Capitulo 4: Bellatrix
- Hola.- saludó tímidamente y mirando al suelo marcó un circulo con el pie. Sirius se sentía extraño así, lo cierto es que no sabia mucho de la vida de su prima Bellatrix. Siempre que se habían visto, ella siempre había permanecido pegada a su madre y nunca se habían dirigido la palabra.
- Eh... hola- dijo Sirius y se quedo un poco cortado, pensando en que decir a continuación- ¿Así que vas a ingresar en Hogwarts? ¿eh?.
- Si- dijo ella con su mirada centrada en el suelo.
- Yo también ¿te gusta eso de ir interna a un colegio?- preguntó Sirius intentando llegar a algún tema de conversación.
La muchacha se encogió de hombros y siguió mirando al suelo incapaz de mirarle a los ojos.
- Andrómeda siempre dijo que daban bien de comer...- Sirius se dejó la frase a medias, no sabia si era conveniente hablar de Andrómeda delante de Bellatrix.
- Si- la muchacha alzó un poco la vista. Sirius se alegro de haber conseguido algo, aunque ella solo diera cortas contestaciones. Estaría bien caerle bien.
Mmmm...- dijo pensando en alguna propuesta que hacerle.
- Hola hermanito- una voz aguda interrumpió a Sirius.- ¿Qué haces? ¿echas de menos a tu querida prima Andrómeda?- su hermano apareció por detrás de Bellatrix con Narcissa sonriendo.
- Esta mañana te vi con papa llorando, imagino que no pudiste soportar la perdida de tu amada.- dijo Regulus mirando a Narcissa para que se divirtiera con el comentario. Efectivamente, Narcissa rió en el instante y le siguió el juego a su primo.
- Si, yo creo que eres el único de la familia que lamenta que no haya venido.- dijo Narcissa mirándolo de arriba a abajo.- Yo creo que deberías olvidarte de ella, porque ha sido capaz de enamorarse de un muggle antes que de ti.- Narcissa rió con ganas y Sirius se puso rojo.
- Yo si lamento que no haya venido.- la voz de Bellatrix interrumpió la escandalosa risa de su hermana. Regulus abrió la boca y la observo con atención, como sin poderse creer que hubiera hablado.
- Vaya, pensé que eras muda.- le espetó este, como maldiciendo que hubiera interrumpido la humillación de Sirius. Pero Bellatrix solo se limitó a observarlo con sus enormes ojos claros y Regulus le devolvió la mirada extrañado por la reacción de la chica.
- Eso es porque nunca te has molestado en hablar con migo.- dijo Bellatrix apartando los ojos hipnotizantes de el y haciendo que su pelo se moviese con rapidez.
- Vamonos.- le indicó Narcissa dirigiendo una mirada asesina a su hermana.- esto es penoso.- y Regulus y Narcissa se fueron por la puerta del salón hacia el interior de la casa. Acto seguido, Bellatrix hizo una mueca maliciosa y volvió a mirar al suelo para seguir haciendo círculos con el pie.
- Gracias por ayudarme a echarlos, aunque lo hayas conseguido tu sola.- le dijo Sirius con picardía.- ¿de verdad echas de menos a tu hermana?.
Bellatrix asintió con la cabeza y por primera vez le miró a los ojos.- Si, las cosas sin ella van a ser mas aburridas.
- Bueno... pero en Hogwarts la podremos ver ¿no?. Por cierto, ¿Sabes donde se aloja ahora?
Bellatrix negó con la cabeza.
- Ah, que pena...-pero Sirius dejó de hablar cuando un hombre de piel morena y un poco gordo apareció en el salón quitándose un sombrero puntiagudo de la cabeza. Sirius lo miró sonriendo y Bellatrix al observar la reacción de Sirius también se fijó en el.
- ¡¡¡ALPHARD!!!- exclamó el padre de Sirius con alegría.
- Hola hermano,- dijo su tío Alphard saludando a su hermano con un abrazo.
