:SUNDANCER AQUÍ APARECIENDO ALEATORIAMENTE CON UN AVISO:

Considero que debo notificar que este capítulo contiene temas delicados sobre lesiones auto infligidas y muerte que pueden incomodar a algunos lectores.


El agua del mar cambiaba su temperatura y el viento comenzaba a soplar incesantemente anunciando la proximidad a una isla otoñal, después de 4 largos días parecía que pronto llegarían a su destino.

Una mirada intrigada apareció en Bepo al percatarse que ninguna de las agujas de su log pose apuntaba a la isla, siendo una de las pocas que no poseen un campo magnético.

_Parece ser que este lugar no suele ser visitado por foráneos_ Pensó para si mismo, notando que el lugar carecía de puerto.

Los uniformados salieron emocionados a cubierta para ver el destino donde apuntaba la vibre card quedando sin palabras por la belleza de su entorno, el agua era en extremo cristalina logrando admirar incluso los moluscos que habitaban en las profundidades, mientras en las cercanías podían apreciar una bella isla de edificios blancos con techos azules y un lujoso palacio en el punto más alto.

La poca profundidad de la orilla no permitía acercarse más al Polar Tang por lo que tuvieron que anclarlo en el claro más cercano y continuar su camino a pie disfrutando del agua helada como en su tierra natal, causándoles un poco de nostalgia. El único que no parecía fascinarle tanto era a su capitán sintiéndose ligeramente débil por el efecto del agua marina.

—Que problemático —Quejó cansado

—¿Tú no te sientes débil Yagi-san? —El rubio negó con la cabeza

—Qué raro, el kairoseki te afecta, pero el agua no. —Comentó Uni.

—Recuerda que nadó de regreso idiota…

¿POR QUÉ DEBERIA AFECTARME?

—Los usuarios de frutas del diablo son débiles contra el agua… les drena la energía y les hace incapaces de nadar.

—Se hunden como martillos en el agua.

PERO MI PODER NO PROVIENE DE UNA FRUTA. —Aclaró el héroe, siendo observado de reojo por Trafalgar que trataba de comprender el poder del rubio.

Bajo la arena se lograba notar un delicado piso en escala de grises con vidrios incrustados, que combinaba con los techos de las construcciones pareciendo ser de cristal reflejando los colores del mar.

Siguiendo su camino podían apreciar con mayor detenimiento las bellas calles decoradas con árboles naranjas que tapizaban el sendero con hojas en tonalidades cálidas guiándolos hacia el interior de la ciudad que parecía llevar acabo un festival.

—¿Escuchan eso? —Preguntó Uni

—Es una canción muy reconfortante —Expresaron sonrojados.

—¿Crees que hoy sea algún evento especial?

—Espero que tengan comida, estoy muriendo de hambre —Gimió Bepo

Un dulce sonido se escuchaba por las calles calmando a los uniformados mientras eran atraídos hasta el origen de la hermosa melodía, arribando hasta una amplia plaza donde la multitud se encontraba reunida alrededor de una gran fuente repleta de flores con una estatua amorfa sobresaliendo en el centro.

Los piratas se acercaron a ver qué ocurría notando que dentro de la fuente posaba el cuerpo de un anciano convaleciente siendo atendido por lo que parecían ser familiares mientras el resto de la gente tarareaba esa bella melodía transmitiendo paz a los presentes.

—Chicos… no se ustedes, pero ¿Esto no les parece un tanto… —Preguntaba el chico con braga en el cuello.

—Tétrico… definitivamente tétrico. —Completó Penguin

—Parece que están haciendo un sacrificio.

—¿SERAN UNA CLASE DE SECTA? —Dijo el héroe un poco aturdido por lo que veía.

—Capitán, será mejor que nos retiremos. —Sugirió Sachi después de escuchar la conjetura del rubio.

Bepo tarareaba la misma melodía que lo tenía cautivado.

—Basta Bepo. —Silenció el capitán a su navegante.

—Lo siento.

La multitud abrió paso al oso agradeciéndole unos segundos para después seguir con su canto grupal.

—Eso… fue extraño. —Jean Bart comentó al ver cómo la gente no dejaba de sonreír dulcemente a su peludo nakama.

—No me da buena espina, será mejor terminar aquí rápido. —Propuso Monte.

—Es que solo… ¡Míralos! No podemos confiar en… en eso. —Dijo Sachi entre dientes apuntando con el pulgar tras él.

El joven moreno contempló con detenimiento los alrededores, en algunas construcciones hacía presencia una pequeña gema azul, en su mayoría decorado con un poco de plata sobre las puertas. Decidiendo dirigirse a lo que parecía ser un restaurante no portador de esa joya.

—Este lugar me da escalofríos… —Comentó Ikkaku frotándose los brazos.

—¿Aquí se encuentra la persona que estamos buscando? —Preguntó curioso Sid mientras entraban a un pequeño establecimiento.

—No. Primero necesitamos entender que sucede en este lugar. —Comentó Trafalgar buscando una mesa vacía que pudiera acomodar a todos.

El lugar era acogedor, no era muy grande pero el aroma era muy atractivo predominando el olor a hierbas en los alimentos, un hombre de estatura baja, cabellera celeste y barbilla pronunciada se acercó dándoles la bienvenida.

—Mah mah, ¿Qué es esto? Caras nuevas… Hace mucho no teníamos forasteros. —Expresó alegre el pequeño hombre, confirmando las sospechas de Bepo, la isla no solía ser visitada por desconocidos.

—¿Les gustaría una mesa en el exterior o interior?

—¿Podemos interior? No quiero escuchar los cantos al moribundo ese.

