5 de Mayo, 9:00A.M.: Hora Cero. En una gran y desértica sabana se encuentran reunidos los guerreros Z, esperando la llegada de los Arcanianos. Ellos están quietos, con sus corazones latiendo fuertemente, con sus miradas fijas hacia el infinito, y muy atentos ante cualquier movimiento extraño. Dan la vuelta y sus rostros muestran sorpresa, porque frente a ellos se encuentran las fuerzas armadas de West City, Northern Capital, y Satan City, luego aparecen algunas tropas de Ginger Town y de la zona templada de Yunzabit Island, y la fuerza aérea de Central Capital, al igual que un ejército formado por soldados de la región Este. Tien es el primero en hablar. – ¿Por qué ellos están aquí?
– Son unos tontos: ¡No deberían meterse en esto! – Se queja Krilin, quien al rato observa a la pareja volando en la distancia. – Allí vienen Trunks y Andie.
– ¡Hola! – Los jóvenes saludan y, segundos más tarde, llegan a su destino. – Disculpen el retraso.
– No te preocupes, Trunks. – Acota Goten, señalando a los soldados. – Deberías preocuparte por ellos: Van a estorbarnos.
– ¿Estorbarnos? Goten: Ellos nos ayudarán mucho. Anteriormente luchábamos contra uno o dos oponentes, o, cuando mucho, una docena de ellos. Ahora se trata de un grupo muy numeroso, unos 50.000 miembros, o más... Nosotros solos no podremos contra ellos.
– Trunks tiene razón. – Interrumpe Andie. – Es bueno saber que hay personas dispuestas a defender este hermoso planeta.
– De acuerdo, nos convencieron. – Concluye Krilin. – Ahora, sólo nos queda esperar.
10:18A.M. Aún siguen esperando, cuando de repente aparece frente a ellos el grupo de soldados que fue poseído por las criaturas, portando armas de tecnología mucho más avanzada que la de la Tierra. Pasa aproximadamente media hora, y llega el ejército de criaturas: Sólo 1Km de distancia separa a ambos bandos. El líder del grupo enemigo se eleva, y vuela hacia ellos, situándose a unos 30m de distancia. Allí empieza a hablarles en voz alta. – Esta es su última oportunidad, patéticos terrícolas: Si me entregan a esa mujer, ordenaré a mis hombres que se retiren.
– ¡JAMAS! – Responde Trunks, muy eufórico. – No permitiré que le pongas un dedo encima.
– Piénsalo: No querrás sacrificar la vida de todos los habitantes de este mundo, sólo por defenderla... ¿O sí?
– Yo estoy dispuesto a defender a ella, y al resto del planeta.
– Eso está por verse... – Al decir esto, la criatura regresa con los suyos.
La bella zionita se acerca lentamente a su amigo, llena de preocupación – Trunks: Él tiene razón. Aún podemos evitar esto...
– ¿Crees que esa es la solución? – El joven se acerca a su compañera, colocando sus grandes manos sobre los frágiles hombros de ella, mirándola directamente a los ojos. – ¿Crees que si te entregamos a ellos, cumplirán con su palabra?
– Pero yo...
– Andie... Una vez te lo dije y ahora lo vuelvo a repetir: Eres muy importante para mí, y no quiero perderte... – En ese instante, él nota que la princesa se siente nerviosa. – ¿Andie?
– Por favor: No sigas... – El momento es interrumpido por un grito de guerra: La batalla ha iniciado.
Un numeroso grupo de guerreros lucha constantemente contra sus oponentes: Los Arcanianos. Rayos láser surcan los cielos, proyectiles impactan sobre cualquier superficie rocosa, ondas de choque bloquean las municiones... En el aire, varios aviones lanzan cohetes teledirigidos, proyectiles térmicos y bombas. Las criaturas no se dejan vencer, defendiéndose con su súper velocidad y sus chorros de ácido, con sus armas de gran tecnología y con la agudeza de sus sentidos.