- Ejem...- la madre de Sirius apareció con el mismo traje rosa que había llevado en el desayuno el día anterior y le tendió la mano a Alphard con distancia.
- Hola querida- saludo con educación su tío haciendo una reverencia, su madre le contestó con una de sus falsas sonrisas. De bien era sabido en la familia que su tío y ella no se habían llevado muy bien.
Alphard fijó la vista en Sirius y Bellatrix.
- Hola Sirius ¿cómo esta mi sobrino favorito?- le saludó su tío acariciándole el pelo.- ¿y esta chica tan bonita que esta tu lado quien es?- dijo cogiendo a Bellatrix en brazos y esta se sonrojó.
- Bueno Alphard... siento que no podamos estar mas tiempo juntos, es que tengo negocios que atender esta noche ¿sabes?. Y son muy importantes para mi... si no me voy ya, voy a llegar tarde, tendré que utilizar los polvos flu de la chimenea de mi despacho.- dijo su padre con una sonrisa nerviosa.
- ¿De veras?- dijo meciendo a Bellatrix entre los brazos- ¿dónde son esos negocios?.
- En el Callejón Knockturn... son gente rara... ya sabes.
- ¿Si? Bueno... pues entonces adiós, espero que tus negocios acaben pronto y nos podamos ver esta noche o mañana. Lo digo porque a lo mejor me quedo a dormir aquí.- dijo Alphard mirando a su padre.
- Oh claro, díselo a mi mujer ella te preparara una habitación de invitados.- Sirius noto como su tío hacia una mueca.- Bueno... adiós Alphard, adiós Sirius.- dijo su padre despidiéndose de su hijo.
Cuando su padre se alejó, su tío dejó a Bellatrix en el suelo.- Tomad chicos.- su tío saco de su bolsillo dos pequeñas bolsas atadas y le tendió una a cada uno. Cuando Bellatrix cogió su bolsa, noto que algo tintineaba en su interior, sin duda les había dado monedas de oro.- Guardadlas bien- dijo cucando el ojo y sin mas, se fue hacia la mesa donde estaban sentados todos los familiares.
Sirius guardó la bolsa rápido en su bolsillo y Bellatrix abrió la suya y exclamó:
- ¡Es dinero!- dijo con los ojos mas abiertos de cómo solía tenerlos habitualmente.
Sirius se puso un dedo en la boca- Shhhh, calla, si se entera mi hermano de que mi tío me ha dado dinero se lo dirá a mi madre y me lo quitara. Bellatrix se quedó sorprendida, pero asintió con la cabeza y se guardó el dinero en los bolsillos de su túnica de gala azul.
- ¿Nos vamos de aquí?- preguntó Sirius mirando el salón donde todo el mundo hablaba y recordando algo.- tengo que enseñarte una cosa.
- Vale- dijo Bellatrix y siguió a Sirius fuera del salón.
Durante un rato Sirius caminó por la casa notando que ella le seguía hasta que llegó a las escaleras que subían a la parte de arriba.
- ¿Qué es eso que querías enseñarme?- preguntó Bellatrix impaciente.
- Ah bueno, veras... le escribí una carta a tu hermana y había pensado que podríamos enviársela.- dijo Sirius en tono de propuesta.
-Ah, ¿sabes donde vive ahora?- dijo su voz detrás de él.
- No, pero recuerdo que un día mi padre le ordenó a Stela que le llevara una carta a un hombre sin dirección y consiguió llevársela.
- ¿Stela? ¿Quién es Stela?- preguntó Bellatrix extrañada.
- Es la lechuza de la familia.- explicó Sirius.- esta ya un poco vieja pero es muy inteligente, mi padre aun la utiliza para importantes envíos.
- ¿Vamos a subir a la lechuzeria?- dijo con extraña fascinación.
- Eh, si- Sirius se detuvo porque escucho un ruido.- ¿Has oído eso?.
- ¿El que?- estaba claro que no lo había oído.
