Creo que voy a dejar para otro día lo de suicidarme, porque ahora mismo, desde lo alto del acantilado, mirando las rocas que hay varios metros por debajo de mi... Se me han pasado las ganas, la verdad.
- ¡Oh vaya! – Oigo una voz a mis espaldas - ¡Menuda sorpresa! ¡Si es la elfa más borde de las últimas dos edades!
"¡Bien!" exclamo mentalmente cuando me giro y veo que es el capullo integral de Nandor, "¡algo con que entretenerme!
- ¡Oh vaya! – Digo imitándole - ¡Menuda sorpresa! ¡El elfo que tiene tan poco cerebro que es un milagro que pueda hablar y andar a la vez! ¿O es que has hecho un cursillo intensivo de verano?
- Ya veo que no era Bosquenegro lo que te hacia tan agradable- dice Nandor, acercándose.-Sigues tan educada, servicial y extremadamente amable…
- Siempre lo soy, lástima que tu coeficiente intelectual no te dé para más de 45 segundos de razonamiento mensual.- mascullo entre dientes, mientras miro fijamente a Nandor.-
-¿Qué? ¿Admiras mi sublime belleza?- dice con su ancha y para que negarlo, estúpida sonrisa de oreja a oreja, que si se despistara un poco mas se le ensanchaba y le servía de bufanda. O de agujero de ventilación de las telarañas cerebrales.-
- No, estoy admirando el bonito trabajo de tus polillas cerebrales, te están dejando la cabeza como un colador Khandiano. Cría polillas en vez de neuronas y te dejaran la cabeza hasta mejor de lo que la tenías…- recito cuan refrán de mi abuela se tratase.-
- De algo se tiene que vivir… Uno se monta sus negocios, aunque sean algo tontos-
-¡Oh! ¿has montado un circo con toda la porquería de tu cerebro? Es a lo único que llegarías, y eso con ayuda. ¡Juas!¡La polilla cerebral! ¡La araña barbuda! ¡La no-neurona invisible! ¡La materia gris funambulista! Ah, no, de esto ultimo tu no tienes, lo siento… Te doy mi pésame…-
- Oh, gracias gracias. ¿Oye, a ti se te agudiza el ingenio conmigo o es que te aprendes el "Libro universal de Borderias"?
- No, todas 100 Daeiell, con derechos y zurdos reservados.- digo, con una sonrisa irónica.- Bueno, hay que mencionar a mi abuela, en Valinor esté, que fue mi gran maestra…
- Ah, claro… Eru los cría y ellas se reproducen y se enseñan entre ellas… ¿Eres de la raza de las Bordes?- añade, borrando su sonrisa. Creo que empieza a cansarse.- El único sitio para ti, entonces, sería una cueva de orcos.-
-Oh, gracias por el piropo, pero bueno…Como diría un conocido: Donde mejor puede estar un elfo es en una caja rectangular de madera.- añado, con una mirada sádica.-Así que si le haces un favor a la comunidad élfica mundial, y de paso, a la humanidad, da siete pasos al frente y date de morros con el océano y alguna que otra piedrecilla de ahí abajo. ¡Oh! Y si puedes, haz desaparecer tu cuerpo, así le ahorras a tu familia la gracia de volver a verte…
Nandor me hecha una mirada como diciendo "ahí te has pasado" y me suelta, o más bien, me escupe:
- ¡Vete al infierno!-
Y se va. ¡Bien! Una batalla ganada, y después de esta, la guerra. Y… ¡Uff que alivio! Creía que estaba perdiendo mi lado borde, pero veo que este sigue a mi lado, eternamente juntos.
Ahora, mas relajada y tranquila después de desfogarme con el imbécil de Nandor, vuelvo a la casa, donde por cierto, no hay nadie. ¡Se han ido sin mí! Bueno, al menos se han acordado de dejarme una nota…
Dae, estamos en la playa, tostándonos al sol. Te esperamos.
Perfecto, sol, playa, elfos inútiles jugueteando con elfas guarras… El mal humor vuelve a mí como las llamas a un balrog. Arranco la toalla del armario de un tirón y me dirijo sin ganas hacia donde estábamos ayer en la playa.
o o o
Arggg! ¡Que me deshidrato! Nunca, y repito, nunca, os quedéis dormidos al sol, porque luego, a parte de despertarte como una gamba radioactiva (solo por la parte que estaba en directo contacto con el astro luminoso), tendréis la boca más seca que un campo de Mordor.
- ¿a dónde vas? – me pregunta Lin.
Me limito a hacerle señas para indicarle que me voy a comprar un par de litros de la hidromiel más congelada que me puedan vender. Pero claro, no se me ha dado nunca bien la mímica, así que no me extraña que Lin se haya quedado con cara de no haber entendido completamente nada.
Después de un rato, y de pedir con voz de orco recién despertado la bebida al elfo (monísimo por cierto) que vende bebidas un par de vasos de hidromiel muy fríos me siento en la gloria.
- ¡Daeiell! ¡Cuánto tiempo!
