Había pasado poco menos de un mes desde que el peli-azul llegara a el pueblo de Inaba.
En este tiempo recorrió cada centímetro del pueblo, aunque como es obvio no tardó mucho tiempo en conocerlo a fondo.
Encontró un par de lugares muy adecuados para el descanso y la relajación.
Uno era aquel mirador donde había llegado y el otro era cerca de un pequeño río.
Pero no solo se dedicó a explorar el lugar, sino que también busco la puerta azul que lo llevaba a la Velvet Room.
El necesitaba respuestas de lo que estuviera pasado en este lugar, y solo una persona podría aclarar sus dudas.
Si bien su contrato había terminado en la pelea final contra Nyx, aún tenía la esperanza de poder encontrar alguna señal para hablar con Igor.
Pero no pudo encontrar nada.
También descubrió que dejó de sentir a sus demás personas con excepción de tres.
Como le había dicho su "otro yo" anteriormente, el ya no era un comodín.
No era que le afectase mucho, pero sin duda lo dejo un poco vacío, más de lo que ya está sintiendo en esos momentos.
Después de todo, todos los vínculos que había formado durante el año que llegó a Iwatodai ya no existían, o por lo menos la mitad de estos ya que aun podía sentir los vínculos que hizo con su equipo, pero eso no quitaba el hecho de que dolía no tenerlos todos, si, otra razón más para sentirse miserable.
Quería regresar a como diera lugar, pero ahora se planteaba muchas preguntas, una de ellas era si todos sus conocidos aún tenían recuerdos de él.
Entonces la idea de volver poco a poco se fue atenuando.
Pero dejando de lado esos pensamientos negativos, también descubrió algunas cosas interesantes.
Por un lado, ganó la capacidad de sentir cosas del ámbito sobrenatural.
Por otro lado, descubrió que podía invocar a su persona sin la ayuda de un Evoker, y más aún, podía hacerlo en cualquier momento del día.
No necesitaba de algún tipo ritual o la Hora Oscura, no, al parecer pudo obtener todo el control de su persona, además que la falta de SP ya no era un problema.
Desde que dejó de ser cien por ciento humano, pudo utilizar parte de la energía oscura que utilizaba Thanatos.
Fue cuando se dio cuenta de que tan ciertas eran las palabras de su otro yo.
Ser un segador era sentirse más apegado a su persona más poderosa.
Y eso le hizo acordarse de cierto niño con traje de recluso que lo venía a visitar en la Hora oscura.
Pharos...
Si, la versión joven de Ryoji, la cual aparentemente era este mismo.
Sin embargo, algo le decía que ambos eran diferentes, pero no sabía el que era.
"Sonido de alarma"
"Sonido de alarma"
"..."-.
"Sonido de alarma"
"Sonido de alarma"
"Cállate..."-.
"Sonido de alarma"
"Sonido de alarma"
"Que te calles"-.
"Sonido de alarma"
"Sonido de..."
[¡Crash!]
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"..."-.
"Estúpida alarma"-.
Con un gran suspiro de resignación, Minato, que hasta hace poco se encontraba durmiendo, fue despertado por la alarma que había programado la noche anterior.
Si bien no era culpa del pobre aparato, había colmado la paciencia del oji-gris.
Este había esperado por un tiempo más antes de comenzar a levantarse.
Le tomo unos cuantos segundos adaptarse a la sensación de estar despierto, y cuando ya estuvo completamente despierto solo pudo llevarse una mano a la cara para comenzar a frotarse con leve irritación.
La razón de esto era simple, este era su primer día de clases, aunque estás ya hubieran comenzado hace mucho.
Decido seguir las palabras de su otro yo y de alguna manera pudo inscribirse en la preparatoria local.
Para su perplejidad volvió a quedar en el mismo año que su primera vez en Gekkoukan, pesaba que al menos estaría en el último año.
Pero al parecer, ya que aún tenía su apariencia de 16-17 años además de no tener los documentos que contarán con su año escolar en Iwatodai, resultó que tenía que volver a empezar desde segundo.
Era un dolor en el culo, ya que tenía todo el maldito conocimiento por todas las malditas horas que se quedó estudiando en su dormitorio.
