Seto Wheeler

N/a: JOPE TÍOS qu aquí va la SÉPTIMA! Ok, primero lo primero....

KUSO! LO SIENTO! LO SIENTO LO SIENTO LO SIENTO LO SIENTO L-O S-I-E-N-T-O

Ahí esta, las razones de mi INCREÍBLE retraso fueron 3

1) conflicto legal de paternidad no aclarecida, traducción: el perro de mi padre vino y decidio autoproclamarse tutor legal, siendo que yo no lo tolero.(ya que hablo sobre eso, voy a aprovechar el tan bello motivo para putearlo, MALDITO CABRON DE LA MIERDA QUE TE PARIO! DEJAME DE JODER LAS PELOTAS, SERE TU MALDITA HIJA,PERO NO SOY TU JODIDA PROPIEDAD!) ( es una desgracia que no lea esto)(mierda ya me enoje )

2) increíble racha de mala suerte con todo lo que sea escrito; joder no podia ni escribir dos palabras sin estar enojada por que sonaba estupido!

3) simple y llana flojera.

Ok, como se que no son argumentos valederos, me pueden crucificar/putear/escupir/violar y demas torturas cuando quieran PERO RECUERDEN que si lo hacen, AHÍ si que no tendran el fic

(que pendeja no? XD)

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"ya decidiste?" Seto pregunto algo fastidiado. Mokuba estaba viendo a todos los sabores con la misma cara de ansia.

"todavía no, hermano mayor.. uhm... es que me gustan todos!"

"entonces pon todos y vámonos.." replico viendo alrededor.

"seto, son 32 sabores diferentes.." le respondió como si fuera lo mas obvio del mundo

"elige uno, entonces.."

La heladería era un lugar inmenso, lleno de personas y de jóvenes que se paraban a comer algo rápido y frío. En verano, la cosa se ponía peor, mas y mas gente venía, haciendo que el paso por ahí fuese toda una travesía para no tener que hacer caer a meseras, a transeúntes y no tropezar con las sillas.

Por desgracia, al ser también un lugar tan concurrido, las personas los veían con atención morbosa, chismorreando al aire. y eso le estaba molestando al máximo, la atención era lo que menos quería en estos momentos.

"elegiré uno si TU comes un helado al menos.." replico el menor, después de ver con escrutinio la mirada de su hermano.

"no Mokuba, no insistas..." dijo con algo de tedio. En estos momentos, por mas tonto que sonase, estaba con pocas ganas de comer un helado. Cosa que hubiera sido completamente irreal en su mundo. El amaba las cosas frías y dulces, pero ahora era como si todos sus gustos se hubieran ido al tacho.

"pero hermano! Lo único que comes es café! Y mas café! De hecho, sí fuera por ti solo habría café en las tiendas." Reprocho volteando los ojos al techo, tratando de entender la psicología de su hermano " además que es aburrido comer solo, o al menos inténtalo! Por mi.. por tu querido hermanito menor, el único que tienes.."

con los ojitos mas tiernos que pudo sacar, miro a Seto. Era obvio quien iba a ganar, su hermano jamás se podía resistir a algo tan sencillamente tierno. Y como el mayor de los hermanos Kaiba, tenia una cierta debilidad con el menor, era aun mas complaciente con Mokuba.

"a veces me sorprende como puedes manipular tan fácilmente a alguien." Dijo como sola respuesta, mientras se sentaba en la silla mas alejada de las personas.

" lo aprendí del maestro.." respondió con una sonrisa resplandeciente y en un tono burlón.

Esperando a que llegara la orden, ambos hermanos veían el centro comercial, uno con avidez y curiosidad, y el otro con lo mismo, tan solo que menos obvio. El centro comercial era un lugar fantástico para alguien que tuviese mucho dinero, y amigos. Miles y miles de lugares para ir a comer, muchas arcadias con juegos actualizados, y en fin demasiadas cosas divertidas.

