Otro asunto... este fic lo voy a escribir siguiendo la trama de la película, pero quizá de vez en cuando vean algo del libro, por supuesto que unas cosillas se cambiarán debido a que el lindo Harry está dentro del fic... bueno, bueno, a contestar reviews.
_: Eh... que puedo decir... gracias por enviarme un review, solo hay algo que me gustaría preguntarte... ^_^U 'esto es increíble', lo tomo como bueno o como malo? Si lo fue escrito de forma er, como comentario que indica que no te ha gustado, pues, quizá sea la idea de juntar esos dos libros, simplemente puedo decir que aprecio que me lo digas, sin embargo es una idea que me llego y quise escribirla, aun así te agradezco mucho el review ^_^
Victor Zarzo: T_T muchas gracias, realmente te agradezco esos ánimos que me das y bueno, trataré de seguir haciendo capítulos que te gusten ^_^
Daiko Black: ¿de verdad te ha gustado? T_T no sabes lo preocupada que estaba de que no fuera así ¡¡gracias!! Y prometo que seguiré adelante.
Looony Moony: Me alegro muchísimo que te haya gustado... ¡¡Gracias!! Y porrr supuesto que seguiré escribiendo ;-) es algo que me gusta mucho.
GaRrY: Hooola… T_T me alegra tanto que te guste mi fic, muchas gracias, no sabes como me alegra eso, espero que este capítulo también te agrade. Gracias.
Noega: Hola ^_^... jejeje en eso tienes razón casi no hay fics en español donde junten Harry Potter con El señor de los anillos, esa fue una de las razones que me llevaron a escribir este y, pues, la otra fue la tercera película. Te agradezco mucho que me hayas mandado un review T_T muchas gracias, y tratare de actualizar lo más pronto posible, gracias.
Allison Black: ^o^ ¡Muchas Gracias! Te agradezco mucho que hayas leído mi fanfic. Jejejeje, si entiendo, ^_^ todo mundo desea ver a Legolas y Aragorn _o_ a quien no jejeje. Sip, no te preocupes seguiré escribiendo, por supuesto, en este capítulo ya sale el lindo Aragorn, espero que te agrade. Gracias por leer mi fic.
Patry: Hooola ^o^ te agradezco mucho que hayas leído mi fic, no sabes como me alegra que lo hayas hecho y te agradezco todavía más el review que me enviaste. Y ¿qué es eso de la Orden Siriusana? ^_^ es una duda que siempre he tenido.
Seck: Hola T_T no sabes lo feliz que me hace que te haya gustado mi fic, y sobre todo la idea es que hay personas que no les agrada mucho un crossover con estas dos grandes historias. Sip, no te preocupes ^o^ la voy a continuar.
Disclaimer: No me pertenecen ninguno de los personajes de Harry Potter ni tampoco de El señor de los anillos, cada uno pertenece a sus respectivos dueños... de aceptar que me pertenecen me enviarían a un manicomio, sin contar el juicio donde tendría que estar ^_^U
Harry Potter en la Tierra Media
Capítulo 2
Lagrimas
Harry abrió lentamente los ojos, sintiendo que cada parte de su cuerpo gritaba por culpa del dolor que le acosaba, mientras unas lagrimas resbalaban de sus mejillas... ¡Es que acaso esos sueños jamás dejarían de atormentarlo! No, jamás lo dejarían, jamás volvería a dormir tranquilamente, y lo aceptaba, por que sabía que se merecía ese tormento y más. Sin embargo, algo lo sacó de sus oscuros pensamientos, esto era el simple hecho de que no se encontraba en su habitación de Privet Drive, ni en la de Grimmauld Place ¡ni siquiera se encontraba sobre una suave y cálida cama! Harry se levantó lentamente, pues el dolor de su cuerpo le impedía cualquier tipo de movimiento sin torturar alguna parte de su cuerpo.
Harry se quedó perplejo al observar donde había estado recostado, lo que él suponía había sido desde poco antes del comienzo de la pesadilla.
Unas cuantas hojas secas y la fría tierra habían sido la cama del niño-que-vivió, incluso podía sentir la poca tierra que se había incrustado sobre la morena piel de su rostro y de su brazo.
Se sacudió cuidando de no provocarse dolor. Después, observó atentamente su alrededor mientras se llevaba una mano para acomodar sus anteojos... ¡cual fue su sorpresa al no tocar la unión metálica que se suponía debía de estar sobre su nariz! Y lo recordó. Recordó todo... desde que le habían puesto su gran disfraz para poder ir al Callejón Diagon hasta lo eventos del ático, y debido a estos recuerdos supo que no le habían quitado el hechizo a sus ojos, para 'reponerle' su miopía, por que todo el disfraz se lo habían quitado en St. Mungo's y al no tener sus anteojos al alcance no le habían 'repuesto' la miopía.