- He escuchado un ruido, no me gustaría que mi hermano y Narcissa nos estuvieran siguiendo sobre todo, porque podría tener problemas con mi madre.
Bellatrix se quedó quieta y afinó el oído.- Me parece que no oigo nada.
- Mejor- dijo Sirius y continuó subiendo.
Después de mucho subir escaleras llegaron a la parte mas alta de la casa, donde se encontraba la puerta de la lechuzeria. Era una puerta vieja y se mantenía cerrada con un alambre. Desde fuera se podían oír a las lechuzas armar jaleo. Sirius miro a su espalda para asegurarse de que nadie les seguía.
- Si quieres yo vigilo mientras tu mandas la carta.- dijo la morena al detectar la preocupación de Sirius.
- No te preocupes, si nos han estado siguiendo, entraran de todas formas.- dijo y quito el alambre de la puerta para tirar de ella.
Cuando la abrió, un olor a pájaro inundo el pasillo, sin mencionar el ruido de las lechuzas. La lechuzeria de Grimmauld Place era una pequeña habitación de gran altura. En la parte mas alta tenia dos ventanas abiertas que era por donde solían entrar las lechuzas y tenia colgados en las paredes algunos palos donde las lechuzas reposaban y dormían. En el suelo había un comedero lleno de pienso y otro lleno de agua. Los dos entraron rápido y cerraron la puerta.
Sirius se sacó la carta de su prima del bolsillo, y la bolsa de oro de su tío Alphard cayó al suelo haciendo que su contenido sonase en el suelo de la lechuzeria.
- ¡Vaya!- exclamó cogiendo la bolsa de oro y poniéndola en una mesa vieja llena de plumas y mierda.
- ¿Dónde esta Stela?- preguntó Bellatrix mirando a arriba donde todas las lechuzas descansaban en los palos. Una lechuza blanca y con las plumas moteadas bajó y se poso en el suelo como si hubiera entendido que la llamaban.
- Hola Stela- dijo Sirius y se agachó para atarle la carta en la pata.- Llévale esto a Andrómeda.. Llévaselo a Andrómeda. ¿me entiendes?.
La lechuza no contestó pero al segundo salió volando por la ventana.
- Espero que lo haya entendido.- dijo Sirius pero notó que Bellatrix estaba quieta como pendiente de otra cosa. Al hacerse el silencio, descubrió de lo que estaba pendiente. Se oían pasos y la puerta de la lechuzeria se abrió y apareció su hermano.
- ¿Qué hacéis aquí? ¿ahora os gusta estar entre mierda?- preguntó su hermano con superioridad, Narcissa entró después de él tapándose la nariz.
- No- contestó Bellatrix como si no fuera una pregunta retórica.
- Hemos venido a darle de comer a las lechuzas ¿no tenéis otra diversión que seguirnos?
- La verdad es que no hermanito, las cosas están muy aburridas abajo, pero tampoco es que os echemos de menos.- dijo Regulus sonriendo.- ¿y dime que es eso de que habéis venido a darle de comer a las lechuzas?. Kreacher vino a darles esta mañana.
- A ti no te importa lo que hagamos.- le cortó Bellatrix y Narcissa le dedico una segunda mirada de odio a su hermana.
- ¿Sabes?. Estas mas guapa callada.- le dijo Regulus entrecerrando los ojos y cuando los abrió algo ilumino su rostro.- ¿Qué es esto?- dijo dirigiéndose a la mesa donde Sirius había dejado al bolsa de oro. Regulus la cogió entre las manos pero Sirius permaneció quieto.- ¿Quién te la ha dado?.
- Nadie, son mis ahorros.- dijo Sirius con una mirada de advertencia.
- Pues si que ahorras tu rápido.- dijo abriendo la bolsa y mirando el contenido.- Creo que se la llevare a mama para asegurarme de que no me estas mintiendo.- dijo y Narcissa se rió de él desde la puerta. Sirius sabia que se iba a quedar sin bolsa de oro, por mas que le doliera, cuando Regulus le llevara la bolsa a su madre, esta le quitaría el dinero. Observo con melancolía como su hermano se dirigía a la puerta con la bolsa entre las manos cuando alguien se la quito.