Para Seto, cada esquina tenia un recuerdo muy agradable, la primera vez que Yugi perdió contra él ( un milagro que solo sucedió una vez) los shooters violentos con los que Bakura descargaba la ira ,que si hubieran reales de seguro que el chico albino hubiera sido encarcelado por asesino serial; claro que Mokuba seguía teniendo el maldito record de mas alto puntaje en todos los juegos, desde los mas simples juegos de peleas hasta los complicados shooters, pasando por los simuladores de auto y demás. A veces se preguntaba si eso era algo normal para alguien de su edad, pero una vez mas se recordaba que el chico aunque sea muy agradable, era un Kaiba. Y como tal, el éxito estaba marcado en sus venas.

Viendo de soslayo al pequeño, vio lo diferente que este era en este lugar, su mirada era un tanto mas analítica y sus expresiones se mantenían pasibles todo el tiempo, manteniendo la calma de una manera pasmosa. No era como el Mokuba que conocía, el Mokuba loco, un tanto irónico en sus palabras, sarcástico e incisivo con sus comentarios. Tal vez sea por que nunca lo vio con la faceta de hermano menor.

O tal vez por las influencias diferentes que tenia de su hermanito lejano. Dedujo que la persona a la que estaba reemplazando era un tanto mas seria, casi no hablaba. Frío y distante como el polo norte era este tal Seto Kaiba. Aunque había lugares de esta mente que estaban cerradas herméticamente, incluso de si mismo.

Lo que le parecía un dilema mayor,¿ por qué este sujeto encerraba recuerdos de si mismo? Y lo peor es que él no iba a descansar hasta saber la respuesta. Parece que aun tenia su curiosidad ávida.

" y bien, que planeas para las vacaciones?" pregunto tranquilamente mientras veía alrededor. Aun tenia la curiosidad de saber que rayos hacía Mokuba en las vacaciones que prácticamente nunca salía con ellos durante los primeros dos meses.

"lo mismo de todos los años, supervisarte para que no mueras de inanición por trabajar en KaibaCorp durante 72 horas seguidas.." respondió Mokuba, también viendo alrededor suyo.

/ ya me lo temía, el estúpido de Kaiba nunca se alimenta, así que el deber moral del hermanito es no dejarlo morirse por auto esclavización./ pensó Seto con humor./ uhm, pero si conozco a Kaiba bien, más que seguro que él le insistía en largarse para que no se arruine las vacaciones en vano. Así que dudo que eso NO pase aquí/

Volteo la mirada para ver mas de cerca al chico "sé cuidarme solo, Mokuba." Replico con gracia y una sonrisa de lado.

"eso también pensaba yo.." sonrió de lado, con la misma mirada burlona.

Seto arqueo una ceja y volvió a ver alrededor " deberías ir a conocer mas amigos." Replico después de unos segundos.

" no, el que debería conocer amigos eres TU." Hizo exactamente los mismos movimientos que hizo su hermano, solo que con la voz en tono algo acusador. Conocía a su hermano, el hecho de que se mueva mucho era algo impropio de el. Tal vez estaba preocupado por algo o por alguien...

/alguien? Pero quien podría ser? dudo que sea yo, Seto seria mas directo, esta siendo demasiado difuso.../

"no los necesito...aunque.."

" sí?" preguntó Mokuba, con rapidez y viendo el perfil de su hermano que seguía viendo hacia otro lado, tratando de no ver directamente a Mokuba. Ahí iba otro momento MUY extraño en el comportamiento de Seto Kaiba, estaba dejando que la mascara de no-me-importa-nada-mas-que-yo se saliese de lugar...

"no, nada." Volvió a ver directamente a Mokuba, siguiendo con la misma expresión de siempre. "Sigo pensando que deberías ir mas a menudo fuera de la casa, no mantenerte tan enfrascado junto conmigo. Te aburrirías"

"Seto, estar contigo es mas bien una diversión mas grande que estar junto con Yugi y los demás. Tu eres mi hermano mayor, y como tal no pienso dejarte solo." Replico Mokuba con un tono de voz que daba a entender que había dicho esas palabras mas veces de las necesarias.

