Gohan y su familia están reunidos en su casa, almorzando tranquilamente, cuando suena el teléfono. Milk atiende la llamada. – ¿Hola?... Sí, está aquí. Un momento, por favor… – Ella tapa el auricular con su mano, dirigiéndose a su primogénito. – Gohan: Es para ti.
– Gracias, mamá. – El erudito se levanta de la mesa y toma el teléfono. – ¿Hola? Ah, hola Frank… ¿Ya lo analizaste?... ¿Qué?... Bien, iré enseguida. – Al colgar el teléfono, toma su chaqueta y se dirige rápidamente a la puerta. – Tengo que irme.
– ¿A dónde?
– Iré al laboratorio, Videl. La criatura ya fue analizada.
– ¿Analizada? –Videl se coloca una mano sobre el mentón, pensativa.–Umm... Me pregunto qué resultados se habrán obtenido....
– Papá: ¿Puedo ir contigo?
– No, Pan. Quédate aquí con tu mamá y tu abuela. Volveré enseguida. – Luego de decir estas palabras, el Saiyajin se marcha.
Trunks está en su oficina, revisando unos documentos, cuando en ese momento suena el teléfono celular. – ¿Hola?... ¿Qué sucede, Gohan?... ¿A tu casa?... De acuerdo, iremos para allá… Adiós. – El joven decide comunicarse telepáticamente con su bella amiga. – Andie: ¿Me escuchas?
– Sí. ¿Qué sucede?
– Acabo de hablar con Gohan. Al parecer la larva ya fue analizada.
– ¿En serio?
– Así es, y él quiere que nos reunamos en su casa para entregarnos los resultados de los análisis.
– En ese caso, iré a tu oficina.
– Bien, te espero...
– Bueno: Ya estamos aquí, Gohan. ¿Qué dicen los análisis?
– Ten. – El erudito entrega un sobre a Trunks. – Mira por ti mismo.
– De acuerdo. – El joven Briefs revisa los documentos que se encuentran en el interior del sobre. – Por Dios… Andie: Lee esto.
– Sip. – Ella toma los papeles y comienza a leer. – Veamos: Aquí dice que la larva es una mutación genética de una especie… ¿Ya extinta? ¿Cómo es posible?
– Yo también estoy un poco sorprendido. –Comenta Trunks.– Eso significa que esa criatura es originaria de algún otropunto del Sistema Solar, o incluso podría haber surgido en las afueras de la galaxia. Entonces, puede que también la especie existe en, quizás, muchos planetas.
– ¿Te das cuenta de lo que acabas de decir? Podríamos estar tratando con una verdadera plaga interplanetaria.
– Eso me temo, Andie.
– Dios… – Ella decide seguir leyendo. – Espera: Aquí también dice que ellas subsisten sintetizando el cromosoma "Y" de la especie humana, o alguna sustancia afín. Trunks: Eso explica por qué sólo los hombres son poseídos por esas cosas.
– Sin duda. Y lo peor es que ellas poseen un rápido crecimiento, y se multiplican de manera impresionante.
– Es cierto. – Interrumpe Gohan. – Pero les tengo una buena noticia. Observen. – El joven científico coloca en la mesa un frasco con una larva viva adentro, luego toma un extraño dispositivo y presiona un botón. Enseguida, la larva se mueve inquietamente, hasta que explota, bajo la mirada sorprendida de la pareja. – Como pueden ver: Las larvas alienígenas no pueden tolerar el ultrasonido.
– ¡Genial! Si es así, mi madre y yo podremos hacer varios dispositivos ultrasónicos, y cada uno de nosotros tendrá un ejemplar.
– Es una buena idea. Yo les ayudaré.
– De acuerdo, Andie. Y después continuaremos con nuestro entrenamiento. – Él observa cómo su amiga mueve la cabeza en afirmación, luego se dirige a Gohan. – Gracias por tu ayuda.
– Vamos, Trunks, no fue nada. Además, de esa información dependen nuestras vidas. – Todos se ríen. Minutos más tarde, la pareja se marcha en dirección a la Capsule Corp.
Mediados de Abril: Los dispositivos ultrasónicos están listos, la base extraterrestre está llena de arcanianos y las larvas aún no han vuelto a atacar. Todos los guerreros Z están entrenando, cada cual a su manera, preparándose para la batalla que está por venir. Trunks y Andie entrenan en el área especial diseñada por Bulma, luchando contra robots, brazos mecánicos y armas láser, usando sus técnicas de ataque y defensa. Una vez concluida la jornada, ambos se sientan a descansar. Él se quita la sudada camisa, revelando su marcado pecho y su plano abdomen; ella hace lo mismo, quedando vestida sólo con un conjunto similar a los usados en los gimnasios.
