Primer Libro: Capítulo 1: Conociendo a Quatre Winner.

Raro es el día en que llego tarde a clase. Te lo digo ahora- no
ocurre. Siempre soy el primero en clase, libros abiertos, ojos hacia
abajo, esperando a que Heero venga y se siente a mi lado.

Esa mañana, pero, llegaba tarde a matemáticas. Alguien había cogido mi
goma de pelo en el apartado de duchas. Normalmente la dejo alrededor
del cuello de la botella de champú, pero cuando salí de la ducha,
cabello todo mojado y goteando en un gran caos, no estaba. Te digo que
si alguna vez encuentro quien fue les voy a remover las entrañas con
una cucharita para postres y alimentaré a las palomas que se agrupan
por los terrenos del colegio como ratas. Tuve que volver a coger otra
de las malditas cosas antes de clase, así que llegué tarde.

Afortunadamente también lo hacía el profesor- y Heero. En su lugar,
Quatre vino a sentarse a mi lado, dejando sus libros de matemáticas en
la mesa y ofreciéndome una gentil sonrisa.

"Estoy fallando en esta materia."

Dijo repentinamente, como si eso fuera una cosa perfectamente normal
con la que empezar una conversación.

"Matemáticas?"

Dije, estúpidamente, claro que mates.

"Cómo es eso?"

Estábamos en los mejores puestos –Quatre estaba en los mejores puestos-
puntuando en el más alto porcentaje de mates, y aún así pensaba que
estaba fallando. Le miré esperando que lo explicara.

Para mi sorpresa y horror, Quatre se sonrojó. Esta era la persona más
segura de sí misma en todo el curso, ya participante del Parlamento de
Jóvenes Europeos, destinado a algún alto cargo en el gobierno,
asegurada su posición como delegado el año siguiente y- estaba
nervioso? Avergonzado?

"Simplemente no entiendo los conceptos."

Dijo finalmente, mirándome a los ojos. Ya no estaba sonrojado pero
podía ver que aún era sensitivo sobre esto. Para Quatre una nota
normal era un fracaso. Eso era lo que él había querido decir.

"Me preguntaba," Continuó, voz firme, pero suficientemente suave para
que nadie más lo escuchara.

"El profesor suggirió que buscara un tutor, y me suggirió a ti."

No estaba muy soprendido. No había esperado que Quatre quisiera hablar
conmigo sin razón aparente. Lancé una mirada amarga a mis libros.

"No me importa ser tu tutor."

Dije finalmente, sin mirar a Quatre. Estaba tentado de decir 'Para qu
estan los amigos,' pero Quatre hubiera leídeo el sarcasmo fácilmente.

"Genial."

El rubio parecía un poco incómodo. Cuando le miré, su expresión
parecía preocupada.

"Después de clases durante una hora estaría bien para ti?"

Pensé por un momento. Gran parte de las actividades extraescolares en
las que participaba tenían lugar durante el descanso y la comida, y
antes de clase. Una hora a las cuatro cada tarde estaba bien.

"Está bien. En la biblioteca entonces?"

"Mi habitación."

sonrió Quatre. "Encuentro la biblioteca un poco opresiva."

No lo comenté, simplemente asentí. Mientras Quatre volvía a su mesa
Heero llegó seguido de cerca por el profesor, que llegaba
sorprendentemente tarde.

Sabía donde estaba la habitación de Quatre. También era la de Trowa, y
tendía a tener unas cuantas chicas cotorreando a fuera. Ocurría lo
mismo con Heero. Aún compartíamos él y yo, y una de las ventajas era
que yo podía auyentar las chicas que paseaban fuera. Aparecí a las
cuatro, libros en mano, ya repasando mentalmente los conceptos que
habíamos cubierto ese término. Quatre respondió, ya cambiado en ropas
normales, una sonrisa graciando su rostro educadamente.

"Hola Duo, pasa."

Pude entender cómo se sentía más confortable en su habitación. Estaba
pintada de azul claro, y bonitas fotografías enmarcadas colgaban en su
lado de la habitación, sonrientes retratos de família y momentos
capturados. Trowa estaba estirado sobre su cama en un lado de la
habitación, leyendo un libro con título francés.

Nos acomodamos en el escritorio cercano al centro de la habitación,
Quatre abriendo sus libros, y yo sentado a su lado mientras explicaba
su confusión. El problema yacía en su mal interpretación de un
concepto, que por supuesto llevó a confusión en el resto. Sus
susurradas preguntas, mis silenciosas respuestas y el seguido cambio
de página de Trowa eran todo lo que rompía el silencio de la
habitación.