Al recordar todo comenzó a maldecirse mentalmente mientras una rabia inundaba su interior... otra vez, otra vez por su culpa alguien a quien el quería mucho había sido lastimado, su mejor amiga, Hermione Granger... y es que parecía que el destino se empeñara en hacerle sufrir y a las personas que le rodeaban... no, el destino no... Voldemort... y pensó si no sería mejor dejarse matar por él, dejar que la profecía se cumpliera y de esta manera dejar de dañar a las personas que le rodeaban...
De nuevo una gran tristeza le invadía... hubiese jurado que una docena de dementores se encontraban rodeándole pues sintió como la poca alegría que le quedaba era absorbida por un gran vacío, dejándolo sin fuerzas ni ganas de reponerse a nada, hundiéndolo en una total depresión.
Lágrimas humedecieron los hermosos ojos verdes, empañándolo todo, impidiéndole ver con claridad lo que se encontraba frente a él.
El crujir de las hojas y ramas secas en frente de él llamó su atención, más por reflejos que por el deseo de defenderse de cualquier cosa que saliera de entre los árboles y arbustos.
Y entonces lo vio, tan claro como sus ojos cegados por las lagrimas se lo permitieron... una figura... la figura de un hombre que se acercaba a él articulando palabras que sus oídos no podían descifrar debido al estado de debilidad en el que se encontraba... y entonces, sus empañados ojos pudieron distinguir el cabello oscuro y un poco largo... y la complexión del hombre... Sirius... fue lo único que su cerebro le mandó por respuesta a todas las órdenes que Harry le mandaba.
- ... Sirius... – pronunció en un susurró muy débil, pero que el otro pudo captar
El joven se acercó tambaleante a la figura que se encontraba frente él, pues esta se había detenido al escuchar el nombre que salió de los labios del joven.
- ... perdóname... trate pero... no pude... – decía mientras avanzaba – no pude... – más lagrimas comenzaron a bajar por sus mejillas – y ahora también le he fallado a Hermione... si tan solo...
Harry ya no pudo avanzar más por que sus fuerzas se habían agotado por completo y su cuerpo se negaba acatar los deseos del joven, y por esta razón comenzó a caer, presa de un terrible sueño.
Asustado, Harry se dio cuenta de que una vez más no lo había alcanzado, de que una vez más caería atrás del velo sin que él pudiera hacer algo, pero... no cayó al suelo, sino que unos fuertes brazos detuvieron su caída, y se dio cuenta de que lo había atrapado...
- Me alegra haberte encontrado... Sirius – susurró feliz antes de caer de nuevo en un sueño profundo
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~Dos personas se encontraban caminando sobre alfombra hecha de hojas y ramas secas, en medio del vasto bosque de grandes y hermosos árboles.
Uno de ellos tenía una hirsuta cabellera oscura con mechones canosos, un poco larga, y un par de ojos grises y perspicaces sobre un rostro moreno; sus ropas eran de tonos oscuros; atada al cinturón llevaba una espada que iba dando leves golpes sobre su cadera; un manto pesado, de color verde oliva, manchado por muchos viajes, le envolvía ajustadamente el cuerpo; unas botas de cuero blando, que le calzaban muy bien, pero que habían sido muy usadas y estaban ahora cubiertas de barro.
El otro era alto y erguido, el cabello de oro resplandeciente, la cara joven y hermosa, libre de temores y luminosa de alegría; los ojos brillantes y vivos, y la voz como una música; había sabiduría en aquella frente y fuerza en aquella mano; tenía unas curiosas orejas que terminaban en punta, nada parecidas a las de los hombres, y esto era por que él era un elfo, más no un simple elfo, un señor de los elfos.
- Me alegra que hayas regresado Aragorn - dijo el elfo
- Si, a mi también me alegra, sin embargo, últimamente siento como Sauron vuelve a tomar poder, Glorfindel
- También lo he sentido, y mi corazón me dice que pronto pasará algo terrible
- Si
- Pronto amigo mío, llegará tu turno para tomar el lugar que te corresponde entre los grandes reyes
- Lo he sentido, mi corazón me lo dice, sin embargo...
Los dos amigos detuvieron su plática al escuchar el crujir de unas hojas y ramas secas.
- Man ta raika? (What is wrong?) – preguntó Glorfindel
- No lo sé, ire a investigar
Aragorn se adelantó un poco, pues había escuchado el crujir de unas ramas secas mientras Glorfindel se quedaba un poco atrás aguzando el oído por si escuchaba algún otro ruido que les indicará que alguien les estaba siguiendo.
