Hola! Gracias por leer mi fanfic, y espero que os este gustando, antes que nada como es habitual, las correspondientes contestaciones!

Kristin: Hola!! Muchísimas gracias!, me alegra que te haya gustado, y si tienes otras ideas para mejorar mi ff, no tengo ningún problema en aceptarlas! ¡Yo encantada! Jejeje me alegro que te haya gustado el resumen, yo la verdad cuando lo termine no estaba muy convencida, pero si esta bien me alegro! :D

Uruguaya: No te preocupes por no escribirme antes!! Comprendo que estéis ocupadas! Yo también lo estoy!! Jejeje con las clases y todo eso, pero ahora ya tengo vacaciones y podré escribir más :D ¿Buena idea no? Aunque también tendré que estudiar :( . Siii me encanto que las chicas sacaran esa vena merodeadora que tienes xD y la broma de ellos también me encanto, jajaja y tienes toda la razón era como la de los Adams jejeje. Por cierto estoy totalmente de acuerdo contigo en que fue muy emotivo verlos con el mapa del merodeador, porque pienso que debe ser así no? Lo tenían a escondidas como Harry, y no se lo decían a nadie!! Jejeje Muchas gracias por tu critica!

Ely: Muchas gracias por leer el ff y espero que los siguientes capítulos te gusten tanto como este!

Yare: Ohh!! Me has emocionado!! ¡Me encanta que os gusten! Cuando recibo una de estas criticas me dan mas ganas aun de escribir! Me motivan u montón!! Me alegro muchísimo de que te guste y de que no te aburras claro!

Y una vez acabadas las contestaciones os quería decir que…

Justo coincidiendo con la navidad, y ahora que todos estamos felices por el regalo de Rowling (y por que falta menos para papá Noel :D), ¿Qué puedo hacer yo? Pues lo poco que puedo hacer es:

Felicitaros la navidad claro esta ¡FELIZ NAVIDAD! Hecho, y daros otro capitulo, a este fiel publico! Así que aquí estoy, con otro capitulo que espero que os guste:


La mejor navidad de Lily, al menos el principio…

Capitulo 6. Navidad en Hogwarts

Los días fueron pasando y por fin llegaron las deseadas vacaciones, las chicas decidieron quedarse en navidad pues nadie más de Gryffindor se quedaba, y tenían toda la sala común para ellas solas, así que podían andar en pijama, y hablar abiertamente sin pensar si habría alguien escuchando.

A los padres de Lily no les hacía mucha gracia que se quedara en el colegio en vacaciones, pero como se le notaba que le hacia mucha ilusión decidieron no decirle nada.

La mañana de Navidad cuando se levanto vio a los pies de la cama un montón de regalos, vio que sus amigas todavía estaban dormidas así que decidió utilizar una broma de Zonko que había comprado la ultima vez que fue, consistía en una pequeña bocina que gritaba palabras no muy amables cuando Lily le daba una orden a alguien y esta no la cumplía, así cuando ella dijo ¡levántense dormilonas!, y sus amigas no le hicieron hecho caso, el pequeño aparato empezó a chillar hasta que por fin estaban levantadas, lo había comprado para su hermana, que nunca hacia lo que ella quería, pero pensó que ese era un buen momento para usarla.

- ¿Por qué le dejaste que se comprara ese trasto? – dijo Alice, cuando todavía se estaba estirando.

- Lo compró para la hermana yo no sabia que lo iba a utilizar con nosotras – dijo Sidney todavía media dormida.

- Vamos ¡me lo agradeceréis! – Dijo Lily – ¿o no queréis abrir vuestros regalos?

- ¿Regalos? – Preguntó Alice- Ah, ¡claro!, hoy es navidad, ¡FELIZ NAVIDAD! – gritó de pronto, lo que hizo que Sidney y Lily saltaran del susto.

Las chicas empezaron a abrir los regalos, a Lily los padres le habían regalado un colgante en forma de luna, un montón de ropa, lo que más le gusto fue un jersey verde a juego con sus ojos y el pastel favorito de Lily, su hermana no le había regalado nada, algo ya habitual, sus amigas también le habían hecho regalos, Sidney le había comprado un peluche de unicornio y Alice un montón de plumas de diferentes colores, con titas también de muchos colores, le sorprendió encontrarse regalos de Remus le había regalado un libro sobre encantamientos, que le encantó, había cosas que no había visto nunca, de Sirius que le había regalado una caja enorme de grageas Bertie Bott de todos los sabores y de Peter que le regaló una figura de un fénix que volaba en círculos y cantaba, pero el más extraño sin duda fue el de James quien le regaló una gran bola de cristal con lo que parecía ser una galaxia dentro.