—Sid… no seas mal educado… —Regañó la joven.

—Oh, veo les incomoda la ceremonia de partida… en ese caso síganme, tengo el lugar perfecto para ustedes. —El hombre los dirigió al fondo del local juntando 5 mesas frente una fuente repleta de helechos.

—Aquí no alcanzarán a escuchar todo el evento. —Comentó sonriendo suavemente dejando los menús sobre la mesa.

—¿Qué clase de ritual siniestro es ese? —Preguntó Clione curioso.

—Quizá así lo perciban ustedes que no conocen nuestras tradiciones, pero no tiene nada de siniestro… al contrario. Cuando alguien se encuentra enfermo de gravedad o débil por su avanzada edad, hacemos una ceremonia para agradecer su vida donde todos amenizamos con una melodía para calmar a los presentes… Verán, normalmente las partidas son tristes… Aquí en Gaia queremos hacerle compañía a nuestra comunidad hasta el último momento para que se retiren felices y amados. —Narraba el hombre mientras acomodaba los cubiertos en la mesa.

—Mi nombre es Lenny y seré su mesero. —Se presentó el hombre dando una pequeña reverencia ante los visitantes

GRACIAS, MUY AMABLE SR. LENNY.

—No es un tanto incomodo hacerlo público. —Preguntó Penguin

—Suena bizarro, pero quizá es porque no estamos acostumbrados. —Trató de defender el joven de copete pronunciado.

—Suena a que están romantizando la muerte.

—No importa que sea con buenas intenciones, sigue sonando siniestro.

—Es como una ejecución publica sin violencia. —Agregó Sid

—Oi Oi, Lo descontextualizaste demasiado. —Comentaron todos moviendo la palma de la mano en desaprobación.

El peludo oso sereno y sonrojado no dejaba de tararear la melodía en voz baja, balanceándose al ritmo de la canción.

—Bepo…

—Lo siento…

El hombre sonrío tarareándola también siendo juzgado con la mirada por el grupo de piratas.

—Dicen que la melodía despierta al guardián de Gaia, si todos logran sincronizar sus emociones dará una segunda oportunidad de vida para que puedan terminar su misión en este plano, de no ser así como agradecimiento los acompañará al más allá. —Explicó no siendo afectado por las miradas penetrantes del grupo criminal.

—Me apesta a mierda. — Quejó el pecoso siendo golpeado por Clione.

—Deja de ser tan grosero Sid… Pero si suena bastante fantasioso.

—¿Es puro invento o si hace sus milagritos ese guardián?

—¿Les ofrezco vino de una isla aliada invernal? —El moreno de gorro afelpado afirmó con un ligero movimiento de cabeza al mesero.

—¡AH! ME IGNORÓ —Reclamó ofendido Vinny

—Lo siento, mucha charla y poca atención… No suele ser común, pero si ha sucedido en algunas ocasiones… De acuerdo, los dejo unos minutos para que vean que desean ordenar. —Expresó tranquilo antes de retirarse.

—¡NO ESPERE! TRAIGANOS UNA ORDEN DE TODO.

—¿Será suficiente?

—Pedimos más si es necesario. —Dictaminó Jean Bart

¿TIENEN SUFICIENTE DINERO? —Preguntó preocupado pensando que comerían y escaparían.

Todos observaron con miradas en blanco al rubio juzgando como si hubiera dicho una estupidez provocando que una gota de sudor se deslizara por su frente.

—Si tanto te preocupa no comas y ya. —Replicó irritado Sid.

—Tranquilo Yagi-san tenemos bastante.

—Y tendremos más próximamente. —Celebró Sachi

—¿Que sucede capitán?… está muy distraído.

—Está nervioso —Bromeó Sachi.

—NO ES ESO IDIOTA —Reclamó molesto el capitán.

_AH SE MOLESTÓ_ Todos los uniformados extendieron sus brazos al aire en sorpresa por su reacción.

—Hay algo aquí que aún no termino de comprender. —Exhaló irritado observando en la fuente la misma gema que lucían algunas puertas de los alrededores.

—Talvez solo es decorativo, no le de tantas vueltas capitán. —Comentó Bepo acostumbrado a que Trafalgar no pudiera evitar sobre analizar hasta los más pequeños detalles de todo lugar que visitaba.

Lenny les interrumpió sirviendo vino en las copas de los piratas, siendo acompañado por un joven que lucía su cabellera azul claro similar al del mesero que les atendía.

El joven peliazul comenzó a servir tapas en el centro de la mesa llamando la atención de los hambrientos comensales que temblaban sudando frio en sus asientos ansiosos por comenzar a comer.

—¿Por qué nadie se mueve? —Preguntó curioso en voz baja a Penguin.

—Como te habrás dado cuenta siempre comenzamos a comer después del capitán…

—Pero no le gusta el pan… —Dijo entre lágrimas Bepo impaciente por devorar las tapas de salmón que destacaban entre el resto de los platillos por su delicado color rosa.

—Pueden comenzar… —Comentó sereno el moreno mientras trataba de captar la atención del hombre de barbilla pronunciada llamándolo discretamente logrando se acercara a servirle a su copa para después ser interrogarlo.

—¿Cuál es la finalidad de las gemas?

—Oh, ¿No vienen por eso?... Pensé que venían por una de ellas… son promesas cumplidas o "milagritos" como burdamente le llamó el caballero de allá.

—¿Pwomesas gumpidas? —Preguntó Vinny con la boca llena generando una cara de repulsión en el peliazul.

—Si no es mucha indiscreción… ustedes no vienen a la ceremonia, ni en busca de ayuda… ¿Qué los trae a Gaia?

