ESCRITO POR: selene89s

LÍNEA ARGUMENTAL DE: Ayla Black y selene89s

LOVE IS ALL AROUND

Capítulo siete: El crimen perfecto

La puerta del dormitorio se abrió de golpe, dejando paso a un torbellino de pelo rojizo que se introdujo rápidamente en la habitación.

- ¡Potter!¡Voy a matarte! – nada más divisarlo, Lily se abalanzó sobre James y le rodeó el cuello con las manos.

Sirius y Remus se apresuraron a sujetar a Lily y la separaron con esfuerzo de su amigo, que intentaba recuperar el aire perdido.

- ¡Soltadme!¡Potter, estás muerto!

- Lily, cálmate. ¿Qué ha pasado? – preguntó Remus intentando retener a la pelirroja.

- ¿Que qué ha pasado?¡Preguntádselo a él! – gritó mientras intentaba desembarazarse de sus captores y señalando a James.

El moreno ahora estaba muy interesado en una de las paredes de la habitación y no parecía estar al tanto de lo que estaba pasando.

Varios días antes:

El mes de Noviembre comenzó, como era de esperar, con un clima frío, señal de que el invierno estaba cerca.

El segundo día de mes, hacia las nueve de la mañana, la mayoría de los alumnos de Gryffindor que estaban despiertos, se arremolinaban en torno al tablón de anuncios de su sala común.

James se acercó hacia el grupo de estudiantes. Había sido el primero de entre sus amigos en despertarse y ellos todavía estaban durmiendo.

- ¿Qué pasa? – preguntó intentando abrirse paso entre la gente.

- Han publicado las fechas de las becas – contestó una chica morena de séptimo con la que James había salido una vez.

James palideció, todavía no había tenido tiempo de planear nada.

- Y ¿cuándo son?

- Bueno... – la chica miró el papel que estaba colgado – Hay un trabajo sobre defensa contra las artes oscuras o pociones para el veinte... y una entrevista con un profesor para el veintiuno.

- Eh... gracias... ¿Kate? – intentó, no muy seguro del nombre de la chica.

- De nada James – contestó sonrojándose un poco.

James se dio la vuelta y volvió a su dormitorio. Lo de las becas era demasiado rápido. Por suerte había tiempo para planear su sabotaje.

Cuando entró en la habitación ninguno de sus amigos se habían movido. James suspiró, desde luego tenía que ponerse manos a la obra si quería tener un plan listo para el final del día.

- ¡Arriba! – gritó a pleno pulmón desde el centro del dormitorio. Nadie se movió, así que lo intentó de nuevo. Se colocó al lado de Sirius y gritó en su oído - ¡Arriba! – desde luego eso sí produjo reacción.

Sirius dio un salto y se cayó de la cama.

- ¿Qué crees que estás haciendo?¿Es que la palabra sábado no significa nada para ti? – gritó la víctima desde el suelo.

"Uno arriba, quedan dos" pensó James mientras se acercaba a la cama de Remus. Cuando descorrió las cortinas encontró a su amigo tapándose la cabeza con su almohada.

- ¿De verdad crees que eso va a detenerme, Moony? – preguntó el moreno con una sonrisa psicópata en la cara.

Al ver que su amigo no se movía, James sacó su varita y le apuntó con ella.

- Pluvia Descendere – un chorro de agua fría salió de su varita y empapó la camisa del licántropo.

El chico dio un grito y le lanzó su almohada a James, que la esquivó por poco y se dirigió hacia su tercera víctima. Peter le esperaba sentado y con la varita en alto.

- Ni se te ocurra James, tengo una varita y sé cómo usarla – satisfecho, James volvió al centro de su habitación.

- ¿Ahora qué te pasa? – preguntó Remus mientras se secaba la camisa - ¿Se ha activado tu vena homicida?

- Mis queridos amigos, el día ha llegado. Las becas de intercambio tienen fecha, y ahora necesito vuestra ayuda para embarcarme en una peligrosa, pero noble, misión. Juntos, vamos a sabotear el intento de la encantadora Lily Evans por salir del país. ¿Alguna idea? – preguntó sonriente.

- Necesitas un hobbie – comentó Remus antes de cerrar las cortinas de su cama y volver a dormir.

James parecía algo decepcionado, pero no se dio por vencido.

- Lo siento Prongs, ahora mismo estoy dentro de un proyecto ineludible – dijo Sirius entrando en el baño y cerrando la puerta.

