(POV de Joey)
Odio...
¿Cómo definir aquella palabra?
Era una palabra que encerraba otras tantas palabras...
Palabras llenas de tantos sentimientos...
Traición, dolor, pena, resentimiento, rabia, angustia, envidia, venganza...
Si...Venganza...
Tantos sentimientos encerrados en una misma palabra... odio
No recordaba haber sentido tan candentemente un sentimiento, siquiera el amor lo había sentido así de alguna manera, era un sentimiento que lo consumía... lo dejaba bañado en las más gruesas lagrimas, lo dejaba corrompido entre las más candentes llamas, era un sentimiento tan fuerte, tan poderoso...
Y todo dirigido hacia una misma persona, ante aquella que tenía frente a su rostro, a su altura, a tan pocos centímetros de distancia...
Sentía sed de hacerle daño, jamás había sentido tales deseos de mal hacia alguna persona, siquiera a su padre mientras lo golpeaba, o a los estudiantes que se burlaban de él... jamás, jamás había deseado con tanto fervor que algún ser viviente muriese...
Pero morir no era nada, morir era poco, tenía que sufrir...
Sufrir...
Lo haría sufrir...
Yami: ¿Vas a quedarte parado toda la noche o me quieres dejar a mí y a MI koishi en paz?
Dolor...
No sabía que pensar o como reaccionar... que decir o que hacer... si vengarse... o lanzarse a llorar... no, no iba a llorar... no podía llorar, no ahora, no en este momento, no podía mostrarse débil frente a su enemigo... a su único y más grande enemigo...
Yami lanzó un suspiro lleno de fastidio aunque con una mezcla de satisfacción en él y se dispuso a cerrar la puerta
La sostuvo con fuerza, tenía que ver como estaba Seto, su Seto, le propinó un fuerte empujón a Yami y corrió dentro de la oscura habitación...
Su mirada no divagó en nada, sus ojos se clavaron fijos cual estacas en el bulto que aún se encontraba en la cama, se acercó a este... retiró parte de las sabanas que los envolvían... y ahí estaba... Seto, SU Seto... con una expresión de dolor en el rostro, sin mover tan siquiera un músculo...
Tenso... muy tenso... sus ojos estaban cerrados, como con fuerza... su piel estaba pálida... se veía áspera... y no suave como de costumbre.
Se atrevió a tocarlo... se sacudió con potencia, y lentamente pudo ver como los ojos azules se abrían, se abrían con una mezcla de miedo y vergüenza que jamás se hubiera imaginado ver plasmados en el rostro del CEO...
Joey: Seto...
Seto: Wheeler...
Seto cerró los ojos y se dejó caer con fuerza sobre las sabanas...
Yami: O que pena Joey... Lo agoté mucho... incluso para hablar...
Joey levantó su mirada llena de impresión a Yami, no se había dado cuenta, pero este llevaba una de las finas batas negras de seda de Seto...su mirada traía un aire de sarcasmo francamente desesperante y hacían constantes ademanes con las manos como lamentándose por lo sucedido...
Joey: no te lo voy a perdonar...
Yami: ¿Qué cosa? ¿Acaso no te has dado cuenta Joey? ¿Qué no es obvio? Te lo advertí esta mañana... Seto solo había estado usándote... ¿Crees que opuso resistencia a mis caricias? ¿A mis tratos? ¡No! No lo hizo...
Joey sintió una punzada llena de fuerza llegar a lo más profundo de su alma...Lo que Yami decía era absurdo...pero...¿Y si era cierto? ¿Y si Seto únicamente lo había usado? Bueno, conocía muy bien acerca de...el extraño modo de manipulación de Seto...pero...¿Por qué el manipulado debía ser el? ¿Por qué invitarlo a venir la misma noche que Yami? No...todo esto era culpa del maldito espíritu...
Yami: créeme Joey...te acabo de salvar de que te rompieran el corazón...
Joey se levantó de golpe...su cuerpo estaba cabizbajo...se tambaleaba...sentía que lo habían abatido como nunca....que le habían dado la golpiza del siglo...
Intentó ahogar su grito de furia, en vano, corrió en dirección a Yami le propinó un golpe y... en un segundo su puño estaba envuelto por una de las manos de Yami...
