Capitulo 1.
- Eres un desgraciado Malfoy.
Draco rio, al oír el suave masculleo de la auror. Sonrio maliciosamente. Se encontraban frente a frente, aquella mirada que oscilaba el frio acero, era lo que mas daño hacia en el mundo a Hermione, y eso Draco lo sabia. Adoraba ver el temor mezclado con ira y rabia en aquellas angelicales y destruidas facciones.
- Nos pudriremos en el Infierno Granger -rio con fuerza- Yo por desgraciado y tu por sangre sucia -la rodeo con la sutileza que solo poseia aquellos que se hacian nombrar Slytherins, los hijos devotos de Salazar- Pero ambos moriremos, y quizas nos encontraremos. . . -soplo en su nuca, disfrutando del escalofrio que nacio desde el mas profundo rincon del ser de la joven auror- Esto es divertido Granger. . . somos muy pocos, pero importantes. Mi Lord te queria viva -asancho su enfermiza sonrisa- Y. . . ¿Quien soy yo, para negarle ese honor? -rozo con la llema de sus dedos la maraña sin forma que eran los cabellos de Hermione.
Draco meneo la cabeza a espaldas de la Gryffindor, intentando huir de aquel olor a lavanda que inundaba sus fosas nasales, enrredandose en sus pulmones, apreto los puños convertidos en blanco hueso, previamente introducidos en su tunica -nunca delataria su nerviosismo o ira-. Pero tenerla frente a frente, lo enervaba, envenenaba cada gota de sangre que corria vertiginosamente por sus venas.
- Deberes de premio anual, Granger -la sugestiva voz de Draco, la envolvio en medio de aquel ambiente festivo, que era el baile de graduación.- ¿Bailas sangre sucia? -contra todo pronostico, realizo una reverencia magestuosa, sin embargo, sus calculadores ojos plata, jamas se separaron, de los chocolate de Hermione.
- ¿Desde cuando te han importado lo que te ordenen Malfoy? -contesto a una pregunta por otra, astuta, penso Draco- Siempre pense que los Malfoy, se creian mucho mas que los demas. Oh vaya, creo que me he equivocado contigo -se limpio una lagrima imaginaria- Que decepcion. . .
Draco ni siquiera se tomo la molestia de responder, tomo la cintura de la Gryffindor y la pego a él. Muslo contra cadera, pecho contra senos. La sensacion de ahogamiento se hacia mas grande en la respiracion de Hermione. Draco sabia que su presencia la ponia nerviosa, y el viejo ordeno que los premios anuales, abrieran el baile con un bello vals. Una mano sujetando la pequeña de Hermione, piel contra piel, se separaron ligeramente, pero Draco poso su mano en la fina cintura de Hermione.
Comenzo la pieza, el hipnotizante ritmo de un-dos-tres, un-dos-tres, era seguido sin dificultad por ambos estudiantes que estaban a un pie de la graduacion.
- Solo es un baile Granger -le murmuro conspirador- No te emociones demasiado. . . -se burlo con crueldad.
La melodia cambio a un violento tango. Ahora el baile se trataba de una guerra de voluntades. Sus miradas clavadas en la otra, sosteniendo una cruda batalla.
- ¿Te atreves a compararte conmigo Granger? -pregunto al tiempo que su mano recorria ampliamente la pierna de Hermione, mientras este la inclinaba. Su piel era suave terciopelo, suave, muy suave. . .
Hermione se intoxico ante aquella caricia, su corazon latio frenetico.
- ¿Sabes que el tango es el baile del odio y la pasion? -pregunto a la vez que la incorporaba. Sus pasos graciles y violentos apavullaban a la muchacha, que parecia una marioneta en sus brazos, demasiado violento, demasiado bruto, demasiado sensual.
La carga erotica que traia aquellos pasos de baile, en donde sentia cada celula de su cuerpo, gritar por mas contacto con la palida piel de Draco, la estaba torturando, estaba tocando el infierno con las llemas de sus dedos. Una gota de sudor, recorrio la frente de Hermione, los calculadores ojos de su acompañante siguieron el recorrido de esa gota. Deslizando por su pomulo, por su menton, hasta bajar por su cuello y esconderse entre los tiernos senos que escondian aquel sutil pero hipnotizador escote. Draco se fijo en la cadena que prendia del cuello de Hermione, de fino oro, con la inicial de su nombre, cubierta con pequeños rubíes, una joya de artesania -reconocio Draco- y muy Gryffindor.
- Ya ha terminado la cancion Malfoy -gruño Ronald Weasley, acudiendo a la pareja.
- Tranquilo pobreton -dibujo una mueca de malicia, mirando al pelirrojo, como al insecto que queria aplastar- Te entrego a tu sangre sangre sucia. . . ahhhh. . . intacta -la empujo lejos de él, y esta fue capturada por los brazos de su novio.
- Deja de llamar a Hermione sangre sucia, maldito huron -chirrio los dientes el varon menor de los Weasley.
- No le hagas caso Ron, es una maldita marioneta del Lord, es para lo unico que sirve, 1º. de su padre y ahora de su adorado señor -lo miro con burla- Siempre en el bando perdedor Malfoy, jamas aprenderas a eleguir por tu propio bien. . .
- Que tiernos, entregar sus vidas al huerfanito Potter -lanzo una fria carcajada.
Los dos Leones miraron con asco al Slytherin y se alejaron de la mano. Draco agasajando cualquier arruga de su fina tunica de seda azul noche, fue hacia sus compañeros. Con el pensamiento que ese momento de baile, habia sido el mas cercano en aquellos siete años, entre ellos.
La muchacha castaña, intentando hacer que Ron bailara correctamente, penso exactamente igual. . .
- Esa noche fue la ultima que pasamos en Hogwarts, y la ultima que nos vimos, hasta hoy -concedio Hermione con voz algo temblorosa.
Una sonrisa maligna curvo los labios del rubio platino.
- ¿Me hechaste de menos Granger? Yo a ti si -rio maliciosamente- ¿Sabes los tres años que he pasado, deseando insultarte de nuevo? ahhh es que soys tan faciles de provocar. . .pequeña -su siniestra sonrisa se antojo aun mas tenebrosa, su rostro era bañado por una mueca de infinita maldad- Ahhh, Gryffindor y sangre sucia, siempre me sorprendio tu capacidad de pensar. . .
- Estamos en igualdad de condiciones. Yo mantengo mi sorpresa, desde el momento que me cruce contigo, la capacidad de utilizar el poco cerebro que tienes en esta barbaridad, El Lord. . .
- ¡No me interrumpas! -rugio amenazadoramente.
Hermione sintio que sus fortalezas se quebraban.
- ¡Entiendo perra muglle, NOSOTROS SOMOS el futuro!
Los labios de Hermione temblaron.
- Erraron al demoninarte la bruja mas inteligente de nuestra promocion -sus ojos dos estrechas franjas brillaron iracundas.- Pero quizas alla una salida para tí despues de todo. . .
- No pienso. . .
- Calla Granger, calla. . . -su voz se suavizo, pero eso lo convirtio en un susurro escalofriante- Quizás encuentres alguna sorpresa después de todo. . . -asancho su sonrisa.