"Aún así sigo sin entender."

Aunució Quatre, dando con su lapiz en una línia de figuras.

"Cómo cos (AB) puede equivaler a eso. No sé de donde viene esa
fórmula."

Mientras empezaba a explicar Trowa se levantó y se estiró. Pude
sentirle moviéndose detrás de mí, y vi los ojos de Quatre moverse
hacia el reloj. Quedaba un cuarto de hora para las cinco. Trowa march
sin decir nada, pero claro él era así de silencioso. Quatre no parecía
muy sorprendido.

"De acuerdo." Dijo Quatre, frente fruncida en pequeñas línias.

"Ayúdame!"

Tuve que reírme ante eso. Después las cosas fueron más sencillas.
Quatre bromeaba sobre sí mismo y me sentí más comfortable simplemente
hablando con él y ayudándole. Una vez he roto el hielo con alguien lo
encuentro suficientemente fácil para hablar y bromear como si fuera
una persona feliz, segura de sí misma. Pero por supuesto tomar ese
primer paso es doloroso.

Dejé a Quatre esa noche con el espíritu más ligero que había tenido en
mucho tiempo. Heero me esperaba en nuestra habitación, en su
ordenador. Tiene una mala costumbre de sentarse sin las luces
encendidas, y sólo su pantalla brillando. Le daba a la habitación un
tenebroso, misterioso aire, pero Heero decía que eso ahorraba energía.

"Dónde has estado?"

Preguntó suavemente, a modo de saludo. Le sonreí y lancé mis cosas a
un lado.

"Haciendo de tutor a Quatre."

Empecé a cambiarme, poniéndome un par de viejos, comfortables tejanos
y una sudadera indefinida. Heero hizo un pequeño sonido de comprensión
y acabó con lo que estaba tecleando.

"Sabes la profesora de política?"

"La señorita Peacecraft."

Aporté, sentándome en la cama con mi trabajo de francés. Las clases se
hacían en inglés, pero algunos deberes se pedían en otros idiomas.

"Hm, sí, ella."

Heero frunció el ceño a su reflejo en el espejo. Yo no diría que era
creído- más bien que odiaba su aspecto con venganza. Nunca lo
mencionó, pero podía leer a Heero como un libro abierto.

"Te has dado cuente de ella- actuando de una manera extraña
últimamente?"

"Heero- en caso de que te hayas olvidado- no hago política y mi
contacto fuera de clase con la reina bruja es mínimo."

Me miró fíjamente. De acuerdo, pues no me gusta la Señorita
Peacecraft, por varias razones, pero eso no significa que deba
observar todos sus movimientos.

"Bueno,"

Continuó, sentándose a mi lado en la cama, haciendo saltar el colchón.

"Me ha estado tratando de un modo. . extraño."

"Oh me lo imagino. . ."

La Señorita Peacecraft era joven, guapa, rica, inteligente y soltera.
Posiblemente cogió el trabajo como profesora de política porque quería
encontrarse un marido. Heero era un buen candidato, supuse. No sabía
porque eso me hacía tanta rábia.

"Soy sólo yo?"

Preguntó Heero suavemente, cejas levantadas. Lucía condenadamente
divertido, tuve que sonreir. A Heero no le queda bien el 'look'
interrogante. Es una de esas personas que siempre están completamente
seguras de lo que hacen.

"Mira Heero, compañero."

Le di palmaditas en la espalda en lo que podía haber sido un modo
tranquilizador.

"No soy la persona indicada para darte consejo sobre tu vida amorosa.
Ve a preguntar a alguien del-"

Parpadeé, dándome cuenta que estaba a punto de decir 'cuarteto
fantástico', y rápidamente me paré.

"-llosssss."

Acabé débilmente.

Él sólo me frunció el ceño y yo sonreí de nuevo. Tan fácil de tensar,
mi Heero.

"Tengo toneladas de mierda que hacer Heero."

Realmente no quería que se marchara, pero mi voz hacía sus propias
cosas a veces, ignorando el resto de mí.

"Porqué no vas a buscar a Quatre o Trowa y les interrogas. No est
Quatre en tu clase de política? Pregúntale."

Saqué mi libro de biología y lo moví sugestivamente. Frunció el ceño
aún más, pero casi pude ver los lados de sus labios temblando. Sabía
que debía lucir de una manera, cabello como salido de la cama, grandes
ojos afeminados, moviendo un libro de texto como un pañuelo; pero por
esa pequeña sonrisa estaba dispuesto a dejar plantada la vanidad.

"Idiota."