Yami: se como te sientes...pero lo mejor es que te vayas Joey...
Joey: Yo no me voy...al menos hasta haberte matado Yami...
Joey cerró los ojos con furia e intentó propinarle otro golpe...en unos segundos el cuerpo de Yami se encontraba tras de si, riéndose ligeramente sintió su respiración en su cuello, su piel se erizaba ante aquel aliento gélido se acercó a su oído susurrándole...
Yami: Joey...vas a despertar a Seto...y necesita descansar...necesita descansar luego de una noche tan..."Movida"
Joey sintió el fuerte golpe que le propinaba Yami en su espalda, no conocía aquella fuerza, sus ojos se encendieron, como llamas, sintió como por sus venas corría una lava candente...
Joey: salgamos...no quiero despertar a Seto con tus gritos de dolor...
Yami: jhm...perdedor...
Joey jaló con fuerza del cuello de la bata levantando a Yami ligeramente
Joey: escuchame miserable...nunca te perdonaré lo que le hiciste a Seto...
Yami: jajajajajaja Joey....me siento piadoso esta noche...
Yami se soltó con agilidad del los acosos del perro y se dirigió hacia la puerta...
Yami: Te dejaré con Seto lo que queda de noche...no lo molestes por favor...
Para su placer, Yami había estado tan ocupado riéndose que hizo caso omiso a la "inusitada" velocidad de Joey y no vio, como, su enemigo, con ojos desorbitados se acercaba a él con una fuerte embestida
Pequeñas gotas carmesí tiñendo la alfombra...
Pero no eran nada en comparación a lo que quería quitarle...
Yami sujetó con rabia el cuello de Joey...si era necesario lo estrangularía ahí mismo...tal y como lo había ejecutado hace 5000 años lo podía repetir nuevamente...
Joey intentó con desesperación remover las manos de su enemigo, sentía como el aire se agotaba, quería gritar...las manos de Yami se tornaban blancas ante la presión, su rostro adquiría un color violeta...
Presión...era demasiada la presión podía contemplar el rostro de Yami, con un aire de maldad espeluznante, parecía poseído, poseído por un ser maligno, sus ojos rasgados adquirían un color rojizo brillante, que alumbraba la oscuridad a su alrededor, en sus labios estaban trazada una fina sonrisa y sus labios se volvían blancos...
Era como un espectro, un espectro horrible...
Y de repente abrió los ojos casi desorbitándolos, aflojó la fuerza de sus manos y con un gesto lleno de dolor soltó al perro y corrió a toda pisa a la puerta y de ahí, solo se oyeron ligeros pasos llenos de fuerza y rapidez a través del pasillo...
¿Qué había sido aquello?
Le dolía hacer cualquier movimiento con su cuello, dirigió la llena de sus dedos a su garganta...palpitaba con una fuerza descomunal, lanzó un quejido ahogado...un poco más y lo hubiera matado...¿Qué le sucedía a Yami? No recordaba que este tuviera tanta fuerza...
Le dirigió una mirada a Seto, descansaba...
No quería ni imaginarse que le había hecho Yami aquella noche...
Se dirigió a la cama...lo mejor era que lo dejase descansar....más tarde lo curaría...
(POV de Yugi)
Yami no había regresado aquella noche....estaba realmente preocupado por él...
La verdad es que a veces le dolía que el espíritu le guardase tantos misterios...sabía que estaba actuando como un idiota...pero...así era, así se sentía...
Le dirigió una mirada a su mesa de luz....ahí estaba, le había comprad aquella noche un regalo, era un reloj, un modelo muy exótico, imitaba a los antiguos relojes solares y tenían toda clase de jeroglíficos gravados en el, como en el antiguo Egipto...
Donde estaría Yami...
¿Qué desde cuando le había tomado tanto cariño al espíritu?
No lo recordaba, Yami sin duda era un tipo atractivo, y le había ayudado muchas veces de manera psicológica...desde que Tea lo rechazó (confesándole su atracción por el mismo Yami) o...cuando necesitaba apoyo o ayuda en sus estudios...
Siempre estuvo ahí Yami...
Siempre...