Los soldados poseídos atacan sin piedad, pero muchos de ellos son neutralizados gracias a los dispositivos ultrasónicos que poseen los guerreros Z. Estos últimos atacan utilizando sus propias técnicas: Tien se eleva y ejecuta su Ki-Ho-Huh, los Androides usan sus rayos de energía, Krilin emplea su espiral cortante, arrojando también algunos Senzu-Beams... Goten y Pan lanzan sus Kame-Hame-Has, al igual que Gohan, quien también usa el Mazenko. Un numeroso grupo de Arcanianos ataca al príncipe Vegeta, quien reacciona con sus Ki-Blasters y sus ataques Big-Bang; Chaos, Yamcha y Oob utilizan sus técnicas especiales de ataque y defensa... todos luchan muy impetuosamente.
Ellos están allí, inmersos en ese río de luchadores, una gran masa de criaturas y personas que luchan fervientemente por sus ideales, en medio de una histórica batalla.
Trunks está rodeado de cientos de monstruos, quienes lo atacan sin piedad; él se defiende con rayos de energía y ataques de fuego, luego desenvaina su espada y corre hacia sus oponentes mientras manipula su arma, aniquilando decenas de ellos. Mientras tanto, Andie usa sus poderes psíquicos para enfrentarse a otro grupo de criaturas, creando escudos psíquicos para protegerse ella y sus compañeros combatientes.
Al rato, todos los guerreros se enfrentan cuerpo a cuerpo, con golpes y patadas, propinándose cabezazos y codazos, arrojándose varios objetos entre sí, utilizando sus habilidades para las artes marciales.... Es una lucha constante entre el bien y el mal.
Zetch se acerca a su General. – Señor: Temo que nuestras tropas están siendo diezmadas por los terrícolas.
– Me lo suponía... El Teniente Xork subestimó a esos seres, en especial a los Saiyajines. Zetch: ¡Es hora de ejecutar el plan B!
– Como ordene, poderoso Kron. – Al cabo de unos minutos, una flotilla de naves parte desde el planeta Marte, con rumbo a la Tierra.
Muchos cadáveres se encuentran inmersos en un río de sangre, dispersos en la amplia llanura, y miles de heridos gimen de dolor... Ambos bandos fueron reducidos a la mitad, pero aún continúan con su lucha. Los guerreros Z ayudan a sus compañeros humanos, siendo Trunks quien se destaca del grupo... aún así, el joven está un poco preocupado: ¿Dónde estará Andie?
En otro lugar del campo de batalla, la bella zionita ayuda a sus compañeros heridos con sus escudos psíquicos y su telequinesis. Ella está afanada en su tarea cuando, sin darse cuenta, es impactada por un chorro de ácido, justo en la pierna, por lo que la joven cae al suelo sin poder moverse debido al dolor, quedando indefensa y a merced de sus enemigos. Xork se coloca frente a ella. – El esfuerzo de tus amigos ha sido en vano... ahora vas a morir, al igual que tu patético planeta... – Al decir esto, él extiende su mano, creando una esfera de Ki maligno, listo para arrojarlo directamente al rostro de la princesa. Pero...
El alienígena es impactado por un gran Ki-Blaster, siendo aniquilado instantáneamente. Ella gira su cabeza para conocer a su salvador: Se trata de un hombre de 1,80m de estatura, vestido con un uniforme naranja y azul, con largo y erizado cabello rubio, ojos de un brillante color verde neón, su rostro es muy parecido al de Gohan, y se encuentra completamente rodeado por un aura dorada. – ¿Estás bien?
– Esa voz... creo que la conozco... – Andie se levanta y se acerca al hombre, cuando al fin logra recordar. – Usted debe ser el Sr. Gokú.
– Así es. Me imagino que eres Andie, la amiga de Trunks.
– Sí, señor. – Luego, ella nota que tras el Saiyajin aparece un hombre de mediana estatura, piel púrpura, orejas puntiagudas y largo cabello blanco. – ¿Y usted es...?
– Soy el Supremo Kai-O-Sama. He venido para ayudarlos. Ustedes vayan con los demás, yo me encargaré de los heridos. – Ellos están de acuerdo, así que se elevan y vuelan rápidamente hacia donde se encuentran sus amigos.