SI ES POR AYUDA … NECESITO UN —Confesó el rubio siendo silenciado por la penetrante mirada del capitán.

—Yagi… apestas a desesperación. —Quejó Sachi.

—Kukuku~ Parece que vinieron al lugar indicado por accidente.

—¿A qué se refiere con promesas?

—Cuando no podemos resolver las cosas por cuenta propia acudimos a Oka-sama gobernante de Gaia, ella hará lo posible para cumplir su promesa de resolverlo, si lo logra nos otorga como memoria una gema que es el tesoro de nuestra nación. A pesar de que su valor es alto debido a que solo se existen en esta isla, consideramos más valioso su mensaje… Así que todas las gemas que vean en exhibición son promesas cumplidas. —Expresó apuntando a una gema de mediano tamaño en el centro de su fuente. —El tamaño representa la complejidad de la petición.

El héroe observó esperanzado la gema incrustada en la fuente.

—ESPERO NO SEA MUY INVASIVA MI PREGUNTA, PERO… ¿CUÁL FUE SU DESEO?

—Mi hijo… —Volteo a ver al joven mesero que trataba de equilibrar los platillos sobre sus brazos.

—Mi hijo trabajaba en el barco mercantil que provee a Gaia… Hace un año el barco fue atacado y robado por piratas, perdimos todo incluyendo a los trabajadores. Los mayores fueron asesinados y los más jóvenes fueron vendidos como esclavos. Al no tener noticias de mi hijo fui a pedir ayuda a Oka-sama, y a la semana no solo trajeron a salvo a todos los jóvenes, si no el barco y producto como el que fue robado… —El hombre sonrió con sus ojos cristalinos tratando de secarse las lágrimas con sus dedos, siendo observado por su hijo que terminaba de repartir los platos a los piratas.

—Exponer la gema en nuestros hogares o negocios es un agradecimiento con Gaia y Oka-sama.

—Acudir a ella es el último recurso. —Continuó el joven de cabello azul abrazando a su padre para calmarlo.

—Pues deben estar bastante jodidos para que todas las perras casas tengan su cochina piedra. —Rezongó el pecoso entre dientes siendo golpeado contra la mesa por Penguin.

—¡Compórtate novato!

—¿CREE QUE NOS QUIERA AYUDAR?

—Es extraño… Solo un grupo selecto de personas del exterior pueden venir a hacer una petición con una invitación… Pero ustedes… —Dijo decaído el hombre que fue interrumpido por su primogénito.

—Si lograron llegar, significa que son de esos pocos elegidos. —Continuó sonriente llevándose a su padre a la cocina para animarlo un poco.

—No se entusiasme Toshinori-ya… Tenemos mala reputación con el oráculo, si está ayudando al gobernante de Gaia no espere recibir su apoyo. —Confesó Trafalgar seleccionando un platillo con un gran filete siendo seguido por sus nakamas repartiendo platos al azar.

—Talvez deberías ir solo… —Sugirió Clione apuntándole con una pierna de pollo.

—Dudo que quiera ayudarlo sin siquiera saber quién es. —Añadió Sachi

—Si, porque lo va a querer ayudar sabiendo que viene de parte nuestra… —Reprendió Penguin

—Ouch…Touché…

—La verdad duele…

—Ya sabe que estamos aquí y no ha hecho nada al respecto, eso debería ser buena señal.

BEPO SAN ¿CÓMO ESTÁ TAN SEGURO?

—Eto… ¿Capitán? —Preguntó nervioso el oso al haber hablado de más.

—Su especialidad es el haki de observación —Respondió el Trafalgar.

—Lo ha entrenado toda su vida y…

—¡Vaya que ha tenido una vida larga! —Interrumpió Sachi siendo intimidado por la mirada de algunos presentes.

—Ya… me callo.

—Preferimos no profundizar en el tema por respeto, pero para conocimiento y contactos… es la persona indicada para ayudarte All Might. —Contestó Penguin chupándose los dedos tras robar comida de otro plato.

—Y si no tenemos los milagritos de Doña Oka-Sama —Dijo burlonamente Sid

—Terminen de comer para visitar a la tal Oka-ya. —Ordenó Trafalgar.

—Capitán, creo que no deberíamos ir todos, hay varios que ni siquiera saben quién es. —Sugirió su peludo amigo.

—¿USTEDES TAMBIEN IRAN? SI ESTAN EN MALOS TERMINOS CREO QUE MEJOR DEBERÍA IR SOLO.

—Si va solo hay menor probabilidad de que lo quiera recibir… No confía en nadie y hace lo posible para no interactuar las personas… —Pausó dudoso en continuar compartiendo información viendo discretamente de reojo los vacíos alrededores.

—No posee una identidad y encuentra siempre la manera para cambiar su apariencia… La única manera de hacer contacto es por medio de una vibre card o le busque directamente, por eso mismo si no nos percibe, no hará contacto.

—No termino de entender… si los odia ¿Por qué los recibiría? —Preguntó curioso Jean Bart atento a la historia que siempre evitaban siquiera mencionar.

—Necesita la habilidad del capitán para cambiar de cuerpos. —Respondió Bepo.

—ENTONCES… ¿NO POSEE ALGUN QUIRK CAMBIAFORMAS?

Dale con Quirk secretario… ¡Fruta del diablo!

—No posee ningún "Quirk" pero suele buscar hacer algún intercambio con poseedores de frutas que le permitan cambiar de género, cuerpo, edad o apariencia. —Completó la información Clione.

—El capitán fácil le cambió de cuerpo como cuatro veces.

—Suena que les debe varias, no puede negarse a ayudar a Yagi-san. —Animó Ikkaku.

—Es más complicado que eso. —Rascó su cabeza Bepo.