Gruñó, lo juro. Su voz ha sido profunda durante años, mientras la mía
ha bajado dramáticamente estos últimos meses. La manera en que se
rompía y hacía gallos me avergonzaba, pero así es la vida. Quiz
dentro de diez o más años pasaré realmente la pubertad y seré capaz de
reírme sobre eso.

Al cabo de un rato Heero me dejó, y cuando lo hizo me arrepentí de
haberle hecho marchar. Pero ya sabes- a veces pasar el tiempo con
Heero duele. Es más fácil cuando está lejos de mí así le puedo admirar
desde la distancia como todo el mundo.

Hice de tutor a Quatre muchas noches seguidas. Gran parte del tiempo
Trowa estaba allí, silencioso como siempre, a veces se inclinaba sobre
nuestras espaldas y observaba. Nunca me hablaba, pero Trowa estaba en
otro mundo del mío. Quatre era alegre y generoso, y incluso podías
conseguir una reacción de Wufei si le bromeabas- que raramente hacía-
pero Trowa, pensaba que me odiaba. Quizá lo hacía.

"Ahora lo entiendo."

Quatre cogió la idea después de una semana. Me sonrió, y yo estaba
bastante cautivado por cuán feliz le había hecho. También sus dientes
eran brillantes y blancos. Tenía un diente torcido de un accidente
cuando era más pequeño y su hilera de perlas blancas era un poco como
una bofetada en la cara. Quiero decir- no puedo ni tener /dientes/
normales.

"Muchísimas gracias Duo."

Parecía de repente un poco dividido. Quatre podía cerrarse como una
almeja- especialmente cuando estaba debatiendo. Su expresión se volvi
fría y calmada y distante y definitivamente imposible de leer.
Extrañamente, el resto del tiempo vestía sus sentimientos en el
rostro, hasta un burro emocional como yo podía leerlos. En ese momento
pude ver que estaba preocupado por algo, dientes perfectas mordiéndo
su labio inferior.

"Quédate y habla conmigo, Duo."

Dijo repentinamente, sonriéndome casi nerviosamente.

"Nunca llegue a conocerte debidamente -nunca."

Me congelé, y le miré perplejamente. Parecía sincero y casi
arrepentido. Nervioso, me reí y pasé una mano por mi pelo. La
electricidad estática hizo que los finos cabellos de mi flequillo se
pegaran a mis dedos.

"Heh."

Reí suavemente.

"No es un problema. No soy una persona muy accesible."

Parecía completamente sorprendido. Estábamos sentados al lado de la
cama, él recostado en la cama misma, yo encarándole diagonalmente,
espalda contra la pared.

"Er, bueno."

Empujó limpiamente sus libros de matemáticas bajo la cama y me sonri
gentilmente.

"Nunca hice el esfuerzo, verdad?"

No dije nada, entrecruzando mis dedos nerviosamente y mirándolos. No
acababa de entender porqué estaba tan nervioso. Había sido casi-amigo
de Quatre durante años. Pero también podías contar las conversaciones
que habíamos tenido en una mano. La mayoría del tiempo nunca me daba
cuenta de que había sido antisocial hasta que unos cuantos meses
habían pasado, y me di cuenta que a la única persona a la que había
dicho algo era Heero.

"Así que. Como conociste a Heero?"

Un tema seguro. Quatre y Heero se llevaban muy bien. La única vez que
había escuchado a Heero hablar tanto con alguien que no fuera yo, fue
cuando él y Quatre debatieron un problema durante el descanso para
comer. Su apasionada discursión que había tenido lugar entre los dos
me había sorprendido. Habían algunas cosas sobre Heero que
definitivamente no conocía.

"Aquí- en la guardería."

Sonreí repentinamente- dándome cuenta que había dado una respuesta
terriblemente corta.

"Los dos fuimos enviados aquí cuando teníamos unos siete años. Nos
odiamos durante una temporada, pero al cabo de unos años nos hicimos
mejores amigos."

Quatre asintió seriosamente. La luz del atardecer de la ventana hacía
sus ojos grises y a su cabello una plateada versión del rosa.

"Me apunté en el primer año de primaria, así que nunca supe cómo os
conocisteis. Supongo que soys amigos realmente cercanos. . ."

Debí haber lucido muy confundido porqué se apresuro a explicar.

"Quiero decir- a primera vista parecéis muy diferentes. Heero tiene
esta, presencia- sabes? Y tú eres tan silencioso."

Sacudió su cabeza.

" Pero en realidad no eres tan silencioso."

Me di cuenta que a Quatre no le importaba decir /exactamente/ lo que
pasaba por su cabeza. Su franqueza me sorprendió, pero de alguna
manera me gustó. Me recordaba la manera en que Heero y yo éramos con
el otro. No hay absolutamente ningún sentido en andarse por las ramas
con un amigo.