Goten se queda estático. – Ese Ki.... es de... ¿Papá? – El joven mira en una dirección específica, pudiendo ver a dos personas volando: Una de ellas es Andie, y la otra es un hombre transformado en Súper Saiyajin fase 3. Una sonrisa se dibuja en su rostro, y una lágrima brota de su ojo derecho: Su padre ha regresado.
Pan lucha contra los monstruos, cuando percibe ese Ki tan familiar. – ¿Abuelito?
– Sí, Pan. – Responde Gohan, quien está a su lado. – Sin duda él es papá.
– ¡Gokú! – Krilin está emocionado, al igual que los demás guerreros Z. – Por fin ha regresado... – Al decir estas palabras, él, junto a los demás, siguen enfrentándose a los Arcanianos.
El orgulloso príncipe está en el aire, cuando, al girar su cabeza, ve en la distancia a su viejo rival. – Vaya, Kakaroto: Sabía que no te perderías esto...
Todos aún luchan, pero ahora cuentan con la ayuda del gran Gokú. Ellos ponen todo su empeño y corazón en acabar con los villanos, utilizando todos sus poderes, derrotando cientos de criaturas, hasta que al final, el Saiyajin arroja una enorme Genki-Dama a sus oponentes, acabando con miles de ellos instantáneamente.
Sólo quedan unas pocas decenas de criaturas, y los guerreros acaban con ellas en muy poco tiempo: ¡Han vencido!
Los soldados gritan eufóricos, llenos de alegría, porque pudieron salvar a la Tierra... Entretanto, nuestros héroes se reúnen alrededor del gran Gokú. Krilin se acerca a él, lleno de emoción al ver a su compañero de la infancia. – Gokú...
– Gusto en verte otra vez, Krilin. – Él nota como los ojos de su amigo se llenan de lágrimas. – Vamos, no te pongas a llorar.
– Descuida... – Krilin seca sus lágrimas. – No lo haré.
– ¡Abuelito! – Pan corre hacia su abuelo, con sus ojos negros llenos de lágrimas. – ¡Te extrañé mucho!
– Yo también, Pan.
– Vas a quedarte con nosotros. ¿Verdad?
– Los siento: Sólo puedo estar por este día. Pero no te preocupes: Esta no será la última vez que me verás.
– ¿Me lo prometes?
– Claro que sí. – El resto de los Guerreros Z expresa su alegría por volverlo a ver. El Saiyajin mira a Vegeta, quien está muy serio. – No te preocupes, Vegeta: Algún día vendré a pelear contigo.
– ¡Kakaroto! – El orgulloso guerrero se enoja, al ver que todos se ríen. – ¡Eres definitivamente exasperante!
– No lo tomes a mal, Vegeta... – Él lo mira, con un poco de pena, luego, se acerca a la pareja, colocando su mano sobre el hombro derecho de Trunks. – De verdad te felicito, Trunks: Has demostrado ser un gran líder.
– ¿Yo? – El joven se sonroja. – Bu... bueno... sólo hice lo que debía hacer.
– Es cierto... Y tú, Andie... – Gokú se coloca frente a ella, apoyando sus manos sobre los frágiles hombros. – Espero que sigas entrenando tal como lo has hecho hasta ahora: Tienes un gran potencial dentro de ti.
– Así lo haré, señor. Y gracias por salvar mi vida.
Ha pasado aproximadamente media hora. Todos siguen allí, conversando tranquilamente, cuando Trunks recibe una llamada en su celular. Al colgar el teléfono, el muestra una mirada de preocupación.
Andie se le acerca. – ¿Qué ocurre? ¿Quién te llamó?
– Era Reggie... – Luego, él dirige su mirada a sus compañeros. – Oigan todos: Debemos actuar cuanto antes... ¡LOS ARCANIANOS ESTÁN ATACANDO LAS CIUDADES!
Nota: Weno weno, dos capítulos de una sola vez. Espero que les haya gustado.
Runliney: Perdona por escribir mal tu nombre! -' Y, tal como lo prometí, subí un capítulo de acción. Y descuida! Ya falta poco para el gran día! (Ya sabes: EL BESO!)
Sayonara!