—Oh, ¿Ya es hora? —Añadió al ver como su capitán tomaba su nodachi dirigiéndose a la salida.

El joven tatuado salió del establecimiento guiado por la vibre card en su mano que apuntaba al gran palacio en la cima, siendo detenido por la proyección de unas sombras tras de él indicando quienes serían los acompañantes de esa incomoda reunión.

—¿QUÉ HAY DE LOS DEMAS?

—Nos esperaran aquí hasta que terminemos… —Contestó su pregunta el joven pirata.

—¿Crees que sea apropiado que vayamos? —Preguntó nervioso Penguin

—Aye Aye, solo quiero ver que este bien...

—Si sabes que no lucirá como en el último encuentro que tuvimos.

—Talvez ahora es un anciano

—O una rata indagando en el palacio. —Bromeo Sachi moviendo los dedos de sus manos como si deseara apretar algo en el aire.

—Le quedaría mejor un animal carroñero. —Continúo mofándose Penguin.

—No importa, con que sea feliz y se encuentre bien es suficiente para mí. —Dijo Bepo con brillo en sus ojos.

QUE NOBLE JOVEN BEPO. —Sonrió ante las palabras de su amigo

Los 5 siguieron el camino rodeado de arces en un vibrante color rojo hasta el opulento palacio blanco destacando sus hermosos techos de cristal y enormes vitrales que reflejaban distintas tonalidades del cielo dejando sin habla al grupo de piratas que aguardaban frente unas grandes puertas doble altura azul cerúleo impidiéndoles el paso.

Los uniformados no sabían que procedía, no podían entrar así como así y desconocían si debían tocar o esperar alguna invitación.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por el rechinar de las enormes puertas que fueron abiertas frente ellos.

—Adelante… los están esperando. —Invitó un joven Mink zorro rojo luciendo un traje largo blanco como sus alrededores.

—¡AH! ¡Garchuuuu! —Saludó emocionado Bepo al ver un Mink frente a él.

—Garchu —Respondió suavemente con una sonrisa amplia en el rostro.

—¿…Garchu? —Se unió confundido el rubio.

—Garchu… este… buscamos a…

—Ingresan 5… —El joven zorro reportó por su den-den mushi observando unos segundos a su paisano Mink.

—Individuos al salón del trono. —Completó el Mink dejando al chico con gorro de orca a medias con sus palabras.

—Por aquí por favor. —El zorro dio media vuelta para seguir su camino sin detenerse.

—Les agradezco continúen con su visita de manera no hostil, queda estrictamente prohibido el uso de armas y habilidades.

NO VENIMOS A CAUSAR PROBLEMAS.

—Comprendemos, pero al ser los primeros piratas en ser recibidos deben entender que se tomarán represalias en caso de cualquier señal de agresión.

—Escucharon… cualquier señal de agresión… compórtense. —Reprendió Bepo a sus nakamas.

_PURU PURU PURU_

_CACHA_

—Moshi-Moshi

—Kitsune-san, tengo entendido que reportaste 5 personas, pero estas siendo acompañado por 12… ¿Está todo en orden? —El joven zorro se detuvo ante el comentario de su compañero en la línea poniendo nerviosos a los uniformados, en especial al héroe que carga consigo la voluntad de los antiguos poseedores del OFA.

—Confirmo a simple vista son 5… ¿Qué procede? —Dijo con voz y expresión serena.

—Espera un momento… —Respondió el caracol de dientes afilados.

—Cagamos… —Susurró Sachi

—Estábamos tan cerca… —Dijo en voz baja Penguin.

Talvez si les explico que sucede nos dejen pasar… —Se unió a los susurros el rubio.

Las puertas que conectaban a la siguiente sala se abrieron, dejando entrar a 2 intimidantes Gyojin tiburón tigre de 4 metros portando en sus manos 2 grandes lanzas.

—¿Ca…capitán?… —Preguntó nervioso el Bepo.

—Sin armas… ni habilidades… —Replicó tranquilo Law sin cambiar su postura relajada.

—Adelante… —Dijeron al unísono los gemelos con la frente en alto reposando sus lanzas en el suelo.

—Parece que no hay problema, sigamos… —Confirmó el Mink moviendo sus orejas y cola en aprobación llevándolos al salón del trono.

La habitación era blanca en su totalidad con arreglos florales naranjas en las columnas labradas que sostenían la estructura, el vitral principal iluminaba por completo la habitación proyectando tonalidades azules en el centro del pasillo hasta conectar con 2 tronos vacíos.

El cambio abrupto de iluminación cegó momentáneamente al pequeño grupo invitado apenas percatándose de los dos individuos recibiéndoles en el centro del salón, ambos portando una perfecta postura mostrando gallardía con la frente en alto.

El grupo podía sentir el peso de la intimidante mirada del noble de mayor edad criticando cada defecto de los 5 viajeros sin decir ni una palabra. El hombre de complexión delgada e impecable presencia ocultaba su fastidiada expresión bajo su perfectamente peinado bigote y abundantes cejas.

Acompañando al refinado y encolerizado noble, se encontraba una delicada mujer de joven apariencia, luciendo un rostro relajado sin expresión alguna manteniendo sus ojos cerrados para así lucir el delineado dorado que combinaba con un esplendoroso buyao luciendo las famosas gemas incrustadas que sostenía su largo cabello blanco atado en 2 coletas formando un corazón alargado por encima de su cabeza.

Ambos nobles ocultaban por completo su cuerpo con sus prendas, el arrogante aristócrata portaba un fino saco blanco con bordados de hilo de oro y gemas en sus botones resaltando con su elegante pantalón de vestir azul, mientras que su compañera lucía un holgado vestido blanco de manga larga que cubría de su cuello hasta los pies, llevando como único accesorio un ajustado corsé dorado para acentuar su figura.

