Importante: Los personajes de Harry Potter pertenecen a J. K. Rowling, en ninguna forma estamos haciendo acreditando la autoría de ninguno de ellos, tampoco estamos lucrando con este material. Esto lo hacemos por pura diversión y tal vez un poco por amor al arte...
El mejor de los regalos
Por: Andy Yogima & Amy Black
Capitulo 1 "La Habitación Secreta"
Era una fría mañana de diciembre, la navidad estaba pronta a llegar por lo que en el colegio de Hogwarts los alumnos que se quedarían ayudaban en las decoraciones de sus casas. Los alrededores del castillo habían sido cubiertos por la blanca y fría nieve, sin embargo a un joven de cabello negro azabache no parecía importarle pues se hallaba sentado sobre una fría y húmeda nieve que seguía cayendo. Un copo de nieve cayó de pronto sobre su rostro pero al joven no pareció importarle, su mirada perdida en el horizonte y una pregunta paseando por su mente.
"¿Cómo hubiera sido pasar una navidad con mi padres?"
Otro copo de nieve cayó posándose en su la punta de su nariz, distrayéndolo de sus pensamientos, sus ojos comenzaron a inundarse el solo pensar lo que hubiera sido le causaba tristeza.
- Harry, pero que haces ahí sentado en la nieve puedes enfermarte – Se escucho la voz preocupada de una joven.
El joven sonrió al escuchar aquella voz que desde ahora iluminaba su vida y es que la dueña de tan dulce melodía no era otra que su novia, su querida pelirroja… Ginny Weasley.
- Vamos Harry… levántate – dijo una vez más Ginny.
- Sabes que te vez linda cuando te enojas – contesto de improviso Harry levantándose.
- E… En serio – respondió la joven mientras su rostro se confundía con su cabello, su novio al notarlo solo sonrió.
Harry se disponía a abrazar a su novia cuando escucho una voz susurrante.
"Nosotros también deseamos una navidad contigo…"
- ¿Qué dijiste? – pregunto rápidamente.
- Yo, Harry yo no he dicho nada – respondió Ginny – Pero vámonos esta muy frío
Harry siguió a su novia hasta llegar a la sala común de Gryffindor donde vio a sus amigos sentados frente a la chimenea, tanto como él como Ginny se acercaron.
- Vaya Harry hasta que apareces – dijo Ron sonriendo
- ¿Dónde te habías metido? – pregunto de inmediato Hermione
- Decidí dar un pequeño paseo – respondió Harry sentándose, Ginny se disponía a sentarse junto a su novio pero Hermione dijo.
- Ginny me acompañas a mi habitación -
- Claro, vamos… pero antes - dijo la pelirroja acercándose a su novio y dándole un tierno beso en los labios.
Al llegar a la habitación de las chicas de sexto grado, Hermione se apresuro a su baúl, del cual saco una caja de tamaño media.
- Hermione… ¿Qué pasa?-
- Ginny, crees que le guste a Ron – dijo Hermione mostrándole a Ginny una caja.
- Bromeas, le encantará, siempre quiso piezas de ajedrez mágico auto reparables. Es eso lo que le regalaras cierto – concluyo Ginny sentándose en una de las camas.
- Así es y tú que le regalaras a Harry -
- A pues veras le regalare el libro "Snitch… el sueño del buscador, las mejores técnicas a través de los años" -
- Ginny, ese libro debió costarte muy caro pues según se hay que pedirlos a América – dijo Hermione asombrada.
- Pues el precio si estuvo algo elevado, tuve que trabajar todo el verano en la tienda de los gemelos y aun así no acumule el dinero suficiente pero Fred y George me lo dieron y de inmediato lo mande pedir – respondió Ginny sonriendo.
- Le encantará a Harry -
- Solo que hay un pequeño detalle me llegará a casa de Hagrid, no quise que llegará aquí, ya sabes como es tu querido novio de metiche – dijo Ginny riendo.
- Si es terriblemente entrometido pero adorable sin duda – respondió Hermione riendo también.
A la mañana siguiente, una joven de cabellos como el fuego salía feliz de la casa Hagrid, entre sus brazos llevaba un paquete y en el interior de este se hallaba el mejor regalo para su novio. Al entrar al castillo no se percato de que era seguida hasta que fue inevitable.
- Vaya pero si es Weasley –
- Déjame pasar Malfoy – dijo de mala gana Ginny e intento seguir su camino pero fue bruscamente detenida por Draco.
- Vaya, así que la pobretona se cree que hablarme en ese tono y solo porque es novia del cara rajada – respondió Draco acorralando a Ginny contra la pared.
- Apártate Malfoy… oh si no – Ginny no pudo finalizar su frase pues Draco le había arrebatado el paquete – Dámelo.
- Es tuyo… no sabía que los Weasley se dieran el lujo de comprar cosas nuevas – dijo con desprecio – Pero si tanto lo quieres tendrás que darme algo a cambio – Draco comenzó a acercarse peligrosamente a Ginny.
- Pensé que para ti un Weasley era poco cosa y ahora te me insinúas -
- Cierto Weasley, mujeres como tú solo pueden dar una cosa -
Aquellas palabras hicieron enfurecer a la más pequeña de los Weasley, quien levantando su mano acertó un fuerte golpe en la mejilla del platinado Slytherin.
- Como te atreves Weasley a golpearme – dijo Draco sacando su varita. Ginny inconscientemente cerró sus ojos esperando en cualquier momento recibir una maldición, cuando de pronto escucho.
