CAPITULO 6: DISCULPAS Y MAS FIESTA
Amaneció despejado, justo como el animo de Ginny. Hermione se dio cuenta de que Cath y Mel ya se habian despertado.
- Bajamos?- preguntó Ginny, que ya estaba vestida. Hermione asintió.
Cuando estuvieron abajo, todos miraron a Ginny sonrientes.
- Ya les he contado como fue.- se excusó Mel.
- Que?! Como que lo has contado?
- No, no, solo que te perdonó.- Mel le guiñó el ojo.
- Ah.- sonrió Ginny aliviada.
- Gin, yo...-empezó Ron.- Lo siento mucho, me pasé un montón, perdoname.
Ginny sonrió.
- No puedo estar enfadada contigo para siempre, vivimos en la misma casa.
Ron sonrió agradecido.
- Eh, para celebrarlo podriamos ir hoy a alguna discoteca.- sonrió Mel.
- Por mi vale.- accedió Ron.
- Está bien. Puedo invitar a Draco, verdad?
- Claro.
Ron, como regalo por su comportamiento estupido, decidió no discutir sobre ello. Ver como su hermana y su enemigo se magreaban no le apetecía mucho.
Como siempre (Ya era rutina) se metieron en el agua a bañarse. Mientras los chicos se tiraban por el trampolín y se salpicaban entre ellos (crios ¬¬) Cath y Mel estaban en las toallas y Hermione y Ginny hablaban en un rincón de la piscina.
- Sabes que? Draco, antes de irme, me dijo que cuando yo le había mandado la carta se había puesto muy contento porque creía que era otra cosa lo que tenía que decirle.
- En serio? El que?- preguntó Hermione.
- En que...- Ginny miró a los dos bandos para asegurarse que nadie las oía.- Que yo estaba embarazada.
- Que?!!- exclamó Hermione.- Pero si teneis 15 y 16 años! Ya quiere montar una familia? Está zumbado.
- A mi me pareció muy bonito.- sonrió Ginny.
- Que digo, AMBOS estais zumbados.
- Hermione, no es para tanto. Al fin y al cabo, no era eso.
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- Josh me dijo que estabas aquí.- dijo entrando por la puerta de la habitación. Tan desordenada como siempre.
- Si, estaba leyendo un poco.- Ron levantó sus ojos azules para mirarla un instante.
- Me alegro que te disculparas con tu hermana.
- Ya, bueno, esque me pasé.
Ron siguió leyendo la revista. Hermione se hacercó a él y se recostó en la cama a su lado. Él le pasó un brazo por los hombros. Se quedaron callados, Ron leyendo y Hermione en sus pensamientos.
- Ron.- dijo pasado un rato. Su voz sonó en la habitación vacía.
- Mmm?
- Tu... alguna vez has pensado... en...ejem...ya sabes...hacerlo?
Ron tosió sorprendido y se tornó de color escarlata.
- Pues claro, Mione. Cualquier adolescente que no haya pensado en eso es que no es humano.- dijo mirando la revista como si fuera a ataladrarla.
- Yo no había pensado en eso hasta que... una amiga me dijo que lo había hecho y me entró el gusanillo.- obviamente no iba a decir que fue Ginny, porque si Ron ya estaba furioso porque su hermanita saliera con Malfoy, mas aún que se acostara con él.
- Que amiga?- preguntó el pelirojo.
- No la conoces...
- Oh.
- Y... que crees?
- Que creo de que?
- De...eso?
- Que quieres que piense?- se quejó Ron.
- No se, tu que crees?
- Que estaría bien hacerlo.
- En serio te sientes preparado?- preguntó Mione.
- Yo estoy preparado, pero no pienso forzarte a hacer nada. Tiene que salir de ti.
- Entiendo.
- Tu...estas preparada?
- Pues...no lo se.- contestó ella.
- Oh, vale. Yo no te obligo a nada.
Mione lo miró sonriente y le dio un pequeño beso en los labios. Seguidamente se recostó sobre su pecho.
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- Eh, Mel, una lechuza.- avisó Harry.
La peliroja se levanto y desató el paquete.
- Nicole, es para ti!
La chica apareció por la puerta y se llevó el paquete sin decir nada.
- Bueno, despues de cenar nos vamos de fiesta.
- Escucha, comon es que tu hermana es tan...
- Fría?
- Si...
- Pues mira, le gusta la oscuridad. En realidad no siempre ha sido así.
- De verdad?- se extrañó Cath.
- Antes erá muy pijita y simpre iba a la moda, hacía lo que todo el mundo hacía en el pueblo y pensaba como todas las chicas. Empezó a salir con un chico que tenía 15 años. Era del pueblo, no se donde vivía. El caso es que se llevaban muchisima edad. Ella tenía 8 o 9 años, creo. Pero se comportaba como una chica de 16. Ademas, siempre ha aparentado mas de lo que tiene. Mis padres odiaban que saliera con él, incluso se lo prohibieron. Pero fue inutil. Bueno, pues ese es el error de salir con alguien de tanta diferencia de edad; ellos tienen otras necesidades. El caso esque un dia él intentó... ya sabeis. Y mi hermana, con 8 años, no estaba preparada, obviamente. Y cuando ella le dijo que no, se enfadó y cortó. Mi hermana se pasó dos dias seguidos encerrada en su habitación, con el pestillo hechado. No salió ni para comer. Creo que solo salía por las noches al baño. Fue un momento muy critico en mi familia, sabeis? Mis padres estaban desesperados, y yo tambien. Creiamos que iba a hacer una locura o algo. Y, porfin, al tercer dia, salió. Muy palida y demacrada, y ya no llevaba esos pantalones ajustados ni esas falditas. Resulta que las había quemado. Nadie sabe como se recuperó. Desde entonces empezó a vestirse así y a ser ella misma, sin depender de lo que los demás creyeran y dijeran.
