SIEMPREMENTE.

Otro fanfic de Draco y Ginny.

Drinny-Con 2022, sin fines de lucro, todo le pertenece a JK Rowling, le agradezco siempre por estar aquí y espero que lo logremos.

Capítulo/Día 1. Amor Eterno.

Y es que tal vez, Draco fuera a quererla siempre.

Cobardemente.

Distantemente.

"Siempremente."

Era casi una tragedia tenerla en frente en sus actuales condiciones: enflaquecido, despeinado, con un parche sobre la nariz…

Y ella tan bonita como siempre.

¿Cuánto tiempo habían pasado separados ya?

No el suficiente. Nunca suficiente.

Parecía que ella ni siquiera lo había notado, distraída como estaba con un aparador ¿qué vendían ahí? No importaba. Draco ya se había apresurado a entrar en esa tienda solo para poder mirarla desde el otro lado.

Y cuando captó su atención, a través de los maniquíes con equipo deportivo y ella dio un paso atrás, tomada por sorpresa, a Draco ya no le importaba su propio aspecto. Sólo quería cruzar miradas con ella, observar su reacción, preguntarle cómo había estado…

Ella. Ginevra Weasley.

Luego de retroceder un paso con las cejas levantadas por la sorpresa de encontrarlo, Ginny exhaló pesadamente y esperó a ver si Draco salía de la tienda a saludarla.

¿Y si no lo hacía? ¿Podría ella soportarlo? De pronto, parecía mejor idea irse corriendo de ese lugar.

La idea estaba bien, claro, que le fuera posible, era distinto.

Así que esperó sin aliento a lo que él haría. Una seña de que lo esperase, eso hizo.

Y luego de comprar cualquier cosa que encontró a su alcance, un guante para buscador, solo para hacer tiempito, Draco salió como si fuera una casualidad que estuviera en esa tienda.

-Ginevra.

-Hola.

-Ha pasado un tiempo…

-Ha pasado un tiempo.

Ginny comenzó a balancearse un poco nerviosa. No debería haber esperado, ahora él pensaría que ella seguiría haciendo lo que él quisiera.

Él no tenía esa esperanza, la había abandonado tiempo atrás. Pero ella no lo sabía.

-Te ves bien.

-Gracias—respondió ella mirándolo por completo ahora, él parecía herido-. Tu…

-Yo no, lo sé.

-¿Qué pasó? –preguntó fijándose en especial en el parche sobre su nariz.

-Se ve peor de lo que es en realidad.

-¿Te asaltaron?

-Ojalá—se alzó de hombros-. Discutí con mi padre, para variar…

-Para variar.

-Pero estoy bien. El parche hace lo suyo, fui a San Mungo y todo eso.

-¿A San Mungo? ¿Hace cuanto que has vuelto? –Ginny soltó las preguntas sin pensar, Draco no le debía explicaciones. Y sin embargo, le dolió comprender que no la había buscado en seguida.

-Unos días.

-Ah, unos días…

-No quería ir a buscarte con la nariz rota.

-¿Qué?

-Que quería buscarte, Ginevra… pero no con la nariz rota.

Ginny se guardó las manos en el abrigo, sobrecogida por la mirada de Draco y por supuesto, por esas palabras.

El tiempo que se habían alejado no era suficiente. Evidentemente.

-Lo lamento.

Si seguía mirándola así y si ella seguía mirándolo a él, iba a terminar arrojándose a sus brazos.

Tal vez ella iba a quererlo a él para siempre.

Valientemente.

Aferradamente.

"Siempremente".

Pero había pasado tanto…

Habían dejado que tanta gente, tantas cosas se interpusieran ¿y ahora?

-Debo irme.

-¿Ya?

-Ya.

-Cuando este mejor…

-No.

-Todavía no pregunto.

Ginny miró en todas direcciones buscando cualquier punto para dirigir su atención que no fuera él y la herida de su nariz. Se extrañó al darse cuenta de que estaban en medio de una multitud que hacía compras. ¿Cómo es que no la escuchaba? ¿Qué era esa impresión de que el tiempo se había detenido desde que lo había visto?

Compuso la mejor sonrisa que pudo.

-Adiós, Draco.

Y se fue entre la multitud.

Draco no hizo nada más, no corrió tras ella ni a sujetar su mano. No gritó su nombre para llamar su atención de nuevo. Nada.

Cuando se recuperó un poco, retomó su camino hacia su dirección previa a aquel encuentro: Gringotts.

Hubo una vez, cuando aún eran unos estudiantes de colegio, ingenuos pero sinceros, en que Draco y Ginny se habían jurado amor eterno. No habían podido con todas las pruebas y obstáculos en su camino, pero si ella aún sentía la mitad de lo que él, Draco vería la forma de recuperarla.

Debía llegar a Gringotts, para empezar.

DG

DG

Si lees esto, es porque a pesar de mis desmadres de ficker aun estas dispuesta a embarcarte conmigo en otra aventura Drinny ¡Gracias, de verdad por eso!

Espero que este reencuentro les deje ganas de leer por lo que suceda mañana.