- INCENDIO -
Ginny abrió los ojos y solo para ver que Draco Malfoy había dirigido aquel hechizo contra su paquete que comenzó a ser devorado por las llamas, sus ojos comenzaron a inundarse, trato de sacar su varita y conjurar un hechizo para lograr salvar algo pero Draco se adelanto.
- Que pretendes hacer Weasley – dijo el platino dirigiendo su varita al pecho de Ginny.
- Eres un… -
- Cuidado con lo que digas o no pretenderás que lo siguiente sea tu ropa -
Justo en ese comento para suerte de Ginny apareció Hermione, quien al ver a Draco apuntando a Ginny con su varita de inmediato saco la suya.
- Malfoy – grito la joven Gryffindor
- Pero si es la sangre sucia, vienes a defender a la pobretona de Weasley – dijo Draco frunciendo sus labios.
- Baja tu varita Malfoy, sabes que esta prohibido que los prefectos utilicen sus varitas contra los alumnos – dijo Hermione acercándose.
- Tienes suerte Weasley – dijo para luego marcharse.
- Te sientes bien Ginny – dijo Hermione al ver el rostro asustado de su amiga.
- No… no estoy bien – respondió Ginny llorando e hincándose a un lado de un montón de cenizas.
- No me digas que te hizo algo – dijo Hermione hincándose junto a su amiga
- No, no me hizo nada pero sabes que era esto – dijo Ginny señalando las cenizas, a lo que su amiga solo negó con la cabeza – Ese era el regalo para Harry, Draco lo hizo cenizas – no pudo continuar por el llanto, Hermione solo opto por consolarla.
- Vamos Ginny, ya veremos que puedes regalarle -
- Pero Hermione ese era el regalo perfecto para él – respondió la pelirroja entre sollozos.
- Ginny será mejor que vayamos a la sala común – dijo Hermione ayudando a su amiga a ponerse de pie.
Ambas jóvenes fueron a su sala común, donde se encontraban sus respectivas parejas. Ginny no pudo evitar que las lágrimas volvieran a aparecer, decidida que no su novio no la viera así salio corriendo a su habitación, mientras que Hermione fue a reunirse con su novio y su mejor amigo.
- ¿Qué le pasa a Ginny? – pregunto Harry
Hermione dudo en si debía decirle a su amigo lo que había ocurrido pero sabiendo cual seria la reacción de Harry y por supuesto la de Ron opto por guardar silencio. Mientras en su habitación Ginny seguía llorando, se hallaba recostada sobre su cama hundiendo su rostro en la almohada.
Cuando de pronto escucho como alguien entraba a la habitación, supuso que se trataba de Hermione por lo que decidió fingir que dormía, no paso mucho tiempo cuando sintió como alguien dejaba algo cerca de ella, espero un rato para levantarse y vio con asombro que la habitación esta vacía un escalofrió recorrió su cuerpo, al girarse a su izquierda se topo con un viejo libro.
- Hermione… sal de donde estés, ya se que fuiste tu quien trajo este libro – dijo la joven mientras observaba todo el sitio en espera de la aparición de su cuñada, la cual nunca llego.
Ginny dirigió su mirada a aquel libro que había estado abierto, con cierta curiosidad semi-cerro el libro con el fin de ver su portada se asombro al verla "Historia de Hogwarts" y volviendo a la página que había estado abierta y leyéndola en su rostro se formo una gran sonrisa…
La Habitación secreta del deseo mágico
Hogwarts esconde muchas habitaciones y algunas de ellas mágicas. Existe una en particular, pues se dice que aquella persona con un verdadero deseo en su corazón entrará en ella, ese deseo se volvería realidad. Sin embargo los fundadores del colegio decidieron que el lugar perfecto para esta mágica habitación fuera en el octavo piso, ala oeste, donde yace un viejo cuadro cuyo poseedor es una rosa roja. Aquella persona que se aventure a entrar primero frente a la rosa se ha de encontrar esta comprobara si el deseo en su corazón es verdadero, si es así un pétalo caerá y el cuadro se abrirá… y al entrar el deseo se hará realidad.
- Excelente, ahora si podré darle a Harry el mejor regalo de navidad – dijo Ginny con alegría, sin embargo se olvido de una advertencia.
Mucha gente logro con esta habitación su deseo realizar, temerosos que alguien con deseos malignos llegará pasar un sello se coloco y ahora aquellos que deseen su entrada a la habitación primero deben ver la lista mágica, pues ninguna persona en pasado, presente o futuro al mismo tiempo pueden pasar. La lista magia se halla cerca del cuadro de la rosa.
Ginny cerro el libro y sabiendo que mucho tiempo no tenía antes de noche buena decidió con gran valentía esa noche iría a la habitación, dando un brinco la pelirroja salio del cuarto. En uno de los rincones de la habitación de las chicas de sexto año aparecieron dos seres que escondían su identidad bajo unas capas.
- Excelente el plan esta funcionando – hablo una voz varonil.
- Claro acaso dudabas – respondió una frágil y dulce voz.
Continuará…
Hola a todos somos Andy Yogima (autora de Buscándome, Mi linda Nicole, Matrimonio perfecto, Harry Potter and The Legacy of Past, No puedo hacerlo, Inolvidable) y Amy Black (autora de The sun in the darkness, THIS I PROMISE YOU). Ambas decidimos escribir algo juntas, habíamos pensado publicar este fic el día de Navidad pero no nos fue posible, sin embargo ahora hacemos, esperamos que les guste. Envíen sus reviews nos haría felices recibirlos…