- ¡Vale!¡No necesito vuestra ayuda! – gritó enfadado - ¿Tú qué dices Wormtail? – nadie le contestó - ¿Peter?

Pero Peter ya no estaba en la habitación.

- Vale, allá vosotros... – musitó – Con amigos así no sé por qué me molesto en tener enemigos.

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Lily entró distraída en la sala común cargando varios libros de aspecto pesado y leyendo uno de ellos con interés, cuando chocó contra alguien.

- Lo siento – dijo mientras se agachaba a recoger sus libros – De verdad, lo siento mu... Ah, eres tú.

- Evans, deberías tener más cuidado, estoy empezando a pensar que me persigues – comentó James con una sonrisa.

- Para que yo te persiguiese Potter, deberías tener a George Clooney pegado a la espalda, y no sé si eso contrarrestaría el hecho de que tú todavía estuvieras ahí.

Lily apartó a James y se dirigió a uno de los sillones de la sala para continuar leyendo. El chico la siguió y se sentó a su lado y miró por encima el título del libro, Bean Shides, genealogía e historia.

- A ver si lo adivino... – dijo James interrumpiendo a Lily – Tu trabajo para las becas es sobre las Banshees.

- Chico listo, ¿lo has deducido por los siete libros sobre Banshees que hay encima de la mesa o te lo ha contado alguien más? – contestó sin mirarle.

- Vamos... No te pongas así, no te he hecho nada – "todavía" añadió mentalmente - ¿Necesitas ayuda?

La chica suspiró y dejó el libro sobre la mesa, parecía estar usando todo su auto-control.

- Escucha, no sé si alguna vez te he dado motivos para que te muestres interesado en mí, pero sean cuales sean olvídalos. ¿Vale? NO me gustas. Acéptalo – dijo alto y claro.

- Escucha, no te he pedido que te cases conmigo, sólo he preguntado si necesitabas ayuda – contestó seriamente - ¿Qué dices?¿Necesitas ayuda?

- No – dijo algo confundida. "Potter ofreciendo ayuda a la gente, creí que antes vería la tierra girar en dirección contraria" pensó la pelirroja mientras veía a James alejarse de ella - ¡Potter! – el chico se giró para verla – Gracias de todas formas.

James le sonrió y desapareció por el retrato de entrada. No era mucho, pero al menos sabía el tema del trabajo de Lily, a partir de ahí, lo demás sería pan comido. Ahora había que pensar en la solución para la entrevista.

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Remus entró en la biblioteca y se sorprendió al ver a Sirius sentado en una de las mesas más alejadas. Cuando se acercó vio varios libros abiertos encima de la mesa y muchos trozos de pergaminos llenos de notas.

- ¿El trabajo de pociones? – preguntó Remus en voz baja mientras se sentaba a su lado.

- No – contestó Sirius tachando una de sus notas.

- ¿El de historia?

- No. Esto no es para clase.

- ¿Has empezado siquiera los trabajos?

- Escribí dos frases del de historia – contestó Sirius pensativo.

- Y eres consciente de que hay que entregarlos mañana, ¿verdad?

- Mi memoria todavía funciona bien, gracias.

Sirius siguió escribiendo notas en pequeños trozos de pergamino, mientras su amigo lo miraba extrañado.

- ¿Qué? – preguntó finalmente el moreno mirando a Remus.

- ¿No vas a contarme para qué es todo esto?

- No has preguntado.

- Lo tuyo no son las indirectas, ¿verdad?

- Es un proyecto.

- ¿Te importa especificar un poco?

- Un proyecto que concierne a los Slytherin.

- Oh... – Remus se quedó unos momentos en silencio - ¿Necesitas ayuda?

- ¿Qué ha pasado con la charla de los trabajos? – preguntó sonriendo – No, gracias, supongo que es mi "proyecto" de independencia, así que tengo que hacerlo solo.

Remus se encogió de hombros y sacó sus libros, mientras Sirius empezaba a hacer garabatos en un papel.

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La sala común se estaba quedando desierta poco a poco. Lily miró su reloj y vio que eran casi las doce de la noche. Entre el trabajo de las becas y los trabajos de clase había perdido la noción del tiempo. Empezó a recoger sus cosas cuando, de repente, alguien la agarró del hombro.

- Lily, ¿sabes que es casi medianoche? – preguntó Selene cuando su amiga se volvió para mirarla.