Oka…sama… —Susurró el rubio sintiéndose intimidado por la presencia de ambos aristócratas.

—No puede ser… ¿Por qué luce así? —Expresó preocupado Penguin

—¿Que ocurre?

—Expone su verdadera identidad… algo debe andar mal… —Dijo desconfiando.

El héroe fijó su vista en el capitán, no era capaz de entender que pasaba por su mente, sus expresiones se ocultaban bajo su gorro afelpado, mientras sus nakamas se veían claramente inquietos.

Nadie decía una palabra, el ambiente se sentía cada vez más pesado, el noble no dejaba de juzgarles mientras que la joven parecía no poseer vida… No sabía cómo o a quien realizar su petición, ninguno de los 2 parecía importarles brindarles ayuda.

—Soy yo… ¿o no nos quiere ver? —Rompió el silencio el irreverente de Sachi.

—Oka-sama no debe siquiera presentarse frente a personas tan vulgares como ustedes… su atención solo será dirigida para asuntos de importancia… —Protestó indignado el noble.

—Desconozco porque accedió a escucharlos, así que digan lo que tengan que expresar para que se puedan retirar…

All Might tragó saliva sintiendo un escalofrío, el joven capitán le dirigía una fría mirada dándole a entender que debía hablar.

—SU MAJESTAD…

—No es una reina idiota… —Le bajó los ánimos Sachi al rubio poniéndolo más nervioso

—Sachi, que dijimos sobre comportarse. —Recriminó Bepo

Toshinori tomó aire tratando de organizar sus ideas.

MI NOMBRE ES YAGI TOSHINORI DE TOKYO, MEJOR CONOCIDO COMO ALL MIGHT EN MI PROFESIÓN. HEMOS RECORRIDO UNA LARGA TRAVESÍA BUSCANDO LA RESPUESTA A UNA PREGUNTA ¿COMO PUEDO REGRESAR A MI HOGAR?

Pausó unos momentos para observar a Oka-sama que seguía inerte, ninguna piedra en sus accesorios se movía, mostrando que no realizaba ni el más mínimo movimiento, como si fuera una estatua… _¿Realmente está viva?_ dirigió su atención al anciano de su lado percatándose que se veía indudablemente enfurecido poniéndole aún más intranquilo.

NO… NO PERTENEZCO A ESTE MUNDO, EN UN MOMENTO ESTABA PROTEGIENDO LA CIUDAD DE VILLANOS Y DE REPENTE ESTABA EN UNA ISLA CON ARQUITECTURA Y TECNOLOGÍA ANTICUADA. ¡NO SE REALMENTE QUE SUCEDIÓ! TODO FUE TAN REPENTINO… —Ambos nobles se mostraban ajenos a su explicación desanimando al rubio que inesperadamente sintió un codazo de Bepo que le animaba a continuar.

—EN MI MUNDO… SENTÍ UNA PRESENCIA QUE ME DIRIGÍO HASTA UNA MANTO NEGRO QUE SE TRANSFORMÓ EN ALGO PARECIDO A UNA NUBE DE CENIZAS.

La joven abrió los ojos dedicando su completa atención al rubio que continuaba con su explicación.

ME CUBRIÓ POR COMPLETO Y CUANDO SE DISIPÓ YA NO ESTABA EN MI... —All Might se detuvo al notar que la joven le veía directamente con sus grandes ojos turquesa.

_¡AY CARAJO SIGUE VIVA!_ Pensó para sí mismo Penguin presionando su pecho soltando aire tratando de relajarse.

La cara del noble comenzó a tornarse roja al ver que los rufianes habían captado el interés de la joven.

—Oka-sama no responderá esa pregunta sin sentido. —Dictaminó el hombre tratando de recobrar su compostura.

La joven doncella dio un delicado paso al frente alejándose del lado de su consejero, movimiento que no provocó sonido alguno. su repentino acto encolerizó al noble que trató de interponerse ante la petición del extraño musculoso, siendo silenciado por un segundo paso que provocó todos los accesorios del ornamento en la cabellera de la chica chocaran entre si congelando a su subordinado.

Su comunicación era enteramente no verbal, rompiendo el protocolo de comportamiento al alejarse de su lado. El hombre entendió que no tendría control sobre la situación y se mostró enardecido.

—¡ESTO ES UN ULTRAJE! ¡DESACATO! —Alzó su voz furioso.

—Si lo que necesitan es transporte, le asignaremos uno y haga con él lo que desee, Oka-sama accedió a asignarle su ruta. —Trató de deshacerse de los piratas.

—No están entendiendo, no es un camino que podamos encontrar aquí. —Trató de dialogar calmadamente Bepo.

—¿QUE PARTE DE QUE NO ES DE ESTE MUNDO NO ENTIENDEN? —Refunfuñó Penguin

—Capitán, vámonos… estos idiotas seguro mastican agua. —Seguía echándole leña al fuego el insolente de Sachi dirigiéndose al moreno que permanecía inmóvil observando el desarrollo de la audiencia.

_JOVEN SACHI SOLO LO ESTÁ EMPEORANDO_

Trafalgar ignoró el comportamiento de ambos lados y decidió hablar sin importarle las consecuencias.

—Toshinori-Ya es un héroe de primera clase que quiere marcar una diferencia en su mundo… Creo que comprenderá su posición. —Comentó el capitán posando su mano sobre el hombro del héroe.