- Vaya...-murmuró asombrada Ginny.
- Pobre, con 8 años!- exclamó Josh.
- Si... eh, que se nos hace tarde! Mas vale que vayamos a cambiarnos ya!
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El local estaba lleno. Draco apareció y se llevó a Ginny a un rincón apartado bajo la mirada acusadora de Ron. Hermione, con tal de que se olvidara un rato de Ginny, lo arrastró a la pista de baile.
- Ron.
- Si?
- He estado pensando en lo de antes y creo que es muy bonito de tu parte esperar a que yo esté preparada.- le susurró al oído, para luego darle un tierno beso en los labios.
Él le sonrió recomfortablemente.
- Creo que voy al servicio, si lo encuentro.- les gritó Harry a los demás. Cath le hizo una señal de que lo había entendido.
Harry empezó a andar intentando no pisar a nadie y luchando contra la masa de gente que se dirigia hacia la pista de baile.
- Voy al servicio, ahora vengo.- oyó que decía un muchacho de su misma edad o un poco menos a su novia. Se despidió con un beso.
"Bien, lo seguiré, que parece saber por donde va."
Intentó no perderle de vista, pese a que les separaban muchas personas. Vio como se metía en una puerta. Intentó llegar hasta allí y, después de pisar a un par de personas y chafar a otras cinco, llegó y entró igual que ese muchacho. Porfin.
Pero se sorprendió al ver en que, aparentemente, ese no era el labavo de chicos, sino de chicas. Una muchacha de su misma edad se estaba pintando los labios frente al espejo. Lo miró de reojo.
- P-perdón, me he equivocado.- se disculpó.
- Si crees que este es el labavo de chicas, no, es el de hombres. Pero había mucha cola en el de mujeres. Y yo soy muy liberal.- le guiñó un ojo.
Era una chica igual de alta que Harry, porlomenos a simple vista, porque despues Harry se fijó que devia ser mas baja, porque en esos momentos llevaba unas plataformas impresionantes. Llevaba una faldita negra de cuero muy corta y una camisa blanca semitransparente. Tenía el pelo castaño ya muy largo, recogido en dos colas bajas. Ojos verdes y grandes con mucho rimel.
- Rachel.- dijo ella, alargandole la mano a Harry. Él la estrechó.
- Harry.- dijo. – Harry Potter.
Ella no hizo ningun gesto de sorpresa, así que dedujo que era muggle.
- Bueno, encantada, pero ahora me tengo que ir.
Y desapareció por la puerta, dejando a Harry asombrado. Que clase de persona se presenta y se va?
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- Llevamos horas bailando.- se quejó Ron.- Quiero un trago.
- Como quieras.- bufó Mione.
Se sentaron en la barra. Hermione se quedó mirando el local. De repente aparecieron Cath y Josh discutiendo.
- Estabas flirteando con esas!- le recriminó Cath señalando un grupo de chicas a lo lejos.
- Yo no hacía nada! Eres una paranoica!
-Oh, si, ya!
- Fuiste tu la que dijiste de ser "Liberales".- dijo Josh.- No se de que te quejas!
- Josh, hazme un favor, muerete!
Cath, frustrada, se alejó de allí. Josh hizo lo mismo.
- Creo que se han enfadado.- manifestó Hermione.
A su lado, Ron rio. Genial, estaba borracho.
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Entró en la biblioteca. No podia quedarse en casa de Mel ese dia; Melanie y Ginny habian quedado con Angel y Draco respectivamente, Ron gritando todo el dia sobre su jaqueca, Josh y Cath de morros... Así que se había ido a la biblioteca grandiosa a leer junto a Andy y Harry, que habian accedido a acompañarla, encantados de salir de esa jaula.
- Hos parece si nos sentamos aquí, en la seccion muggle? Queria leer un libro que me recomendaron.- dijo Hermione. Andy y Harry no tuvieron incomveniente.
Mientras el primero iba a mirar algun libro para leer, Harry inspeccionó la biblioteca. Estaba casi vacía, a escepción de dos chicas que leían riendose, un muchacho de gafas, dos mujeres mayores y una chica de pelo castaño y dos colas... castaño y dos colas?
Harry dio un salto al ver quien era esa muchacha. Si, estaba seguro, era la misma con la que se había encontrado en el labavo. Claramente estaba diferente. Llevaba unos tejanos sencillos y una simple camiseta amarilla. Y ni rastro de maquillaje en su cara.
Harry se acercó a ella por detrás.
- Creía que a ti te iba mas el rollo ese de los chicos.
Ella se giró sorprendida, lo miró y pareció reconocerlo.
-Y me gustan los chicos... casi tanto como los libros.- sonrió.- Harry, no? Que casualidad... o talvez me estas siguiendo?
-He venido con unos amigos.- dijo señalando a Ady y a Mione, que estaban una mesa mas adelante.
- Carai, tu novia y el amante de tu novia?
- Casi. Mi mejor amiga y un amigo.
- Tu tambien devoras los libros?- preguntó con una chispa en los ojos.
- Pues la verdad esque no, pero a mis amigos les encantan y les he venido a acompañar.
- Oh, vaya, que buen amigo. Que pena que no te gusten los libros, no puedo salir con un chico que no le gusten los libros.
- Salir?- Harry alzó las cejas.
- Claro, no me pedirás para salir?
- Luego no digas que te obligué.
-Hecho.-sonrió ella.