El Saiyajin la observa detalladamente: Ese conjunto se amolda perfectamente a su delgado cuerpo, mostrando las curvas de su cintura, su plano abdomen, su mediano busto, sus frágiles brazos, sus bellas y definidas piernas,su angelical rostro... En verdad es muy hermosa. La zionita nota la forma en que él la mira. – ¿Ocurre algo, Trunks?
– Uh… Na… nada. Sólo me preguntaba si te gustaría quedarte a almorzar.
– Claro. ¿Por qué no?
– Bien. Sólo te advierto algo: Hoy estoy muy hambriento.
– Se nota. Has entrenado mucho.
– Sip. El caso es que siempre me has visto comer de manera decente y civilizada. Y… tal vez hoy lo haga al estilo Saiyajin, así que… bueno…– El joven se sonroja. – Espero que no te asustes.
– ¿Asustarme? No te preocupes. – Andie sonríe, se levanta y se dirige a la entrada, sin percatarse de que un brazo mecánico está a punto de caer sobre ella. El objeto cae, pero Trunks la salva a tiempo. Esa acción hace que él caiga justo encima de su amiga.
Ambos están en el suelo, mirándose fijamente. De repente, ella tiembla, y se sonroja. – ¿Trunks?
– ¿Sí?
– P… por favor: ¿Podrías quitar tus… manos de a… allí?
– ¿Uh? – Él está confundido, luego nota que tiene sus manos justo sobre el pecho de la joven, por lo que las retira rápidamente, colocando una mano sobre la nucaal mismo tiempo que ríede penay su cara se vuelve muy roja. – Perdón. No fue mi intención.
– No te preocupes, no fue tu culpa. Va… vayamos a comer… ¿Sí? Me muero de hambre.
– De acuerdo. Pero recuerda lo que te acabo de decir.
– Oh, vamos, Trunks: ¿Por qué habría de asustarme?
Un bocado de comida cae sobre la mesa. La princesa está sentada frente a su plato de comida, estática, boquiabierta, sosteniendo en su mano un tenedor vacío. Ella está así porque, justo sobre la mesa, puede ver decenas de platos vacíos, y tras la vajilla acumulada se encuentra Trunks, quien come frenéticamente. Al rato, Bulma se le acerca. – ¿Quieres más, hijo?
– Sí, por favor. Aún tengo hambre.
– ¿Más? – Andie está en shock. – No… no puedo creerlo.
– Lo siento, Andie. Ya te lo había dicho: Hice mucho ejercicio, y eso me dejó hambriento.
– Sí, pero: ¿Cómo es posible que comas semejante cantidad de comida y… y… aún te mantengas en forma?
– La respuesta es obvia: Nosotros los Saiyajines utilizamos mucha energía, ya sea peleando o empleando nuestras técnicas. Es por eso que comemos de esa manera, para poder mantenernos fuertes y conservar intacta nuestra energía. – En ese momento, Bulma le sirve otro plato de comida. – Gracias mamá.
– De nada, hijo. – Mientras él empieza a comer, la Sra. Briefs se acerca a la confundida zionita, hablándole al oído. – Ya te acostumbrarás.
Es la mañana siguiente. Trunks decide tomarse el día libre: Nada de trabajo, nada de entrenamiento ni nada de estrés. Se sienta bajo uno de los árboles de su jardín, observando a su amigo Chip, quien está comiendo algunas frutas. Él extiende su mano, con un trozo de chocolate en la palma. – ¿Quieres un poco? – El roedor se le acerca, tomando el dulce, permitiendo así que nuestro héroe pueda acariciar al animalito, una y otra vez. – Gran día. ¿No lo crees? Es perfecto para salir a relajarse, volar por el bosque, o quizás pasear por el campo… Espera: ¡Se me ocurrió una idea! Ojala que a ella le guste. – Dicho esto, y después de regresar el animalito al árbol, el joven se eleva y vuela rápidamente en dirección a la Capsule Corp.
Andie está trabajando tranquilamente, cuando escucha golpecillos en la ventana. Ella se levanta y se asoma. – ¡Hola Trunks! Pensé que te habías tomado el día libre.
– Así es. Decidí tomar un poco de aire fresco, por eso vine a buscarte.
– ¿A buscarme?
– Aja.
– Pero Trunks: Estoy trabajando. No sé si pueda…
– Shhh… – El Saiyajin coloca un dedo sobre su delicada boca. – Tranquila: Necesitas salir y relajarte. Ven conmigo.
– Está bien. – La pareja vuela en dirección al campo, hasta llegar a un rancho que está junto a un gran lago. – Trunks: ¿Qué hacemos aquí?
– Ya lo verás. – Él toma su mano y la lleva al interior del establo, donde son recibidos por viejo ranchero. – Buenos días, Sr. Pickles.