- Lily ¿Qué es eso? – preguntó Alice muy interesada en la bola que Lily estaba observando.

- Pues es una galaxia… - dijo como hipnotizada Lily

- ¿Te han regalado una galaxia?, ¿donde la han encontrado tus padres?, les ha debido costar un montón – dijo Sidney.

- No, no es de mis padres – dijo Lily – es de James…

- ¡¿De James?! ¿Potter? – Sidney no se lo podía creer

- Si… - se limitó a decir Lily, no sabia que pensar era un regalo fabuloso, sorprendente, probablemente uno de los mejores que le habían hecho en su vida…

- Vaya Lily, si que tienes suerte – le dijo Alice, a ellas les encantaba la astronomía, aunque ya no la tuviesen en sexto. Todas habían sacado la misma nota en astronomía, un excelente, y eran sin dudas a las que se le daba mejor la asignatura, sin contar a James, pero nunca se interesaba por nada.

A Lily desde pequeña le había fascinado mirar las estrellas, cuando todavía no iba a Hogwarts, se sentaba en un columpio que había delante de su casa a observarlas, y cuando entro en Hogwarts, esa fue la asignatura que más le gustó, aunque después también se diera cuenta de que realmente era muy buena en encantamientos.

Pasaron toda la mañana viendo el regalo de Lily, sin duda nunca habían visto nada igual, a la hora de la comida bajaron al Gran Comedor, ya que con el entusiasmo del regalo se habían olvidado de bajar a desayunar, aunque habían comido pastel, grageas de todos los sabores, ranas de chocolate y un montón de golosinas que les habían regalado.

Había bastante gente de Ravenclaw y de Hufflepuff comparado con las demás ya que de Slytherin tan solo cuatro o cinco alumnos de primero. Lily y sus amigas tenían toda la mesa de Gryffindor para ellas solas, y allí sentadas disfrutando de ese magnifico banquete, vieron como en la mesa de Ravenclaw estaba sentado Tom, que llevaba una especie de cantimplora de la que bebía, era de suponer que no se le había olvidado lo sucedido en Halloween.

Lily se lo estaba pasando realmente bien con sus amigas, todo el día estaban en la sala común jugando al snap explosivo o al ajedrez mágico, y comiendo todo lo que le gustaba, pero las vacaciones se iban acabando…

- Que rápido se han ido las fiestas – dijo Alice apenada.

- Si pero nos queda Semana Santa – le recordó Sidney, mientras se comía una rana de chocolate de las que le había regalado Sirius.

- Si pero en Semana Santa se queda mucha gente a estudiar.

- Bueno, bueno, no seáis tan negativas, todavía nos queda la próxima navidad – les dijo Sidney

- Si, pero mis padres no se quedaron muy contentos de que pasara aquí las vacaciones – dijo Lily y Alice asintió, dando a entender que a su madre tampoco le había sentado mejor.

- Vamos, sacamos buenas notas, somos buenas niñas- dijo poniendo una cara como si nunca hubiese roto un plato en su vida – por unas navidades más no pasa nada.

- Oye Sid a ti ¿tus padres no te dijeron nada? – preguntó Lily

- ¡Vaya! mira Lily, este cromo creo que no lo tienes es Bertie Bott – dijo Sidney poniendo cara de curiosidad – vaya mira sabíais que en realidad fue un error… jeje se equivoco y metió unos calcetines en la pócima ¿os lo podéis creer? – pero cuando levantó la cabeza sus amigas la estaban mirando fijamente.

- ¿Qué pasa Sidney? – Preguntó Lily con preocupación, su amiga no solía ignorarla de aquella forma ni ponerse a hablar de cromos como si fuera algo fascinante.

