Hola! nn toy feliz porque es un takari.. aunque la verdad no se.. pero como sea.. aviso que termina de la forma que termina porque hay muchas posibilidades de que haga una continuación.. y si no la hago se la imaginan ustedes dependiendo de sus gustos.. bueno.. los personajes no son míos y lean!

Errores del pasado

Un hombre rubio miraba apesumbrado por la ventana, mientras se reprendía mentalmente por no haberse dado cuenta antes. Un día no había problemas. Tenía su mejor amiga a su lado, pero al siguiente un sentimiento se despertó sin que lo supiera hasta ese maldito día. Ese maldito día en el que ella se casaría. Ese día en el que se entregaría a otro sin saber de los sentimientos de su amigo. En solo 3 horas más la perdería por completo. Una vaga lagrima bajó por su mejilla. Por su mente pasaban imágenes que imaginaba. Podía ver como su luz se apagaba, como su esperanza era aplastada por una oscuridad que comenzaba a invadir su corazón. Unas suaves palabras salieron de sus labios que apenas llegaron a sus propios oídos. El susurro fue seguido por un brusco movimiento de su cabeza.

-Takeru? Qué haces aquí? ya deberías estar en la iglesia... dijiste que ayudarías con los preparativos.. Hikari está muy preocupada... por eso llamó... yo te creía allá...

-Yamato.. tu siempre lo has sabido, verdad?

-de qué..?

-tu lo sabes..

-si.. entiendo.. por qué nunca se lo dijiste?

-temía que me dijera que no.. pero ahora..

-te arrepientes... no dejes que esto pase.. si no se lo dices ahora vas a cargar con el peso de eso toda tu vida... pero si se lo dices tu corazón va a estar más tranquilo.. créeme... lo sé por experiencia...

-lo dices por lo que pasó con Mimi?

El mayor de los rubios se sonrió.

-si..

-ahora que lo pienso.. lo superaste muy rápido... cómo..?

-digamos que tuvimos una larga charla con Mimi y me di cuenta de muchas otras cosas...

-Sora, no?

-tú qué sabes!?

-bueno.. dices que debo decírselo.. pero no es tan fácil, sabes? En unas horas se va a casar...

-olvídate del matrimonio.. solo concéntrate en decírselo..

-y si me rechaza? Lo cual sería lo más obvio ya que está a punto de casarse..

-te sentirás mal al principio.. pero te aseguro que a la larga estarás feliz de habérselo dicho..

El rubio que había estado sentado en la ventana se levantó y se arregló la corbata para luego abrazar al mayor y salir por la puerta en dirección a la iglesia. El segundo hombre rubio se dio media vuelta para encontrarse cara a cara con una pelirroja que lo asustó.

-ya señor saltón.. vámonos pronto para ayudar un poco a Hikari a que Taichi no mate a Daisuke..

-tía Sora..-comentó Yamato imitando la voz de un niño- que hacen en la noche los que se casan?

-¬¬ ya vámonos...

Takeru miraba como un zombi a su alrededor. Como la iglesia quedaba cerca se fue caminando, pero aún dudaba si debía decirle o no. A cada paso que daba su corazón latía más fuerte. Y cada latido de su corazón era una daga enterrándosele en la espalda. "Ojalá Devimon me hubiera matado para así no tener que hacer todo esto..". Su nerviosismo aumentó al ver lo hermosa que se veía su querida amiga de siempre. Por alguna razón ella estaba allí y no en su casa. Seguramente abrían problemas con Dai ya que Ken estaba con ella mirándola seriamente. Este último lo miró por unos segundos con curiosidad hasta que pronto lo llamó:

-hey! Takeru!

Al escuchar ese nombre la castaña reaccionó sorprendida. Ken seguía con su mirada seria que se volvió a posar en Hikari. Sin decir nada se fue a juntar con Miyako e Iori. Takeru miró el cielo que comenzaba a verse estrellado para ver el espejo de su propia mirada. Esa mirada triste con la que había vagado por el mundo ese día. Esa misma mirada con la que se encontraba en el espejo de su baño cada vez que algo iba mal para él. Esa misma mirada que veía en la mujer parada en frente de él.

-llegas tarde... Takeru..-las palabras que salieron de sus labios estaban llenas de dolor. Fueron lentas y suaves.

-me pasé la tarde pensando.. y me di cuenta de que debo hacer lo que no hice hace mucho..

-no sé si este momento..

-no.. déjame hablar.. por favor... Hikari... eres la luz que nos ilumina a todos nosotros.. algunos dicen que reparto la esperanza al resto de la gente.. la luz y la esperanza siempre van juntos.. quizás es por eso.. quizás es porque estoy demasiado acostumbrado a siempre estar junto a ti... siempre contigo.. siempre con tu cariño y tu dulzura.. sin que me diera cuenta empecé a sentir algo más que amistad... y me lo he guardado por muchos años.. pero es momento que lo sepas.. te amo... no sabes cuanto me arrepiento de no habértelo dicho antes.. pero las cosas son así.. no se puede cambiar el pasado.. pero se puede hacer algo por el futuro.. entiendo que te vayas a casar con Daisuke... y no te estoy obligando a tener compasión por mi y decir que lo sientes que ahora estás con él.. y que quieres que sigamos siendo amigos... debes saber que siempre contarás conmigo para lo que sea.. y nunca te abandonaré...

-Takeru yo.. la verdad.. no sé que decir...

-no tienes que decir nada.. solo vuelve a lo que tengas que hacer.. sé que no tengo oportunidad... ya elegiste a Daisuke...

el hombre rubio pasó al lado de la confundida mujer y entró en la iglesia como si nada, solo que con un semblante muy serio. Hikari quedó allí parada sin decir nada, con lágrimas recorriendo su sonrosado rostro. Unos vagos murmullos fueron escuchados por su propio corazón y nadie más.

-Takeru.. la verdad.. yo te amo a ti.. solo acepté a Daisuke porque creía que solo me creías una amiga y no sabía que tu de verdad me querías de esta forma... aunque ahora que pasó el tiempo.. también empiezo a sentir algo por Dai...

Cuando la ceremonia dio comienzo y Hikari entró en la iglesia del brazo de su papá, el rubio Takaishi se estremeció al ver la belleza de su amada que reflejaba la tristeza que había en su corazón. Las palabras del cura eran como bellos poemas a los oídos de todas las mujeres y para los hombres eran un montón de palabras juntas dichas por el gordito pelado vestido de mujer, pero Takeru era el único que no pensaba en eso. Su corazón y sus pensamientos estaban allí adelante en el altar junto con su querida Hikari.

-Hikari Kazuha Yagami Hyûga, acepta usted por esposo a Daisuke Heiji Motomiya Uzumaki en la pobreza y en la riqueza hasta que la muerte los separe?

Hikari sintió que su corazón quería salírsele por la garganta pero aún así respondió:

-si, acepto

Estorbos: les gustó? Yo espero.. si les gustó.. manden un review dándome ánimos para hacer la continuación.. y si no.. mándenme reviews echándome muchas focas (insultos, alegatos) y díganme que no sirvo como escritora y que debería darme vergüenza el publicar fics como este... la cosa es que dejen reviews.. por cierto.. le hago continuación o no?

HaRu