Un ataque de tos repentino al escuchar esa voz me hace escupir mi último trago de hidromiel.
- Leg... ¡Legolas! – digo entre toses
- ¡No te acerques a menos de dos metros! – dice Nandor arrastrando a su amigo un par de pasos lejos de mi.
- No muerdo... todavía – digo
- Yo no estaría tan seguro – gruñe Nandor. Oh vaya... Que lastima. Está enfadado conmigo.
- Mato mordiendo por encargo – una sonrisa se forma en mis labios – El día que quieras probar me avisas, que a ti te lo haré gratis.
- Marchémonos Legolas – dice él como toda respuesta
- ¡Espera! Quiero hablar un poco con ella, hace tiempo que no la veo.
Nandor le lanza una mirada a su amigo de : "Compañero, tu estás loco" Y se va... ¡Se va! ¡El muy idiota se va! En serio... A este elfo lo parieron sin neuronas...
- Bueno ¿qué es de tu vida? – no es hasta que Legolas pronuncia estas palabras que me doy cuenta de que me he quedado a solas con él. ¡Por Eru! ¡Que hago! ¡Que digo! Podría hacer un hueco en la arena y... ¡Un momento! ¿Qué digo? Él no sabe que fui yo, así que... Si me comporto normal no va a sospechar nada.
- Ahora vivo en Imladris – le digo con lo que intenta ser una fría voz de indiferencia – Trabajo como dama de compañía de la pij... de Arwen.
- ¿Arwen? La conozco. Es un poco... – Legolas se queda en silencio, buscando la palabra adecuada.
Decido ayudarle : - ¿Pija? ¿Repelente? ¿Mimada? ¿Cursi? ¿Insoportable? ¿Todo a la vez?
Él sonríe : - Ni yo mismo la hubiera descrito mejor
Pero yo ya no estoy. Esa sonrisa...Involuntariamente me encuentro pensando en esos labios encima de los míos. Un escalofrío me recorre la espalda.
- Me voy – digo precipitadamente y me giro para huir corriendo.
Pero una mano firme me sostiene por el brazo.
- ¿Es una costumbre de todas las elfas la de iros precipitadamente? – dice fijando sus azules ojos en mi. Creo que me va a dar algo... Mentira, ya me ha dado.
- ¿Puedo hacerte una pregunta? – dice él de nuevo
- Me la acabas de hacer – digo, intentado que no me tiemble la voz y intentado recuperar mi ironía habitual.
- Otra – dice él sonriendo de nuevo.
Asiento mecánicamente con la cabeza. No sé que me pasa. ¡Antes podía ser borde con este elfo! ¡Antes le podía tirar telarañas al cuello y reírme de la cara de susto que ponía! Antes...
- ¿Estuviste en la fiesta de ayer?
Doy un respingo : - ¡No! ¡Que va! Sabes que a mi no me gustan estas cosas
- Ya... Claro, es verdad. Bueno, así nada, no quiero molestarte si tienes algo que hacer. Ya nos veremos – se gira para irse, pero cuando a dado un par de pasos se vuelve a girar.
- ¿Es cosa mía o tu carácter se ha suavizado?
- No te sabría decir... - murmuro
- Será la playa – me sonríe, me guiña un ojo y se va. Y yo me quedo con una cara de boba que podría hacerle la competencia a Arwen.
- No es la playa... Eres tú – dijo en voz baja.
Cuando me doy cuenta de lo que ha pasado me empiezo a dar manotazos en la cabeza : - ¡No! ¡Que no me iba a volver a colgar por nadie! ¡Y menos por el príncipe hannadleliano! ¡Por Eru! Creo que voy a llorar...
o o o
¡Genial! Después de mi encuentro con Legolas, lo único que quería hacer era encerrarme en mi habitación trescientos mil años sin ver a nadie… ¡Y van y me arrastran a una estúpida feria del mar! La verdad es que los falathrim y gentes de aquí, en la costa, se están luciendo. Parece que lo hagan aposta… ¡Todas las noches a salir! Creo que me dará un colapso… Y vale, ya me veis, en medio de las paraditas de colgantes, pendientes, pulseras y todo lo imaginable para decorar la anatomía élfica con conchas y pedruscos, de pescar pececillos escurridizos, tiro de flecha a oscuras (de día poca gracia tendría, se supone que tenemos un talento innato para la puntería), paradas de algodón de azúcar y demás porquerías destroza-dientes y con un grupo de elfos tocando música marchosa en la playa.
Aburrida, me bebo el segundo vaso de hidromiel sin alcohol (que sino Narwain insistirá en que soy alcohólica) mientras la susodicha pequeñaja trata de pescar un pez azul sin éxito, Lin y Mereth están del todo distraídas con Elladan y Elrohir (y aún no entiendo como no han tenido que seguir hablando con una canoa, con la de baba que están soltando…) y Sindë ha desaparecido sin dejar rastro. Suerte de Ello, que esta con la misma cara de aburrida que yo y no hace mas que pellizcarse (y destrozarse) el labio con las uñas.