/ así que era eso de lo que estabas preocupado, no? Que te deje solo. No sé cual día aprenderás que NO te dejaría solo, Seto.../

prosiguió con una mirada mas burlona"Además que es divertido estar en KaibaCorp y ver como destrozas a la pobre maquina con los tecleados que das." Sonrió al ver a su hermano viéndolo con cara de que estas hablando? yo no hago eso!

" no soy tan fuerte.." murmuro el ojiazul por inercia. Aunque conscientemente sabia que eso era verdad, demasiadas veces fue golpeado por el otro Kaiba y sabía lo fuerte que puede ser el maldito.

" si ese teclado tuviese voz, hace mucho tiempo que hubiese protestado contra ti."

" protesto contra eso, no tienes pruebas." Volvió a murmurar, esta vez con mas humor

" Si que las tengo." Murmuro también el pequeño, empezando el juego de imita a tu hermano para sacarlo de sus casillas.

"cuales?"

" el primer prototipo del Duel Disk, termino destruido por que lo atornillaste demasiado rápido y fuerte." Menciono despreocupadamente Mokuba, mientras se reía internamente al ver a su hermano destruyendo al pobre artefacto con ira. Cuando las maquinas no cooperaban con Seto Kaiba, Seto Kaiba tampoco lo hacia con ellas.

"era un prototipo, estaba creado para ello.." finalmente dijo Seto, pensando que eso seria lo mas normal que diría Kaiba.

"de ahí el celular..."

"estaba enojado."

"se suponía que debía de ser prácticamente indestructible, hermano.." explico Mokuba con ironía.

"por eso demande a la empresa por publicidad fraudulenta. Después de eso ya no tienes mas pruebas, genio" sonrió como solo un gato satisfecho lo haría, y acaparando la atención de más gente del lugar que parecía no creer que ante sus ojos, Seto Kaiba estaba jugando con su hermano!

Y en publico! y sonriendo!

O era el comienzo del Apocalipsis o todo el publico presente era parte de un experimento del gobierno con drogas en los helados. Por seguridad, todos dejaron de comer lo que tenian.

" uhm.." murmuro con algo de inconformidad, al sentir demasiados cuchicheos alrededor suyo.

" y bien, volviendo a lo de antes, seguro que quieres quedarte conmigo en las vacaciones?" volvió a replicar, ignorando olímpicamente las murmuraciones.

" por supuesto que sí, hermano!" contesto con más tranquilidad "aunque YO debería ser el que insistiera para que tú conozcas mas personas, y no viceversa.." prosiguió con mas determinación.

"conozco a las suficientes.."

"solo a mi."

"no necesito a nadie mas." Cruzo los brazos y sonrió de lado, como si ese gesto lo hubiese hecho siempre.

Suspirando con algo de resignación, murmuró " a veces eres imposible de tratar."

"es un orgullo serlo." Respondió Seto.

/ ahora ya sé, por que el idiota de Kaiba gusta de estar con Mokuba, es muy inventivo cuando esta fastidiando a su hermano./ sonrió internamente al ver a Mokuba, ahora con su cara de niño inocente que podía derretir un iceberg, y como no, un grupo de chicas lindas. Lo que lo hacia aun mas enigmático.

Mokuba Kaiba, era en si alguien tan enigmático como su hermano, Joseph Kaiba. Ambos hermanos eran igual de manipuladores, claro que el pequeño era ese tipo de persona que podía inspirarte confianza e inocencia, mientras el te manipulaba para hacer lo que él quiera. Obviamente, después de que hayas hablado 5 minutos con él, ya podías saber la clase de mente analítica e inventiva que era en realidad. Y también lo maquiavélico que podía ser a veces.