- ¡Es mía!. Si la quieres, quítamela.- Regulus observo con los ojos abiertos como Bellatrix le había quitado la pequeña bolsa de las manos. Este arremetió contra ella pero le lanzó la bolsa a Sirius que la cogió con habilidad.
Narcissa y su hermano se pusieron contra la puerta para asegurarse de que ninguno de los dos saliera.
- Ven, cogela.- Sirius le tendió la bolsa a su hermano y este avanzó hacia ella, pero cuando parecía que la iba a coger, le pasó la bolsa a Bellatrix quien salió corriendo hacia la puerta y tiró a su hermana que cayó al suelo.
Sirius salió detrás de ella y ambos bajaron las escaleras a toda prisa. Su hermano les seguía y parecía que les pisaba los talones, así que, adelantó a Bellatrix y le dijo:
- Corre y sígueme a mí.- esta no contesto pero la bolsa que tenia entre las manos no paraba de sonar de lo rápido que corría. Cuando Sirius llegó al segundo piso, descubrió a lo lejos la puerta de su habitación abierta y aceleró las piernas.
- No te separes, ya falta poco.- le dijo cuando noto que la chica jadeaba de cansancio y con un movimiento rápido cogió a Bellatrix del brazo, la introdujo con él en la habitación y cerró la puerta con llave. Por detrás de la puerta, oyó como su hermano golpeaba la puerta y gritaba:
- ¡Abre Sirius, se lo diré a mama!.
Bellatrix y Sirius comenzaron a reír, aunque sus risas eran ahogadas porque les faltaba el aire. Después de un rato, cuando Regulus dejó de golpear la puerta, Sirius cogió la bolsa de oro y empezó a buscar un escondite para ella.
- ¿Crees que se chivaran a tu tía y a mi madre?- preguntó Bellatrix mientras Sirius probaba a esconder la bolsa detrás de un espejo.
- Puede ser, espero que para entonces mi madre ya este borracha.- le contestó con sencillez.
- ¿Qué tal si la escondes detrás del armario?- le sugirió Bellatrix observando la habitación.
- No creo que sea una buena idea, Kreacher esconde ahí trozos de queso, ya lo he pillado muchas veces. Seguro que la encontrara.
Sirius rebuscó en el cajón de su mesa y encontró un rollo de celo mágico. Luego cogió la bolsa y la pego con celo en la parte de arriba de debajo de su mesa.
- No creo que aquí lo encuentren por ahora.- dijo y se levantó tan rápido como pudo.- Será mejor que bajemos abajo antes de que Regulus convenza a mi madre para que suba a la habitación.
-Tienes una habitación muy bonita.
Sirius la miró, una sonrisa surgió en sus pequeños labios y se quedo hipnotizado mirando sus ojos azules brillantes que contrastaban con su pelo largo negro y liso que resaltaba toda su hermosura.
- Tu también eres muy bonita.- Bellatrix se sonrojó y miró al suelo y Sirius no pudo creer que hubiera dicho eso.
- ¿Bajamos?- le preguntó intentando romper el hielo de la situación. Bellatrix asintió aun sonrojada y abrió la puerta para salir.
Cuando llegaron al salón, Sirius se esperó lo peor. En cuanto los vieron, Regulus corrió a avisar a su madre para acusar a Sirius, y Narcissa se dirigió a Bellatrix y comenzó a gritarle enseñando su vestido manchado de plumas y heces de lechuzas y con todo su pelo rubio de bucles despeinado.
- Mama, Sirius tiene dinero escondido y se ha encerrado en su habitación y no me ha dejado pasar.
Pero la madre de Sirius que estaba hablando con Selene parecía un poco molesta por la interrupción.
- Son mis ahorros.- contestó Sirius indignado.