Era una jodida enciclopedia andante por el amor de Kami.
Tuvo que convertirse en una si quería demostrar sus conocimientos y estudios a Mitsuru para que pudieran pasar tiempo, además de mejorar más el enlace de la [Emperatriz]… Aunque por otro lado también fue por el hecho de comenzar a buscar una relación con ella.
"Espero y por lo menos no tener profesores de mierda"-.
Comento con desgano.
30 minutos después
Ya pasado un tiempo, Minato había terminado de prepararse para ir a su nuevo instituto.
Se había duchado, vestido con el uniforme y desayunado algo de fruta.
Tomo su mochila, ajusto sus auriculares, preparo una sombrilla y salió de su apartamento.
Cerró la puerta detrás de él, le puso llave y comenzó su camino hacia el instituto.
Era un día gris y lluvioso, uno de los mejores días para él, aunque en este tiempo que lleva viviendo en Inaba se dio cuenta que llovía con frecuencia y después de que está se fuera era seguida por un par de días de neblina.
Era un tanto extraño, él podía jurar que sentía un sentimiento algo familiar, como si esto fuera parte de aquel lugar en donde vivo el infierno mismo.
Tartarus.
Si, aquella torre que era la representación del infierno en la tierra.
Aunque por obvias razones, está niebla solo era un juego de niños en comparación con aquel maldito lugar.
Sin embargo, habían pasado una sería de pequeños sucesos que lo habían dejado pensativo.
Esto fue debido a que poco después de instalarse en pueblo, una reportera fue asesinada al igual que una estudiante que resultó ser testigo del cuerpo de la reportera.
Hasta ahora todo normal, pero esa normalidad se fue al carajo cuando ambos cuerpos fueron encontrados colgados boca abajo de postes de luz.
Ambos eventos comenzaron a desatar pánico en el poblado.
Minato supo que algo malo estaba relacionado con ambos asesinatos, podía sentirlo.
En si interior, Thanatos le decía que esto estaba relacionado con energía negativa, posiblemente relacionado con las sombras.
Minato quería ignorar eso, pero sabía que no podía, después de todo había hecho un compromiso con sigo mismo y con su otro yo ayudar con los eventos que sucederían próximamente.
Y hablando de más sucesos, él se encontró de nuevo con el mismo joven peli-gris que vio en su primer día en Inaba, pero no estaba solo, él se encontraba acompañado por un joven de pelo castaño con audífonos sobre su cuello, una joven vestida de rojo y aquella chica de chándal verde a la que le pidió indicaciones sobre su apartamento.
Todos ellos empezaron a actuar algo raros y a tener conversaciones sobre algo relacionado a los asesinatos y sobre un tan canal de media noche o algo así.
¿Qué diablos se traían esos tipos?
Era la pregunta que sonaba con frecuencia en su mente, además, pudo sentir una energía muy similar a la que el poseía del chico peli-gris.
Era como si en su interior, como si hubiese más seres o algo así.
Pero no tuvo que pensar mucho ya que se dio cuenta de que aquel joven podría ser un comodín, tal como lo fue alguna vez.
Y eso solo quería decir una cosa... Él tenía contacto con la Velvet Room.
Él podría ser la clave para contactarse con Igor, pero, a pesar de ser así, ¿Aún sería recibido sin tener un contrato?
Después de todo, Igor dijo algo relacionado sobre que siempre seria un invitado, pero desde que regreso a la vida no había podido encontrar la puerta hacia la Velvet Room, incluso no tenía su llave
"Jodido destino..."-.
Se dijo a sí mismo, tal vez los cielos lo odiaban y Kami solo se divertía jugando con él, en este retorcido juego.
No sabía que esperar, por un lado, tenía que cumplir con la petición de su otro yo, por el otro tenía que hacer algo con su nueva oportunidad, era demasiado perezoso como para encontrar una solución a su problema, y no dejaría que alguien más lo hiciese.
"¡Cuidado!"-.
En un último momento, un grito lo saco de sus pensamientos y con gran agilidad se apartó del camino antes de que alguien montado en una bicicleta lo golpeara.