- Sí. Estoy recogiendo, ¿no lo ves?

Selene cogió el trabajo de Lily de encima de la mesa y le echó un vistazo.

- Lily, llevas días con esto, ¿no crees que te estás pasando un poco?

- No – contestó la pelirroja quitándole los pergaminos de la mano – Tiene que estar perfecto si quiero ir. Por cierto, ¿dónde están Kathleen y Rhane? – preguntó cambiando de tema – No las he visto volver.

- Si estuvieras en el planeta tierra te habrías enterado de que tienen un castigo.

- ¿Un castigo?¿Por qué?

- Black dijo algo en clase de Adivinación, no me preguntes qué. El caso es que él terminó colgado del techo. Empiezas una guerra de sexos y luego no la sigues... – Selene negó con la cabeza – Estás perdiendo facultades Lils.

- No sé por qué tengo que preocuparme de seguirla si ya lo haces tú por mí. ¿No se suponía que eras neutral?

- Las cosas cambian. Además, ya sabes lo que dicen: si no puedes con tu enemigo, únete a él.

- ¿Y a qué viene el cambio repentino?

- ¿Básicamente? – Lily asintió y Selene se encogió de hombros – Aburrimiento.

Lily la miró con una expresión extraña.

- ¿Qué?

- ¿Por qué de repente entras en la guerra?

- Te lo acabo de decir, aburrimiento.

- No te lo crees ni tú. Eres toda neutral y de repente, desde el baile, cambias de bando. ¿Ha sido por algún factor en especial?

La morena se encogió de hombros.

- Te está volviendo paranoica.

- Seguro...

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James se inclinó sobre el caldero, que emitió un espeso vapor rojo. Llevaba dos días trabajando en esta poción y sólo faltaban cinco para que estuviera terminada. Cuando Sirius entró por la puerta se quedó paralizado mirando a James.

- ¿Tenemos deberes de pociones? – preguntó extrañado.

- No – respondió James con una extraña sonrisa en la cara – Esto es para mi querida pelirroja.

Sirius se acercó con cuidado.

- ¿Qué es? – preguntó con curiosidad.

- Un filtro de sinceridad. Soy un genio, ¿verdad?

- ¿En qué va a ayudar Veritaserum?

- No es Veritaserum, es una variante. Cuando Evans haga la entrevista para las becas no tendrá más remedio que decir lo primero que se le pase por la cabeza, aquí no valen las respuestas preparadas – explicó sonriendo.

- Es una buena idea, me pregunto por qué no la hemos usado antes. ¿Remus sabe algo de esto? – preguntó señalando el caldero.

- ¿Estás loco? Estoy seguro de que lo sabotearía y nos soltaría una charla sobre la responsabilidad, la madurez y bla, bla, bla... – se paró un momento - ¿Crees que tiene esos discursos escritos de antemano?

James añadió otro ingrediente a la poción, que se tornó de un color azul celeste.

- ¿Quieres ayudar? – preguntó alegre, como un niño con un juguete nuevo.

El moreno se encogió de hombros.

- ¿Hay algo que no sea una poción?

- Bueno... Tengo que falsificar todo un trabajo sobre las Banshees – contestó señalando un papel que había encima de la cama – Puedes añadir algunas frases, pero que no se note demasiado que es un sabotaje.

Su amigo cogió el "trabajo" para ojearlo.

- Claro, porque la frase: "Versión femenina de Marilyn Manson", se pondría en un trabajo normal – comentó Sirius leyendo.

- Eh, a mí no me culpes, tenía el bloqueo del escritor.

- No se puede tener el bloqueo del escritor en la primera línea.

- ¿Vas a ayudarme o esperas que tus comentarios se queden grabados en el papel?

- No te hagas el sarcástico, no te pega... Por cierto, verde se escribe con "v".

- Lo sé – contestó James sonriendo.

- James, te estás pasando un poco, no creo que se traguen que haya escrito su nombre con faltas de ortografía. Además, queremos que se quede, no que la echen por disléxica.

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Cuando llegó la fecha límite del trabajo James ya tenía ideado un plan para cambiar el original por el falso. Después de falsificar la portada bastante decentemente, la siguió con el mapa del Merodeador y chocó con ella "accidentalmente" en la puerta del Comedor. Lily se agachó a recoger sus cosas.

- Lo siento – dijo James agachándose a su lado y viendo el trabajo real entre los libros que había en el suelo - ¿Has terminado ya el trabajo? – preguntó señalándolo.