Mientras que su hermano mayor, el muy conocido Joseph Kaiba, era la persona indicada para ser un líder fascista. Rápido en sus palabras, conciso en sus ideas y analítico hasta con lo que come, Joseph Kaiba, no era alguien con quien se pudiese juzgar por la edad; parecía que su cuerpo se había quedado estancado en el tiempo, mientras que su mente estaba ya por los 60 años.

Persona que lo tratase como un niño, persona que terminaba sin empleo durante el resto de sus días. Aunque también era un maestro para engañar al publico, fácilmente podía desmentir cualquier rumor sobre que él casi mata a alguien en su colegio. Hasta el punto que los familiares del denunciante dudaban de las palabras de la victima.

Pero con lo poco que había visto de la faceta de Mokuba como hermano, ahora podía por lo menos deducir un poco el comportamiento tan ambiguo del rubio. Según Mokuba su hermano era alguien demasiado cerrado con las demás personas, el porque de eso no lo sabía con exactitud, pero solo decía una y otra vez que su hermano era alguien muy bueno en el fondo. Tenia sus momentos de estupidez, sí; y también era más terco que una mula, y que de hecho no lo podías mover de una idea que se le haya plantado en la mente, al contrario entre más lo contradecías, el más insistía.

Pero cuando de Mokuba se trata, se convierte en algo parecido a un gran oso tierno que dice te amo en su panzota. Pero solo con el pequeño de cabellos azabaches era así, con los demás era un maldito bastardo cuya existencia en el mundo era la prueba mas concreta de que hay gente odiable en este universo.

En pocas palabras, Joseph Kaiba era un Al Capone rubio del siglo XXI. Engaña a todos ,manipula a muchos, destruye a varios y de paso, cuida de su hermano como si fuera su vida misma. Y todo eso sin dejar de lado su hermoso carisma de hielo.

Sin darse cuenta, la camarera ya había llegado con una especie de torre Eiffel de helado, y con una taza de capuchino. Con silencio la mujer dedujo en segundos a quien le correspondía las cosas, la taza para él y el monte Everest de helado, para Mokuba.

Irónico, en su dimensión la cosa hubiera sido al revés. Mokuba era la persona que amaba el café.

"uhm! Helado" sonrió brillantemente, agarrando la cucharilla con ansias.

" cuantos sabores le pusiste a eso?"

" algo como 10 sabores, por?" respondió con soltura, mientras examinaba minuciosamente por donde tenia que empezar para no derrumbar la cosa gigante.

"nada, solo quería saber como es que llego a ese color tan original" replico con algo de acidez. Bueno no había que decir que la torre de helado parecía mas bien una atalaya gigante de color neón.

"bueno, eso pasa cuando pones demasiado de muchos"dijo lacónicamente" y tu?"

"prefiero lo sencillo"

"café?" señaló mientras veía de reojo a la taza humeante.

"capuchino" dijo levantando la taza.

"se puede sacar al CEO del café, pero no al café del CEO." Murmuro al aire, mientras trataba de descubrir cuando rayos su hermano lo había engañado, pidiendo capuchino en vez de algo distinto, preferiblemente descafeinado.

"me estas llamando adicto?" pregunto entornando los ojos, y haciendo una mueca burlona.

"tan solo digo la verdad" respondió sonriendo de lado, mientras comía la primera cuchara de helado.

"uhm?"

"en serio hermano, en los últimos 8 años solo has tenido como bebida principal, ese brebaje con apariencia de aceite de motor." Replico con algo de sorna.

"y?"

"no deberías de cambiar, al menos por una vez?" le reprochó con una mirada de por favor, hombre cambia!

"no" respondió escuetamente. Pero interiormente riéndose a carcajadas, consideraba que estaba poniendo mas control sobre sus emociones externas, mas de lo común.

"por que no pruebas al menos, algo diferente?"resignadamente dijo Mokuba, al ver que su hermano no iba a cambiar por nada." por algo tengo 10 sabores aquí no?" sonrió con mas soltura.