La peliblanca cambio su mirada a una enternecedora cerrando lentamente sus ojos, una de sus manos comenzó a cambiar de posición levantando ligeramente su brazo para que pudiera mostrar la palma a su consejero que seguía rabioso por todos los protocolos de etiqueta que había infringido.

Sin moverse de su posición, le dirigió una mirada afligida por su comportamiento grosero ante los invitados, mostrándole 3 dedos.

—¡3 minutos! Esto es una locura… indiscutible.

La joven cruzó dos dedos de su otra mano sin apartarlo de vista.

—¡NO PUEDO PERMITIRLE 30 MINUTOS DE CHARLA, NO DEBERIAN NI SER 3!

La tensión era tan palpable que podía ser cortada con un cuchillo, al ver que la mujer no sedería, no pudo hacer más que desistir a detenerle.

—30 Minutos, nadie puede entrar mi señora. —Reverencio de mala gana saliendo molesto del salón dejándolos solos.

—Pensé que tenías bien entrenados a tus perros, pero veo que es al revés. —Protestó Sachi

—Por ese tipo de comentarios no te quería traer Sachi. —Confesó el oso

La chica abrió los ojos y suspiró causando sus accesorios chocaran entre sí, provocando abrieran la puerta de golpe apareciendo el noble de nuevo.

—¡Su señora! ¡¿Está bien?! ¡No olvide su postura! ¡Ya fue suficiente, se acabó el tiempo!

—¡LARGATE! —Gritó harto el capitán dedicándole una mirada asesina.

Trafalgar tenía rato queriendo desaparecer al anciano, pero eso podía arruinar la oportunidad de Yagi.

Todos los presentes estaban agradecidos con el capitán, incluyendo la noble.

—Señor All Might, ¿Qué está dispuesto a sacrificar para regresar a su hogar? —Pronunció seria la peliblanca volviendo a su postura original.

—Yue-chan, ¿Si sabes cómo ayudarlo? —Preguntó preocupado Penguin

—Eto… ¿Oka-sama? —La chica siguió sin responder ni dirigirles la mirada

—Bien… actúa como si no estuviéramos aquí. —Bufó Penguin molesto cruzado de brazos.

LO QUE SEA.

—Necesita sacrificar la vida de un inocente. —Declaró con su rostro inexpresivo dejando a todos sin habla.

ME NIEGO, DEBE HABER OTRA MANERA.

—Puede desperdiciar su vida buscando el poder que ocasionó su llegada, en la superficie no lo encontrará… Dejando solo la opción de buscarlo directamente al inframundo.

_Inframundo…_ Captó la atención del tatuado.

—Reitero mi pregunta… ¿Está dispuesto a sacrificar la vida de un inocente?

—Vamos secretario, un pirata, tú regresas a casa y nosotros nos quedamos con la recompensa. —Dijo Sachi siendo silenciado por la mano del gran hombre indicando que se detuviera.

ME NIEGO… NINGUNA VIDA MERECE SER SACRIFICADA NO IMPORTA EL MOTIVO.

—Estúpido… dijo inocente.

MUCHAS GRACIAS, REALMENTE LE AGRADEZCO SU TIEMPO Y DISCULPE LOS INCOVENIENTES. —El rubio hizo una reverencia apretando sus puños en impotencia al enterarse la solución requería cometer ese despreciable acto.

Los labios de la joven evocaron una sonrisa, finalmente mostrando expresión.

—Un héroe puro de corazón. —Pronunció en voz baja al presenciar lo que creía extinto.

—¿Era una prueba? —Preguntó animado el oso.

—Lo lamento. No lo era. —Respondió afligida.

—¿Y si nosotros conseguimos el sacrificio?

—¡BASTA! NO ES NECESARIO

—Lo siento.

NO BEPO SAN, NO ERA MI INTENCION OFENDERLE.

—¿Hay otra manera de regresarlo? —Cuestionó el navegante

—Si no nos quieres ayudar no importa, hazlo por él. —Pidió Penguin.

La noble se perdió en sus pensamientos dudando en responderles.

—Lo lamento. —La chica desvió la mirada en avergonzada.

—Bueno… esto fue una pérdida de tiempo… —Concluyó el capitán indicando a sus nakamas la retirada al percibir que les ocultaba una segunda alternativa.

—Me reconforta que estén bien. —Pronunció ruborizada con una sincera sonrisa llevando su mano al corazón antes de que partieran del salón.

—AAAWWWWW~~—Expresaron sonrojados los uniformados haciendo una pose boba ante las palabras de la joven.

—Para poder acabar con sus vidas personalmente. —Remató la delicada dama sonriendo de oreja a oreja con las mejillas coloradas.

El capitán ocultó su sonrisa bajo la sombra de su gorro al escuchar la amenaza.

—¡Déjate venir perra! —Penguin advirtió dejándose llevar por el intento de intimidación de la chica.

—¡Inténtalo piruja! —Continuó grosero Sachi levantando sus puños.

—Yue-Chan… —Dijo Bepo con sus ojos llorosos.

El trio de bobos armaron un alboroto logrando hacer reír al noble ante las provocaciones, para después borrar su sonrisa gradualmente volviendo a su inexpresivo rostro.

—Trafalgar… —Llamó su atención con su voz serena antes de retirarse.

—Punk Hazard… Ahí encontrará el laboratorio de SAD a cargo de Cesar Clown. Deben regresar a la entrada de la red line, a partir de ahí son 2 días de viaje, tomen como referencia la ruta de mayor riesgo, la isla no posee una ruta magnética así que es un tanto complicado llegar a ella. —El capitán se retiró dibujando una sombría sonrisa en su rostro, ayudar al héroe le había recompensado con la información que necesitaba.