- Ehh... Sí, de hecho venía a entregarlo.

- ¿Puedo verlo? – Las cosas entre ellos se habían suavizado en los últimos días, dejando paso libre para el sabotaje.

- Supongo que sí, pero ten cuidado – contestó dejándole el trabajo. James lo cogió y comenzó la cuenta atrás. De repente se oyó una pequeña explosión.

- ¿Qué ha sido eso? – preguntó Lily dándose la vuelta.

- No lo sé. ¿Por qué no vas a mirar por allí? – James señaló un lado del pasillo – Yo miraré por aquí – terminó señalando al lado opuesto.

Cuando perdió a Lily de vista se apresuró a sacar el trabajo falso de su mochila y lo intercambió, a primera vista eran exactamente iguales, aunque había sido difícil escribir veinte páginas de idioteces, y el resto lo había rellenado con fotografías de Marilyn Manson desde todos los ángulos. Nada más dar el cambiazo oyó un grito que provenía de la dirección en la que había ido Lily. Seguro que Sirius se había pasado, sólo le había pedido una pequeña distracción, pero conociéndole, podía encontrarse perfectamente con Chernóbil al otro lado del pasillo.

Con algo de miedo, James, dobló la esquina. Lo que tenía delante le hizo empezar a reírse. Lily, un grupo de Slytherins y el propio Sirius estaban cubiertos de una especie de gelatina verde, que había caído también en el suelo y les hacía resbalar cada vez que intentaban levantarse, desde el techo, Peeves lanzaba globos rellenos de la sustancia verde, mientras sus víctimas intentabas, sin éxito, apartarse de la zona de fuego. Cuando dejó de reírse, James, sacó su varita y murmuró un hechizo que hizo que Peeves se alejara huyendo.

- "Fregotego" – dijo señalando son su varita al suelo, y haciendo que quedara limpio. Lo intentó de nuevo apuntando a su amigo, pero no funcionó - ¿Qué pasa aquí? – preguntó, mientras Sirius se ponía en pie e intentaba quitarse el gel del pelo.

- Black, tengo que entregar un trabajo dentro de dos minutos, ¿cómo se supone que me van a tomar en serio con esto encima? – preguntó Lily enfadada.

- Puedes decirles que te caíste en un bol de gelatina... – sugirió Sirius sin prestarle demasiada atención, aunque se apartó un poco de ella – Y yo qué sé, no tengo la culpa de que te pusieras justo debajo de Peeves.

- ¿Perdón? Tú me empujaste.

- Eso no es verdad... Vale, puede que sí, pero era por tu propia seguridad... Estabas a punto de pisar una de las baldosas falsas.

- Te lo juro Black, - Lily le señaló con un dedo su su voz adquirió un tono amenazador – si me quitan puntos por esto...

- ¿Qué vas a hacer?

- Te cortaré la cabeza y la usaré para jugar a los bolos – terminó acercándose más a Sirius - ¿Te ha quedado claro? – El moreno tragó saliva y asintió.

James se introdujo entre su amigo y Lily para cortar la tensión.

- Lily, ¿por qué no vas a entregar tu trabajo? – le entregó la copia falsa.

Lily cogió el trabajo y se alejó intentando quitarse la sustancia verde de la cara. El grupo de Slytherins ya había desaparecido y sólo estaban ellos dos.

- Espero que hayas dado el cambiazo, porque si no moriré por nada – comentó Sirius.

- No te preocupes, tu muerte no será en vano. Además, si funciona le pondré a nuestro hijo tu nombre en tu memoria.

- ¿Ah sí?

- Sí – dijo James asintiendo con seguridad – Harry Sirius Potter – se paró un momento a pensarlo – No, es un nombre horrible, olvídalo.

- ¿Harry?¿Vas a llamar a tu hijo Harry? Es horroroso.

- No estamos aquí para discutir mis gustos por los nombres... Por cierto, se suponía que sólo era una pequeña distracción.

- Lo sé, pero hubo un pequeño error de cálculo. El plan inicial no me incluía a mí. Peeves me quitó la bolsa de globos.

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Lily entró en su habitación todavía cubierta del gel verde. Kathleen, que estaba sentada en su cama, abrió la boca para decir algo.

- No preguntes – dijo Lily antes de que emitiera algún sonido.