"ya estabas planeando esto no?"

respondió con una mueca de lado "prueba" le entrego la cucharilla llena de helado azul eléctrico, que tenia el aspecto de ser una cosa de plástico triturado.

" y..te gusta?" dijo después de unos segundos.

"sintético, que era?"

"algo azul." Remarcó con algo de humor, obviamente no había visto el nombre del sabor.

"sabe a plástico procesado"

"prueba" volvió a entregarle la cucharilla.

"demasiado dulce" Seto respondió, con algo de asco. Por primera vez en la vida estaba odiando lo dulce... definitivamente esta ERA la dimensión desconocida para él.

"era frutilla."

Ya habían pasado 15 minutos y Mokuba seguía tan empeñado en encontrar algo que al menos su hermano no dijese sintético o demasiado dulce como respuesta. Seto no gustaba de nada que no fuese un poco amargo, era como si amara ese tipo de cosas. Todas amargas.

Aunque al menos ya no estaba tan reacio a comer un simple helado, cosa que era demasiado inusual... de hecho prácticamente imposible....

Pero comparado con lo de la mañana, francamente esto era un tanto mas tranquilo. Pero seguía teniendo como un aire de impropio. Como si su hermano hubiera cambiado de un día para otro, de ser callado y analítico, ahora era un poco mas hablador y no tan consciente de mantener la imagen de persona inmutable.

Definitivamente era algo en lo que había que investigar un poco mas. Claro que tampoco podía negarse que no le gustaba la imagen de ver a su hermano no tan serio o tan cerrado, o tan triste como de costumbre.

" y te gusta?"

" no es sintético, no es tan dulce."

" debí habérmelo imaginado. Chocolate con canela." Suspiro con algo de resignación. Algunas cosas nunca cambiaran.

Jamás cambiaran.

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" señor?" pregunto dubitativa la chica al ver que el joven que estaba a su lado, se mantuvo callado durante mucho tiempo.

"sí. Dime Anya"contesto con algo de sobresalto. Seguía pensando en las palabras del ente...

"que va a hacer usted ahora?"

"tengo que ir a mi casa, ya terminamos el recorrido." Contesto viendo hacia la corroída pared de yeso del edificio. Se sentía como un estúpido al hablar de una manera tan amigable. Aunque internamente sentía como si estuviera haciendo lo correcto... por primera vez en la vida.

Y Ya no sabia si eso era bueno o no.

"ahh" sonrió con alegría la pequeña , por que al fin no tenia que estar viendo al tipo de ayuda social con su cara de hipocresía, y aunque ella fuese una niña pequeña, ella ya podía detectar uno de los rasgos mas patéticos de la naturaleza humana.

Y el joven que estaba ahí ayudándola, no tenia nada de hipocresía.

Se sentía segura. Un sentimiento que hace tiempo que no sentía.

Al menos esperaba que esto no fuera toda una ilusión.

Ambos salieron de manera silenciosa, dejando el bullicio que disminuía cada minuto. Ya en la acera de la calle, ambas personas parecían estar demasiado absortas en sus pensamientos.

Uno de ellos solo podía pensar en la suerte de haber encontrado a alguien grato y amigable. El otro solo podía pensar en el lío en que estaba. No le había dado la suficiente importancia a todo este asunto de cambiar de actitud. Bueno es que en realidad no se lo había planteado desde el principio...

No es que lo necesitara, no; él estaba mas que satisfecho con sus acciones y con su comportamiento. Claro que había la parte rebelde de su mente que le decía con su voz baja y sabelotodo que en realidad era un reverendo bastardo, y que no había forma de podérselo negar.

Había que agregar que era la parte que más odiaba de su mente.

" Anya?" dijo tratando de aliviar la tensión. Mucho pensar en todo su problema lo estaba poniendo de mal humor.

"sí?" contesto con sobresalto. también ella parecía estar en un estado pensativo.

" cuéntame mas sobre ti" replico con voz calmada.

" sobre mi?" agrego con asombro. Nunca nadie le había preguntado eso.

