que tenía la descargó sobre su mejilla. Pudo sentir bajo sus dedos la rugosa piel de su cicatriz, mientras él, llevado por la fuerza del golpe, giraba la cabeza y la liberaba de su abrazo en la cintura. Fue entonces cuando las posibles consecuencias de sus actos llegaron a su cerebro ¿es que se había vuelto loca? ¡había golpeado a Battousai!
El se tomó su tiempo y con infinita calma, giró la cabeza para poder mirarla directamente. Sus ojos dorados centelleaban sabiéndose victoriosos y haciendo que ella olvidase su temor y volviera a enfurecerse. Lentamente, Battousai se lamió los labios, paladeando el exquisito sabor de la mezcla de la sangre y la boca de Kaoru
-"Parece que ahora también mis labios están manchados de sangre" – los ojos azules de Kaoru centellearon y su mano se alzó de nuevo, pero esta vez Battousai la sujetó por la muñeca –"¿Qué te hace pensar que te permitiría golpearme por segunda vez?" - Kaoru no respondió, se limitó a forcejear tratando de liberar su muñeca de aquella garra de hierro. Battousai volvió a sonreír, divertido ante su espíritu de lucha. Al cabo de unos minutos, Kaoru estaba agotada y casi sin aliento así que la soltó – "Recoge tus cosas, nos vamos de aquí" – anunció recuperando su voz neutra y alejándose de ella
-"¿Y qué te hace pensar que me iré contigo?" – protestó ella. Por toda respuesta Battousai encendió el televisor y buscó el canal de noticias. Kaoru se olvidó de respirar por un momento mientras trataba de ahogar sus lágrimas. En la pantalla, un sonriente Makoto Shissio descendía por las escalerillas de su avión privado, saludando a la multitud y rodeado por una nube de periodistas. Como pudo apartó la vista de la televisión y miró a Battousai. Esta vez no le devolvió la mirada, estaba mirando fijamente la pantalla, su cara parecía esculpida en piedra
-"Mataré a ese hombre si trata de hacerte daño de nuevo, Kaoru-dono"- dijo sin mirarla, con los ojos dorados brillando de puro odio. Kaoru asintió aunque sabía que él no podía verla y con pasos lentos se dirigió a su habitación. Tenía que recoger sus cosas.
--------------------------------
Enishi salió del apartamento dudando sobre si debía llamar a la policía o no. Era evidente que el 'fantasma' que había visto Kaoru en la calle no era otro que Himura. Eso era puro y simple acoso, además le había amenazado directamente. Quita tus manos de lo que no te pertenece o te las cortar empezó a temblar de arriba abajo con sólo recordar la expresión de su rostro cuando Himura pronunció esas palabras, pero lo que más le había asustado habían sido sus ojos. Ojos dorados brillando amenazadores. Nunca había visto unos ojos así, además ¿desde cuándo Himura tenía esos ojos? Siempre habian sido violetas, con reflejos dorados, no completamente dorados. Además, aunque siempre se habían llevado como el perro y el gato por Kaoru, nunca se habían amenazado de una manera tan directa. Sí, definitivamente Himura se había vuelto loco. Quizás eso era lo que escondía Kaoru, que su novio había perdido la razón. Sin duda se había vuelto peligroso, por eso Kaoru lo dejó. Una razón más para llamar a la policía, aunque quizás estuviera sacando las cosas de quicio. Kaoru no parecía asustada por su presencia. Más bien tenía miedo a encontrarse con él, pero podía apostar que no era a un daño físico a lo que se arriesgaba. Debe de ser duro volver a encontrarse así con la persona a la que has amado tanto, sobretodo cuando aún quedan cosas por aclarar. No, definitivamente, Kaoru no estaba en peligro físico, aunque sí emocional. El único que había estado en serio peligro había sido él. Lo mejor sería hablar con Tae, era más fácil tomar una decisión cuando oyes en voz alta tus propios pensamientos, es entonces cuando puedes ver si son inteligentes o estúpidos, y Tae siempre estaba dispuesta a escucharle. Seguro que esta vez le daría la razón de que Himura no debería estar con Kaoru.
Enishi ya estaba llegando al Akabeko, felicitándose por llegar justo cuando Tae acababa su turno. Seguro que no le importaría quedarse un poco más escuchando sus teorías en vez de volver a su casa. Se quedó de piedra cuando vio a una pareja saliendo del local muy sonriente. Era Tae junto a un desconocido, estaba lo suficientemente cerca para escuchar su conversación
-"Ahora quiero que me hagas un favor Tae" – dijo el desconocido tomando la mano de ella entre las suyas –"Voy a llevarte a casa en mi coche, y cuando estés allí, quiero que te relajes con un buen baño y mucha espuma"- ella se sonrojó un poco y rió tímidamente –" quiero que descanses de tanto trabajo. Y después, cuando estés totalmente recuperada, me sentiría muy honrado si aceptaras mi invitación a una cena en el 'Sancte Christ'" – los ojos de Tae se abrieron por la sorpresa, ¡ese era el restaurante más caro de todo Tokyo! –" y para que veas que no soy un pervertido y que mis intenciones son totalmente honorables, no me importará si traes también a tu hermana, o a tu madre o hasta a ese Enishi de carabina" – Tae volvió a reír y todavía muy sonrojada, empezó a caminar tomada de la mano de Owaki
-----------------------------------
Una enorme limusina negra, estaba aparcada en doble fila. Megumi tomó aire y maldiciendo a Sanosuke por su estúpida idea caminó hacia ella. Al acercarse, el chofer les abrió una de las puertas traseras. Volvió a maldecir mientras trataba de entrar en el coche con su enorme vientre pero al fin se sintió más o menos cómoda. Sanosuke y ella estaban sentados juntos, en el asiento de enfrente su padre les miraba con curiosidad
-"El señor Sagarra, supongo" – Sano asintió, a la hora de la verdad se había quedado sin habla
-"Sanosuke, te presento a mi padre Kogoro Katsura"
-----------------------------------
-----------------------------------
Bien, supongo que vais a querer matarme otra vez, pero he estado toda la semana en un horroroso viaje de trabajo y me quedado sin dormir para poder escribir esto. En mi defensa prometo que el próximo capítulo tardará menos