[¡Golpe!]
Minato se quitó los auriculares y dirigió su mirada al lugar de impacto, el cual estaba cerca de un bote de basura.
El vio como alguien se encontraba adentro de este mientras la bicicleta se encontraba un par de metros más adelante.
El peli-azul vio como aquel joven sin identificar ya que su parte superior se encontraba metida en el bote de basura, pataleaba sin cesar para intentar salir de aquel bote.
Minato solo vio esto con cierta diversión y resignación.
(Pobre diablo).
Fue su único pensamiento.
Entonces ya sintiendo algo de lástima por aquel tipo decido sacarlo de una de aquel bote de basura.
Se acercó, lo tomo de una pierna y de un rápido movimiento lo logro sacar.
"¡Joder aire al fin! Sentía que me está comenzando a ahogar... Muchas gracias ¿ami-go?"-.
Aquel sujeto no pudo terminar de hablar cuando se dio cuenta de que estaba solo, miro a todos lados, pero no vio a nadie cerca.
Solo cuando miro hacia delante pudo ver a lo lejos cerca de la entrada a la escuela a un joven de pelo azul, el cual se encontraba mirando al frente.
Minato, después de ayudar a aquel sujeto, rápidamente había llegado a la entrada de la academia y pudo leer el nombre de está en la pared de alado.
Yasogami High School.
Era una academia algo pequeña, pero viniendo de una como Gekkoukan no era de extrañar que esto se le hiciera muy minúsculo.
Apenas se podía decir que esto era una quinta o sexta parte de la otra, pero no era de extrañar ya que era una academia rural.
No le molestó en lo absoluto, después de haber quedado huérfano, estuvo viviendo con varias familias por todo japón y en más de un estudio en pequeñas escuelas.
No fue hasta hace 4 años que pudo entra a una como lo fue Gekkoukan.
"Se ve agradable"-.
Se dijo así mismo, y sin espera más entro.
Minutos después
Después de haber entrado y hablado con el director a cargo, pudo terminar de inscribirse en la escuela.
Aunque fue muy repentino fue bien recibido, aunque le dijeron que mañana venga a iniciar las clases el insistió en no era necesario ya que había perdido varios días y no quería arriesgarse a entrar después de los exámenes.
El director no tuvo problemas y rápidamente le asignó una clase.
Al parecer el nombre de su profesor sería Kaneshiro Morooka, este fue llamado directamente y fue presentado a Makoto.
La reacción de aquel hombre era algo de disgusto y enojo, pero rápidamente tomo su papel como maestro y le ordenó al peli-azul que le siguiera a clase.
Cuando llegaron a esta, Morooka le dijo que esperara afuera y entro bruscamente al salón de clases.
"Muy bien, bastardos, cierren sus bocas y escuchen, al parecer tendremos a otro pobre diablo de la ciudad que fue mandando a este pueblo alejado de la mano de Dios. Chicas, al igual que Narukami no le presten atención al pobre tipo y no se hagan ideas equivocadas"-.
Comento de manera rápida y brusca dejando a todos los alumnos algo sorprendidos por esto.
Fue entonces que comenzaron los murmullos por todo el salón, cabe decir que esto le llamo la atención de 4 adolescentes en particular.
"¿Escucharon eso? Al parecer tendremos un nuevo compañero"-.
Comento una chica de chándal verde a sus otros compañeros.
"Je al parecer ya no serás el nuevo, Yuu"-.
Comento un chico sentado atrás del mencionado, entonces hablo una chica con camisa roja y una diadema del mismo color en la parte superior de la cabeza.
"Y al igual que Narukami-kun, también viene de la ciudad, aunque estoy comenzando a sentir algo de pena por él, mira que acabar en la clase de King Moron..."-.
Termino de decir con algo de pena, era verdad, el pobre muchacho la pasaría mal con alguien como Morooka dando lata a cada momento.
"..."-.
Por otro lado, el ahora conocido como Narukami Yuu, se preguntaba sobre este nuevo compañero, algo le decía que las cosas tomarían un rumbo diferente ahora que esto pasaba.