"No sé."

Mi boca iba sin mi de nuevo. Tuve unas ganas repentinas de escupir la
historia de mi vida. Necesitaba una libreta. Un boli.

"Es como si hubiera construido esta proyección de mí mismo.
Silencioso, estudioso, antisocial, alguien con quien es irritante
hablar, tímido."

Reí ligeramente a lo mal que eso sonaba.

"Y realmente podría haber sido como quisiera, pero de este modo era
más comfortable. Podía predecir cómo iba a reaccionar la gente ante m
fácilmente. Tenía años de práctica así que más o menos era
automático."

Mi voz era dura en el silencio de su habitación. Maldito acento
americano. Penserías que habiendo pasado gran parte de mi juventud en
Europa habría cogido algo. Aúnque Helen había hablado con acento
americano. No quería perderla.

"Lo entiendo."

Quatre me sonrió abiertamente, en realidad me sonrió abiertamente. Era
como un destello de luz de su boca. Pensé que iba a ser cegado.

"Te forzaré hasta que salgas de tu cáscara a partir de ahora- lo
prometo."

"Más te vale no hacerlo."

Le lancé una mirada falsamente furiosa, pero él siguió sonriendo
abiertamente. Buff, como podía hacer que parara? Miré a mi alrededor
en busca de armas- una almohada quizá? Sus libros de mates? Claro que
al final tuve que recurrir a la longitud de mi propia trenza,
enrollada alrededor de mi mano y uasada como látigo. Contraatacó con
su almohada y estuve bastante seguro que gritábamos lo suficientemente
fuerte para que las chicas de fuera nos escucharan.

-Fin del capítulo-


nuriko sakuma: glups... hay veces en que los reviewers me asustan de verdad...

Loreto W:bueno, tienes razón amiga. Lo siento mucho, es q esta vez me dejé llevar por las ganas de mantenerlo todo en secreto y no lo pensé correctamente. Ahora siento muchos remordimientos, pero por favor, déjame acabarlo de hablar con la autora antes de darte su e-mail, si? Es q hay una cosa q aún estamos discutiendo... También he de decirte que suelo decir lo que opináis de los fics q traduzco a las autoras originales , y de hecho pronto una de ellas me dará algún mensaje para q os diga en uno de los capítulos. Ya sabes q en todos los otros fics digo siempre claramente quién es la autora y todos los datos correspondientes, pero te pido por favor que me dejes mantener el misterio al menos hasta el próximo capítulo en que ya lo tendré todo solucionado.

Dayiah Lilith Belsebu Sekmet: sí, va a ser yaoi. A mi también me hubiera gustado ser la chica de Duo!!! (Laie le da un abrazo) Ya te agregaré al msn... cuando me conecte, es q últimamente estoy ocupada y no lo hago mucho, pero prometo agregarte en cuando pueda.

Kaze-Icesword: te digo lo mismo q a Loreto W, por favor espera hasta el próximo capítulo en el q anunciaré la autora y su e-mail, onegai!

Kana Yuy: gracias por apoyarme, en capítulos como este en que recibo dos reviews de los duros me alegras un poco el día!! Eso sí, no voy a decir las parejas! ´Tendrás q vivir con la curiosidad un poco más, amiga, como yo lo hice cuando empecé a leerlo mwha ha ha!

Asr: iré subiendo el fic cada vez que tenga por lo menos 7 reviews, no tendrá un dia fijo. Me alegra que te parezca entretenido!!

Oriko Asakura: yo también pensaba que era Quatre! Es q eso de "una familia con dinero" ya nos dice prácticamente a gritos que es el adorable rubio, pero mira, este fic nos ofrece otra interesante alternativa. Me alegra que no te hayas quejado por mi deseo de mantener muchas cosas en secreto, Oriko-chan!!

Chibi Kakasha: q monaaaaaaaa!!! Haces 2o de ESO? Yo el año que viene empiezo Bachillerato (Laie hace una pose orgullosa) mwha ha ha! Y no encuentras un poco irónico tener que pedirle a Duo más autoestima?? A mi me sorprendió mucho pq generalmente es él quien pide eso a los otros. Si quieres agregarme al msn, adelante!!!

Agradecimientos generales: gracias a todos los que me habéis apoyado, y muchas gracias a los q me habéis agregado al msn. De verdad os parezco suficientemente interesante como para conocerme?? Wow, casi no puedo creerlo!! Muchas gracias y nos vemos dentro de 7 reviews!! XD