– Buenos días, jovencitos. Llegan justo a tiempo. Por aquí: Síganme. – Ellos hacen lo que el anciano pide, quien los lleva frente a la puerta de una caballeriza, entrando allí y, segundos después, vuelve a salir, tirando las riendas de dos hermosos caballos: Una yegua blanca, con crines del mismo color de su piel, y grandes ojos color almendra; y un fornido caballo con pelaje marrón oscuro, crines negras y ojos igualmente negros. El ranchero entrega las riendas al joven. – Aquí los tienen: La yegua se llama Anastasia, y el caballo se llama Sansón. Espero que disfruten de su paseo.
– Muchas gracias. Volveremos en la tarde. – Acto seguido, Trunks camina tirando las riendas de ambos caballos, seguido por su bella amiga. Una vez afuera, él le entrega la correa de Anastasia. – Bien: Ya es hora.
– ¿Qué? ¿Acaso voy a montar a caballo? Yo nunca había hecho esto… no sé si pueda.
– Claro que podrás hacerlo, Andie: Es muy fácil. – El joven Briefs ayuda a la zionita a subirse a la yegua, para luego montar sobre Sansón. Después de instruir a su compañera en la manera de tomar las riendas, ambos empiezan a cabalgar. – Espera, Andie: Vas muy deprisa, trata de disminuir un poco tu velocidad.
– Lo intentaré. – Un rato después, Andraia logra que la equina disminuya su trote. – ¿Así está bien?
– Sí, mucho mejor. Lo estás haciendo muy bien. Recuerda: El secreto está en dominar las riendas.
– ¿Sabes? Nunca pensé que fuese tan fácil. – Ella está muy emocionada, mostrando una gran sonrisa, lo cual hace feliz a Trunks.
Han pasado 3 horas. Los jóvenes están cabalgando junto al lago, admirando el paisaje primaveral. Trunks observa a su increíble compañera, quien pudo dominar rápidamente las riendas. En ese momento, su mirada se llena de ternura: Admira la manera en que su belleza se combina con la elegancia de Anastasia, a la vez que contrasta con el paisaje… la forma en que su hermoso cabello castaño ondea bajo la suave brisa… la alegría en su angelical rostro… la inocencia en su mirada celeste… Ella gira su cabeza, mirándole directamente a los ojos. Oh, Trunks: Esto es tan maravilloso…
– Sabía que te gustaría esta sorpresa. – En ese momento, él decide aprovechar la oportunidad para confesarse. –Andie: Yo… bueno… quisiera decirte que…
– ¿Sí?
– Que… tú… tú me… – De repente, Anastasia relincha y empieza a ponerse muy inquieta, causando que la joven caiga al suelo. Trunks desmonta rápidamente a Sansón, toma las riendas de la yegua y trata de calmarla. En ese instante, él logra ver una pequeña larva oculta entre la hierba, por lo que arroja un Ki-Blaster para destruirla. Un rato después, la equina logra ser controlada. Él se acerca a su amiga. – ¿Estás bien?
– Un poco aturdida. Es todo. – Al tratar de reincorporarse, ella siente un gran dolor en su mano izquierda. – Hay… ¡cómo duele!
– Déjame ver. – El Saiyajin se coloca a su lado, toma su mano y la observa fijamente: Está hinchada y presenta hematomas. – Oh no… Te has dislocado la muñeca. Debo inmovilizarte la mano, y llevarte a un hospital. – Él saca un pañuelo, usándolo como un vendaje, con el fin de inmovilizar el brazo. Luego, monta a la joven sobre Anastasia, toma las riendas de ambos caballos y se dirige al rancho. Una vez que regresa a los animales a su dueño, carga a su amiga y vuela hacia West City, hasta llegar al hospital.
Ha pasado media hora. Andie sale de emergencias, con el brazo enyesado. El joven se acerca a ella. – ¿Cómo te sientes?
– Un poco mejor.
– Perdóname: No debí haberte llevado a ese lugar.
– No fue tu culpa: Nadie se imaginaba que una de esas larvas estaba allí. Aún así, antes del accidente, estaba disfrutando de ese paseo. Nunca me había sentido tan relajada… Gracias por todo.
– Andie: Yo… – Enseguida, Trunks abraza fuertemente a su amiga. – Juro que voy a protegerte… Cueste lo que cueste…
Nota: Aclarando el significado de algunos términos: El "cromosoma Y" es un elemento celular que se encuentra en los hombres, recuérdese que ellos poseen la combinación XY, mientras las mujeres somos XX (de todos modos, si quieren más información busquen en cualquier libro de biología y/o anatomía humana)."Hematoma" es el término empleado para describir a los famosos "morados" o marcas negruzcas que aparecen a consecuencia de los golpes.
Depués de aclarar esto, quisiera agradecer a todos los lectores por su gran apoyo. De verdad me siento muy, pero muy satisfecha y con ánimos de seguir adelante. Otra cosa: Me pareció muy interesante hacer que Trunks, siendo un chico taaaaaaaaaan decente, coma al estilo Saiyajin. ¿Se imaginan?
Y Runlyney: Aguántate un poquitito más, porque la acción está a punto de empezar.
Sayonara!