"sí, sobre ti."

"pues..." dijo nerviosamente, pensando en algo no muy tonto en que decir " no soy alguien muy interesante, tengo 8 años.." finalmente respondió, con algo de inseguridad al final.

" cumples 9 cuando?" preguntó escuetamente Seto.

"dentro de dos semanas, pero espero que por lo menos hasta ese entonces pueda encontrar un lugar en donde quedarme definitivamente." Respondió con algo de ironía y congoja, como si su situación fuera algo tan normal , pero a la vez patética.

Por que demonios le recordaba tanto a...

"lo siento." Murmuro enojado consigo mismo. Estaba volviéndose demasiado feble en un día.

"por?"

"no puedo ayudarte como quisiese." Respondió con voz patética, sabia que estaba dando estúpidas excusas. Se sentía como un gusano.

" no se preocupe. Yo se el esfuerzo que debe de estar haciendo. Y eso es mas importante que todo, no?" dijo con la voz fingidamente alegre y sonriendo .

" no se."

"anímese señor, yo se que podré encontrar un buen lugar. Usted fue mi rayo de luz en un momento en el que creía que todo el mundo era demasiado enfrascado en si mismo. Se que suena algo tonto, pero eso es lo que creía al ver a todas las personas desinteresadas." Paro un poco para ver alrededor suyo. Y prosiguió "claro que hubo algunas personas que querían ayudarme, pero ellas tan solo veían como podían aprovecharse de la situación, si usted me entiende.."

" me imagino." Respondió escuetamente.

"fue una suerte que logre escapar, no es buena idea ser transportada en un camión interregional. Pero igual, logre escapar hasta aquí gracias a una mujer que también parecía muy interesada en otra cosa de mi. Creo que sacarle parte del dinero fue algo muy malo. Pero sabré algún día devolvérselo. No?" otra vez su voz de ironía y de patética situación. Aunque esta vez estaba sonriendo de manera franca.

Ambos callaron por dos minutos. El ambiente parecía ser un maldito hielo con lo pesado que se había vuelto.

" por que confías en mi?" Seto pregunto al aire, como si quisiese en realidad preguntárselo al cielo.

Sonriendo de manera enigmática, también miro al cielo. "por que usted se ve honesto, no se ve con mascaras. veo que no tiene vacía la mirada"

"vacía?"

" sin vida.. como si no tuviese ganas de vivir, a eso me refiero." Siguió mirando al cielo. Sonriendo aun como si tuviese una alegría tan grande.

"eso crees?" dudoso por primera vez pregunto con consternación.

"eso veo, señor. Además que dicen que los ojos son el espejo del alma." Dijo segura de si misma. Incapaz de poder juzgar erróneamente al joven al frente suyo.

Aunque el mismo joven se sintiese como la escoria del mundo en esos precisos momentos.

"y que ves?"

" veo..dolor, pero veo esperanza. Veo egoísmo, pero veo gratitud hacia ciertas personas." Hablo enigmáticamente, y de manera franca. De ahí paro por unos segundos y sonrió de la misma manera irónica "escuchándome hablar así, sueno tonta. Lo siento si le dije muchas tonterías, a veces me dejo llevar demasiado."

"no te disculpes, no hubo ningún daño." Contesto de manera automática, el modo de hablar de la muchacha le estaba mandando shocks por toda la espalda. Sentía que todo lo que había dicho era demasiado real.

" en serio? Porque mi papá se ponía de muy mal humor cuando lo veía a los ojos, y le empezaba a decir lo que veía. No se por que le dañaba tanto, era como si le estuviese desgarrando el alma." Finalizo con otra sonrisa mordaz.

" la verdad es desgarradora. Tal vez era eso a lo que tu padre tenia miedo, a la verdad." Dijo mas hacia si mismo, era exactamente lo mismo que estaba pensando.