- Deja eso, te vas a hacer daño.-
- Al menos estaré distraída.- me suelta con el eterno gruñido.-
- ¿Y Sindë?- pregunto, mas por distraerme que por curiosidad.-
- Con el amor de su vida viviendo una experiencia idílica…- dice entre dientes, mientras coge un pañuelo para taparse la herida que a fuerza de bien se ha hecho. Si mira que es masoca…-
- Boh, las hay con suerte…-
Me mira con cara de "y lo tenias que decir tu" mientras murmura:
- Hombre, yo no le envidiaría… mas bien te envidiaría a ti.- añade, con un guiño de ojo, aunque por la cara que le he puesto (cara: "creo-que-voy-a-matarte-como-prefieres-que-te-torture-antes) creo que la he asustado de verdad (¡weee la he asustado!) y se va a ver los esfuerzos de Narwain versión "pescadora de agua dulce".
Buff… De repente, no sé bien como, me viene a mi oído la voz de Sindë. ¿Dónde está? ¡Ah, mírala, detrás de la parada! Esta con un elfo… hmm, es muy mono, para que negarlo. Larga melena morena, ropas oscuras, piel pálida, y los ojos tan negros que no dejan distinguir las pupilas. Un elfo oscuro, está claro. A ver si oigo lo que dicen…
- Eres un imbécil.- dice ella, intentando apartarse de él. Pero el otro la retiene.-
- No tanto como otras que yo me sé.- le dice, acercándose más. Ahora viene cuando Sindë le arrea la torta del siglo que le hincha la cara al estilo bizcocho hobbit.
Ehmm… ¿Sindë? ¿Dónde esta la torta? ¡Dásela! Pues no, no se la da… El elfo se acerca mas y mas… bueno, creo que dejaré la crónica del momento o esto se subirá demasiado de tono.
- ¿Qué? ¿Quieres comerme la nariz?-
- No, solo quería mirar los ojos bizcos de la elfa mas estúpida del mundo.- le dice él, tan tranquilo, a menos de un palmo de su cara.
Pero de repente, la cara del elfo parece de mármol, y una expresión de sufrimiento la cruza. Inevitablemente, he de mirar hacia abajo, donde una bonita rodilla de Sindë acaba de estrellarse contra aquella parte anatómica tan sensible de los elfos…Jisjisjis.
- ¡Hasta nunca, capullo!- le suelta, antes de venirse hacia mí.-
Disimulo un poco, mirando hacia otro lado, como si no hubiera visto nada, aunque la imagen del elfo cayendo al suelo retorciéndose de dolor se pasea ante mis ojos un poco más.
- ¡Hola Dae!- me dice cuando viene.-
- Hola, Sin. ¿Qué, comiendo algodón de azúcar a escondidas?- le suelto.-
- Ui si, acabo de pagarles el sueldo de…-
- ¡¡¡SIIIIIIIIIIIIIINNNNNNNNDEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE!!!!
El escalofriante grito me hiela la sangre. Y a Sindë también. Una elfa, de aspecto dicharachero se nos acerca y se abraza como una posesa a la pobre Sindë, que se ha quedado helada del susto.
- ¡¡ Minë!!
Observo sorprendida como las dos elfas se abrazan y dan saltitos. Estoy tentada de alejarme poco a poco para evitar que la gente empiece a relacionarme con este par de locas, cuando una tercera aparece, blandiendo un algodón de azúcar en la mano.
- ¡¡Simberminë!! ¿Qué se supone que es esto de dejarme tirada pagando TU algodón de azúcar? – gruñe la recién llegada
- Vamos Elanta... Es que he visto una antigua amiga y....
Pero antes de que pueda ver como acaba todo esto, si Elanta termina matando a Simberminë o solo la tortura un poco... ¡Mierda! ¡Gilipollas y hannadleliano a las 12 en punto!
Me voy corriendo. Ya habrá tiempo de conocer a estas dos nuevas locas mañana....
o o o
Comentario de Nariko : We! XD Weno, hay que decir que en este capi no he tenido demasiado trabajo... La escenita Leggy-Dae, evidentemente es "made in me", pq a la otra mitad creativa de este fic (entiendase Elloith) le da alergia el romanticismo, o eso es lo que dice ella :P En fin... ¿Qué tal el nuevo? XD Ya iba siendo hora de una "conversación civilizada" entre Dae y Nandor ¿No? XDD ¡Dejad revis!
Comentario de Elloith : conversación civilizada dice… eso es conversación made in Ello S.L.!! XD Mayu, no podrás quejarte, a parte de incluirte… he trabajado en este capi! Me lo he currado, eh? A ver si oigo menos quejas XD pues bien, mas locas al grupo, mas escenas romántico-sádicas (Sindë, mi heroína de la rodilla fulgurante ataca de nuevo XD) mas bordería y mi cerebro planeando nuevas ideas (mentira, es solo para parecer que hago algo XD)y eso… hasta el próximo capi!!