La pelirroja se dirigió hacia el baño. Cuando salió ya estaba limpia y tenía una toalla enrollada en el pelo. Kathleen seguía en su cama y la quedó mirando fijamente.

- ¿No vas a contarme lo que ha pasado?

Lily suspiró y empezó a contarle toda la historia, cuando terminó su amiga todavía tenía sus ojos clavados en ella y una expresión extraña en el rostro.

- ¿Crees que Potter ha tenido algo que ver?

- No lo sé... Últimamente se ha estado portando mejor, no lo veo normal – comentó Lily.

- Un chico se porta bien contigo y deja de acosarte, ¿y lo único que se te ocurre es sospechar de él? – preguntó Kathleen – Pasas demasiado tiempo con Selene. No tenemos espacio para dos paranoicas en el grupo.

- Sólo me parece raro. Ya no sé qué pensar – se tiró en su cama - ¿De verdad me estoy portando como una paranoica?

Kathleen se encogió de hombros.

- Lo único que te digo es que no todo el mundo está intentando estropearte la vida, no es bueno ser demasiado sospechosa.

Lily asintió.

- Ha sido un día muy largo – dijo en un suspiro.

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Cuando James se levantó al día siguiente, lo primero que hizo fue comprobar que el filtro de sinceridad continuaba dónde lo había dejado. La entrevista era la parte más delicada de la operación, no podía permitirse fallos. Repasó mentalmente todos los pasos. Lily acudiría a la sala de entrevistas a las once en punto, lo que le daba al menos un margen de dos horas para hacerla tomar la poción, el problema sería mantenerla callada hasta la entrevista, para evitar un posible descubrimiento.

James bajó a la sala común, donde ya le esperaban sus amigos, que se habían marchado antes y le habían dejado tirado.

- ¿Qué es eso? – Remus señaló la poción que llevaba en la mano. Mierda. Dos segundo de operación y ya le habían descubierto, desde luego de James Bond sólo tenía el nombre de pila.

- Son mis deberes de pociones, gracias por traérmelos James – dijo Srius rápidamente cogiendo el frasco.

- Hoy es domingo, ¿desde cuándo se entregan deberes en domingo?

- Desde que son deberes extra – contestó dando el tema por zanjado - ¿Nos vamos?

Al llegar al Comedor James comprobó que ni Lily ni sus amigas habían llegado todavía. Después de unos minutos la pelirroja apareció con Rhane. Llamó a Sirius y le sacó de allí.

- ¿Qué pasa?

- Necesito tu ayuda – explicó mientras sacaba su capa invisible de la mochila – Tienes que entretener a Evans y a Goldenstar mientras le cuelo la poción.

- Me vas a tener que devolver todos estos favores algún día.

- Considéralos como si estuvieras saldando tu deuda económica.

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- Lily, relájate – Rhane agarró a la pelirroja por los hombros y la obligó a dejar de temblar.

Selene y Kathleen habían decidido levantarse más tarde, así que habían dejado a su amiga rubia sola frente al peligro.

Lily era una persona nerviosa ya de por sí, pero los asuntos que concernían a los estudios aumentaban su estado de hiperactividad al doble.

- Y ¿qué pasa si lo hago mal?¿Qué pasa si me trabo al hablar? Seguro que eso me quitaría puntos – tenía una tila encima de la mesa y no quería comer nada.

- Tranquilízate, yo también voy a hacer una entrevista, ¿me ves temblar?

- Estamos hablando de mí. ¿Crees que me bajarán puntuación si hablo más de lo necesario? Porque cuando estoy nerviosa tiendo a hablar mucho, y a hacer muchas preguntas, ¿sabes? Claro que lo sabes, llevas conmigo siete años. ¿Te acuerdas de cómo nos conocemos? Creo que fue esa vez que...

- "Silencius". Es verdad Lily, hablas demasiado – Lily seguía moviendo los labios e intentando hablar. Rhane negó con la cabeza – Lo siento, pero no. El hechizo se queda donde está hasta que empiece la entrevista. Ahora tómate la tila y relájate un poco.

Cuando Lily fue a coger la tila alguien la sujetó del hombro.

- Ehh... ¿Habéis visto a Susan? – preguntó Sirius.

Rhane y Lily, todavía taza en mano, le miraron extrañadas.

- Tomaré eso como un no. ¿Te pasa algo Evans?

- La he silenciado, al menos hasta la entrevista. Pero soy lo suficientemente perceptiva para saber que lo que está pensando ahora mismo es: "Búscala tú, ¿no ves que tengo una crisis nerviosa?" – Lily asintió.