Solo espera que no se viera involucrado con toda la situación referente a la niebla y al canal de media noche, no quería que más se vieran afectados.
"Muy bien, ¿Que tanto esperas? Entra de una maldita vez y preséntate que no estoy para perder mi tiempo con otro nuevo estudiante de ciudad"-.
Fueron las palabras del maestro lo que saco de sus pensamientos a Yuu para mirar a la entrada, y no fue el único, todos los demás hicieron lo mismo y esperaron a que el nuevo entrara.
"..."
Sin tardar más, Minato comenzó a caminar y se paró frente a la clase, esto, causo que la clase estallara en alboroto.
Por un lado, las chicas comenzaron a hablar entre ellas mientas le mandaban miradas interesadas al peli-azul, al parecer su apariencia fue lo suficientemente buena como ser puesto en la mira de todas las féminas.
Por el lado de los hombres, estos comenzaban a murmurar pequeñas maldiciones y quejas sobre que era injusto que solo estudiantes varones entraran es la clase.
Y si nos centramos en el pequeño grupo de cuatro, estos tenían opiniones diferentes.
La chica de rojo lo miro con pensamientos profundos, hasta que un pequeño rubor apareció en sus mejillas.
Con la chica del suéter verde, está reconoció a aquel joven y se sorprendió ya que no esperaba verlo en la escuela, mucho menos que fuera un nuevo compañero de clase.
Ahora con los miembros masculinos, el joven castaño con audífonos en el cuello le dio una mirada curiosa a Makoto, tal parece que también logro reconocerlo de esta mañana, y se estaba preparando para darle las gracias por la ayuda.
Finalmente, con el peli-gris, este se encontraba analizando al peli-azul ya que algo en él le llamo mucho la atención, él pudo sentir una pequeña sensación familiar venir del otro muchacho.
No sabía lo que era ya que era mínima mente perceptible, pero algo le decía que este tipo tenía algo similar que él y sus amigos.
Regresando con Minato, este solo se quedó mirando a la clase mientras los analizaba con desinterés.
Él ya había reconocido a tres de ellos, al tipo que ayudo está mañana y, a la chica que lo ayudo a encontrar su apartamento y finalmente, a sujeto que vio en la gasolinera en su primer día en Inaba.
Pero eso no fue lo que captó su atención en sí, sino que pudo sentir aquella sensación familiar de portadores de Personas, incluida la chica de rojo que lo miraba con atención.
"Vamos que no tengo tu tiempo, preséntate de una buena vez"-.
Antes de siquiera terminar de analizar a todos, fue sacado de su atención por un brusco Morooka que está impacientándose.
Minato solo le dirigió una mirada entre fastidiada e indiferente.
Esto hizo retroceder a Morooka un paso ya que pudo sentir hostilidad hacia su persona, pero lo que lo dejo helado fue ver por unos breves momentos, un ojo de color amarillo que lo atravesaba.
Pero tan proto como vino esa intención, se fue, como si no hubiera pasado nada.
A esto, hizo que la clase volviera a estallar en alboroto ya que el nuevo estudiante logro hacer que el bastardo de Morooka se quedará congelado.
Yuu no podía creerlo, ¿el nuevo había logrado intimidar a Morooka con solo una mirada?
Incluso el en su primer día solo logro hacerlo retroceder un poco, pero esto ya era muy diferente.
¿Quién diablos era este tipo?
Más y más preguntas comenzó aparecer en su cabeza, pero no fue hasta que el peli-azul comenzó a hablar que lo saco de sus pensamientos.
"Arisato Minato... Eso es todo"-.
Fue lo único que dijo.
Solo su nombre fue dado ya que al parecer no le importaba mucho la opinión de los demás.
Tras decir su nombre, el maestro pudo volver a la calma y le dijo que se sentará al final de la fila, pegado a la ventana.
Makoto no dijo nada y comenzó a caminar hacia el lugar que sería su asiento.
Ignorando a todos, dejó su bolso a un lado y se sentó mientras miraba hacia delante por si el maestro tenía algo más que decir, pero en su mente solo pudo quejarse.
