¡Hola! Este es mi primer fic, espero que les guste, está muy padre. Tomo de referencia la continuación de la segunda película, pero sí que cambiaron mucho los personajes. En este fic van a encontrar también magia, pues más adelante van a aparecer las cartas oscuras, que son las mismas que las cartas Clow, pero negativas, y también por supuesto hay escenas S+S y E+T, y van a aparecer nuevos personajes. Ya no les cuento más, mejor léanlo.

*Disclaimer* Card Captor Sakura no es mío, pertenece a las Clamp. Supongo que eso ya lo saben, jaja.

"La fuerza de los sentimientos"

Capítulo 1: Recuerdos

Habían pasado 5 años desde que Sakura y Shaoran se confesaron su amor. Fueron novios durante 1 año, pero hubo una discusión entre ellos y todo se acabó en odio. Shaoran tenía que regresar a Hong Kong nuevamente, pero Sakura no quería, porque tenía miedo de no volverlo a ver. Shaoran trató de convencerla de que eso no era cierto, pero ella no le creyó, y él dijo que porque nunca confiaba en él, y le dijo que hasta aquí llegaban. A Sakura se le destrozó el corazón, porque nunca se imaginó que Shaoran la iba a cortar por eso; ella quería que se quedara porque lo amaba y si se regresaba a Hong Kong, ya no lo iba a ver por mucho tiempo. Era normal su reacción, pero Shaoran no lo comprendió, y la cortó como si nunca le hubiera importado, como si su relación hubiera sido sólo un juego. Shaoran se regresó a su país natal, sin siquiera despedirse de ella. Mientras estaba en el avión, se puso a pensar en el porqué Sakura nunca lo entendió. Él la amaba, pero también tenía cosas que hacer, y ella no quería que se despegara de ella, era muy sobreprotectora. A Shaoran no le gustaba eso, pero lo tenía que soportar, pues si la quería mucho. Pero sabía que no podía aguantarlo por mucho tiempo, y lo que menos le gustaba era que Sakura nunca confió en él lo suficiente. Shaoran le juraba que sólo iba a comprar unas cosas, pero ella no le creía, pensaba que se iba a ir a otro lado, incluso hasta dejarla. Shaoran aún no entendía el porqué Sakura era así, jamás se lo imaginó. Es por eso que Shaoran tenía que cortarla. Era obvio que su relación jamás iba a prosperar de esta manera, hacía falta la confianza, la comunicación. Ni siquiera pudieron tener una amistad, nada. Su noviazgo sólo quedó como un recuerdo.

-Sakura, Sakura, ¡despierta!-

-¿Qué pasa?-

-Sakura, te quedaste dormida en la clase, pero ya se terminó-

-Ay no, ni me di cuenta, de repente cerré los ojos y empecé a soñar-

-Supongo que el mismo sueño de siempre-

-Así es Tomoyo, aún no puedo olvidarlo-

-Vamos Sakura, tienes que superarlo, esa relación no podía continuar así-

-Es cierto, Shaoran nunca me comprendió, sólo le importaba él mismo-

-¿Ves? Entonces ya olvídalo, puedes encontrar a alguien que si te comprenda y te acepte tal como eres-

Sakura y Tomoyo salen del salón. Ambas ya estaban en preparatoria, y tenían 17 años. Estaban en la misma escuela Tomoeda, y siguen siendo las mejores amigas. Tomoyo aún no creía el rompimiento y la pelea entre Sakura y Shaoran, pues se veía que se querían mucho, que eran la pareja perfecta. No creía que Shaoran haya sido así con Sakura, pero sabía que Sakura también había tenido sus defectos. A pesar de que Sakura diga que ya no lo quiere y que se la pase recordándole todo lo que le hizo, sabe que en el fondo Sakura aún siente algo por él. En cuanto a la vida amorosa de Tomoyo, sigue contactándose por correo electrónico con Eriol, que aún sigue en Inglaterra. Sólo se mandan saludos y que han hecho, pero ella piensa que siente algo más que sólo eso. Le gustaría verlo otra vez, para aclarar sus sentimientos.