- ¿La has silenciado hasta la entrevista?

- Eso he dicho.

- Vaya, que conveniente – murmuró Sirius para sí mismo.

- ¿Qué?

- Nada... Mejor me voy a ver si encuentro a Susan en otro sitio.

Lily se limitó a negar con la cabeza y se bebió su tila.

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Sirius salió del comedor y se paró frente a una pared.

- ¿Lo has conseguido?

Frente a él, James se quitó la capa invisible y le enseñó el frasco vacío de la poción.

- ¿Tú qué crees? – preguntó con una sonrisa.

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El aula de entrevistas era en realidad el aula de Transformaciones, pero había sido adaptada para la ocasión. Lily, Rhane, Kathleen y muchos alumnos de séptimo esperaban nerviosos a que llegase su turno.

Poco antes de las once, Rhane apuntó con su varita a Lily.

- Voy a quitarte el hechizo, ¿crees que podrás aguantar dos minutos sin echar a correr gritando? – Lily asintió – Vale – a continuación murmuró el contra-hechizo - ¿Todo bien?

- No. ¿De dónde has sacado esa camiseta? ¡Es horrorosa! – contestó la pelirroja.

- Vale, pasamos de la hiperactividad a la espontaneidad compulsiva – dijo Kathleen – Lils, ¿te encuentras bien?

- ¿Por qué últimamente todo el mundo se empeña en llamarme Lils? Ahora en serio, ¿no pensarás llevar esa camiseta?

- ¿Lily? – se volvió hacia Rhane - ¿Seguro que era una tila? A lo mejor la has emborrachado.

- Sé distinguir una tila de un vaso de licor.

Justo entonces se oyó el nombre de Lily para entrar en la sala.

- Deseadme suerte – dijo antes de entrar.

Detrás de la mesa del profesor estaba sentado Andrew Carter. El profesor le señaló con la mano una silla vacía, indicándole que tomase asiento. Lily cruzó la habitación y se sentó.

- De acuerdo, señorita Evans, no tiene que estar nerviosa – empezó.

- Sí, claro – murmuró la pelirroja.

Carter hizo caso omiso del comentario y continuó.

- Sólo le haré unas pocas preguntas y podrá irse. En primer lugar, ¿qué le ha incitado a presentarse a las becas de intercambio?

- ¿Principalmente? Librarme de Potter.

- ¿Perdón?

- Quiero decir... Me interesa conocer países nuevos y creo que sería una gran ayuda para mejor en los estudios – corrigió con una risita nerviosa.

- De acuerdo, y... ¿cómo calificaría sus progresos dentro de Hogwarts?

- ¿Y a qué viene esa idiotez? – Carter la miró con incredulidad – Quiero decir... Ehh... Buenos. Creo que voy bien.

- ¿Se encuentra usted bien, señorita Evans?

- ¡No!¿Tengo pinta de encontrarme bien? – Lily se tapó la boca con las manos y salió corriendo hacia la puerta – Mejor me voy.

Después de atravesar la puerta de salida, Lily, ignoró a sus amigas y se dirigió corriendo hacia la Sala Común de Gryffindor, y acto seguido hacia el dormitorio de los chicos. "Sabía que lo de Potter no podía ser permanente" pensó mientras subía. Abrió la puerta de la habitación de un golpe.

- ¡Potter!¡Voy a matarte! – James se movió hacia un lado. "Ah no. De esta no se escapa". Lily se abalanzó sobre él.

De repente sintió que dos personas la separaban de su presa, aunque ella siguió pataleando.

- ¡Soltadme!¡Potter, estás muerto!

- Lily, cálmate. ¿Qué ha pasado? – preguntó Remus.

- ¿Que qué ha pasado?¡Preguntádselo a él! – señaló a James, aunque este había encontrado un interesante punto en la pared y no apartaba la mirada de él.

- ¿James...?

- ¿Sí? – contestó sonriendo.

- ¿Qué has hecho para que Lily quiera matarte?

- ¿Yo? – preguntó ofendido – No he hecho nada, lo juro por mi honor como merodeador.

- Tú no tienes de eso.

- Pero si lo tuviera lo juraría.

Lily volvió a intentar soltarse, pero Sirius la retuvo.

- Me ha estropeado la única oportunidad que tenía para librarme de él. Te lo juro Potter, cuando me suelten estás muerto.