—¿Que fue eso? —Comentaron confundidos

—NO NOS ODIA. —Celebró Bepo.

—Es bueno saber que está bien.

—Si… antes de que vuelva a ser controlada por el anciano ese. —Agregó Sachi.

El contraste de ánimo entre el héroe y los piratas era abismal, el rubio era seguido por un aura oscura de depresión después de obtener su respuesta, mientras los jóvenes celebraban el haber bromado con lo que pensaban era una amistad perdida.

—Este… Yagi… aquí estamos amigo, debe haber otra manera… —Animó Sachi tomándolo por el hombro.

—¡SI! Yue no lo sabe todo… —Se le unió Penguin.

—¿Y si vamos al inframundo?... ¿A qué se refería con eso por cierto? ¿Es en sentido literal o es el nombre de una isla? —Añadió Bepo en su papel de navegante.

—Deberíamos volver a preguntarle que carajos se refería con eso.

—No. Si no lo detalló es porque Toshinori-ya no estaba dispuesto a cumplir el requisito.

Esas palabras aumentaron la depresiva aura del héroe.

—¡Esperen piratas! —Les llamó deslizándose por su exceso de velocidad el zorro.

—Esto es de ustedes. —El mink les entregó una pequeña gema azul de las que portaba el ornamento de cabello de la chica.

—¿Porque nos dio esto? Ni nos ayudó.

—La ubicación del laboratorio de SAD… —Respondió el moreno observando la pequeña gema brillar de diferentes tonos azules en su interior, entregándola a Bepo para que la guardara.

—Si no la quieren pueden venderla. Tenemos boutiques cerca de la plaza… Oka-sama decía que hasta acá llegaba el pútrido hedor del cebo de sus gorros desde antes de anclar, así que no les vendrí… —Pausó nervioso el Mink borrando su expresión burlona cuando vio las venas saltar en la frente del moreno que apretaba con fuerza su nodachi.

—¡GARCHU! —Frotó velozmente sus mejillas con todos excepto al capitán que prefería evitar para después retirarse.

—Hacen bien en no dejarla hablar… —Comentó Penguin irritado.


El pequeño grupo se reunió con el resto de vuelta en el restaurante donde se encontraban celebrando con licor.

—OI OI, ¿Que tal les fue? —Preguntó Vinny

—Parece que mal… —Respondió Jean Bart observando al héroe destrozado.

—Uy… tendremos Yagi para rato. —Los comentarios ya no podían romper más al pobre héroe.

—¿Qué fue lo que les dijo? —Preguntó en voz baja Monte

—QUE DEBEMOS BUSCAR EN EL INFRAMUNDO…

—¿Y eso que significa?

—Que valió mier-da. —Aclaró Sid

—Significa que debemos buscar una ruta para llegar al inframundo —Trato de animar Ikkaku dando unas palmadas en el sucio cabello del héroe.

GRACIAS SEÑORITA, ME GUSTARÍA CREER QUE EXISTE OTRA MANERA DE LLEGAR. —Respondió abatido.

—Debe haber… El nuevo mundo está lleno de misterios. —Se unió a los ánimos Bepo dándole un poco de esperanza.

Tiene razón… Como dijeron… Yue no lo sabe todo. —Dijo un poco más animado.

—¡AH! ¿Si vieron a Yue? —Preguntó Clione

—¿Ahora como luce? —Se unió Vinny

—Igual que cuando nos separamos.

—Eso… eso no es bueno.

—Se ve miserable. —Agregó Penguin

—Siempre vive por los demás, hasta que no se ponga ella misma como prioridad seguirá teniendo una vida de mierda. —Concluyó Uni.

—¿Y si la raptamos? —Conspiraron varios uniformados.

—Sirve que nos guía a donde debemos ir. —Dijo entre risas Sid volteando a ver al héroe con sus dedos en pose de victoria.

—Me gustaría una compañera. —Animó Ikkaku

—IMPOSIBLE, NO DEBE VIAJAR CON NOSOTROS DE NUEVO —Protestaron la mayoría cruzando sus brazos simulando una equis.

—Déjenla ser, ella eligió esta vida… Al menos está a salvo. —Dió por terminado el tema el capitán.

—JOVEN TRAFALGAR ¿COMO TERMINÓ ALGUIEN TAN IMPORTANTE EN SU BARCO?

—Para no extendernos en detalles, Yue-ya tenía un trato con piratas para comprar la Ope-Ope no mi, que como verá terminó en mi poder. Al perder su oportunidad buscó al usuario para asesinarlo y reclamar la fruta, pero no esperaba que el nuevo usuario fuera un niño, por lo que desistió.

—Se presentó hace unos años cuando nuestro nombre se hizo conocido en la Gran Linea. No parecía feliz de que el portador fuera un pirata, pero terminamos haciendo un trato… Información ilimitada por el uso de mi poder... Para asegurarse que si le ayudaría viajó con nosotros un tiempo.

Jean Bart, Ikkaku, Monte, Klein, Sid y Yagi estaban atentos a la historia ya que sus nakamas siempre evadían el tema del innombrable.

—Lo que no esperábamos es que estuviera de carroñera esperando a que asesinaran al capitán durante el viaje… A veces nos guiaba a los problemas a propósito. —Agregó Uni.

—Esa perra solo esperaba a que creciera para matarlo como puerco en matadero. —Comentó Sid golpeando su tarro contra la mesa al escuchar lo que decía su nakama.

—Finalmente nos reveló que uso quería darle a mi habilidad… Algo noble y estúpido…

—Así como tu Yagi —Klein golpeo su palma la espalda del héroe.

—¡OI! —Se quejó Toshinori brotándole unas venas en la frente.