Aragorn avanzó cautelosamente mientras se llevaba una de sus manos a la empuñadura de su espada, preparándose para pelear en caso de ser necesario. Pronto comenzó a distinguir una figura que se alzaba entre los árboles... una solitaria figura... conforme se fue acercando a ella, se dio cuenta de que desenvainar su espada no iba a ser necesario y toda la cautela con la que había estado actuando hasta el momento fue remplazada por sorpresa, al observar más atentamente al que se encontraba frente a él... un chico, que aparentaba una edad de 15 años, quizá un poco más, no era muy alto, y era de complexión delgada, sin embargo lo que más resaltaba del chico eran sus ojos verdes, que se encontraban ahora llenos de lagrimas que resbalaban lentamente por sus mejillas.
Aragorn se acercó cautelosamente al joven, pues lo ultimo que deseaba era asustarle.
- ¿Te encuentras bien? – le preguntó lentamente dándole a entender que no deseaba dañarle - ¿Estas solo? – acercándose lentamente al chico
- ... Sirius... – pronunció en un susurro, pero tan débil que apenas Aragorn pudo entender ocasionando que este se detuviera tanto en su habla como en su andar
¿Sirius? ¿Había escuchado bien? Posiblemente el nombre de algún amigo... le había confundido con él, y no era para menos, el chico se le veía bastante cansado y estaba cubierto de tierra, como si hubiese dormido sobre ella, además de que se le veía muy triste, demasiado, tanto que él mismo, Aragorn, podía sentir como esa tristeza le tocaba el corazón. Pero fue sacado de sus pensamientos por el joven.
- ... perdóname... trate pero... no pude... – dijo el joven mientras avanzaba lenta y tambaleantemente a él – no pude... – más lagrimas comenzaron a bajar por sus mejillas – y ahora también le he fallado a Hermione... si tan solo...
Definitivamente esa tristeza le iba a romper el corazón, ver al chico en ese estado ¿Qué le había pasado para irradiar tal tristeza?
Vio como el joven comenzaba a caer por la falta de fuerzas en su cuerpo, y también pudo ver el miedo que había inundado su joven rostro. Aragorn se movió rápido para atraparle e impedir que cayera al suelo.
- Me alegra haberte encontrado... Sirius – susurró feliz antes de caer de nuevo en un sueño profundo
Aragorn sonrió al sentir una pizca de felicidad en la voz del joven. Después lo cargó para llevarlo a donde su amigo para después regresar a Rivendel y una vez ahí él mismo iba a procurar que el chico se restableciera, tanto de cuerpo como de alma.
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~Glorfindel se encontraba esperando a que su amigo regresase pues su fino oído le había dicho que ya no había nadie más a su alrededor con excepción de los animales que habitaban en el bosque.
El sonido de unas pisadas le hizo saber que Aragorn se acercaba a él. Pronto vio su figura, la cual se acercaba lentamente, sin embargo llevaba algo en los brazos, una figura humana.
- Man ta raika? (What is wrong?) – preguntó Glorfindel a Aragorn cuando lo vio llegar con Harry en brazos - Man ta yana? (What's that) – preguntó curioso al ver al chico - E kena nin seldo (He looks like a child)
- E ta seldo... (He is a child…) – le respondió Aragorn
- ¿Por qué le haz traído contigo? – preguntó Glorfindel observando atentamente las extrañas ropas del chico
- Estaba solo, y se desmayo, además de que cuando le encontré estaba llorando, con una gran tristeza reflejada en sus ojos
- Entiendo... te haz dado cuenta de cómo viste, nunca había visto este tipo de ropas, en ningún lugar y he visitado muchos
- Ahora que le veo mejor, tienes razón, yo tampoco había visto este tipo de ropas – agregó Aragorn observando el extraño atuendo del chico
- Posiblemente este perdido, es muy joven, no pasa de los 17 años
- Si – dijo Aragorn mientras recostaba al chico sobre uno de los mantos que llevaba y comenzaba a revisarle para saber sino llevaba alguna herida
- Espera – le detuvo Glorfindel – mira eso – observando atentamente la frente de Harry – que cicatriz más extraña y no solo eso, puedo sentir un gran poder emanando de ella... además de que mira como sostiene esa vara de madera
- Es muy curiosa – dijo Aragorn observando al chico mientras le quitaba la vara y la guardaba – creo que debemos llevarlo con Lord Elrond
- Si, una vez allá esperaremos a que el chico nos cuente su historia
~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~*~- Sirius – murmuro Harry entre sueños – no... perdóname – una solitaria lagrima se resbalo por su mejilla
Harry abrió los ojos mientras se deshacía de la terrible pesadilla que acababa de tener... se sentía tan débil ¿qué le había pasado para que sintiera esa tremenda debilidad? Pero se dio cuenta del lugar donde estaba... se sentó asustado y observo que se encontraba sobre una suave cama y de lo hermosa de la habitación, la cual tenía una gran ventana que daba a un vasto y hermoso bosque.