- ¿Por qué crees que he sido yo? – James puso cara de no haber roto un plato en toda su vida.

- Porque sé sumar dos más dos.

- Lily, recapacita un poco – empezó Sirius – Si hubiera sido él ahora mismo estaría dando saltos de alegría, pero mírale, está destrozado, y para cuestiones sentimentales James es trasparente.

James se llevó la mano al corazón y asintió con cara de pena. Lily puso los ojos en blanco, dio un último empujón y consiguió soltarse de Sirius. Se acercó a James y lo señaló con el dedo.

- Si alguna vez descubro la más mínima prueba que te inculpe en esto Potter, la única forma que tendrás de tener hijos será adoptar.

La chica se dio la vuelta y salió de la habitación. Remus cerró la puerta detrás de ella.

- ¿Alguien me explica qué habéis hecho?

- ¿Es que no me crees? – preguntó James ofendido.

- Prongs, una esponja tiene más talento interpretativo que tú, así que no te esfuerces si no quieres que te salgan canas. ¿Qué habéis hecho?

- Puede, sólo puede, que hiciéramos unos pequeños arreglos con respecto a lo de las becas... – comentó Sirius.

Remus negó con la cabeza, cogió su abrigo y se dirigió hacia la puerta.

- ¿Qué?¿No vas a echarnos la bronca ni nada parecido? – preguntó James extrañado.

Su amigo se encogió de hombros.

- He perdido la esperanza, la próxima vez me limitaré a no sujetar a Lily – se dio la vuelta y salió del dormitorio.

James miró a Sirius.

- Es una broma, ¿verdad? – dijo con una risita nerviosa – Quiero decir, no será capaz de dejar que Evans nos coja. ¿No?

- Creo que deberíamos mantenernos un tiempo lejos de Evans.


Bueno, aquí termina. Como habéis podido observar es dos días antes, es porque no vamos a poder actualizarlo el lunes, de todas formas el ocho estará para el lunes veinte, siguiendo con nuestro calendario.

¿Qué tal?¿Lo habéis odiado?¿Os ha encantado? Comunicádnoslo, o sufriréis nuestra ira. Por favor, necesitamos reviews...

Luna210-lupin : Bueno, akí está el siguiente, esperamos q te haya gustado. A ver si hay suerte y no te has ido d puente todavía. Lo de los rr... da igual lo cortos q sean el caso es q lleguen. Ciao.

tgv : Akí está el kpi. Ni se tocurra poner los nombres q me dijiste a tu perro.

Ely-Barchu: Bueno, es q si dijésemos kien akaba con kien esto no sería divertido, ¿verdad? gracias por la rr. Esperamos q t haya gustado este tmbién.

EllEn44K: Hola! A ver si t gusta tmbién este. Si me dvuelb pronto el fichero silvia t lo paso, pro tienes q seguir djando rr. Bye.

Witchmin: Sí bueno, al final las parejas fueron equivocadas (pero nosotras sabemos la pareja q le corresponde a cada uno XD). Muchas gracias por el rr. Esperamos q t haya gustado. ByE bYe.

MarIaNa-Blackforever: ¿Genios de la escritura? Ya nos gustaría. Muchas gracias por la rr. ¿De verdad estabas eufórica? Eso es q a la gente le gusta el fic, lo q es bueno para nosotras. Esperamos q t haya gustado. Ciao.

Silmarwen754: sigo, sigo.

Xx beth xX: No pasa nada por lo dl rr. A todo el mundo pareció hacrle gracia q se qdaran todos sin pareja. Pobrecitos, si supieran q nos reímos de sus penalidades... Muxas gracias por el rr. Hasta pronto.

aline ) : ¿Hemos tardado muxo? Bueno, terminarlo lo que se dice terminarlo de momento no. Esperamos q t haya gustado. Muxas thanks x el rr.

Raipotter : Bueno, lo hemos continuado pronto. Esperamos q este también t haya gustado, pq si no quiere dcir q estamos bajando la calidad. Bueno. Gracias x l rr, y hasta pronto.

PADFooT-BlaCK: Bueno, si t lo contáramos no sería un secreto, pero t diré algo. Si hubiéramos puesto a Sirius con Selene, ¿no habría sido demasiado obvio? muxas gracias x la rr. Hasta pronto.

Bueno, a ver si dejáis rr, q sois todos unos vagos...

Hasta el siguiente capi.