—Aprendimos durante el viaje que "Yue" no debe morir, por lo que exponerle al peligro estaba fuera de discusión.

—No íbamos a permitirle que algo le sucediera, por lo que tratamos de dejarle atrás en varias ocasiones, pero siempre regresaba… —Interfirió Penguin.

—Como las pulgas de Bepo.

—¡OI! —Quejó el oso molesto brotándole venas del coraje.

—Yagi quizá tengas pulgas de la vez que te abrazó Bepo. —Sacó al tema el tímido enmascarado.

—Fue herida de gravedad al entregarse para defendernos… parte del trato era que no debía involucrase en nuestros asuntos. —Continuó Clione al ver que Law aprovechó la interrupción de sus camaradas para servirse un trago.

—Después de estabilizarla la abandonamos en un hospital aun inconsciente y desde entonces perdimos contacto… Conseguimos sacarle una vibre card antes de dejarla para saber que estuviera fuera de peligro. —Dijo despreocupado el moreno terminando su confesión con un trago de whiskey.

_LO MENCIONA COMO SI NADA_

—… ESO EXPLICA PORQUE ESTABAN TAN SEGUROS QUE LOS ODIABA…

—¡Cierto! no nos odia. —Expresó feliz Bepo.

—Tampoco es como que nos importe mucho Bepo.

—Lo siento.

Una multitud entró al restaurante llamando a Lenny y su equipo, que rápido dejaron sus tareas para salir del establecimiento.

—OI OI ESPERA LENNY-SAN, ¿A DONDE VA? ¿CUANTO VA A SER?

—Su cuenta está saldada desde que arribaron. —Respondió apresurándose a retirarse con sus empleados.

—¿Que extraño… será otra de sus raras tradiciones?

Murmullos empezaron a escucharse por los alrededores viendo como la gente parecía reunirse en el mismo lugar.

El alegre oso comenzó a tararear la melodía nuevamente…

—Bepo basta…

—No puedo evitarlo, está vez suena más fuerte y es muy reconfortante. —Expresó con los ojos cerrados arrullándose en su mismo sitio.

Trafalgar percibió como una "voz" conocida comenzaba a desvanecerse, sintiendo como aumentaba la temperatura de su cuerpo al suponer lo peor. Una de sus manos golpeo la mesa para ponerse de pie mientras la otra buscaba en su bolsillo, sacando de él la vibre card siendo consumida en ascuas.

—MIERDA. —El moreno salió apresurado del restaurante dirigiéndose a la plaza siendo seguido por sus nakamas.

Moverse entre la gente esta vez era imposible, la multitud era inmensa, todos se encontraban tomados de los hombros impidiendo el paso balanceándose de un lado a otro tarareando la melodía en perfecta sincronía.

—¡ROOM!

Una esfera se formó alrededor de la plazoleta intercambiando a las personas que estaban en frente por el grupo de piratas, logrando presenciar el suceso que les erizó la piel.

Dentro de la fuente, bajo la estatua amorfa se encontraba la doncella sentada en seiza manteniendo su postura perfecta con su vestuario impecable, usando un poco de voz para dirigir la melodía, su expresión era pacifica manteniendo sus ojos cerrados y manos ocultas. Su cuerpo reposaba sobre los pétalos cubiertos de sangre que brotaba de sus mangas. Los habitantes se encontraban tranquilos como la chica, todos preparándose para su partida, con excepción de la banda pirata presente que no podían aceptar ese suceso.

—¡ESA IDIOTA! —Grito enfurecido el capitán.

PERO ¿POR QUÉ?

—¡EL SACRIFICIO! —Concluyó el trio.

—SCAN —El pirata tomó su nodachi para identificar la sangre de la joven.

—ESTERILIZACIÓN —La sangre se acumuló en un pequeño espacio de la esfera siendo separado de todo cuerpo extraño que tuviera contacto con ella.

El cuerpo del moreno comenzó a arder por dentro cuando la voz de la chica dejó de sonar en su totalidad.

Los instintos de All Might se manifestaron saltando por el cuerpo inerte para poder llevarlo al submarino que contaba con el equipo completo para poderla tratar.

El momento que las manos del rubio hicieron contacto con la chica, la blanca estatua cambio de color desintegrándose en una arena negra que cubrió por completo ambos cuerpos.

—¡TOSHINORI-YA! ¡YUE!

—¡SHAMBLES! —Frente el cayó el ornamento de gemas que lucía la joven en su cabello, todo se desvaneció frente a los espectadores dejando la pileta de la fuente solo con las flores en su interior.

Los ojos de la tripulación estaban desesperanzados, su capitán tenía una expresión en blanco, no eran capaces de digerir lo que había sucedido. Trafalgar descendió lentamente al piso tomando el buyao que hasta hace unos segundos lucia la joven, apretándolo con fuerza sus manos ocasionando que sus manos se lastimaran derramando sangre sin importarle el daño.

—Yagi-san… Yue-chan… —Bepo cayó en sus rodillas no logrando entender que había sucedido.

—¡MALDICION! —Gritó sintiendo como su voz desgarraba su garganta simultáneamente a la vibre card desapareciendo por completo.

La alejaron para protegerla solo para que se quitara la vida en su reencuentro.


Sundancer aquí de nuevo ^ o ^

Sorry :'S Este iba a ser un capitulo breve y me descontrolé, incluso cuando lo quería hacer mas corto terminaba mas largo.

Gracias por sus comentarios/reviews me emociona leerlos n.n, Me anima a seguir escribiendo al ver que lo disfrutan del fanfic, y espero que lectores que siguen la historia cada semana también n.n (Malévolo cucarachón se puso sentimental)