Sidney miro hacia el suelo y empezó a hablar – Es que veréis… - realmente era difícil decirlo, sobre todo por la situación de Alice – mi madre me escribió después de haberle mandado la carta cuando fuimos a Hogsmeade, pues me escribió que era mejor que me quedara a pasar las navidades aquí porque bueno… - era realmente duro decirlo – mis abuelos estaban viviendo en mi casa y bueno ese hombre… el que se hace llamar Voldemort – Lily y Alice palidecieron al instante, cuando se le nombraba no era para decir nada bueno – entró en mi casa mis padres habían salido pero mis abuelos estaban y ahora ya…

Sidney no pudo acabar la frase, y Alice y Lily corrieron a abrazarla, Sidney empezó a llorar, y Alice que, sin duda ese nombre no le traía ningún buen recuerdo, ya que fue él quien mató a su padre, y Lily aunque no hubiese sentido una perdida así, se unió al dolor de sus amigas, preguntándose que clase de persona mataría a otra por simple placer.

- ¿Por qué no nos dijiste nada Sid? – preguntó Alice

- Bueno porque – dijo Sidney entre sollozos – no quería arruinaros las vacaciones y además tuve la esperanza de que solo hubiese sido un sueño de que nada se volvería realidad, no podía pensar como después de que mis abuelos hubieran muerto todo siguiera su curso normal sin la más mínima anomalía, así que me dije a mi misma que no era verdad que me lo había inventado, pero es cierto, se han ido, ¡los ha matado! – Sidney casi no podía hablar y sus amigas no se lo reprochaban, Sidney hablaba de sus abuelos como unos padres más ya que siempre habían vivido con ella.

Esa noche no jugaron a nada ni siquiera bajaron a cenar, y por supuesto todas las risas se habían apagado, parecía que en la casa de Gryffindor no vivía nadie, pero ellas seguían en la habitación todas apoyando a Sidney, que se había abierto a ellas.

Pasaron un par de días más que las chicas aprovecharon para hacer los deberes, antes de que fuera 1 de Enero y sus compañeros volvieran, Lily y Alice intentaban por todos los medios hacer reír a Sidney, a lo que ella respondía muy bien, pues no quería deprimirse, quería superar todo aquello lo antes posible. El 1 de Enero todos los alumnos llegaron contentos de que empezara el segundo trimestre, y lo que eso conllevaba dos partidos de quidditch y otra visita a Hogsmeade.

- Hola Lily, ¿te gustó mi regalo? – preguntó James ese día por la noche mientras estaban en la sala común, un poco decepcionado de que ella no le hubiera dicho nada

Lily en ese momento se dio cuenta de que se le había pasado por alto – oh lo siento James de verdad, con todo lo que me ha pasado se me ha olvidado, pero te aseguro que ha sido el mejor regalo que me han hecho en mi vida, de hecho no se si has hecho bien en comprármelo, quiero decir es un montón de dinero y bueno yo solo te he regalado un libro de quidditch.

- Ya, pero es que sin duda ese ha sido el mejor regalo de toda mi vida – dijo James mirándole a los ojos, sus miradas se cruzaron y entonces Lily sintió una emoción nueva de repente sentía que había alguien bailando en su estomago y tuvo un impulso de acercarse a James, se notaba que el sentía lo mismo…

- Oye Lily muchas gracias por tu regalo, nunca había tenido un juego de gobstones, pero me pase toda la navidad jugando con mis padres – dijo de pronto Peter, rompiendo toda la magia que se estaba creando.

- Eh, de nada Peter, me alegro de que te haya gustado a mi también me encantó tu regalo, ¿sabias que uno de mis animales favoritos era el fénix?

- Si, te lo oí decir cuando Sirius y James fueron al despacho de Dumbledore. ¿Verdad James?

- Si Peter, si… - dijo apenado por que, por fin había conseguido que Lily se fijara en él y Peter lo tuvo que estropear.

- Bueno me voy a dormir, hasta mañana, ¿te vienes Lily? - dijo Sidney

- Si claro, hasta mañana – y pasando literalmente por encima de Sirius que estaba en el suelo riéndose de lo que le estaba contando Remus.

- ¿Dónde se ha metido Alice? No la he visto desde que llegó el tren – preguntó Lily cuando llegaron a la habitación.

- Claro, es que se ha ido con Frank, creo que si no están saliendo juntos, poco les queda, ya veras.

Sidney poco a poco volvía a ser la misma de siempre, también debido a que los estudios no le dejaban mucho tiempo para pensar, a pesar de no tener ese año unos exámenes importantes, el curso estaba empezando a ser complicado y ellas pasaban mucho tiempo en la biblioteca.