"no se, nunca lo sabré, tal vez el haya tenido miedo de mi. El escapo de mi." Suspiro con congoja." Solo espero verlo una vez aunque sea para saber si esta bien, si le hice daño. Yo se que fui la culpable de la muerte de mi mama. Pero no sabia..." finalizo con la mirada fija en el suelo.

"no te culpes de algo irremediable, Anya."dijo de manera supuestamente tranquilizadora. Paro por unos segundos." Algún día tenia que suceder."

"pero por que a mi?! Por que!" elevo la voz con desesperación " a veces no lo comprendo. Por que ambos me abandonaron?..y si no fui la hija que querían, y si ellos en realidad me detestaban... tan solo me tuvieron por que la sociedad así lo pedía.. y si en realidad nací sin razón?" volvió a mirar al suelo. Esta vez con lagrimas asomándose por sus párpados.

Seto no supo que responder. De hecho ni siquiera sabia que decir, y a eso se sumaba el hecho de que sentía como si fuera un intruso en el mundo de la muchacha.

Ahora... no sabia si realmente estaba viendo la realidad, el miedo y la desesperación de él en ella.

Y si así fuera?

" no lo sabe, verdad?...la respuesta esta en mi, lo he descubierto hace mucho tiempo...pero tengo miedo de ver quien soy en realidad.." suspiro con dolor." creo que también por eso escape...no tenia el valor suficiente... soy una cobarde..".

"al menos puedo decir al mundo que se que soy una cobarde... que no soy tan tonta como para no saber eso.."la niña paro por unos segundos y las lagrimas cayeron silenciosamente por su rostro.

" deja de llorar.."

"que mas puedo hacer?.. ya no me queda nada mas..tan solo llorar" dijo con la voz patética y llorando mas efusivamente.

"no remediaras nada con eso."

"AL MENOS ES ALGO QUE NO SE ALEJA DE MI!" grito con agonía, aun llorando con pena. Jadeo un poco y murmuro " lo..lo siento.."

"...Anya..." murmuro con algo de indecisión.

" me desvié del tema, no? ...." se sentó patéticamente en el asfalto, aun con las lagrimas cayendo libremente por sus mejillas.

"vamos, levántate." Seto zarandeo a la chica, levantándola con un mano como si fuera una muñeca de trapo y se puso a la altura de la chica. " Hay veces donde no podrás seguir mas, y tu lo sabes muy bien." Dio mas énfasis en lo ultimo." No hay necesidad de llorar. Lo único que te queda en este mundo eres tu, y si te pierdes. No volverás a recuperarte con facilidad."

"uhum"dijo con la voz ronca.

" he visto a personas mas adultas que tu , matándose por la misma razón que estas enfrentando ahora... pero tu estas encarando todo." Puso ambas manos en los hombros débiles y delgados de la niña."permíteme decirte que esto no es cobardía.."

"pero.."

"no pongas excusas, tu misma lo has dicho. Tu tienes la respuesta en ti. Y sabes que es verdad lo que te digo. Límpiate la cara y sigue caminando."

"esta bien.." murmuro finalmente limpiándose la cara con decisión.

Ambas personas siguieron caminando. Dejando que otra vez el silencio sofocara todo...

Ahora Seto estaba seguro de que estaba tan inestable como un castillo de naipes..

El resquebrajamiento de la muchacha le recordó demasiado a algo que nunca quiso ver...

Tal vez..probablemente..nunca quiso ver la verdad.

Tal vez estaba mintiendo todo este tiempo... ver a la chica sin esperanza casi lo hace sentir inestable...

Aunque ya esta inestable, ya no sabe que pensar... estaba en lo correcto? O estaba equivocado?

O tal vez, estaba siendo un idiota y se estaba dejando influenciar como un niño pequeño.

Pero sentía que estaba pasando algo, era como un cargo de conciencia...

Necesitaba hablar con el estúpido espíritu... el sabría al menos un poco de la situación mejor que el..

Aunque internamente se estuviese maldiciendo por necesitar de ayuda.

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Finite!