CAPITULO 1: "Una triste tarde de lluvia y una molesta gripa"
La tarde era fria y lluviosa, las calles de la pequeña prefectura de Nerima se encontraban desiertas. Muchos locatarios resignados cerraban sus negocios, la clientela era bajisima y era una tarde perfecta para estar en casa.
Pero no para Ukio Kounji.
Sentada cerca de la barra esperaba paciente la llegada de algun cliente, habian pasado mas de tres horas y la calle lucia vacia, el frio no ayudaba mucho pero ella no se iba a rendir. Se levantò y por centesima vez miro hacia la calle.
-¿Dondé esta todo mundo? -Regreso a su asiento y se cruzo de brazos exasperada- Que dia mas horrible.
Se llevo una mano a la frente solo para comprobar algo que venia sintiendo desde hacia rato: Tenia fiebre, era algo leve pero empezaba a sentirse molesto. Pensó entonces en un te que le habian dado para curar resfriados, entonces al volverse a levantar sintio un mareo, no pudo evitar el irse de espaldas, de hecho hubiese caido de no ser por que alguien la detuvo en ese instante, fueron unos brazos masculinos, fuertes y reconfortantes,habia algo familiar en ellos, ella se sintio protegida y dejo que la depositaran suavemente en el suelo.
-Ranma... -Susurró ella quedamente.
-¿Dijiste algo Ukio-chan?
Ela abrió los ojos y descubrio sorprendida que su salvador era en realidad Ryoga Hibiki, se ruborizo sin querer, lo habia sentido tan cerca...
-¡Ryoga-kun! -Exclamo ella sin poder ocultar su turbacion- ¡Vaya que sorpresa! ¿Comó... Comó...
-Pasaba por aqui, por accidente como siempre -Ryoga sonrio con esa naturalidad suya-te vi tambalearte y corri para ayudarte ¿Estas bien?
-Si claro -respondio ella levantandose, sentia que el cuerpo le ardia pero supo disimular su malestar- Mucho trabajo corazon tu sabes ¿Vas a casa de Ran-chan?
-Errr.. Mi sombrilla se rompio -Ryoga se veia preocupado- Y traigo muchas cosas, tu sabes no me gustaria llegar... -Tosio molesto- Es decir...
-P-chan seria todo un espectaculo cargando tantas cosas- Ukio sonrio- ¿que te parece si te quedas aqui un rato corazon? y de paso pruebas mi nueva salsa
-Gracias ukio -Ryoga se sonrojo- Pero la verdad no traigo mucho dinero y...
-¡Vamos cariño! -Le interrumpio dandole una palmada en la cabeza- Si no tienes dinero puedes ayudarme a limpiar el lugar y cerrar, para eso estan los amigos ¿No?
Ryoga cenò y acompaño a Ukyo, lavó los trastes y al final cerro el pequeño local, en todo ese tiempo la lluvia continuaba pertinaz y molesta.
-No hay facha de que se desaparezca -Ryoga suspiro resignado- Tendre que pasar otra noche en mi tienda de campaña. -Tomo su mochila y vio su paraguas que traia un gran boquete.
Ukyo habia permanecido en silencio, le empezaba a doler la cabeza y de tanto en tanto se estremecia por un terrible frio que sentia, vio a Ryoga y no pudo evitar el sentir lastima ¿Dormir en una tienda de campaña con este clima? Y si se llegaba a mojar seria un cerdito sin un lugar donde dormir.
-Tengo un futon extra Ryoga -Ukyo Hizo un esfuerzo para aparentar normalidad- Quedate, ya mañana podras irte con calma.
-Pero ¿contigo? -Ryoga se puso rojo como un tomate
-Vamos cariño yo se que eres un caballero y ademas -La chica le mostro la enorme pala que usaba con arma- si te veo hacer algo raro te dare tan fuerte que estaras en casa de Ran-chan en un zas.
Ryoga lo pensó un momento. Hacia frio y lluvia, cualquier cosa mejor que la calle, ademas el respetaba mucho a Ukyo y ella confiaba en el ¿Porque no?
-Te advierto que a veces ronco mucho.
-Te pondre un tapon azuquitar -Sonrio ella haciendo un esfuerzo- sube y deja tus cosas mientras me cambio.