(En serio, ¿El último asiento pegado a la ventana? Esto ya es muy cliché, y más con mi apariencia de emo... Joder que bonita forma de empezar mi nuevo año escolar)
(Solo espero y todo esto no se convierta en otro dolor de cabeza... Sino, creo que tendré que recurrir a un buen trago de alcohol como la última vez... Hablado de eso, ¿Como estará ese viejo monje?)
Y así comenzó su primer día de clases, escuchando toda la mierda que Morooka tenía que decir, realmente le recordó a otro estúpido maestro de su antigua escuela, pero dejo de tomarle importancia y solo siguió fingiendo que escuchaba la clase.
Horas más tarde
Al fin había acabado las clases y ya todos comenzaban a preparase para irse, Minato solo conecto sus auriculares a su querido mp3 y busco algo de música para matar los últimos minutos de clase.
Cuando al fin todos empezaron a salir del aula, tomo sus cosas, se levantó y se preparó para irse, pero en eso su atención fue llamada por aquel grupo de cuatro.
Se pregunto qué era lo que querían, pero supuso que no sería malo interactuar algo con ellos, después de todo así podría obtener más información sobre la situación que este lugar.
"¿Puedo ayudarlos?"-.
Fue entonces que aquel joven castaño inicio la conversación.
"Mucho gusto, amigo, me llamo Hanamura Yosuke y quería agradecerte por lo de esta mañana"-.
"No fue nada, por cierto, ¿Está bien tu bicicleta?"-.
"D-Demonios hombre, ¿Tú también?"-.
En ese momento, la chica con el suéter verde se unió a la plática
"Jajaja, no solo fue Narukami-kun, sino que también Arisato-kun pregunto por tu bicicleta en lugar de ti, que triste"-.
"Joder Chie, no me lo recuerdes"-.
Yosuke se quejó ofendido.
"Vamos, vamos, no monten un escándalo delante de alguien nuevo, no es de buena educación"-.
Fue el turno de hablar de la chica vestida de rojo.
"¿Ellos son pareja o algo así?"-.
Minato hablo mientras levantó una ceja un tanto divertido.
Los demás al escuchar esto, solo pudieron mirarlo en shock, Yosuke y Chie tenían caras aterradas ante eso.
La chica delante de el conocida como Yukiko solo pudo llevarse una mano a la boca e intento suprimir una pequeña risa.
Por otro lado, el único miembro del grupo de cuatro solo lo miro con asombro.
Este sujeto, Arisato Minato, ¿No tenía vergüenza por decir algo así? Mejor dicho, ¿Si quiera le importaba el tacto?
Suspiro con un cierto deje de cansancio y diversión, fue entonces cuando el peli-gris decido presentarse.
"Mucho gusto, me llamo Narukami Yuu y la chica de rojo es Amagi Yukiko"-.
"Un gusto conocerte, Arisato-san"-. Respondió la chica mencionada
"Espero y nos llevemos bien"-.
Fue en ese momento que Yuu levanto la mano para saludarlo, Minato, al ver eso correspondió el saludo.
En ese momento, no sucedió nada raro, pero ambos jóvenes sintieron algo familiar, pero decidieron dejarlo por el momento.
"Ya que es tu primer día, ¿te gustaría acompañarnos a comer algo?"-.
Pregunto Yuu, esperando que Minato aceptase.
"No es una mala idea, ¿Qué dices Arisato-kun?"-.
Apoyo Chie, ella también quería que el peli-azul fuera con ellos.
Minato solo miro al grupo y cada uno de ellos se veía ansioso por su respuesta.
Soltó un pequeño suspiro de resignación, pero al final decido aceptar.
"Muy bien acepto, lideren el camino"-.
Dijo, levantándose y comenzando a seguir al curioso cuarteto, esto podría resultar beneficio, por un lado, obtendría información sobre los sucesos resientes, y por otro lado, podría pasar algo de tiempo conociendo a todos.
Por alguna razón, él se sentía como cuando estaba con los miembros del S.E.E.S, era tan nostálgico que no pudo evitar sonreír un poco.
Tal vez esto no era del todo malo, solo esperaba que sea lo que fuera a pasar, no rompiera con esta agradable paz.
Fin del capítulo.