Vaya, me he olvidado el libro de Remus en la biblioteca, id yendo a la sala común, yo ahora voy – les dijo Lily a sus amigas, y se fue corriendo hacia la biblioteca. Cogió el libro y salio otra vez corriendo, pero alguien le puso una zancadilla y calló de bruces contra el suelo, después de tocarse la cara, miró a ver quien había sido y para su sorpresa y desgracia, era Bellatrix, con un montón de Slytherin.

- ¿qué pasa Bellatrix tienes el pie tan grande que no puedes apartarlo del camino? – dijo Lily

Esta se puso un poco roja pero al momento le dijo – Lo que pasa es que tengo un imán para detectar a gente anormal, como tú sangre sucia – Todos los que estaban empezaron a reírse y esta vez fue Lily la que se puso roja "Tranquila, relájate, todo va a salir bien, son mayoría, si pero tu eres más inteligente" pensó Lily, pero al momento rectifico que tenia que ver que fuera más inteligente si ellos eran muchísimos más.

- No podéis hacerme nada, soy prefecta de Gryffindor – dijo Lily con valentía.

En ese momento se oyó una risa fría al final del grupo, era Malfoy, se adelantó y le dijo con desprecio - ¿Acaso crees que nos importa? Algunos de nosotros también y solo estamos haciendo nuestro trabajo, librar al mundo de los sangre sucia, ¿hay trabajo mejor que ese? – Todos empezaron a reírse.

"vamos Lily piensa, rápido"

- ¿Y que haréis, os recuerdo que estamos en Hogwarts, pasará alguien por aquí y os verá? No podéis hacerme nada.

- Eso es lo que tú te crees – dijo Malfoy riéndose.

Lily empezaba a morirse de miedo, ¿por qué diablos no pasaba nadie por allí?

- Adelante Malfoy inténtalo, pero sabes perfectamente que soy mucho mejor que tú – Lily dijo esto con una sonrisa, lo que molesto mucho más a Lucius.

Lily estaba sacando la varita poco a poco para que no se dieran cuenta, pero fue imposible, Lucius se dio cuenta y gritó- ¡Experlliarmus! ¿Pensabas que nos ibas a hacer un hechizo? – Dijo cogiendo su varita – no, creo que más bien será al revés…

"Por favor que pase alguien rápido, Sid, Alice,… incluso Peter, me da igual pero que pase alguien", Lily se estaba poniendo muy nerviosa.

De repente oyó una voz familiar, pero muy inesperada que agradeció más que si hubiese sido de una de sus amigas.

- Buenos días, ¿pasa algo aquí? – preguntó el profesor Flitwick que venia cargado de libros, Lily casi se lanza al cuello del profesor.

- No profesor, Malfoy me iba a devolver la varita que se me calló, ¿verdad Lucius? – dijo Lily con una sonrisa

- Claro – dijo este con odio – Hasta pronto Evans, ya nos volveremos a ver.

- Oh, entonces señorita Evans puede ayudarme a llevar estos libros – dijo casi cayéndose.

- Claro que si profesor – Lily no podía creerse su buena suerte, cogió un montón de libros y fue hasta el despacho de el profesor.

- Gracias Evans, por cierto, yo que usted me andaría con más cuidado, no debería decirle esto pero…, solo le diré que la próxima vez puede que no pase yo por los pasillos, bueno tenga cuidado, hasta mañana Evans.

Lily se quedó un poco pensativa, sabia que se estaban metiendo con ella, bueno claro que lo sabia, vino justo en el peor momento, y gracias a que vino sigo entera, pensó Lily.


Y para finalizar, que mejor que el regalo de James a Lily… no, lo siento mi poder adquisitivo no llega a eso.. jejejej pero otro bueno es un resumen del próximo capitulo no? (Lo se el de James es mejor…) xDD

Pues en el próximo capitulo:

- Empiezan los tiempos oscuros, la fuerza de Voldemort crece.

- Lily empieza a temer a los Slytherin.

- pelea Slytherin- Gryffindor, uff las cosas cada vez están mas calientes!

- A Lily le gusta… ¿James?

Pues ya sabéis! Comed muchos turrones y que Papá Noel os traiga muchos regalos! Jajajaja :D (Espero poder felicitaros los reyes con otro capitulo!) ;) Solo me queda deciros que...

¡FELIZ NAVIDAD Y PROSPERO AÑO NUEVO!

Y muchos besitos para todos ;)