- Sirius, ¿cuántas veces te tengo que decir que no interrumpas a los mayores?.- Regulus lloriqueo y se marchó malhumorado.
Pero Sirius intentó insistir.- Mama, tenia dinero ahorrado y Regulus insinúa que me lo ha dado el tío pero es mentira, lo he ahorrado yo mismo...
Su madre dio un gemido de exasperación.- Sirius, ya te he dicho que no me interrumpas cuando estoy hablando.- y su madre prosiguió hablado con Selene.- Este muchacho, cada día me da mas disgustos, si fuera solo un poco como su hermano, menos mal que mañana lo voy a llevar a la estación para que pueda coger el tren que va a Durmstang ...
- ¿Qué?... No- Sirius salió corriendo en dirección contraria y tropezó con Bellatrix.
- ¿Qué pasa?- preguntó esta aturdida.
- Mi padre no cumplió su promesa. Me prometió que le diría a mi madre que iría a Hogwarts y no la ha cumplido, ahora ya no podré ir a Hogwarts.
- ¿No vas a ir a Hogwarts? ¿Por qué?- preguntó interesada.
- Quieren que vaya a Durmstang, es un colegio en el que aprenden artes oscuras, yo no quiero ir allí.
- ¡Wow! Un colegio de Artes Oscuras. A mí me encantan las artes oscuras. Ojalá yo pudiese ir.
- Pero ¿qué dices?,- dijo Sirius casi enfadado.- ¿cómo te puede gustar eso?, es muchísimo mejor Hogwarts.
Bellatrix se quedo callada por un momento.- Pero... a lo mejor a tu padre se le olvido decírselo a tu madre.
- Eso es lo que voy a averiguar y lo voy a averiguar ahora.- dijo Sirius bastante decidido.
- Piensa, tu tío dijo que a lo mejor tu padre venia para esta noche, aun tienes tiempo para hablar con él.
- ¿Y si no viene?- dijo Sirius desesperado imaginándose lo peor.- Mi madre dice que mañana por la mañana me llevaran al tren de Durmstang.
- Me hubiera encantado ir contigo a Hogwarts- confesó Bellatrix un poco triste.
Pero entonces un pensamiento cruzó la cabeza de Sirius.- Mi padre dijo el Callejón al que iba: ¿era el Callejón Knicktorn? ¿el Callejón Knocktorn?
- El Callejón Knockturn- corrigió Bellatrix.
- Eso, yo haré todo lo posible para que mi padre me lleve a Hogwarts, el me lo prometió y se que me llevara y sino me lleva, quiero que me lo diga a la cara antes de salir de aquí, por lo menos averiguare si es igual que mi madre.- dijo Sirius con decisión.- y conozco una forma de llegar hasta ese callejón.
- ¿¡VAS A IR AL CALLEJÓN KNOCKTURN?!- el gritó sorprendió a Sirius.
Bueno, para mi gusto, este ha sido el capitulo que he escrito que mas me ha gustado. Ya os digo que de este fic voy a hacer 8 o 9 capitulos, no mas. Por cierto, se me olvido a decir que todo aparte de la trama de la historia pertenece a JK Rowling. vistad su pagina y tambien visitad esta que esta muy graciosa:
Contesto reviews:
Uruguaya: Me alegra que te haya gustado tanto mi fic. Te tengo que decir que el tuyo tambien me gusto bastante, lo unico esque no tuve tiempo para leerlo pero ami me encantan las historias tipo culebrón. Mis parejas preferidas son: Hermione/Ron y Harry/Ginny.
Ginny84: Si no me equivoco tu eres la chica de el foro, muchas gracias. Me meti en tu nombre pero no habias escrito ningun Fic.
Vicky: ESCRIBEME!!!!
La gente de 4º DEL CEFA: Que bien que media clase se haya leido mi fic y nadie haya sido capaz de ponerme un review aunque fuese poca cosa. A lo mejor esque no sabeis como se ponen... Ahmmm.... pues le dais al botoncito que esta abajo a la izquierda, TT'
ADIOS.