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Shaoran está en Hong Kong, practicando artes marciales. Ya había salido de clases, pero siempre cuando llega a su casa después de la escuela se dedica a entrenar duro, tal como le ordenan los ancianos del clan Li. Esa fue una razón por la cual se regresó, tenía que seguir entrenando para algún día ocupar el liderazgo del clan. Desde que cortó con Sakura, se ha dedicado por completo al entrenamiento, no piensa en otra cosa, mucho menos en el amor. Le dolió mucho el rompimiento con Sakura, y cuando entrena, no deja de pensar en lo que le hizo, en sus defectos. Ya no pensaba en los bellos recuerdos, al parecer esos recuerdos estaban ya enterrados en el lugar más profundo de las mentes de ambos. De repente, sin tocar la puerta, entra una joven de pelo negro y con dos coletas, y traía una toalla y una cantimplora.

-Shaoran, te traje un poco de agua y una toalla para que te seques el sudor-

-Gracias, Meiling, pero no era necesario, yo pude haber ido por eso-

-¿Porqué nunca me dejas hacer nada? Siempre dices que tú lo puedes hacer, yo sólo lo hago por que me importas Shaoran-

-Yo no lo hago por mal, al contrario, no quiero que te molestes en cuidarme-

-Está bien, ya no voy a traerte nada ni decirte nada, pero de veras que desde que cortaste con Kinomoto andas de muy mal humor-

-No me la recuerdes, sabes bien lo que me hizo y no quiero recordarla-

-Shaoran, eres mi primo consentido, y te conozco tan bien, que estoy segura que aún no la has olvidado-

-Es cierto, lo que aún no olvido es todo lo malo que hizo-

-No Shaoran, sabes perfectamente lo que estoy hablando-

-Meiling, necesito concentrarme en el entrenamiento, mejor hablamos luego-

-Como siempre, al hablar de Kinomoto me corres-

-Luego hablamos-

-Está bien, ya me voy, que carácter-

Meiling se va, pero piensa que está segura que Shaoran aún quiere a Sakura, aunque lo niegue. Ella tampoco puede creer que hayan cortado, después de todo lo que hizo por juntarlos, y mucho menos que Sakura haya sido así con Shaoran según lo que le contó él, pero sólo ruega que todo se resuelva y que algún día vuelvan, pues a pesar de todo lo que sucedió, sabe que aún se aman, y se merecen otra oportunidad, y también porque a ver si Shaoran ya cambia de actitud y vuelve a ser el chico que era antes cuando se enamoró de Sakura. Shaoran sigue entrenando, cuando en ese momento se para, se agarra el cabello y lo hace para atrás, agarra la toalla y se seca el sudor, y dice en un susurro:

-Sakura.-

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Eriol está en Inglaterra, también estudiando la preparatoria, pero con maestros particulares. No quería asistir a una escuela, pues sentía que eso no era para él. Prefería estar en su casa, practicando su magia y estar al tanto de las cartas Sakura, y por supuesto, de su dueña. Tenía que ver que todo estuviera a la normalidad, que no ocurriera otro suceso extraño, como el de la carta The Nothing. También sabía que Sakura y Shaoran se habían separado, pues podía sentir en sus auras cierto odio mutuo. Pero también sentía algo cálido en sus auras, era un sentimiento muy profundo. Eriol sospechaba de que se trataba ese sentimiento, pero por ahora no le interesaba mucho averiguarlo. Eriol pensaba en todo esto, cuando alguien toca la puerta.

-Eriol, ¿estás ocupado?-

-No, puedes pasar-

-Eriol, te traje un poco de té-

-Muchas gracias, Nakuru-

-No hay de que. Veo que sigues pensado en tu descendiente y en la maestra de las cartas-

-Qué sorpresa que hayas adivinado-

-Es que puedo leer tus pensamientos, después de todo tú me creaste-

-Tienes razón, pero no puedes adivinarlos todos-

-¿A qué te refieres?-

-Quiero decir que también pensaba en que pronto Sakura y Li tendrán que pelear otra vez con el nuevo enemigo.-

N. de la A: ¿Qué les pareció? Es una pena que Sakura y Shaoran se hayan peleado. Hacían una pareja muy bonita, pero quiero ponerle algo de emoción a este fic, tal vez se vuelvan a encontrar. Ojalá Tomoyo vea a Eriol para que se de cuenta de lo que siente, y que Eriol a ver si piensa en Tomoyo!!! Sólo dijo que pensaba en Sakura y Shaoran, pobre Tomoyo. Y ¿qué habrá querido decir Eriol con eso de que ellos van a pelear otra vez contra un nuevo enemigo? Si quieren saberlo pues ¡dejen reviews! Se los agradeceré mucho. Es enserio, en este fic hay mucha emoción, así que por fa leánlo y si dejan muchos reviews, escribiré el siguiente capítulo. Gracias!!

Bluegirl88