- ¿Dónde estoy? ¿Qué paso? – y recordó - ... el Espejo de Oesed... pero... por qué... cómo...? ... ¡Sirius! – se levantó rápidamente de la cama pero al hacerlo un fuerte mareo le sobrevino obligándolo a sentarse al borde de ella
- ¡Eh! Tranquilo, no hay prisa por irse – dijo una voz desde la puerta
Aragorn había entrado a la alcoba del extraño joven que había encontrado en el bosque y presenció su rápido levantar, y ahora observaba como el chico buscaba algo desesperadamente.
Harry tan pronto escuchó el ruido de la puerta abriéndose, buscó rápidamente su varita pero no la encontraba por ningún lado, así que solo se limito a observar al hombre que había entrado a la habitación.
- Buscabas esto – lanzándole la varita – la sostenías fuertemente cuando te encontré
- ¿Quién eres? – preguntó Harry levantándose lentamente de la cama tomando fuertemente la varita entre sus manos y listo para alzarla de ser necesario - ¿y dónde estoy? – agregó observando la habitación con sus vívidos ojos verdes
- Mi nombre es Aragorn y estás en Rivendell, la casa de Lord Elrond – dijo Aragorn
- .... ¿Rivendell? – preguntó Harry - ... ¿esta en Inglaterra?
- ¿Inglaterra? ¿Qué es eso? – pregunto Aragorn algo confundido -
Harry se quedo completamente sorprendido al escuchar lo que salió de los labios de Aragorn...
- ¿Cuál es tu nombre? – pregunto Aragorn pues no deseaba todavía interrogar al chico con respecto a su origen, ya lo haría en otro momento
- ... Harry... Harry Potter – dijo mirando a Aragorn
- Un placer Harry – decia pensando que el nombre del chico era extraño -
Justo en ese momento la puerta se abría, dejando entrar a Glorfindel.
- Ah, Aragorn, me alegra haberte encontrado, Lord Elrond me pidió que le informásemos en cuanto nuestro pequeño huésped despertara – Glorfindel poso sus ojos sobre la figura de Harry – ah, veo que ya ha despertado ¿Cómo te encuentras joven señor?
- ... bien... – se limito a decir Harry
- Aún se encuentra débil, pero supongo que ya podemos llevarle ante Lord Elrond – dijo Aragorn observando curiosamente al chico
- Si, es lo mejor – después agregó en Quenya - Lord Elrond esta intrigado por su extraña cicatriz
- Entonces vayamos con Lord Elrond – se acercaba al chico - ¿deseas que te de una mano?
- No... no, gracias – decía parándose para después quedarse observando las extrañas ropas que llevaba, todas en tonos blancos: una camisa holgada con mangas largas que tenia un pequeño corte justo arriba en el cuello que era en forma de V, y unos pantalones holgados
- Si no te gusta podemos hacer que las cambien – ofrecía Aragorn quien le había tomado cariño al chico mientras le ayudaba a calzarse las botas... por algún extraño motivo le recordaba a él
- No... están bien... gracias – agradeciendo que Aragorn le ayudará a calzarse esas extrañas botas
Glorfindel observaba como su amigo le había tomado afecto al chico y no era de extrañarse, es decir, se lo habían encontrado en una situación muy penosa y él sabía que a Aragorn le recordaba a él, y Glorfindel así lo pensaba, no conocía al chico pero podía sentir el mismo tipo de aura que rodeaba a su amigo Aragorn.
De esta manera los tres salieron de la alcoba de Harry en dirección a la sala donde les esperaba Lord Elrond.
Espero que este capítulo los haya complacido ^_^ sino fue así favor de enviarme un review... ¬¬ si, esta bien, tan solo estoy dando excusas para que me manden reviews, pero que puedo hacer, realmente me fascina conocer que opinan de este fic... una vez más, gracias por leerlo, realmente me siento muy feliz de que lo hagan... aunque siento que estuvo muy corto, realmente lo siento, bueno, aqui esta.
Un favor enorme... alguien sabe donde puedo encontrar hechizos, de los que usan en Harry Potter es que los necesitó, gracias ^_^
Por cierto, muchas de las frases en Quenya no fueron hechas por mí, sino por Jess S la autora del fanfic There and Back Again así que lean ese fic esta muy bueno.